Está en la página 1de 2

1.

La primera etapa es la oral y va desde el nacimiento hasta los 18


meses de su vida y en ella aparecen los primeros intentos por
satisfacer las demandas promovidas por la libido. En ella, la boca es la
principal zona en la que se busca el placer. También es la boca una de
las principales zonas del cuerpo a la hora de explorar el entorno y sus
elementos. En esta etapa, el ello se centra en obtener placer sexual
a través de la zona oral del cuerpo. El yo  que está surgiendo, dirige
las actividades de succión del bebé hacia el pezón o el biberón
para satisfacer el hambre y para obtener estimulación oral
placentera. esto explicaría la propensión de los más pequeños a
intentar "morderlo" todo.

Si se impide tajantemente que los bebés utilicen su boca para satisfacerse,


esto podría producir un bloqueo que haría que ciertos problemas quedasen
fijados en el inconsciente
2. La segunda etapa es la anal y tiene lugar entre el año y los tres
años. El placer del niño se deriva ahora de las zonas anal y de la
uretra, ya que en este momento los niños disfrutan reteniendo y
expulsando orina y heces. En esta etapa se aprende el control del
esfínter, En esta etapa el yo debe aprender a posponer las
deposiciones placenteras para realizarlas en lugares y momentos
adecuados. El entrenamiento en ir al baño se convierte en una
cuestión principal entre padres e hijos. El padre puede insistir en
que el niño se entrene antes de que este esté psicológicamente
preparado o por el contrario puede hacerle pocas demandas.
Posteriormente pueden hacerse evidentes los conflictos sobre el
control anal bien en forma de obsesión por la puntualidad, el
orden, y la limpieza o bien por el extremo alternativo de desorden
y dejadez. Las fijaciones relacionadas con esta fase del desarrollo
psicosexual tienen que ver con la acumulación y con el gasto,
vinculadas con el espíritu ahorrador y la disciplina en el primer caso, y
con la desorganización y el derroche de recursos en el segundo. Sin
embargo, según el padre del psicoanálisis, estas dinámicas de gasto y
ahorro no se expresarían solamente o principalmente a través de la
gestión del dinero.

3. La tercera etapa es la fálica y se produce entre los tres y los seis


años. y su zona erógena asociada es la de los genitales. De este modo,
la principal sensación placentera sería la de orinar, pero también se
originaría en esta fase el inicio de la curiosidad por las diferencias entre
hombres y mujeres, niños y niñas, empezando por las evidentes
disimilitudes en la forma de los genitales y terminando en intereses,
modos de ser y de vestir, etc. Además, Freud relacionó esta fase con la
aparición del "complejo de Edipo", en el que los niños varones sienten
atracción hacia la persona que ejerce el rol de madre y sienten celos y
miedo hacia la persona que ejerce el rol de padre. En cuanto a las niñas
que pasan por esta etapa del desarrollo psicosexual Freud "adaptó
ligeramente la idea con Complejo de Edipo para que englobase a estas,
a pesar de que el concepto había sido desarrollado para que cobrase
sentido principalmente en los varones. Fue más tarde cuando Carl Jung
propuso el complejo de Electra como contraparte femenina al Edipo.
Con la resolución del complejo de Edipo, se forma el superyó.  Por
lo tanto, las relaciones entre ello, yo y superyó establecidas en este
momento determinan la orientación básica de la personalidad del
individuo.

También podría gustarte