MANUAL ARMAMENTO Y TIRO

2
 Introducción
P
uede parecer redundante
decirlo; pero, así como las
propias armas de fuego pueden
oxi- darse durante períodos de
tiempo en los que se guardan,
también lo hará nuestra práctica y
nuestra res- puesta cognitiva, ante
una situación de riesgo que
involucre el uso de
nuestra arma de fuego.
Controlar una serie de factores
químicos, biológicos y externos, así
como el arma de fuego en un
mo- mento de pánico, puede ser
casi imposible sin el entrenamiento
ade- cuado; por lo que es
imperativo que los aspirantes a
policías y los mis- mos oficiales
practiquen con regu- laridad.
Con solo un poco de práctica,
los accidentes se pueden reducir
signi- ficativamente, pero lo que
es más importante, los policías
pueden es- tar a la altura de las
circunstancias
para proteger a la ciudadanía y de la
manera más eficiente posible.
Si este hecho no lo dice todo,
es posible que no se comprenda
com- pletamente la gravedad de un
arma de fuego mal empleada. Uno
de los principales objetivos de la
práctica es que los policías
tengan la habili- dad de
asegurarse que los tiempos de
reacción sean rápidos, y que cada
disparo cuente.
Para los funcionarios
encargados de hacer cumplir la
ley, la imperio- sa necesidad de
responder rápida- mente en una
situación de peligro es lo que
principalmente logra la práctica.
Claro, la precisión siempre se
puede mejorar, pero el tiempo de
reacción debe construirse a
través de la experiencia en el
servicio o en el stand de tiro.
3
 Para reducir los posibles errores que se cometen
du- rante el servicio, se puede realizar un
entrenamiento intensivo de tiro de reacción o
precisión, cursos o si- muladores virtuales con la
finalidad de que los aspi- rantes a policías y los
oficiales ganen total confianza con su arma de
fuego; pero, principalmente, se rela- cionen con su
uso cotidiano y su manejo, sin el miedo con el que
comúnmente las utilizamos.
Cuanto más tiempo pase una persona sin disparar,
menos familiarizada estará con su arma de fuego y el
proceso que comprende el disparo. Sin embargo,
el desarrollo de la competencia de tiro y su
perfecciona- miento debe ser el objetivo primordial
del presente Manual en la Universidad de la Policía
de la Ciudad de México.
Marco Normativo
Objetivo de la Unidad
Conocer la normatividad jurídica que rige el
actuar policial, en el uso de la fuerza y el empleo de
las armas de fuego, a fin de desempeñar su servicio
con legali- dad y respeto a los derechos humanos.
4
Introducción
La Oficina de la Naciones Unidas contra la Droga y
el Delito, en el Manual de instrucciones para la
eva- luación de la justicia penal, define que la policía
es el componente más obvio y visible del sistema de
justi- cia penal y un servicio policial respetado, es
condición indispensable para la percepción positiva
de la justi- cia. Asimismo, que las funciones, poderes
y procedi- mientos de la policía, suelen estar
definidos y limita- dos por ley.
Las leyes pertinentes pueden consistir en la Ley de
la Policía, Código de Procedimientos Penales, Código
Penal o todos ellos. La Ley de policía suele abarcar
los elementos orgánicos, así como los poderes
pertinen- tes de una fuerza policial, sobre todo en la
esfera del orden público.
La adopción de leyes y reglamentos firmes,
pueden tener un efecto neutralizador y positivo. Por
tal moti- vo, las leyes pertinentes deben:
• Establecer límites claros entre lo que es
acepta- ble y lo que no
• Definir exactamente la medida de los
poderes de la policía (incluida la forma en
que deben aplicarse)
• Establecer códigos de conducta detallados en Constitución Política de los Estados
todas las esferas de actividad policial
Unidos Mexicanos
• Crear la presunción y el compromiso de que las
contravenciones de estos códigos estarán suje-
tos a sanciones
* Artículo 10
Los habitantes de los Estados Unidos Mexicanos
• Exigir el establecimiento de estructuras institu-
tie- nen derecho a poseer armas en su domicilio,
cionales para la propagación, difusión y obser-
para su seguridad y legítima defensa, con
vancia de las normas profesionales
excepción de las prohibidas por la Ley Federal y de
las reservadas para el uso exclusivo de la Fuerza
• Dejar bien sentadas las consecuencias del in-
Armada permanente y los cuerpos de reserva. La Ley
cumplimiento de esas normas
Federal determinará los ca- sos, condiciones,
requisitos y lugares en que se podrá autorizar a los
habitantes la portación de armas.

Artículo reformado DOF 26-03-2019

* Artículo 21, Párrafo Noveno

La seguridad pública es una función del Estado a
cargo de la Federación, las entidades federativas y
los Muni- cipios, cuyos fines son salvaguardar la
vida, las liber- tades, la integridad y el patrimonio
de las personas, así como contribuir a la generación
y preservación del orden público y la paz social, de
conformidad con lo previsto en esta Constitución y
las leyes en la materia. La seguridad pública
comprende la prevención, inves- tigación y
persecución de los delitos, así como la san- ción de
las infracciones administrativas, en los térmi- nos de
la ley, en las respectivas competencias que esta
Constitución señala.

La actuación de las instituciones de seguridad

pú- blica se regirá por los principios de legalidad,
objeti- vidad, eficiencia, profesionalismo, honradez y
respeto a los derechos humanos reconocidos en esta
Consti- tución.

5

Ley General del Sistema Nacional
de Seguridad Pública
* Artículo 40
Con el objeto de garantizar el cumplimiento de los
principios constitucionales de legalidad, objetividad,
eficiencia, profesionalismo, honradez y respeto a los
derechos humanos, los integrantes de las Institucio-
nes de Seguridad Pública se sujetarán a las
siguientes obligaciones:
III. Prestar auxilio a las personas amenazadas por
al- gún peligro o que hayan sido víctimas u
ofendidos de algún delito, así como brindar
protección a sus bienes y derechos. Su actuación
será congruente, oportuna y proporcional al hecho.
IX. Mantener en buen estado el armamento, mate-
rial, municiones y equipo que se le asigne con
motivo de sus funciones, haciendo uso racional de
ellos sólo en el desempeño del servicio.
* Artículo 41
Siempre que se use la fuerza pública se hará de
mane- ra racional, congruente, oportuna y con
respeto a los derechos humanos. Para tal efecto,
deberá apegarse a la Ley Nacional sobre el Uso de la
Fuerza; así como a las demás disposiciones
normativas y administrativas aplicables, realizándolas
conforme a derecho.
Párrafo reformado DOF 27-05-2019
10
MANUAL DE
Ley Nacional Sobre el Uso de
la Fuerza
* Artículo 4
El uso de la fuerza se regirá por los principios de:
I. Absoluta necesidad: para que el uso de la
fuer- za sea la última alternativa para tutelar la vida e
inte- gridad de las personas o evitar que se vulneren
bienes jurídicamente protegidos o con el fin de
mantener el orden y la paz pública, al haberse
agotado otros me- dios para el desistimiento de la
conducta del agresor;
II. Legalidad: para que la acción de las institu-
ciones de seguridad se realice con estricto apego a la
Constitución, a las leyes y a los Tratados
Internaciona- les de los que el Estado mexicano sea
parte;
III. Prevención: para que los operativos para el
cumplimiento de la ley sean planificados y se lleven a
cabo, en la medida de lo posible, minimizando el uso
de la fuerza y, cuando esto sea inevitable,
reduciendo al mínimo los daños que de ello puedan
resultar;
IV. Proporcionalidad: para que el nivel de fuerza
utilizado sea acorde con el nivel de resistencia
ofrecido por el agresor y el nivel de riesgo exhibido,
de tal forma que los agentes apliquen medios y
métodos bajo un criterio de uso diferenciado y
progresivo de la fuerza y;
V. Rendición de cuentas y vigilancia: para que
existan controles que permitan la evaluación de
las acciones de uso de la fuerza y sea valorada su
eficacia en términos del desempeño de las
responsabilidades y funciones previstas por esta Ley.
 MANUAL DE
* Artículo 5
El uso de la fuerza se hará en todo momento con
pleno respeto a los derechos humanos.
* Artículo 11
Los niveles del uso de la fuerza, según el orden en
que deben agotarse, son:
I. Presencia de autoridad: es la primera forma
de contacto que tienen los agentes con la ciudadanía
en general. Se manifiesta a través de:
a. El uso adecuado del uniforme;
b. El uso adecuado de equipo, acorde a
las circunstancias y;
c. Una actitud diligente.
II. Persuasión o disuasión verbal: a través del
uso de palabras o gesticulaciones que sean cataloga-
das como órdenes y que permitan a la persona
facilitar a los agentes a cumplir con sus funciones;
III. Reducción física de movimientos: mediante
acciones cuerpo a cuerpo a efecto de que se controle
a la persona que se ha resistido y ha obstaculizado
que los agentes cumplan con sus funciones;
IV. Utilización de armas incapacitantes menos
letales: a fin de someter la resistencia activa de una
persona y;
V. Utilización de armas de fuego o de fuerza le-
tal: para repeler las resistencias de alta peligrosidad.
* Artículo 12
El uso de la fuerza solo se justifica cuando la
resisten- cia o agresión es:
I. Real: si la agresión se materializa en hechos
apreciables por los sentidos, sin ser hipotética ni ima-
ginaria;
II. Actual: si la agresión se presenta en el
mo- mento del hecho, no con anterioridad o
posterioridad e;
III. Inminente: si la agresión está próxima a ocu-
rrir y, de no realizarse una acción, esta se
consumaría.
* Artículo 15
Los agentes podrán tener a su cargo y portar las
si- guientes armas:
I. Incapacitantes menos letales:
a. Bastón PR-24, tolete o su equivalente, de
acuerdo con las disposiciones aplicables;
b. Dispositivos que generan descargas eléctricas;
c. Esposas o candados de mano;
d. Sustancias irritantes en aerosol, y
e. Mangueras de agua a presión.
II. Letales:
a. Armas de fuego permitidas, y
b. Explosivos permitidos, en este y en el
inciso anterior, en términos de la Ley Federal de
Armas de Fuego y Explosivos.
11

Las instituciones de seguridad deberán dotar a
los agentes con el equipo de protección y vehículos
con y sin blindaje, a fin de proteger su integridad y
disminuir la necesidad del uso de armas de cualquier
tipo.
En todos los casos, las armas que se autoricen
para los cuerpos de policía deberán apegarse a lo
estableci- do en el párrafo tercero del artículo 24 de
la Ley Fede- ral de Armas de Fuego y Explosivos.
Código Nacional de Procedimientos
Penales (Obligaciones del Policía)
* Artículo 132
El Policía actuará bajo la conducción y mando del Mi-
nisterio Público en la investigación de los delitos en
es- tricto apego a los principios de legalidad,
objetividad, eficiencia, profesionalismo, honradez y
respeto a los derechos humanos reconocidos en la
Constitución.
IV. Impedir que se consumen los delitos o que
los hechos produzcan consecuencias ulteriores.
Especial- mente estará obligada a realizar todos los
actos nece- sarios para evitar una agresión real,
actual o inminente y sin derecho en protección de
bienes jurídicos de los gobernados a quienes tiene la
obligación de proteger.
Ley Federal de Armas de Fuego y
Ex- plosivos
* Artículo 9
Pueden poseerse o portarse, en los términos y con
las limitaciones establecidas por esta Ley, armas
de las características siguientes:
12
MANUAL DE
I. Pistolas de funcionamiento semi-
automático de calibre no superior al .380 (9mm.),
quedando excep- tuadas las pistolas calibres .38
Super y .38 Comando, y también en calibres 9 mm,
las Mausser, Luger, Parabe- llum y Comando, así
como los modelos similares del mismo calibre de
las exceptuadas, de otras marcas.
II. Revólveres en calibres no superiores al .38
Es- pecial, quedando exceptuado el calibre .357
Magnum.
* Artículo 11 Último párrafo
Las armas, municiones y materia para el uso
exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea,
mediante la jus- tificación de la necesidad, podrán
autorizarse por la Secretaría de la Defensa Nacional,
individualmente o como corporación, a quienes
desempeñen empleos o cargos de la Federación, del
Distrito Federal, de los Es- tados o de los Municipios.
* Artículo 13 Párrafo primero
No se considerarán como armas prohibidas los uten-
silios, herramientas o instrumentos para labores
de campo o de cualquier oficio, arte, profesión o
deporte que tengan aplicación conocida como
tales, pero su uso se limitará al local o sitio en que
se trabaje o prac- tique el deporte.
* Artículo 15 Párrafo primero
En el domicilio se podrán poseer armas para la
seguri- dad y defensa legítima de sus moradores. Su
posesión impone el deber de manifestarlas a la
Secretaría de la Defensa Nacional, para su registro.
 MANUAL DE

* Artículo 24 Último párrafo que exista la misma obliga-

Para portar armas se requiere la licencia

respectiva. Los integrantes de las instituciones
policiales, fede- rales, estatales, del Distrito Federal
y municipales, así como de los servicios privados de
seguridad, podrán portar armas en los casos,
condiciones y requisitos que establecen la presente
ley y las demás disposicio- nes legales aplicables.

Las licencias para la portación de armas serán de

dos clases:

I. Particulares; que deberán revalidarse cada

dos años, y

II. Oficiales, que tendrán validez mientras se

des- empeñe el cargo o empleo que las motivó.

Código Penal Federal (Causas de

Ex- clusión del Delito)

* Artículo 15
El delito se excluye cuando:

IV. Se repela una agresión real, actual o inminente, y

sin derecho, en protección de bienes jurídicos
propios o ajenos, siempre que exista necesidad de la
defensa y racionalidad de los medios empleados y no
medie pro- vocación dolosa suficiente e inmediata
por parte del agredido o de la persona a quien se
defiende.

Se presumirá como defensa legítima, salvo prue-

ba en contrario, el hecho de causar daño a quien por
cualquier medio trate de penetrar, sin derecho, al
ho- gar del agente, al de su familia, a sus
dependencias, o a los de cualquier persona que
tenga la obligación de defender, al sitio donde se
encuentren bienes propios o ajenos respecto de los

13
 MANUAL DE

ción; o bien, lo encuentre en alguno de protección fí- sica y los bienes de las personas;
aquellos luga- res en circunstancias tales
que revelen la probabilidad de una agresión; II. La prevención y contención de las violencias;

Constitución Política de la
Ciudad de México (Modelo de
policías de proxi- midad y de
investigación)

* Artículo 43
Los cuerpos policiacos y sus integrantes en
sus funcio- nes darán prioridad al
convencimiento, a la solución pacífica de
los conflictos y en su actuación respetarán
los derechos humanos de todos, incluidos
las víctimas, los testigos e indiciados. El uso
de la fuerza será excep- cional, proporcional
y como último recurso.

Ley del Sistema de Seguridad

Ciuda- dana de la CDMX

* Artículo 51
Los cuerpos policiales se encuentran al
servicio de la sociedad. En el ejercicio de
sus funciones darán prio- ridad al
convencimiento, a la solución pacífica de
los conflictos y respetarán los derechos
humanos de to- das las personas incluidas
las víctimas, los testigos, detenidos,
indiciados o procesados.

Los cuerpos policiales implementarán el

modelo de policías ciudadanas de
proximidad y de investigación. Dicho modelo
está orientado a garantizar:

I. El Estado de Derecho, la vida, la

14
 MANUAL DE

III. La prevención del delito y el combate a la Ley que Regula el Uso de la Fuerza de
de- lincuencia;
los Cuerpos de Seguridad Pública
IV. Los derechos humanos de todas las
del Distrito Federal
personas;

V. El funcionamiento adecuado de instituciones * Artículo 5

de seguridad y justicia;
VI. La objetividad y legalidad de sus
actuaciones, por medio de un mecanismo de control
y transparen- cia; y
VII. El buen trato y los derechos de las personas
Los cuerpos de seguridad pública asignarán las
armas solamente al Policía que hubiere aprobado la
capaci- tación establecida para su uso, y éste a su
vez, sólo po- drá usar las armas que le hayan sido
asignadas.

* Artículo 6
* Artículo 56
La Policía podrá tener a su cargo y portar las
Los derechos y obligaciones de las personas siguientes armas:
integran- tes de las Instituciones de Seguridad
Ciudadana y de los cuerpos Policiales serán las I. Incapacitantes no letales:
establecidas en la Ley General, en esta Ley y en las
demás disposiciones apli- cables siempre que se use a. Bastón PR-24, tolete o su
la fuerza pública se hará de manera racional, equivalen- te, de acuerdo con las
congruente, oportuna y con respeto a los derechos disposiciones aplicables;
humanos de todas las personas inclui- das las
víctimas, los testigos e indiciados. b. Dispositivos que generan
descargas eléctricas;
El uso de la fuerza será excepcional, se utilizará
como último recurso y se sujetará a los principios c. Esposas o candados de mano; y
constitu- cionales de legalidad, necesidad,
proporcionalidad, racionalidad y oportunidad, así d. Sustancias irritantes en aerosol.
como a las disposicio- nes de la Ley Nacional sobre
el Uso de la Fuerza. II. Letales:

a. Armas de fuego

14
 MANUAL DE

* Artículo 8 no ga- ranticen de ninguna manera el logro

del resultado previsto
Cuando estén en riesgo los derechos y garantías
de personas e instituciones, la paz pública y la
seguridad ciudadana, la Policía podrá utilizar la
fuerza, siempre que se rija y observe los siguientes
principios:

I. Legal: que su acción se encuentre estricta-

mente apegada a la Constitución Política de los Esta-
dos Unidos Mexicanos, a la Ley General que
establece las bases de Coordinación del Sistema
Nacional de Seguridad Pública, a la Ley de
Seguridad Pública del Distrito Federal, a la presente
Ley y a los demás orde- namientos aplicables;

II. Racional: que el uso de la fuerza esté

justifi- cado por las circunstancias específicas y
acordes a la situación que se enfrenta:

a. Cuando es producto de una

decisión que valora el objetivo que
se persi- gue, las circunstancias del
caso y las capacidades tanto del
sujeto a con trolar, como de la
Policía;

b. Cuando sea estrictamente necesario

en la medida en que lo requiera el
desempeño de las tareas de la
Policía;

c. Cuando se haga uso diferenciado

de la fuerza;

d. Cuando se usen en la medida de lo

posible los medios no violentos an-
tes de recurrir al empleo de la
fuerza y de las armas;

e. Cuando se utilice la fuerza y las ar-

mas solamente después de que
otros medios resulten ineficaces o

15
 MANUAL DE

III. Congruente: que exista relación y

equilibrio entre el nivel de uso de fuerza
utilizada y el detrimento que se cause a la
persona;

IV. Oportuno: que se aplique el uso

de la fuerza de manera inmediata para
evitar o neutralizar un daño o peligro
inminente o actual, que vulnere o lesione la
integridad, derechos o bienes de las
personas, las li- bertades, la seguridad
ciudadana o la paz pública; y

V. Proporcional: que el uso de la fuerza

sea ade- cuado y corresponda a la acción
que se enfrenta o in- tenta repeler. Ningún
Policía podrá ser sancionado por negarse a
ejecutar una orden notoriamente inconstitu-
cional o ilegal, o que pudiera constituir un
delito. Toda orden con estas características
deberá ser reportada al superior jerárquico
inmediato de quien la emita.

El Policía podrá hacer uso de la fuerza, en

las siguien- tes circunstancias:

I. Someter a la persona que se resista

a la deten- ción ordenada por una autoridad
competente o luego de haber infringido
alguna ley o reglamento;

II. Cumplir un deber o las órdenes

lícitas giradas por autoridades competentes;

III. Prevenir la comisión de conductas ilícitas;

IV. Proteger o defender bienes

jurídicos tutela- dos; o

V. Por legítima defensa

16
 MANUAL DE

* Artículo 9 La persuasión o disuasión verbal realizada por el

Poli- cía en cumplimiento de sus funciones, de
Los distintos niveles en el uso de la fuerza son: conformidad con lo establecido en la Ley y demás
disposiciones apli- cables, no constituyen
I. Persuasión o disuasión verbal: a través de provocación dolosa.
la utilización de palabras o gesticulaciones, que sean
ca- talogadas como órdenes, y que con razones
permitan a la persona facilitar a la Policía cumplir
con sus fun- ciones;

II. Reducción física de movimientos: mediante

acciones cuerpo a cuerpo a efecto de que se someta
a la persona que se ha resistido y ha obstaculizado
que la Policía cumpla con sus funciones;

III. Utilización de armas incapacitantes no

letales, a fin de someter la resistencia violenta de
una persona; y
IV. Utilización de armas de fuego o de fuerza
letal, a efecto de someter la resistencia violenta
agravada de una persona.
El Policía obra en legítima defensa cuando repele
una agresión real, actual o inminente y sin derecho
en protección de bienes jurídicos propios o ajenos,
siem- pre que exista necesidad en la defensa,
racionalidad y proporcionalidad en los medios
empleados.
* Artículo 10
Ley Orgánica de la Secretaría de Se-
guridad Ciudadana
* Artículo 27
El mantenimiento de la tranquilidad y el orden
públi- cos comprende lo siguiente:
I. Proteger la integridad física de las personas y
sus bienes;
II. Intervenir en caso de delito flagrante, a
efecto de perseguir, detener y presentar al indiciado
ante el Ministerio Público;

El Policía sólo empleará armas de fuego en III. Prevenir la comisión de infracciones y delitos;
defensa propia o de otras personas, en caso de
peligro inmi- nente de muerte o de lesiones graves, IV. Prestar auxilio a la población en caso de
o con el propó- sito de evitar la comisión de un delito sinies- tros, emergencias y desastres, y
particularmente grave que entrañe una seria
amenaza para la vida o con el objeto de detener a V. Detener y presentar inmediatamente a proba-
una persona que represente ese peligro y oponga bles infractores ante la Persona Juzgadora
resistencia o por impedir su fuga, y sólo en el caso
que resulten insuficientes medidas menos extremas
para lograr dichos objetivos.

16
 MANUAL DE

Código Penal para el Distrito Federal Acuerdo 3/2016 Protocolo de Actua-

(Causas de Exclusión del Delito) ción para la Realización de Deten-
ciones en el Marco del Sistema Penal
Acusatorio
* Artículo 29
El delito se excluye cuando concurra una causa de * Capítulo V Uso de la Fuerza
ati- picidad, causas de justificación o causas de para la Detención
inculpabi- lidad.
5.1. Cuando la persona ofrezca resistencia
B. Habrá causas de justificación, cuando: para realizar la detención, las y los integrantes de la
Policía, podrán hacer uso de la fuerza, debiendo regir
I. (Legítima defensa). Se repela una agresión real, su intervención conforme a la Ley y su Reglamento,
actual o inminente y sin derecho, en defensa de bajo los siguientes principios:
bienes jurídicos propios o ajenos, siempre que exista
necesi- dad de la defensa empleada y no medie I. Legalidad;
provocación dolosa suficiente e inmediata por parte
del agredido o de su defensor. Se presume que existe II. Racionalidad;
legítima defen- sa, salvo prueba en contrario, cuando
se cause un daño a quien por cualquier medio trate III. Proporcionalidad;
de penetrar o pene- tre, sin derecho, al lugar en que
habite de forma tem- poral o permanente el que se IV. Oportunidad, y
defiende, al de su familia o al de cualquier persona
respecto de las que el agente tenga la obligación de V. Congruencia
defender, a sus dependencias o al sitio donde se
encuentren bienes propios o ajenos respecto de los
que exista la misma obligación. Igual presunción * Disposiciones Especiales
existirá cuando el daño se cause a un intru- so al
momento de sorprenderlo en alguno de los luga- res 5.2.Las y los integrantes de la Policía están
antes citados en circunstancias tales que revelen la facultados para usar la fuerza, para la detención de
posibilidad de una agresión. una o varias personas, conforme a los siguientes
niveles:

I. Persuasión o disuasión verbal, a través de

la utilización de palabras o gesticulaciones, que sean
ca- talogadas como órdenes, y que con razones
permitan a la persona facilitar a las y los integrantes
de la Policía cumplir con sus funciones;

II. Reducción física de movimientos, mediante

acciones cuerpo a cuerpo a efecto de que se someta
a la persona que se ha resistido y ha obstaculizado
que

17

las y los integrantes de la Policía cumplan con sus
fun- ciones;
III. Utilización de armas incapacitantes no
letales, a fin de someter la resistencia violenta de
una persona, esto es, cuando una persona realiza
acciones u omisio- nes con el propósito de provocar
lesiones a sí mismo, a un tercero o al Policía o con el
fin de dañar bienes pro- pios o ajenos, a efecto de
impedir que sea detenido; y
IV. Utilización de armas de fuego o de fuerza
letal, a efecto de someter la resistencia violenta
agravada de una persona, esto es, cuando las
acciones u omisiones de una persona representan
una agresión real, actual o inminente y sin derecho a
la vida propia, de terceros
o del Policía, a efecto de impedir que sea detenido.
Cuando las y los integrantes de la Policía obren
en legítima defensa, podrán emplear, de manera
excep- cional cualquier objeto, instrumento, aparato,
maqui- na o artefacto; asimismo, obrarán de este
modo por encontrarse en tal desventaja de fuerza,
numérica o de equipamiento que represente un
peligro inminente de muerte o lesiones graves.
Marco Normativo Internacional sobre
el Uso de la Fuerza y Empleo de Ar-
mas de Fuego
Principios Básicos sobre el Empleo de la Fuerza y
de Armas de Fuego por los Funcionarios Encargados
de Hacer Cumplir la Ley:
2. Los gobiernos y los organismos encargados de
ha- cer cumplir la ley establecerán una serie de
métodos lo más amplia posible y dotarán a los
funcionarios co- rrespondientes de distintos tipos de
armas y municio- nes de modo que puedan hacer
un uso diferenciado de la fuerza y de las armas de
fuego.
18
MANUAL DE
4. Los funcionarios encargados de hacer cumplir la
ley*, en el desempeño de sus funciones, utilizarán en
la medida de lo posible medios no violentos antes de
recurrir al empleo de la fuerza y de armas de
fuego. Podrán utilizar la fuerza y armas de fuego
solamente cuando otros medios resulten ineficaces o
no garanti- cen de ninguna manera el logro del
resultado previsto.
9. Los funcionarios encargados de hacer cumplir la
ley no emplearán armas de fuego contra las
personas salvo en defensa propia o de otras
personas, en caso de peligro inminente de muerte
o lesiones graves, o con el propósito de evitar la
comisión de un delito particularmente grave que
entrañe una seria amenaza para la vida, o con el
objeto de detener a una persona que represente ese
peligro y oponga resistencia a su autoridad, o para
impedir su fuga, y sólo en caso de que resulten
insuficientes medidas menos extremas para lograr
dichos objetivos. En cualquier caso, sólo se podrá
hacer uso intencional de armas letales cuando sea
estrictamente inevitable para proteger una vida.
* De conformidad con el Código de Conducta para
Fun- cionarios Encargados de Hacer Cumplir la Ley, la
expre- sión “funcionarios encargados de hacer
cumplir la ley” incluye a todos los agentes de la ley,
ya sean nombrados o elegidos, que ejercen funciones
de policía, especialmente las facultades de arresto o
detención.
Código de Conducta para Funciona-
rios Encargados de Hacer Cumplir la
Ley (Adoptado por la Asamblea Ge-
neral en su resolución 34/169, de 17
de diciembre de 1979)
Artículo 3: Los funcionarios encargados de hacer
cum- plir la ley podrán usar la fuerza sólo cuando sea
estric- tamente necesario y en la medida que lo
requiera el desempeño de sus tareas.
 MANUAL DE
Inciso c). El uso de armas de fuego se considera
una medida extrema. Deberá hacerse todo lo posible
por excluir el uso de armas de fuego, especialmente
contra niños. En general, no deberán emplearse
armas de fue- go excepto cuando un presunto
delincuente ofrezca resistencia armada o ponga en
peligro, de algún otro modo, la vida de otras
personas y no pueda reducirse o detenerse al
presunto delincuente aplicando medidas menos
extremas. En todo caso en que se dispare un arma
de fuego, deberá informarse inmediatamente a las
autoridades competentes.
Entorno Psicoemocional del Tirador
* Objetivo de la unidad
Identificar los conceptos básicos de las emociones
y sus funciones en la psique del tirador, para crear
he- rramientas que permitan regular el actuar
policial.
* Introducción
El aprendizaje de las emociones se puede llevar a
cabo por medio de las diferentes teorías y métodos
de los expertos que han dedicado décadas en sus
trabajos de investigación a conocer las emociones y
sus funciones, desde diversos puntos de vista.
Entender sobre las emociones permitirá que las
identifiques, aceptes y regules para modificarlas
de manera positiva. Además, regulará la conducta
de acuerdo con los principios de la actuación policial,
en el uso de armas de fuego, lo que beneficiará en el
ám- bito personal, familiar y social.
Aprendiendo de nuestras
emociones (Conceptos generales)
Para el presente manual se definirá como la
sensación fisiológica que se activa a partir de un
estímulo percibi- do por los sentidos, las cuales
tienen como función la adaptación, motivación e
interacción social.
* Sentimiento
De acuerdo con la RAE, significa hecho o efecto de
sen- tir o sentirse. (Experimentar sensaciones
producidas por causas externas o internas).
* Inteligencia Emocional
Es definida como el conjunto de habilidades que con-
tribuyen al buen funcionamiento y al éxito, que son
di- ferentes al coeficiente intelectual (CI). Es la
capacidad de entender nuestras emociones, así
como las emo- ciones de otros y poder gestionar
nuestros estados emocionales y/o sentimentales de
una forma adecua- da. (Goleman, 1995).
Las emociones y los sentimientos se encuentran in-
ternamente relacionados, por tal motivo es vital para
nuestro desarrollo y salud mental identificar lo que
estás sintiendo biológicamente, nombrar la emoción
correctamente, aceptar la emoción y hacernos
respon- sables de las conductas que elegimos.
La inteligencia emocional surge con Salovey y
Mayer, sin embargo, quien le dio mayor auge y
difusión fue Daniel Goleman en 1995, donde plantea
de un modo novedoso el desarrollo de la
inteligencia emocional que consiste en los
siguientes puntos.
19
 MANUAL DE

Diagrama de la Inteligencia Emocional de Daniel Goleman

* Competencia
(Habilidad Personal) Autorregulación: El manejo de las emociones de
for- ma efectiva, mediante estrategias de
Autoconciencia: Ser consciente de nuestros estados, afrontamiento, la habilidad de expresarlas.
de nuestros pensamientos, reconocer un
sentimiento, señalar nuestros valores, identificar Motivación: Las emociones impulsan hacia una ac-
fortalezas y debili- dades, confianza, entre otros. ción; la emoción y motivación están íntimamente
rela- cionadas, hacia el logro de objetivos y metas.

20
 MANUAL DE

Empatía: Conectar con emociones qué experimenta

* Modelo de agilidad emocional
una persona o un grupo, manejar una escucha activa
y comprender la perspectiva de los demás.
La agilidad emocional tiene que ver con relajarse,
cal- marse y vivir con mayor intención, se trata de
Habilidades sociales: Se desarrolla el liderazgo,
elegir como responder al sistema de alerta
la comunicación, la influencia, la gestión de
emocional.
conflictos, la colaboración, la cooperación y el
trabajo en equipo.
Abre el espacio entre cómo nos sentimos y lo que
ha- cemos en relación con nuestros sentimientos, lo
Goleman hace referencia al secuestro de la
cual es útil para afrontar distintos problemas, tales
amígdala para referirse a las respuestas
como: imagen negativa de uno mismo, angustia,
emocionales impulsi- vas que pueden ser riesgosas,
dolor, ansiedad, depre- sión, tendencia a la
como por ejemplo ante la emoción de confusión
postergación, transiciones difíciles, entre otros.
reaccionar con un golpe sin buscar una explicación
razonable.
A continuación, se explica textualmente el proceso
de la agilidad emocional según la autora en su libro.
La agilidad emocional es un concepto
desarrollado por la Psicóloga Susana David; durante
“Es un proceso que nos permite estar en el
sus investiga- ciones, ella ha encontrado que, al
momento y cambiar o mantener nuestros
poseerla, ésta nos proporciona la capacidad de
comportamientos para vivir de manera que estén en
gestionar las emociones; de tal forma que podemos
consonancia con nuestras intenciones y nuestros
conectar con ellas, enten- der qué nos dicen sobre
valores”.
nuestros valores y alejarnos de la rigidez emocional,
para ser ágiles en nuestros es- tados emocionales.
La agilidad emocional muestra que las emociones
y pensamientos difíciles han de sostenerse de forma
Fases de crecimiento desde el engan- ligera, afrontarlos con valentía y compasión para
che emocional hasta la agilidad emo- posteriormen- te ir más allá de ellos, lo cual genera
que ocurran grandes cambios en nuestra vida.
cional
1. Mostrarse: esto significa enfrentarse a los
pro- pios pensamientos, emociones y
comportamientos, con intensión, curiosidad y
amabilidad. Todo esto, aun siendo reflexiones precisas
acerca de la realidad o distorsiones perjudiciales de la
misma, forman parte de lo que somos y podemos
aprender a trabajar con ello para seguir ade- lante.

2. Distanciarse: después de afrontar nuestros

pen- samientos y emociones, el siguiente paso es
desapegar- nos de ellos y observarlos para verlos
como son; solo pensamientos, solo emociones.
También podemos iden- tificar emociones difíciles a
medida que las experimenta- mos y encontrar
21
 MANUAL DE

maneras de reaccionar más apropiadas.

22
 MANUAL DE
Dos ejemplos de técnicas de distanciamiento son:
• Escribir: cuando escribes las emociones, pen-
samientos y sentimientos que experimentaste a lo
largo del día, te darás cuenta del espacio que
estás creando entre estos y tú; al ver todo esto
plasmado, tu cerebro podrá encontrar diversas
soluciones a eventos o ideas.
Busca un cuaderno donde puedas expresarte
con toda honestidad; escribe como si nadie fuera a
leerte, de esta manera podrás ponerte en contacto
con tus emociones, cuestionar esos pensamientos
e indagar en ellos para tomar las mejores decisiones
sobre cómo actuar ante estos.
• Hablarte en tercera persona: ante las
circuns- tancias en las que se requiere tomar
decisiones, al mismo tiempo que te encuentras bajo
la influencia de emociones no gestionadas, aléjate de
ellas hablando de ese evento como si no fuera tu
asunto, sino de un tercero. Al hacerlo requieres
contestar la siguiente pre- gunta:
¿Qué es lo mejor para (coloca tu nom-
bre)?
Al hacer esto tomarás la mejor decisión, ya que
podrás observar el panorama desde otra perspectiva;
el análi- sis de la situación se torna objetivo y los
resultados se acatan con responsabilidad y
satisfacción.
Seguir el propio camino: Al hacer un espacio apro-
piado entre los pensamientos y el pensador, pode-
mos centrarnos en lo que realmente nos importa; en
nuestros valores fundamentales y los objetivos
más relevantes. Asimismo, podemos integrar
nuestros pensamientos y emociones con valores y
aspiraciones a largo plazo; y de ese modo, encontrar
nuevas y mejo- res maneras de alcanzar nuestros
objetivos.
Recuerda, los valores son la brújula que nos permi-
ten saber si estamos yendo en la dirección correcta.
Seguir adelante: Pequeños ajustes deliberados im-
buidos (persuadidos) de nuestros propios valores,
que pueden marcar una gran diferencia en nuestras
vidas. Esto es especialmente cierto cuando
efectuamos ajus- tes en nuestra rutina y hábitos los
cuales, a través de la repetición diaria, tienen un
gran poder transformador.
El objetivo final de la agilidad emocional es que
con- serves tu amor por los retos y el crecimiento a
lo largo de tu vida.
La autora de esta obra hace énfasis que las
personas emocionalmente ágiles son dinámicas, que
demues- tran flexibilidad a la hora de manejar el
mundo com- plejo y cambiante, que son capaces de
tolerar altos ni- veles de estrés y sobrellevar
contratiempos; mientras permanecen
comprometidas, abiertas y receptivas. Afrontan las
emociones con curiosidad, compasión y aceptación.
“El enganche significa vernos atrapados por una
emoción, un pensamiento o un comportamiento au-
todefensivo”.
El enganche tiene que ver con las historias que nos
contamos a nosotros mismos sobre nuestras
capaci- dades; el valor que poseemos, los prejuicios
o estereo- tipos. Estos mensajes pudieron ser
grabados en nues- tra mente desde la infancia y
nunca se ha demostrado, ni verificado, que
realmente condicionen nuestras vi- das; pero, de
cierta manera, nos limitan.
Los cuatro anzuelos a los que se puede
enganchar una persona son los siguientes:
1. Echar la culpa a los propios pensamientos: al
culpar a los pensamientos de tus acciones no das
el espacio necesario para el análisis; por tal motivo,
23
 MANUAL DE

reac-

24
 MANUAL DE
cionas de inmediato basado en lo que crees y no en
la verdad de lo que sucede.
Algunas frases recurrentes que ejemplifican esto
son:
• No pedí permiso para faltar a mi turno,
porque pensé que mi director no me daría
permiso.
• Le entregué la patrulla sucia porque pensé que
él la lavaría.
• Insulté al ciudadano porque pensé que me
esta- ba faltando al respeto.
• Le compré una plancha a mi esposa el día de
las madres porque pensé que la necesitaba.
2.La mente de mono: esto es referente a la charla
in- terna que incesantemente va de un tema a otro
como los monos, que van saltando de rama en
rama para desplazarse. Además, tu mente permite
que dramati- ces por lo que está ocurriendo,
imaginando los peores escenarios posibles.
En ocasiones, tu mente formula una serie de
charlas simuladas que ensayas una y otra vez, para
que cuan- do estés frente a las personas que te
hicieron daño, puedas explotar con argumentos
autodefensivos que, según tú, te harán ganar la
discusión; al hacer esto no
vives en el presente. Recuerda, las constantes lluvias
de diálogos mentales dañan a tu cuerpo; generan
ago- tamiento y estrés.
3. Viejas ideas que ya no son útiles: seguir mecanis-
mos de defensa que nos ayudaron a sobrevivir en
el pasado, pero que ahora ya han dejado de ser
eficaces en la vida actual. Por ejemplo, seguir
comportándose como un niño indefenso en la vida
adulta. Para ello, es necesaio aplicar la agilidad
emocional para adaptarte a nuevas circunstancias de
una forma positiva.
4. Justicia desencaminada: tener las discusiones
eternas con las personas que nos rodean únicamente
para confirmar que tenemos la razón. Asimismo,
para reconocer que el argumento en cuestión es
correcto, adecuado y funcional; enfatizando que el
otro está equivocado.
El tratar de demostrar, desmesuradamente, que
otros reconozcan la interpretación de justicia que
tenemos, es agotador y hace que se mantenga en el
tiempo. Por tal motivo, esto no nos permite vivir
en el presente y obstaculiza los aspectos positivos
de la vida.
Para entender lo que comprende el enganche emo-
cional, observa el siguiente esquema:
25
 MANUAL DE

La realidad a partir de la este evento en particular.

percepción objetiva o subjetiva

Podemos entender que la manera en que percibes la

realidad puede ser de manera objetiva o subjetiva;
en la aplicación práctica de la función policial, es
necesa- rio que seas objetivo al interpretar los
estímulos que recibes a través de los sentidos. Esto
te ayudará a ser más eficaz en tu trabajo y en tu
vida personal.

A través de tus sentidos, cuando percibes algo que

está sucediendo a tu alrededor, necesitas interpretar-
lo para tener la certeza de lo que está ocurriendo y
de esta forma saber como actuar frente a una
situación.

En primera instancia, activas la atención como

filtro, para que tu cerebro capte los datos que
consideras más relevantes de algún hecho. Por
ejemplo, al estar en un lugar con un grupo de
personas donde se produ- cen simultáneamente
diversos sonidos y sensaciones; tu atención se
centrará en la información que crees fundamental
sobre lo que está pasando, con la fina- lidad de
poder llevar a cabo las acciones más adecua- das.

A este efecto, en su máxima expresión de

protección se conoce como fijación del blanco, visión
de túnel o exclusión auditiva.

Cuando la información filtrada llega a tu cerebro, la

puedes interpretar de dos maneras:

Objetiva: a través de la memoria racional, te dará

la oportunidad de recordar técnicas y tácticas
entrena- das, así como los lineamientos jurídicos
donde se ba- sará tu actuar.

Subjetiva: por medio de la memoria emocional,

donde se desprenden tus recuerdos de eventos ante-
riores, se desatan las emociones útiles o perjudiciales
que pueden marcar la forma en que afrontarás

26
 MANUAL DE

En segunda instancia, vas a tomar al intervenir proceses la realidad de manera

decisiones que respondan ante el evento
antes mencionado; estas pueden ser para
solucionar, dar resultados o proteger. Sin
embargo, pueden llegar a causar acciones
contra- rias, tales como: encubrir, causar
daño, cometer algún delito, entre otras.
subjetiva, permitiendo que las emociones dominen
tu pensa- miento y acciones; y después al llenar el
IPH, lo quieras realizar de manera objetiva a partir
de razonamientos que no están sustentados por los
actos que realizaste.

De esa forma se generan consecuencias

positivas o negativas, para ti y/o los demás.
Al practicar y entre- nar la parte emocional,
puedes generar un equilibrio con lo racional.
En tus primeros actos de investigación, aun
cuando tengas miedo, angustia, duda y
otras sen- saciones; sabrás entender esas
emociones, y las utili- zarás apegándote al
marco legal.

La percepción objetiva o
subjetiva ante herramientas
como el Informe Policial
Homologado, cámaras de vi-
deovigilancia del C5, peritajes
balísti- cos y otras tecnologías
Uno de los principios de actuación policial es
la obje- tividad, ya que garantiza que tu
actuar será neutral y estará apegado a los
derechos humanos.

Como primer respondiente, serás la

primera autori- dad en llegar al lugar de los
hechos; lo que tu plasmes y declares, será
fundamental para poder alcanzar los
objetivos del sistema penal acusatorio los
cuales son: esclarecer los hechos, proteger
al inocente, procurar que el culpable no
quede impune y que se repare el daño.

Lo ideal es que al intervenir y realizar el

llenado del Informe Policial Homologado
(IPH) seas lo más objetivo posible. El
problema radica que, en muchas ocasiones,

27
 MANUAL DE

Por ejemplo, te enteras que al parecer hay un robo perecie- ron policías y no quieres actuar
en proceso por medio del radio o la denuncia de
algún ciudadano; al llegar y no tener la certeza de lo
que está sucediendo o contar con los suficientes
datos (como cuántos involucrados son, en donde
están, quien o quienes están implicados en el delito,
entre otros); vas a interpretar la realidad con los
pocos datos que ten- gas.

Ahora, analicemos el siguiente caso: Una calle

antes de llegar, escuchas estruendos, salen varias
personas que corren y gritan; entonces tú…

Puedes realizar la interpretación a partir de la per-

cepción objetiva, usando la memoria racional:

Tienes miedo y se agolpan otras emociones

como ansiedad, sorpresa, desesperación,
desconcierto, pas- mo, entre otras.

• Solicitas apoyo y esperas hasta donde sea posi-

ble

• Observas las manos de las personas que corren

para cerciorarte si portan algún arma

• Te mantienes a una distancia segura desde

don- de puedas observar mejor el panorama

• En tu memoria están los conocimientos legales

que sustentarán tu actuar: cuando debes de
dis- parar o no, como tienes que detener a la
persona responsable y que pasos necesitas
seguir

Puedes realizar la interpretación a partir de la per-

cepción subjetiva, usando la memoria emocional:

• Tienes miedo y se agolpan otras emociones

como: ansiedad, sorpresa, desesperación, des-
concierto, pasmo, entre otras

• Se te vienen a la mente casos en donde

28
 MANUAL DE

• Recuerdas películas o sientes que es el confrontar lo que declaraste con las acciones que se
momento de sobresalir y ser héroe observarán en el material audiovisual, recordando
que, si se contra- ponen, podrías tener
• Al ver a una persona que dobla la consecuencias administrativas y/o penales.
esquina co- rriendo, sin analizarla,
realizas un disparo al aire y le gritas
que se tire al piso; esa persona y otras
que vienen corriendo te indican que los
“rateros” están en la farmacia de la
vuelta

• Llegas corriendo a la farmacia y

gritas “alto po- licía”

• Tú disparas de manera indiscriminada

lesionan- do al agresor cuando va
huyendo, y a otra perso- na que
estaba cerca

• Al otro agresor lo arrojas al piso

gritándole pala- bras altisonantes y
pateándolo

En este ejemplo te planteamos que, si

hubieses sido más racional, no te hubieses
arriesgado y tu actuar hu- biese sido más
apegado al derecho.

El problema que llega a ser común es que

al llenar el IPH, ya de manera más consiente
y razonada, trates de justificar tu conducta
subjetiva a partir de un razona- miento
objetivo, cambiando lo que realmente
sucedió, para evitar cualquier posible
consecuencia negativa; al hacer esto,
sabemos que estarías mintiendo.

Es aquí en donde se puede comprobar lo

que narras- te en el IPH, tomando en
consideración que todo que- da plasmado
por escrito; por tal motivo, ya no se puede
cambiar nada. Si en el lugar de la
intervención había cámaras de seguridad,
cámaras de videovigilancia del C5 o
grabaciones con celular, se podrá
29
 MANUAL DE

Otra herramienta científica y tecnológica son los de la fuerza. Por tal motivo, será necesario que se realice
pe- ritajes, uno de ellos es el balístico, que por
medio de una mecánica de lesiones mostrará tu
posición y la del agresor en el momento de disparar,
la trayectoria y la posible distancia en algunos casos.

Por lo que, tus intervenciones policiales deben

ser basadas en la percepción objetiva para que tu
realidad concuerde con lo que sucede y se pueda
comprobar por distintos medios; para que esto sea
más funcional, debes tener conocimientos previos
de tus obligacio- nes.

Conocer la ley te servirá como una herramienta

para guiar tu conducta en situaciones de riesgo,
aunado el entrenamiento emocional, así como el
desarrollo de habilidades y destrezas con el uso y
manejo del arma de fuego de cargo; estarás en
condiciones óptimas para tener los mejores
resultados posibles antes, du- rante y después de
alguna intervención de riesgo, in- cluso en tus
relaciones personales.

Un acercamiento al concepto de
agre- sión y su relación con el uso de
fuerza
Recuerda que en la unidad de marco jurídico se estu-
dió el uso de la fuerza desde un aspecto legal. En
este apartado analizaremos el tema de agresión
como par- te fundamental, para el uso de ésta,
desde la perspec- tiva de una tesis jurisprudencial
(Tesis 160, apéndice 2011, sexta época) y de
diferentes posturas psicoló- gicas; lo que permitirá
hacer una relación congruente entre las acciones que
ponen en riesgo la vida o la in- tegridad de las
personas, y el nivel del uso de la fuerza que sea
necesario aplicar.

Si bien es cierto que nuestras leyes no definen la

agresión, podemos auxiliarnos de la jurisprudencia o
conceptos que nos describen la conducta, para poder
hacer una adecuada toma de decisiones ante el uso

30
 MANUAL DE

un análisis de los siguientes conceptos,

con la finali- dad de identificar esta Existen diversas teorías, las cuales explican el
conducta de manera más clara: origen de la conducta agresiva, por lo que
mencionaremos solo algunas.
Tesis 160, apéndice 2011, sexta época:
por agresión se entiende el movimiento
corporal del atacante que amenaza lesionar
o lesiona intereses jurídicamente
protegidos y que hace necesaria la
objetividad de la violencia por parte de
quien la rechaza.

Anderson y Bushman (2002): cualquier

conducta di- rigida hacia otro individuo, que
es llevada a cabo con la intención inmediata
de causar daño.

Agresión verbal: se quiere herir a través

de las pala- bras.

Agresión física: busca hacer daño físico a la

persona.

Agresión relacional: se busca hacerle

daño a las re- laciones que tiene la otra
persona o al estatus social que tiene en su
grupo.

Agresión reactiva: se refiere al uso de la

agresión como respuesta ante una ofensa
real o percibida. Es el insulto o golpe con el
que responde alguien cuando siente que
otra persona lo ha herido.

Agresión instrumental o proactiva: no está

precedi- da por ninguna ofensa. Es el uso de
la agresión como un instrumento para
conseguir un objetivo sean recur- sos,
dominación, estatus social o algo más.

Diccionario de la Lengua Española de la

Real Aca- demia Española (RAE): acto de
acometer a alguien para matarlo, herirlo o
hacerle daño.

31

Teoría clásica del dolor (Pavlov, 1963): el ser hu-
mano procura sufrir el mínimo dolor y por ello, agre-
de cuando se siente amenazado, anticipándose así a
cualquier posibilidad de dolor, así pues, ante
mayor intensidad del estímulo mayor intensidad de
respues- ta.
Teoría de la frustración (Dollard, Miller y co1.,
1938): puede ser atribuida en última instancia a una
frustración previa, producida por la no obtención
de una meta, dirigida a quien es percibido como la
fuente de displacer.
Teorías sociológicas (Durkheim, 1938): no está en
los estados de conciencia individual, sino en los
he- chos sociales que la preceden, es aprendida
por el comportamiento colectivo.
Teoría Psicoanalítica (Sigmund Freud, 1946): su-
pone una descarga de tensión, acompañada general-
mente de una expresión repentina de afecto
anterior- mente reprimido cuya liberación es
necesaria.
Teoría Etológica (Konrad Lorenz, 1972): reacción
impulsiva e innata, generada a nivel inconsciente y
no asociada a ningún placer.
Teoría bioquímica o genética (Mackal, 1983): el
comportamiento agresivo se desencadena como con-
secuencia de una serie de procesos bioquímicos
que tienen lugar en el interior del organismo y en los
que desempeñan un papel decisivo las hormonas.
Un acercamiento al estrés, la ansie-
dad y depresión con algunas de sus
consecuencias
La Organización Mundial de la Salud (oms) define
el estrés como “el conjunto de reacciones
fisiológicas que prepara el organismo para la
acción”. En términos
32
MANUAL DE
globales, se trata de un sistema de alerta
biológico necesario para la supervivencia. Cualquier
cambio o circunstancia diferente que se presente
ante nuestras vidas, como cambiar de trabajo,
hablar en público, presentarse a una entrevista o
cambiar de residencia, puede generar estrés.
Aunque también dependerá del estado físico y
psíquico de cada individuo.
* Ansiedad
La Organización Mundial de la Salud (oms) define el
estrés como “el conjunto de reacciones
fisiológicas que prepara el organismo para la
acción”. En términos globales, se trata de un
sistema de alerta biológico necesario para la
supervivencia. Cualquier cambio o circunstancia
diferente que se presente ante nuestras vidas,
como cambiar de trabajo, hablar en público,
presentarse a una entrevista o cambiar de
residencia, puede generar estrés. Aunque también
dependerá del estado físico y psíquico de cada
individuo.
El concepto de ansiedad tiene su origen en el
tér- mino latino anxietas. Se trata de la condición de
una persona que experimenta una conmoción,
intranqui- lidad, preocupación o el estado
angustioso que pue- de aparecer junto a una
neurosis u otro tipo de enfer- medad y que no
permite la relajación y el descanso.
De la misma forma para la OMS, la depresión es un
trastorno mental frecuente que se caracteriza por la
presencia de tristeza, pérdida de interés o placer,
sen- timientos de culpa o falta de autoestima,
trastornos del sueño o del apetito, sensación de
cansancio y fal- ta de concentración.
La depresión puede llegar a hacerse crónica o
recu- rrente y dificultar sensiblemente el desempeño
en el trabajo o la escuela, y en la capacidad para
 MANUAL DE

afrontar la vida diaria. En su forma más

grave, puede conducir al suicidio. Si es leve,
se puede tratar sin necesidad de

33

medicamentos, pero cuando es grave se necesita de
psicoterapia profesional y tratamiento con fármacos.
Son muchos los factores de riesgo a los que
tendrás que enfrentarte, además de diferentes
circunstancias críticas tales como: la atención de una
persona lesio- nada, un choque, el aseguramiento y
la presentación de probables responsables de un
delito; así como el enfrentamiento con armas de
fuego donde tu vida y la de otras personas que te
rodean, estarán en riesgo. Por tal motivo, es de vital
importancia tomar concien- cia de los sentimientos y
las consecuencias que pue- des llegar a
experimentar, antes durante y después de cualquier
situación.
Agresión desde diversas pers-
pectivas
Dentro de las causas que pueden llegar a limitar el
ac- tuar policial, influyen los factores
biopsicosociales; en el siguiente esquema se enlista
algunos de estos:
Aunado al entrenamiento que estás recibiendo
en la formación básica, en materias como la
protección a los derechos humanos, marco
jurídico, técnicas y tácticas policiales, entre otras, es
muy importante que
28
MANUAL DE
conozcas los signos y síntomas que pueden causar
es- trés, ansiedad y depresión.
En tu labor policial estarás expuesto a factores
de riesgo que pueden desencadenar alguno de estos
sen- timientos, estos pueden variar según las
condiciones, las circunstancias y múltiples factores.
A continuación, se muestran tres cuadros donde se
te explican los signos y síntomas del estrés,
depresión y ansiedad, así como sus consecuencias;
cabe señalar que los signos y síntomas son señales
de lesión, enfer- medad, dolencia o de que
simplemente algo no está bien en el cuerpo o
mente, por ello marcamos sus ca- racterísticas:
Signos: Deben entenderse como aquellas manifes-
taciones visibles, que también pueden percibir
otras personas como, por ejemplo: fiebre,
taquicardia, su- doración, vómito, entre otros.
Síntomas: Aquellas manifestaciones que solo la
per- sona puede sentir y que es difícil que otras
personas lo aprecien a simple vista, como por
ejemplo el dolor de cabeza, los mareos, la debilidad,
entre otros.
MANUAL DE

Consecuencias, signos y síntomas del estrés, ansiedad y depresión

35
MANUAL DE

* Síndrome de Desgaste Emo- También conocido como Síndrome de Burnout

cional que se usa por su analogía con estar quemado, es
decir, poco a poco vas calentando hasta quemarte,
pero en nuestro país se estudia como un Síndrome
de Desgas- te Profesional o sobrecarga emocional,
ya que el tér- mino quemado para en nuestra
cultura se relaciona con otro contexto.

Ahora bien, para entender este síndrome podemos

definirlo como una fase avanzada del estrés
profesio- nal, que no es lo mismo al estrés natural
individual, de tal manera que no debe confundirse.

Es una respuesta al estrés crónico

organizacional que se presenta en los ambientes de
trabajo, acom- pañado de actitudes y sentimientos
encaminados a perturbar de manera negativa
nuestras conductas.

El siguiente esquema en forma de engranaje,

ilustra cómo se llega a la fase avanzada del estrés.

Al comprender cómo funcionan nuestras

emocio- nes, conductas y los procesos psicológicos,
se puede trabajar sobre ellos. Esto permite
solucionar proble- mas que nos estén aquejando,
como por ejemplo la ansiedad, la depresión, las
fobias, entre otros.

Además, una herramienta como lo es la terapia

psi- cológica no tiene como única finalidad
solucionar los problemas puntuales que podamos
estar sufriendo en un momento dado, sino que va
más allá; lo impor- tante es conseguir que estos
problemas no se repitan.

En este manual se presentan distintas problemáti-

cas en las que están inmersas las emociones,
reflejan- do la importancia que tienen estas para
encontrar un equilibrio interno y que, a su vez, se
proyecte hacia nuestras funciones policiales, pero
principalmente, a la hora de interactuar con las
armas de fuego, ya sea en una práctica o un
29
 MANUAL DE

escenario de emergencia real, donde

nuestro desempeño es puesto a prueba.
 En este sentido, el equilibrio emocional al
momen- to de usar el arma de fuego se verá
reflejado explíci- tamente en el resultado del mismo
y viceversa.

30 31
 MANUAL DE

Generalidades de las Armas de Fuego diseñada para ello o pueda convertirse

* Objetivo de la Unidad
Detectar los diferentes conceptos y generalidades de
las armas de fuego en el uso policial, con el
objetivo de hacer un ejercicio profesional de las
mismas en las circunstancias y escenarios en que se
requiera su uso.

* Introducción
El Diccionario de la Real Academia Española (RAE),
in- dica que se entiende por arma a todo objeto,
instru- mento, máquina o artefacto, destinado para
ofender o defender, individual o colectivamente.

Objeto: Todo lo que puede ser materia de conoci-

miento o sensibilidad de parte del sujeto, incluso
este mismo.

Instrumento: Objeto fabricado, relativamente senci-

llo, con el que se puede realizar una actividad.

* Arma de fuego
Máquina: Artificio para aprovechar, dirigir o regular la
acción de una fuerza.

Artefacto: Objeto, especialmente una máquina o

un aparato, construido con una cierta técnica para
un de- terminado fin.

La Convención Interamericana contra la

Fabricación y el Tráfico Ilícito de Armas de Fuego,
Municiones, Ex- plosivos y Otros Materiales
relacionados, en su artícu- lo I, 3 a) las define como
cualquier arma que conste de por lo menos un cañón
por el cual una bala o proyectil puede ser descargado
por la acción de un explosivo y que haya sido

31
 MANUAL DE
fácilmente para tal efecto, excepto las prolongación metálica de la
armas antiguas fabricadas antes del siglo XX
o sus réplicas.

Siendo un arma de fuego todas aquellas

que utilizan la expansión de los gases de la
combustión de la pól- vora, para impulsar
sus proyectiles.

Estructura de las armas de fuego

* El cañón
Se trata de un tubo de acero especial, de
paredes re- sistentes, de forma cilíndrica
hueca, de conveniente diámetro y tamaño
elaborado, capaz de resistir tem- peraturas
elevadas sea por fricción y calor; destinado
a que por su interior discurra el proyectil
impulsado por los gases producidos, por la
deflagración de la pólvo- ra, de manera de
dirigir el proyectil hacia el objeto que se
apunta.

* Cajón de mecanismos
Es la parte de las armas de fuego que
engloba todo el mecanismo móvil que se
encuentra en el armazón, la cual permite el
accionamiento de esta para efectuar el
disparo. En efecto, este compartimento en
el que se introducen y sujetan las piezas,
posibilita su manipu- lación y coadyuva con
el sistema general del arma. Al respecto,
constituye la parte de conexión entre las
pie- zas para cumplir con la fusión del
disparo. En este sen- tido, ésta es la
estructura más importante de un arma.

* Empuñadura
Es un punto de agarre o sujeción del
arma de fuego y está constituida por la
caja de mecanismos; la cual puede estar cubierta por
una o dos etapas confeccionadas, en cualquier tipo
de material. Al respecto, en las armas de fuego de
tipo corto se le denomina empuñadura y en las
armas de tipo de fuego de tipo largo se le denomina
culata, las cuales pueden ser plegables o fijas.

* Carro o corredera
Es el conjunto móvil que se desplaza sobre las
guías y carriles del armazón, permitiendo el
disparo. En la gran mayoría, sirve de emplazamiento
a los aparatos de puntería. También aloja el
extractor, la aguja indica- dora de mecanismo
montador, indicador de cartucho en la recámara y
seguro de aleta, cuando este se en- cuentra en la
corredera.

* Cargador
Es el dispositivo que aloja los cartuchos con que
ali- mentamos la pistola durante su funcionamiento.
Pue- de estar situado en la empuñadura o por
delante del guardamonte, y ser separable o fijo;
existen cargado- res de doble fila y mono filares.

* Cilindro de carga
Esta pieza fundamentalmente la utiliza el revólver. La
misma está compuesta por un conjunto de orificios o
alveolos donde se alojan las balas dependiendo de su
marca, modelo y calibre. Cada vez que se efectúa un
disparo, el tambor gira alrededor del eje o
pasador, para preparar el arma de fuego al siguiente
disparo.

Clasificación de las armas de fuego

Arma Corta: Arma de fuego diseñada para ser emplea-
da normalmente con una sola mano y sin apoyo
en ninguna otra parte del cuerpo; su longitud es
32a
menor 33
 MANUAL DE

30 centímetros. túa la presión sobre el disparador.

Arma Larga: Arma de fuego diseñada para ser Repetición: Aquellas armas en las que el
em- pleada normalmente con ambas manos y operador debe realizar una maniobra repetitiva en
apoyada so- bre el hombro del tirador; su longitud cada disparo, teniendo que intervenir en el
es mayor a 30 centímetros. mecanismo para cargar.

Semiautomática: Aquellas armas que al realizar

el disparo aprovechan los gases de la deflagración de
la pólvora para cargarse automáticamente, de
manera

Por su funcionamiento

Simple acción: Implica ejecutar manualmente todas

las operaciones que determinan el disparo.
que sólo se debe accionar el disparador cada vez que
quiera efectuar un disparo.

Automática: Aquellas armas que, al realizar el pri-

mer disparo, aprovechan los gases producidos por la
deflagración de la pólvora para cargarse automática-

Para funcionar requiere, al menos en el inicio, de la

intervención manual para preparar su mecanismo de
disparo; quedando de esta forma amartillada.

Doble acción: Para funcionar, requiere de la

activa- ción de su mecanismo de disparo, por medio
de la in- tervención del operador en el instante en
que se efec-

33
 MANUAL DE

mente; permitiendo disparar ininterrumpidamente, Ejemplos de cargadores

mientras esté oprimiendo el disparador, hasta que se
agote la cantidad de cartuchos que tenga el cargador
o se deje de oprimir el disparador.
Por su forma de abastecer
De caja o rectangular: Este cargador puede ser
abas- tecido por cartuchos en una columna, ya sea
uno en- cima de otro o en doble hilera en forma
de zigzag o escalonado.

Tubular: Algunas armas de repetición ultilizan car-

A granel: Abastecer un arma a granel, es cuando se
toma uno o varios cartuchos con la mano para
colo- carlos uno a uno directamente en el arma o en
el car- gador.
Por cargadores: Estas se abastecen previamente de
forma manual para insertarse posteriormente en
el arma de fuego.
gadores tubulares que almacenan los cartuchos en el
interior.
Nota: En el caso de revolver, los cartuchos son
alma- cenados dentro de un cilindro; este depósito
se en- cuentra fijo al arma y cuenta con seis
recamaras.

Un cargador es un depósito de munición y

dispositi- vo de alimentación de un arma de fuego,
puede ser fijo o extraíble y de diferentes formas o
tamaños depen- diendo del calibre.

34
 MANUAL DE
Por su clasificación en la Ley Federal de Armas de
Fuego y Explosivos
Permitidas
Artículo 9. Pueden poseerse o portarse, en los tér-
minos y con las limitaciones establecidas por esta
Ley, armas de las características siguientes:
I. Pistolas de funcionamiento semi-
automático de calibre no superior al .380 (9mm.),
quedando excep- tuadas las pistolas calibres .38
Super y .38 Comando, y también en calibres 9 mm.
las Mausser, Luger, Parabe- llum y Comando, así
como los modelos similares del mismo calibre de
las exceptuadas, de otras marcas.
II. Revólveres en calibres no superiores al .38
Es- pecial, quedando exceptuado el calibre .357
Magnum. Los ejidatarios, cumuneros y jornaleros
del campo, fuera de las zonas urbanas, podrán
poseer y portar con la sola manifestación, un arma
de las ya mencionadas, o un rifle de calibre .22, o
una escopeta de cualquier calibre, excepto de las de
cañón de longitud inferior a 635 mm. (25), y las de
calibre superior al 12 (.729 ó 18. 5 mm.).
III. Las que menciona el artículo 10 de esta Ley.
IV. Las que integren colecciones de armas, en
los términos de los artículos 21 y 22.
Artículo 10. Las armas que podrán autorizarse a los
deportistas de tiro o cacería, para poseer en su
domi- cilio y portar con licencia, son las siguientes:
I. Pistolas, revólveres y rifles calibre .22, de
fue- go circular.
II. Pistolas de calibre .38 con fines de tiro
olímpi- co o de competencia.
III. Escopetas en todos sus calibres y modelos,
ex- cepto las de cañón de longitud inferior a 635
mm. (25), y las de calibre superior al 12 (.729 ó 18. 5
mm.).
IV. Escopetas de 3 cañones en los calibres
autori- zados en la fracción anterior, con un cañón
para cartu- chos metálicos de distinto calibre.
V. Rifles de alto poder, de repetición o de
funcio- namiento semi- automático, no convertibles
en auto- máticos, con la excepción de carabinas
calibre, 30”, fusil, mosquetones y carabinas calibre
.223”, 7 y 7. 62 mm. y fusiles Garand calibre .30”.
VI. Rifles de alto poder de calibres superiores a
los señalados en el inciso anterior, con permiso
especial para su empleo en el extranjero, en cacería
de piezas mayores no existentes en la fauna
nacional.
VII. Las demás armas de características
deportivas de acuerdo con las normas legales de
cacería, aplica- bles por las Secretarías de Estado u
Organismos que tengan injerencia, así como los
reglamentos naciona- les e internacionales para tiro
de competencia.
A las personas que practiquen el deporte de la cha-
rrería podrá autorizárseles revólveres de mayor
cali- bre que el de los señalados en el artículo 9 de
ésta Ley, únicamente como complemento del
atuendo charro, debiendo llevarlos descargados.
De uso exclusivo
Artículo 11. Las armas, municiones y materia para
el uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea,
son las siguientes:
a. Revólveres calibre .357 Magnum y los
supe- riores a .38 Especial.
35
 MANUAL DE

b. Pistolas calibre 9 mm. Parabellum, Luger y l. Artificios de guerra, gases y substancias

similares, las .38 Super y Comando, y las
de calibres superiores.
c. Fusiles, mosquetones, carabinas y
tercerolas en calibre .223”, 7 mm., 7.62
mm. y carabinas calibre .30” en todos sus
modelos.
d. Pistolas, carabinas y fusiles con sistema
de ráfaga, sub- ametralladora, metralletas
y ametralladoras en todos sus calibres.
e. Escopetas con cañón de longitud inferior
a 635 mm. (25), las de calibre superior al
12 (.729 o 18. 5 mm) y las lanzagases, con
ex- cepción de las de uso industrial.
quí- micas de aplicación exclusivamente
militar, y los ingenios diversos para su uso
por las fuerzas armadas.
En general, todas las armas, municiones y
materiales destinados exclusivamente para la guerra.
Las de este destino, mediante la justificación de
la necesidad, podrán autorizarse por la Secretaría de
la Defensa Nacional, individualmente o como
corpora- ción, a quienes desempeñen empleos o
cargos de la Federación, del Distrito Federal, de los
Estados o de los Municipios, así como a servidores
públicos extranjeros en los casos a que se refieren
los artículos 28 y 28 Bis de esta Ley.

f. Municiones para las armas anteriores y car-

tuchos con artificios especiales como traza-
dores, incendiarios, perforantes,
fumígenos, expansivos de gases y los
cargados con pos- tas superiores al 00 (.84
cms. de diámetro) para escopeta.

g. Cañones, piezas de artillería, morteros y

ca- rros de combate con sus aditamentos,
acce- sorios, proyectiles y municiones.

h. Proyectiles-cohete, torpedos, granadas,

bombas, minas, cargas de profundidad,
lan- zallamas y similares, así como los
aparatos, artificios y máquinas para su
lanzamiento.

i. Bayonetas, sables y lanzas.

j. Navíos, submarinos, embarcaciones e

hidro- aviones para la guerra naval y su
armamento.

k. Aeronaves de guerra y su armamento.

36
 MANUAL DE

Ficha técnica de las armas de fuego

Se entiende por ficha técnica, aquella que contiene
las especificaciones de cada arma de acuerdo con su
dise- ño, para el presente manual se abordarán los
siguien- tes datos generales: referencias y
nomenclaturas.
De acuerdo con el Diccionario de la Real
Academia Española (RAE), una referencia es la
relación, depen- dencia o semejanza de algo
respecto de otra cosa. Por lo tanto, en materia de
armamento son todos aquellos datos que vienen
impresos en un arma de fuego.
En cuanto a la nomenclatura, la RAE señala que
es una lista de nombres de cosas, en este caso, se
refiere a las principales partes en que se divide un
área para su estudio, es decir, los nombres con los
que se conoce a cada pieza que la constituye al
arma.
* Ejemplos de Referencia y No-
menclatura en armas cortas y
largas

Referencias
Tipo Revólver
Marca Smith and Wesson
Modelo 10-11
País de fabricación Estados Unidos
Munición 0.38” especial
Alimentación Cilindro de 6 cartuchos

Nomenclatura

Cilindro Cañón
Mira posterior Mira frontal

Martillo
Varilla extractora de casc

Empuñadura
Cubre disparador
Disparador

37
 MANUAL DE

Referencias
Tipo Pistola
Marca Glock
Modelo 17
País de fabricación Austria
Munición 9 x 19 mm
Alimentación Cargador de 17 cartuchos

Nomenclatura

Mira frontal Corredera Pestillo de desarme

Mira
posterior

Retenida de la correder

Cubre disparador
Empuñadura

Seguro del disparador

Disparador

Cargador
Pestillo de extracción del cargador

38
MANUAL DE

Referencias
Tipo Carabina
Marca Colt
Modelo AR-15
País de fabricación Estados Unidos
Munición 9 x 19 mm y 0.233 mm
Alimentación Cargadores de 5, 10, 20 o 30
cartuchos

Nomenclatura

Mira frontal Guardamano Asa de transporte

Mira posterior
Rompe
flamas
Palanca de maniobras

Culatín

Soporte para correa

Cañón

Anilleta anterior
Retenida del cerrojo Seguro selectorPalanca de freno de disparadorde cu
Disparador

Cubre disparador

Cargador

39
 MANUAL DE

Referencias
Tipo Subfusil
Marca Israel Weapon Industries (IWI)
Modelo Galil Ace 21
País de fabricación Israel
Munición

Alimentación Cargador de 35 y 50 cartuchos

Nomenclatura

Palanca de maniobras

Mira tipo Mira posterior

Mira frontal reflex
Mejillera

Rompe
flamas

Cañón
Culatín

Guardamano Palanca freno

Disparador de culatín
Palanca
Cargador
Cubre selectora
disparador

40
MANUAL DE

Referencias
Tipo Fusil
Marca Israel Weapon Industries (IWI)
Modelo Micro Tavor
País de fabricación Israel
Munición

Alimentación Cargador de 30 cartuchos

Nomenclatura

Palanca de maniobras Mira Mepro 21 reflex

Rompe flamas
Culatín
Seguro de la rete

Cargador

Guardamano modificado tipo empuñadura Disparador

Cubre disparador

41
 MANUAL DE

Referencias
Tipo Escopeta
Marca Mosberg
Modelo 500A
País de fabricación Estados Unidos
Cartucho del 12
Munición Cartucho del 20
Cartucho .410
Depósito tubular, con capacidad
Alimentación
de 5 u 8 cartuchos

Nomenclatura

Mira frontal Cañón Seguro

Culata

Anilleta anterior

Guardamano

Tubo cargador Disparador

Cubre disparador Anilleta posterior

42
MANUAL DE

Desarme de una Pistola

Para el mantenimiento preventivo o correctivo de un
arma de fuego, se realiza el desarme básico de
manera habitual.
Este proceso inicia con el desprendimiento del con-
junto de corredera y armazón; en la mayoría de
los modelos de pistola se realiza el retiro del
cañón, el muelle recuperador, la corredera, el
armazón y el pa- sador que los une.
Con esta serie de pasos se cuidan, conservan y
repa- ran las armas de fuego. Los diversos tipos de
desarme son:
• Parcial: Es el desarme de los grupos del arma
de
fuego, solo hasta el punto necesario para la
lim- pieza y lubricación.
• Total: Se reserva esta actividad de
mantenimien- to preventivo o correctivo para el
personal espe- cializado, ya que algunas
operaciones requieren el empleo de
herramientas o conocimientos es- peciales.
• Prohibido: Consiste en separar todos los
consti- tuyentes del arma a nivel fábrica. Es
importante precisar que este desarme solo le
compete a per- sonal experto y especializado
tanto del ejército mexicano como de nuestra
Secretaría.
Ejemplos de desarme parcial en armas cortas y largas

Glock 17

Carro corredera

Tubo cañón

Varilla guía y
resorte recuperador

Pistolín

Cargador

43
 Smith & Wesson 910

Carro corredera

Tubo cañón

Varilla guía y
resorte recuperador

Pistolín

Seguro de la
retenida

44
MANUAL DE

Pietro Beretta 92 FS

Carro corredera

Tubo cañón

Varilla guía
resorte y
recuperador

Pistolín

Cargador

45
 MANUAL DE

Colt AR-15

Receptor superior

Chaveta

Tubo cañón

Palanca de maniobras

Pernos

Receptor inferior

46
MANUAL DE

Tubo cañón

Varilla guía y
resorte recuperador

Seguro

Marco

Cargador

47
 MANUAL DE

Limpieza de las armas de fuego

Las armas de fuego siempre deben de limpiarse

por dentro. Antes de comenzar, se debe de elegir un • Baqueta rígida, cable de limpieza y/o piola
área limpia con suficiente espacio libre y que
cuente con buena iluminación y ventilación, para
evitar errores o efectos secundarios de los productos
químicos de lim- pieza.

Es importante resaltar que como primer paso,

por control de seguridad, es de carácter obligatorio
veri- ficar que cada una de las armas se encuentre
descar- gada y desabastecida; esta acción se debe de
realizar dos o tres veces para corroborar que no
exista riesgo alguno.

• Para proceder a la limpieza, se necesita tener a

la mano un kit de limpieza básico con los • Cepillo para limpieza general
siguientes elementos: Aceite especial para (multipropósito y/o de dientes)
armamento WD- 40 y/o aceite 3 en 1

• Cepillo de limpieza alargado para la recámara

y el cañón

48
MANUAL DE

• Franela y/o parches de limpieza.

8. Limpiar minuciosamente el cerrojo

Mantenimiento diario (sin disparar)

1. Verificar que el arma se encuentre

descarga-
da y desabastecida

2. Con el cepillo para limpieza general,

quitar arena y polvo de las partes
externas del arma

3. Limpiar las miras mecánicas y/o Mepro 21

4. Efectuar el desarme parcial (cargador,

carro corredera, tubo cañón, resorte y
varilla guía)

5. Pasar la baqueta con un paño limpio por

el cañón y la recámara

6. Realizar la limpieza del receptor superior e

inferior o en su caso del marco y el carro
co- rredera, con el cepillo de limpieza
general

7. Para la recámara y el cañón, con el cepillo

de limpieza alargado, se debe limpiar el
ho- llín depositado en el interior, así como
el respeto de las partes internas

49
 MANUAL DE

Mantenimiento post-disparo general, se debe limpiar el receptor

superior e inferior o en su caso el marco
1. Verificar que el arma se encuentre y carro corredera
descarga-
da y desabastecida 7. Lubricar el arma según lo indicado en
el mantenimiento diario
2. Pasar una baqueta con un
paño aceitado por dentro del
cañón

3. Efectuar el desarme parcial

(cargador, carro corredera, tubo
cañón, resorte y varilla guía)

4. Limpiar minuciosamente las piezas

5. Aplicar una capa de aceite a todas las

piezas

6. Limpiar los cargadores de las

armas cortas y/o largas

Mantenimiento semanal

1. Verificar que el arma se encuentre

descarga-
da y desabastecida

2. Efectuar el desarme parcial

(cargador, carro corredera, tubo
cañón, resorte y varilla guía)

3. Utilizar el aceite especial para

limpiar el sis tema recuperador
y/o varilla guía y el meca- nismo
de disparador

4. Limpiar el cuerpo exterior del

arma con el cepillo de
limpieza general

5. Usar el cepillo de limpieza

alargado para la recámara

6. Con el cepillo de limpieza

50
 MANUAL DE

8. Comprobar la funcionalidad de las siguientes

partes:

8.1 En la superficie del cerrojo y el per-

cutor, verificar que no exista daño
alguno

8.2 El extractor y el eyector deben de

te- ner elasticidad

8.3 Integridad de la empuñadura

y/o palanca de maniobras

8.4 Funcionalidad de las miras mecáni-

cas y/o Mepro 21

8.5 Buen funcionamiento del selector

de cadencia y/o seguro

51
 MANUAL DE
Balística
rre; así como del proyectil en su recorrido interno,
por lo que copia su rayado helicoidal de campos y
estrías.
* Objetivo de la Unidad
Reconocer conceptos de la trayectoria, el alcance y
los efectos de las balas y proyectiles, en diferentes
am- bientes de empleo; así como el uso de
municiones y cartuchos.
* Definición
El término balística proviene del latín Ballistan, y a su
vez del griego Bàlleiv, que significa lanzar. Se
entiende como el estudio científico de todo lo relativo
al movi- miento de los proyectiles (balas, bombas de
gravedad, cohetes, misiles balísticos, entre otros).
Al respecto, el autor Allan Arburola, define el
término balística como aquella ciencia que se
encarga de estu- diar las armas de fuego, la
dirección y los alcances de los proyectiles que
disparan; así como los efectos que producen.
Por consiguiente, el estudio de la balística se
centra en las fuerzas, trayectorias, rotaciones y
comporta- mientos de diversos proyectiles en
diferentes ambien- tes de empleo.
Para su estudio básico se divide en:
• Balística interior: Estudia todos los fenómenos
físicos y químicos que intervienen en el interior
del cañón de un arma de fuego, desde el
mo- mento del disparo hasta que la bala
abandona el cañón.
Es importante resaltar, que desde el momento que
se realiza el disparo del arma de fuego, quedan
impre- sas huellas del percutor, la recámara y el
plano del cie-
• Balística exterior: Estudia los movimientos
de los proyectiles de un arma de fuego desde
su sa- lida del cañón hasta que impacta
cualquier obje- to; además de las fuerzas que
intervienen en el recorrido del proyectil.
• Balística de efectos: Estudia la forma en que
actúa el proyectil de un arma de fuego y sus
efectos, desde que penetra un cuerpo hasta
que queda en reposo, es decir, lo que sucede
en el cuerpo de la víctima o la estructura
inerte; lesio- nes que pueden apreciarse en la
piel, órganos y huesos dentro del cuerpo
humano; así como las trayectorias
subsecuentes del proyectil (rectilí- nea,
curvilínea, dividida, migrante), entre otros.
Carga de pólvora y municiones o de pólvora
sola, correspondiente a cada tiro de algún arma de
fuego; envuelta en papel o lienzo o encerrada en
un tubo metálico, para cargar de una vez.
* Definición de cartucho
Los cartuchos que comúnmente usamos en la
SSC, independientemente de su calibre, se
componen bá- sicamente de cuatro elementos que
son:
a. Bala: Está constituida de forma general por
un núcleo de plomo y camisa de cobre.
51
 MANUAL DE

b. Casco o casquillo: Es el envase, que general-

* Calibre nominal
mente es metálico y reúne el resto de los
elementos que constituyen al cartucho.

c. Carga de proyección o pólvora: Al estar en

contacto con la parte de la capsula recibe
directamen- te el fuego para impulsar la bala.

d. Cápsula o fulminante: Recipiente que se en-

cuentra en la parte posterior del casco y contiene
la sustancia que origina el encendido de la carga de
pro- yección.

* Cartucho de percusión anular

Se le denomina de este modo, porque el fulminan-
Es el nombre que se utiliza para designar el calibre
te está en toda la base del culote del casquillo;
específico de los cartuchos, que son utilizados para
para su detonación la aguja percutora, puede
las armas (otorgado por el fabricante del cartucho
impactar en cualquier parte de la periferia del
para su comercialización).
casquillo.

* Calibre real
* Calibre
Se refiere al diámetro que tiene el cañón del arma de
fuego y el grueso de la bala; en Estados Unidos de
Amé- rica el calibre nominal es ligeramente mayor al
calibre real, mientras que en Europa son iguales. Es
medido de mesa a mesa.

Abastecer

Tiene por objeto suministrar a las instituciones poli-

ciales de los materiales necesarios. Además,
represen- ta el conjunto de actividades que
comprende llevar los cartuchos a los depósitos de las
armas de fuego.

52
 MANUAL DE

Cargar

Consiste, en introducir manual o mecánicamente

un cartucho a la recámara del arma de fuego. Por
ejem- plo: En una pistola, es necesario insertar
vías de ali- mentación (abastecer), posteriormente
jalar la corre- dera del arma hasta el tope y soltarla
para efectuar dicha maniobra (cargar).

53

Preparación para tiro
* Objetivo de la Unidad
Aplicar las competencias necesarias para el manejo
del armamento orgánico, a través de su interacción
conti- nua con el equipo a cargo.
* Introducción
En la disciplina del tiro, el factor de la seguridad es el
más importante para el correcto entrenamiento, si no
se cumple con las medidas necesarias para obtenerla,
el resultado será fatal para el tirador o para terceros;
su importancia se fundamenta en lo principal que
tiene el ser humano que es la vida.
Por ello, la seguridad se convierte en el factor sin el
cual la práctica de tiro nunca se puede realizar de
for- ma provechosa y útil para el combatiente.
La manipulación segura de armas de fuego
requiere entrenamiento especializado, disciplina y
cuidado. Las armas, por su naturaleza y su función,
son instrumen- tos mortíferos. Muerte accidental o
serios accidentes pueden resultar, si son
manipuladas inapropiadamen- te o sin cuidado; los
accidentes, siempre son causados por una falla de
atención a las reglas.
Ningún arma es aprueba de accidentes. Un arma es
solo un mecanismo, responde a sus acciones, sean
in- teligentes o equivocadas, el único dispositivo de
segu- ridad es la mente del usuario juicioso que
nunca olvida que un momento de falta de atención o
cuidado puede producir una tragedia permanente.
54
MANUAL DE
Recomendaciones y Reglas Básicas para
el Manejo de Armas de Fuego
Las medidas de seguridad para el empleo de las
armas son el conjunto de reglas que constituyen la
seguridad en el manejo de las armas, es decir,
todas aquellas acciones que se realizan a fin de
evitar accidentes. A continuación, te presentamos
algunas de las reglas a seguir para utilizar
correctamente las armas de fuego:
• Antes de manejarlas conoce su funcionamiento
• Al usarlas, no se debe consumir alcohol,
medica- mentos o drogas
• Antes de cargarlas, hay que asegurarse que
estén limpias
• Verificar que se encuentren abastecidas, carga-
das y sin seguro (si cuentan con este)
• Jamás se tiene que colocar el dedo en el
dispa- rador, a menos que se cuente con algún
blanco definido
• Apuntar en dirección segura o en donde ningún
disparo cause daño alguno
• Utilizar la munición adecuada para su arma
en particular
• En superficies planas o agua, no se debe de
dis- parar
• Puede causarse alguna ruptura o ensancha-
miento del cañón, si se dispara con una
obstruc- ción en el cañón como lodo, grasa o el
proyectil trabado
 MANUAL DE

• Se debe evitar que las armas no sufran golpes

o caídas fuertes

• Controlar las emociones antes, durante y

des- pués de realizar disparos

Las cuatro reglas del Coronel Jeff

Existen numerosas variaciones sobre las reglas de

se- guridad de armas de fuego, una serie de estas
son las Cuatro Reglas del Coronel Jeff Cooper:

1. Todas las armas siempre están cargadas.

2. Nunca permita que el cañón apunte a

elemen- tos que no se desee destruir.

3. Mantenga su dedo alejado del disparador

hasta el momento en que su vista esté sobre el
blanco.

4. Asegúrese de que posee el blanco correcto

y de lo que se encuentra detrás de él.

55
 MANUAL DE

Generales 3. Cerciorarse del blanco u objetivo, y de sus

alre- dedores.
Para disparar de manera segura, se deben de
seguir los siguientes pasos:

1. Dirigir el arma hacia un lugar seguro (en

donde se cause el menor daño posible, por si se llega
a dispa- rar).

2. No colocar el dedo sobre el disparador a

menos que se pretenda realizar un disparo.

56
Específicas

Ahora, veremos de manera más detallada las c. Al término, se tiene que enfundar el arma; a
medidas específicas que se deben de llevar a cabo la orden del instructor, hay que trasladarse al área de
para la re- cepción y entrega de armamento. capacitación.

Recepción del armamento

a. Recibir el arma abierta; los cargadores y

cartu- chos por separado.

b. Acudir inmediatamente al arenero para

su revisión.

57
 MANUAL DE

En el área de capacitación

a. Seguir únicamente las instrucciones del capa- c. No traspasar los límites de seguridad.
citador.

b. Usar el equipo de protección dotado por d. No levantar nada del piso a menos que sea
la institución. au- torizado por el instructor (cartuchos, cascos,
cargado- res, entre otros).

58
Entrega del armamento
a. Al término de la práctica, revisar el arma
para enfundarla y trasladarla al depósito de armas,
a menos que se deba de entregar a otro
practicante; todo esto bajo las indicaciones del
instructor.
b. Acudir al arenero, para revisión del
armamen- to, cargadores y casquillos.
c. Entregar el arma con la mano
izquier- da, sujetando la corredera por la
parte superior y proteger el disparador con
los dedos índice, medio, anular y meñique;
de forma abierta, con la ventana de
expulsión a la vista del depo- sitario y la
empuñadura hacia el frente.
59
58
 MANUAL DE

Manipulación de las Armas de Fuego

Seguros en las armas de fuego

Los seguros son mecanismos incorporados en las ar-

mas de fuego, que permiten evitar peligros a las per-
sonas que las manipulan y se realicen disparos
acci- dentales.
disparador es el único elemento operativo; se
Los podemos clasificar en dos tipos: automáticos debe presionar para desactivar los seguros
y manuales. Los primeros, actúan sin la acción del automáticos; y para poder efectuar un disparo,
ope- rador, mientras que los segundos, necesitan ser soltándola se activa nuevamente.
acti- vados o desactivados por la persona que usa el
arma Abastecer y Desabastecer

Como vimos anteriormente, abastecer es llevar los

cartuchos a los depósitos de las armas de fuego
(cargadores); mientras que desabastecer, se refiere
al desalojo de los cartuchos que se encuentran al
interior.

Para abastecer el cargador, hay que sujetarlo con

la mano de apoyo, sobresaliendo la falange del dedo
pul- gar, para poder ejercer presión y evitar que
sobrepase el límite del cargador. Además, se debe de
insertar el cartucho hacia el interior del cargador,
(accionan a fin de bloquear, desbloquear, desactivar apoyando con la mano fuerte o hábil la base del
o cartucho, la parte delantera del elevador.
activar el sistema de disparo).

Además, existen los seguros de empuñadura, los

cuales tienen algunas armas, y consisten en una
pieza situada en la empuñadura del arma que impide
reali- zar disparos, si ésta no se sujeta
adecuadamente, es decir, sino se empuña
correctamente. Este mecanismo garantiza que no se
dispare el arma ante caídas o gol- pes.

Cabe señalar que la pistola Glock tiene un

sistema de seguros automáticos único, en donde
la cola del

60

Por otra parte, para desabastecer el arma, se debe
de tomar el cargador con la mano de apoyo; con el
dedo pulgar de la mano opuesta, hay que empujar la
base del cartucho a fin de extraerlo del cargador.
Para esta acción, se recomienda tomar los
cartuchos salientes con la mano fuerte o hábil.
Procedimiento para abastecer el arma
Abastecer el arma consiste en colocar los cartuchos
en la vía de alimentación del arma de fuego, a través
del depósito de las armas (previamente abastecidos).
MANUAL DE
Por ejemplo, en el caso de pistola, estando el arma
abierta o cerrada se inserta un cargador previamente
abastecido.
Procedimiento para desabastecer el
arma
Para desabastecerla, se presiona la retenida del
car- gador estando el arma abierta o cerrada y se
retira el cargador abastecido.
Abrir el arma
De forma manual, consiste en sujetar la corredera
por la parte de las hendiduras, con la mano
opuesta a la que se está empuñando para llevarla
hacía atrás, mien- tras que el dedo pulgar de la
mano fuerte o hábil lleva la retenida de la corredera,
hacia la parte superior.
61
 MANUAL DE
Para cargar el arma tenemos dos opciones:
a. Arma abierta: Se inserta el cargador con la
mano opuesta a la que empuña y se cierra el arma li-
berando la retenida de la corredera o jalándola hacia
atrás.
b. Arma cerrada: Con la mano opuesta a la
que empuña, se inserta el cargador y
posteriormente, su-
jetando desde la hendidura, se jala la corredera hacia
atrás, soltándola inmediatamente.
Para descargar el arma, es necesario los siguiente:
1. Si cuenta con seguro, hay que colocarlo.
2. Retirar las vías de alimentación (cargador).
3. Abrir el arma con el propósito de recuperar
los cartuchos que se encuentren alojados en la
recámara.
62
Procedimientos para enfunde y desen-
funde
El proceso del desenfunde y enfunde es
fundamental para utilizar cualquier arma en una
situación de riesgo y responder rápidamente ante una
agresión.
Para que la técnica de enfunde y desenfunde sea
la adecuada, se debe aprender a empuñar el arma
correc- tamente, ya que además de dar apoyo o
sostén, éste sir- ve como control y dominio durante
todo el proceso del disparo.
El enfunde es importante, ya que en ocasiones es
ne- cesario guardar y asegurar el arma, utilizando una
sola mano. Para poder dejar libre la mano contraria y
conti- nuar con otras acciones, se deben realizar los
siguientes pasos:
1. Después de utilizar el arma, se deberá
colocar en guardia baja y revisar el entorno para estar
seguro de que no existe algún riesgo.
2. Hay que asegurarse que el arma quede en una
situación adecuada para ser enfundada con seguridad.
3. Posteriormente, llevar el arma a la funda
colo- cando el codo en la parte posterior del cuerpo.
4. Una vez que el arma se encuentre en la funda,
deberá colocar los niveles de seguridad o retención
con los que cuente.
 MANUAL DE

Por otra parte, en cuanto al desenfunde para que 3. Con ambas manos a la altura del pecho, se
se realice de manera efectiva, se deben seguir los si- debe desplazar el arma hacia enfrente, sujetándola a
guientes pasos: modo de que se puede completar el empuñe. En
todo momento, hay que tener cuidado de no
1. Empuñar el arma con la mano fuerte o hábil, apuntarse a los pies ni a la mano de apoyo.
al mismo tiempo que se retiran los niveles de seguri-
dad o retención de la funda. El codo de la misma
mano debe estar dirigido hacia la parte posterior del
cuerpo.

4. El arma tiene que colocarse a la altura de

2. A continuación, se debe de extraer los ojos, con los brazos extendidos, para quedar en
completa- mente el arma de la funda para que la posi- ción de disparo.
boca del cañón se dirija hacia el objetivo.

63

Para quitar el seguro y empuñar al mismo tiempo,
se requiere realizar un solo movimiento con la funda
para el arma:
MOVIMIENTO
Con el dedo pulgar de la mano se debe empujar el
se- guro de la funda y al mismo tiempo, empuñar el
arma.
Hay que priorizar el agarre y la rapidez, para
desen- fundarla al mismo tiempo.
64
MANUAL DE
Revisión de las Armas de Fuego
La revisión de las armas de fuego consiste en una
serie de pasos a seguir con la finalidad de verificar su
fun- cionamiento adecuado.
Esta acción es de suma importancia para manipular
de manera segura el arma en caso de recepción,
entre- ga, aseguramiento o puesta a disposición:
1. Colocar el seguro (en caso de que el arma
cuente con uno)
2. Desabastecer (retirar el cargador o los cartu-
chos del depósito del arma)
3. Abrir el arma
4. Revisar que en el interior de la recámara
no esté algún cartucho
5. Corroborar que el cañón no tenga nada
que obstruya el paso de la bala
6. Verificar las piezas importantes como: seguro,
percutor, extractor y eyector
7. Observar el estado físico del arma y compro-
bar que cuente con todas las piezas
8. Anotar el número económico y/o de matrícula
Para el proceso de aseguramiento y puesta a
dispo- sición, no se aplican los numerales 5, 6 y 7.
 MANUAL DE

Fallas más comunes y soluciones

¿Por qué se presentan fallas en las ar-

mas de fuego?

Las fallas son incidencias con las que podemos

encon- trarnos y que se deben resolver lo antes
posible, ya que de ello puede depender la vida de
cualquier persona.

Todo funcionamiento inadecuado se debe conside-

rar como una falla, misma que puede ser
consecuencia de una pieza en mal estado, un
cartucho defectuoso, el manejo inadecuado de la
misma o por falta de mante- nimiento.
A continuación, se mencionarán las fallas más
co- munes en las armas de fuego y sus posibles
solucio- nes, ejemplificadas con la pistola 9 mm,
Glock modelo 17.
Falla de alimentación al arma
Otra falla se produce debido a que los labios del
carga- dor se encuentren abiertos, cerrados o
doblados, por caídas o golpes al momento de
manipularlos, por lo que, al cerrar el arma para
cargarla, no lo podrá reali- zar de manera adecuada.

Falla al cargar

Ocurre cuando el sistema elevador del cargador

no funciona correctamente; generalmente sucede
cuan- do el cartucho no se encuentra en la posición
adecua- da para que la corredera pueda empujarlo
hasta la re- cámara.

Esta falla, se produce por caídas o golpes al

momen- to de manipular los labios de los cargadores
abiertos, cerrados o doblados; por lo que, al cerrar el
arma para cargarla, no se podrá realizar ningún
disparo de forma adecuada.
Para solucionar esta falla, únicamente es necesario
golpear con la palma de la mano la base del
cargador, para verificar que no se hubiese cerrado
correctamen- te.

Inmediatamente, se debe volver a cargar. Además,

se debe verificar el cargador al abastecerlo con
cartu- chos.

65

Falla de cierre
Consiste en que el cartucho no se aloja
correctamente en la recamara del arma, lo que
provoca que se quede en forma diagonal a la
entrada, impidiéndole cerrar de forma adecuada.
66
MANUAL DE
Para solucionar esta falla, se deberá bajar el
brazo hasta colocar el arma en un ángulo de 45
grados con respecto al cuerpo; sin dejar de
empuñar.
De forma inmediata, se debe de jalar la
corredera aplicando fuerza de menor a mayor
intensidad sin que el carro llegue al tope.
Hasta que se libere el cartucho, la corredera debe
de soltarse para que, en su recorrido, se introduzca
en la recámara del arma.
La corredera no debe llegar al tope, ya que de
esa forma se evita que otro cartucho obstruya con
algún otro.
MANUAL DE
Falla de extracción
En ocasiones, por desgaste o suciedad el extractor
no se inserta en la ranura de extracción del casco, lo
que produce que se encasquille.
También puede suceder por el desgaste de la base
del cartucho, únicamente si se utilizan cartuchos
recargados.
Por ello, se deberá colocar el seguro (en caso de
con- tar con uno) el cual extraerá el cargador;
enseguida se debe cerrar el arma e inmediatamente
hay que volver- la a abrir, con el fin de que el
extractor se inserte en la ranura del casco y lo saque.
Si esto soluciona la falla, se inserta el cargador y se
vuelve a cargar para continuar con la práctica.
En caso de que el problema persista, se le
informará al instructor, quien le notificará al armero y
determina- rá la causa de la falla.
67

Solución (Caso 1)
Girar el brazo con la finalidad de colocar el arma
de lado, sin dejar de empuñar. Posteriormente, se
debe de llevar la corredera hacia atrás y soltarla
inmediata- mente; con este movimiento, por
gravedad, caerá el casco y se introducirá el cartucho
en la recámara.
Falla de Percusión
Acontece como consecuencia de que el detonante
del cartucho no es impactado debidamente por la
aguja percutora, de tal modo que no llega a ocurrir
el dispa- ro. Asimismo, puede suceder cuando el
cartucho está defectuoso o la aguja percutora se
encuentra desgas- tada, torcida o rota; en
consecuencia, no se puede rea- lizar disparo alguno.
Aguja de percusión rota, desgastada o con baja tensión
68
MANUAL DE
Para prevenir, estando el arma abierta, debemos
ob- servar que el percutor se encuentre en su
lugar y no esté roto, desgastado o torcido.
Falla por sujetar la corredera al cerrar
Cuando el practicante sujeta la corredera para
cargarla y al llegar al tope se suelta; esta falla se
detecta debi- do a que al presionar el disparador no
hay percusión y de manera visual se observa que la
corredera no está totalmente cerrada. Para
solucionarlo, basta con gol- pear con el talón de la
palma de la mano que no está empuñado la parte
posterior de la corredera, para for- zar el cierre.
 MANUAL DE

Falla provocada por acompañamiento NO OLVIDES QUE NUNCA DEBES DE

innecesario de la corredera OBSERVAR EL CAÑÓN DESDE EL
FRENTE.

Falla por obstrucción del cañón

Cañón libre
Cuando no se le da mantenimiento al arma, el
cañón puede acumular suciedad, ya sea polvo o
residuos de pólvora que quedan cuando se
practica con ellas. En ocasiones esto es suficiente
para no dejar pasar la bala por el mismo y al
atascarse puede detener una segunda bala,
provocando que el cañón se abombe o reviente.

Por tal motivo, para solucionar la falla por

obstruc- ción, se debe revisar el cañón cada que se
reciba el arma o solicitar al personal indicado para
ello. Si se percibe un débil retroceso, suspenda y
abra el arma usando el botón de retenida; extraiga
el cargador y revíselo.

69

Posiciones para Disparar
Existe una gran variedad de posiciones para
realizar disparos, pero este manual contempla
únicamente dos formas básicas:
1) Frontal o isósceles
2) Natural y rodilla al piso
Estas posiciones dan estabilidad y dirección al
dispa- rar, ayudando de esa forma a impactar con
precisión en el menor tiempo posible.
Toda posición que se utilice debe ser equilibrada
(al poner el centro de gravedad del cuerpo
repartido en los puntos de apoyo), transitoria
(permita moverse de manera rápida), y direccional
(dirigir el arma hacia el objetivo con el dorso en la
misma dirección).
Cabe mencionar que la persona que usa el arma
debe tomar en consideración algunas características
de su complexión, limitaciones y lesiones; así
como los lugares donde puedan abrigarse o
resguardar de alguna amenaza.
Es importante saber que una posición debe ser
prac- ticada hasta mecanizarla, de no hacerlo
difícilmente se podrá realizar durante un
enfrentamiento; de la misma manera, debes
entrenar tus emociones y refor- zar tus
conocimientos legales para garantizar un des-
empeño adecuado.
Frontal o Isósceles natural y modificada
En esta posición se aprovecha la reacción natural
del cuerpo ante un peligro o situación que
requiera una reacción rápida, conservando la
máxima estabilidad y capacidad de reacción.
70
MANUAL DE
Fases de la Posición
La persona debe de situarse frente al objetivo,
flexio- nar las rodillas y desplazar de manera
simultánea el pie derecho lateralmente, en la
posición de isósceles natural y un pie hacia atrás
(para los zurdos el izquier- do) en isósceles
modificada, con esto se consigue una distancia entre
los pies semejante o un poco más a la distancia
entre hombros, al mismo tiempo el arma
desenfundada se dirige hacia el objetivo y la mano li-
bre completa el empuñe durante la trayectoria y am-
bas finalizan el movimiento juntas, quedando ambos
pies paralelos al arma.
El torso queda inclinado hacia adelante, quedando
situado el centro de gravedad del cuerpo entre
ambos pies y así se evita que la espalda quede
completamen- te recta favoreciendo una buena
posición que absorba el retroceso.
Ventajas de la posición
Al tratarse de una posición instintiva de defensa,
se asimila con facilidad. Permite al uniformado
rápidos desplazamientos de derecha a izquierda,
adelante y atrás, inclusive en el cambio de selección
de objetivos.
• Adaptación a coberturas de distintas alturas
que puedan servir de parapeto.
• Facilidad de transición a otras posiciones.
• Tiene una gran estabilidad, es una posición
si- métrica que facilita el disparo de reacción
de manera precisa.
MANUAL DE

También es favorable en condiciones de baja

lumi- nosidad, esto porque dirigimos el arma con
todo el cuerpo y no solo con la vista, siempre y
cuando ha- yamos ubicado previamente el
objetivo.

Desventajas de la posición

Expone el cuerpo frontalmente más aún si no

se cuenta con un protector o chaleco balístico.

Puede generar cansancio si se permanece así du-

rante muchos segundos por la tensión muscular
que implica.

71
 MANUAL DE

Rodilla al piso sin y con apoyo

En esta posición se reduce silueta y podemos

utilizarla por detrás de una cobertura baja,
proporcionando una gran estabilidad, debido a los
tres puntos de apoyo que ofrece.

De frente al objetivo, se atrasa el pie derecho

(izquier- do para los zurdos) a la vez que inicia el
desenfunde, la rodilla de la pierna izquierda (derecha
para los zurdos) queda flexionada con el pie
totalmente apoyado en el suelo y dirigido hacia el
objetivo, la rodilla de la pierna atrasada se apoya en
el suelo, quedando paralela al pie adelantado.

Fases de la posición

Debemos evitar alinear rodilla y pie, pues se reduce

la estabilidad; la distancia lateral entre la rodilla Rodilla al piso
que se encuentra flexionada y el pie de apoyo, debe
ser simi- lar a la distancia entre los hombros. Para
mantener el equilibrio, el torso debe permanece recto
y los brazos deben estar al frente, a la altura de los
ojos.

En la posición con apoyo, la superficie posterior del

brazo, correspondiente a la mano débil, debe de
estar sobre el plano anterior que ofrece la rodilla del
mismo lado.

Este segundo punto de apoyo ayuda a sostener

el peso del arma, y permite un mayor descanso del
tron- co; hay que evitar apoyar el codo
directamente en la rodilla.
Rodilla al piso con apoyo
Ventajas de la posición

Reduce la silueta ante una agresión, tiene gran

estabili- dad que favorece disparos precisos,
aprovecha cober- turas bajas como protección y
apoyo, permite disparar desde planos superiores, es
de fácil transición a otras posiciones.

72
 MANUAL DE
Desventajas de la posición
Reduce la capacidad para los desplazamientos
rá- pidos, cuando se emplea sin cobertura aumentan
las posibilidades de ser alcanzado por rebotes, no es
re- comendable para adoptarse durante tiempos
prolon- gados.
Empuñe
Consiste en una sujeción adecuada, generalmente a
dos manos, que permite el control y dominio del
arma antes, durante y después de disparar.
Este control permite a la vez dirigir el arma con
exac- titud hacia el objetivo, aprovechando la
coordinación mano – visión, para mantenerla
alineada durante se- cuencias rápidas de disparo; lo
que permite una mejor absorción al retroceso.
La palma de la mano que empuña debe tener la
ma-
yor superficie de contacto con el arma.
Control de la respiración
Es una función natural del cuerpo que realiza la
oxi- genación de la sangre. La respiración debe ser
una actividad controlada por lo que se requiere
realizar ejercicios de respiración profunda.
Cuando el cerebro se encuentra oxigenado los
sen- tidos se agudizan, el ritmo cardiaco
disminuye, la vista se aclara, el tacto se hace más
sensible y el oído se mantiene más alerta.
Es una función natural del cuerpo que realiza la
oxi- genación de la sangre. La respiración debe ser
una ac- tividad controlada por lo que se requiere
realizar ejer- cicios de respiración profunda.
Cuando el cerebro se encuentra oxigenado los sen-
tidos se agudizan, el ritmo cardiaco disminuye, la vis-
ta se aclara, el tacto se hace más sensible y el oído
se mantiene más alerta.
Ciclo respiratorio:
Precisión
Al levantar el arma, se llevan las miras a la altura de
los ojos y al mismo tiempo se aspira (de 1 a 3
segundos).
Se detiene la respiración (apnea) y se ubican las
mi- ras al centro del objetivo (en un lapso de 7 a 10
segun- dos máximo).
Durante esta pausa se debe acumular una cantidad
mínima de oxígeno en los pulmones.
Ya ubicadas las miras al centro del objetivo, se
comienza a presionar el disparador, hasta que se
produzca el dispa- ro; inmediatamente viene la
exhalación.
Se inhala de manera enérgica una mayor
cantidad de aire y se corta la respiración al disparar,
puede ser con el siguiente ciclo:
Reacción
En texto: Inhala, corta la respiración y realiza de 2 a
4 disparos. Exhala rápidamente de nuevo. Inhala y
exha- la, en dos ocasiones, y suspende la respiración
para la siguiente secuencia de disparos, hasta que
sea nece- sario. En prácticas de tiro es dependiendo
del número de disparos que se indiquen y en vía
pública hasta que cese la agresión.
73
 MANUAL DE

Si se practican de manera frecuente distintas determinar cuál ojo está guiando el enfoque.
técni- cas de respiración, durante un enfrentamiento
es más factible que el organismo tenga opciones que
podrá se- leccionar de acuerdo a la necesidad de
oxígeno de cada situación (en el subtema 2.9 de
recomendaciones gene- rales, te mostramos algunas
técnicas).

Alineación de los órganos de puntería

¿Qué es el ojo dominante?

Cuando se tienen los ojos abiertos, el ojo dominante

es aquel con el que nuestro cerebro dirige el enfoque
de los objetos cercanos a la vista. Para saber cuál es
el ojo dominante, se deben extender los brazos y
formar un triángulo con las manos delante de los
ojos, se fija un objeto lejano y una vez que está
centrado, sin mo- ver la cabeza, se cierra de manera
alternada un ojo y después el otro; aquel con el que
sigas viendo la ima- gen centrada es tu ojo
dominante.

En caso de que no pueda cerrar alguno de los ojos,

en lugar de mantener los brazos extendidos y las
ma- nos alejadas, estas, se acercan lentamente
hacia la cara, sin perder de vista el objeto, hasta

74
 MANUAL DE

Cuando vemos con ambos ojos al mismo

tiempo no siempre predomina un ojo sobre
el otro, de hecho, am- bos envían
información a los dos hemisferios del ce-
rebro, y es quién se encarga de formar la
imagen más nítida posible a partir de toda la
información recibida.

75
 MANUAL DE

Existe la probabilidad que los diestros de mano son

habitualmente diestros de pie y de ojo, pero no NO NO
siem- pre es así, hay quienes tienen el ojo
dominante con- trario a la mano dominante,
afectando ligeramente a la coordinación mano visión
que es la que nos ayuda a dirigir el arma hacia el
objetivo que estamos obser- vando.

Es fundamental conocer la manera de colocar los

ór- ganos de puntería respecto al objetivo, al hacerlo
co- rrectamente tendrá mayores posibilidades de NO NO
efectuar un disparo eficaz.

Cada vez que apunte al objetivo, se deberá alinear

la mira frontal con la mira posterior dejando el
mismo espacio de luz tanto de lado derecho como
de lado izquierdo y al repetir esta acción generamos
mecani- zación.
SÍ
Observe los siguientes ejemplos:

76
 MANUAL DE

Control de la presión sobre el disparador

Con el dedo índice se ejerce la presión del disparador

de menos a más, hasta que se produzca el disparo.

La parte que debe colocarse sobre el disparador es

la yema del dedo, pues es la parte más sensible;
esto permite conservar un buen control.

La presión debe ser hacia la empuñadura evitando Disparo de reacción

empujar o jalar con el dedo.
¿Qué es el Tiro de Reacción? Esta técnica de
disparo tiene como características generales que, a
partir de un estímulo auditivo, visual o al tacto; el
practicante va a dirigir su arma de fuego para
realizar disparos efec- tivos en el menor tiempo
posible, empuñándola a una o dos manos con
dirección a un objetivo determina- do manteniendo
ambos ojos abiertos para no perder campo visual.
De igual manera no debe apretar los demás dedos,
para que no se desvié la línea del cañón.
Sin embargo, frecuentemente solo se trabaja de
ma- nera que se da preferencia a disparar de manera
¿Qué es el disparo de precisión?
rápi- da, dejando de lado la necesidad de decidir si
es nece- sario disparar o no, a quién y en qué
Es realizar un disparo con acierto y destreza, es
momento.
decir, dar o golpear en el lugar al que se desea,
realizando la acción con habilidad.
En ocasiones se usan las fundas en posiciones o
con modificaciones para ejercicios en competencias,
El disparo de precisión se basa en el ámbito depor-
que no son funcionales para el uso en servicio.
tivo que se rige por cinco pasos: posición,
empuñe, control de la respiración, alineación de los
¿Qué es el Disparo Policial?
órganos de puntería y control de la presión en el
disparador.
Este tipo de disparo es el más complejo, puesto
que debe desarrollar la coordinación a través de la
Es importante resaltar que se deben realizar
prác- tica para realizar los movimientos necesarios
adecua- ciones por la necesidad del ámbito policial
(ubica- ción del objetivo, consciencia situacional de
que es dife- rente al deportivo, por ejemplo:
personas detrás de nuestro objetivo, valoración
dependiendo

77
 MANUAL DE

del poder de nuestra arma, ejecución de

disparo, observación de la reacción del objetivo,
acciones a desarrollar dependiendo de los
efectos) empuñe, desenfunde, dirección del
arma, presión continua del disparador de
manera inmediata y la precisión para impactar
únicamente en el agresor y detener la agresión en
el menor tiempo posible.

Además, debe considerar el antes, durante y des-

pués del disparo.

• Antes: cuando sea necesario que el

funciona- rio encargado de hacer cumplir la
ley (Policía), repela una agresión letal
usando el arma de fuego con el fin de
salvaguardar su vida y/o de terceras
personas tendrá que disparar y sin duda, el
entrenamiento emocional favorecerá en la
decisión adecuada.

• Durante: el o los disparos deben ser los

nece- sarios para detener la agresión.

• Después: asegurar el entorno, colocar

canda- dos de mano, realizar la inspección
corporal, en caso de existir lesionados debe
solicitar los servicios médicos, sin importar
quien sea la persona y debe preservar el
lugar de la inter- vención.

78
MANUAL DE

79
 MANUAL DE

80
 MANUAL DE

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