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El documento define fuerza mayor o caso fortuito como un evento imprevisto e irresistible como un naufragio o terremoto que está fuera del control de las partes involucradas y que impide el cumplimiento del contrato. Algunos ejemplos son ciclones, incendios o terremotos que destruyen las instalaciones de una empresa. Cuando ocurre un caso de fuerza mayor, el contrato de trabajo termina sin responsabilidad para ninguna de las partes, a menos que el empleador tenga seguro, en cuyo caso debe reconstruir la empresa o indemn
El documento define fuerza mayor o caso fortuito como un evento imprevisto e irresistible como un naufragio o terremoto que está fuera del control de las partes involucradas y que impide el cumplimiento del contrato. Algunos ejemplos son ciclones, incendios o terremotos que destruyen las instalaciones de una empresa. Cuando ocurre un caso de fuerza mayor, el contrato de trabajo termina sin responsabilidad para ninguna de las partes, a menos que el empleador tenga seguro, en cuyo caso debe reconstruir la empresa o indemn
El documento define fuerza mayor o caso fortuito como un evento imprevisto e irresistible como un naufragio o terremoto que está fuera del control de las partes involucradas y que impide el cumplimiento del contrato. Algunos ejemplos son ciclones, incendios o terremotos que destruyen las instalaciones de una empresa. Cuando ocurre un caso de fuerza mayor, el contrato de trabajo termina sin responsabilidad para ninguna de las partes, a menos que el empleador tenga seguro, en cuyo caso debe reconstruir la empresa o indemn
Se llama fuerza mayor o caso fortuito el imprevisto a que no
es posible resistir como un naufragio, un terremoto, los actos de autoridad ejercidos por funcionarios públicos, etc.
Ejemplos de caso fortuito o fuerza mayor son un naufragio,
terremoto.
El caso fortuito es una situación completamente ajena a las
partes y que impide el desarrollo de las labores acordadas en el contrato.
De esta manera, el caso fortuito o fuerza mayor debe ser
inimputable, vale decir, que provenga de una causa enteramente ajena a la voluntad de las partes; imprevisible, esto es, que no se haya podido prever dentro de los cálculos ordinarios y corrientes; e irresistible, es decir, que no se haya podido evitar, ni aun en el evento de oponerse las defensas idóneas para lograr tal objetivo.
Se trata de un acontecimiento extraño o ajeno a la voluntad
del empleador que no se puede evitar o resistir. Por ejemplo: un ciclón, un incendio, un terremoto que destruya las instalaciones y las maquinarias de la empresa.
Cuando se presenta una situación de esta naturaleza, el
contrato de trabajo termina. Si el empleador está asegurado contra el riesgo que le afecta, deberá reconstruir la empresa con el dinero que recibe de su póliza de seguro y si no reconstruye la empresa en proporción al valor recibido, deberá indemnizar equivalentemente a sus trabajadores. El Código Laboral Dominicano, estatuye al respecto cuando establece lo siguiente en su artículo 74: «El contrato termina también sin responsabilidad para ninguna de las partes si se produce un caso fortuito o de fuerza mayor.
Si el empleador está asegurado en el momento en que se
produce el siniestro, deberá, al recibir la indemnización por concepto de seguro, reconstruir la empresa en proporción del valor recibido, o de lo contrario, indemnizar equitativamente a los trabajadores (como hemos mencionado). La indemnización de los trabajadores nunca podrá ser mayor del importe del auxilio de cesantía».