Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Para adultos de tan solo 50 años de edad, la neumonía puede ocasionar problemas de salud
graves.
La neumonía puede ser una enfermedad grave si no se detecta a tiempo, y puede llegar a ser
mortal, especialmente entre personas de edad avanzada y entre los inmunodeprimidos. En
particular los pacientes de sida contraen frecuentemente la neumonía por Pneumocystis. Las
personas con fibrosis quística tienen también un alto riesgo de padecer neumonía debido a
que continuamente se acumula fluido en sus pulmones.
Puede ser altamente contagiosa, ya que el virus se disemina rápidamente en el aire, por medio
de estornudos, tos y mucosidad; un paciente que ha padecido neumonía puede quedar con
secuelas de esta en su organismo por mucho tiempo, esto lo hace potencialmente contagioso
y las personas más propensas a contraerla son las que estén en curso de una gripe, un cuadro
asmático, entre otras enfermedades del aparato respiratorio.
Fisiopatología
NEUMONÍA
[editar] Virus
Los virus necesitan invadir las células para su reproducción. Normalmente los virus llegan al
pulmón a través del aire, siendo inhalados por la boca o la nariz, o al ingerir un alimento. Una
vez en el pulmón, los virus invaden las células de revestimiento de las vías aéreas y los
alvéolos. Esta invasión a menudo conduce a la muerte celular, ya sea directamente o por
medio de apoptosis. Cuando el sistema inmune responde a la infección viral provoca más daño
pulmonar. Las células blancas, principalmente los linfocitos, activan una variedad de
mediadores químicos de inflamación ―como son las citoquinas, que aumentan la
permeabilidad de la pared bronquio alveolar permitiendo el paso de fluidos―. La combinación
de destrucción celular y el paso de fluidos al alvéolo empeora el intercambio gaseoso.
Además del daño pulmonar, muchos virus favorecen a otros órganos y pueden interferir
múltiples funciones. La infección viral también puede hacer más susceptible al huésped a la
infección bacteriana.
Las neumonías virales son causadas principalmente por el virus de la influenza, virus sincitial
respiratorio, adenovirus. El virus del herpes es una causa rara de neumonía excepto en recién
nacidos. El citomegalovirus puede causar neumonía en inmunodeprimidos.
[editar] Clasificación
o neumocócica,
o neumonía estafilocócica,
o Neumonía lobar,
o Neumonía intersticial.
o Neumonía supurada
o Neumonía fibrinosa.2
En función del ámbito de adquisición:
Clasificación FALTA.
[editar] Causas
Distintos virus.
En recién nacidos las neumonías suelen ser causadas por: Streptococcus pneumoniae,
Staphylococcus áureus y ocasionalmente bacilos gram negativos.
Diversos agentes infecciosos ―virus, bacterias y hongos― causan neumonía, siendo los más
comunes los siguientes:
Las fosas nasales se abren y se cierran como un aleteo rápido con la respiración. (Esto
se da principalmente en niños).
Las personas afectadas de neumonía a menudo tienen tos que puede producir una
expectoración de tipo mucopurulento (amarillenta), fiebre alta que puede estar
acompañada de escalofríos. Limitación respiratoria también es frecuente así como
dolor torácico de características pleuríticas (aumenta con la respiración profunda y con
la tos). También pueden tener hemoptisis (expectoración de sangre por la boca
durante episodios de tos) y disnea. Suele acompañarse de compromiso del estado
general (anorexia, astenia y adinamia).
Al examen físico general es probable encontrar taquicardia, taquipnea y baja presión
arterial, ya sea sistólica o diastólica.
o a la percusión: matidez.
El paciente infantil tiene la piel fría, tose intensamente, parece decaído, apenas puede
llorar y puede tener convulsiones, se pone morado cuando tose, no quiere comer
(afagia), apenas reacciona a los estímulos. El cuadro clínico es similar en el paciente
adulto.
[editar] Tratamiento
Frecue
Subtipo
ncia Antibiótico
histológico
(%).
En adultos
sanos:
Azitromi
cina o
Doxicicli
na.
Streptococcus
31.1 Comorbilidades:
pneumoniae3
Levoflox
acina o
Moxiflox
acina o
Amoxicil
ina.
Oxacilina o
Staphylococcus Cefuroxima o
0.4 Cefazolina o
áureus
Amoxicilina y
ácido clavulánico
Cefuroxima o
Trimetoprim-
sulfametoxazol o
Moraxella Cefotaxima o
0.4 Ceftriaxone o
catarrhalis
Ceftazidima o
Ciprofloxacino o
Levofloxacina o
Azitromicina
Clindamicina o
Streptococcus
0.4 Penicilina G o
pyogenes
Vancomicina o
Penicilina G o
Ceftriaxone o
Cefotaxima o
Neisseria Ceftriaxone o
0.4
meningitidis Cloranfenicol o
Ciprofloxacino o
Rifampina o
Eritromicina o
Cefotaxima o
Ceftriaxone o
Gentamicina o
Klebsiella Amikacina o
0.4 Piperacilina o
pneumoniae
Imipenem o
Ciprofloxacino o
Trimetoprim-
sulfametoxazol o
* Azitromicina o
Haemophilus
0.4 Doxicicli
influenzae
na.
Cefotaxima o
Ceftriaxone o
Amoxicilina o
Ampicilina o
Cloranfenicol o
Neum Legionell
onía a
23.2
atípica pneumop
hila
Mycoplas
ma
3.0
pneumon
iae
Chlamyd
ophila
1.2
pneumon
iae
Pneumocystis
10.7
jiroveci
Tuberculosis 0.4
La mayoría de los casos de neumonía puede ser tratada sin hospitalización. Normalmente, los
antibióticos orales, reposo, líquidos, y cuidados en el hogar son suficientes para completar la
resolución. Sin embargo, las personas con neumonía que están teniendo dificultad para
respirar, las personas con otros problemas médicos, y las personas mayores pueden necesitar
un tratamiento más avanzado. Si los síntomas empeoran, la neumonía no mejora con
tratamiento en el hogar, o se producen complicaciones, la persona a menudo tiene que ser
hospitalizada.
Los antibióticos se utilizan para tratar la neumonía bacteriana. En contraste, los antibióticos no
son útiles para la neumonía viral, aunque a veces se utilizan para tratar o prevenir las
infecciones bacterianas que pueden ocurrir en los pulmones dañados por una neumonía viral.
La elección de tratamiento antibiótico depende de la naturaleza de la neumonía, los
microorganismos más comunes que causan neumonía en el área geográfica local, y el estado
inmune subyacente y la salud del individuo.
Las personas que tienen dificultad para respirar debido a la neumonía puede requerir oxígeno
extra. Individuos extremadamente enfermos pueden requerir de cuidados intensivos de
tratamiento, a menudo incluyendo intubación y ventilación artificial.
La neumonía viral causada por la influenza A pueden ser tratados con amantadina o
rimantadina, mientras que la neumonía viral causada por la influenza A o B puede ser tratado
con oseltamivir o zanamivir. Estos tratamientos son beneficiosos solo si se inició un plazo de 48
horas de la aparición de los síntomas. Muchas cepas de influenza A H5N1, también conocida
como influenza aviar o «gripe aviar», han mostrado resistencia a la amantadina y la
rimantadina. No se conocen tratamientos eficaces para las neumonías virales causadas por el
coronavirus del SRAS, el adenovirus, el hantavirus o el parainfluenza virus.
[editar] Diagnóstico
La neumonía es un término general que hace referencia a una infección de los pulmones, que
puede ser provocada por diversos microorganismos, entre los que se incluyen virus, bacterias,
hongos y parásitos.
La mayoría de los casos de neumonía son provocados por virus, tales como el adenovirus, el
rinovirus, el virus de la influenza (gripe), el virus sincicial respiratorio (RSV, en inglés) y el virus
para influenza (que provoca crup).
A menudo, la neumonía comienza después de una infección de las vías respiratorias superiores
(una infección de la nariz y la garganta), y los síntomas de la neumonía comienzan 2 ó 3 días
después de un resfriado o dolor de garganta.
Signos y síntomas
Los síntomas pueden variar según la edad del niño y la causa de la neumonía, pero entre los
más comunes se incluyen:
fiebre
escalofríos
tos
congestión nasal
respiración trabajosa que provoca que los músculos de las costillas se retraigan
(cuando los músculos debajo de la caja torácica o entre las costillas se atraen con cada
respiración) y produce aleteo nasal
vómitos
dolor de pecho
dolor abdominal
disminución de la actividad
falta de apetito (en niños mayores) o alimentación deficiente (en lactantes) que puede
producir deshidratación
Los niños con neumonía provocada por bacterias por lo general se enferman bastante
rápidamente y comienzan con fiebre alta repentina y respiración particularmente rápida.
Los niños con neumonía provocada por virus probablemente tendrán síntomas que aparecen
de manera más gradual, y son menos graves, pero la sibilancia puede ser más común en la
neumonía viral.
Algunos tipos de neumonía producen síntomas que dan señales importantes acerca del
germen que causa la enfermedad. Por ejemplo, en los niños de mayor edad y los adolescentes,
la neumonía causada por micoplasma (también denominada neumonía migratoria) es fácil de
detectar debido a que produce dolor de garganta, dolor de cabeza y salpullido, además de los
síntomas habituales de la neumonía.
En los bebés, la neumonía causada por clamidia puede provocar conjuntivitis (ojos irritados)
con enfermedad apenas leve y sin fiebre. Cuando la neumonía se debe a la tos ferina
(pertusis), el niño puede tener ataques de tos prolongados, adquirir un color azulado debido a
la falta de aire o hacer el clásico sonido de "silbido" al tratar de inspirar.
Incubación
Duración
Contagio
Los virus y las bacterias que producen la neumonía son contagiosos y, por lo general, están
presentes en las secreciones de la boca o la nariz de una persona infectada. La enfermedad
puede propagarse cuando una persona infectada tose o estornuda sobre otras, al compartir
vasos y cubiertos y al tocar los pañuelos usados por una persona infectada.
Prevención
Algunos tipos de neumonía pueden prevenirse con vacunas. Los niños generalmente reciben
inmunizaciones establecidas contra la Haemophilus influenzae y pertusis (tos ferina) a partir de
los 2 meses de edad. (La inmunización contra la pertusis corresponde a la "P" de la inyección
establecida DTaP).
En la actualidad también se administran vacunas contra el organismo neumococo (PCV), una
causa común de la neumonía bacteriana.
Los niños con enfermedades crónicas que tienen un riesgo especial de padecer otros tipos de
neumonía, pueden recibir otras vacunas o medicamentos inmunitarios de protección. Se
recomienda especialmente la vacuna contra la gripe para niños con enfermedades crónicas,
como trastornos cardíacos o pulmonares crónicos o asma, así como para niños sanos de entre
6 meses y 19 años de edad.
Dado que tienen un mayor riesgo de sufrir complicaciones graves, los bebés prematuros
pueden recibir tratamientos que les brindan protección temporaria contra el virus sincicial
respiratorio, que puede provocar neumonía en los niños más pequeños.
Los médicos pueden administrar antibióticos profilácticos (que previenen enfermedades) para
prevenir la neumonía en los niños que han estado expuestos a una persona con determinados
tipos de neumonía, como pertusis. Las personas infectadas por el virus del virus de
inmunodeficiencia humano (VIH) pueden recibir antibióticos profilácticos para prevenir la
neumonía causada por Pneumocystis carinii.
En general, la neumonía no es contagiosa, aunque los virus y bacterias que afectan las vías
respiratorias superiores que la provocan sí lo son; por lo tanto, se recomienda mantener a su
hijo alejado de cualquier persona que tenga una infección de las vías respiratorias superiores.
Llame al médico de inmediato si su hijo tiene algunos de los signos y síntomas de la neumonía,
pero especialmente si:
•tiene una coloración azulada o grisácea en las uñas de las manos o los labios
•tiene fiebre de 102 °F (38,9 °C), o de más de 100,4 °F (38 °C) en los bebés de menos de 6
meses
Tratamiento profesional
En la mayoría de los casos, la neumonía puede tratarse con antibióticos administrados por la
boca en el hogar. El tipo de antibiótico que se use dependerá del tipo de neumonía. En algunos
casos, quizá sea necesario tratar a las demás personas que vivan en el hogar con
medicamentos para prevenir la enfermedad.
Tal vez sea necesario hospitalizar a los niños para su tratamiento si tienen neumonía
provocada por pertusis u otra neumonía bacteriana que provoque fiebre alta y dificultad
respiratoria, o bien, en los siguientes casos:
•si tienen infecciones pulmonares que puedan haberse propagado al torrente sanguíneo
•si vomitan tanto que no pueden tomar los medicamentos por boca