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Cobaev plantel-19 EL HIGO, VER.

 Donaji Aimee Guillen Zaleta


 Grupo: 603

Materia: Física
FENOMENOS ONDULATORIOS

Reflexión y refracción del sonido

Se comprueba que las ondas sonoras se reflejan en el mismo ángulo con el que inciden,
pero se atenúa si la superficie es blanda o rugosa.
Se puede entender el mecanismo de la reflexión si se considera que las distintas presiones
sonoras trasportadas por la onda que inciden contra un material hacen que este vibre.
Parte de la energía vibratoria se devuelve al medio material mediante la reflexión y la otra
parte absorbida, a su vez, se trasforma en otros dos tipos de energía: la que disipa en el
medio y la que se transmite por el material.

Refracción del sonido en un mismo medio


La refracción es otra de las características de los movimientos ondulatorios. Consiste en el
cambio de dirección y de rapidez que sufre una onda cuando pasa de un medio a otro de
distinta características. Pero la refracción también puede producirse dentro de un mismo
medio cuando las características de este no son perfectamente homogéneas, sino que
varían en cuanto a su densidad o su temperatura y, por consiguiente, la rapidez de
propagación del sonido en el aire sufre refracciones, dada que la temperatura del aire no
es uniforme.
En un día soleado, las capas de aire próximas a la superficie terrestre están a mayor
temperatura que las capas más altas, y por lo tanto, la rapidez del sonido aumenta con la
temperatura porque las moléculas oscilan más rápidamente y transmiten al entorno la
perturbación, por ello en las capas bajas la rapidez es mayor que en las altas.
Caso contrario sucede en las noches, donde el aire próximo a la tierra se enfría más
rápidamente que el de las capas inmediatamente superiores. De este modo, el sonido
emitido desde el suelo se curva hacia abajo en las capas frías más altas. Por ello en la
noche podemos escuchar con un mayor alcance.

Absorción y aislamiento acústico


La absorción del sonido es uno de los problemas fundamentales con que se enfrentan un
ingeniero cuando desea aislar del ruido, un edificio o una zona determinada.
Afortunadamente, los distintos materiales tienen la capacidad de absorber energía
acústica según su porosidad. Basándose en esta propiedad, se decide qué materiales son
más adecuados para revestir las paredes interiores de la una sala, por ejemplo. Cuanto
más poroso es un material, más absorbente será y, por lo tanto, reflejará menos sonido.
Si una habitación tiene las paredes lisas, cuando hay varias personas hablando dentro de
ella habrá más ruido que si revestimos las mismas paredes con gruesas cortinas de tela.
Para conseguir un buen aislamiento acústico, es necesario impedir que el sonido se
trasmita, para ello es necesario materiales duros, pesados y poco elásticos. Algunos
ejemplos son hormigón, acero, plomo, etc.

Reverberación

Es la prolongación del sonido una vez que se ha extinguido la fuente sonora. Se produce
por las múltiples ondas reflejadas que continúan llegando al oído. Si las paredes fueran
reflectores perfectos, el proceso sería de duración infinita, afortunadamente, en las
paredes se absorbe sonido y el proceso tiene una duración limitada
Eco
El eco es otro fenómeno relacionado con la reflexión del sonido. Se produce cuando el
sonido inicial ya se ha extinguido y aparece un sonido igual de forma reflejada.
Cuando la superficie reflectante está suficientemente lejos, nuestro oído puede percibir
por separado la onda directa y la reflejada. Si la separación temporal entre ambos sonidos
es superior a 0,1 (s), el sonido repetido se llama eco. Es decir, el oído puede percibir dos
sonidos al menos.
Si suponemos que la rapidez del sonido es de 340 m/s, entonces la distancia que recorre
en 0,1 (s) es de 34 (m), pero como la onda debe ir y venir, entonces es de 17 (m).

Resonancia

Todos los cuerpos tienen una frecuencia de vibración propia de cada estructura, por ello
cuando recibe estímulos de una fuente ondulatoria externa de la misma frecuencia o muy
próxima, su amplitud de oscilación aumenta considerablemente.
En el caso de los instrumentos musicales es muy bueno este efecto, porque permite
amplificar el sonido, como por ejemplo la caja de resonancia de la guitarra, este efecto
también se observa al vibrar el parche de una caja o
El sonido como onda mecánica

Con mucha frecuencia una onda de sonido es una onda mecánica longitudinal, pues las
moléculas se mueven paralelas a la dirección de propagación de la onda. En los sólidos,
puede haber también componentes transversales.
Además, cuando la onda sonora se transmite en un medio homogéneo, isotrópico y sin
obstáculo, la onda de una fuente ideal se propagaría de forma idéntica en todas las
direcciones, se le denomina esférica. Sin embargo, a una distancia significativa de la
fuente, la onda sonora puede ser asimilada a una onda plana ya que el frente de la onda
(conjunto de moléculas que oscilan en el mismo estado vibratorio) tiende a ser rectilínea.
Como ejemplo para comparación, el planeta Tierra es redondo pero, sin embargo, a escala
humana es plano.

Período
El período, que se marca como T, es el intervalo de tiempo que existe entre dos estados
vibratorios idénticos sucesivos de un punto del medio en el que se propaga la onda.

Frecuencia
La frecuencia es el número de periodos por unidad de tiempo, lo que corresponde al
inverso del período: f = 1 / T, donde f es la frecuencia en Hertz (Hz o s-1) y T es el periodo
en segundos (s).
En el ejemplo escogido, la sinusoide tiene un período de 0,1 segundos. La frecuencia
corresponde al número de períodos por segundo, es decir, el número de veces que se
repita el patrón, es decir 10 veces. La frecuencia es, por tanto, de 10 Hz. Al aplicar la
inversa del periodo se obtiene también este valor: f = 1/0, 1 = 10 Hz

Longitud de onda
La longitud de onda es la distancia que separa dos moléculas sucesivas en el mismo estado
vibratorio (misma presión y velocidad acústica) o la distancia recorrida por la onda
durante un período.

En el ejemplo elegido aquí, la longitud de onda está representada como la distancia que
separa dos máximos de compresión (líneas gruesas sucesivas); en el instante t, cada
molécula separada por la longitud está sometida a una presión y una velocidad acústica
idénticas.
En un medio determinado, la frecuencia y la longitud de onda están relacionadas por la
fórmula: λ = c / f = c * T ; en la que λ es la longitud de onda en metros (m), c la velocidad
de propagación de la onda en metros por segundo (ms-1), f es la frecuencia (Hz) y T es el
período (s). Para una sinusoide de frecuencia de 10 Hz y una velocidad de propagación de
la onda igual a 340 ms-1, la longitud de onda es de 34 metros.
Cuanto mayor es la longitud de onda, más se reduce la frecuencia. A la inversa, cuanto
menor es la longitud mayor es la frecuencia.

Potencia sonora
Expresada en vatios, la potencia sonora es la energía suministrada por una fuente de
sonido durante un intervalo de tiempo determinado. Se puede definir por la fórmula: P = E
/ At; donde P es la potencia acústica en vatios (W), E es la energía acústica en julios (J), y
At es un intervalo de tiempo (s). Esta variable solo depende de las características de la
fuente.
Atención, no tiene nada que ver con la potencia eléctrica de un sistema sonoro (por
ejemplo de unos altavoces), que es a veces varias decenas de vatios. La potencia eléctrica
permitirá que se genere una energía acústica.

La intensidad del sonido (o densidad de potencia)


Expresada en vatios por metro cuadrado (Wm-2), la intensidad acústica corresponde a la
energía acústica que pasa en un segundo por una unidad de superficie perpendicular a las
ondas sonoras. En el caso de una fuente de ondas esféricas, está relacionada con la
potencia mediante la fórmula: I = W / (4 * π * r ²), donde I es la intensidad acústica (Wm-
2), W es la potencia acústica (W) y r es la distancia r entre la fuente del sonido y un punto
de medida (m). Por lo tanto, la intensidad no solo depende de las características de la
fuente a partir de la potencia sino también de la distancia entre la fuente y el punto en el
que se hace la medida.
Si la distancia entre el punto de medida y la fuente se duplica la intensidad se dividirá por
cuatro.

Presión sonora
La presión p es la tensión aplicada la superficie de un cuerpo. Corresponde a la fuerza por
unidad de área. En reposo, las moléculas están sometidas a la presión atmosférica.
Cuando el medio es alterado, el movimiento de las moléculas provoca variaciones locales
de la presión, que es la presión acústica. La presión y la intensidad del sonido están
relacionadas por la fórmula: I = p ² / (ρ * c), en donde I es la intensidad (Wm-2), p es la
presión acústica en un punto expresada en Pascal (Pa), ρ es la densidad del medio (kg.m-
3), c la velocidad de propagación de la onda (ms-1).
Cuando la presión se duplica la intensidad acústica queda multiplicada por 4.
La luz como onda electromagnética
Hasta mediados del S XIX las distintas teorías relacionadas con la electricidad y el magnetismo
estaban muy fragmentadas: Existían distintas obras que trataban de dar explicación a los
experimentos magnéticos y eléctricos conocidos en la época, pero faltaba una teoría que
los unificara. La síntesis electromagnética realizada por Maxwell permitió unificar y
explicar mediante una sola teoría los fenómenos eléctricos, magnéticos y ópticos
conocidos en la época.

Una onda electromagnética es una perturbación periódica del campo eléctrico E→ y


del magnético B→ que se propaga en el espacio a la velocidad constante de la luz. Se
trata de ondas transversales en las que el campo eléctrico y el magnético, en fase, son
perpendiculares entre sí y, a su vez, perpendiculares a la dirección de propagación.

Síntesis Electromagnética
El campo eléctrico, en naranja, y el magnético, en verde, son perpendiculares entre sí y, a
su vez, perpendiculares a la dirección de propagación, indicada por el vector azul. Ambos
constituyen una onda electromagnética.

Maxwell llegó a dos conclusiones importantes:


 Un campo magnético variable con el tiempo induce la aparición de un campo
eléctrico proporcional a la rapidez con que cambia el flujo magnético y
perpendicular a aquel
 Un campo eléctrico variable con el tiempo induce la aparición de un campo
magnético proporcional a la rapidez con que cambia el flujo eléctrico y
perpendicular a aquel

Características

 Al contrario que las ondas mecánicas, las ondas electromagnéticas pueden


propagarse en el vacío, además de hacerlo en el aire o materiales sólidos
 Los módulos de los campos eléctricos y magnéticos están relacionados mediante la
expresión E=c⋅B
 La dirección de propagación de la onda, perpendicular a los vectores E→ y B→ , es
la misma que la del producto vectorial E→×B→
 Si la onda electromagnética se propaga en el eje x, el campo eléctrico "apuntará"
en el eje y y el magnético en el eje z.

 La velocidad de propagación depende del medio. Concretamente, la velocidad de


las ondas en el vacío es independiente de la longitud de onda y viene dada por:

Espectro electromagnético

Existe una gran cantidad de ondas electromagnéticas distintas, según su frecuencia y


longitud de onda. La luz visible es, como hemos visto, una parte pequeña de estas ondas.

El espectro electromagnético es el conjunto ordenado de todas las frecuencias o


longitudes de onda en que puede descomponerse la radiación electromagnética.
Tradicionalmente se suelen establecer 7 zonas que son, de menor a mayor frecuencia: las
ondas de radio, las microondas, los infrarrojos, la luz visible, los ultravioleta, los rayos X y
los rayos gamma.

Te presente que la frecuencia y la longitud de onda se encuentran relacionadas a partir de


la velocidad de la luz que en el vacío, como hemos dicho, es igual para todas las ondas
electromagnéticas:

c=λ⋅f
Así mismo, recuerda que para una misma amplitud de onda, a mayor frecuencia
mayor energía.

Espectro Electromagnético
Tradicionalmente dividimos el espectro electromagnético en 7 zonas, aunque los límites
no son nítidos.

Las regiones en las que queda dividido el espectro electromagnético son, de menor a
mayor frecuencia (o de mayor a menor longitud de onda):

 Ondas de radio: Son las que tienen una frecuencia menor. Normalmente se
generan mediante circuitos oscilantes. Fue Heinrich Rudolf Hertz su descubridor
(en su honor se denomina la unidad de frecuencia hercio), al generarlas y
detectarlas por primera vez mediante dispositivos de laboratorio. Fue Guglielmo
Marconi quien por primera vez las utilizó de manera práctica para realizar una
transmisión telegráfica inalámbrica
 Microondas: En el orden de frecuencias comprendido entre los 109 Hz y 1012 Hz. Se
suelen producir mediante los movimientos de rotación y vibración de las
moléculas. Se emplea, por ejemplo, en la telefonía móvil, en los hornos
microondas y en las comunicaciones con vehículos espaciales
 Infrarrojo: En el orden de frecuencias comprendido entre los 1012 Hz y los
3·1014 Hz. Son emitidos por cuerpos calientes. Hay aplicaciones, por ejemplo, en
los controles remotos, mandos a distancia, sensores y medicina.
 Visible: Se trata de la zona más estrecha del espectro con frecuencias que oscilan
entre 3·1014 Hz y 7·1014 Hz. Es lo que comúnmente conocemos como luz y son
ondas electromagnéticas capaces de ser captadas por nuestros ojos. Normalmente
se generan a partir de una excitación eléctrica de átomos o moléculas, que emiten
la energía sobrante en forma de radiación. El color rojo y el violeta se encuentran
en los extremos, de ahí los nombres de las zonas anterior (infrarrojo) y posterior
(ultravioleta) del espectro
 Ultravioleta: Sus frecuencias están comprendidas en el rango entre los 7·1014 Hz y
los 3·1017 Hz. Se producen, al igual que en el caso de la luz visible, por el tránsito
electrónico en átomos y moléculas. Existen, a su vez, distintos subgrupos dentro de
esta región entre los que destacan UV-A, UV-B y UV-C. La radiación ultravioleta es
parte integrante de los rayos solares produciendo los rayos UV-A, UV-B y UV-C
distintos efectos sobre la salud. En general, la capa de ozono nos protege de estos
rayos pero deben ser evitadas exposiciones prolongadas a los mismos. Sus
aplicaciones son muy variadas, desde la esterilización a la eliminación de moscas y
mosquitos
 Rayos X: Sus frecuencias están comprendidas en el rango entre los 3·1017 Hz y los
3·1019 Hz. Se pueden producir haciendo incidir electrones de gran energía sobre
metales. Se suelen emplear como herramientas de diagnóstico, siendo muy
populares sus usos en las radiografías, en donde su elevada energía exige de una
cuidadosa dosificación de los mismos para que no resulten peligrosos
 Rayos gamma: Con frecuencias superiores a 3·1019 Hz. Son generados en algunos
núcleos radiactivos y en algunas radiaciones nucleares. Son peligrosos para toda
forma de vida, siendo sólo absorbidos por el plomo o el hormigón con cierto
grosor, pero se han encontrado útiles para combatir células cancerosas en
tratamientos de radioterapia.

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