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Tomado de entrevista a M.

Carreira “¿Será
que la ciencia contradice la fe?”. Un café con
Galat. Teleamiga. 5 de febrero de 2013 [URL =
❮https://www.youtube.com/watch?v=q_hsGD
N854Y❯].
1)

fe razón 2)

fe razón

3)
fe

razón
ciencia
filosofía
religión
Diario de un seductor:
el ideal estético

Concepto de ironía: el religioso


ideal ético
ético

Temor y temblor: el estético

ideal de la fe
La religión «no aspira a conocer Por lo tanto se opone a ambas en
y a explicar la naturaleza del todo lo que constituye su esencia
universo, como hace la y en todo lo que caracteriza sus
metafísica; no aspira a continuar efectos. Aquéllas, en todo el
su desarrollo y a perfeccionarlo universo, sólo ven al hombre en
mediante la libertad y la divina calidad de centro de todas las
voluntad del hombre, como hace relaciones; ésta, en cambio,
la moral. Su esencia no consiste tiende a ver en el hombre —al
ni en el pensamiento ni en la igual que en todas las demás
acción, sino en la intuición y el cosas particulares y finitas— lo
sentimiento. Aspira a intuir el Infinito, la imagen, la impronta, la
Universo; quiere contemplarlo expresión de lo Infinito».
piadosamente en sus
manifestaciones y en sus Friedrich Schleiermacher
acciones originales: quiere
dejarse penetrar y llenar por sus
influjos inmediatos con una
infantil pasividad.
Tomado de entrevista a M. Carreira “¿Será que la ciencia
contradice la fe?”. Un café con Galat. Teleamiga. 5 de
febrero de 2013 [URL =
❮https://www.youtube.com/watch?v=q_hsGDN854Y❯].
PUNTO DE PARTIDA
La fe y la razón son como las dos
alas con las cuales el espíritu
humano se eleva hacia la
contemplación de la verdad.
Dios ha puesto en el corazón del
hombre el deseo de conocer la
verdad y, en definitiva, de
conocerle a Él para que,
conociéndolo y amándolo,
pueda alcanzar también la plena
verdad sobre sí mismo (cf. Ex 33,
18; Sal 27 [26], 8-9; 63 [62], 2-
3; Jn 14, 8; 1 Jn 3, 2).
Condiciones óntico-ontológicas1:
“Las ciencias son maneras de ser del Dasein en las que éste se
comporta también en relación a entes que pueden ser otros que
él. Ahora bien, al Dasein le pertenece esencialmente el estar en
un mundo. La comprensión del ser propia del Dasein comporta,
pues, con igual originariedad, la comprensión de algo así como
un “mundo”, y la comprensión del ser del ente que se hace
accesible dentro del mundo”.

Martin Heidegger, Ser y tiempo, § 4.

_______________
1 “El Dasein tiene, por consiguiente, en varios sentidos, una primacía sobre todo otro ente. En primer lugar, una
primacía óntica: el Dasein está determinado en su ser por la existencia. En segundo lugar, una primacía ontológica: en
virtud de su determinación por la existencia, el Dasein es “ontológico” en sí mismo. Ahora bien, al Dasein le pertenece
con igual originariedad —como constitutivo de la comprensión de la existencia— una comprensión del ser de todo ente
que no tiene el modo de ser del Dasein. Por consiguiente, el Dasein tiene una tercera primacía: la de ser la condición
de posibilidad óntico-ontológica de todas las ontologías” (Ser y tiempo, § 4).
Condiciones históricas
• Culturales
• Económicas
• Sociales
• Políticas
• Religiosas

“El respeto que siente el hombre por el conocimiento es una de sus


características más peculiares. En latín conocimiento se dice scientia y ciencia
llegó a ser el nombre de la clase de conocimiento más respetable. ¿Qué distingue
al conocimiento de la superstición, la ideología o la pseudo-ciencia? La Iglesia
Católica excomulgó a los copernicanos, el Partido Comunista persiguió a los
mendelianos por entender que sus doctrinas eran pseudocientíficas. La
demarcación entre ciencia y pseudociencia no es un mero problema de filosofía
de salón; tiene una importancia social y política vital”

Imre Lakatos, La metodología en los programas de investigación científica, p. 9.


Condiciones subjetivas:
“Por supuesto, cualquier fecha que elijamos para fijar el comienzo de la
historia de la ciencia será siempre arbitraria, y, mi relato, además, está
también limitado en el espacio geográfico, lo mismo que en el espacio de
tiempo que cubre. Mi propósito es esbozar el desarrollo de la ciencia
occidental desde el Renacimiento hasta aproximadamente el final del siglo
XX. Esto significa dejar a un lado los logros de los antiguos griegos, los
chinos y los científicos y filósofos islámicos, que tanto hicieron por mantener
activa la búsqueda del conocimiento de nuestro mundo durante el período
que los europeos denominamos «la edad oscura» y «la Edad Media». Sin
embargo, también significa narrar una historia coherente, fijando
claramente en el espacio y el tiempo el comienzo de la evolución de la
visión del mundo que constituye el núcleo de nuestra forma de comprender
el universo y el lugar que ocupamos en él actualmente”
John Gribbin, Historia de la ciencia: 1543-2001, p. 10.
Desde hace varios
millares de años el
enigma y el misterio
han acompañado al
ser humano no sólo
como una situación
externa o accesoria,
sino determinando
incluso su mismo
proceso de
hominización.
Y una de las preguntas que se imponen inmediatamente
es acerca del origen de la religión, lo cual ha planteado
varias y diversas hipótesis. La que aquí se seguirá es la
que afirma que en el inicio de la religión se halla lo
enigmático, lo que resulta desconcertante e inquietante
al ser humano.

Se trata de un sentimiento de extrañeza, de algo superior


y que desborda ante el enigma y el misterio que se han
manifestado en medio de la cotidianidad de los tiempos
Esto enigmático figuró en varios de
los puntos de la vida de los homo
sapiens sapiens que por primera
vez experimentaron un impulso
religioso, sobre todo en esos
puntos que causaban admiración
y asombro: en su sexualidad, y su
capacidad de transmitir
vida, en el nacimiento,
en la muerte, en la
comida, en la
naturaleza social del
ser humano, en la
violencia, en el
sufrimiento, en la
enfermedad, en su
enfrentamiento con la
naturaleza.
ž Preocupación por congéneres
muertos; extrañeza ante la muerte
ž Búsqueda de una normatividad
regulada (tótem y tabú);
fortalecimiento e integración del
grupo
ž Rituales de petición y
agradecimiento; desvalimiento y
sospecha de poderes superiores
(se ensaya el humilde camino de
la súplica)
ž Celebración; dimensión
admirativa en los
comportamiento religiosos
arcaicos
En las primitivas conformaciones de grupos
humanos pueden detectarse dos líneas
evolutivas o impulsos en la vivencia de lo
religioso: una línea uránica o sideral y una
línea ctónica o telúrica.
ž La religión
mesopotámica
ž La religión egipcia
ž La religión de
pastores de
sedentarización
tardía
• Indoeuropeos
• Proto-Israel
ž Religiones mistéricas

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