Formas y líneas para guiar al usuario

Cuando centramos nuestra atención en una forma lo primero que hacemos de manera in-
consciente es asociarla a algo que nosotros conocemos. Reconocer líneas y formas es una
herramienta con la que contamos desde que nacemos y que vamos mejorando con el tiem-
po y la práctica.
Cuando miramos una imagen buscamos patrones y formas básicas. Somos capaces de re-
conocer formas incompletas aunque tengamos muy poca información. Es decir “completa-
mos las formas extrañas”
Cuando no tenemos toda la información, rellenamos los huecos vacíos.

En esta imagen falta mucha información visual y sin embargo reconocemos elementos
como, una rueda, una copa, unos árboles, una flecha, una casa o un sobre.

Vemos unas líneas y les asignamos un significado.

El éxito comunicativo de nuestra composición radica en lo sencillo que puede ser transmitir
el mensaje con un mínimo de información.

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En este ejemplo somos capaces de escribir completamente los titulares de los carteles aun-
que no los estemos viendo al completo. Este es otro ejemplo más de como las formas y las
líneas nos ayudan a completar el mensaje guiándonos. Además la elección tipográfica ayu-
da mucho a la legibilidad del mensaje. Es muy sencillo intuir las partes de las letras que no
vemos.

Anteriormente decíamos que al mirar una imagen la analizamos e intentamos reconocer

formas básicas y formas reconocibles. En ocasiones, la comunicación visual juega con ello
para plantearnos retos visuales.

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En la imagen superior vemos una letra A, la reconozcamos mejor o peor al principio siempre
terminamos unificando la información, la completamos y le damos significado sea el
correcto o no lo sea.

A partir de estas peculiaridades que tenemos a la hora de reconocer la información visual

también podemos jugar con el receptor a la hora de transmitir un mensaje. Por ejemplo si no
tenemos toda la información visual nuestra mente trabaja para completar esta información.

En este cartel publicitario no es necesaria la presencia de una bombilla para que tla imagi-
nemos. Los receptores completamos la imagen con información que no tenemos a través de
las formas y las líneas imaginarias que vemos.

Podemos aprovechar estas cualidades de nuestro sistema de reconocimiento para crear

ilusiones ópticas que crean un gran impacto a nivel visual y generan atracción al receptor
del mensaje.

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A veces las formas son las líneas no son reconocibles ni están incluidas de forma explícita
en la imagen porque realmente no forman parte del juego de la imagen sino que son más
bien el hilo conductor de la composición.

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La línea diagonal imaginaria es lo que consigue aportar fuerza y dinamismo a la composi-
ción y además guían la vista de la persona que está viendo este cartel. Generalmente las lí-
neas diagonales o las composiciones en cruz se emplean para aportar mucho dinamismo y
para darle además cierto toque dramático y de acción a la composición.

En estas composiciones fotográficas de una serie de Tv muy conocida podemos reconocer

formas básicas y líneas

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En la composición de la izquierda podemos definir claramente una línea horizontal, donde
todos los protagonistas cobran un mismo peso, tienen la misma relevancia. En la imagen de
la derecha la composición es bien diferente. Podríamos ir un poco más allá y pensar que en
esta segunda composición es mucho más rica a nivel de significado, aunque no se conocie-
ra nada de la trama de la serie, está composición pone de manifiesto la gran diferencia en
peso argumental que tenían unos personajes frente a otros.

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Queda claro que el uso de líneas y formas otorgan mucho valor a la composición.

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En este otro ejemplo estamos empleando simplemente formas geométricas básicas para
darle a la persona que está viendo esta imagen la idea de un atardecer.
Formas básicas para crear una imagen que a priori pensamos que no podría ser posible
empleando solo formas rectangulares y circulares. Es un ejemplo muy explícito del uso de
formas y líneas en una composición.

Líneas como elemento separador y de jerarquía

Por otra parte, las líneas son un elemento que generalmente se emplea para definir seccio-
nes y diferentes jerarquías. Es muy común el uso de líneas en el diseño aplicado por ejem-
plo al mundo de la restauración dónde. podemos ver líneas de diferente grosor para marcar
diferentes grados de importancia entre los diferentes elementos presentes. Usar siempre
mismo tipo de trazo y mismo grosor haría perder sentido estético y también haría perder di-
namismo a toda la composición en general.

Resumiendo el uso de formas y líneas nos permiten aportar direccionalidad y sentido a una
composición, nos permiten darle un sentimiento, una emotividad y además nos permiten es-
tablecer jerarquías todo esto además tanto de forma explícita o implícita.
No tengas miedo a la hora de experimentar con el uso de formas básicas y líneas no hay
una fórmula mágica que dictamine es lo que está bien y qué es lo que está mal pero ten
todo esto en cuenta a la hora de preparar tus diseños.