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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD DE FALCÓN
FACULTAD CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS
CARRERA: DERECHO
CÁTEDRA: SUCESIONES
DOCENTE: ELIANA MOLLEDA
SECCION: 01

SUCECIONES.

BACHILLER:

Lugo, Jhonny
C.I.17.841.922

PUNTO FIJO, OCTUBRE, 2016


INTRODUCCIÓN

            La situación que sigue a la muerte de la persona física, en relación con la


titularidad de las relaciones jurídicas de las cuales esta era sujeto, no puede ser
ignorada por el derecho, por el contrario, a través de los tiempos, han existido
disposiciones legales encaminadas a regular la suerte de estas relaciones y a
determinar los efectos que sobre ellas produce la muerte de su titular.
El Derecho Hereditario o Derecho Sucesoral, es el conjunto de normas y principios
jurídicos que gobiernan la transmisión del patrimonio que deja una persona que
fallece, a la persona o personas que le suceden, este constituye parte del Derecho
Civil, encontrándose en el Código Civil vigente, casi la totalidad de las normas que
lo rigen, sin embargo también existen algunas disposiciones sobre esta materia,
en ciertas leyes especiales. Las diversas alternativas de hecho posibles con
respecto a las relaciones patrimoniales de una persona que fallece, son en
esencia las siguientes: que tales relaciones queden sin titular y pasen a ser res
nullius; que dichas relaciones pasen al dominio del Estado; o      que las relaciones
en cuestión pasen a pertenecer a otras personas, las cuales van a ser
determinadas por el titular anterior o por la ley. El contenido del presente trabajo,
hace referencia a aquella rama del derecho que se le conoce con el nombre de
derecho hereditario, sumerio o simplemente sucesiones, ya que regula las
consecuencias que son producidas por la muerte, como son: la designación de
herederos, la transmisión del patrimonio y la manera en que estas pueden
hacerse.
Los derechos del heredero.

Por la sucesión el heredero queda investido de todos los derechos y


obligaciones del causante. El patrimonio del causante es adquirido por el heredero
como una unidad indivisible sin que la transmisión produzca modificación alguna;
sólo cambia el titular. Pero también adquiere todas las deudas y obligaciones del
causante, pudiendo surgir obligaciones nuevas, consistentes en ciertos
gravámenes que surgieron producto de la misma sucesión. Aparece una acción
nueva a favor del heredero: la petitio hereditatis. Con la cual puede pedir el
heredero el reconocimiento de su cualidad de tal frente a cualquiera que lo
desconozca o niegue, y reivindicar el patrimonio hereditario de todo tercero que
ilegítimamente lo detente.

Existen derechos que no son transmisibles como los llamados derechos


personalísimos:

Como los derechos y poderes derivados de las relaciones de familia: Patria


potestad, pensión alimentaria, etc.

a) Los derechos reales limitados de goce: derechos de usufructo, uso y habitación,


art. 169 1er parte y 651 CCV

b) Los derechos y Obligaciones tanto del mandante como del mandatario,


derivadas del mandato, Art. 1.704 3° aparte del CCV

c) Los derechos derivados del contrato de sociedad, Art. 1.673 3° aparte CCV.

d) El derecho de alimentos y obligación de suministrarlos;

e) Los contratos de ejecutamiento de obras que se suspenden por la muerte del


obrero, del arquitecto o empresario de la obra. El dueño de la obra debe pagar a
los herederos de aquel, en proporción al precio convenido.
Las Obligaciones del Heredero.

El heredero está obligado a respetar los actos de administración que ha


celebrado el poseedor de la herencia a favor de terceros, sea el poseedor de
buena o mala fe, los actos de disposición a título oneroso de inmuebles
efectuados por el poseedor de la herencia, tenga o no buena fe, son igualmente
válidos respecto del heredero, cuando el poseedor ha obtenido a su favor
declaratoria de herederos, o la aprobación judicial de un testamento y siempre que
el tercero con quien hubiere contratado fuere de buena fe.- Si el poseedor de la
herencia hubiese sido de buena fe, debe solo restituir el precio recibido. Si fuese
de mala fe, debe indemnizar al heredero de todo perjuicio que el acto haya
causado.-

Será considerado tercero de buena fe quien ignorase la existencia de


sucesores de mejor derecho o que los derechos del heredero aparente estaban
judicialmente controvertidos. Los herederos deben cumplir las obligaciones que
gravan la persona y el patrimonio del difunto y las que nacen de la transmisión
misma de ese patrimonio, o que el difunto ha impuesto al heredero en esta
calidad. Los acreedores de la herencia gozan contra el heredero de los mismos
medios de ejecución que contra el difunto mismo y los actos ejecutorios contra el
difunto lo son igualmente contra el heredero.

Todo acreedor de la sucesión será privilegiado o hipotecario, a término o bajo


condición o por renta vitalicia, sea su título privado o público puede demandar
contra todo acreedor del heredero por privilegiado que sea su crédito, la formación
de inventario y la separación de los bienes del difunto y del heredero, con el fin de
hacerse pagar con los bienes de la sucesión con preferencia a los acreedores del
heredero.

Si el heredero hubiese enajenado los inmuebles o muebles de la sucesión


antes de la demanda de separación de patrimonios, el derecho de demandarlos no
puede ser ejercido respecto de los bienes enajenados cuyo precio ha sido pagado.
La separación de los patrimonios no puede aplicarse sino a los bienes que han
pertenecido al difunto y no a los bienes que hubiese dado en vida al heredero,
aunque debiese colacionarlos en la partición con coherederos.

La separación de patrimonios puede demandarse mientras los bienes estén en


poder del heredero o de sus herederos, el derecho de los acreedores de la
sucesión a demandar la separación de patrimonios, no puede ser ejercido cuando
ellos han aceptado al heredero por deudor abandonando los títulos conferidos al
difunto.

LA IMPORTANCIA DEL CONOCIMIENTO TEÓRICO PRÁCTICO.


López (2008), explica que en la sucesión por causa de muerte en general y
particularmente en la sucesión universal, existen tres momentos distintos, básicos
y fundamentales, que se denominan: apertura (de la sucesión), delación (de la
herencia o del legado) y adquisición (de la herencia o del legado).

Ahora bien, en relación con la apertura de la sucesión se puede decir que es el


momento en el cual un patrimonio queda sin titular. La delación de la herencia o
del legado es el momento en el cual determinada persona es llamada por el
testamento o por la ley para convertirse en nuevo titular del patrimonio vacante
(sucesión universal) o de determinados bienes del mismo (sucesión particular). Y
la adquisición es el momento en el cual dicho llamado, pasa efectivamente a ser
titular del patrimonio en cuestión (sucesión universal) o de determinados bienes
del mismo (sucesión particular). Una vez delimitados cada uno de esos momentos,
se pasa a desarrollar el primero de ellos, es decir, el de la apertura, en razón de
que es ese primer momento el que constituye el objeto de estudio del presente
informe.
APERTURA DE LA SUCESIÓN.

Según lo indicado ut supra, la apertura es el momento determinante de la


sucesión por causa de muerte y la constituye la circunstancia de que el patrimonio
de una persona natural queda sin titular. Al respecto dispone el art. 993 CC: “La
sucesión se abre en el momento de la muerte y en el lugar del último domicilio del
de cujus”. Tal previsión es de orden público y, en consecuencia, no puede ser
derogada ni modificada por voluntad de los interesados'”.

De manera, pues, que el presupuesto indispensable para la apertura de una


sucesión por causa de muerte, es -precisamente- la muerte natural del causante.
Las legislaciones contemporáneas no reconocen ni admiten lo que en otras
épocas se denominaba “muerte civil”, que derivaba de la condena penal por
comisión de ciertos delitos o de la profesión religiosa y que también determinaba
la apertura de la sucesión del condenado o del profeso. Por otra parte, como
indica la norma antes transcrita, la sucesión por causa de muerte, se abre o se
produce, precisamente en el instante del fallecimiento del de cujus y no antes ni
después; e independientemente de cualesquiera circunstancias de hecho
relacionadas con esa muerte o con los llamados a la sucesión.

La apertura de la sucesión por causa de muerte, no necesariamente se


produce en el lugar geográfico donde fallece el causante, sino en el sitio donde el
mismo tenía su último domicilio legal, que -en Venezuela- es el lugar donde se
encuentra la sede principal de sus negocios e intereses, en el momento del
fallecimiento (o donde la ley presume que se halla dicha sede, para entonces)
(arts. 27, 30-31 y 33-34 CC). El sitio de apertura de la sucesión tiene relevancia,
por una serie de motivos, varios de los cuales se citan a continuación, a manera
de ejemplos. De una parte, el artículo 43 del Código de Procedimiento Civil (CPC)
dispone que son competentes los tribunales del lugar de la apertura de la
sucesión, para conocer: i) de las demandas sobre petición y división de herencia y
de cualesquiera otras entre coherederos, hasta la división; ii) de las demandas de
rescisión de la partición ya hecha y sobre saneamiento de las cuotas asignadas,
siempre que se propongan dentro del bienio siguiente a la fecha de la partición; iii)
de las demandas contra los albaceas que sean intentadas antes de la división (y si
ésta no fuere necesaria, dentro del bienio siguiente a la apertura de la sucesión);
iv) de las demandas de los legatarios y de los acreedores de la herencia,
formuladas antes de dos años contados desde la partición de la herencia (o si ésta
no fuere necesaria, desde la fecha de apertura de la sucesión)”. A su vez, el
artículo 1.023 del Código Civil (CC) establece la competencia de los tribunales de
primera instancia en lo Civil del lugar de la apertura de la sucesión, para conocer
del procedimiento de aceptación de la herencia bajo beneficio de inventario; y el
artículo 1.061 CC indica que corresponde a esos mismos tribunales todo lo
relacionado con la tramitación y la decisión concernientes a la vacancia y a la
yacencia de la herencia. Por otra parte, el artículo 5 de la Ley de Impuesto sobre
Sucesiones indica que el impuesto sucesoral se causa en el momento de la
apertura de la sucesión y el art. 34 ejusdem señala que la respectiva declaración
de herencia debe presentarse a los correspondientes funcionarios del Ministerio
de Finanzas, de la jurisdicción donde se causa el referido impuesto. Finalmente, el
momento de la apertura de la sucesión es determinante para establecer quiénes
son las personas llamadas a la misma y con cuáles derechos.

DELACIÓN.

Es el llamado que se hace al heredero, para que haga suya la herencia. Este
llamado se puede hacer en virtud de la Ley o del Testamento.

Como nuestro Código Civil dice que la herencia se defiere por la Ley o por
testamento; son estas dos formas en las que puede nacer para una persona su
derecho de delación (adir a la herencia).

La delación crea, en favor de aquel en quien recae, un derecho especial


denominado el ius delationis, que es la facultad de hacer propia la herencia o
rechazarla mediante renuncia. Es pues, un derecho que entra a formar parte del
patrimonio de su titular y que por tanto puede ser transmitido a otros.
Es requisito indispensable para que surja el ius delationis es que el llamado
sobreviva al difunto; no importa cuánto viva. No podrá suceder quien premuera al
de cujus o quien no haya sido concebido al momento de la muerte de éste. No
puede suceder el ausente por que no consta su existencia y por lo tanto no podrá
saberse si sobrevivió o no al de cujus; ni quien hubiere perecido en el mismo
hecho junto con el causante: esta última es la figura jurídica de la Conmoriencia
(Art. 994°C.C.).

Dentro de la delación lo principal es la doble facultad que tiene la persona de


decidir si acepta o no acepta la herencia.

ADQUISICIÓN.

Es el momento en el cual el heredero comparece y manifiesta o no la opción de


aceptar o no la herencia. Y si la acepta de manera pura y simple o a beneficio de
inventario.

La adquisición es igual a la presunción de la aceptación de la herencia:


Heredero no es quien quiere, es quien entra dentro de la delación o simplemente
aquel a quien la persona que muere por un acto voluntario le deja un legado. Si la
adquisición es la presunción de la aceptación, debemos entender la aceptación
como el hecho en el cual la persona llamada a heredar en ese acto en el cual se le
informa que está en orden de suceder, acepta la herencia. Con la muerte se abre
la sucesión, y simultáneamente la herencia se atribuye al llamado y es adquirida
por este.
DIFERENCIAS ENTRE LA SEPARACIÓN DE LOS PATRIMONIOS DEL DE
CUJUS Y DEL HEREDERO ESPECIFICANDO LAS CONDICIONES DE
PROCEDENCIA Y SUS DIFERENCIAS CON EL BENEFICIO DE INVENTARIO.

Es un dispositivo que permite mantener separados los patrimonios del heredero


y del causante, a objeto de evitar la concurrencia de los acreedores personales del
heredero y del causante y los legatarios sobre el caudal hereditario. La
separación opera a favor del acreedor y legatarios del causante. Del ejercicio de
esta figura resultan dos grupos patrimoniales:

1) El hereditario, destinado a satisfacer a los acreedores del causante que


hayan realizado la solicitud y subsidiariamente a los acreedores patrimoniales del
heredero.

2) El patrimonio privado del heredero que será destinado preferentemente


al pago de sus acreedores personales y subsidiariamente al pago de los
acreedores del causante, salvo que, el heredero haya aceptado la herencia a
beneficio de inventario.

Beneficio de Inventario:

1) Es una institución para los herederos

2) El plazo para solicitarlo es variable.

3) El efecto es separar el patrimonio del de cujus con el del heredero para impedir
la confusión de patrimonios.

Separación de Patrimonios:

1) Es una institución para los acreedores y legatarios del de cujus

2) El plazo para solicitarla es de 4 meses

3) El efecto es garantizar el pago de las deudas del de cujus a sus acreedores.


Condiciones.

 El Acreedor o Legatario Separatista NO debe realizar ningún acto que


implique renuncia a esta garantía o transformación de la deuda en otra.
 El Acreedor o legatario Separatista NO debe haber aceptado al Heredero
por Deudor.
 El Objeto de la Separación recae sobre bienes singulares de la Herencia,
no sobre la Totalidad considerada como una Universalidad.
 Bienes INMUEBLES (formación de Inventario Solemne + Solicitud de
Separación, y se remite a las Oficinas de Registro que correspondan, para
su protocolización. (Aplicable régimen de Hipotecas)
 Bienes MUEBLES ya enajenados. Solo referido al precio que se deba.
CONCLUSIÓN
Cuando las personas nacen, surgen a la vida jurídica, y esta se extingue
cuando mueren, es decir, desaparecen de la vida jurídica. Pero también
encontramos que un derecho subjetivo o una obligación puede cambiar de titular
sin que por ello se extinga, la cual denominamos sucesión, que no es más que el
cambio en la titularidad de una relación jurídica de carácter patrimonial. En cuanto
a la herencia, podemos señalar, que en sentido amplio y de hecho, no es más que
la porción aporte del patrimonio de una persona natural, que puede ser objeto de
sucesión por causa de muerte. Luego de desarrollado el presente trabajo,
podemos concluir, que la denominación de Derecho Sucesoral o también llamado
Derecho Hereditario, el cual se encuentra ubicado en gran parte en el derecho
civil, no es tan precisa, ya que, hemos notado que el Derecho Civil en materia de
sucesiones pareciera referirse únicamente las sucesiones universales por causa
de muerte, cuando en realidad también comprende las sucesiones mortis causas a
título particular.
Por ultimo podemos señalar que una sucesión se produce, porque un
patrimonio determinado queda sin titular, tal situación determina un llamado
efectivo a otra u otras personas, a fin de que pasen a convertirse en nuevos
titulares del patrimonio en cuestión, en conformidad con lo contemplado en la Ley.
BIBLIOGRAFÍA.

http://derechocivilvucab.blogspot.com/2013/02/tema-n-12-separacion-del-patrimonio-del.html

http://derechousm2013.blogspot.com/2015/10/5to-semestre-sucesiones.html

http://www.scielo.org.ve/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1316-00872010000200009

http://html.rincondelvago.com/derecho-heredirario.html

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