LA PRESENCIA

DE DIOS
EN LA
ALABANZA DE
SU PUEBLO
 LA PRESENCIA DE DIOS EN LA ALABANZA DE SU PUEBLO 7

CON LA FE PUESTA EN CRISTO

//Con la fe puesta en Cristo

nunca más he de temer.
Con la fe puesta en Cristo
nunca más he de llorar.
Con la fe puesta en Cristo
listo estoy a testificar
porque Cristo es mi Roca y mi fuerte Salvador.
porque Cristo es mi Roca y mi fuerte Salvador.\\

Es nuestra intención hacer una transcripción fiel y

exacta de este Mensaje, tal como fue predicado; por
lo tanto cualquier error en este escrito es
estrictamente error de audición, transcripción e
impresión; y no debe interpretarse
como errores del Mensaje.
El texto contenido en esta Conferencia, puede ser
verificado con las grabaciones
del audio o del video.
Este folleto debe ser usado solamente para
propósitos personales de estudio,
hasta que sea publicado formalmente.
(Fue tomado de una transmisión vía Internet)
6 WILLIAM SOTO SANTIAGO

Que Dios me les bendiga grandemente, y vamos a dejar

a nuestro hermano William con unas palabras de bendición,
y después cantaremos el himno que nuestro hermano Tirzo LA PRESENCIA DE DIOS
nos ha recomendado. Pero dejamos que él nos dé unas EN LA ALABANZA DE SU PUEBLO
palabras de bendición, para la apertura de este concierto
de alabanza y adoración.
Con nosotros nuestro amado hermano y amigo, el Rvdo. Por William Soto Santiago
William Soto Santiago: Domingo, 21 de Julio de 2002 P.M.
San Lucas, Sacatepéquez, Guatemala

uego de las palabras de nuestro hermano Bermúdez, la INTRODUCCIÓN POR MIGUEL BERMÚDEZ MARÍN:
L cual citó de Jesucristo, porque tales adoradores busca el
uiero leer un verso de la Escritura, y después también
Padre que le adoren, que le adoren ¿cómo? En espíritu y en
verdad. ¿Dónde están esos adoradores? (Nota - Los
Q queremos que nuestro hermano William nos dé unas
palabras de bendición en la apertura de este concierto
presentes responden: “¡Amén!”) Pues entonces adoremos a
musical. Hay una Escritura muy conocida de todos
nuestro Dios en espíritu y en verdad, con cánticos de
nosotros, está en el Salmo 22, verso 3:
alabanzas para nuestro Dios, porque El mora en medio de
“Pero tú eres santo,
las alabanzas de Su pueblo; Su pueblo terrenal es el pueblo
Tú que habitas entre las alabanzas de Israel.
hebreo, y Su pueblo celestial es la Iglesia del Señor
En ti esperaron nuestros padres;
Jesucristo, y El está en medio de Su Iglesia, Su pueblo
Esperaron, y tú los libraste.
Celestial, en medio de las alabanzas de Su pueblo.
Clamaron a ti, y fueron librados;
Adora a Dios:
Confiaron en ti, y no fueron avergonzados.”
Y quiero leer también acá en el Salmo 33, que nos dice:
“Alegraos, oh justos, en Jehová;
SIGO, SIGO A JESUCRISTO
En los íntegros es hermosa la alabanza.
Aclamad a Jehová con arpa;
//Sigo, Sigo, Sigo a Jesucristo,
Cantadle con salterio y decacordio
tras Jesús, es la luz, yo le seguiré
Cantadle cántico nuevo;
Sigo, sigo, sigo a Jesucristo
Hacedlo bien, tañendo con júbilo.”
donde quiera que el me guíe yo le seguiré\\
Las Sagradas Escrituras, pues nos muestran que Dios
4 WILLIAM SOTO SANTIAGO
habita en medio de la alabanza de Su pueblo, y el Señor
Jesús nos habló unas palabras muy importantes en el
tiempo de Su ministerio, cuando El estuvo aquí en la Tierra
personalmente en carne humana, El dijo que... nos dijo:
“Dios es Espíritu.” Y nos habló de que El busca a los
adoradores, los que le adoran en espíritu y en verdad; es
necesario que adoren, y dice: “Y a tales adoradores busca
que le adoren.” Dice:
“Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos
adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad;
porque también el Padre tales adoradores busca que le
adoren.
Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en
verdad es necesario que adoren.”
La alabanza, la adoración a Dios, es de muchas
maneras; podemos adorar a Dios cantando, podemos
adorar expresándole el deseo de nuestro corazón,
expresándole nuestro agradecimiento. Cuando con
expresión de agradecimiento le hablamos y le decimos
cuánto le agradecemos todo lo que El ha hecho por
nosotros, y nos postramos en Su presencia y le adoramos,
le decimos: “Señor, te amamos.” Y podemos decírselo en un
canto.
El dice que habita en medio de la alabanza de Su pueblo,
cuando el pueblo le alaba con el verdadero sentido de la
alabanza, o sea, cuando lo hacemos en forma de adoración,
en cada palabra ponemos el corazón, para que El vea que
nuestra alma, nuestro corazón, que lo que estamos
expresando con los cantos es lo que estamos sintiendo en el
alma; y esa alabanza en el espíritu le agrada a Dios.
El se hace presente en medio de la alabanza y bendice al
pueblo. Es algo que decía el hermano William en un
LA PRESENCIA DE DIOS EN LA ALABANZA DE SU PUEBLO 5
Mensaje: que la alabanza, el canto, viene desde el Cielo.
Eso es una cosa que viene desde el Cielo. El dice que aun
en el principio se regocijaban cuando estaba apenas Dios
en la Creación, las estrellas del alba se gozaban viendo la
Obra que el Señor estaba haciendo para Su gloria, porque
era una Obra para Su alabanza, para Su adoración, para
El, para Su servicio. Y ese canto, esa adoración, dice él:
“Del Cielo vino a la Tierra.” Hay Mensaje donde él nos
habla eso.
Y por lo tanto, cuando es hecho con el mismo sentido con
que es hecho en el Cielo, y cuando es hecho (dice él) con el
mismo espíritu, con la misma forma en que en el Cielo se
hace, esa es la adoración que Dios busca, esa es la que le
agrada, la que lo satisface, en la cual está Su presencia.
Por eso estas palabras de Jesús son bien importantes,
cuando El nos dijo esas palabras allí hablándole a la
samaritana:
“Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos
adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad;
porque también el Padre tales adoradores busca que le
adoren”
El mismo los busca, El es el que nos ha llamado, El es el
que nos ha buscado, El es el que nos ha encontrado, para
que nosotros le sirvamos, para que nosotros le adoremos,
para que nosotros expresemos lo que hay en nuestros
corazones. Esos son los adoradores que Dios busca.
Bueno, yo creo que es hermosa la alabanza, así que
mantengan ese espíritu, y los jóvenes y cada uno de los que
va a participar, lo haga con ese sentido para que esta
adoración llegue a la presencia de Dios, que lo hagan con
reverencia, que se haga con amor, que se haga con temor
de Dios, que se haga bien hecho, como para el Señor.