Está en la página 1de 17

PAID6s EDUCADOR

Marta Souto
Últimos títulos publicados:

111. G. Alisedo y otras. Didáctica de las ciencias del lenguaje


112. C. Parra e 1.Saiz (comps.). Didáctica de matemáticas
113. H. Weissmann (comp.). Didáctica de las ciencias naturales
114. H. Gardner. Educación artística y desarrollo humano
115. E. W. Eisner. Educar la visión artística
116. M. Castells y otros. Nuevas perspecti~s críticas en educación
117. A. Puiggrós. Imperialismo, educación y neoliberalismo en América latina
118. A. Coulon. Etnometodología y educación
119. N. Luhmann. Teoría de la sociedad y pedagogía
120. H. A. Giroux. Placeres inquietantes
121. A. Castorina y otros. Piaget- Vygotsky: contribuciones para replantear el debate
123. H. A. Giroux. Cruzando límites
124. P. McLaren. Pedagogía crítica y cultura depredadora
125. E. W. Eisner. El ojo ilustrado
126. E. Litwin. Las configuraciones didácticas: una nueva agenda para la enseñanza
Las formaciones grupales
superior
127. A. Díaz Barriga. Didáctica y currículum en la escuela
128. L. Duch. La educación y la crisis de la modernidad
129. A. W. de Camilloni y otras. La evaluación de los aprendizajes en el debate
didáctico contemporáneo
130. A. Castorina y otros. Piaget y la educación
131. H. Hernández Rojas. Paradigmas en psicología
133. J. Canaan y D. Epstein (comps.). Una cuestión de disciplina
134. J. Beillerot y otros. Saber y relación con el saber
135. M. Van Manen. El tacto en la enseñanza
136. M. Siguán. La escuela y los inmigrantes
137. Aisenberg, B. y Alderoqui, S. (comps.), Didáctica de las Ciencias Sociales II
138. S. González y L. Ize de Marenco. Escuchar, leer y escribir en la EGB
139. Hugo R. Mancuso. Metodología de la investigación en ciencias sociales ~ dABRII:.L",
140. M. Kaufman y L. Fumagalli (comps.) - Enseñar ciencias naturales INS 'U1"I./ltALDE
I'"ROF !'N C'¡;NC''':;' O~ v
141. F. Brandoni (comp.) - Mediación escolar Ff\UCAeION
142. J. Piaget - De la pedagogía

~,,~
143.1. Gaskins y T. Elliot - Estrategias cognitivas en la escuela
144. D. [ohnson y otros - El aprendizaje cooperativo en el aula
145. M. von Manen y B. Levering - Los secretos de la infancia
146. B. Porro - La resolución de conflicto en el aula
147. D. Johnson y R. Johnson - Cómo reducir la violencia en las escuelas
148. A. Candela - Ciencia en el aula
149. C. Lomas (comp.) - ¿Iguales o diferentes? PAIDÓS
150. A. Triphon y J. Voneche - Piagei- Vygotsky: el origen social del pensamiento Buenos Aires
151. M. Souto - Las formaciones grupales en la escuela Barcelona
152. E. Lucarelli - De la teoría pedagógica a la práctica en formación México
Capítulo II

LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES.


CONSIDERACIONES TEÓRICAS

1. LAS TEORíAS DE LOS GRUPOS

Nos interesa ahora indagar acerca de lo grupal en las clases es-.


colares, en las concreciones que se producen en el cruce de las va-
riables tiempo y espacio, en las situaciones de enseñanza que
surgen en instituciones y en contextos sociales específicos.
En las situaciones surge la praxis, se concreta lo pedagógico: "el
conjunto de elementos, hechos, relaciones y condiciones constitu-
ye lo que se denomina situación, que cubre siempre una fase o un
cierto período, un tiempo" (Bleger, 1969, pág. 45).
Las dimensiones personales, interaccionales, grupales, institu-
cionales, sociales, instrumentales pueden desglosarse de las tramas
o redes de relaciones, que se contextúan histórica, social y geo-
gráficamente en las clases.
Nos preguntamos en este apartado acerca de la presencia de lo
grupal y sus manifestaciones, en los espacios y las clases escolares.
¿Qué significa lo grupal? ¿Es identificable lo grupal al grupo? ¿Qué sig-
nifican grupo de aprendizaje y grupo-clase? ¿Qué es lagrupalidad? ¿Cuá-
les son las articulaciones? ¿Cuáles las especificidades?
Estos interrogantes llevan a un replanteo teórico. Parece necesa-
rio buscar ciertas precisiones en los conceptos y términos utilizados.
En el apartado anterior sobre consideraciones epistemológicas
ya hablamos de los niveles y las perspectivas de análisis para
abordar un campo u objeto de estudio complejo. Entre ellos men
cionamos el grupal: como nivel, hace referencia a un grado de inte
38 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 39

gración O estructuración del fenómeno y a la posibilidad de com- tos. A mediados del siglo XVIII, groupe hace referencia a conjunto
prenderlo y analizarlo desde teorías provenientes de la psicología de personas.
social, la dinámica de grupos, que se relacionan con la especificidad Habría un largo período histórico en el que "el grupo" queda
del mismo; como perspectiva, refiere a lecturas posibles, a miradas dentro de lo impensable. Se vive en situaciones grupales, pero no
desde diferentes disciplinas y teorías. se lo piensa distinto del individuo, no se lo constituye en objeto
Esta acepción de grupal es de índole metodológico-episte- epistémico.
mológica, en la medida en que busca hacer inteligible un sistema Groppo originariamente significaba nudo y se asociaba también
complejo. Es ésta una primera vertiente de significado. En nuestra a la idea de círculo (grupa, kruppa en germano occidental). Éstas
investigación la hemos utilizado l'ara comprender las lecturas de la constituyen dos líneas de significación que aún hoy persisten en la
clase desde ciertas conceptualizaciones. producción teórica.
Veamos ahora otros significados del término, desde las teorías Ana María Fernández vincula temporalmente la formación del
grupales. vocablo a la de la subjetividad moderna y a la constitución de la
Distintas corrientes han construido y construyen modelos familia restringida (Fernández, 1989b).
teóricos acerca de lo grupal. Superan el atomismo social e inten- En los dos rimero s momentos e istémicQ§..,se plantea ~~~..2_
tan explicar el conjunto, la Gestalt, la estructura, la dinámica, et- del gru~o. La preocupación teórica está centrada en identificarlo,
cétera. "recort'!!!9, explicarlo en su especificidad y esencialidad. En el últi-
Al rastrear la genealogía del concepto, Ana María Fernández mo, en cambio,. ay uña 6-'osición a esta intención. El grupo no es
(1989a) habla de tres momentos epistémicos en la constitución de centro e interés smo que]o ~~ entrecruzamientos, de im-
saberes grupales. El rimero considera ~grul2.Q..,.~Q11}.O un todo, p~aciones. Es aquí donde surge la conco/ion dEtró grup~'a p~r-
que es más que la suma de las partes. A él pertenecen la teoría de fir e cam ios epistemológicos.
Lewin y las teorías psicosociológicas de los roles, delliderazgo, de Haremos una breve presentación de estas corrientes de pensa",
la comunicación, de la cohesión, etcétera. El.?~g.!:!nc!g ip!enta con- miento desde algunas categorizaciones que consideramos de inte-
ceptualizar la estructura, las invariantes del grupo, las organizacio- rés teórico-epistemológico.
~s grupales, los organ~9.!'.~s_.sI!.lé~e~mín.?n 19l..~lEmtos
grupales. A él pertenecen distintas teorías del psicoanálisis de-gru- • Desde la procedencia disciplinar. Se constituyen dos corrientes: la
pos. El~ter~ trata de superar las disciplinas de objeto discreto, externa, propia de la sociología; la interna, propia de la psicolo-
~ir r~desiransdiscipIif.l:a~~ _~~~qo:FllcclOn '$ la:del gía. Michael S. Olmsted (1963) las denominó "tradición externa
individuo y la del grupo como intencionalidad. Se asocia a los nue- e interna". La primera define al grupo como categoría sociológi-.
vos paradigmas de la ciencia. ea y pertenece" a la vieja tradición sociológica ~ histórica del
Podríamos agregar un período previo, aepistémico, cuando el pensamiento social" (ídem, pág. 10). El grupo es ahalizado como
grupo no es objeto de conocimiento, cuando no existe siquiera el una célula en el organismo social, dentro de unidades sociales
nombre que lo identifica. Los estudios acerca de la etimología de la más amplias. Las sociedades fueron vistas COmOgrupos, y ellos
palabra muestran que deriva del italiano groppo o gruppo que desig- como componentes de aquéllas. La producción sociológica ini-
na en bellas artes al conjunto de figuras esculpidas o pintadas en cial, la estructuralista y la funcionalista se ubican en esta tradi-.
una misma composición (Anzieu y Martin, 1971). En las lenguas ción. La segunda, o tradición interna, define al grupo desde su
antiguas no hay antecedentes de términos referidos a la asociación interior. En ellos los individuos interactúan y pueden ser obser-
de pocas personas. Sólo en el siglo XVII se registra la aparición es- vados. El interés está centrado en los sujetos que conforman el
crita de la palabra en Francia, designando a un conjunto de elemen- grupo, en los roles. Los grupos son vistos como pequeñas socie-
40 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 41

dades. Es la ~QciªlJa que marca la superación de es- XIX (en Fourier); las crisis económicas, como la de 1930, que
tas dos tradiciones. condujeron a estudios en la industria con el objeto de mejorar
• Desde las posturas gnoseológicas. El antagonismo entre norni- las condiciones laborales y la producción, o de cambiar hábitos
nalismo y realismo subyace a muchas de las diferencias teóricas. alimentarios en épocas de carestía, o de mejorar las relaciones
Roberto Romero (1987) analiza en particular esta problemática humanas en las empresas; los problemas de las guerras y el com-
que se expresa en el par antagónico individualismo-mentalismo bate en el plano militar que llevaron a estudios sobre la moral y
grupal. En la primera línea se enrolan quienes plantean el grupo la cohesión grupal en situaciones de aislamiento; el nazismo,
y la sociedad desde lo individual como unión de aquello que se que creó la necesidad de explicar y prevenir fenómenos sociales
considera fundamental, única-realidad, y niegan existencia a los semejantes; la posguerra y las necesidades que surgieron en el
grupos. El grupo se transforma en un mero nombre, una ficción campo social y terapéutico de atender a la demanda social y co-
sin referente, una idea, un término que alude a la abstracción de munitaria mediante programas especiales; la cultura de la em-
lo colectivo. Es la psicología individual la que se sigue en los presa y la productividad, que plantea el estudio de los grupos
grupos. Hobbes, Tarde, Le Bon se inscriben en esta línea. Se pro- desde la gestión, los círculos de calidad, etc.; la conformación de
duce una isomorfia individuo-grupo que explica lo social desde un mundo globalizado a nivel de las comunicaciones, e inter-
lo individual. La segunda postura, la del realismo, aparece en el cambios, que llevan a producciones para comprender los siste-
pensamiento positivista de D~ en tanto afirma el Lugar mas complejos, las múltiples relaciones, etcétera.
f!!!.ldante de la sociedad y de los grupos. Al unirse los individuos • Desde las posturas teórico-epistemológicas. Ellas permiten plantear
,surge algo nuevo, distinto, cuya naturaleza de en e_d.eellos diferenciaciones en el· de conocimi o, así como dificultades
sino de las relaciones que entre ellos se establecen. La "concien- y obstáculos epistemológicos propios de este campo. Ha sido ne-
cia colectiva" sustituye a la "mente individual", planteada por cesario un largo proceso sociocultural de descentración del indi-
la postura anterior. Las representaciones sociales, más allá del viduo para dar lugar a que el rupo lograra status epistémico. Los
individuo, se constituyen mediante normas y reglas. Esta polé- modelos sociales y las formas e socia ización, los sistemas de
mica que se generó en el siglo XIX tiene posteriores representan- valores, las ideologías, la:organización de los saberes culturales en
tes. El nominalismo y elrealismo tienen su correlato en la disciplinas, impidieron, durante un largo período histórico, que el
oposición i~~iduo-grupo, sociedad. Es a través de las~~ grupo pudiera ser pensado: de allí seguramente la inexistencia de
de George ~ acerca del" otro significativo" y de la d Freud la palabra "grupo" en diversas lenguas hasta los siglos XVII Y
desde el enunciado de que toda psicología individual es ta ffiéfÍ XVIII. El individuo ocupaba su lugar de centro y desde él no era
social, como se superan las diferencias y se sientan las bases para posible pensar el grupo. Esta evolución social tiene, por otro lado,
un conocimiento nuevo desde espacios de interfaz entre lo indi- su correlato en lo individual por la <j.ificultad de lo ar la rel2re-
vidual y lo social. Se abre el espacio de la psicología social que senta<;ión d~grupo co_mo objeto, más allá de su referencia
se ocupa, justamente, del estudio de las interacciones, percepcío- internalizada como suma de individuos. Una vez constituido el
~es, re resentaciones mutugs, y plantea la necesidad de una re- lugar epistémico del grupo en nuestro siglo, debido a los estudios
presentación del grupo como tal para_que éste se constituya y sistemáticos que la psicología social inicia, pueden reconocerse
dé una definición de Ia pertenencia grupal desde la inter- distintos tipos de producciones: la estructuralistE:, planteada por
,subjetividad. Durkheim; la ncionalista, por Parssons, quien se ocupa en un es-
• Desde las condiciones sociohistóricas. Ciertos hechos y situaciones crito de la clase escolar y sus funciones sociales; la dinamista, cuyo
históricos generaron o facilitaron la producción teórica acerca de representante es Lewin con la teoría del campo, que plantea el
los grupos. Así, la búsqueda de utopías a comienzos del siglo $!U o com.2J!P campo social en el que las fuerzas se co . an en
42 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL Y LAS FORMACIONES GRUPALES 43

movimiento cont~u~en función de !lna energía 5l~ e:ryl!~~ logía, en McDougall, Le Bon, Durkheim, como en el psicoanáli-
locomociones hacia los objetivos. Lewin define al grup0 como una is, con Freud. Ellos se ocupan de encontrar explicación a los fe-
totalidad con interdependencia de los miembros qGe lo confor- nómenos colectivos. Otras teorías se ocupan del grupo reducido.
man. La diaW:tlcti:;que plantea otra explicación a los movimientos Ya a fines del siglo XVIII, Charles Fourier, desde el socialismo
y define al grupo ü. P. Sartrejjcomo
/
una "totalización en curso". utópico, construyó una teoría especulativa proponiendo los pri-
Otros autores han centrado sus análisis en el conflicto grupal (en- meros estudios con base experimental. Planteaba el deseo de
tre ellos K. Lewin, P.French, D. Stock, M. Lieberman) vinculando- establecer lazos afectivos y la búsqueda de acuerdos con grupos
lo a la búsqueda del equilibrio a través de la resolución. Las y series de grupos. La falange es para él una comunidad ideal
vertientes ~turo-funcüznali8f;as en la psicosociología, que defi- que vive en el falansterio, donde cada uno, desde sus pasiones y
nen al grupo como una estructura, se preocupan por establecer gustos, trabaja con otros en series de trabajadores. El grupo pue-
sus elementos identificatorios o invariantes y la estudian desde un de subdividirse en subgrupos dentro de una cooperativa de dis-
~vel ma~ Han dado lugar al interaccionismo, a las teorías tribución. Se trata, en realidad, de una psicología industrial. Al
de los roles, delliderazgo, de la comunicación, a la sociometría, al estudio del grupo reducido se dedica la psicología social en sus
estudio de las estructuras cooperativas, individualistas y compe- distintas corrientes, la dinámica de los grupos y el psicoanálisis
titivas, y a dispositivos de amplio desarrollo como los grupos T o de los grupos en las escuelas inglesa, francesa y argentina.
de entrenamiento, de encuentro y otros. En el psicoanálisis, la • Desde los enfoques metodológicos. La producción ha utilizado
. ntes estructuralistas se plantearon al grupo desde nivel diversos enfoques: los estudios de índole especulativa (hasta
~tent desde los fenómenos inconscientes que se producen en la principios de siglo) sin carácter científico; los basados en la ex-
VI a emocional y que son determinantes de las conductas mani- perimentación; en el estudio de grupos naturales; en el enfoque
fiestas. La teoría de los supuestos básicos de Bion, la de los orga- clínico; en el análisis de dispositivos grupales 'construidos para
nizadores psíquicos y socioculturales en Anzieu y Kaés se ubican distintos fines. El enfoque experimental caracterizó la produc-
en esta vertiente. Las ~r~entes de lo grupa, que plantean la críti- ción psicosocioJógica; los estudios sobre delincuencia juvenil en
ca y la superación del estructuralismo, se evidencian ya en el pen- Alemania y Estados Unidos en la primera parte del siglo XXse
samiento institucionalista francés, alrededor de 1968(G. Mendel, basaron en la observación de grupos naturales; la, CQUiente/
R. Loureau, G. Lapassade, M. Lobrot, R. Hess, entre otros) que dinamista de Lewin utilizó el método experimental y creó la in-
J permite plantear las relaciones institución-grupo y generar dispo- ~estigación-acción; los grupos T, la sociometría, el psicodramá,
sitivos como los grupos autogestivos y otros para la intervención los grupos terapéuticos constituyeron dispositivos grupales que
institucional. La teoría de la transversalidad de F. Guattari y G. permitieron la producción teórica. Desde el psicoanálisis aplica-
Deleuze y su continuación en el esquizoanálisis y las con- do a los grupos se realizó un enfoque clínico.
ceptualizaciones de una lógica de rizomas y conexiones múlti- • Desde los intereses prioritarios. La producción teórica ha estado
ples entre cualquier punto con otro desde la heterogeneidad, la preocupada por el conocimiento de tipo especulativo con inte-
multiplicidad, sin modelos estructurales ni generativos. La in- reses filosóficos o sociales (producción inicial); en otros momen-
fluencia del pensamiento de Foucault es importante en esta ver- tos, por intereses pragmáticos para responder a problemas
tiente. A su desarrollo en la Argentina nos dedicaremos a concretos como en los estudios pioneros sobre relaciones huma-
continuación. nas en la industria, de Elton Mayo, o en los trabajos sobre la in-
• Desde la unidad de análisis. Las teorías toman a la masa o al peque- . fluencia social, de K. Lewin o en el psicoanálisis de grupo en la
ño grupo como objeto. A fines del siglo XIXy comienzos del XX, posguerra (Bion y Foulkes); otros responden a preocupaciones
la masa y la multitud son objeto de análisis tanto desde la socio- político-sociales que intentan explicar fenómenos como el nazis-
44 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 45
mo O la guerra, o buscan un funcionamiento democrático en .1., 1, P icología social norteamericana, las de Klein y Bion desde el
Lewin y la psicosociología de los roles, elliderazgo, etc.; o plan- 11 (' nálisis inglés, las de Pichon Riviere y Bleger en la Argentina,
tean desarrollos sobre comunicación o propaganda con motivos 1I1 el Althusser desde el marxismo, entre o ,ra-s;-s~combinaban
de orden político-social. 11 1 I nerar propuestas teóricas nuevas.
1" n la década siguiente la propuesta d "lo grupal" anuda nue-
En nuestro país hay una fuerte tradición grupalista, inicialmen- un nte a quienes, por razones políticas, sehabf n distanciado
te vinculada al psicoanálisis y a la Asociación Psicoanalítica Argen- f',1'ográficamente.
tina, con un claro interés en los grupos terapéuticos. Surgió luego conceptualizaciones acerca de la transversalidad de Guattari
una línea de ruptura que, según- la interpretación de M. Percia, es I leuze y posteriormente las de los rizomas, líneas de fuga,
"ruptura del encierro unificante dentro de la institución psico- I -rritorializaciones, máquinas deseantes; las de Foucault sobre la
analítica oficial" (Percia, 1991). 1111 lítica y la microfísica del poder, la genealogía, los dispositivos;
Dos hechos resultaron significativos en esta historia de des- I lti de Derrida sobre la desconstrucción, y el psicoanálisis lacaniano
prendimiento de la institución homogeneizante: la apertura y IIt'rmitieron abrir perspectivas de comprensión diferentes de las del
consolidación de la Escuela de Psicología Social de Pichon Riviere l' ríodo anterior y hasta opuestas a ellas.
primero, y el movimiento y la creación del grupo Plataforma des- uattari advierte, en una entrevista publicada en 1981, sobre los
pués. III dos de categorización demasiado estrechos y plantea la necesi-
La influencia del marxismo y su cruce con el psicoanálisis otor- 1. d de "interacciones constantes entre lo político, lo social, lo eco-
góa las intervenciones un carácter de compromiso político-ideoló- 1\ mico, lo massmediático, lo religioso, lo cotidiano, lo nacional, lo
gico y puso las prácticas como transformadoras de las condiciones Ir nsnacional, etc." (Guattari y otros, 1981, pág., 109). Al hablar de
sociales en el centro de la reflexión. 1 s grupos prefiere sustituir esta categoría por la de dispositivo que
La inclusión de otras teorías que se separaban de la ortodoxia 11 va "a pensar el problema en su totalidad, a saber que las muta-
caracterizó también a la década del setenta. Es la época del movi- .iones sociales, las transformaciones subjetivas, los deslizamientos
miento institucionalista (G. Baremblitt, F. Ulloa), de la contra- mánticos, todo lo que atañe a las percepciones, a los sentimien-
institución (A. Bauleo), del psicodrama psicoanalítico (E. t s, y a las ideas, para ser com rendido, implica que se tomen en
Pavlovsky, F. Moccio, H. Kesselman, C. Martínez Bouquet), de la uent ~os c entes asible' ídem).
difusión de los grupos operativo s (E. Pichon Riviere, J. Bleger, A. Se habla de a gruE!l:. amo ~spacio de transició!!, de intersub-
Bauleo). La participación en centros asistenciales, de salud, los tra- '" j tividad entre e gru o interno el externo; como vinculación de
baj,os. en ter~pia ~amiliar. y ~e p~reja son formas de ~xtender las ~ lo social y lo íñCYyidual. Lo grupal"habla de las diversas formas en
practicas mas alla de las instituciones formales. Las dictaduras en -: que la~ ~~bjettrislade.§ _~oJ!_cpnjormadas-,--de los rupos on e cir-
el país generaron exilios y bifurcaciones hacia otros países en.JeB. '~_ culan -Y.3ievehiculizan,J~in_quedar agresadas ni reducidas a tales
que el movimiento grupalista continúa. formaciones grupales" (De Brassi, 1990).
La producción teórica de esta época puede enrolarse más fácil- 1 grupo es e ugar de articulación de representaciones. ,Lastar:-
mente en el estructuralismo. Se habla de grupo en términos de es- !!!:..acianes~ ales son conSideiad---COmo o ~ue el ru o crea en su
tructura grupal. "El concepto grupo se refiere a la instancia grupo [ungonamieJ.!!:2 (Scherzer, en Barenblitt y otros, 1983).Qcomo for-
i y no a la experiencia grupa! como tal" (Bauleo y otros, 1975). Por lo maciones imaginarias que el grupo produce (Del Cueto y Fernán-=.,
I grupal se hacía referencia al pasaje de la mera agrupación a "la or- dez, 1985"..----..,
1 ganización de la estructura imaginaria mítica que determinará sus La rupalida también es conceptualizada en esta década como
movimientos" (ídem, pág. 25). Las conceptualizaciones de Lewin y el insti n e del ru o, sustentada por fantasías inconscientes,
/
46 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 47

acuerdos ideológicos y luchas por el poder (Saidón, en Barenblitt y múltiples. Hay un doble camino: el de la inscripción del grupo en
otros, 1983), lo específico del acontecer grupal (Del Cueto y Fernán- I institución y el de la producción de efectos singulares, específi-
dez, 1985) o como aquello que se trata de construir alrededor de la sen~eroRo.
red de relaciones que se establecen en un conjunto de personas Los _ u . ;>aparecen como "nudos constituidos or múlti les'
(Bauleo y otros, 1986 . hilos de>-- ldades disci linarias ue se enlazan en el. pensar lo
Los-di-spo;itivos grupales dquieren relevancia como a uello ue 0- rupal" (Fernández, A. M., 1989b, pág. 57) o como "proceso desen:-
sibili::a que o grupál se exprese. Se plantea el desafío de pensar en una adena~ por los cruces y anudarnientos deseantes entreIñiemb,ros
situación grupal que "no aplane las diferencias, niegue la singularidad ingulares" (De Brassi, 1990, pág. 83) o como "espacios tácticos
o reduzca la diversidad" (Percia, ~91, pág. 44).l-a p~eja de donde se da la producción de efectos singulares e inéditos" ~on ~na
ser la esencialista acerca de qué es un grupo y cuál es su unidad y se inscripción institucional real o imaginaria (Del Cueto y Fernández,
abre a las-úiferencias, a la diversidad, al "entrecruzamiento de 1985, pág. 16). - - - .
dis~~ades no sólo grupales, sino mstitücI nales, .stóricas Iso- Estos conceptos dé grupo como nudos, espacios, procesos, re-
ciales" i ídem . -- nuncian a la aprehensión de la totalidad del grupo, aceptan en cam-
Ana María Fernández (1989b, pág. 57) señala: bio que en cada acontecimiento grupal hay inscripciones múltiples,
hay acontecimientos que se cruzan y de los cuales no es posible dar
[...] la necesidad de pensarlo grupa como un ~ampo de problemáticas cuenta de forma total. Postulan un inacabamiento del grupo y del
a"travesado pormúltiples mSCripcio~: des~a- es, históricas, ins- conocimiento acerca de él. De allí que se renuncie al grupo como
titucionales, políticas, económicas, etc Lo grupal .n un doble movi- objeto discreto.
miento teórico: el trabajo sobre sus especifici ades y su articulación'\ Cabe, por último, aclarar qué nti nden estas autoras por dis osi-
con las múltiples inscripciones que lo atraviesan. Nueva manera de tivo grupal. ~e trata d~a yirtualidaI •"Dados un tiem_o, un espa-
pensar L()Uno y Lo Múltiple, intentando superar los encierros que la ' cio, un número de personas y algun obtej:ivo_c0.!!l~n, se crean las
lógica del objeto discreto impone, abriendo la reflexión hacia formas condiciones de posibilidad para que un agrupamiento se constituya
epistémicas, pluralistas, transdisciplinarias.
en un ~po" (ídem, pág. 18). Ellos conforman un dispositivo.'

Juan Carlos De Brassi se refiere a lo grupal "como un espacio


estructurante de lo social-histórico, condición inmanente de existen-
2. Los GRUPOS EN EL CAMPO PEDAGÓGICO. NUESTRO APO~TE
cia y razonabilidad de los grupos mismos" (De Brassi, 1990, pág. 83).
, Los grupos pasan de ser un objeto discreto a ser un am dJ 0-
Antes de plantear el aporte realizado desde nuestra producción
b]emáticas a estudiar; l-ª-pregunta acerca de qué es un gruPO se reem-
teórica queremos enunciar cuál ha sido la producción en el campo
plaza por la de q~ra~sa o a ' se nace necesario recurrir
pedagógico, el cual se ha caracterizado por conceptualizaciones
a distintas teorías y disciplinas: "nos orientamos ... acia los nudos
tendientes, en general, a buscar formas de transformación de la en-
prob emáficos caleidoscóplcamente atravesados por las múltiples ins-
señanza. Entre esas conceptualizaciones las siguientes son las que
cripciones que los constituyen" (Del Cueto y Fernández, 1985, pág.
consideramos de mayor interés.
13). De allí que en esta nueva postura teórica la preocupación pasa d~i
g~_ como objeto a lo grupal como campo ya a gru Dah~acrcom:o
• Durkheim realiza desde la sociología estudios dirigidos a la cla-
~s en Cl ad de as:on ecer grupal.
se escolar como pequeña sociedad.
La reconceptua izacion sur e como superación de formu-
• Parssons escribe desde la teoría funcionalista un análisis siste-
laciones anteriores. La transversalidad abre la posibilidad de pen-
mático de la clase escolar.
sar lo grupal como campo de atravesamientos e inscripciones
48 LAS FORMACIONES GRUPA LES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 49
• El movimiento conocido como "educación nueva", en la prime- • Desde la antropología se han realizado estudios etnográficos de
ra parte de nuestro siglo, produjo ideas pedagógicas originales la clase escolar en Inglaterra, los Estados Unidos, México, Chile
que intentaron innovaciones en la enseñanza, retornando algu- y,más próximamente, en la Argentina desde la teoría del interac-
nos principios enunciados por precursores como Rousseau, cionismo simbólico, la etnometodología, la psicología ecológica
Pestalozzi y Froebel. Tuvo dos corrientes paralelas en Europa y y el análisis del discurso en el aula.
Estados Unidos. Los principios de libertad, de colectividad, de • Algunos autores vinculados a las primeras experiencias gru·
actividad permitieron plantear propuestas pedagógicas dirigi- pales de Pichon Riviere hicieron aportes de interés a los grupos
das al trabajo colectivo, como el método de proyectos, el de en- de aprendizaje. Entre ellos: J. Bleger, A. Bauleo, C. de Lella, o.
señanza sintética, las técnicas F;teinet;al trabajo grupal, como el Menin, C. Zarzar Charur y R. Santoyo.
método de equipos, el Cousinet, el plan Jena; al trabajo social, • El análisis y la pedagogía institucionales aportan enfoques teó-
como la cooperativa escolar, la comunidad escolar, la asamblea, ricos propios, así como prácticas y dispositivos. Entre ellos se
etcétera. encuentran M. Lobrot, G. Lapassade, A. Vázquez y F. Oury, G.
• Las producciones provenientes de la psicología social y la Mendel, R. Loureau, J. Ardoino y otros, y en nuestro país, I.
dinámica de grupos aplicadas a la educación tienen su ex- Butelman y L. Fernández.
ponente en el libro La dinámica de grupo en la educación, de M. • Actualmente las corrientes neopiagetiana y neovigotskiana in- ;
Bany y L. Johnson. En él se organizan y sistematizan los co- vestigan acerca del conocimiento desde ~ectivas de inte-
nocimientos del grupo en su aplicación en la enseñanza. Sin racción social que, aunque no incluyen la dimensión grupal,
embargo, aunque algunas corrientes como la interaccionista generanestudios de interés respecto de lo sociocognitivo.
produjeron investigaciones y sistemas de clasificación pro-
pios de las situaciones didácticas, su utilización en la ense- Plantearemos ahora, dentro del marco de las corrientes teóricas
ñanza fue relativa. ya señaladas en el pensamiento de los grupos y lo grupal, nuestras
• La corriente de la pedagogía de los grupos tiene como exponen- contribuciones en este campo.
tes principales a G. Ferry, J. C. Filloux, E. L. Herbert, J. Maisson- En la producción anterior realizada por nosotros (en la década
neuve, A. de Peretti, Max Pages y otros. La producción de C. del setenta y parte de la del ochenta) sobre los grupos de apren-
Rogers se vincula a algunos de estos autores. Utiliza aportes teó- dizaje, comenzamos indagando qué son estos grupos y cuál es su
ricos de la psicosociología y del psicoanálisis y tiene una inten- especificidad. Así, conceptualizamos el grupo de aprendi~ie
ción de análisis de los grupos-clase. Otros autores, como M.
Gilly,M. Lobrot y M. Postic, se ocupan de las relaciones educati-
vas desde los mismos enfoques, complementando los estudios
-
como

[...] una estructura formada por personas que interactúan, en un espa-


de los grupos escolares. cio y tiempo común, para lograr ciertos y determinados aprendizajes
• En Estados Unidos, a partir de los estudios de Deutsch, autores en los individuos (alumnos), a través de su participación en el grupo.
como Johnson y otros han investigado experimentalmente acer- Dichos aprendizajes, que se expresan en los objetivos .del grupo, son
ca de las estructuras (competitiva, cooperativa, individualista) conocidos y sistemáticamente buscados por el grupo a través de la
en función de metas en situaciones de aprendizaje. interacción de sus miembros (Souto, 1987).
• En la didáctica, el tema de los grupos ha sido tomado fundamen-
talmente desde la perspectiva de las técnicas de la enseñanza. Se Buscando su especificidad hemos señalado como características _
han sistematizado y categorizado repertorios de técnicas gru- ~-ªresJos objetivQ§,Jªs técni<2.~sy
los medios, los contenidos, la_
pales para ser utilizados en ella. ~aluación, el rol del coordinador y posteriormente a~gamos las
50 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 51

confi raciones sub acentes es ecíficas y los roles diferenciados de determinar las invariantes, las formas de regulación interna. Una
docente Lde alumno. teoría de los grupos debería explicar, decíamos, la estructura, la di-
Diferenciamos, con fines de análisis, tres procesos básicos que en námica y las técnicas de operación.
él se integran: el de é!Rrendizaje, el d~enseña~~y el gmpaL Para explicar la estructura recurríamos a un modelo sistémico
por el cual concebíamos al grupo como sistema abierto en relación
1. Proceso de aprendizaje: el objeto a analizar es eumjet:Q (individual) con el exterior y formado por subsistemas en interrelación. Los
~e _aprende, modifica su personalidad, cambia su conducta de sistemas ue eXI2lic~ anización del_grn12o son el social, el
manera duradera, a través de la experiencia grupal. El aprendi- Rsí uico el instrumental. En cada uno de ellos señalábamos orga-
zaje incluye modificaciones de-las conductas social, afectiva, nizadores específicos: el ode en el primero, la de ende .a las
motriz y cognif a. ima os del maestro del saber vinculad la fantasmática de for-
2. Proceso de hseñanza: el objeto a analizar es el con· unto de situa- ~ación en e segundo, y la~ en el tercero.
ciones Qe enseñanza planificadas, royectadas, realizadas y eva- Sin embargo, ya en aquellas formulaciones, la idea de estructu-
luadas para quelos miembros del grupo apren ano ra utilizada para dar respuesta a la pregunta de qué es en esencia
3. Proceso Ciedinámica grup l: el objeto aanalizar es el.grupo en su un grupo no expresaba un concepto de totalidad cerrada. La utili-
4,evenir, desde que tiene su primer contacto o interacción hasta zación de un modelo dialéctico (Sartre) para explicar el movimien-
que se disuelve. to, el devenir, el proceso, aportaba la idea de una "totalidad en
curso", inacabada. La complementación de enfoques teóricos di-
. En el grupo de aprendizaje se produce la integración dinámica dia- versos (sociológico, psicosociológico, psicoanalítico y pedagógico),
léctica entre tres procesos de distinta índole: el proceso de aprendizaje en la explicación del grupo como sistema, abría a la transversalidad
individual que cada sujeto realiza, el proceso grupal que el conjunto de y a la multidimensionalidad. La relación grupo-institución evitaba!1
miembros construye, y el proceso de enseñanza de índole instrumen- una comprensión del grupo como isla. ~
tal. A través del aprendizaje grupal se produce la integración de los tres La aproximación a este campo desde la investigación, y no sólo
procesos: el grupo facilita (proceso grupal) que los alumnos aprendan desde la práctica profesional en coordinación de grupos o desde el
(proceso de aprendizaje) al compartir e interactuar en situaciones estudio teórico, nos ha planteado interrogante s válidos para una
estructuradas de enseñanza-aprendizaje (proceso de enseñanza) reconceptualización.
(Souto, 1987,pág. 44).
Al analizar, en la investigación, las clases escolares como grupos
de aprendizaje comprobamos que nuestras definiciones acerca del
I El a12rendizaje grupa "es un proceso de cambio conjunto, en el grupo y sus características no son aplicables a buena parte de los
que el_a0TIlgi?aj_ejnd~LduaLes una.resultante del interjueg diná- grupos-clase. Se planteó entonces si el ru o-clase es o no un _ru-
mico de los miembros, la tarea, las técnicas, los contenidos, etc. Tie- _po. Aquí aparecen puntos poco claros, en tanto en ellos se encuen-
ne lugar por la interacción, por la mediación del grupo y de cada tran sólo algunas características consideradas específicas.
miembro para el resto, por la comunicación intragrupal" (ibídem). El concepto resultaba demasiado cerrado, cosificante, terminan-
La preocupación por el grupo, su esencialidad, su especificidad y te: o bien la realidad escolar generaba peculiaridades de una espe-
diferenciación con el afuera eran claras. Nuestro pensamiento se di- cificidad tal que el grupo-clase debía ser excluido de los grupos de
rigía más hacia el grupo como objeto que hacia el campo de lo grupal. aprendizaje, o bien el concepto en sí mismo era de difícil aplicación,
Para estudiar los grupos diferenciábamos dos niveles: ~l feno- o bien el concepto incluía elementos que lo transformaban en un
ménico, que lleva a captar al grupo como Gestalt en transformación ideal o un modelo a alcanzar, que no reflejaba la multiplicidad de
1
~continua, y. el est uctural, que permite desentrañar las relaciones, singularidades que en los grupos podían suscitarse.
52 LAS FORMACIONES GRUPA LES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 53

Se evidenciaron discrepancias entre lo empírico real y lo teórico. o grupal surge cuando hay pluralidad de individuos en situa-
De allí derivó la necesidad de modificar las conceptualizaciones, de l' n de copresencia para algo. A ello hace alusión el concepto de
reconstruir el marco teórico de la investigación acerca de la clase ti lspositivo grupal, que podrá tener cantidad de variantes en fun-
escolar. el n de tipos de grupo, encuadre y artificios técnicos.
" Así, entendemos pGt.!gru;;oen primer término, una ers ecti- Lo grupal podrá tomar formas diversas desde agrupamientos
va de análisis de lassitúacíoaes d enseñanza-a¡;1rendi~aj~ y_de la más o menos efímeros y lábiles hasta grupos primarios muy con-
vida ~sc9lar ja.!. como surgen en instituciones específicas, y en se- lidados. -------------==
gundo término, aquel campo de interconexiones, de entrecru- Al~í aparece el(~12to ~ como posibilidad, como
zamientos de lo individual, lo iastitucíonal, lo social, etc., don e potencialidad de ser ru o. Podrá desarrollarse, crecer, paralizar-
surgen acontecimientos y proce~;S compartidos imagin';~ , tomar formas más o menos aberrantes. Es una dimensión con
reales, eE)entreSüjetos que persiguen objetivos comunes de ntido de temporalidad, de proceso, de camino o trayectoria que
aprendizaje. - I . puede llegar a niveles y grados muy diversos. No alude o se refiere
Dicho campo se caracteriza por una red de relaciones que se es-o una meta a alcanzar como ideal, ya que la _ru alidad está dentro
tablece en función de un saber que se busca incorporar, compartir. del juego dialéctico, del movimiento constante, de las ro resiones
Hay sujetos con deseos de saber. Hay reunión de personas con una y regre'slOnes propias de to o sistema comp ejo y,dinámico. No hay
finalidad, que da sentido a la reunión y crea la necesidad de una un estado ideal como punto inal de un progreso lineal. Hay una
tarea. Hay un espacio de formación en función de un saber que re- posibilidad de devenir, de construirse, de autoorganizarse abierta'
quiere de una organización instrumental. Está inscripto en una rea- ,\ y flexiblemente en esta diffieñ'Si6ñ- e ru~. -
lidad institucional: la escuela para los grupos-clase; el centro de Todo conjunto o encuentro entre rsonas tiene la posibilidad de
recreación, el club, la empresa, el centro cultural, etc., para otros ser, de devenir grupo; está ubicado en una dimensión potencial de
grupos. Los movimientos y tensiones grupo-institución otorgan grupalidad y la transita. Los sujetos (docente-coordinador, alum-
características peculiares a los grupos de aprendizaje. Lo grupal y nos-miembros) podrán tener mayor o menor conciencia de esta
lo institucional se vinculan e implican mutuamente. cualidad potencial y podrán favorecerla u obstruirla de distintas
Dentro del vasto campo de lo grupal surgen procesos grupales maneras.
eS~Q~Y- singulares que puedenrecorrer trayectos o hacer his': Así, podemos encontrar marcadas diferencias en el campo
torias más o menos prolongadas en el tiempo y. lograr grados y ti- grupal en las situaciones de enseñanza-aprendizaje. Desde aquellas
pos de gr~flliq9-9- muy djversos. A estos procesos grupales en las que cada individuo actúa desde su individualidad y es ape-
podemos aceptar llamarlos grupos' , . os~cos, pero pre- lado desde una propuesta de enseñanza en cuanto individuo solo
ferimos referimos a ellos como "ormaciones ru a1-e~ ya que a par- en una serie y no en ~uanto sujeto social, como persona con con-
tir de un dispositivo grupal, o sea un conjunto de personas, un ciencia, hasta otras en que lo grupal se constituye en preocupación
espacio y tiempo comunes, una meta u objetivo, una institución compartida y se lo construye desde los procesos de interacción en
convocante, se generan espacios de interacción, una red de relacio- redes de identificaciones mutuas, en entrelazamientos sociales, en
nes reales e imaginarias, significaciones compartidas, expectativas producciones colectivas.
mutuas, sentimientos grupales, sentidos de pertenencia que se en-
trelazan, dando un carácter de singularidad a cada grupo que va L Kaés (1977)habla de la "grupalidad del fantasma" haciendo referencia a la
cambiando, modificándose en el devenir y que, aun cuando presen- estructura grupal de los fantasmas originarios que soportan el vínculo y las posi-
ciones típicas de los grupos, Pero este sentido, así como el de grupalidad psíquica
ta rasgos de estereotipia y cristalización, está en proceso de forma- que desarrolla más tarde (Kaés, 1995), se refieren a la grupalidad inconsciente e
ción. intrasubjetiva.
54 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 55

En los análisis provenientes de la investigación hemos encontra- 11 na integración no reduccionista de las situaciones en estudio, per-
do clases con características de mero agrupamiento, con número m itiendo un análisis de entrecruzamientos desde lo individual, lo
variable de miembros, relativa presencia de objetivos en torno a un in titucional,lo ~~ental, etcétera.
interés común, poca participación y compromiso, escasa asunción En cuant didáctica operativ-ª,,..$efavorecen propuestas pedagó-
activa de lo común, etcétera. En ellos surgen algunas subunidades, gicas acordes con os sIgnificados encontrados en el análisis de las
como los subgrupos de compañeros o amigos que superan el agru- ituaciones, que operen desde lo grupal, faciliten el desarrollo de la
pamiento logrando la construcción de grupos primarios. Ryupalidad, a partir de crear dispositivos grupales adecuados. Desde
A través de la práctica profesional en grupos de formación, de t ta perspectiva, el nivel individual de aprendizaje queda incluido
entrenamiento, etc., se han observado grados de grupalidad que y'no reducido. Es desde el rol de coordinador docente que se facili-
superan el agrupamiento y que conforman configuraciones con tan los procesos grupales, la reflexión sobre lo social, lo grupal y lo
implicación socioafectiva, compromiso en la tarea y en la finalidad individual y la aproximación al saber, función central en estos gru-
común, y grados altos de cohesión e integración. pos. Dicho rol se complejiza, se despliega en calidad de experto en
En lo educativo, en sus prácticas, podríamos decir que JQ ontenidos disciplinares (materia) en su enseñanza y en procesos
gr 1 está ahí", tiene presencia, pero podrá tomar un carácter
11 grupales. .
más real o quedar como vi!tualidad en tanto la grupalidad pueda Los dispositivos grupales instrumentales, enmarcados en la con-
o no desarrollarse. ~ul2alidad o es una entelequia; es una epción pedagógica ya dada, son motivo central de indagación en
p.9sibiliclad, un~ potencialidad de todo encuentro human~í ste aspecto operativo de la didáctica grupal. Dichos dispositivos
surge la conceptualización de formaciones grupalee.Yere: siidesarro- no excluyen técnicas individuales ni colectivas sino que las inte-
110se requerirán condiciones de relación, movimientos adecuados, gran en estrategias complejas.
articulaciones entre lo grupal y lo institucional, por un lado, y con- Es de interés diferenciar la didáctica grupal de la que podemos
diciones más específicas, que quedarán afirmadas por la creación llamar didáctica en grupos. Esta última se refiere a una forma de tra-
de dispositivos grupales propios para estas situaciones de enseñan- bajo pedagógico basado en principios de actividad y participación
za-aprendizaje, por otro. del alumno en clase, que se organiza con metodologías y técnicas
Es aquí donde nace la necesidad de pensar y construir una di- de grupo, guiadas y dirigidas por el docente. Se trata de la utiliza-
Q!ctica de lo grup<ll,A!f~dola de otras modalidades. ción de técnicas grupales (mal llamadas dinámicas de grupo) en el
El término "'<li.dá0icagrl!.p..a13hacemención a un =enfoque ~ seno de un trabajo pedagógico con encuadre directivo tradicional.
dagógico,
~
a una concepción de enseñanza y de aprendizaje que Es en grupo y no grupal. Mucha de la producción didáctica se ubi-
va más allá de proponer metodologías específicas de trabajo en ca dentro de este tipo.'
grupo: Toma como objeto de estudio el acto pedagógico en sentido Por último, cabe agregar un tercer tipo: el delfls didácticas no
abstracto, las situaciones de enseñanza-aprendizaje en sentido con- gru~es. En ellas se incluyen todas las propuestas que no toman
creto, propone el ámbito grupal para focalizar y el nivel grupal para como factor de interés las interacciones, sino que operan en un ni-
estudiar dichas situaciones, complementándolo con otros niveles y
ámbitos ya señalados. Considera su objeto desde la complejidad y
lo analiza multidimensional y dialécticamente; para ello recurre a 2. J.C Filloux (1969-1970) propone los términos de "pedagogía de grupos o por
disciplinas y enfoques teóricos diversos. El aprendizaje y la ense- grupos" y "pedagogía centrada sobre el grupo". En la primera, el.trabajo escolar
ñanza se conciben como procesos diferenciados, dialécticos y en está organizado en pequeños grupos dentro de una estructura guIada por el do-
cente. En la segunda, el docente conduce el trabajo escolar de la clase como colec-
interrelació~
tivo, tomando el rol de facilitador y elucidador de problemas técnicos o afectivos
En cuant&diQáctica analffi.e1.,es desde lo grupal que se facilita
------- en el grupo.
56 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 57

vel individual, desatendiendo el carácter grupal del conjunto hu- De este juego salimos al producir las conceptualizaciones que
mano que constituye una clase." llevaron del grupo como objeto discreto al campo de lo grupal y de
En nuestras primeras presentaciones empleamos el concepto la grupalidad, y de las configuraciones de antigrupo a las formacio-
de antigrupo para hacer referencia a configuraciones específicas de nes grupales que permiten" comprender" sin riesgo de reducir,
car-ácter aberrante, perturbaciones en la dinámica del grupo, con- valorar a priori, excluir.
flictos no resueltos, enquistamientos estereotipados que provocan
el estancamiento del grupo, la cristalización en un estado inmo-
dificable dificultando el logro de las metas y aun la sustitución de . Lo GRUPAL, LO INSTITUCIONAL, LO SUBJETIVO
los objetivos explícitos por otros. Se producen estados de parali-
zación en la dinámica que obstruyen la construcción del grupo Nos referimos aquí específicamente a las relaciones de los cam-
transformándolo en objeto totalizado, acabado, cosificado, en lu- pos de lo grupal, lo institucional y lo subjetivo. Al hablar de ellos
gar de permitir los procesos de "totalización en curso" (Sartre). La omo campos de problemáticas con atravesamientos múltiples y
burocratización del grupo se manifiesta por una estereotipia en la diversos (deseantes, sociales, ideológicos, etc.) se plantea una cues-
interacción que se fija de manera estable provocando una inmo- tión de interés teórico con respecto a la diferenciación entre ellos.
vilización, un bloqueo, un clivaje que impide el interjuego dialéc- Nos preguntamos: lo grupal, en cuanto campo con atravesamientos
tico. múltiples, ¿tiene límite? ¿Es lícito hablar de una diferencia entre lo
Desde el concepto de formaciones grupales, esta noción ha cam- grupal y otros campos, por lo tanto, entre lo grupal, lo institucional y lo
biado. En ellas, lo antigrupal adquiere el significado de perturba- ubjetivo? Lo institucional ¿se transforma en texto de lo grupal?, ¿es un
dor del desarrollo de la grupalidad y puede dar lugar a ciertas adentro?, ¿se incluye? Lo grupal ¿es constituyente de lo institucional?
formaciones específicas que pueden ser estudiadas en su especifi- ¿Qué tipo de relaciones hay? Lo subjetivo ¿es diferenciable de lo grupal?
cidad. En el término" antigrupo" fuimos descubriendo un sentido ¿Cómo se construye si no es desde lo social, lo grupal, lo institucional?
fuerte, estructuralista, no advertido inicialmente: las configuracio- Aquí creemos que surge una cuestión de interés: la relación en-
nes de antigrupo se oponen a qué, a quién. Quién define "el grupo tre objetos, unidades, desde otra perspectiva epistemológica
escolar", quién" el antigrupo". La diferenciación de las culturas ofi- preocupada por la delimitación del objeto discreto y las de la com-
cial y no oficial internas a las clases nos llevaron a abandonar el plejidad y la transversalidad que parecerían borrar los bordes y lí-
nombre y a modificar el concepto. Si antigrupo es lo que se opone a mites entre ellos, desde el enfoque epistemológico aquí adoptado.
los objetivos del grupo o los obstruye, es también lo que se opone a Lo institucional, lo ru al lo sub'etivo ueden ser ensados
la cultura oficial desde la que se definen e instituyen los objetivos; omo campos de p.!obkmªticas con atravesamientos múlti les,
pero la cultura oficial suele atentar y hasta destruir el desarrollo de am os do - están incluidos los si .. cados las inscripciones
la grupalidad y la expresión de lo grupal, utilizando sólo el nom- provenientes de las formaciones eS,12ecíficasa cada uno de ellos. ,
bre de grupo (nominalismo) dentro de una lógica individualista Aludirían a tramas de relaciones pero también a formaciones pecu-)
propia de los encuadres y dispositivos de la enseñanza. Se corría el liares que se conforman en localizaciones espacio-temporales y en
riesgo de quedar encerrados en una circularidad donde terminaría- f rmas organizativas diversas.
mos confirmando nuestra hipótesis anterior al encontrar que las Si sólo pensamos estos campos como atravesamientos parecería
configuraciones grupales en las clases son casi siempre de anti- no justificarse la diferenciación, pero si lo hacemos desde el concep-
grupo y, por ello, de valor antipedagógico. t de formaciones específicas en ellos, adquiere mayor sentido.
En el caso de la escuela, lo institucional sur e desde la organi-
3. Estos conceptos han sido desarrollados en Souto (1993), z ción específica los intercambios desde lo funcional, lo simbó-
LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 59
58 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA

lico y lo imaginario; lo grupallo hace desde formaciones y confi- '11 uno u otro campo; el despliegue en abanico de múltiples sentí-
uraciones que se c~nstituyen a _P-ill'tirde la interacOón y SuS ~e- i acerca de un rasgo encontrado; la oposición o contracara que
S

presentaciones: lo ,sub'etivQ, desde ,Sonstrucciones propias de dría entenderse como positividad y negatividad en cada uno de
cada sujeto que, al participar en espacios compartidos, g~n l S espacios; la articulación en redes complejas.
vínculos formales y fantaseados que contribuyen a generar for- Entre lo grupal, lo institucional y lo subjetivo hemos encontra-
maciones a la vez que constituyen modificaciones en el sujeto, Allí o líneas de conver encia de diver encia, no de causalidad. Las
apar~e el valor formativo de la vida grupal e institucional para rclacíóñés no son unívocas, como tampoco lo son los significados.
el sujeto. Los tres campos son objeto de atravesamientos diversos. . e trata de una realidad compleja que ha sido estudiada desde la
Cuatro conceptos explican la potencialidad de cambio: lo insti- / rticulación de los campos. Ellos remiten en nuestro caso, por un
tu ente, la ru alidad, la educahilidad y la formación corno pro- lado, a referentes más objetivables: el sujeto, la clase y la escuela
ceso personal. - - (como organización y establecimiento). Pero no se agotan en ellos.
La conceptualización sociológica de institución como norma, on campos, entonces, que pueden diferenciarse conceptualmente
regularidad social, sistema jurídico, de reglas, así como la psico- pero que se implican uno en otro.
analítica, que la define como orden estructurante del inconsciente La conceptualización de formaciones grupales, tal como la ha-
instituido, no serán tomadas específicamente en este trabajo. Sin remos aquí, se refiere a esta relación entre campos. Son compren-
embargo, las dimensiones de lo social y de lo psíquico inconsciente didas justamente como surgiendo y formándose continuamente
a que ellas remiten se incluyen como constituyentes de los campos n un espacio transicional (Winnicott, 1986), en una zona con lí-
institucional y grupal. mites borrosos entre los sujetos y la institución escolar, entre lo
El concepto de trama institucional puede sernos útil: es el tejido ubjetivo y lo institucional. Es allí donde lo grupal toma su lugar
que se construye a partir del entrecruzamiento de hilos, de líneas de intermediación, de transición, y genera las formaciones
que forman "la tela", "la novela", "el drama" de una institución en grupales específicas.
cuanto conjunto organizado de personas con una localización espa-
cio-temporal que persiguen fines comunes. La trama institucional
hace alusión a un microtejido que se construye desde las interac- 4. LA NOCIÓN DE FORMACIONES GRUPALES

ciones de los sujetos, en niveles conscientes e inconscientes.


) Lo institucio!1í!l,JQ grupal y lo subjetivo se atraviesan. Así, en Las formaciones gru12a~s se producen dinámicamente en el
el grupo encontramos inscripciones institucionales y subjetivas, campo de lo -gmpar y adoptan rasgos peculiares de acuerdo con
en el sujeto, institucionales y grupales, y en la institución, subjeti- aracterísticas propias de la institución escolar y de los sujetos que
vas y grupales. No se reducen unas a otras. Hacen a lo heterogé- n ella participan. Son construcciones ~UJ _en en un es acio·

neo y múltiple de los campos. . transicional de intermea1a0ón entre su' etos e institució
Nuestra forma de conceptualizar la relació no es desde contex- Dichas formaciones tienen una expresión propia que debe ser
tos delimitados, representables como círculos concéntricos. Se tra- studiada desde el ámbito ru al, aunque pueden también ser vis-
ta de transv-ersalidad y de entrecruzamiento. tas desde su vertiente in~id!!.al o_institucional. En ellas se operan .
Las formas de relación entre sig-nificados hallados son diversas: procesos sociales y psíquicos de ligazón entre los miembros y entre.
la simetría dada en significados reiterados en uno y otro campo; la ellos y la institución. Los sujetos participan de ella mediados por
complementariedad y asimetría de sentidos diversos que conser- estas construcciones compartidas las que, simultáneamente, permi-
van su especificidad pero dentro de un conjunto que funciona ten la continuidad en el tiempo de los rasgos idiosincrásicos de la
como unidad; la bifurcación de significados en líneas diversas, sea escuela.
60 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 61

Lo grupal aparece como un espacio de transición y también de la madre pero aún más importante que este valor simbólico lo es su
transacción entre unos y otros. Las formaciones podrían tener una ~isma real~dad que da lugar a la capacidad para aceptar diferen-
*' :h _ ••••

v~~d in mita ,en tanto surgen como creaciones en un es acio eras ~ semejanzas. Es una posesión para el bebé, no es objeto inter-
indeterminado que seda entre os sujet~ necesidades, deseos, no ru externo, aunque representa a ambos estableciendo una
fantasías, temores: expectativas conscientes de. pertenencia y aque- relación entre ellos.'
lla~.,características de la escuela en tanto organización singular que El espacio transicional es una matriz relacional que se difunde a
tienden a perdurar como propias: su historia, su cultura, su esti o la vida adulta y a los espacios donde el juego y la creatividad son
p~g§gic~, su identi?ad. _ ..,
La tesis que sostenemos reconoce antecedentes en los aportes de
-- I
posibles y, por ello, a la cultura.
Pero falta aún señalar un componente central de su teoría: la
dos psico nalistas: Winnicott y Kaés, y en sus conceptualizaciones p.aradoja. El espaci? transic~onal y la creación y uso del objeto en-
de espacio transicional y de lo intermediario, respectivamente. c~erran una paradoja: ¿el objeto fue dado o creado por el niño, "[conce-
Winnicott en su libro Realidad y juego plantea que la experiencia bzste esto o te fue presentado desde afuera?". La paradoja debe subsistir,
cultural no ha encontrado en los desarrollos de la teoría psicoanalí- en ella se encierra el misterio de las relaciones, se sostiene la ilusión, se deja
tica su verdadero lugar. Los filósofos han hablado de ella como lugar para el juego y la imaginación: en fin, opera la transición.
zona intermedia pero no los psicoanalistas. Sitúa el estudio de los . , Comprender la relación entre el sujeto individual y la institu-
fenómenos transicionales en la esfera de "la magia de la vida crea- cion, ~ntr~ lo .~e adentro y.lo de afuera en el sujeto, en el grupo,
en la institución, en la SOCiedad, requiere de la nueva forma de

¡
dora e imaginativa". Se trata de fenómenos de carácter universal y
quetienen una variedad infinita. Dice Winnicott: "lo que importal mirar que el concepto de fenómenos transicionales aporta. Esta
es que cuando se tiene a mano una teoría sobre los fenómenos nueva mirada facilita la formulación de la noción de formación
transicionales es posible mirar con ojos nuevos muchos problemas grupal.
Lantiguos"(Winnicott, 1986, pág. 18; la bastardilla es nuestra). Tal vez Los sujetos, por pertenecer a instituciones, necesitan espacios
estribe aquí la importancia que hemos dad'o a lo transicional al ela- t~ansicionales ue ermitan la experiencia.de-uniÓU=.sepa14~lGR¡..la
borar nuestras conceptualizaciones de las formaciones grupales. ,hgazón,.Ja rela('~l sostén, sin prencuparse por las delimitacio-
Winnicott ha definido en su teoría al es acio transicional como nes de ?o individual y 10_ soci~0Jn_preguntarse qué arte de las
zona intermedia.deexperiencia, entre el --º- el "no- o", entre el niño y formaciones que generen en su asociación con otros es del.sujeto,
la madre, entre lo interno ~y_loexterno, A esta zona intermedia de qué es de los otros, ué de la escuela. Hay allí una zona intermedia
experiencia contribuyen tanto la realidad interior como la exterior. de experiencia que cumple funciones- transicionales y facilita la re-
Aunque la analiza en la evolución del niño en los primeros meses. la~ión sujeto-institución. Esa zona aporta seguridad, apuntala al
de vida, Winnicott dice que él estudia "la sustancia misma de la ilu- sujeto en su psiquismo individual, da permanencia, provee un
sión, lo que se permite al niño y lo que en la vida adulta es inheren- mbiente emocional que acompaña. En ella aparecen como fenó-
te del arte y la religión" (Winnicott, 1986, pág 18). Estudia "la zona menos trasicionales las formaciones grupales.
intermedia entre lo subjetivo y lo que se percibe en forma objetiva" Hay un espacio potencial donde las formaciones surgen. Espacio
(pág. 19). Esta zona, señala, "es una raíz natural del agrupamiento en- ntre el sujeto individual y la institución en su funcionamiento y es-
tre los seres vivos" (pág. 19; la bastardilla es nuestra). En ella se dan
(\los fmómenos transicionale~ qu_eson formaciones de pensamientos, [an-
4. Winnicott habla de pasajes, de procesos, de viajes de lo subjetivo a la objetividad y
\1 tasías: ~reaciones ue aC01!!pañana las experiencias funcío_nalf!..s.El oOJeto
I'0r ello de progreso hacia la experiencta. Su expresión siempre elige el gerundio
iransicional surge en el trabajo gradual que va de la ilusión inicial a Illaymg, being para denotar el proceso y no el estado, la capacidad imaginativa y
la desilusión necesaria en la separación bebé-madre. Representa a 11 I objeto imaginado.
62 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 63
~ .. -'

tructura, entre el interior de cada uno y el exterior, entre uno y f rmaciones iníersubjetiizas Hace puente en: re un pensamiento y
otros, entre lo uno y lo múltiple. Espacio de experiencias donde es tr~tre una representación y otra. Tiene un carácter de doble faz
posible introducir cambios, pensamientos, creaciones, nuevas que permite ser mirado desde un lado o desde otro, que pueden
ideas, experiencias educativas y culturales, siempre que se lo res- xpresar presencias y ausencias. Es también una formación de com-
pete Ein su transicionalidad e "informidad" y no se lo quiera promiso, de carácter sintomático que permite expresar sentidos
transformar en posesión de uno sobre otros. Espacio potencial para la ocultos o pensamientos inconscientes, entre elementos contradicto-
formación del sujeto, en especial para su formación social y para rios, paradójicos.
la formación de la cultura institucional. Lo intermediario, <!Lestar entre, partici a de la diversidad de los
La experiencia cultural surge ~n el espacio transicional, poten- co~untos que articula toma si ni lcados de ambosEJ2resentan-
cial, intermediario entre el sujeto y el ambiente. Es una tercera zona do en cada uno al otrQ, siil identificarse con él. Por eso lo interme-
distinta de la realidad psíquica interna y del mundo real. diario crea nuevos sentidos.
Es en este espacio de transición donde postulamos la existencia Dice Kaés, reelaborando el uso del sentido de intermediario en
de las formaciones grupales. Freud: "¿Es porque se trata de un ser de crisis y de ruptura, que el
ser humano es un ser de palabra y de cultura, un creador de inter-
. K~ por su parte, plantea la categoría de lo intermediario si mediarios?" .
ella ~de ayudar en la articulació psico acial. Intermediario es 1Q. Lo intermediario establece vínculo y articulación, continuidad
que Etá en medio, en!~f:.:Medio entre espacios, tiempos, unidades, en lo discontinuo, acepta la ambivalencia, crea, transforma, agru-
etcétera. Kaés señala tres caracteres atribuidos a lo intermediario, pa. Por ello nuestro interés en esta noción para dar cuenta de
de los cuales nos interesa puntualizar dos. aquello que en la formación grupal nos interesa: ser una formación
en formación continua que liga, articula entre lo social, lo institucional,
• Como una1JA.n~¡6n de lo articular, que se da en un campo discon- lo subjetivo.
tinuo en el ~seI'éITaClOn de eleméntos. Como dice Kaés Kaés plantea la función de intermediación del grupo. En el grupo
esta característica tiene un valor heurística y puede ser utilizada "los sujetos son por una parte constituidos como sujetos del inconsciente
en situaciones de crisis y ruptura donde las articulaciones se y, por otra parte, son constituyentes de la realidad psíquica que allí se
quiebran, . _-- produce" (Kaés, 1995, pág. 19). Uno de los significados que atribuye
• Como génesis, movimiento, transformació , que permitirá dar al grupo se refiere a una organización de vínculos intersubjet~vos en la
cuenta del origen y del proceso de pasaje y transformación. que los sujetos producen formaciones y procesos psíquicos específicos, que
se manifiestan en grupos empíricos que forman, a su vez, el marco de
La función de articulación puede darse en distintos tipos de con- las relaciones intersubjetivas organizadas socialmente.
juntos heterogéneos u homogéneos, dentro de un mismo conjunto El grupo externo brinda al sujeto una función de apuntala-
o sistema o entre distintos sistemas, etcétera. Es una noción que va miento de lo intersubjetivo a la realidad psíquica individual,
más allá de una lógica de pensamiento estructural, de una lógica de mantiene un entorno psíquico de conjunto que beneficia a los in-
objeto discreto, ya que plantea justamente la conexión, el puente entre dividuos. Al mismo tiempo, el grupo recibe de la psique de los su-
lo diferente, lo distinto. En este sentido es asimilable a una perspecti- jetos sus representaciones psíquicas como grupo interno, sus
va epistemológica que intenta captar lo grupal en su complejidad y investiduras, proyecciones, depósitos. El grupo los capta, los utili-
no en su reducción. za, los transforma. Surge así otro nivel en el abordaje psicoanalítico
Lo intermediario ermite pensar el pasa 'e de una significación a del grupo: el de las formaciones psíquicas comunes a los sujetos. Kaés .
tra, de una formación a otra en el si uis~ indivi u~l y en las se refiere a ellas como formaciones intermediarias, bifaces, regidas por
64 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA LO GRUPAL y LAS FORMACIONES GRUPALES 65

dos espacios conjuntos. Ellas "aseguran las mediaciones entre los es- !,\ I n señaló la necesidad de incluir el análisis de lo grupal en el
pacios intrapsíquicos, intersubjetivos y transubjetivos, constituyen 1rubajo institucional. Scherzer planteó que todo análisis del objeto
puntos de anudamiento del sujeto y del conjunto, el vínculo de f'tlllp debe incluirse en la dimensión institucional. En 1983, habla
sujetamiento del sujeto del grupo" (ídem, pág. 278). ,l. rmaciones grupales haciendo referencia a aquello que el gru-
El concepto de formación intermediaria describe "funciones de repre- IH Ira en su funcionamiento.
1sentación, de delegación y de mediación"(ídem, pág. 138) que cumplen /\..M. Fernández y A. M. del Cueto (1985) plantean las íormacío-
tanto los sujetos individuales como las formaciones psíquicas con 1\1 ¡maginarias grupales aludiendo a los procesos imaginarios que
soporte en un conjunto de sujetos. Suponen a su vez objetos interme- f II1 grupo produce; entienden que no hay grupo sin formaciones ima-
diarios que aseguran funciones ae ligazón, de transicionalidad o de /', n.irias estrictamente grupales. Analizan SUatro formaciones: la red
simbolización, y procesos intermediarios movilizados en las repre- d., Id ntificaciones cruzadas, la ilusión grupal, el mito grupal y la
sentaciones metafóricas del conjunto y sus elementos. 11/ t itución como disparador del imaginario grupal.

\ Por último, quisiéramos marcar que ei concepto de intermediario /\.. M. Fernández....pregunta en "De lo imaginario social a 10
\P..frmite también comprender la transmisión cultural como acto de tra!1s- 1111 \ inario grupal": "¿ Qué mantiene unida a una sociedad ~ el _
t!!it.ir. En ese acto, lo intermediario juega también una función en I 1111'\ de la subjetivida ea ec lVaT'~ ernanaez y Dé Brassi, 1993,
tanto permite hacer puente entre lo pasado y lo presente, estable- 11 I~, 69). Y responde que la consolidación y la reproducción de sus
cer la cadena mediante eslabones que se articulan para que el suje- I'I\I 1ucciones de sentido, es decir, su imaginario social. Esto plan-
to pueda ser sujeto para sí mismo y eslabón de la cadena ~n la 1, I U vez la cuestión de la génesis, de la creación de nuevos sen-
herencia cultural. I dn, . La .§.ociedad no se agota en la reproducción; e~enerado@.rf
Las formaciones grupales son intermediarias; cumplen la fun- ,1" ntido y por ello se transforma. Es la capacidad imaginante ~a
ción de articulación y puente entre la institución y los sujetos, entre '1lfl' da ugar a nuevos sentidos como construcción en la histona
la historia y el porvenir y, al mismo tiempo, se producen a partir de dp I ociedad y de las instituciones. Un grupo tiene también la ~a-
formaciones intermediarias. Al desarrollar cada formación grupal flllt'irlad de crear significaciones propias además de inscribirse en las Sl~.-
iremos mostrando su lugar de intermediario. /l1/it(1 iones ya existentes en la institución y en la sociedad. "Podría
Nuestras conceptualizaciones reconocen también como antece- d. clr e que un ru o se instituye como tal cuando ha inventado sus
dentes los aportes del análisis institucional y de la corriente de lo ISlIificaciones imaginarias:.' í em, pág. 82; la bastardilla es nues-
grupal que han marcado la relación entre grupo e institución. Ellas 11 1),
'v plantean esa relación desde una mirada más social. I producción de sentido se realiza en los espacios donde es
La noción de contrainstitución de Bauleo llevó a poner en le imaginar, pensar, crear. Las instituciones educativas son
oposición y conjunción dialéctica las dos nociones al decir que el • 1\' \ oras de sentido a la vez que en ellas se inscriben sentidos
grupo puede actuar contrainstitucionalmente replanteando sus lit i les propios del momento histórico de su creación, de
normas y provocando cambios. Loureau planteó los "grupos de dI' Idos políticos, que se conjugan con el imaginario de un gru-
interferencia", cuya característica es estar en el entrecruzamiento y 1'11 que da lugar a que ese sentido social se concrete en un pra-
devenir de otros grupos anteriores, actuales o posteriores, recha- I \'l institucional. Esos sentidos de la génesis institucionallaten
zando las fronteras y el encierro del grupo en sí mismo. Lapassade ,'1\ 1, trama que la institución construye, y se transforman o se com-
estudió las relaciones entre institución, organizaciones y grupos, I''''m ntan con otros sentidos que en el transcurso de la historia se
postulando que "el sentido de lo que ocurre en un grupo aquí y 111\ reando y conjugando. La historia institucional es una articu-
ahora en este grupo tiene estrecha relación con el conjunto del te- 111' n de sentidos producidos y una producción constante de nue-
jido institucional de nuestra sociedad" (Lapassade, 1977, pág. 16). II , ntidos.
66 LAS FORMACIONES GRUPALES EN LA ESCUELA

Las formaciones grupales cumplen un papel importante en esta


red y en la cadena de retransmisión de la cultura institucional ase-
gurando que las nuevas generaciones de alumnos aprendan lo
idiosincrásico de la escuela en procesos activos de transformación
que tienen lugar en ellas. Allí aparecen las formaciones específicas .
que toman el lugar de intermediarias, las cuales:

• constituyen eslabones en la cadena de la herencia cultural de la


escuela resguardando la historia y la identidad institucional;
• son creadoras y productoras de nuevos sentidos, en tanto utili-
zan su capacidad imaginativa, y reproductoras de aquellos sen-
tidos que definen la cultura institucional;
• hacen de puente y articulador entre los sujetos y la institución y
entre culturas institucionales distintas;
• ofrecen un espacio transicional para que la experiencia de
unión-separación se lleve a cabo, para que los aprendizajes y las
representaciones simbólicas e imaginarias se realicen;
• permiten la circulación fantasmática y los intercambios simbóli-
cos;
• ofrecen formas diversas de satisfacción a los sujetos dentro de
guiones posibles para esa institución.

Son intermediarias entre la historia institucional, el presente y


,el proyecto futuro; la organización social, institucional y el sujeto; el
imaginario social, institucional e individual; lo funcional, lo simbó-
lico y lo imaginario; el adentro y el afuera; lo consciente y lo incons-
ciente.
Sobre la base de estas ideas hemos elaborado nuestra noción de
formación grupal. Tal como ya hemos señalado en los capítulos
destinados al enfoque epistemológico, nuestro abordaje dará cuen-
ta de la complejidad de lo grupal y sus formaciones desde la
multirreferencialidad teórica.

También podría gustarte