Está en la página 1de 1

Adultez emergente en la Comunidad Rover San Ignacio de Loyola

Dentro de la comunidad Rover San Ignacio de Loyola, en la que estoy trabajando actualmente,
contamos con 24 rover afiliados, de los cuales tenemos una asistencia fija de 12 sábado a sábado,
debido a esto es que tenemos tanta diversidad de pensamientos.

Algo que noto es como los Rover van madurando y cambiando su forma de pensar.

En su mayoría cuando recién comienzan su etapa en la rama tiene un pensamiento más dualista,
pero a su vez, les cuesta más expresarlo frente a sus compañeros, pasan de ser los más grandes de
la rama, a ser los más chicos, y en una rama con un año más, que, si bien no es mucho, la madurez
de un rover de 17 con uno de 21 es realmente notable.

En la actualidad, la rama tiene un pensamiento dialectico, las actividades las planteamos entre
todos, y se realizan puestas en común para decidir cuales realizamos y cuando. De esta forma nos
aseguramos de saber los puntos de vista que tiene cada uno, y en muchos casos salen debates
muy interesantes. Siempre tratamos de resaltar la importancia de la diversidad de pensamientos,
esto para hacer que sean más comprensivos, con la realidad del compañero de al lado, que no
siempre es igual o siquiera similar a la que tiene uno.

Esto genera en muchos casos un cambio en el pensamiento de los chicos.

Una actividad interesante que nos trajo buenos resultados, fue plantearles diferentes preguntas, o
actividades, y que ellos las resuelvan solos, es decir sin los dirigentes, muchas veces al estar
nosotros se inhiben o les cuesta expresarse. De esta manera podemos saber de primera mano
cuales son las actividades que más les gusta realizar, o las que no, el por qué creen que estamos
teniendo bajas y cómo podemos hacer para recuperar a miembros que están faltando, les
aclaramos que nos interesan las respuestas y no quien fue el que lo dijo, de esta forma desde el
anonimato sacamos muy buenos resultados, ya que se animan a expresarse.

También podría gustarte