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La historia del arte en México comenzó con el arte mesoamericano, que destacó por el
desarrollo de obras arquitectónicas, escultóricas, cerámicas y pictóricas. Fue pasando por
diferentes etapas hasta llegar al muralismo. Este estilo surgió en 1920 con la intención de
plasmar la identidad nacional y la situación social-política del país.
ETAPA PREHISPANICA
Esta etapa se ubica en una región conocida como Mesoamérica, en el centro de México.
Temporalmente podemos ubicarla desde 1.500 a.C hasta 1.500 d.C. 3.000 años de etapa
en la que se produjeron múltiples avances y se dieron muestras artísticas.
Un ejemplo de ello es la cultura olmeda, que creó varios elementos de Mesoamérica como
el sistema de escritura, los calendarios o las esculturas monumentales. También fueron
los creadores de otras culturas como la de Teotihuacan, el pueblo zapotecom y la cultura
maya.
La cerámica fue una de las maneras en las que el arte mexicano se expresó, creando vasijas
de cocina y almacenamiento para rituales. Se decoraba variando la forma, la pintura y
gracias a los diferentes métodos de cocción.2
ETAPA COLONIAL
Como podrás intuir, esta etapa surgió en la conquista española y terminó cuando finalizó.
Por ello, en esta etapa se produjo una mezcla entre las visiones nativas y las visiones
europeas. Surgieron representaciones en las que imperaban los temas evangelistas y las
iglesias.
Así pues, los primeros monasterios construidos en México no tenían mucha decoración y
tenían elementos del Renacimiento, aunque en este etapa el estilo de arte y arquitectura que
predominó fue el Barroco. Aun así, no fue un estilo purista, sino que los mexicanos
crearon sus propios estilos, como el Barroco Talavera, que usaba azulejos de cerámica
pintados a mano.
Fue una época en la que, como decimos, se construyeron muchas obras religiosas con un
estilo europeo. Ahora bien, la característica principal fue el uso de colores apagados
Pues bien, se volvió a estos temas por la desacreditación que tuvo el movimiento colonial y
porque a partir de 1830 irrumpió el estilo romántico de las pinturas, que llegó a México
a través de viajeros extranjeros e hizo cambiar las tornas.
Por ello, muchos artistas mexicanos trabajaron para documentar las diversas culturas de
México con un estilo principalmente renacentista. Poco a poco, en esta etapa se fue
pasando del fuerte neoclasicismo a un estilo realista con muchos énfasis en los detalles.
¿Y cuáles eran los temas más extendidos? Retratos de clases altas, escenas bibásicas y
batallas de la época de la independencia.
Esta etapa está marcada, sin duda alguna, por la revolución mexicana de 1910 a 1920. Se
trata de una revolución que rompió de manera abrupta con el estatus existente y que dio
paso a numerosos cambios en el arte mexicano.
Con la revolución mexicana llegó el movimiento muralista mexicano, liderado por José
Vasconcelos. A este iniciador lo siguieron otros como Gerard Murillo, Diego Rivera, José
Clemente Orozco o Fernando Leal, entre otros. Eran un grupo de artistas con mucha
influencia europea.
Cabe destacar que a partir de 1925 irrumpió en el escenario Frida Kahlo, un símbolo para
México, ya que influyó en la cultura mexicana de la postrevolución y se convirtió en un
símbolo del feminismo en una época donde lo masculino reinaba en la sociedad.
Después de este estilo muralista llegó la generación de la ruptura en los años 1950 y
1960. Pintores como José Luis Cuevas, Gilberto Acebes Navarro o Rafael Coronel se
alejaron del realismo social para incorporar el surrealismo, las paradojas visuales o
estilos de pintura más propias del viejo mundo.