UNIVERSIDAD NACIONAL DE CAJAMARCA

ESCUELA DE POSGRADO

MAESTRÍA EN CIENCIAS SOCIALES

MENCIÓN EN GERENCIA SOCIAL

TEMA:

CAPITAL E IDEOLOGÍA

ESTUDIANTE:

Castrejón Saldaña, Treyssi Pamela

2022
APORTES DEL AUTOR:
Pikettty habla acerca de cómo las ideologías han afectado los regímenes
políticos (poder sobre los demás) y de propiedad (poder sobre las cosas), donde unidos
afectan a las sociedades esclavistas, ternarias y a la desigualdad funcional con una
justificación de orden. Menciona que “La desigualdad moderna se caracteriza por un
conjunto de prácticas discriminatorias entre estatus sociales y orígenes étnico-religiosos
que son ejercidas con una violencia mal descrita en el cuento de hadas meritocrático.”.
Es decir que existen distintas justificaciones responder al porqué de las desigualdades
económicas, políticas y sociales, para Piketty, la desigualdad es meramente ideológica y
política y de allí que se ve reflejada en la economía o tecnología de un país, para los
más ricos es natural que existan desigualdades, mientras que los más pobres luchan por
disminuirlas; sin embargo (y como ya se mencionaba en análisis de lecturas anteriores),
a la gente se le va olvidando el sufrimiento de su pasado, poco o nada importa la historia
de su país y es a partir de aquí que se repite el mismo patrón, “El progreso humano
existe, pero es un combate permanente que debe estar basado en un análisis razonado de
las experiencias históricas pasadas, con todo lo positivo y negativo que éstas
conllevan.”, reflejándose en la corrupción normalizada que tiñe la transparencia
democrática, causando fracasos significativos en las sociedades. Explica que existe la
lógica de las tres funciones (clero, nobleza y clase trabajadora), esquema trifuncional
que intenta dar una justificación a la desigualdad, dando lugar a la cuestión de jerarquía
y la complementariedad entre los dos grupos dominantes, “Las desigualdades
vinculadas a los diferentes estatus dentro de la clase trabajadora y a los orígenes étnico-
religiosos siguen desempeñando un papel central en la desigualdad moderna que no se
limita al cuento de hadas meritocrático de algunos discursos.”
 Desigualdad ideológica y Carece la transparencia
política democrática

Cuestión de jerarquía y
Las élites han naturalizado complementariedad entre dos
las desigualdades grupos dominantes

CAPITAL E
IDEOLOGÍA
Esquema trifuncional (clero, El progreso humano existe
nobleza, clase trabajadora)

Prácticas discriminatorias
entre estatus sociales y Sociedad sin memoria
orígenes ético-religiosos
 APRECIACIÓN PERSONAL:
Aunque muchas de las sociedades hayan avanzado y se hayan
desarrollado en tecnología, educación, democracia, etc., hay otras que aún no lo han
logrado (países latinoamericanos en su mayoría), esto se debe a distintas causas,
principalmente, a la historia que carga consigo y a la que sus ciudadanos han preferido
olvidar y dejar atrás; la corrupción es otro motivo por el cual no se puede avanzar, los
líderes políticos cada vez se preocupan por tener todas las comodidades posibles y dejan
de lado al pueblo. Esta corrupción afecta de mil maneras al desarrollo, no se generan
políticas que permitan dar una mejor calidad de vida ni se intenta modificar las que
existen para que la población pueda surgir con trabajo y esfuerzo, muchos profesionales
no logran encontrar trabajo y casi siempre es mejor crear un negocio mientras esperan
que la suerte apunte hacia ellos. Las desigualdades están siendo cada vez más visibles,
es cierto que podemos encontrar que han existido muchos cambios para llegar a ser
sociedades modernas, pero el pensamiento y falta de cultura de los habitantes ha hecho
que su país se quede estancado. Todos soñamos con una sociedad justa, donde los
derechos sean respetados y las leyes se cumplan, donde el líder político pueda tomar
decisiones acertadas y no en base al azar, donde las personas puedan exigir al Estado
que no robe su dinero ni se burle de ellos, pero todo esto no es más que una idealización
si no se trabaja en conjunto para cumplir con estas acciones. Las justificaciones han
cambiado, ya no en términos ideológicos, sino por desempeño y meritocracia, ahora los
individuos que sobresalen o son exitosos y con una adecuada calidad de vida, son
aquellos que tienen mejores destrezas para alcanzar el logro de sus objetivos o quienes
pertenecen a los grupos minoritarios favorecidos. El Perú es uno de los países que carga
consigo una gran crisis política, económica y social, aún más en una era donde la
pandemia se apoderó de todo y hasta fue medio de corrupción y abuso de poder. Es
importante entender que para evitar más retrocesos de los que ya hay, se necesita que se
ejerzan acciones firmes y coordinadas para enfrentar todas estas desigualdades, como:
romper con los modelos de concentración de riqueza, rentas, tierras y oportunidades,
anteponer los intereses de la mayoría a la de los siempre favorecidos, y, garantizar la
equidad y un manejo adecuado de los servicios públicos, con transparencia y
solidaridad.