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Las Escuelas Taller de Colombia y la Escuela de Artes y Oficios de Chile surgieron para satisfacer la demanda de mano de obra calificada requerida por la modernización económica de ambos países. Estas escuelas técnicas enseñaban oficios tradicionales a jóvenes en situación de vulnerabilidad para generar empleo, preservar el patrimonio cultural y promover la movilidad social. La Escuela Taller de Bogotá, en particular, buscaba desmantelar la falsa oposición entre artesanos y profes
Las Escuelas Taller de Colombia y la Escuela de Artes y Oficios de Chile surgieron para satisfacer la demanda de mano de obra calificada requerida por la modernización económica de ambos países. Estas escuelas técnicas enseñaban oficios tradicionales a jóvenes en situación de vulnerabilidad para generar empleo, preservar el patrimonio cultural y promover la movilidad social. La Escuela Taller de Bogotá, en particular, buscaba desmantelar la falsa oposición entre artesanos y profes
Las Escuelas Taller de Colombia y la Escuela de Artes y Oficios de Chile surgieron para satisfacer la demanda de mano de obra calificada requerida por la modernización económica de ambos países. Estas escuelas técnicas enseñaban oficios tradicionales a jóvenes en situación de vulnerabilidad para generar empleo, preservar el patrimonio cultural y promover la movilidad social. La Escuela Taller de Bogotá, en particular, buscaba desmantelar la falsa oposición entre artesanos y profes
CONFERENCIA “PENSAR CON LAS MANOS: LAS ESCUELAS TALLER DE
COLOMBIA”. Universidad Nacional de Colombia, 2015. Link: https://www.youtube.com/watch?v=jDQwrO44zL8
Ciclo de Conferencias de las Artes 2015 #11. Conferencia de Alberto Escovar,
Director de Patrimonio del Ministerio de Cultura de Colombia.
A lo largo de la conferencia el Director de Patrimonio del ministerio de cultura
colombiano Alberto Escovar presenta el caso de la Escuela Taller de Bogotá como una herramienta de desarrollo social. Las Escuelas de Oficios remontan su origen a España, década de 1980, desde donde se importa el modelo a América Latina tras sus exitosos resultados. La Escuela de Bogotá abre sus puertas en el año 2005 dirigida a la formación de jóvenes entre 18 y 25 años en situaciones de vulnerabilidad social oriundos de diferentes lugares de Colombia con el propósito de proteger el patrimonio cultural, recuperar los oficios tradicionales y generar empleo a los jóvenes. Con el lema “aprender haciendo”, los tres ejes que dan motor a la misma son la formación para el trabajo y el desarrollo humano en oficios tradicionales vinculados con el patrimonio cultural material e inmaterial; la generación de emprendimientos culturales; y la fomentar la competitividad e inserción laboral. La FETB (Fundación del Taller de Bogotá), en palabras Alberto Escovar, persigue la reivindicación de los oficios como un nuevo modelo de educación con una línea formativa independiente a la formación en la universidad. La formación técnica profesional sostiene que ha sido históricamente un tipo de educación sub-evaluada y paulatinamente más escasa surgiendo la escuela con la misión de formar en oficios tradicionales enfocados al patrimonio partiendo de la especialización técnica y el conocimiento cultural e histórico del oficio buscando cambiar las barreras conceptuales de la educación técnica, apostando a la formación de maestros especializados artistas y portadores de historia. La Escuela Taller de Bogotá viene así a intentar desmantelar la falsa oposición entre el artesano, que hace cosas “útiles”, y el profesional/artista, que concurre a la universidad, recuperando el oficio como una “carrera de vida”. Ante esto, formando parte de grupo “profesional”, acuerdo y creo fundamental dejar de lado esta pugna y crear puentes de comunicación entre ambos tipos de formación reconociendo el lugar y la importancia que tienen los oficios, los “maestros” y sus conocimientos especializados, en pos de un progreso integral de las disciplinas y la sociedad. El caso de la Escuela Taller de Bogotá es un gran ejemplo de como las escuelas de oficio como una herramienta de movilidad social, acceso al trabajo y la educación con un papel fundamental en la construcción de una identidad cultural y la salvaguarda del patrimonio material e inmaterial. 2. DOCUMENTAL “HISTORIA DE LA ESCUELA DE ARTES Y OFICIOS” DE CHILE. Universidad de Santi ago de Chile, 2019. Link: https://www.youtube.com/watch?v=fYNJtykCh5w
El documental aborda el contexto que lleva a la creación de la Escuela de Artes y
Oficios y la importancia que tuvo esta para el desarrollo del país. En cuanto al contexto histórico, expone que la escuela es la respuesta a una demanda incipiente de mano de obra especializada consecuencia de la inserción de Chile en el mercado internacional con nuevos sectores productivos: respuesta a la necesidad de la educación técnica que permitiera sostener el proceso de modernización económica y la idea de progreso que instalada en el país. A partir de esto y basada en el modelo de educación técnica francés, la escuela de artes y oficios tenía una clara orientación al trabajo con talleres de carpintería, herrería, mecánica y fundición. Esta educación era complementada con clases teóricas de contenido ético -“se enseñaban valores, ser bueno”, declara un ex alumno-. Además, con un régimen de internado (pupilos y medios pupilos), se inculcaban hábitos de higiene y disciplina. La formación era muy sólida, de mucha exigencia; luego de finalizados los cursos, el alumno obtenía un título con especialidad que le permitía continuar sus estudios en la Universidad Técnica (dentro del instituto pedagógico técnico o de la escuela de ingenieros industriales). La Escuela de Artes y Oficios, expone el documental, resulta fundamental para entender las transformaciones económicas su país al surgir con un objetivo claro y una tarea concreta: ser uno de los pilares esenciales para el desarrollo y la modernización de la economía, para la inserción de la economía chilena dentro del mercado internacional, posicionándose como una institución a la vanguardia en contacto directo con las necesidades del país. Este documental considero constituye un caso muy interesante de como las ideas de progreso nacidas en la ilustración se proyectaron luego en los países latinoamericanos. Este tipo de instituciones, características de ese período económico y social, fueron funcionales y creadas en pos del progreso económico, pero también para el cultivo de las artes mecánicas y, fundamentalmente, para la “educación del pueblo” en países donde la población era mayoritariamente rural.