Está en la página 1de 12

Análisis Cromatográfico de Gases

5.1.1 Control de Flujo y su Medición


5.1.1.1. Propósito

La medición y el control del caudal del gas portador son esenciales tanto para
la eficiencia de la columna como para el análisis cualitativo. La eficiencia de la
columna depende de la velocidad lineal apropiada del gas. El caudal óptimo puede
Análisis Cromatográfico de Gases

determinarse fácilmente ajustándolo hasta obtener el número máximo de platos


teóricos. Los valores razonables para columnas de 0,4 cm de DJ son de 75 a 90
ml/min; para columnas de 0.2 cm. de DJ un buen valor es 25 ml/min y para la
columna sin relleno de 0,25 mm de diámetro interno (Dl) el caudal óptimo es de 1,0
ml/min. Estos datos son tan sólo orientaciones generales, ya que el caudal óptimo
para una columna dada deberá determinarse experimentalmente.

5.1.1.2. Control

La primera parte en cualquier sistema de flujo es un regulador de dos etapas


conectado al cilindro con el gas portador. La primera etapa indica la presión en el
cilindro del gas. Al hacer girar la válvula del regulador se hará llegar una presión
creciente (registrada en la segunda etapa) al cromatógrafo. Este regulador no
funciona bien a presiones bajas. En la segunda etapa se recomienda usar un mínimo
de 20 psi. Si con 20 psi se consigue un caudal demasiado grande, deberá colocarse
un tubo constrictor o capilar entre la segunda etapa y el cromatógrafo.

FIG. 5-4 Regulador de Presión de Dos Etapas

Fuente: Laboratorio UPB - Bolivia


Análisis Cromatográfico de Gases

Para una operación isoterma a presión constante basta un caudal constante


(esto supone que el descenso de presión de la columna es constante). Para los
cromatógrafos de gases sencillos y baratos que funcionan isotérmicamente, la
segunda parte del sistema de control del flujo es una sencilla válvula de aguja.

Aquí se presenta una manivela provista de un regulador que permite


reproducir fácilmente diferentes posiciones y caudales. La válvula de aguja no es
más que un resistor variable a la corriente gaseosa. Permite obtener un caudal
constante únicamente cuando la presión aplicada y la caída de la presión de la
columna permanecen constantes. El caudal puede cambiar incluso con pequeñas
variaciones de la temperatura ambiente.

Con temperatura programada, a presión de entrada constante, el caudal


disminuirá a medida que aumente la temperatura de la columna. Por ejemplo, con
una presión de entrada de 24 psi y un caudal de 22 ml/min (helio) a 50 ºC, el caudal
a través de una columna rellena, de 2m, disminuye hasta 10 ml/min a 200 ºC. Esta
disminución del flujo se debe al incremento de la viscosidad del gas portador.

En todas las unidades de temperatura programada y aun en las mejores


unidades isotérmicas se utiliza un controlador diferencial del flujo para cerciorarse
de que la masa fluye a una velocidad constante, independientemente de la resistencia
de la columna.

5.1.1.3. Mediciones

Los dos dispositivos más usados son un rotámetro y un caudalímetro con


burbuja de jabón. El rotámetro proporciona un índice rápido y apropiado del caudal,
pero no es exacto. El gas portador, al entrar por el fondo del tubo, mantiene el
regulador a cierta altura del tubo calibrado, la que depende de la densidad, caudal y
Análisis Cromatográfico de Gases

presión inversa del gas. El tubo debe estar calibrado y la curva de calibración sólo se
aplica a ese gas portador y a la presión inversa de la columna.

El caudalímetro de película de jabón es simplemente un tubo calibrado (por lo


general una pipeta o bureta), a través del cual fluye el gas portador. Al apretar una
pera de goma se hace ascender una disolución jabonosa que cierra el paso del gas.

Se dejan ascender varias burbujas de jabón por el tubo a fin de humedecerlo


totalmente. Entonces, con un cronómetro, se mide con exactitud el tiempo que tarda
una burbuja en desplazarse en un volumen definido. A partir de esta velocidad de la
burbuja, puede fácilmente calcularse la velocidad del gas portador en ml/min.

5.1.2 ENTRADA DE LA MUESTRA


5.1.2.1. Propósito

La entrada de la muestra deberá permitir la introducción de una amplia


variedad de muestras, incluyendo gases, líquidos y sólidos, y su inyección rápida y
cuantitativa en la corriente del gas portador. Lo ideal sería que la muestra fuese
inyectada instantáneamente dentro de la columna.

En la práctica esto es imposible y una meta más realista consiste en introducir


la muestra como una banda estrecha de concentración, que tenga un intervalo
mínimo entre el “frente” y “cola” de la banda.

En algunos casos la muestra debe calentarse para facilitar su rápida


vaporización y paso al interior de la columna. También es preciso acomodar
diversos tamaños de muestras, desde las de 1 microgramo para columnas sin relleno,
hasta cantidades del orden de gramos para columnas en escala preparativa.
Análisis Cromatográfico de Gases

Para conseguir la mejor forma del pico y la resolución máxima deberá usarse
la mínima cantidad posible de muestra. Mientras más componentes constituyan la
muestra más grande deberá ser su tamaño. En la mayoría de los casos la presencia de
otros componentes no afectará la localización y forma del pico de un determinado
componente.

En el análisis de trazas y en trabajos en escala preparativa suele ser preferible


usar muestras de gran tamaño las cuales “sobrecargan” la columna. Si bien los picos
principales pueden resultar muy distorsionados, los objetivos experimentales pueden
obtenerse más fácilmente.

5.1.2.2. Muestreo de Gases

Se supone que toda la muestra es un gas en condiciones normales. Las


mezclas de gases y líquidos presentan problemas especiales. Los dos métodos más
generales usados en el muestreo de gases consisten en el empleo de jeringas de
cierre hermético para gases y de válvulas para muestrear gases. La jeringa es más
flexible y menos costosa. Por otra parte, una válvula para muestreo de gas permite
una mejor reproducibilidad, requiere menos destreza y puede automatizarse
fácilmente.

5.1.2.3. Jeringas

En la Figura 5-5, se muestran las partes básicas de una jeringa. El émbolo de


acero inoxidable está bien ajustado en el interior de un cilindro de precisión hecho
con vidrio de borosilicato. La aguja es también de acero inoxidable y está pegada
con epóxido al cilindro. En algunos modelos, la aguja que es removible, se atornilla
al extremo del cilindro, la punta de la aguja está biselada para facilitar la penetración
Análisis Cromatográfico de Gases

del diafragma (En el bloque de inyección se lleva a cabo la introducción de la


muestra; Figura 5-6). En la Figura 5-7, se muestra un tipo de agujas ampliamente
utilizadas en la industria (Agujas Hamilton).

FIG. 5-5. Inyectores

FIG. 5-6. Bloque de Inyección

Fuente: Laboratorio UPB - Bolivia


Análisis Cromatográfico de Gases

a) Llenado de la jeringa. Al llenar con líquido una jeringa de un


microlitro es conveniente eliminar primero todo el aire. Esto se logra introduciendo
varias veces líquido en la jeringa y expulsándolo rápidamente dentro del líquido.
Los líquidos viscosos deben introducirse lentamente en la jeringa; la expulsión muy
rápida de un líquido viscoso puede quebrar la jeringa. Si la muestra es demasiado
viscosa, debe diluirse con un disolvente apropiado. Succione más líquido hacia el
interior de la jeringa del que vaya a inyectar.

Sostenga la jeringa de modo que la aguja apunte hacia arriba. Cualquier


cantidad de aire que aún quedará en la jeringa se irá hacia la parte superior del
cilindro. Oprima el émbolo hasta que pueda leerse el valor deseado. El exceso de
aire deberá haber sido expulsado. Una vez que se mide el volumen exacto del
líquido, hay que dejar que penetre un poco de aire en el interior de la jeringa. Esto
tiene dos propósitos. Primero, el aire originará un pico sobre el cromatograma, el
cual puede usarse para calcular los volúmenes “reducidos” de retención; segundo, el
aire evita la expulsión de líquido en caso el émbolo fuera empujado
accidentalmente.

b) Procedimiento de inyección. Sostenga la jeringa con ambas


manos. Use una mano para guiar la aguja al interior del diafragma, y la otra, para
aplicar la fuerza que lo perfore y evite que el émbolo sea expulsado por la presión en
el cromatógrafo de gases (use el pulgar de la mano derecha). Esta última instrucción
es muy importante cuando se inyectan grandes volúmenes (es decir, muestras
gaseosas) o cuando la presión interna es muy intensa. En estas condiciones, si no se
tiene cuidado el émbolo será expulsado de la jeringa.

Inserte rápidamente la aguja a través del, diafragma y tan profundamente


como se pueda en la cámara de inyección, oprima el émbolo y deje pasar un
segundo o dos; entonces, retire la aguja (manteniendo oprimido el émbolo).
Proceda con
Análisis Cromatográfico de Gases

cuidado, pues como la mayoría de las cámaras de inyección están calientes es fácil
quemarse.

En los análisis cuantitativos a menudo es necesario inyectar una cantidad


exactamente conocida de la muestra. La técnica antes descrita no es satisfactoria en
este caso, en especial con cámaras de inyección calientes, ya que algo de la muestra
sale hirviendo de la aguja. El volumen interno de la aguja en una jeringa de 10
microlitros es de unos 0,7 microlitros. Comúnmente algo de esta muestra se añade al
volumen normal inyectado. A continuación se describe el procedimiento para
determinar la cantidad exacta inyectada.

Primero, aspire con la jeringa el volumen aproximado que se desee inyectar.


Quite la jeringa de la muestra y deje entrar un pequeño volumen de aire. Segundo,
lea cuidadosamente el volumen del líquido que va en el cilindro de la jeringa usando
las marcas de calibración. Tercero, inyecte la muestra y rápidamente retire la
jeringa. Saque el émbolo y mida el volumen del líquido que queda en el cilindro. La
diferencia entre esta lectura y la lectura inicial anterior a la inyección es el volumen
que usted ha inyectado.

c) Procedimiento de limpiado. Cuando se usan líquidos de alto


punto de ebullición deberá lavarse la jeringa con un disolvente volátil como el
cloruro de metileno, acetona, etc. Esto puede hacerse aspirando repetidas veces el
líquido de lavado hacia el interior de la jeringa. Después retire el émbolo y seque la
jeringa dejando entrar aire a través de ella. Conecte el cilindro de la jeringa a una
bomba de vacío (con la trampa apropiada) o a una trompa de agua. De esta manera
penetra aire a través de la aguja y el polvo no llegará al cilindro para taparlo. Limpie
el émbolo con un papel suave y reinsértelo. Si después de uso prolongado la aguja se
achata, afílela sobre una piedra pequeña de esmeril.
Análisis Cromatográfico de Gases

Las jeringas pueden limpiarse de manera adecuada y eficiente con un


limpiador de jeringas que consiste en una cámara de inyección calentada a la cual se
le aplica vacío. La combinación de temperatura elevada y vacío ayudan a eliminar
disolventes de alto punto de ebullición.

FIG. 5-7 Jeringas Hamilton

Fuente: Laboratorio UPB - Bolivia

5.1.2.4. Válvulas Muestreadoras de Gases

Otro método para introducir las muestras de gas es la válvula para muestreo.
En este caso la muestra se empuja continuamente a través de la espiral de la muestra
hasta que se llena totalmente con esta. El volumen de esta espiral se controla
mediante la longitud y el diámetro del tubo de que está hecha (Fig. 5-8). Se pueden
obtener espirales para muestras cuya capacidad varía desde 1 microlitro hasta 100
mililitros.
Análisis Cromatográfico de Gases

FIG. 5-8 Válvula Muestreadora de Gases en Posición para Llenar y

Posición para Vaciar

En la figura anterior, se ha girado la válvula muestreadora y ahora el gas


portador pasa a través de la espiral de muestreo, empujando hacia adelante a la
muestra e introduciéndola en la columna. Con válvulas muestreadoras de gases se
logra una reproducibilidad satisfactoria.

5.1.2.5. Muestreo de Líquidos

Debido al alto grado de expansión de los líquidos cuando se vaporizan, se


trabaja con tamaños de muestra mucho más pequeños. Las jeringas se emplean casi
en todo el mundo para inyectar líquidos. Se dispone de jeringas con volúmenes
totales que van de 0,5 microlitros a 1 litro. Para la inyección de líquidos se usan con
más frecuencia las de 5, 10 y 25 microlitros.

En la Fig. 5-9, se muestran jeringas para líquidos de 10 microlitros con aguja


fija. En este modelo el émbolo y su extremo están recubiertos de teflón que hace un
cierre hermético con el interior del cilindro de vidrio. Si está debidamente ajustado,
no habrá fugas, incluso a presiones de hasta 6 atmósferas.
Análisis Cromatográfico de Gases

FIG. 5-9. Jeringas de Inyección para Cromatografía

Se dispone de válvulas para muestras líquidas que se utilizan habitualmente


en trabajos con cromatógrafos de gases y en los cromatógrafos de líquidos a alta
presión. La principal limitación es que las temperaturas superiores a 150 ºC acortan
la vida y la reproducibilidad de dichas válvulas. No es fácil inyectar rápidamente
muestras líquidas en una columna caliente y evitar colas.

5.1.2.6. Muestreo de Sólidos

Los sólidos se manejan mejor disolviéndolos en un disolvente apropiado y


utilizando una jeringa para inyectar la disolución.

Aunque se dispone de diversos sistemas de muestreo automático, su


descripción desafortunadamente excede el ámbito de este capítulo.

5.1.2.7. Entradas Calentadas (Cámaras de Inyección)

Casi todos los cromatógrafos de gases tienen una entrada metálica que se
calienta. En el diseño de estos sistemas de entrada, varios factores revisten
importancia:

a) El gas portador debe precalentarse para garantizar una rápida vaporización.

b) El diafragma debe mantenerse más frío que el bloque de inyección para


evitar su degradación térmica.
Análisis Cromatográfico de Gases

c) El volumen muerto debe mantenerse al mínimo y el camino del flujo debe


ser suave y uniforme para evitar la “difusión en torbellino” o la transferencia
exponencial de la muestra dentro de la columna.

d) Deberá mantenerse una temperatura uniforme en el bloque para garantizar la


rápida volatilización sin que haya descomposición térmica debido a puntos
“calientes” o condensación debido a puntos “fríos”.

Muchas muestras son termolábiles y se descomponen rápidamente sobre


superficies metálicas calientes. Entre los compuestos obtenidos figuran los
derivados de aminoácidos, carbohidratos, esteroides y numerosas drogas o
estupefacientes.

En el caso de estas muestras, es necesario que el interior de la cámara metálica


de inyección tenga una pared de vidrio o un sistema de inyección “incorporado a la
columna”, donde la columna de vidrio quede lo suficientemente cerca del septum
para que la aguja de la jeringa deposite la muestra dentro de la columna de vidrio
inactiva.

Un último sistema de inyección es el de la entrada separadora utilizado con


columnas de tubo abierto. Se utiliza una jeringa normal para inyectar alrededor de 1
microlitro de la muestra líquida.

Esta muestra se vaporiza y se mezcla bien con el gas portador en el interior de


un bloque caliente y, finalmente, se transfiere alrededor del 1% de la muestra
vaporizada al interior de una columna de tubo abierto. El resto de la corriente
gaseosa se deja escapar a la atmósfera.

Este es el método más adecuado para introducir las muestras extremadamente


pequeñas que se requieren para obtener un buen comportamiento con la columna,
cuando se usan columnas de tubo abierto.

También podría gustarte