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Revista Temas
http://dx.doi.org/10.15332/rt.v0i11.1752
Resumen
Nicolás Maquiavelo es uno de los clásicos de la ciencia política que sigue provocando una gran cantidad de inter-
pretaciones, por sus consejos propuestos hace más de 500 años ha logrado una permanente invocación a la política
pragmática, pero también ha contribuido a la formulación de categorías teóricas que aún hoy sirven para el debate y la
polémica sobre lo que debe ser la política. En el presente trabajo se reflexiona sobre la categoría de ciudadanos, en la
que el florentino observa que está en una relación permanente de tensión con el Estado, al ser considerados como una
fuerza política capaz de contraponerse a los excesos del poder absoluto, además de ser concebidos como un riesgo para
mantener la unidad del Estado, más cuando se les faculten y reconozcan todos sus derechos políticos y sociales, de ahí
que la construcción de la categoría de ciudadano sirva para comprender la exclusión o inclusión de personas por el Estado.
Palabras clave
Maquiavelo, Estado, ciudadanía, política, derechos.
Abstract
Niccolo Machiavelli is one of the classics of political science who continues to provoke a great number of interpre-
tations by his councils proposed more than 500 years ago has achieved a permanent invocation to the pragmatic policy,
but also has contributed to the formulation of theoretical categories that still Today serve for debate and controversy
over what politics should be. In the present work we reflect on the category of citizens, where the Florentine observes
that he is in a permanent relationship of tension with the State when considered as a political force capable of opposing
the excesses of absolute power, besides being conceived as a Risk to maintain the unity of the State, more when they
are empowered and recognize all their political and social rights, hence the construction of the category of citizen serves
to understand the exclusion or inclusion of people by the State.
Keywords
Machiavelli, State, citizenship, politics, rights.
1. Artículo de Reflexión.
2. Profesor investigador de tiempo completo, adscrito al Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Tecnológica de la
Mixteca, Oaxaca. Profesor por asignatura en la Universidad Santander, Unidad Académica Oaxaca. Presidente de la Asociación de Periodistas
Independientes de la Mixteca. Correo electrónico: rgarcia2000_mx_1@hotmail.com
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3. El Estado fuerte para Maquiavelo es aquel gobernado por un […] fácil convencerlos de una cosa, mas
príncipe astuto y sin escrúpulos morales, que puede garantizar es complejo afirmarlos en esa persua-
un orden social “justo” que frene la violencia de una turba por el sión; y por ello conviene estar dispuesto
afán de poseer lo ajeno, es de ahí que solo el Estado es el garante
de imponer orden y justicia a los miembros residentes de ese de modo que, cuando ellos ya no crean,
territorio.
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se les pueda hacer entender por la fuerza no como se quisiera que ella fuera. En
(Maquiavelo, 2008, pp. 19-20). ese sentido, él proclama lo que algunos
llaman realismo, otros cinismo y otros ca-
Para los efectos de la presente re-
lifican esta materia de espíritu científico”
flexión indagaremos sobre el origen y
(Aron, 1972, p. 60).
significado de los ciudadanos y la relación
que estos establecían con el Estado. El Su maestría fue rica en lo que concier-
propósito es ubicar la importancia que ne a los asuntos de gobierno, diplomacia
tiene el retorno de los ciudadanos como y organización militar; estas actividades
una fuerza política capaz de ser un con- lo ayudaron a desarrollar su sagacidad
trapeso a los excesos del poder, y cómo que él mismo escribió como consejos
esta fuerza fue concebida como un riesgo en su obra El príncipe. Como canciller
permanente al poder que sustentaba el tuvo oportunidad de conocer a fondo la
Príncipe. Para alcanzar tales propósitos política interna de su república y como
se recurrió a la lectura profunda de los embajador la política externa. Por su am-
textos: El príncipe4y Los discursos sobre plia y larga carrera estaba capacitado para
la primera década de Tito Livio5. escribir sobre política, auto/definiéndose
como un Zorro y un León.
El tiempo de Maquiavelo y la génesis
del Estado moderno Maquiavelo era consiente de ese co-
nocimiento adquirido, lo que le permitió
La vida de Maquiavelo transcurrió en escribir un conjunto de consejos al prín-
una Europa dividida y colmada de gue- cipe para mantener el orden, al respecto
rras entre naciones, donde la política era señala:
concebida como un arma para sosegar
al vulgo sublevado contra los señores de De manera que, ya que se ve obligado a
los todavía feudos diseminados por toda comportarse como bestia, conviene que
europea. La perspicacia del florentino lo el príncipe se transforma en zorro y en
león, porque el león no sabe protegerse
llevó a reconocer expresamente que la
de las trampas ni el zorro protegerse de
fuente de su conocimiento sobre asuntos
los lobos. Hay, pues, que ser zorro para
de política tenía su origen en la experien-
conocer las trampas y león para espantar
cia en los asuntos gobierno (públicos) y a los lobos. […] Por lo tanto, un príncipe
el estudio y comprensión de la historia. prudente no debe observar la fe jurada
Para Maquiavelo la política es “el arte cuando semejante observancia vaya
de lo posible”, es decir, se trata de una en contra de sus intereses y cuando
hayan desaparecido las razones que
concepción que supone una relación de
le hicieron prometer. Si los hombres
saber calcular la utilización de ciertos
fuesen todos buenos, este precepto no
medios para llegar hacia fines inmersos
sería bueno; pero como son perversos,
en una coyuntura determinada. Si bien y no la observarían contigo, tampoco
es cierto, que el análisis de la política tú debes observarla con ellos. Nunca
descansa sobre la realidad inmediata, faltaron a un príncipe razones legitimas
entonces para el florentino: “[…] es un para disfrazar la inobservancia. […] Que
imperativo ver la realidad ‘como es’, y el que mejor ha sabido ser zorro, ese ha
triunfado. Pero hay que saber disfrazarse
bien y ser hábil en fingir y en disimular.
4. Edición electrónica. Maquiavelo, N. (1992). El príncipe. Edición Los hombres son tan simples y de tal
libre en internet.
5. Maquiavelo, N. (2008). Discursos sobre la primera década de Tito manera obedecen a las necesidades del
Livio. Madrid: Alianza Editorial. momento, que aquel que engaña en-
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sus escritos la importancia de que las ins- de imponer la voluntad para esperar una
tituciones republicanas fueran puestas en conducta social dentro de los cauces de
riesgo con la invasión de Francia y España normalidad; pero de acuerdo con esta
a Italia en su momento (Gaiada, 2009). lógica, hay que distinguir dos aspectos
que cobra la dominación misma: por
En su obra El príncipe, Maquiavelo una parte, la dominación pura y simple
dirige sus consejos en particular a Lo- y, por el otro, el poder de dominación
renzo de Médicis, el Magnífico, y lo hace que implica la probabilidad de encontrar
de tal manera que le sugiere reconozca obediencia a lo mandado, o sea, un aca-
los diversos tipos de “Principados” y los tamiento más o menos espontáneo y no
mecanismos para hacerse llegar del po- la simple sumisión porque esta última no
der y conservarlo10 (Maquiavelo, 1992, ayuda a la integración del Estado.
Dedicatoria).
Hablar del poder de dominación y
Maquiavelo señala en el capítulo I de la influencia que este ejerce, traza para
El príncipe, bajo el título “De las distintas nuestro análisis visiones diferentes de
clases de principados y la forma en que una sumisión y aseguramiento de la
se adquieren”, que: voluntad de los individuos. La sumisión
[…] los estados, todas las formas que tiene una raíz más profunda en los indi-
han profesado y ejercen soberanía sobre viduos, es un sustrato más psicológico, y
los individuos, han sido y son repúblicas una vez develada la fuerza o superioridad
o principado (Maquiavelo, 1992, p. 4). externa, cesa su influjo o antagonismo
del mismo cuando al sujeto se le “sujeta”
Con las afirmaciones anteriores, pode- a una idea que le otorgue sentido a su
mos deducir dos alternativas para lograr propia existencia (García, 2009).
un mismo efecto. Por una parte, el ejerci-
cio de la soberanía, que está directamente Pero en ambos casos se está hablan-
pensada para actuar sobre los hombres, y do de una concentración absolutista del
por el otro, las estrategias de dominación poder del Estado, pero Maquiavelo va
por emplear. más allá para no caer en reduccionismos
concentrados en una figura o en un cuer-
Es así que la soberanía se puede mi- po colectivo representativo del Estado,
rar desde dos dimensiones: una, en su lo que busca es anticipar la debacle de
modo interno, la soberanía hace alusión la unidad del Estado identificando a los
a la relaciona y ejercicio de poder que el posibles enemigos de este diluidos en la
Estado hace sobre su territorio y su po- sociedad.
blación; y dos, el carácter exterior señala
la independencia que tiene un Estado-na- La unidad del Estado bajo la forma
ción respecto a otro, fijando los límites de la república
territoriales y reconoce aquellos indivi-
duos que forman parte de su población En el presente apartado resaltamos la
(García, 2009). figura de un Maquiavelo disfrazado con
piel de oveja, que busca ser conciliador y
Apoyado en las ideas de Max Weber, diplomático para apaciguar a las fuerzas
la dominación a la que hace alusión Ma- políticas diluidas en la muchedumbre que
quiavelo es similar a la definida por el vociferan injurias a los actos voluntaristas
sociólogo alemán como la probabilidad y déspotas del príncipe al señalar que:
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[...] quienes maldicen las grescas entre aporta los escenarios para disuadir toda
los nobles y plebeyos, embisten lo que disputa entre bandos que riñen por el
fue el origen principal de la libertad de poder; parte del supuesto de que toda
Roma, y que se fijan más en los rumores comunidad tiene bandos contrapuestos,
y exclamaciones que nacían de esas el del pueblo y el de los grandes, ambos
revueltas que en las buenas secuelas buscan gobernar, por lo tanto, el trazado
que produjeron. En toda República se de leyes y la regulación de los agentes del
hayan dos ánimas encontradas, la de Estado para la disuasión del conflicto son
los grandes y el del pueblo, y todas las las cualidades que toda república debe
legislaciones que se hacen en pro de
diseñar, resalta el autor.
la libertad y nacen de la desunión de
ambos […] (Maquiavelo, 2008). Maquiavelo señala que es esencial
que en dicha república dispongan de las
Es a partir de estas palabras que Maquia-
velo introduce un par de tópicos clave instituciones necesarias para canalizar el
para aglutinar y dar forma a la unidad conflicto a través de ellas, sin las cuales
del Estado, por una parte, identifica a el principado se desmantelaría. Además
los bandos en disputa a través de una indica que ninguna de las distintas formas
división social de actores, y por otra par- de gobierno como la aristocracia, la tira-
te, la importancia de disuadir un posible nía, la democracia o la monarquía, logran
conflicto buscando establecer un orden el equilibrio de los partidos en disputa,
político a través de una regulación de por lo que son vacilantes las formas de
sus acciones de descontento. gobierno impuras.
Por lo tanto, para Maquiavelo la esta- Pero el florentino observa que las
bilidad de la república se cimienta sobre diferentes formas de Estado poseen una
dos columnas que resultan fundamen- vida corta, ya que todas peregrinan por
tales: un proceso natural y cíclico que implica
su génesis, desarrollo y muerte; además
1. El diseño de instituciones que permitan a su análisis agrega la existencia de fac-
trazar leyes y ordenamientos que atra- tores que están sujetos a las pasiones y
viesen a todo el imaginario social, y; debilidades de los “hombres de estado”
2. La regulación de la actitud y las accio- como la corrupción, y otras formas de-
nes de los agentes que intervienen en gradantes de la virtud, por lo cual: […]
el entramado político. casi ninguna república disfruta tener una
vida tan larga como para salvar muchas
Cuando ambas columnas funcionan veces esta serie de alteraciones y persistir
convenientemente se articula la estruc- en pie […] (Maquiavelo, 2008).
tura de la República que aparece como
un organismo vivaz y sano. Pero cuando En el pensamiento de Maquiavelo “el
alguno de los elementos no funciona príncipe virtuoso” es aquel que sabe en-
adecuadamente, el cuerpo político tiende frentar las calamidades, trata de evitar los
a corromperse, decae e incluso puede daños y aprovecha de estos sus lados po-
desaparecer. sitivos para aumentar su brillo. Un virtuo-
so de la política sabe cuándo es propicio
En el texto Discursos sobre […] Tito acometer o esperar. Sabe cuándo debe
Livio, Maquiavelo se declara devoto de ser un Zorro o un León. Es imprescindible
la República y enaltece su valor por- para un príncipe tener la Virtud, debido a
que concibe que esta forma de Estado
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que en la contienda política esta se basa en esta cuestión, la virtud y el vicio […]
en saber leer el momento. (Maquiavelo, 2008).
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pueda culpar públicamente a cualquier Para poder ejercer esta dominación sin
ciudadano, sin ninguna desconfianza, caer en arbitrariedades, se debe conside-
sin ninguna consideración, y hecho esto rar la existencia de fuerzas políticas que
y observado fielmente, debe reprender un príncipe debería distinguir y enfrentar
fuertemente a los calumniadores, los sabiamente. Estas fuerzas son diversas y
cuales no pueden lamentarse si son la historia ha demostrado cómo han ope-
castigados, habiendo sitios abiertos rado en diversos momentos. La distinción
donde podían hacer oír los cargos que que sugiere aquí Maquiavelo puede inter-
iban propagando ofensivamente por pretarse como la separación de la acción
los pórticos. Y cuando este asunto no
y el motivo político que todo príncipe
está apropiadamente reglamentado, se
que sustenta el poder debe asumir una
siguen siempre desórdenes, pues los
lógica de conservar el poder mediante la
embustes irritan a los ciudadanos y no
castigan, y los ofendidos piensan en ecuación: “ellos o nosotros”.
vengarse, odiando, y no temiendo, las Esta matriz tan cuestionable posee un
imputaciones que se les hacen (Maquia- carisma en la praxis de la política moder-
velo, 2008, p. 58).
na, instaurada en los componentes de
La reflexión de Maquiavelo contribuye un pensamiento liberal asumidos desde
enfáticamente a señalar que la vida civil una posición o pertenencia a un grupo
de los hombres se encuentra en el plano privilegiado que sustenta cierto poder,
de lo idóneo, donde el ejercicio de las donde la guerra o el conflicto existente no
voluntades se auto-determina en el re- es más que la realización extrema de una
conocimiento de un ciudadano libre con enemistad, mientras que la política pue-
ciertos derechos otorgados por el simple de ser comprendida como la realización
hecho de pertenecer a un Estado que ordinaria de esa enemistad al sustituir y
los tutele. Podemos inferir además que combinar la guerra y la política en una
a través de la dominación legitimada se nueva fórmula que siglos más tarde lle-
ejerce una soberanía sobre los hombres, varía a Carl Schmitt a elaborar su famosa
y en consecuencia, se buscará que al seno dicotómica de “amigo-enemigo”.
de las repúblicas o principados se evite el El criterio amigo-enemigo, planteado
brote de descontentos sociales11. Maquia- por Carl Schmitt como una expresión
velo justifica entonces ciertas acciones al de diferenciación, posee una afirmación
observar que: colectiva de sí mismo (nosotros), frente
Cuando se […] desarma a los súbditos, al otro (ellos). La diferencia nosotros-ellos
se ofende, puesto que declara una des- establece un principio de oposición y
confianza de ellos, y que se les sospecha complementariedad dentro de una re-
capaces de […] o de poca fidelidad. […] lación política. El reconocer al enemigo
ambas opiniones que le supongan contra implica la identificación de un proyecto
sí mismos producirá el odio hacia él en político diferente que genera un senti-
sus ánimos (Maquiavelo, 1992, Cap. XX). miento de pertenencia, pero también de
diferencias. Schmitt arguye que la esen-
cia de la política no puede ser reducida
a la enemistad pura y simple, sino a la
posibilidad de distinguir entre el amigo
11. Para Maquiavelo la sociedad humana es por naturaleza perversa
y egoísta, solo preocupada por su seguridad y por aumentar su
y el enemigo.
poder sobre los demás; solo un Estado fuerte, gobernado por un
príncipe astuto y sin escrúpulos morales, puede garantizar un
orden social justo.
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sumo. Si la practica con prudencia y de hombres libres del Imperio (Finley, 1985).
modo que no lo sepan no incurrirá por Por su parte, Claude Nicolet calcula que
ello en la ignominia del vicio contrario recibieron ese beneficio un total de seis
(Maquiavelo, 1992). millones de personas, lo que constituía
entre una quinta o una décima parte de
Hay que reconocer que la ciudadanía
la población del Imperio Romano. Dicho
como fuerza política es un concepto
autor nos describe que los atributos de la
relevante que comienza a reconocerse
ciudadanía, diciendo que era una garantía
nuevamente en el Renacimiento, este,
cívica y jurídica, facultaba a los individuos
además, deja vislumbrar la instauración
a asumir obligaciones con relación al
y configuración de los derechos políticos
imperio. En la República incluía un dere-
y civiles que ya con los contractualitas
cho de participación en la vida política,
tomarán una forma mucho más acabada.
pudiendo participar en las deliberaciones
De ahí que para poder situar al ciu- y en las elecciones de Magistrados, situa-
dadano como el actor individual que da ción que en su momento fue un avance
carácter a las nuevas formas del Estado importante para la democratización de la
se conjuga y vincula de manera paralela vida política de esa nación (Nicolet, 1980).
a una cultura política progresivamente
Recordemos que en la Edad Media los
formada por personas situadas en el mun-
derechos de los ciudadanos no existían
do de los derechos y las obligaciones.
como tales, ya que estos habían sido
Resulta paradójico pensar que Maquia-
cancelados siglos atrás bajo la idea de
velo, siendo un estudioso de la historia
que el único derecho y autoridad para
y admirador de las civilizaciones griega
regir la vida de los hombres recaía en la
y romana, no haya asumido plenamente
figura de un Dios, este precepto exigía a
el modelo de ciudadanía que estos im-
sus creyentes absoluta sumisión a esa
perios otorgaban a los miembros de sus
divinidad, donde la voluntad individual
Estados.
queda enajenada a la forma suprema del
Al respecto la ciudadanía griega poseía conocimiento que es Dios.
dos características fundamentales: per-
Un rasgo esencial que indica Maquia-
tenecer solo a una élite y representar un
velo para distinguir a los nuevos tiem-
vínculo de carácter religioso. El primero
pos que se viven es el desarrollo de la
de dichos requisitos se evidencia en la
“institucionalización” de las demandas y
constitución de Atenas. Nos dice Aristó-
conflictos que tienen los ciudadanos. Con
teles en esa obra que:
ello aparecen nuevas estructuras sociales
Dragón dispuso sus leyes, y esta organi- que tienden a racionalizar la acción de los
zación fue del siguiente modo: La plena actores sociales con el propósito de tener
ciudadanía se le daba a los que tenían el “control” de sus conductas individuales
su armamento de hoplitas […] El Con- utilizando los medios más adecuados
sejo lo forman cuatrocientos uno de los para dar salida a esas demandas. Las
ciudadanos del pleno derecho a quienes acciones y estrategias aparecen más
toca en suerte […] (Aristóteles, 1970). dotadas de una lógica/racional que sus
antecesoras.
A diferencia de Grecia, la ciudadanía
en Roma no constituía una comunidad ce- Por lo tanto, en el proceso de “moder-
rrada sino que se convirtió en un fenóme- nización” la constante será la diferencia y
no universal, dado que en el año 212 d.C. el grado de especialización de las institu-
Caracalla les otorgó la misma a todos los
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ciones junto con la de sus actores, hacien- Para gobernar eficazmente a los ciu-
do complejo el entramado social que se dadanos Maquiavelo aconseja realizar lo
presenta en la realidad. Esto traerá como necesario para obtener un provecho de
consecuencia reacomodo en la estructura sus condiciones materiales y usar las di-
del sistema social nuevo, lo cual desatará ferencias entre los mismos ciudadanos. El
y encadenará cambios substanciales en príncipe deberá pensar en cómo contener
los roles que los individuos desempeñen. y someter a los ciudadanos y también en
Todo cambio que enfrente una reestruc- cómo apoyarse en estos cuando le sean
turación, sea cual sea y al nivel del que útiles o mantenerlos bajo control cuando
se trate, sufrirá un choque directo en sus revistan un peligro para su poder. Intuiti-
partes esenciales que lo han mantenido vamente, se puede sugerir que Maquia-
estable y le han dado forma por mucho velo trata de establecer un contrato social
tiempo. de forma unilateral para beneficio de los
primeros para los que detentan el poder
En la República de Maquiavelo obser- (Zapata, 2001).
vamos que se tejen lazos que redefinirán
la relación entre los individuos y el Estado, Es oportuno subrayar que esa fuerza
aunque esa correspondencia en plenitud política que son los ciudadanos, es una de
solo se culminará en el siglo XVIII. Enton- las más importantes amenazas al Príncipe,
ces comenzará el proceso definitivo del misma que hay que considerar en todo
reconocimiento de la ciudadanía como momento:
estatus con efectos en la vida privada y
[los] principados se ven amenazados,
civil de la persona.
[…] cuando ambicionan mudar de prin-
Pero para que esa “emancipación” se cipado civil a uno absoluto, pues estos
contenga, Maquiavelo cree necesario príncipes gobiernan para sí mismo a
lograr la implementación de la soberanía través de gobernadores. […] pero la
y la ejecución de leyes que inmovilicen permanencia de estos es más precaria
cualquier brote de insubordinación, para y peligrosa, ya que depende de la vo-
ello el Príncipe tiene la necesidad de luntad de los ciudadanos que ejercen el
cargo de gobernadores provinciales, los
adoptar diferentes estratégicas frente a
cuales, y sobre todo en épocas desfavo-
los ciudadanos. Maquiavelo se ocupa, por
rables, pueden arrebatarles fácilmente
ejemplo, de la ocupación de un Estado.
el poder, dejando de obedecerles, o
En este proceso el Príncipe deberá con- amotinando al pueblo contra ellos (Ma-
siderar a los ciudadanos como medios quiavelo, 1992, pp. 27-28).
para otro fin.
La cita anterior enfatiza la presencia
Maquiavelo ofrecerá al Príncipe tres gravitante de los ciudadanos que pue-
posibilidades de control a los ciudadanos: den hacer caer un régimen de gobierno
[…] lo primero es empobrecer a los y cambiar la composición del Estado. La
ciudadanos; segundo es ir a residir en llamada anterior es también un ejemplo
persona con ellos; y, tercero es dejar de la capacidad política que pueden ad-
que vivan con sus preceptos obteniendo quirir los ciudadanos cuando se organizan
un impuesto y crear un Estado de un en contra del Príncipe.
pequeño conjunto de habitantes […]
(Maquiavelo, 1992, cap. V). Implícitamente Nicolás Maquiavelo
muestra un concepto que siglos después
Carlos Marx desarrollaría con el fin hacer
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consciente a una clase para la transfor- y deja entrever que los ciudadanos como
mación social y motivar a la ruptura del una fuerza política son peligrosos.
Estado mediante la “conciencia de clase
Para conservar con seguridad sus Esta-
social”.
dos unos creyeron necesario desarmar
Ciertamente que el concepto “concien- a sus súbditos, y otros promovieron
cia de clase” es un término marxista que divisiones en los países que les estaban
refiere a la capacidad de los individuos sometidos. Unos mantuvieron enemis-
para conformarse en una clase social y tades contra sí mismos, y otros se con-
ser consciente de las relaciones antagó- sagraron a ganarse a los hombres que
nicas ya sea económica, política, social, en el comienzo de su reinado les eran
sospechosos. Unos construyeron en sus
que aducen a su condición de subordi-
dominios fortalezas, y otros demolieron
nación. Ahora bien, a la conciencia a la
y arrasaron las que existían. Ahora bien,
que hacemos referencia aquí es aquella
aunque no es posible formular una re-
“conciencia política”, es decir, el ser parte gla fija sobre todos estos casos, a no
de una determinante fuerza que lucha ser que quepa, por la consideración de
por la conquista del poder para dirigir el algunos detalles significativos, decidirse
rumbo del Estado. a tomar la determinación que implique
mayor cordura […] (Maquiavelo, 1992:
El florentino aconseja al Príncipe que
Cap. XX).
para restar este tipo de efecto que pueda
causar un revés al control y unidad del Lo especial de este señalamiento no es
Estado: la advertencia que pudiera hacer Maquia-
velo frente a la capacidad organizativa de
[...] convendrá que se renuncie de apo-
derarse del patrimonio y de las mujeres los ciudadanos, pues el temor frente a
de sus ciudadanos y vasallos, y que estos es una constante en su pensamien-
no actúe contra la vida de alguien sino to, sino no otorgar derechos amplios.
cuando haya razón y motivo evidente; Además el autor insinúa el peligro que
pero principalmente abstenerse de se corre cuando se trata de reconocer la
[poseer]15 los bienes ajenos, porque ciudadanía a los extranjeros, porque estos
los hombres dejarán de lado la muerte pueden por otras vías compartir el poder
del padre que la pérdida de los bienes del Estado. Luego entonces sugiere “aco-
(Maquiavelo, 1992, p. 46). tar a los ciudadanos extranjeros, porque
influyen en las votaciones”.
Maquiavelo recomienda prudencia en
el manejo y empleo de la fuerza así como En los Discursos sobre la primera
también el de no hacer leyes que trasgre- década de Tito Livio, libro II, el autor des-
dan la posesión de sus bienes, ya que de cribe trayectorias y acciones de ciudada-
lo contrario los ciudadanos y súbditos nos que individual o colectivamente han
pueden constituirse en una fuerza política marcado el rumbo político e histórico de
con capacidad de armarse militarmente las repúblicas con resultados diversos. Es
para combatir esa beligerancia que los así que la relación de la ciudadanía con
subyugue. el Estado es concebida por Maquiavelo
como una relación material determinada
Para reforzar lo antes expuesto recurri- por el poder efectivo que se ejerce en
mos al libro El príncipe que nos ofrece un las relaciones políticas. Esta relación se
ejemplo histórico que Maquiavelo rescata construye y varía según las oportunida-
des de acción de los ciudadanos y no se
15. El corchete es propio.
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define exactamente según una legalidad gran valía a estos para transformar al Es-
que determine su forma. tado. Pero para los órdenes gubernamen-
tales vigentes, es de suma importancia
Conclusiones tener divididos a los grupos o sectores
sociales a través de continuos conflictos
Concluimos que en el pensamiento de
entre ellos. Además una virtud de los
Maquiavelo los cambios políticos de su
poseedores del poder es saber institucio-
tiempo están en relación directa con la
nalizar a través de la creación de leyes y
existencia de un Estado fuerte que están
derechos que se otorgan a los ciudadanos
determinados fundamentalmente por los
sus demandas y los problemas que exis-
aciertos y los errores del Príncipe, pero
tieran entre ellos y entre el Estado y estos.
que estos también dependen en gran
medida de cómo contener a los diferentes Una manera de concluir este escrito
actores sociales que luchan por el poder es citar el siguiente pensamiento de Ma-
y recomienda no subestimar a los ciuda- quiavelo:
danos, ya que una república se debe a
los ciudadanos su grandeza o su ruina. […] un príncipe hábil debe hallar una ma-
nera por la cual sus ciudadanos siempre
Pensemos que Maquiavelo se encuen- y en toda ocasión tengan necesidad del
tra frente a las necesidades organizativas Estado y de él. Y así le serán siempre
de un orden político que intenta determi- fieles (Maquiavelo, 1992, p. 28).
nar históricamente los espacios adecua-
Con este consejo Maquiavelo vislum-
dos para regular los conflictos internos
bra una forma en que se puede pensar
en una sociedad diversa a través de
en la continuidad del Estado y su afian-
reconocer y limitar los derechos políticos
zamiento por parte del príncipe, donde
de los ciudadanos, resulta aleccionador
los propios ciudadanos son un nuevo
el visualizar a los ciudadanos como una
elemento sobre el cual el Estado debe
fuerza política que pone en riesgo la uni-
crear y aplicar una estrategia que los haga
dad del Estado cuando estos en unidad
dependientes en todo momento de él.
tienen motivos más que sobrados.
Por lo tanto, Maquiavelo recomienda
Esta reflexión supone entonces ade-
que el arte de gobernar sobre los ciuda-
más que la posición en las relaciones
danos estriba en que estos no cobren
políticas o en las relaciones económicas
conciencia de su situación de clase social,
marcan evidentemente una diferencia por
para ello debe limitar el uso de la fuerza
la lucha del poder político y la conducción
física a sujetos (líderes o representantes
del Estado, pero en el plano de lo político,
de ciertos grupos), como el respetar los
las confrontaciones no deciden la lógica
bienes y mujeres de los ciudadanos.
de las relaciones sociales existentes
como suponía C. Marx, sino el tratar de Como en antaño, Maquiavelo señaló,
conservar un Estado monolítico. que el Príncipe debe controlar los efectos
del temor y el odio por causa de su forma
No se trata de relaciones permanentes
de gobierno, no dando motivo a los ciu-
y fijas en disputa por los medios de pro-
dadanos para que estos se subleven. De
ducción como también suponía C. Marx.
ahí la importancia de que los ciudadanos
En Maquiavelo, rara vez un ciudadano
sean una fuerza política real, misma que
es solo eso, un individuo sin poder. Por
se encuentra aletargada y esta no debe
el contrario, el florentino le atribuye una
ser despierta y desee el arribo del poder.
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