PARTE 38: ORBITA Y GLOBO

OCULAR

Edgar Moisés Gutierrez Barraza 342869

Dr. Fernando Francisco Mora Domínguez

05/05/2020
El ojo es el órgano de la visión, formado por el globo ocular y el nervio óptico. La órbita contiene
el ojo y sus estructuras visuales accesorias. La región orbitaria es el área de la cara superpuesta
a la órbita y al globo ocular, incluyendo los párpados superior e inferior y el aparato lagrimal.

Orbitas

Cavidades óseas bilaterales en el esqueleto facial. Su aspecto es semejante al de pirámides

cuadrangulares huecas, con sus bases dirigidas anterolateralmente y sus vértices
posteromedialmente. Las órbitas y la región orbitaria anterior a ellas contienen y protegen los
globos oculares y las estructuras visuales accesorias, estas son:

• Los párpados, unidos a las órbitas anteriormente y controlan la exposición del globo
ocular anterior
• Los músculos extrínsecos del globo ocular, posicionan el globo ocular y elevan el párpado
superior
• Los nervios y vasos en tránsito hacia los globos oculares y los músculos
• La fascia orbitaria que rodea los globos oculares y los músculos
• La mucosa que tapiza los párpados, la cara anterior de los globos oculares y la gran parte
del aparato lagrimal que la lubrifica
➢ Base: Borde de la cavidad orbitaria, que rodea la entrada de la órbita
➢ Pared superior: La porción orbitaria del hueso frontal
➢ Paredes mediales: Lámina orbitaria del etmoides
➢ Pared inferior: Principalmente por el maxilar y en parte por los huesos cigomático y
palatino
➢ Pared lateral: Apófisis frontal del hueso cigomático y el ala mayor del esfenoides
➢ Vértice: Aquí se halla en el conducto óptico en el ala menor del esfenoides,
inmediatamente medial a la fisura orbitaria superior

Parpados y aparato lagrimal:

Repliegues móviles que cubren el globo ocular anteriormente cuando están cerrados, y por tanto
protegen frente a los traumatismos y la luz excesiva. También mantienen la córnea húmeda al
extender sobre ella el líquido lagrimal. El saco conjuntival es un espacio limitado por las
conjuntivas palpebral y bulbar, presenta una abertura anterior la hendidura palpebral, cuando el
ojo está abierto. Entre la nariz y el ángulo medial del ojo se halla el ligamento palpebral medial,
que conecta los tarsos al borde medial de la órbita, aquí el músculo orbicular del ojo se origina e
inserta.

Aparato lagrimal

Se compone de:

o Glándula lagrimal, secreta el líquido lagrimal, una solución salina fisiológica acuosa que
contiene lisozima, una enzima bactericida. El líquido humedece y lubrifica las superficies
de la conjuntiva y la córnea, y proporciona a ésta algunos nutrientes y oxígeno
o Conductos excretores de la glándula lagrimal que transportan el líquido lagrimal desde
las glándulas lagrimales al saco conjuntival
o Conductillos lagrimales, estos comienzan en el punto lagrimal de la papila lagrimal, cerca
del ángulo medial del ojo, drenan el líquido lagrimal desde el lago lagrimal al saco lagrimal
o Conducto nasolagrimal. Conduce el líquido lagrimal al meato nasal inferior

La glándula lagrimal, con forma almendrada y unos 2 cm de longitud, situada en la fosa de la

glándula lagrimal, parte superolateral de la órbita. La producción de líquido lagrimal se estimula
por impulsos parasimpáticos del NC VII. El líquido se secreta a través de 8 a 12 conductos
excretores que se abren en la parte lateral del fórnix conjuntival superior del saco conjuntival.

Inervación de la glándula: Las fibras secretomotoras parasimpáticas presinápticas llegan desde

el nervio facial por el nervio petroso mayor, luego por el nervio del conducto pterigoideo al ganglio
pterigopalatino. Las fibras simpáticas postsinápticas vasoconstrictoras, llegan desde el ganglio
cervical superior por el plexo carotídeo interno y el nervio petroso profundo.

Globo ocular

Contiene el aparato óptico del sistema visual. Este ocupa la mayor parte de la porción anterior
de la órbita, suspendido por seis músculos extrínsecos, que controlan sus movimientos, por un
aparato suspensor fascial. Mide 25 mm de diámetro.

Las tres capas del globo ocular:

1) La capa fibrosa (externa formada por la esclera y la córnea

2) La capa vascular (media) formada por la coroides, el cuerpo ciliar y el iris
3) La capa interna formada por la retina que posee las porciones óptica y ciega
Medios de refracción y compartimentos del globo ocular

Las ondas luminosas en el recorrido hacia retina atraviesan los medios de refracción del globo
ocular: córnea, humor acuoso, lente y humor vítreo. La córnea es el medio de refracción primario
del globo ocular, desvía la luz en grado máximo y la enfoca como una imagen invertida sobre la
retina fotosensible del fondo del globo ocular.

Músculos extrínsecos del ojo

Elevador del parpado superior:

Se opone la mayor parte del tiempo a la gravedad y es el antagonista de la mitad superior del
músculo orbicular del ojo, el esfínter de la hendidura palpebral. Origen en el ala mayor del
esfenoides, superior y anterior al conducto óptico, se inserta en el tarso superior y piel del
parpado superior

Músculos rectos y oblicuos

Los cuatro músculos rectos discurren anteriormente al globo ocular; se originan en un manguito
fibroso, el anillo tendinoso común, que rodea el conducto óptico y parte de la fisura orbitaria
superior en el vértice de la órbita Las estructuras que penetran en la órbita a través de este
conducto y la parte adyacente de la fisura se sitúan inicialmente en el cono de los músculos
rectos. Debido a que discurren sobre todo anteriormente para insertarse en las caras superior,
inferior, medial y lateral del globo ocular, anteriormente a su ecuador, las acciones primarias de
los cuatro rectos para producir elevación, descenso, aducción y abducción pueden deducirse
intuitivamente

Aparato de soporte del globo ocular

La vaina fascial del globo ocular lo envuelve, se extiende posteriormente desde los fórnix
conjuntivales hasta el nervio óptico y forma un verdadero cuenco para el globo ocular, perforada
por los tendones de los músculos extrínsecos del globo ocular y se refleja sobre cada uno de
ellos a modo de vaina muscular tubular.

Inervación de la órbita:

Los nervios ópticos se inician en la lámina cribosa de la esclera, donde las fibras nerviosas
amielínicas perforan la esclera. Salen de las órbitas a través de los conductos ópticos. A su paso
por la órbita, el nervio óptico está rodeado por extensiones de las meninges craneales y el
espacio subaracnoideo, este último ocupado por una delgada capa de LCR (v. fig. 7-45 A,
recuadro). Las extensiones intraorbitarias de la duramadre craneal y la aracnoides constituyen la
vaina del nervio óptico, que se continúa anteriormente con la vaina fascial del globo ocular y la
esclera.

Los nervios troclear y abducens pasan directamente al músculo inervado por cada uno. El nervio
oculomotor se fracciona en una división superior y otra inferior. El ramo superior inerva los
músculos recto superior y elevador del párpado superior. El ramo inferior inerva los músculos
rectos medial e inferior y el oblicuo inferior y lleva fibras parasimpáticas presinápticas al ganglio
ciliar. Los movimientos binoculares estimulados por los nervios oculomotor, troclear y abducens,
a partir de la posición primaria en las órbitas derecha e izquierda. Los tres ramos terminales del
nervio oftálmico (los nervios frontal, nasociliar y lagrimal) atraviesan la fisura orbitaria superior e
inervan estructuras relacionadas con la parte anterior de la órbita.

El ganglio ciliar es un pequeño grupo de cuerpos neuronales parasimpáticos postsinápticos

asociados con nervio oftálmico. Se encuentra entre el nervio óptico y el músculo recto lateral.

Arterias de la órbita

La irrigación sanguínea de la órbita es principalmente por la arteria oftálmica, rama de la arteria

carótida, la arteria infraorbitaria, rama de la arteria carótida externa, también irriga estructuras
relacionadas con el suelo de la órbita. La arteria central de la retina, rama de la arteria oftálmica,
surge inferiormente al nervio óptico, perfora su vaina y discurre dentro de él hasta el globo ocular,
donde emerge en el disco óptico. Sus ramas se extienden por la cara interna de la retina.

Venas de la órbita

El drenaje venoso de la órbita es a través de las venas oftálmicas superior e inferior, que
atraviesan la fisura orbitaria superior y penetran en el seno cavernoso. La vena central de la
retina suele penetrar directamente en el seno cavernoso, aunque puede unirse antes a una de
las venas oftálmicas. Las venas vorticosas, procedentes de la capa vascular del globo ocular,
drenan en la vena oftálmica inferior.

Keith L. Moore Arthur F. Dalley Anne M.R. Agur. (2013). Pelvis y perine. En anatomía
con orientación clínica (428-438) Barcelona: Ovid Technologie