Bases Teóricas

1) Teoría del rentismo petrolero:

Esta teoría fue desarrollada por el economista venezolano Moisés Naím, quien

argumenta que Venezuela ha dependido históricamente del petróleo como fuente

principal de ingresos y de devolución de los recursos del Estado a la población, lo que ha

generado una cultura de rentismo que ha disminuido el desarrollo de otras áreas

económicas y sociales. Desde esta teoría, se podría plantear que la extorsión puede ser

vista como una manifestación de la escasez económica y la falta de oportunidades

alternativas en la población, lo que motiva a algunos individuos a buscar recurso de

manera ilegal.

2) Teoría del malandraje:

Esta teoría es parte de la cultura popular venezolana y ha sido estudiada por

sociólogos y antropólogos, entre ellos el académico Tomás Páez. El malandraje hace

referencia a un estilo de vida delictivo que busca obtener ganancias rápidas y fáciles

utilizando la violencia y la intimidación, y que está relacionado con la exclusión social y

el deseo de subvertir las estructuras de poder establecidas. Desde esta teoría, se podría

entender la extorsión como una forma de malandraje que busca obtener ganancias a

expensas de la víctima, utilizando la violencia y la amenaza.

3) Teoría del control social:

Según esta teoría por Travis Hirschi, el control social se refiere a los mecanismos

sociales que limitan las transgresiones de las normas y los valores culturales aceptados.

Hirshchi argumenta que las personas son menos propensas a cometer delitos cuando

tienen fuertes vínculos sociales, ya sea a través de las relaciones familiares, laborales,
religiosas o comunitarias. En el contexto del proyecto, el control social puede ser visto

como una estrategia de prevención del delito. Esto significa que, al fortalecer los vínculos

sociales y comunitarios de los adultos de la comunidad Ciudad Caribia, se podría reducir

la incidencia de delitos como la extorsión. La Policía Nacional Bolivariana podría

colaborar en este sentido, incentivando y promoviendo la participación activa de los

adultos de la comunidad en iniciativas de carácter social y comunitario.

Bases legales

1) Constitución de la República Bolivariana de Venezuela:

Artículo 326: La seguridad de la Nación se fundamenta en la corresponsabilidad

entre el Estado y la sociedad civil, para dar cumplimiento a las principios de

independencia, democracia, igualdad, paz, libertad, justicia, solidaridad, promoción y

conservación ambiental y afirmación de los derechos humanos , así como en la

satisfacción progresiva de las necesidades individuales y colectivas de los

venezolanos y venezolanas, sobre las bases de un desarrollo sustentable y productivo

de plena cobertura para la comunidad nacional. El principio de la corresponsabilidad

se ejerce sobre los ámbitos económico, social, político, cultural, geográfico,

ambiental y militar. “Que el Estado tiene como obligación fundamental garantizar la

seguridad ciudadana, entendida como la convivencia pacífica y el derecho de las

personas a vivir en paz.”

2) Ley de Policía y del servicio de policía:

Artículo 7: El servicio de policía es responsabilidad exclusiva del Estado, bajo la

rectoría del poder nacional. En ningún concepto se permitirá ni se delegará el

ejercicio de las funciones policiales a particulares. “Que la policía tiene como función

principal, la protección, defensa de las personas y bienes, la prevención e

investigación de los delitos y la conservación del orden público.”

3) Código Procesal Penal Venezolano:

Artículo 458: Cuando alguno de los delitos previstos en los artículos precedentes se

haya cometido por medio de amenazas a la vida, a mano armada o por varias

personas, una de las cuales hubiere estado manifiestamente armada, o bien por varias

personas ilegítimamente uniformada, usando habito religioso o de otra manera

disfrazadas, o si, en fin, se hubiere cometido por medio de un ataque a la libertad

individual la pena de prisión será por tiempo de diez años a diecisiete años; sin

perjuicio a la persona o personas acusadas, de la pena correspondiente o personas

acusadas, de la pena correspondiente al delito de porte ilícito de armas.

“Estableciendo que quien exija o pretenda obtener para sí o para un tercero, dinero o

cualquier otra ventaja o beneficio económico, a cambio de no realizar una acción que

pueda dañar los interese del afectado, será sancionado con pena de prisión.”