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J. Ciencias de la leche. 95:1527–1544 http://dx.doi.org/
10.3168/jds.2011-4410 © Asociación Estadounidense de
Ciencias Lácteas®, 2012.
Ingesta de alimentos, producción de leche y cambios en los tejidos de vacas lecheras
Holstein-Friesian y Jersey × Holstein-Friesian dentro de un sistema de pastoreo de
insumos medios y un sistema de confinamiento total de insumos altos
ER Vance,*† CP Ferris,*1CT Elliott,† SA McGettrick,‡ y DJ Kilpatrick§
* Instituto de Biociencias y Agroalimentación, Large Park, Hillsborough, Co. Down, BT26 6DR, Reino Unido
†Agri-Food and Land Use, School of Biological Sciences, Queen's University Belfast, Belfast, BT9 5AY, Reino Unido ‡Agri-
Food and Biosciences Institute, Veterinary Sciences Division, Stoney Road, Belfast, BT4 3SD, Reino Unido §Agri-Food and
Biosciences Institute, Newforge Lane, Belfast, BT9 5PX, Reino Unido
RESUMEN
Aunque ha aumentado el interés en el cruzamiento dentro
de los sistemas lecheros, el papel de las vacas cruzadas Jersey
dentro de los sistemas de insumos de alta concentración ha
recibido poca atención. Este experimento fue diseñado para
examinar el desempeño de las vacas Holstein-Friesian (HF) y
Jersey × Holstein-Friesian (J × HF) dentro de un sistema de
confinamiento total (CON) de alto aporte de concentrado y un
sistema de pastoreo de aporte de concentrado medio (GRZ). Se
utilizaron ochenta vacas lecheras paridas en primavera en un
experimento de diseño factorial 2 (genotipo de vaca) × 2
(sistema de producción de leche). El experimento comenzó
cuando las vacas parieron y abarcaron una lactancia completa.
Con GRZ, a las vacas se les ofrecieron dietas que contenían
ensilaje de pasto y concentrados [proporción de materia seca
(MS) 70:30] hasta la salida, pasto pastoreado más 1,0 kg de
concentrado/día durante un período de pastoreo de 199 días, y
ensilaje de pasto y concentrados (75 : 25 MS ratio) tras el
realojamiento y hasta el secado. Con CON, las vacas se
confinaron durante toda la lactancia y se les ofrecieron dietas
que contenían ensilaje de pasto y concentrados (proporción
MS; 40:60, 50:50, 40:40 y 75:25 durante los días 1 a 100, 101 a
200, 201 a 250 , y 251 hasta el secado, respectivamente). El
consumo de MS concentrada en lactancia completa fue de 791
y 2905 kg/vaca para los sistemas GRZ y CON, respectivamente.
Aunque las vacas HF tuvieron una producción de leche de
lactancia más alta que las vacas J × HF, estas últimas
produjeron leche con un mayor contenido de grasa y proteína,
por lo que la producción de leche corregida por sólidos (SCM)
no se vio afectada por el genotipo. La puntuación de células
somáticas fue mayor con las vacas J × HF. A lo largo de la
lactancia, las vacas HF pesaban en promedio 37 kg más que las
vacas J × HF, mientras que las vacas J × HF tenían una
puntuación de condición corporal más alta. Dentro de cada
sistema, la ingesta de alimentos no difirió entre genotipos,
Recibido el 31 de marzo de 2011.
Aceptado el 1 de noviembre de 2011.
1Autor para correspondencia: conrad.ferris@afbini.gov.uk
1527
GRZ. Se observó una interacción genotipo × ambiente significativa
para la producción de leche y se encontró una tendencia para una
interacción con SCM. Las vacas cruzadas en CON ganaron más
condición corporal que las vacas HF, y la tasa general de preñez no
se vio afectada por el genotipo o el sistema de manejo. En
resumen, los rendimientos de leche y SCM fueron mayores con
CON que con GRZ, mientras que el genotipo no tuvo efecto sobre
SCM. Sin embargo, las vacas HF exhibieron una mayor respuesta
de producción de leche y una tendencia hacia una mayor respuesta
de producción de SCM con niveles crecientes de concentrado en
comparación con las vacas cruzadas.
Palabras clave:mestizaje, interacción genotipo ×
ambiente, producción de leche
INTRODUCCIÓN
La Holstein-Friesian es la raza de vaca lechera dominante en
muchos países, un reflejo del alto potencial genético de la raza
para la producción de leche. Sin embargo, la selección para la
producción de leche dentro de la raza Holstein-Friesian ha llevado a
una disminución de los rasgos funcionales y esto ha provocado un
renovado interés en el cruzamiento. Aunque se han utilizado
muchas razas dentro de los programas de cruzamiento, existe un
interés particular en la raza Jersey debido a su capacidad para
mejorar la composición de la leche. De hecho, aunque muchos
estudios han informado rendimientos de leche más altos con vacas
Holstein-Friesian que con vacas cruzadas Jersey, las diferencias en
los rendimientos de sólidos lácteos tienden a ser mucho menores o
inexistentes, especialmente cuando estos 2 genotipos se comparan
dentro de sistemas de pastoreo con aportes de concentrados más
bajos (Auldist et al., 2012). al., 2007; Prendiville et al., 2009). La
capacidad de las vacas cruzadas Jersey más pequeñas para
competir con las vacas Holstein más grandes en términos de
producción de sólidos lácteos no parece estar impulsada por
diferencias en la movilización o deposición de tejido entre
genotipos, sino por la mayor capacidad de consumo por unidad de
peso corporal de las vacas cruzadas (Prendiville et al. al., 2009).
Además, existe evidencia clara de una mejor salud, fertilidad y
longevidad con vacas cruzadas Jersey en comparación con vacas
Holstein puras.
1528 VANCE Y AL.
(Harris et al., 2000; Auldist et al., 2007), mientras que existe
alguna evidencia de diferencias en el contenido de ácidos
grasos de la leche producida por estos 2 genotipos (Palladino
et al., 2010).
Sin embargo, tradicionalmente se ha percibido que
las vacas cruzadas se adaptan principalmente a los
sistemas de entrada de concentrados más bajos. Sin
embargo, en un estudio reciente, se compararon
vacas Holstein-Friesian y Jersey × Holstein-Friesian
dentro de 3 sistemas de producción de leche basados
en pastizales que implicaban aportes concentrados
de aproximadamente 0,5, 1,1 y 1,7 t/vaca por
lactancia (Vance, 2011). En toda la gama de insumos
de concentrados examinados dentro de ese
experimento, no se encontró evidencia de una
interacción genotipo × nutrición para ninguno de los
parámetros examinados, y ambos genotipos
exhibieron respuestas de producción de leche
similares a los niveles crecientes de concentrados
ofrecidos. Aunque los hallazgos de ese estudio
sugieren que las vacas cruzadas de Jersey pueden
tener un papel en los sistemas de mayor entrada, la
entrada de concentrado más alta examinada dentro
de este estudio todavía se consideraría "entrada
moderada" en muchos países donde se practican los
sistemas de confinamiento. Aunque Heins et al. (2006)
examinaron el desempeño de vacas Normande ×
Holstein, Scandinavian Red × Holstein y Montbeliarde
× Holstein dentro de sistemas de entrada de alta
concentración, los estudios que examinan el
desempeño de vacas cruzadas Jersey × Holstein
dentro de estos sistemas son limitados. En una
excepción notable, a las vacas Holstein y a las vacas
cruzadas Jersey × Holstein se les ofreció una TMR que
contenía aproximadamente 50 % de forraje en base a
MS desde el día 4 hasta el día 150 de lactancia (Heins
et al., 2008a). Las vacas Holstein produjeron un mayor
volumen de leche que las vacas cruzadas, pero ni el
DMI ni el rendimiento de grasa más proteína se
vieron afectados por el genotipo. Además,
Por lo tanto, el objetivo de este estudio fue comparar el rendimiento
de la producción de leche, el contenido de ácidos grasos de la leche, los
cambios en las reservas de tejido corporal y el rendimiento de la
fertilidad de Holstein-Friesian (AF) y Jersey × Holstein-Friesian (J × HF)
vacas dentro de un sistema de confinamiento total de alto aporte de
concentrado y un sistema de pastoreo de aporte de concentrado
medio.
MATERIALES Y MÉTODOS
Este estudio se realizó en el Instituto de Agroalimentación y
Biociencias (AFBI, Hillsborough, Irlanda del Norte) entre enero
de 2009 y febrero de 2010. Cuatro tratamientos
Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012
Los cambios se examinaron en un experimento de diseño factorial
continuo 2 (genotipo de vaca) × 2 (sistema de producción de leche).
El experimento comenzó cuando las vacas parieron y se llevó a
cabo durante una lactancia completa.
animales
El experimento involucró a 80 vacas lecheras paridas en
primavera, 40 vacas HF y 40 J × HF. Las vacas HF tuvieron un PTA
medio (PTA2010) para un rendimiento de grasa más proteína de
+13,9 kg y un índice de vida rentable medio (PLI2010) de
+ £47, con estas vacas dentro del 10% superior de las vacas
Holstein-Friesian en el Reino Unido para estos 2 parámetros.
Las vacas HF utilizadas en el experimento fueron engendradas
por 19 toros Holstein-Friesian. Las vacas J × HF fueron
descendientes de un programa de reproducción en el que
vacas Holstein-Friesian seleccionadas al azar del hato AFBI
Hillsborough se cruzaron con toros Jersey (n = 9) de Danish (n =
16 vacas) y Nueva Zelanda (n = 24 vacas), con los toros Jersey
teniendo un PTA ponderado2010
para un rendimiento de grasa más proteína de +21,0 kg y un PLI
ponderado2010de +£118. Las madres de vacas HF y J × HF en este
experimento tenían potenciales genéticos similares, con PTA
promedio2010para un rendimiento de grasa más proteína de +9.7 y
+ 6,8 kg, respectivamente, y PLI medio2010de +£24 y
+ £23, respectively. All genetic parameters presented
above were determined within the April 2011 proof run.
Within each genotype, 10 cows were primiparous and
the remaining 30 cows were multiparous, with the HF
and J × HF cows having a mean lactation numbers of 2.4
and 2.3, respectively.
Treatments
Within genotype, cows were allocated within 36 h of calving
to 1 of 2 milk production systems: a total confinement system (
CON) and a moderate input grazing system (GRZ). Dentro de
cada genotipo, las vacas se equilibraron en los 2 sistemas de
producción de leche de acuerdo con la fecha de parto, paridad,
BW y BCS antes del parto, padre, PTA para rendimiento de
grasa + proteína y PLI (vacas HF), y potencial genético de la
madre para PLI y grasa más rendimiento de proteína (vacas J ×
HF). Los detalles completos de cada uno de los 2 sistemas se
describen a continuación. Las vacas en los tratamientos CON
(HF y J × HF) y GRZ (HF y J × HF) tuvieron fechas medias de parto
del 6, 8, 2 y 9 de febrero, respectivamente.
Sistema de Confinamiento Total.Las vacas en este sistema
fueron confinadas en cubículos durante todo el experimento y se
les ofreció una dieta que consistía en ensilado de pasto y
concentrados. Los cubículos estaban equipados con alfombras de
goma que se limpiaban diariamente, se cubrían con aserrín tres
veces por semana y se trataban con cal semanalmente. Los pasillos
de concreto dentro de la casa se rasparon un mínimo de 6 veces al
día utilizando un sistema de raspado automático.
 RENDIMIENTO DE VACAS CRUZADAS HOLSTEIN Y JERSEY
La relación forraje:concentrado de la dieta (base MS) fue
la siguiente: 40:60 desde el parto hasta que los 2 grupos
de genotipo tuvieron una media de 100 DIM, 50:50 hasta
una media de 200 DIM, y 60:40 hasta una media de 200
DIM. de 250 DIM. Aunque planeamos que este último
nivel de alimento concentrado se mantuviera hasta el
final de la lactancia, la ganancia excesiva de BCS por
parte de las vacas J × HF al final de la lactancia (BCS
promedio de 2.9 en el día 240 de la lactancia) hizo
necesario aumentar la relación forraje:concentrado a 75
:25 a partir del d 250 de lactancia en adelante. Las vacas
permanecieron con la última dieta hasta que se secaron,
y las vacas HF y J × HF en CON completaron una media
de 325 y 303 DIM, respectivamente. Los ensilajes de
pasto ofrecidos se produjeron a partir de forraje de
crecimiento primario, rebrote primario y rebrote
secundario (fechas medias de cosecha del 21 de mayo,
10 de julio y 28 de septiembre deLolium perenne)
basado en césped. El forraje se cosechó con una
picadora de precisión autopropulsada y se ensiló en
silos. Los ensilajes producidos a partir de forrajes de
crecimiento primario, rebrote primario y rebrote
secundario se ofrecieron a razón de 0,40 (parto hasta el
3 de julio), 0,35 (4 de julio al 8 de noviembre) y 0,25 (9 de
noviembre al final del período poco lluvioso) de la total
de días de alimentación de vacas dentro del
experimento, respectivamente, representando estos los
rendimientos proporcionales para la primera, segunda y
tercera cosecha dentro de un sistema de ensilaje de
pasto de “3 cortes” (Mayne y Gordon, 1986). La
composición de ingredientes del concentrado ofrecido
(kg/t, base seca al aire) desde el parto hasta el secado
fue la siguiente: cebada, 150; harina de maíz, 150; pulpa
de remolacha azucarera, 150; pulpa de cítricos, 150;
harina de soja, 260; harina de colza, 80; Megalac (Volac
Ltd., Orwell, Reino Unido), 20; magnesita calcinada, 5;
Las vacas accedían a su alimento a través de un sistema de
alimentación de compuerta Calan (American Calan, Northwood,
NH), con cada compuerta Calan conectada a un sistema automático
de identificación de vacas, lo que les permitía acceder a las cajas de
alimentación montadas en básculas (Griffith Elder, Bury St.
Edmunds, Reino Unido). Este sistema permitió registrar las ingestas
individuales de alimentos de las vacas. Cada día, los alimentos no
consumidos se retiraron de las cajas de alimentación
aproximadamente a las 08:30 h y se reemplazaron con alimento
fresco (ofrecido ad libitum a una proporción de 1,1 veces la ingesta
del día anterior) entre las 09:30 y las 10:00 h. Entre el parto y los
250 DIM, los grupos de genotipo se encerraron por separado, y
cada grupo tuvo acceso a 7 puertas Calan. Posteriormente, fue
necesario combinar los 2 genotipos en un solo grupo; sin embargo,
cada genotipo continuó accediendo a los alimentos a través de
puertas Calan separadas.
Sistema de Pastoreo de Insumos Medios.Desde el
parto hasta el inicio del pastoreo, las vacas en sistema
1529
Los GRZ se alojaron en los mismos cubículos descritos para
CON y se les ofreció una dieta completa (a través del mismo
sistema de alimentación Calan gate descrito para CON) con una
relación forraje:concentrado (base MS) de 70:30. El ensilado de
pasto (crecimiento primario) y los concentrados ofrecidos
fueron como se describe para el período de lactancia temprano
con el sistema CON. A estas vacas también se les ofreció 0,5 kg
del mismo concentrado en la sala durante cada ordeño.
Las vacas comenzaron a pastar el 9 de marzo, y el 2 de abril
se produjo la participación a tiempo completo. Después del
comienzo del pastoreo, la duración del período de pastoreo
diario aumentó de aproximadamente 2 a 6 h/d (de ordeño a
ordeño) el 18 de marzo y a 9 h/d entre el 19 de marzo y el 1 de
abril. El 1 de abril, los concentrados de invierno ofrecidos en la
dieta completa fueron retirados y reemplazados con 4,0 kg/
vaca por día de un concentrado de pastoreo, con niveles de
alimentación concentrados reducidos gradualmente a 1,0 kg/
vaca por día para el 24 de abril, con esto dividido entre 2 tomas
iguales (ofrecidas durante los ordeños matutinos y
vespertinos). La composición de ingredientes del concentrado
de pastoreo ofrecido (kg/t, base seca al aire) fue la siguiente:
cebada, 190; maíz, 190; pulpa de remolacha azucarera, 310;
harina de soja, 200; harina de colza, 40; magnesita calcinada,
10; Molaferm, 30; y minerales y vitaminas, 30.
A lo largo de la temporada de pastoreo se adoptó un sistema de
pastoreo en potreros rotativos, con el área central de pastoreo
compuesta por 21 potreros de un día (0,21 ha cada uno) para cada
genotipo. Los potreros para cada genotipo se dispusieron uno al lado
del otro a lo largo del área de pastoreo, con potreros de pastoreo
adicionales introducidos en la rotación a medida que avanzaba la
temporada. Los potreros que no fueron pastoreados durante una
rotación (debido al exceso de pasto disponible, según lo determinado
por una herramienta de manejo de pastizales de “cuñas de pasto”)
fueron pastoreados por un grupo de vacas no experimentales o
cortados y embalados para ensilaje.
Desde el inicio de la participación hasta el 25 de marzo, las vacas
pastaron en potreros parciales, asignándose diariamente forraje fresco
a las vacas (según el número de vacas en el grupo y la masa de forraje),
para lograr una altura de pasto residual objetivo de 55 mm.
Posteriormente, a las vacas se les ofrecieron potreros completos
durante cada período de 24 horas durante el resto de la temporada de
pastoreo. Durante el período de pastoreo temprano (desde la
participación de tiempo completo hasta el 24 de abril), los potreros se
espolvorearon con magnesita calcinada (210 g/vaca por día)
diariamente para garantizar que las vacas tuvieran una ingesta
adecuada de magnesio. Las condiciones climáticas adversas durante un
período de 9 días durante la rotación 1, y durante un período de 48
horas en cada una de las rotaciones 2 y 3, requirieron que las vacas
fueran reubicadas y se les ofreciera ensilaje de pasto ad libitum. Se
realizaron siete rotaciones de pastoreo durante la temporada de
pastoreo, con una duración de 27, 21, 18, 18, 20, 24 y 30 d,
respectivamente. La carga media en la temporada de pastoreo para
ambos grupos de genotipos fue de 4,4 vacas/ha.
Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012
1530 VANCE Y AL.
A lo largo de la temporada de pastoreo, se midieron diariamente las
alturas de los pastos antes y después del pastoreo dentro del área de
pastoreo para cada genotipo (40 mediciones en una formación de "W")
utilizando un medidor de placa ascendente (Jenquip, Feilding, Nueva
Zelanda). Durante el transcurso de la temporada de pastoreo, las
alturas medias antes y después del pastoreo fueron 8,8 (SD 1,96) y 4,8
(SD 1,17) cm, respectivamente, para las vacas HF, y 8,6 (SD 1,92) y 4,8
(SD 1,26) cm, respectivamente. respectivamente, para las vacas J × HF.
Estas alturas de pasto antes del pastoreo representan masas de forraje
antes del pastoreo de 3100 y 3030 kg de MS/ha (medidas sobre el nivel
del suelo) para las vacas HF y J × HF, respectivamente (determinadas
usando la ecuación de masa de forraje que se describe más adelante).
Fertilizante N en forma de urea (proporcionalmente 0,46
N) a toda el área de pastoreo a razón de 25 kg de N/ha el 17 de
febrero. Posteriormente, se aplicó fertilizante en forma de nitrato
amónico cálcico (proporcionalmente 0,27 N) a los potreros a razón
de 45, 30, 30, 30, 25, 25 y 20 kg de N/ha durante cada uno de los
ciclos de pastoreo 1 a 7, respectivamente. En unas pocas ocasiones
durante la temporada de pastoreo, cuando las tasas de crecimiento
del pasto eran altas, no se aplicó fertilizante a los potreros
individuales con una alta cobertura de pasto residual. Durante toda
la temporada de pastoreo, la tasa total de aplicación de fertilizante
nitrogenado en los 21 potreros centrales de pastoreo fue de 240 kg
de nitrógeno por hectárea. Toda el área de pastoreo se recortó
(remató) a aproximadamente 50 mm a mitad de la temporada de
pastoreo.
Los niveles diarios de alimentación concentrada se mantuvieron
en 1,0 kg/vaca por día hasta el 17 de septiembre y luego, como
consecuencia de la escasez de pasto, se incrementaron a 2,0 kg/
vaca por día hasta el realojamiento. Las vacas continuaron
pastoreando a tiempo completo hasta el 18 de octubre (199 d),
después de lo cual pastaron de día y fueron alojadas de noche
hasta el 23 de octubre. El realojamiento a tiempo completo se
realizó el 23 de octubre. Después del realojamiento, a las vacas se
les ofreció una dieta completa con un forraje: proporción de
concentrado (base MS) de 75:25, como se describió anteriormente
para CON. En esta etapa, los 2 grupos de genotipo GRZ se
combinaron en un solo grupo, y cada genotipo tuvo acceso a
puertas de Calan separadas. Ambas vacas HF y J × HF en GRZ
completaron un promedio de 291 y 302 DIM, respectivamente.
Cría y Manejo del Período Seco
La cría comenzó el 1 de abril y finalizó en junio.
24, teniendo todas las vacas un período mínimo voluntario de espera
antes del servicio de 42 d. A lo largo de la temporada de servicio, las
vacas fueron inseminadas usando IA. El embarazo se confirmó
mediante escaneo rectal en el día 60 después de la IA. Las vacas con un
BCS de ≥2,5 se secaron a las 8 semanas antes del parto o cuando la
producción semanal promedio de leche cayó por debajo de 5,0 kg/d,
mientras que las vacas con un BCS de 2,25 o ≤2,0 se secaron a las 10 o
12 semanas antes del parto, respectivamente. Después de ser secadas,
las vacas fueron retiradas de sus
Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012
grupo de genotipo y alojados como un solo grupo en alojamiento
en cubículos, como se describió anteriormente. Las vacas dentro
de cada tratamiento que no estaban preñadas permanecieron en
su dieta de tratamiento durante el mismo número medio de días
que las vacas preñadas dentro de ese tratamiento, después de lo
cual fueron retiradas del experimento.
Mediciones
Las vacas fueron ordeñadas dos veces al día, entre las 06:00 y las 08:00
h, y entre las 1500 y las 1700 h, registrándose automáticamente la
producción de leche en cada ordeño. Las concentraciones de grasa,
proteína y lactosa de la leche se determinaron semanalmente
usando 2 muestras de leche consecutivas (am y pm) (Milkoscan,
modelo FT 120, Foss UK Ltd., Warrington, Reino Unido), y el SCC de
la leche se determinó mensualmente usando un Fossomatic 360
(Foss Electric, Hillerød, Dinamarca). Además, en 3 ocasiones cuando
las vacas en GRZ estaban pastando a tiempo completo (27 de abril,
27 de julio y 5 de octubre) se tomaron muestras de leche de todas
las vacas durante 2 ordeños consecutivos (am y pm), se amasaron
en proporción al rendimiento y, posteriormente, analizaron las
concentraciones de ácidos grasos en la leche según lo descrito por
Keady et al. (2000). Además, las concentraciones de progesterona
en la leche se determinaron dos veces por semana (martes y
viernes; muestras de leche por la mañana) entre el parto y el día 70
después del parto. Las muestras de leche se conservaron (Lactab
Mark III, Thompson and Cooper Ltd., Lydney, Reino Unido) y se
almacenaron a 4 °C hasta su análisis (dentro de las 4 semanas). Las
concentraciones de progesterona en leche se determinaron
utilizando un kit ELISA (Ridgeway Science Ltd., Lydney, Reino Unido)
basado en el método de Sauer et al. (1986). El comienzo de la
actividad lútea se definió como el intervalo desde el parto hasta la
primera de al menos 2 concentraciones de progesterona
consecutivas de ≥3 ng/mL.
El BW de la vaca se registró automáticamente después de cada
ordeño y se calculó un BW promedio para cada semana. La puntuación
de la condición corporal fue evaluada semanalmente por 2 operadores
entrenados en semanas alternas usando una escala de 5 puntos
(Edmonson et al., 1989), donde 1 = demacrado y 5 = extremadamente
gordo. Se tomaron muestras de sangre de la vena coccígea de cada
vaca entre las 06:00 y las 07:30 h, en las semanas 2, 4, 6, 10 (±3 d), 20,
30 y 40 (±7 d) posteriores al parto. El plasma sanguíneo se recuperó
mediante centrifugación y se almacenó a
− 20 °C hasta que se analicen las concentraciones de NEFA
(usando un kit Wako, Wako Chemicals GmbH, Neuss,
Alemania) y glucosa (usando un kit Olympus, Olympus Life
and Material Science Europa, Munich, Alemania) usando un
Chemistry Immuno Analyzer (Olympus AU640).
Además de las mediciones diarias de la altura del pasto antes y
después del pastoreo descritas anteriormente, en una ocasión
aproximadamente cada 10 a 12 días, se seleccionaron 10
ubicaciones en las áreas de pastoreo (que representan un rango de
alturas del pasto, desde el postpastoreo inmediato hasta el
prepastoreo inmediato) y medición de la altura del forraje
 RENDIMIENTO DE VACAS CRUZADAS HOLSTEIN Y JERSEY
seguro dentro de 0,36 m2cuadrante (60 cm × 60 cm) usando un
medidor de placa ascendente (4 “gotas” por cuadrante). La hierba
dentro de cada cuadrante se cortó posteriormente al nivel del
suelo usando esquiladoras manuales operadas por batería
(Gardina Accu 6; Kress and Kastner, Weiterstadt, Alemania), se
registró el peso de la hierba y se determinó el contenido de MS de
la hierba. Posteriormente se determinó el rendimiento de MS del
forraje dentro de cada cuadrante. Al final de la temporada de
pastoreo, se usaron la altura media del pasto (cm) y la masa de
forraje asociada (kg de MS/ha) dentro de cada cuadrante para
desarrollar una relación lineal que relaciona la altura del forraje
(cm) con la masa del forraje, de la siguiente manera:
Masa de forraje = (altura del forraje × 341,1) + 94,7.
Luego, esta ecuación se usó retrospectivamente para
determinar la masa de forraje antes y después del pastoreo
dentro de cada potrero diariamente (basado en las alturas
diarias antes y después del pastoreo), con el consumo de
forraje de cada grupo de genotipo calculado como la diferencia
entre estos 2 valores. Luego se calculó un consumo medio de
forraje para toda la temporada de pastoreo para cada grupo de
genotipo.
Análisis de alimentación
El ensilaje de pasto ofrecido se muestreó diariamente y se analizó
para la MS del horno, mientras que una muestra de ensilaje fresco se
analizó dos veces por semana para energía bruta, N, pH, amoníaco-N y
componentes volátiles. Las muestras secas se conservaron
semanalmente, se agruparon para cada período de 4 semanas y,
posteriormente, se analizaron las concentraciones de ADF, NDF y
cenizas. Durante la temporada de pastoreo, se tomaron muestras de
forraje desplumado dentro de cada área de pastoreo una vez por
semana, y las muestras se acumularon para cada período de 4
semanas. Las muestras se analizaron para MS de horno, ADF, NDF, N,
energía bruta, carbohidratos solubles en agua y concentraciones de
cenizas. Además, cada semana se analizó el contenido de ME en una
muestra fresca de hierba utilizando espectroscopía de reflectancia en el
infrarrojo cercano, tal como lo describen Park et al. (1998) para ensilado
de pasto, pero usando una ecuación de calibración desarrollada para
pasto fresco. Se tomaron muestras de cada lote de 1 t de concentrados
producidos durante el estudio, con muestras a granel para cada
período de 4 semanas. Las muestras a granel se analizaron para MS de
horno, N, ADF, NDF, GE y ceniza. Los alimentos ofrecidos se analizaron
según lo descrito por Ferris et al. (1999), excepto por el contenido de GE
del ensilaje, que se determinó en una muestra fresca, como lo describe
Porter (1992).
Análisis estadístico
Se excluyeron del análisis los datos de 3 vacas HF
(una de CON y 2 de GRZ) (2 debido a
1531
una mala salud y otra por mastitis repetida), y se excluyeron los datos de vacas 2 J × HF debido a un problema de amamantamiento
cruzado. Los datos se analizaron utilizando GenStat Versión 11.1 (Payne et al., 2008). El experimento se analizó como un experimento
de diseño factorial 2 (genotipos de vaca) × 2 (sistemas de producción de leche), con vacas excluidas reemplazadas por parcelas
faltantes. Los datos que describen la producción de leche, el peso corporal y la CC y el rendimiento reproductivo (datos continuos) se
analizaron mediante ANOVA, mientras que los datos binomiales se analizaron mediante un análisis de regresión logística. Los datos
que describen la producción de leche de lactancia completa, la composición de la leche, la producción de sólidos de la leche y SCM se
ajustaron utilizando DIM como covariable, lo que llevó todos los datos a una base común de duración de la lactancia, a saber, 305 d.
De manera similar, DIM se utilizó como covariable al analizar los datos de BW medio y BCS medio. El efecto del genotipo sobre el
consumo de alimentos se analizó por separado para las vacas manejadas en los sistemas CON y GRZ usando ANOVA. El efecto del
genotipo y el sistema de producción de leche sobre el contenido de ácidos grasos de la leche se analizó mediante análisis REML de
medidas repetidas según el diseño factorial 2 × 2. Además, los datos semanales de BW y BCS y las concentraciones de metabolitos en
sangre en cada período de muestreo se analizaron mediante análisis REML de medidas repetidas con el modelo que incluye los
efectos fijos de genotipo, sistema y tiempo. El efecto del genotipo de la vaca y el sistema de manejo sobre la forma de las curvas de
lactancia para producción de leche y producción de grasa más proteína se determinó ajustando una curva modelo exponencial
(Wilmink, 1987): El efecto del genotipo y el sistema de producción de leche sobre el contenido de ácidos grasos de la leche se analizó
mediante análisis REML de medidas repetidas según el diseño factorial 2 × 2. Además, los datos semanales de BW y BCS y las
concentraciones de metabolitos en sangre en cada período de muestreo se analizaron mediante análisis REML de medidas repetidas
con el modelo que incluye los efectos fijos de genotipo, sistema y tiempo. El efecto del genotipo de la vaca y el sistema de manejo
sobre la forma de las curvas de lactancia para producción de leche y producción de grasa más proteína se determinó ajustando una
curva modelo exponencial (Wilmink, 1987): El efecto del genotipo y el sistema de producción de leche sobre el contenido de ácidos
grasos de la leche se analizó mediante análisis REML de medidas repetidas según el diseño factorial 2 × 2. Además, los datos
semanales de BW y BCS y las concentraciones de metabolitos en sangre en cada período de muestreo se analizaron mediante análisis
REML de medidas repetidas con el modelo que incluye los efectos fijos de genotipo, sistema y tiempo. El efecto del genotipo de la vaca
y el sistema de manejo sobre la forma de las curvas de lactancia para producción de leche y producción de grasa más proteína se
determinó ajustando una curva modelo exponencial (Wilmink, 1987): y las concentraciones de metabolitos en sangre en cada período
de muestreo se analizaron mediante análisis REML de medidas repetidas con el modelo que incluye los efectos fijos de genotipo,
sistema y tiempo. El efecto del genotipo de la vaca y el sistema de manejo sobre la forma de las curvas de lactancia para producción
de leche y producción de grasa más proteína se determinó ajustando una curva modelo exponencial (Wilmink, 1987): y las
concentraciones de metabolitos en sangre en cada período de muestreo se analizaron mediante análisis REML de medidas repetidas
con el modelo que incluye los efectos fijos de genotipo, sistema y tiempo. El efecto del genotipo de la vaca y el sistema de manejo sobre la forma de las cu
Yt =a+b× e−0,05 × t+C× t.
Dentro de este modeloa,b, yClos parámetros se relacionan con
la intersección, la inclinación y la declinación de la curva,
respectivamente, y Yt se relaciona con la producción de leche en el
día t. El efecto del tratamiento sobre cada uno de los coeficientes (a
, b, yC) se examinó mediante ANOVA de acuerdo con un diseño
factorial 2 × 2 del experimento. Se obtuvo el rendimiento máximo y
los días hasta el rendimiento máximo para cada vaca individual y se
probó la significancia como se describió anteriormente.
RESULTADOS
Los ensilajes de pasto ofrecidos durante este experimento
fueron de composición variable, con concentraciones de MS y PB
que oscilaron entre 229 y 382 g/kg y entre 123 y 151 g/kg de MS,
respectivamente (Cuadro 1). Sin embargo, todos los ensilajes se
conservaron bien, como lo indican sus bajas concentraciones de N-
amoníaco y de lactato. Los concentrados ofrecidos durante los
períodos de confinamiento y pastoreo tuvieron concentraciones
medias de PB de 204 y 180 g/kg de MS, respectivamente. El forraje
pastoreado por cada uno de los 2 genotipos
Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012
1532 VANCE Y AL.

Dakota del Sur

fue similar para cada uno de los parámetros de composición

= ofrecido del 1 de enero al 3 de julio (producido a partir de forraje de crecimiento primario); 2 = ofrecido del 4 de julio al 8 de noviembre (producido a partir de forraje de rebrote primario); 3 = ofrecido desde el 9 de noviembre
0.50
20,9

32.2
24.6
10.3
Tabla 1.Composición química del ensilaje de pasto (g/kg de MS corregida por volátiles, a menos que se indique lo contrario), forraje y concentrados (g/kg de MS, a menos que se indique lo contrario) ofrecidos
presentados en la Tabla 1.

17.6
GRAMO
La ingesta de alimentos

180

220
109
Concentrarse2

89
El consumo de materia seca no difirió significativamente

Dakota del Sur

entre genotipos durante ninguna de las fases clave de

0.26
17.5

23.1
16.7
9.3
manejo con CON (Cuadro 2). De manera similar, con GRZ, el
genotipo no tuvo efecto sobre el DMI ni durante el período

17.9
entre el parto y la participación ni durante el período entre

204

228
121
84
C
el alojamiento a tiempo completo y el final de la lactancia. El
CMS total durante la lactancia fue de 5.813 y 5.559 kg para
las vacas HF y J × HF, respectivamente (CON), y de 4.668 y

Dakota del Sur

0.31
0.37
58.4
4.750 kg para las vacas HF y J × HF, respectivamente (GRZ).

19.4

27.6
19.2
11.9
37.3

11.7
18.6
J × HF3
Producción de leche

195

186

466
218

140
90
Herbaje
Aunque la producción de leche en lactancia completa fue más

Dakota del Sur

alta con las vacas HF (PAGS<0.01), las vacas J × HF produjeron leche

0.37
0.32
56,9

20.1

32.6
15.4
13.4
42.5
con mayores concentraciones de grasa y proteína (PAGS<0,001;
Tabla 3). El efecto general fue que el genotipo no tuvo un efecto

11.6
18.5
significativo en SCM, rendimiento de grasa, rendimiento de
AF3
189

181

451
231

148
86
proteína o rendimiento de grasa más proteína. Aunque el genotipo
no tuvo efecto sobre la proporción de vacas con uno o más casos

= concentrado ofrecido durante los períodos de confinamiento; G = concentrado ofrecido durante el período de pastoreo.
de mastitis, las vacas J × HF tuvieron un SCS más alto que las vacas
Dakota del Sur

0.54
0.09

6.25

4.41
11.6
11.4
25,0
16.8

37.3
HF. El sistema de producción no tuvo efecto sobre la concentración

98.4
20.3
14.1
de grasa o proteína de la leche, mientras que el rendimiento de
leche, SCM y el rendimiento de grasa + proteína fueron mayores

10.8
20.0

18.4
3.6

con CON (PAGS < 0,001). Se observó una interacción genotipo ×

229
243
123

135

471
300
84

87
3

sistema significativa para la producción de leche (PAGS<0.05), y se

Dakota del Sur

observó una tendencia a una interacción significativa para SCM (

0.74
0.20

9.09

1.30
41.3
40.6
23.3
23.4

44.0

45,5
27,0
10.3
ensilaje de hierba1

PAGS = 0,069).
Las vacas Holstein-Friesian produjeron leche con
concentraciones más altas de ácidos grasos C14:1, C16:1 y

HF = Holstein-Friesian; J × HF = cruce Jersey × Holstein-Friesian.

11.2
13.6

18.6
3.8

hasta el final del experimento (producido a partir de forraje de rebrote secundario).

236
245
151

476
277
63

96

90
2

C18:1 (PAGS<0.05,PAGS<0.001, yPAGS<0,05, respectivamente) y

con un ácido linoleico conjugado superior (ALC) contenido (
Dakota del Sur

0.84
0.29

2.60

1.51

PAGS<0.01) que las vacas J × HF, mientras que las J × HF

47.3
48.5
23.2
17.7

35.3

24.0
18.6
4.0

produjeron leche con una mayor concentración de C18:0 (PAGS utilizando espectroscopía de reflectancia en el infrarrojo cercano.

<0,001; Tabla 3). Las concentraciones de ácidos grasos de

11.5
19.5
4.2

7.9

cadena corta (C4-C14) y C16:0 no se vieron afectadas por el

382
400
150

484
283
53

82

88
1

genotipo. Las vacas en CON produjeron leche con

concentraciones más altas de C4-C14 (PAGS<0,05), C16:0, C18:2
(PAGS < 0,001) y C20:0 (PAGS<0,01) ácidos grasos y
concentraciones más bajas de C18:0, C18:1 y C18:3 (PAGS<
0,001) ácidos grasos. Las vacas en el sistema GRZ produjeron
Amoníaco-N (g/kg de N total)

Carbohidratos hidrosolubles
MS corregida por volátiles (g/kg)

Energía bruta (MJ/kg de MS)

leche con un mayor contenido de CLA que las del sistema CON (
PAGS < 0,001).
durante el experimento

alimentador automático de documentos

EM4(MJ/kg de MS)
MS horno (g/kg)

Perfiles de lactancia

Parámetros de la curva de Wilmink (a,b, yC) que describen los

Acetato
lactato

4Predicho

perfiles de lactancia para la producción diaria de leche y la

NDF
Artículo

Ceniza
pH

producción diaria de grasa más proteína para las vacas HF y J × HF

CP

2C
11

Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012

 Tabla 2.Efecto del genotipo de la vaca lechera1y sistema de gestión2sobre el consumo de alimento (kg de MS/vaca por día, salvo que se indique lo contrario) a lo largo de la lactancia

ESTAFA GRZ

Artículo AF J × HF AF J × HF SEM PAGS-valor

Parto a d 100
ensilaje de hierba 7.8 7.5 0.27 NS
Concentrarse 11.7 11.3 0.37 NS

RENDIMIENTO DE VACAS CRUZADAS HOLSTEIN Y JERSEY

Total 19.0 18.8 0,66 NS
Día 101 a 200
ensilaje de hierba 9.6 9.2 0.27 NS
Concentrarse 11.4 11.0 0.30 NS
Total 20.5 20.1 0.59 NS
Día 201 al final de la lactancia
Ensilado de hierba 10.1 10.8 0,66 NS
Concentrarse 5.8 5.9 0,68 NS
Total 16.8 16.3 1.14 NS
Parto al inicio de la participación (31 d)
ensilaje de hierba 10.5 10.4 0.41 NS
Concentrarse 4.3 4.2 0.18 NS
Total 15.7 15.5 0.58 NS
Inicio de participación en pastoreo a tiempo completo (24 d)
ensilaje de hierba 6.3 6.0 0.31 NS
Césped3 7.4 7.5
Concentrarse 5.2 5.0
Total 18.9 18.4
Pastoreo a tiempo completo (199 d)
Césped3 14.8 15.1
Concentrarse 1.3 1.3
Total 16.1 16.4
Alojamiento de tiempo completo hasta el final de la lactancia (38 d)
ensilaje de hierba 11.9 10.9 0,60 NS
Concentrarse 3.6 3.4 0.15 NS
Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012

Total 16.5 15.1 0.73 NS

CMS total durante la lactancia (corregido a 305 d para todos los tratamientos)
ensilaje de hierba 2,852 2,709 997 1,069
Césped3 0 0 2,856 2,914
Concentrarse 2,961 2,850 815 767
Total 5,813 5,559 4,668 4,750

1HF = Holstein-Friesian; J × HF = cruce Jersey × Holstein-Friesian.

2CON = encierro; GRZ = pastoreo de insumos medios.
3Derivado de alturas de pasto antes y después del pastoreo.

1533
 1534
Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012

Tabla 3.Efecto del genotipo de la vaca lechera1y sistema de gestión2sobre el desempeño de la producción de leche en lactancia completa (rendimiento de leche, composición de la leche, rendimiento de sólidos de la leche y datos
de SCM ajustados a DIM común para todos los tratamientos, a saber, 305 d), SCC de leche, incidencia de mastitis y contenido de ácidos grasos de la leche (g/kg de total). ácidos grasos identificados; media de los 3 períodos de
medición)

ESTAFA GRZ Significado

Genotipo Sistema
Artículo AF J × HF AF J × HF SEM (GRAMO) (S) G×S
Producción de leche (kg/lactancia) 9,053 7,438 6,274 5,964 289.6 ** *** *
Composición de la leche (g/kg)
gordo 43.4 48.3 43.5 46,8 0.82 *** NS NS
Proteína 34,0 36.8 33.6 36,0 0.57 *** NS NS
Lactosa 46,0 46.1 44.8 45.4 0.26 NS *** NS
Rendimiento de sólidos lácteos (kg/lactancia)
gordo 390 359 273 279 13.2 NS *** NS
Proteína 307 273 210 214 9.66 NS *** NS
Lactosa 416 343 281 271 12.8 ** *** *
Grasa más proteína 697 631 483 493 22.3 NS *** NS

VANCE Y AL.
rendimiento SCM3(kg/ 9,277 8,235 6,393 6,436 288.7 NS *** NS
lactancia) RCS (×1000/mL) 217 289 79 183
SCS (registro10) 2.00 2.24 1.86 2.10 0.118 ** NS NS
Proporción de vacas con uno o más casos de mastitis Ácidos 0.32 0,60 0.28 0.22 0.054 NS NS NS
grasos de la leche
C4 a C14 300.1 304.0 281.2 284.9 1.05 NS * NS
C14:1 16.9 14.3 14.9 13.9 1.10 * NS NS
C15:0 12.6 12.4 12.9 12.0 0.04 NS NS NS
C15:1 2.7 2.7 3.2 2.8 0.01 * *** **
C16:0 361.1 351.0 270.1 286.2 1.04 NS *** NS
C16:1 23.0 17.8 20.7 18.4 0.13 *** NS NS
C17:0 5.5 5.8 5.6 5.4 0.02 NS NS NS
C18:0 71.3 86.3 90.2 97.8 0.39 *** *** NS
C18:1 178.2 173.2 259.0 242.1 0.71 * *** NS
C18:2 18.3 18.5 12.8 11.5 0.07 NS *** NS
C18:3 6.4 6.6 8.6 8.8 0.04 NS *** NS
C20:0 0.07 0.11 0.04 0.01 0.027 NS ** NS
Ácido linoleico conjugado 6.1 5.4 19.0 15.4 0.11 ** *** NS
1 HF = Holstein-Friesian; J × HF = cruce Jersey × Holstein-Friesian.
2CON = encierro; GRZ = pastoreo de insumos medios.
3Producción de SCM (kg) = 0,0123 grasa + 0,00656 SNF – 0,0752 × producción de leche (donde la grasa y la SNF se expresan en g/kg y la producción de leche se expresa en kg; Tyrrell y Reid, 1965).
*PAGS<0,05; **PAGS<0,01; ***PAGS<0.001.
 RENDIMIENTO DE VACAS CRUZADAS HOLSTEIN Y JERSEY 1535

en los sistemas CON y GRZ se presentan en la Tabla 4, con las curvas

Tabla 4.Efecto del genotipo de la vaca lechera1y sistema de gestión2en parámetros ajustados (a,b, yC) de las curvas de Wilmink utilizadas para describir las curvas de lactancia para la producción de leche y la producción de grasa más proteína, y las
reales trazadas en las Figuras 1a y 1b, respectivamente. En todos los

G×S
NS
NS
NS

NS
NS
NS

NS

NS
*

*
genotipos y sistemas, las curvas de rendimiento de leche y de
rendimiento de grasa más proteína tuvieron una mediana de R2
valores de 0,90 y 0,82, respectivamente. El genotipo tuvo un efecto

Sistema
significativo en laa(PAGS<0.001) yC(PAGS< 0.01) parámetros para la

***
***
***

***
***
***

***
***
***
***
(S)
Significado
producción diaria de leche y lab(PAGS< 0.05) para el rendimiento diario
de grasa más proteína, mientras que el sistema tuvo un efecto
significativo en cada uno de losa,b, yC parámetros tanto para la
producción diaria de leche como para la producción diaria de grasa más

Genotipo
proteína (PAGS<0,001). Los días hasta el pico de producción de leche no

(GRAMO)

**

**
***
NS

NS

NS

NS

NS
*

*
difirieron entre los genotipos, mientras que los días hasta el pico de
producción de grasa más proteína se retrasó con las vacas cruzadas (
PAGS<0,01). El pico de producción de leche fue más alto con las vacas
HF (PAGS<0,01), mientras que el rendimiento máximo de grasa más

0.0005
proteína no se vio afectado por el genotipo. La producción máxima de

SEM

0.006

0.128
0.200

0.122
1.61
1.81

2.57
1.39
3.40
leche y la producción máxima de grasa más proteína ocurrieron antes
con GRZ que con CON, mientras que las vacas en CON tuvieron una
mayor producción máxima de leche y una mayor producción de grasa

− 0,006
2.48
0.11

2.31
− 0,08
32.5

27.6
28,9
18.9
J × HF
más proteína que aquellas en GRZ (PAGS<0,001). Se encontró una

− 5.1
interacción genotipo × sistema significativa para el rendimiento

GRZ
máximo de leche y el rendimiento máximo de grasa más proteína (

− 0,007
PAGS<0,05), con vacas HF con un rendimiento máximo de 7,6 (leche) y

2.49
0.49

2.12
− 0,10
35.6

29.1
30.1
17.8
− 6,5
AF
0,45 (grasa más proteína) kg más alto que el de las vacas J × HF en CON.
En contraste con GRZ, el pico de producción de leche fue 1,2 kg más
alto con las vacas HF y el pico de grasa más proteína 0,19 kg más alto
con las vacas cruzadas.

− 0,008
3.38

2.86
− 0,11

− 1,58
42.0

46.1
35.1
46.4
J × HF

− 22,3
Cambios en los tejidos, metabolitos
sanguíneos y desempeño reproductivo
ESTAFA

− 0,009
3.76

3.31
A lo largo de la lactancia, las vacas HF pesaban en promedio 37 kg
− 0,12

− 1,05
50.1

41.1
42.7
32.6
− 21,1
AF

más que las vacas J × HF (PAGS<0.05), mientras que el último tuvo un

BCS promedio más alto (PAGS<0,05; Tabla 5). Las vacas HF

HF = Holstein-Friesian; J × HF = cruce Jersey × Holstein-Friesian.

experimentaron una mayor pérdida de peso corporal hasta el nadir que
las vacas cruzadas (PAGS<0,01), mientras que los días hasta el nadir BW
Parámetro

no se vieron afectados por el genotipo. Las vacas en GRZ tuvieron una

estimaciones del rendimiento máximo y los días hasta el rendimiento máximo

mayor pérdida de BW hasta el nadir y tardaron más en alcanzar el nadir

C

C
b

b
a

BW que las vacas en CON. = encierro; GRZ = pastoreo de insumos medios.

Los efectos del genotipo y el sistema de manejo sobre el peso
corporal y la CC de la vaca durante las primeras 40 semanas de
lactancia se presentan en las Figuras 2a y 2b, respectivamente. Con
base en el análisis de medidas repetidas, el BW difirió con el
*PAGS<0,05; **PAGS<0,01; ***PAGS<0.001.

genotipo, el sistema y el tiempo (PAGS<0.001), y BCS también difirió

Días hasta el rendimiento máximo de grasa más proteína

con el genotipo (PAGS<0.01), sistema y tiempo (PAGS < 0,001).

Rendimiento diario de grasa más proteína (kg)

Rendimiento máximo de grasa más proteína (kg/d)

Aunque no se observaron interacciones significativas genotipo ×

sistema o genotipo × tiempo para BW, sí observamos un genotipo
× sistema significativo (PAGS<0.05) y genotipo × tiempo (PAGS<
Producción diaria de leche (kg)

0.001) interacción para BCS.

Días hasta el rendimiento máximo

Las concentraciones plasmáticas de NEFA y glucosa (Figuras 3a y 3b,

Rendimiento máximo (kg/d)

respectivamente) cambiaron con el tiempo posterior al parto (P <

0.001). Aunque el genotipo no tuvo un efecto significativo en las
concentraciones plasmáticas de NEFA o glucosa, las vacas en CON
2CON
Artículo

tuvieron una concentración plasmática de glucosa más alta (P

1

Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012

1536 VANCE Y AL.

Figura 1.Efecto del genotipo de la vaca lechera y el sistema de manejo en el perfil de lactancia para (a) producción de leche y (b) producción de grasa más proteína,
según lo predicho usando la curva de Wilmink. Línea sólida gruesa = Holstein-Friesian (HF) en confinamiento (CON); línea sólida clara = HF en pastoreo (GRZ); línea
punteada gruesa = cruce Jersey × HF (J × HF) en CON; línea discontinua clara = J × HF en GRZ.

< 0,001) que las vacas en GRZ (3,1 y 3,0 mmol/L,
respectivamente) observándose lo contrario para la
concentración plasmática de NEFA (0,21 y 0,26 mEq/L,
respectivamente;PAGS< 0,01). No se observaron interacciones
significativas genotipo × sistema o genotipo × tiempo para
ninguno de los metabolitos sanguíneos examinados.
El genotipo no tuvo efecto sobre la proporción de vacas que
mostraban actividad luteínica antes de los 42 días ni sobre el
val al comienzo de la actividad lútea para estas vacas (Tabla 5).
Aunque los días al primer celo observado (HF, 37.5 y J × HF,
30.0) fue significativamente menor con las vacas cruzadas (
PAGS<0.05), el genotipo no tuvo efecto sobre ninguno de los
otros parámetros de rendimiento de fertilidad examinados. El
sistema de producción de leche no afectó ninguno de los
parámetros de fertilidad examinados en el estudio, y no hubo
una interacción significativa entre el genotipo y el sistema.

Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012

 RENDIMIENTO DE VACAS CRUZADAS HOLSTEIN Y JERSEY 1537

Se observaron variaciones para cualquiera de los parámetros de fertilidad

examinados.

G×S

NS
NS

NS
NS
NS

NS
NS
NS
NS

NS
DISCUSIÓN

Ingestas de alimentos
Significado

Sistema

NS
NS
***

NS
***

NS
NS
***
***

NS
(S)

Este estudio logró establecer 2 regímenes nutricionales muy

diferentes. Por ejemplo, con CON, el ensilaje de pasto y los
concentrados constituyeron 49 y 51 % de la MS total de la dieta
durante el período de lactancia, respectivamente, mientras que
Genotipo
(GRAMO)

con GRZ, la dieta de lactancia fue predominantemente pasto de

**

NS
***

NS
NS
NS

NS
*

*
*

pastoreo (61 %), y el ensilaje de pasto y los concentrados

comprendieron 22 y 17% de la MS total de la dieta,
respectivamente. Sin embargo, el diseño del estudio (en
términos de diferentes estrategias nutricionales adoptadas
0.675
0.765
0.086
1.78
3.61
0.05
SEM

18.1
14.5

20.2
7.2

dentro de cada CON y GRZ) impide una comparación de las

ingestas de acuerdo con el diseño factorial 2 × 2 del
experimento. Además, con el sistema GRZ, la ingesta de pasto
se estimó en base a un grupo y, como tal, no fue posible un
0.70
0.75
0.82
24,8
30,9

análisis estadístico de los datos de ingesta de pasto o los datos

2.4
J × HF

528
431

135
87

de ingesta total que incluyeron un componente de ingesta de

pasto.
Tabla 5.Efecto del genotipo de la vaca lechera1y sistema de gestión2sobre las reservas de tejido corporal y el rendimiento de la fertilidad

GRZ

Los resultados del presente estudio demostraron que las vacas

0,67
0.72
0.84

cruzadas J × HF manejadas con dietas de confinamiento que

24.1
34.2
2.3
AF

591
498

157
96

contenían una alta proporción de concentrado pudieron consumir

cantidades similares de MS que las vacas HF. De manera similar, los
consumos de estos 2 genotipos de vacas no difirieron cuando se
les ofrecieron dietas de confinamiento que contenían una menor
proporción de concentrado (sistema GRZ) durante los períodos
0.75
0.85
0.77
27.4
29,0
2.7
J × HF

previos a la salida y posteriores al alojamiento. Aunque

578
482
30
69

relativamente pocos estudios han comparado el consumo de vacas

ESTAFA

Holstein y Jersey × Holstein en dietas de confinamiento, Heins et al.

(2008a) encontraron que las ingestas no diferían entre estos 2
0.58
0.74
0,94
26.5
40.8
2.5

genotipos durante las primeras 21 semanas de lactancia, mientras

HF = Holstein-Friesian; J × HF = cruce Jersey × Holstein-Friesian.
AF

590
536
55
91

que Xue et al. (2011) registraron ingestas más altas con vacas
Jersey × Holstein en comparación con vacas Holstein puras en un
estudio a corto plazo con vacas primíparas.
Aunque los consumos de los 2 genotipos durante el período
Proporción de vacas que muestran actividad lútea antes del día 42

= encierro; GRZ = pastoreo de insumos medios.

Concepción al primer más segundo servicio (proporción) Tasa de

de pastoreo no pueden compararse estadísticamente, fueron

numéricamente similares (16.1 y 16.3 kg de MS/d para las vacas
De vacas que muestran actividad lútea antes del día 42.

HF y J × HF, respectivamente), de acuerdo con las

observaciones durante los períodos de confinamiento. Además,
Intervalo hasta el comienzo de la actividad lútea3

embarazo después de 12 semanas (proporción)

*PAGS<0,05; **PAGS<0,01; ***PAGS<0.001.

las ingestas de forraje dentro del presente estudio fueron

similares a las reportadas recientemente por Prendiville et al.
(2009) para vacas Holstein-Friesian y Jersey × Holstein-Friesian,
Días hasta el primer celo observado

concretamente 16,9 y 16,2 kg de MS/vaca por día,

respectivamente. En este último estudio, las vacas Jersey ×
Pérdida de peso corporal al nadir (kg)

Días al nadir de peso corporal Media

Holstein-Friesian tuvieron un mayor consumo/100 kg de PC

Desempeño de fertilidad

que las vacas Holstein (3.63 y 3.39 kg de MS, respectivamente),

Peso medio (kg)
peso corporal nadir (kg)

con González-Verdugo et al. (2005) observando una tendencia

Tejido corporal

similar. Estas ingestas más altas por unidad de PC pueden

atribuirse a varios factores, incluidas las diferencias en el
2CON
Artículo

comportamiento de pastoreo entre genotipos.

BCS

Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012

1538 VANCE Y AL.

= Holstein-
Figura 2.Efecto del genotipo y sistema de manejo de vacas lecheras sobre (a) BW y (b) BCS durante las primeras 40 semanas de lactancia.
frisón (HF) en confinamiento (CON); □ = HF en pastoreo (GRZ); = cruce Jersey × HF (J × HF) en CON; ◊ = J × HF en GRZ.

Esto fue destacado por Prendiville et al. (2010a) en una
comparación de vacas cruzadas Holstein, Jersey y Jersey ×
Holstein, en la que se observó que las vacas cruzadas tenían
una mayor tasa de mordidas, un mayor consumo de pasto por
minuto y una reducción asociada en la duración del turno de
pastoreo, en comparación con el raza parental significa, con
estos beneficios atribuidos en parte al vigor híbrido. En un
estudio similar, Vance et al. (2010) informaron que el consumo
de forraje de vacas Jersey × Holstein-Friesian
fueron similares a las de las vacas Holstein-Friesian, a pesar de que
estas últimas pesaban 75 kg en promedio. Sin embargo, en este
estudio, las vacas mestizas más pequeñas tenían un número
similar de bocados por minuto y tendían a tener un consumo por
bocado más bajo que las vacas Holstein, mientras pastaban
durante más tiempo cada día y tenían un mayor número de
bocados de pastoreo por día. Esto nuevamente resalta la capacidad
de las vacas cruzadas más pequeñas para cumplir con sus mayores
requerimientos de nutrientes.

Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012

 RENDIMIENTO DE VACAS CRUZADAS HOLSTEIN Y JERSEY 1539

Figura 3.Efecto del genotipo de la vaca lechera y el sistema de manejo sobre las concentraciones plasmáticas de (a) NEFA y (b)
= Holstein-Friesian
glucosa. (HF) en confinamiento (CON); □ = HF en pastoreo (GRZ); = cruce Jersey × HF (J × HF) en CON; ◊ = J × HF en GRZ.

Aunque no se analizó estadísticamente en el estudio actual,
el DMI diario total durante la lactancia fue aproximadamente
un 21 % más alto con CON que con GRZ. En dos comparaciones
similares, el consumo de vacas manejadas con dietas de
confinamiento fue un 23 % (Kolver y Muller, 1998) y un 24 %
(Bargo et al., 2002) mayor que el de las vacas manejadas con
dietas de pastoreo. Estos resultados indican claramente el po-
potencial para lograr un DMI total más alto con dietas de confinamiento bien
administradas que contengan niveles más altos de concentrado.
Producción y Composición de la Leche
Las vacas de cada genotipo en cada uno de los sistemas CON y GRZ
tuvieron un DIM medio diferente, principalmente una consecuencia.

Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012

1540 VANCE Y AL.
secuencia de diferencias en el intervalo entre partos. El uso de DIM
de lactancia completa como una covariable dentro del análisis
estadístico permite que los datos de producción de leche se
expresen sobre una base común de duración de la lactancia, a
saber, 305 d (el número medio de días para todas las vacas en el
estudio). De acuerdo con los hallazgos de estudios previos
(Prendiville et al., 2009; Vance, 2011), las vacas J × HF produjeron
leche con un mayor contenido de grasa y proteína que las vacas
HF, un reflejo de la mayor composición de la leche normalmente
asociada con las vacas Jersey. raza (Rastani et al., 2001; White et al.,
2001; Aikman et al., 2008). En todos los sistemas, la producción de
leche de lactancia más alta de las vacas HF se reflejó en un
rendimiento máximo más alto y una tasa de disminución posterior
más alta en la leche diaria, lo que refleja un perfil de lactancia
menos persistente.
El rendimiento similar de grasa más proteína de las vacas HF y J × HF
en el sistema GRZ está de acuerdo con los hallazgos de muchos
estudios previos que involucran regímenes nutricionales similares
(Auldist et al., 2007; Prendiville et al., 2009). Estos niveles similares de
rendimiento se reflejan en las características similares (en términos de
rendimiento máximo y días hasta el rendimiento máximo) de las curvas
de lactancia de rendimiento de leche y rendimiento de grasa más
proteína. Por lo tanto, este experimento proporciona evidencia clara de
que las vacas J × HF pueden competir favorablemente con las vacas HF
en términos de producción de leche y sólidos lácteos dentro de
sistemas de producción de leche basados en pastos de insumos bajos
o medios.
Con el sistema CON, las vacas HF produjeron una cantidad adicional
1.615 kg de leche y 1.042 kg de SCM que las vacas cruzadas, lo que proporciona una clara evidencia de una
interacción genotipo × ambiente para la producción de leche, y una fuerte evidencia de una tendencia a
una interacción genotipo × ambiente con SCM. Estas interacciones reflejan las interacciones similares que
se observaron para el rendimiento máximo de leche y el rendimiento máximo de grasa más proteína. La
evidencia de una interacción genotipo × sistema para la producción de leche y el rendimiento de los
constituyentes de la leche se registró en estudios previos que involucraron diferentes razas de vacas
lecheras (vacas lecheras Holstein-Friesian y Norwegian Red; Keady y Mayne, 2002) y diferentes cepas
Holstein-Friesian (Horan et al. al., 2005), con estos experimentos involucrando estudios de confinamiento y
pastoreo, respectivamente. Similarmente, Se observó una interacción genotipo × ambiente para la
producción de leche y la producción de sólidos de leche en una comparación de vacas Holstein-Friesian de
ultramar y vacas Holstein-Friesian de Nueva Zelanda manejadas dentro de un entorno de pastoreo o
confinamiento total (Kolver et al., 2002). Por el contrario, estudios previos que involucraron comparaciones
de vacas puras y cruzadas no proporcionaron evidencia de una interacción para los parámetros de
producción de leche (Walsh et al., 2008), aunque las diferencias en los aportes de concentrado fueron
relativamente pequeñas en este último estudio. En contraste con los hallazgos del presente estudio, Heins
et al. (2008a) encontraron que las vacas Holstein y las vacas cruzadas Jersey podían exhibir estudios previos
que involucraron comparaciones de vacas puras y cruzadas no proporcionaron evidencia de una
interacción para los parámetros de producción de leche (Walsh et al., 2008), aunque las diferencias en los
aportes de concentrado fueron relativamente pequeñas en este último estudio. En contraste con los
hallazgos del presente estudio, Heins et al. (2008a) encontraron que las vacas Holstein y las vacas cruzadas
Jersey podían exhibir estudios previos que involucraron comparaciones de vacas puras y cruzadas no
proporcionaron evidencia de una interacción para los parámetros de producción de leche (Walsh et al.,
2008), aunque las diferencias en los aportes de concentrado fueron relativamente pequeñas en este último
estudio. En contraste con los hallazgos del presente estudio, Heins et al. (2008a) encontraron que las vacas
Holstein y las vacas cruzadas Jersey podían exhibir
Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012
una respuesta similar de rendimiento de grasa más proteína a altos niveles de suplementación con concentrado, con esto quizás un
reflejo de los toros Jersey específicos utilizados en el último estudio (presumiblemente de origen norteamericano). De hecho, los
estudios que involucran otros cruces han resaltado una capacidad similar de las vacas cruzadas para responder a altos niveles de
alimentación concentrada, con Heins et al. (2006) registrando rendimientos de leche de lactancia de 9.757, 8.530, 9.281 y 9.161 kg/
vaca para vacas Holstein, Normande × Holstein, Scandinavian Red × Holstein y Montbeliarde × Holstein, respectivamente. Aunque los
rendimientos de leche de cada uno de los cruces fueron más bajos que para las vacas Holstein, las diferencias fueron relativamente
pequeñas, especialmente para los dos últimos genotipos, mientras que los rendimientos de grasa más proteína en realidad no
difirieron entre las vacas Holstein y Holstein × Scandinavian Red. De este modo, desde un punto de vista práctico, aunque los hallazgos
del experimento actual sugieren que las vacas cruzadas Jersey engendradas por toros neozelandeses y daneses no pudieron exhibir
respuestas de producción de leche y SCM a altos niveles de alimento concentrado similares a los de las vacas Holstein-Friesian,
evidencia de otros estudios sugiere que se pueden lograr niveles de rendimiento de producción similares a los de las vacas Holstein
cuando se utilizan otras razas de ganado y, de hecho, otras cepas de Jersey, en programas de cruzamiento. Por lo tanto, al considerar
la adopción del cruzamiento dentro de sistemas de entrada de mayor concentración, la elección de la raza y la línea del toro dentro de
una raza requieren una consideración cuidadosa. aunque los hallazgos del experimento actual sugieren que las vacas cruzadas Jersey
engendradas por toros neozelandeses y daneses no pudieron exhibir respuestas de producción de leche y SCM a niveles altos de
alimento concentrado similares a los de las vacas Holstein-Friesian, la evidencia de otros estudios sugiere que los niveles de Se puede
lograr un rendimiento de producción similar al de las vacas Holstein cuando se utilizan otras razas de ganado y, de hecho, otras cepas
de Jersey, en programas de cruzamiento. Por lo tanto, al considerar la adopción del cruzamiento dentro de sistemas de entrada de
mayor concentración, la elección de la raza y la línea del toro dentro de una raza requieren una consideración cuidadosa. aunque los
hallazgos del experimento actual sugieren que las vacas cruzadas Jersey engendradas por toros neozelandeses y daneses no pudieron
exhibir respuestas de producción de leche y SCM a niveles altos de alimento concentrado similares a los de las vacas Holstein-Friesian,
la evidencia de otros estudios sugiere que los niveles de Se puede lograr un rendimiento de producción similar al de las vacas Holstein
cuando se utilizan otras razas de ganado y, de hecho, otras cepas de Jersey, en programas de cruzamiento. Por lo tanto, al considerar
la adopción del cruzamiento dentro de sistemas de entrada de mayor concentración, la elección de la raza y la línea del toro dentro de
una raza requieren una consideración cuidadosa. la evidencia de otros estudios sugiere que se pueden lograr niveles de rendimiento
de producción similares a los de las vacas Holstein cuando se utilizan otras razas de ganado y, de hecho, otras cepas de Jersey, en
programas de cruzamiento. Por lo tanto, al considerar la adopción del cruzamiento dentro de sistemas de entrada de mayor
concentración, la elección de la raza y la línea del toro dentro de una raza requieren una consideración cuidadosa. la evidencia de otros estudios sugiere que se pueden
Aunque la composición de la leche no difirió entre los sistemas CON
y GRZ, Kolver y Muller (1998) informaron concentraciones de proteína
de leche significativamente más altas en vacas que recibieron TMR en
comparación con vacas que recibieron una dieta basada en pasto
pastoreado, mientras que Roberts y Kelly (1990) y Ferris et al. Alabama.
(2007) informaron concentraciones más altas de proteína en la leche
con vacas que pastaban a tiempo completo en comparación con
aquellas alojadas durante la noche y a las que se les ofreció ensilaje de
pasto. Aunque las dietas basadas en pastos de pastoreo normalmente
promueven la síntesis de proteína láctea en comparación con las dietas
basadas en ensilado de pasto, la ingesta total de energía y la densidad
energética de la dieta también son impulsores de la síntesis de proteína
láctea (Lock y Shingfield, 2003). Sin embargo, estos hallazgos
demuestran que se puede producir leche de excelente calidad
composicional a partir de diversos sistemas de producción.
Ácidos grasos de la leche
Se ha reconocido que la ingesta dietética de ácidos grasos
poliinsaturados n-3 y CLA tiene efectos positivos potenciales en
la salud humana (Lock y Bauman, 2004). Aunque el contenido
de ácidos grasos de la leche puede modificarse a través de
estrategias nutricionales, un enfoque más aceptable puede ser
modificar el contenido de ácidos grasos de la leche mediante la
crianza. Varios estudios han examinado la
 RENDIMIENTO DE VACAS CRUZADAS HOLSTEIN Y JERSEY
efecto del genotipo de la vaca lechera sobre el contenido
de ácidos grasos de la leche, aunque los resultados han
sido contradictorios. Por ejemplo, en una comparación
entre vacas cruzadas Holstein y Jersey, Palladino et al.
(2010) observaron que la concentración de ácidos grasos
de la leche de cadena corta (C4-C14) no se vio afectada
por el genotipo, de acuerdo con los hallazgos del
presente estudio, mientras que White et al. (2001)
informaron concentraciones más altas de ácidos grasos
de cadena corta (C6-C14) en la leche producida por vacas
Jersey puras en comparación con las vacas Holstein. De
manera similar, de acuerdo con los hallazgos del
presente estudio, White et al. (2001) observaron que las
concentraciones de grasa saturada C16:0 no se veían
afectadas por el genotipo, mientras que Palladino et al.
(2010) informaron concentraciones significativamente
más altas de C16:
Aunque se considera que la mayoría de las grasas saturadas
tienen efectos nocivos para la salud humana, se sabe que la
C18:0 tiene un efecto neutralizador en los niveles de colesterol
en la sangre. Dentro del estudio actual, las concentraciones de
C18:0 fueron más altas con las vacas J × HF, aunque Palladino
et al. no observaron tal efecto. (2010). La mayor concentración
de CLA en la leche con las vacas HF en comparación con las
vacas J × HF en el estudio actual puede deberse a que las vacas
HF tienen una mayor actividad de estearoil-CoA desaturasa
(Palladino et al., 2010), la conversión de ácido vaccénico (trans
-11 C18:1) a CLA a través de la actividad estearoil-CoA
desaturasa siendo una fuente importante de CLA en la leche
(Lock y Garnsworthy, 2003). Por lo tanto, aunque alguna
evidencia sugiere que existen diferencias entre las razas para
las concentraciones de ácidos grasos en la leche, los resultados
no son de ninguna manera consistentes entre los estudios, y
las variaciones entre toros individuales dentro de una raza
pueden ser de mayor importancia que la variación entre razas
per se.
Las diferencias en el contenido de ácidos grasos de
la leche entre los sistemas GRZ y CON concuerdan
ampliamente con los hallazgos de estudios similares
en los que el pasto de pastoreo fue reemplazado por
concentrados o forraje conservado (White et al., 2001;
Schroeder et al., 2003; Ferris et al., 2007). En general,
las concentraciones de ácidos grasos saturados
disminuyen, mientras que las concentraciones de
ácidos grasos insaturados (especialmente C18:1,
C18:3 y CLA) aumentan con proporciones crecientes
de pasto pastoreado en la dieta. Aunque los efectos
beneficiosos de ofrecer dietas que contengan una
alta proporción de pasto en el contenido de CLA de la
leche ahora están bien establecidos (Dhiman et al.,
1999; White et al., 2001; Dewhurst et al., 2006), el
aumento en la El contenido de CLA de la leche entre
los sistemas CON y GRZ dentro del estudio actual
(67%) fue particularmente dramático.
1541
hidrogenación extensiva del rumen de los ácidos grasos
linoleico y linolénico (Dewhurst et al., 2006).
Salud de la ubre
Aunque la mayoría de los estudios que involucran
comparaciones de vacas Holstein-Friesian y Jersey ×
Holstein-Friesian no informaron diferencias entre los
genotipos para SCS promedio (Heins et al., 2008b;
Prendiville et al., 2010b), las vacas J × HF tuvieron una
SCS más alto que las vacas HF en el estudio actual.
Esto quizás no sea del todo inesperado ya que se ha
observado que las vacas Jersey tienen un SCC más
alto que las vacas Holstein en algunas (Sewalem et al.,
2006) pero no en todas (Washburn et al., 2002:
Prendiville et al., 2010b) comparaciones de estos 2
razas. Además, el vigor híbrido para los rasgos de
salud de la ubre es limitado (Walsh et al., 2007; Begley
et al., 2009; Prendiville et al., 2010b), y VanRaden y
Sanders informaron heterosis desfavorable para la
incidencia de mastitis y SCC ( 2003),
Dentro del estudio actual, se observó una tendencia que
sugiere un SCS más bajo con vacas manejadas en GRZ en
comparación con CON (PAGS<0,07), lo que puede deberse a la
reducción de la exposición a patógenos ambientales con el
sistema GRZ. Se ha observado que las vacas manejadas dentro
de un sistema de pastoreo tienen una menor incidencia de
mastitis en comparación con aquellas manejadas dentro de un
sistema de confinamiento (Washburn et al., 2002), aunque
otros informes no han observado diferencias entre estos 2
sistemas de producción de leche para SCC (Kolver y Muller,
1998; Bargo et al., 2002; Washburn et al., 2002).
Cambio de tejido corporal y metabolitos sanguíneos
El BCS más alto y el BW más bajo de las vacas J × HF están
de acuerdo con los hallazgos de Auldist et al. (2007) y Heins
et al. (2008a). Con el sistema GRZ, ambos genotipos
parecieron perder BW a un ritmo similar hasta
aproximadamente la semana 15 de lactancia,
experimentaron pocos cambios en BW durante las
siguientes 15 semanas y luego ganaron BW hasta el secado.
Estas tendencias fueron similares a las observadas por
Vance (2011) cuando estos mismos 2 genotipos se
manejaron en un sistema similar basado en pastos de bajos
insumos durante 3 años sucesivos. Además, los cambios en
BCS dentro del estudio actual también fueron similares a
los informados por Vance (2011), con ambos genotipos
perdiendo una cantidad similar de condición corporal en la
lactancia temprana y mostrando poca evidencia de
ganancia de BCS hasta aproximadamente la semana 35 de
lactancia. Estos hallazgos resaltan lo difícil que puede ser
para las vacas lecheras de alto mérito genético,
Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012
1542 VANCE Y AL.
lactancia con dietas predominantemente basadas en forrajes. De hecho, la
ganancia en BW durante la semana 30 a 40 de lactación bien puede haber
sido principalmente un efecto de "llenado intestinal" debido a que a las vacas
se les ofrecieron dietas basadas en ensilado de pasto después del
realojamiento, con esta sugerencia respaldada por el hecho de que la
ganancia en la condición corporal durante este mismo período fue
extremadamente pequeña.
Las trayectorias de las curvas BW y BCS de las vacas manejadas
en CON fueron muy diferentes de las de GRZ, mientras que se
encontró evidencia de una interacción genotipo × ambiente cuando
se examinaron los datos semanales de BW y BCS (Figura 2a y 2b).
Esta interacción parece ser impulsada en gran medida por las
diferencias entre los genotipos dentro del sistema CON, y aunque
no es particularmente evidente durante las primeras 10 a 15
semanas de lactancia (durante las cuales la pérdida de peso
corporal fue mayor con las vacas HF), a partir de entonces las vacas
J × HF en el sistema CON tuvo una trayectoria mucho mayor para la
ganancia de BW y la ganancia de BCS. Esta diferencia se puede
atribuir a que las vacas J × HF distribuyen una mayor proporción de
los nutrientes alimentarios consumidos a las reservas de tejido
corporal en comparación con las vacas HF. Por cierto, esta fue la
razón por la que los niveles de inclusión de concentrado con ambos
genotipos se redujeron al 25% (base MS) desde el día 250 de
lactancia en adelante (como se describió anteriormente), las vacas J
× HF corren el riesgo de tener sobrepeso durante la lactancia
tardía. Aunque las vacas HF perdieron más BW (y parecían perder
más BCS) que las vacas cruzadas al inicio de la lactancia, no se
encontró evidencia de tendencias diferentes en las
concentraciones plasmáticas de NEFA y BHBA durante el inicio de la
lactancia (ambos considerados indicadores de movilización de
tejidos).
Estas diferencias en las curvas de respuesta BW y BCS entre
genotipos y sistemas proporcionan una explicación de la
tendencia (PAGS=0.069) hacia una interacción genotipo ×
ambiente para SCM dentro de este estudio. Por ejemplo, con el
sistema GRZ, ingestas de alimentos similares y cambios en las
reservas de tejido corporal con ambos genotipos se reflejaron
en salidas similares de SCM. Sin embargo, aunque el consumo
de alimentos para los 2 genotipos de vaca fue similar con CON,
SCM tendió a ser menor con las vacas J × HF (1042 kg), lo que
refleja la mayor movilización de tejidos con las vacas HF en la
lactancia temprana y el hecho de que una proporción de los
nutrientes consumidos por las vacas cruzadas en la lactancia
media o tardía se dividió en reservas de tejido corporal, en
lugar de leche. Se ha observado una respuesta similar en
estudios previos, con Yan et al. (2006) informando que las vacas
Holstein-Friesian manejadas con una dieta alta en concentrado
exhibieron una mayor respuesta de producción de leche que
las vacas Norwegian Red, con esto debido a que este último
distribuye nutrientes adicionales a las reservas de tejido
corporal. Del mismo modo, Tyrrell et al. (1990) informaron que
las vacas Holstein-Friesian dividieron una mayor proporción de
su energía consumida en leche que las vacas Jersey puras. En
vista de los muy grandes
Revista de ciencia láctea vol. 95 Nº 3, 2012
diferencia entre las vacas pura raza Holstein y pura raza
Jersey en términos de potencial de producción de leche, tal
vez no sea inesperado que sus cruces no puedan responder
a la suplementación con concentrado en la misma medida
que las vacas pura raza Holstein.
La menor pérdida de peso corporal observada en vacas
manejadas con CON en comparación con GRZ (42 y 91 kg,
respectivamente) está en línea con informes previos en la
literatura. Por ejemplo, Kolver y Muller (1998) y Bargo et al. (2002)
reportaron mayores pérdidas de PC y BCS en vacas manejadas en
un sistema de pastoreo en comparación con vacas manejadas
dentro de un sistema de confinamiento. La mayor pérdida de BW y
BCS con el sistema GRZ en comparación con el sistema CON se
refleja en las concentraciones plasmáticas más altas de NEFA
observadas en las vacas dentro del sistema anterior, de acuerdo
con los hallazgos de Bargo et al. (2002).
Fertilidad
Aunque el experimento actual no proporcionó una fuerte evidencia de una diferencia en el desempeño de la fertilidad entre las
vacas HF y J × HF, los días hasta el primer celo observado fueron más cortos con las vacas cruzadas, y se observó una tendencia
numérica para tasas de concepción más altas y 12- tasa de partos por semana con las vacas J × HF. Sin embargo, al considerar las
tendencias de fertilidad dentro del estudio actual, se debe reconocer el número relativamente pequeño de vacas involucradas en el
estudio, junto con la naturaleza binaria de gran parte de los datos presentados. Sin embargo, se han observado mejoras significativas
en el desempeño de la fertilidad con vacas cruzadas Jersey en otros estudios dentro de la literatura (Auldist et al., 2007), incluido un
estudio anterior a gran escala en AFBI (Vance, 2011). Además, el estudio actual no proporcionó evidencia de que el rendimiento de la
fertilidad estuviera influenciado por el sistema de manejo, lo que quizás sea sorprendente en vista de la gran diferencia (2114 kg/vaca)
en el aporte de concentrado entre los sistemas y las muy diferentes tendencias observadas en la movilización y deposición de tejidos.
Sin embargo, existe amplia evidencia en la literatura de que el aumento de los niveles de alimento concentrado tiene poco efecto
sobre el rendimiento de la fertilidad. Por ejemplo, Horan et al. (2004) informaron que un aumento en los niveles de alimentación
concentrada de 350 a 1500 kg/vaca no tuvo ningún efecto sobre el rendimiento general de la fertilidad en 3 líneas de vacas lecheras
Holstein-Friesian. Además, Washburn et al. (2002) no observaron diferencias significativas en el rendimiento reproductivo de las vacas
manejadas en un sistema de confinamiento o de pastoreo. lo que quizás sea sorprendente en vista de la gran diferencia (2114 kg/
vaca) en el aporte de concentrado entre los sistemas y las muy diferentes tendencias observadas en la movilización y deposición de
tejido. Sin embargo, existe amplia evidencia en la literatura de que el aumento de los niveles de alimento concentrado tiene poco
efecto sobre el rendimiento de la fertilidad. Por ejemplo, Horan et al. (2004) informaron que un aumento en los niveles de
alimentación concentrada de 350 a 1500 kg/vaca no tuvo ningún efecto sobre el rendimiento general de la fertilidad en 3 líneas de
vacas lecheras Holstein-Friesian. Además, Washburn et al. (2002) no observaron diferencias significativas en el rendimiento
reproductivo de las vacas manejadas en un sistema de confinamiento o de pastoreo. lo que quizás sea sorprendente en vista de la
gran diferencia (2114 kg/vaca) en el aporte de concentrado entre los sistemas y las muy diferentes tendencias observadas en la
movilización y deposición de tejido. Sin embargo, existe amplia evidencia en la literatura de que el aumento de los niveles de alimento
concentrado tiene poco efecto sobre el rendimiento de la fertilidad. Por ejemplo, Horan et al. (2004) informaron que un aumento en
los niveles de alimentación concentrada de 350 a 1500 kg/vaca no tuvo ningún efecto sobre el rendimiento general de la fertilidad en
3 líneas de vacas lecheras Holstein-Friesian. Además, Washburn et al. (2002) no observaron diferencias significativas en el rendimiento
reproductivo de las vacas manejadas en un sistema de confinamiento o de pastoreo. Existe amplia evidencia en la literatura de que el
aumento de los niveles de alimento concentrado tiene poco efecto sobre el rendimiento de la fertilidad. Por ejemplo, Horan et al.
(2004) informaron que un aumento en los niveles de alimentación concentrada de 350 a 1500 kg/vaca no tuvo ningún efecto sobre el
rendimiento general de la fertilidad en 3 líneas de vacas lecheras Holstein-Friesian. Además, Washburn et al. (2002) no observaron
diferencias significativas en el rendimiento reproductivo de las vacas manejadas en un sistema de confinamiento o de pastoreo. Existe amplia evidencia en la literatura
CONCLUSIONES
Las vacas J × HF de peso más ligero pudieron competir en
términos de producción de leche con las vacas HF más grandes.
 RENDIMIENTO DE VACAS CRUZADAS HOLSTEIN Y JERSEY
vacas dentro del sistema de pastoreo de insumos medios, con las
vacas mestizas compensando su menor tamaño al tener un mayor
consumo por kilogramo de PC. Sin embargo, las vacas J × HF no
pudieron exhibir una respuesta de producción de leche tan grande
a niveles altos de alimento concentrado como las HF (con una
tendencia similar observada para SCM), las vacas HF movilizaron
más tejido corporal al principio de la lactancia y dividieron menos
nutrientes del alimento. a las reservas de tejido corporal a
mediados o finales de la lactancia. En resumen, aunque se adaptan
bien a los sistemas de pastoreo con insumos de concentración
media, las vacas J × HF parecerían menos adecuadas que las vacas
HF a los sistemas de insumos de alta concentración.
EXPRESIONES DE GRATITUD
Se agradece al personal de la Unidad de Productos Lácteos de
AFBI Hillsborough por el cuidado de los animales de
experimentación y por ayudar con las mediciones experimentales.
Este estudio fue cofinanciado por el Departamento de Agricultura y
Desarrollo Rural (DARD) de Irlanda del Norte y por AgriSearch
(impuesto para agricultores). Elaine Vance acusa recibo de una
beca de posgrado DARD.
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