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— ¡Kim Taehyung, ven en este mismo instante!

Hablo furiosa una hermosa mujer de cabellera larga y rubia, molesta por
la noticia recibida de la universidad en la que asistía su único hijo.
— ¿Sí? — Musito un chico de piel acaramelada, cabellera rubia, ojos
negros con un sutil toque de seriedad.
— Explícame lo que hiciste en la universidad — Ordeno cruzada de
brazos, mirando fijamente al menor.
— ¿A qué te refieres? — Frunció el ceño.
— No te hagas el santito Kim, esta vez no funcionará — Hablo
seriamente la mayor colocando sus brazos alrededor de su fina cintura.
El menor se quedó callado, no dijo nada. Sabía que estaba en problemas
y que sin dudar saldría castigado y con un fuerte regaño.
— Kim — Sonó como advertencia.
— Está bien, está bien… Lo siento, no lo volveré a hacer — Contesto
rendido.
— Es que no puedo creerlo — Paso su mano por su cabello en señal de
frustración — ¿Enserio estuviste a punto de sobornar al profesor para
que te subiera las notas?
Alzo los hombros, mientras hacia una mueca de “Ay como si importara”
La mayor suspiró pesadamente — Bien, es hora de darte una lección, tu
comportamiento me tiene hasta la punta de la cabeza — Confeso, tomo
su celular y marco a un número que respondió al poco tiempo.

…
…

Poco le importaba al menor la conversación, por lo que no presto

atención a lo que decía, solo se dedicó a navegar por sus redes sociales.
— Muchas gracias y disculpa la molestia, adiós — Dijo para finalizar la
llamada.
— ¿A quién llamaste?
— A una vieja amiga
— ¿Y ella que tiene que ver con esto?
— Pues verás… — Estaba a punto de hablar, pero fue interrumpida por
el menor.
— Mamá, quede para verme con unos amigos en el centro — Reviso su
reloj de mano marca Gucci — Y ya voy tarde, nos vemos, llego para la
cena, dile a la sirvienta que prepare mi comida favorita — Paso de lado
dirigiéndose a la puerta sin importarle que su madre se encontraba ahí.
— Taehyung — El mencionado volteo con poca importancia.
— Te iras a México