0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
4 vistas1 página
El documento describe las épocas de adoración según el libro de Números. Señala que la adoración es esencial en la relación entre el hombre y Dios. Luego detalla las ofrendas diarias que incluían dos corderos sin tacha cada mañana y tarde, acompañados de cereal y vino. También habla de las ofrendas sabáticas, que eran dobles en el día de reposo para enfatizar la necesidad de adoración adicional en ese día santo. Finalmente, sugiere que aunque las leyes puedan parecer
El documento describe las épocas de adoración según el libro de Números. Señala que la adoración es esencial en la relación entre el hombre y Dios. Luego detalla las ofrendas diarias que incluían dos corderos sin tacha cada mañana y tarde, acompañados de cereal y vino. También habla de las ofrendas sabáticas, que eran dobles en el día de reposo para enfatizar la necesidad de adoración adicional en ese día santo. Finalmente, sugiere que aunque las leyes puedan parecer
El documento describe las épocas de adoración según el libro de Números. Señala que la adoración es esencial en la relación entre el hombre y Dios. Luego detalla las ofrendas diarias que incluían dos corderos sin tacha cada mañana y tarde, acompañados de cereal y vino. También habla de las ofrendas sabáticas, que eran dobles en el día de reposo para enfatizar la necesidad de adoración adicional en ese día santo. Finalmente, sugiere que aunque las leyes puedan parecer
La adoración es una parte esencial de las relaciones del hombre con Dios. Esto había sido señalado antes, pero había habido un lapso en el modo de adoración en el desierto. Ahora había necesidad de recordar a la gente lo que se esperaba de ellos. De modo que habló Jehová a Moisés (1) que mandara a Israel que cumpliera con la ofrenda debida, al Señor, a su tiempo (2). Esto estaba en armonía con el programa de ofrendas (Lv. 23) que eran las diarias, semanales, mensuales y anuales. A nosotros, estas leyes pueden parecernos elaboradas y complicadas y a la vez sumamente confusas. Sin embargo, debe destacarse una lección—hay una ofrenda para el Señor, apropiada en todo tiempo y lugar. Para el cristiano del Nuevo Testamento, es una vida consagrada que se lleva diariamente, cada semana, cada mes, cada año y a través de toda nuestra existencia. 2. Las ofrendas diarias y las sabáticas (28:3–10) Las ofrendas diarias eran las más importantes de todo el plan del Antiguo Testamento. Por cierto que hacían hincapié sobre la necesidad de la fidelidad cotidiana a Dios y la de los cultos permanentes. Estas ofrendas incluían dos corderos sin tacha (3), un cordero… por la mañana, y el otro… a la caída de la tarde (4). Con éstos, debían presentar “una ofrenda de cereal” (RSV) constituida por la décima parte de un efa de flor de harinamezclada con aceite de olivas machacadas (5).11 También presentaban libación de vino en el santuario, en la base del altar (o sobre el altar) ante Jehová (7). Tanto la ofrenda de la mañana como la de la tarde eran de olor grato a Jehová (8). En el día de reposo (9), estas ofrendas debían ser dobles, como expresión de necesidad de adoración adicional en el santo día del Señor.