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DERECHO DEL TRABAJO

FORMULACIÓN DE PREGUNTAS CLAVES DE INVESTIGACIÓN

LECCIÓN XV

DE LA AUTORIDAD ADMINISTRATIVA DEL TRABAJO


1- Enumeración de los organismos, atribuciones y funciones.

Ministerio del Empleo, Trabajo y Seguridad Social

Artículo 3°.- OBJETIVOS

Son objetivos principales del Ministerio, en el ámbito de su competencia entre otros, los
siguientes:

1. Velar por la protección de los trabajadores y las trabajadoras en sus distintas


dimensiones, garantizando el respeto de sus derechos, especialmente de quienes se
encuentren en condiciones de vulnerabilidad.

2. Cumplir y hacer cumplir la legislación nacional, los contratos colectivos, los tratados,
convenios y acuerdos internacionales aprobados y ratificados por nuestro país en materia de
trabajo, empleo y seguridad social y vigilar su aplicación y cumplimiento.

3. Fomentar relaciones laborales basadas en el diálogo y la cooperación entre los actores y


en sus distintos niveles.

4. Formular, planear, dirigir, coordinar, ejecutar, supervisar y evaluar las políticas


nacionales y sectoriales en las materias socio-laborales, derechos fundamentales en el
ámbito laboral incorporando la perspectiva de género, seguridad y salud en el trabajo,
difusión de la normativa, información laboral y del mercado de trabajo, diálogo social, en
los conflictos y relaciones de trabajo, seguridad social, inspección del trabajo, promoción
del empleo, intermediación laboral, formación profesional y capacitación para el trabajo,
normalización y certificación de competencias laborales, autoempleo, reconversión laboral
y migración laboral.

Artículo 4°.- COMPETENCIA

1. Ejercer la regulación administrativa y de contralor de lo relacionado con el trabajo, el


empleo y la seguridad social.

2. Determinar los objetivos y las políticas del área de su competencia y ejecutar los planes,
programas y proyectos respectivos.

3. Promover reformas de la legislación y elaborar proyectos, leyes y decretos.

4. Elaborar, ejecutar y fiscalizar las normas generales y particulares referidas a higiene,


salud, seguridad y medicina del trabajo en los lugares o ambientes donde se desarrollan las
tareas, en las empresas ubicadas en el territorio nacional, organismos y empresas del Estado
y en las empresas binacionales.

5. Brindar asesoramiento técnico a los empleadores y trabajadores y a sus respectivas


asociaciones que lo soliciten.

6. Estudiar y examinar periódicamente la situación de las personas empleadas,


desempleadas o subempleadas a la luz de la legislación y la práctica relativa a las
condiciones de trabajo, de empleo y de vida profesional, señalar los defectos y abusos en
tales condiciones y presentar propuestas sobre los métodos para remediarlos.

7. Educar a la población en materia de derechos, deberes y obligaciones laborales, a fin de


prevenir conflictos individuales y colectivos del trabajo.

8. Entender en todo lo relativo al régimen del contrato de trabajo y de la relación de trabajo.


9. Entender en lo relativo al derecho de sindicalización; y en las negociaciones y
convenciones colectivas de trabajo sectorial e integral.

10. Intervenir en el tratamiento de los conflictos individuales y colectivos extrajudiciales de


trabajo, ejerciendo facultades de mediación y conciliación con arreglo a las disposiciones
previstas en esta ley.

11. Ejercer el poder de policía en el orden laboral y de seguridad social y coordinar las
políticas y los planes de fiscalización, en especial lo relativo al control de empleos no
registrados.

12. Elaborar, aplicar y fiscalizar el régimen de trabajo de mujeres, menores de edad,


personas con discapacidad y otros grupos en condiciones de vulnerabilidad.

13. Generar políticas y programas de prevención y combate al trabajo forzoso o


servidumbre por deuda, así como de la explotación infantil en el ámbito laboral.

14. Promover la igualdad de oportunidades y de trato entre varones y mujeres en el acceso


al empleo y en el trabajo, así como la protección de la maternidad.

15. Intervenir en la elaboración y ejecución de las normas que orientan la política salarial
del sector privado.

16. Intervenir en la coordinación y armonización de los planes de empleo con los planes
económicos y sociales.

17. Participar en la preparación, administración, coordinación, control y revisión de la


política nacional de empleo.

18. Intervenir en la vinculación entre el empleo, la formación y capacitación laboral, la


producción y la tecnología.

19. Intervenir en la elaboración de las políticas de migraciones laborales internas y externas.

20. Entender en la elaboración de estadísticas, estudios y encuestas que proporcionen un


mejor conocimiento de la problemática del trabajo, el empleo y el desempleo, la formación
y capacitación laboral, la prevención de riesgos laborales, los ingresos y la seguridad social.

21. Participar en los asuntos referidos a la actividad de los organismos internacionales en


las materias que corresponden a las áreas de su competencia.

22. Propiciar la elaboración, de programas y regímenes integrados de seguridad social del


sector público y del sector privado.

23. Intervenir en la supervisión de los organismos y entidades correspondientes, en


coordinación con los otros Ministerios del Poder Ejecutivo.

24. Profesionalizar la carrera del fiscalizador mediante su capacitación continua en la


materia

Funciones

Su función es proponer, diseñar, elaborar, administrar y fiscalizar las políticas para todas las
áreas del trabajo, el empleo y las relaciones laborales, la capacitación laboral y la Seguridad
Social. El organismo está a cargo de un ministro, designado y removido discrecionalmente
por el presidente de la Nación

2- Dirección General de Trabajo.

La Dirección General de Empleo es una dependencia del Ministerio de Trabajo, Empleo y


Seguridad Social de la República del Paraguay al servicio de la ciudadanía; se trata de un
espacio destinado a realizar tareas dirigidas al fomento del empleo y la inserción laboral de
ciudadanos/as, brindar servicios para buscadores de empleo, formación y capacitación
laboral y gestión de perfiles laborales para empresas que buscan personal.
3- Dirección General de Seguridad e Higiene Industrial: organización.

En Paraguay, la protección de la seguridad y salud en el trabajo es una materia comprendida


ya en la Constitución Política de Paraguay de 1992, cuyo artículo 90 establece que el
cumplimiento de las normas laborales y de las de seguridad e higiene en el trabajo quedarán
sujetas a la fiscalización de las autoridades creadas por Ley, que establecerán las sanciones
en caso de incumplimiento.

Más allá del contenido de la Carta Magna, encontramos en la legislación de Paraguay


relativa a la seguridad y salud en el trabajo dos normas principales por las cuales se regula
la protección de los trabajadores en el entorno de trabajo.

En primer lugar, el Código de Trabajo de Paraguay (Ley nº 213, del 28 de julio de 1992)
incorpora en su Título V una serie de derechos y obligaciones aplicables a empresarios y
trabajadores. A lo largo de sus disposiciones se regula que la política de prevención de
riesgos laborales se deberá desarrollar a través de la seguridad, higiene y medicina del
trabajo, entendida como conjunto de técnicas, estudios y acciones encaminadas al
perfeccionamiento de las condiciones ambientales, materiales, organizativas y personales
destinadas a evitar daños o alteración de la integridad física, funcional o psicológica de los
trabajadores. El empresario deberá garantizar la higiene seguridad y salud de los
trabajadores en la ejecución de su actividad laboral. A tales efectos, adoptará cuantas
medidas sean necesarias, incluidas las actividades de información, formación prevención de
riesgos y la constitución de la organización o medios que sean precisos. Las medidas de
seguridad e higiene del trabajo no implicarán ninguna carga económica para los
trabajadores.

En segundo lugar, encontramos el Decreto nº 14390, del 28 de julio de 1992, por el cual se
aprueba el Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina del Trabajo.
Esta Reglamento constituye la norma más importante de Paraguay en materia de seguridad
y salud en el trabajo. Este Reglamento General se confeccionó para dotar al país de una
reglamentación adecuada en materia de seguridad, higiene y medicina del trabajo, además
de reducir la siniestralidad laboral en el país. Regula de forma amplia aspectos relativos a
las condiciones y requisitos técnicos mínimos obligatorios que, en materia de prevención de
riesgos profesionales y de mejora del medio ambiente de trabajo, se requiere cumplir en
todo establecimiento o centro de trabajo del país.

En acción a estas normas, encontramos otras fuentes jurídicas complementarias que


contribuyen a configurar al marco normativo de la prevención de riesgos laborales en
Paraguay, siendo éstas:

• Ley nº 836, del 24 de diciembre de 1974, por la que se aprueba el Código Sanitario.

• Decreto nº 5649, del 16 de diciembre de 2010, por el cual se adopta la lista de


enfermedades profesionales.

• Resolución nº 472/2012, del 15 de mayo de 2012, “Reglamentación del procedimiento de


inspección de seguridad y salud en el trabajo y sanción a la violencia laboral, el mobbing o
acoso laboral y el acoso sexual en los lugares de trabajo en empresas y dependencias del
Estado.

• Ley nº 4014, del 17 de junio de 2010, de prevención y control de incendios

• Ley nº 3940, derechos, obligaciones y medidas preventivas con relación a los efectos
producidos por el virus de la inmunodeficiencia adquirida (VIH) y el Síndrome de
Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA).

• Decreto nº 4954, del 22 de marzo de 2005, por el cual se reglamenta la Ley 1657/2001 y
se aprueba el listado de trabajo infantil peligroso.

Estadísticas de siniestralidad laboral


Los accidentes de trabajo que se registran en Paraguay en su mayoría son en el ámbito de la
construcción, pero no existen registros oficiales debido a la falta de notificación de las
empresas que contratan.

Solo el 15% de los trabajadores que poseen algún tipo de trabajo peligroso se encuentra
registrado en el Instituto de Previsión Social.

En cuanto a estadísticas de accidentes de trabajo no fatales en 2010, se reportaron 1.074


casos, en los que las extremidades superiores e inferiores –brazos y piernas,
respectivamente- son las más afectadas, ya sea por quemaduras o fractura y deben ser
amputadas.

Ámbito aplicación

En Paraguay, las dos principales normas jurídicas por las que se rgen los derechos y
obligaciones en materia de seguridad y salud en el trabajo son, por un lado, la Ley nº 213,
Código de Trabajo, del 29 de octubre de 1993; y el Decreto nº 14390/1992, del 28 de julio
de 1992, por el cual se aprueba el Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y
Medicina del Trabajo.

En cuanto al Código de Trabajo de 1993, esta norma tiene por objeto establecer normas
para regular las relaciones de trabajo entre los trabajadores y empresarios, concernientes a
la prestación subordinada y retribuida de la actividad laboral. Su ámbito de aplicación viene
dispuesto en el artículo 2 de la norma, en el que se establece que la Ley aplica a los
siguientes colectivos:

• Los trabajadores intelectuales, manuales o técnicos en relación de dependencia y sus


empresarios. Los profesores de institutos de enseñanza privada y quienes ejerzan la práctica
deportiva profesional.

• Los sindicatos de trabajadores y empresarios del sector privado.

• Los trabajadores de las empresas del Estado y de las empresas municipales.

• Los demás trabajadores del Estado, sean de la administración central o de entes


descentralizados, los de las municipalidades y departamentos, serán regidos por Ley
especial.

• Están excluidos los miembros de las fuerzas armadas y de la policía.

Por otra parte, el Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina del
Trabajo de 1992 dispone en sus artículos 2 y 3 su ámbito de aplicación territorial y
funcional, respectivamente. En cuanto al ámbito territorial, se establece que el Reglamento
es de aplicación en todo el territorio de la República de Paraguay. En cuanto al ámbito
funcional, se dispone lo siguiente:

• Las normas y medidas de prevención de riesgos profesionales y mejoras del medio


ambiente de trabajo son de aplicación a toda actividad productiva desarrollada en el
territorio nacional.

• Las normas y medidas mínimas son de general aplicación en el ámbito personal, sin
perjuicio de la adopción de normas específicas para colectivos singulares de trabajadores
tales como menores, mujeres gestantes o lactantes, disminuidos físicos o psíquicos, trabajo
en familia, etc.

Administraciones Públicas competentes

La República de Paraguay cuenta con una serie de organismos públicos cuyas funciones y
competencias guardan relación con la seguridad y salud en el trabajo, de los cuales cabe
destacar los siguientes:
• Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social: Órgano del poder ejecutivo, de orden
público, al que corresponde la tutela de los derechos de los trabajadores y las trabajadoras
en materia de trabajo, empleo y seguridad social. Entre las funciones del Ministerio de
Trabajo, Empleo y seguridad Social están las de elaborar, ejecutar y fiscalizar las normas
generales y particulares referidas a higiene, salud, seguridad y medicina del trabajo en los
lugares o ambientes donde se desarrollan las tareas, en las empresas ubicadas en el territorio
nacional, organismos y empresas del Estado y en las empresas binacionales.

• Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social: Órgano del poder ejecutivo de Paraguay y
que representan la máxima autoridad del país en materia de salud pública. Tiene por misión
regir, conducir y garantizar el buen funcionamiento del sistema de previsión de salud,
orientado éste a la consecución de la cobertura universal.

• Dirección General de Inspección y Fiscalización del Trabajo: A este órgano dependiente


del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social le compete la inspección, vigilancia y
fiscalización de los establecimientos industriales, comerciales, mineros, agrícolas,
ganaderos, a las oficinas prestadoras de servicios, con el fin de dar cumplimiento a la
legislación laboral y de seguridad social, relativas a las condiciones de trabajo , de salud y
seguridad ocupacional, a la prevención de accidentes de trabajo y enfermedades
profesionales, incluidas las normas laborales que protegen especialmente a mujeres,
menores y adolescentes.

• Instituto de Previsión Social: Organismo gubernamental que recoge entre sus funciones la
cobertura correspondiente al seguro de accidentes y enfermedades profesionales.

Derechos y deberes del empresario

En Paraguay, las obligaciones generales en materia de seguridad y salud en el trabajo


atribuidas a la figura del empresario las encontramos en el artículo 275 del Código de
Trabajo y son las siguientes:

• Disponer los exámenes médicos, tanto los de admisión como periódicos, de cada
trabajador a su cargo y asumiendo su coste.

• Evaluar, evitar y combatir los riesgos en su propio origen.

• Establecer las condiciones y métodos de trabajos y de producción que menor incidencia


negativa produzcan sobre la higiene, seguridad y salud de los trabajadores.

• Planificar la prevención y determinar las medidas que deberán utilizarse, tanto colectivas
como individuales, así como el material de protección que debe utilizarse contra los riesgos
inherentes a la actividad desarrollada; y que garanticen que los lugares de trabajo, la
maquinaria, el equipo, las operaciones y procesos, los agentes y sustancias agresivas
presentes en el lugar de trabajo no entrañan riesgos para la salud y seguridad para los
trabajadores.

• Velar por el cumplimiento de las disposiciones sobre prevención y protección en el trabajo


impartiendo órdenes claras y precisas a tales efectos.

• Informar a las autoridades competentes sobre los accidentes laborales y enfermedades


profesionales de que sean víctimas los trabajadores, que causen más de tres días de
incapacidad para las tareas dentro de los ocho días siguientes a la declaración de la
enfermedad y de acuerdo al procedimiento establecido en la reglamentación pertinente.

• Cumplir las normas legales o convencionales, así como las medidas de aplicación
inmediata ordenadas por la Autoridad Administrativa del Trabajo, como consecuencia de
una intervención o fiscalización.

Además de estas obligaciones de carácter general, existen otras contenidas en el


Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina del Trabajo de 1992, como
el deber de informar y formar a los trabajadores en prevención de riesgos laborales, facilitar
la participación y consulta, disponer los medios adecuados y suficientes en materia de
emergencias, puesta a disposición de los equipos de protección individual y un largo
etcétera.

Estos requisitos han sido incorporados en cada uno de los apartados específicos contenidos
en esta guía.

Derechos y deberes de los trabajadores

En cuanto a la figura del trabajador, la referencia de las principales obligaciones a él


atribuidas en materia de seguridad y salud en el trabajo vienen establecidas en el artículo
278 del Código de Trabajo (Ley nº 213, del 29 de octubre de 1993).

En este sentido, el empleado está obligado a observar en su trabajo las medidas legales y
reglamentarias en cuanto a la higiene, seguridad y medicina laboral, y más concretamente,
las siguientes:

• Utilizar correctamente la maquinaria, herramientas y equipos productivos.

• Hacer un correcto uso y mantenimiento de la ropa y equipos de protección individual


puestos a su disposición por parte del empresario.

• Evitar el manejo o desactivación de los dispositivos de seguridad de la maquinaria,


herramientas y equipos productivos.

• Colaborar con el empresario en la mejora continua de las condiciones de seguridad,


higiene y salud en el trabajo.

• Advertir al empresario o a sus representantes, así como a los mandos con funciones
específicas en materia de seguridad y salud, sobre cualquier situación que detecte y que
entrañe un peligro grave, así como de todo defecto observado en los sistemas de protección.

Además de estas obligaciones, el artículo 272 del mismo código de Trabajo, reconoce el
derecho irrenunciable de los trabajadores a la protección e su seguridad y salud durante el
desempeño de sus servicios profesionales.

Evaluación de riesgos

En Paraguay, una de las principales obligaciones atribuidas a la figura del empresario en


materia de seguridad y salud en el trabajo consiste en evaluar los riesgos a los que están
expuestos sus trabajadores durante el desarrollo de su actividad. Este deber encuentra su
fundamento jurídico en el artículo 275 del Código de Trabajo de Paraguay (Ley nº 213, del
29 de octubre de 1993), por el cual se establece como una de las responsabilidades
atribuidas al empresario “evaluar, evitar y combatir los riesgos en su propio origen”.

Además de este deber general, existen otras referencias legales en relación a la evaluación
de riesgos y contenidas en el Decreto nº 14390, del 28 de julio de 1992, Reglamento
General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina del Trabajo, concretamente en su
Capítulo XIII. Dentro de las competencias de los servicios de prevención de la empresa,
están la de evaluar los riesgos en las áreas específicas.

Tal y como dispone el artículo 282 del Reglamento, entre las competencias asignadas a los
Servicios de Higiene en el Trabajo consta la función de evaluar y corregir todo medio
ambiente en donde se desarrollan labores. De forma más específica, el artículo 283 del
Código de Trabajo establece las funciones concretas que deberán llevar a cabo estos
servicios, entre las que se encuentran:

• Solicitar la toma de muestras anteriores del medio ambiente de trabajo en el que el


trabajador desempeña su actividad laboral.

• Realizar seguimiento del análisis de muestras de agentes químicos y/o biológicos.


• Realizar mediciones de agentes físicos presentes en los puestos presentes en los puestos
laborales.

• Evaluar las condiciones de trabajo e informar a la autoridad competente y a su superior


inmediato.

• Sugerir medidas correctoras a tomar para el mejoramiento de las condiciones y del medio
ambiente de trabajo.

Planificación de la actividad preventiva

Además del deber de identificar y evaluar los riesgos laborales en los lugares y puestos de
trabajo, una de las obligaciones atribuidas al empresario en el artículo 275 del Código de
Trabajo (Ley nº 213, del 29 de octubre de 1993) consiste en planificar la prevención y
determinar las medidas que deberán utilizarse, tanto colectivas como individuales, así como
el material de protección que debe emplearse contra los riesgos inherentes a la actividad
desarrollada.

Este conjunto de medidas y acciones tendrá como fin garantizar que los lugares de trabajo,
la maquinaria, el equipo, las operaciones y procesos, los agentes y sustancias agresivas…
que estén bajo su control, no entrañen riesgos para la salud y seguridad de los trabajadores.

Por otra parte, el artículo 271 del Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y
Medicina del Trabajo (Decreto nº 14390, del 28 de julio de 1992) dispone que en todo lugar
de trabajo se establecerá un programa de Salud Ocupacional, dentro del cual se efectuarán
actividades destinadas a prevenir los accidentes y las enfermedades relacionadas con el
trabajo.

Estos programas de Salud Ocupacional son desarrollados por los Servicios de Seguridad,
Higiene y Medicina de Trabajo. Los artículos posteriores de la norma especifican las
funciones atribuidas a cada uno de estos tres servicios, dentro de los cuales se encuentra la
necesidad de establecer programas de acción, aplicados a cada una de estas tres
especialidades respectivamente. Auditorías

No se han identificado a lo largo del contenido de la normativa de Paraguay en materia de


seguridad y salud en el trabajo disposiciones relativas al deber del empresario de realizar
auditorías.

Formación

El empresario establecido en Paraguay tiene la obligación de informar y formar a los


trabajadores a su cargo en materia de prevención de riesgos laborales, quedando totalmente
prohibido el empleo de trabajadores en un puesto de trabajo sin que hayan sido previamente
informados y formados en materia de seguridad y salud ocupacional.

Tal y como dispone el artículo 276 de la Ley nº 213, Código de Trabajo, del 29 de octubre
de 1993, el empresario facilitará formación e información práctica y adecuada en materia de
salud, seguridad e higiene a los trabajadores que contrate, cuando cambien de puesto de
trabajo o bien cuando tengan que aplicar una nueva técnica que pueda generar nuevos
riesgos.

Por su parte, el trabajador está obligado a seguir las instrucciones y enseñanzas


proporcionadas por su empresario y poner en práctica las medidas y acciones destinadas a
proteger su seguridad y salud durante la ejecución de los trabajos.
Este deber general de formar e informar a los trabajadores en materia de seguridad y salud
viene desarrollado en el artículo 15 del Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene
y Medicina del Trabajo.

El cuanto al deber de información, se concreta en transmitir a los empleados la existencia de


los riesgos profesionales a los que están expuestos y las medidas preventivas y correctoras
destinadas a su eliminación y control.

En cuanto al deber de formar, se resume en la instrucción teórico-práctica sobre los medios


disponibles para prevenir y controlar tales riesgos y garantizar así la protección de su
seguridad y salud frente a los mismos. En este sentido, los trabajadores deberán recibir
formación sobre las disposiciones legales en materia de seguridad e higiene ocupacional y
más concretamente sobre:

• Los derechos y deberes generales de los trabajadores en los lugares de trabajo.

• Los medios de acceso y salida en caso de emergencia.

• Las medidas para mantener el orden y limpieza.

• La localización y utilización adecuada de los servicios de bienestar y de las instalaciones


de primeros auxilios proporcionados de conformidad con las disposiciones legales
pertinentes.

• El correcto uso y mantenimiento de la ropa de trabajo y equipos de protección individual a


él proporcionados.

• Las medidas generales para la higiene personal y la protección de la salud.

• Las precauciones y disposiciones establecidas en materia de lucha contra incendios.

• Los protocolos diseñados a tener en cuenta en caso de urgencia.

Los requisitos establecidos en las normas y reglamentos pertinentes sobre seguridad y


salud.

Estos requisitos generales en cuanto a la formación en prevención de riesgos laborales


deberán ser desarrollados en función de la actividad a desarrollar por el empleado y de las
exigencias del puesto que se pretende. En concreto, deberán ser objeto de una formación
preventiva específica los siguientes colectivos de trabajadores:

• Los conductores y operadores de aparatos elevadores, vehículos de transportes de


maquinaria y equipos de trabajo peligrosos.

• Operarios encargados del montaje o construcción de andamiajes.

• Operarios en excavaciones, pozos, terraplenes, obras subterráneas o túneles.

• Trabajadores que manipulan explosivos o dedicados a actividades de voladura.

• Trabajadores dedicados al montaje de elementos prefabricados o armazones metálicos y


de chimeneas de gran altura, así como construcciones de hormigón, encofrados y a otras
actividades de este tipo.
• Trabajadores que manipulan sustancias peligrosas.

• Personas encargadas de la transmisión de señales.

• Otras categorías especializadas de trabajadores.

No se permitirá a ninguna persona realizar una actividad laboral a menos que haya recibido
la información, instrucción y formación necesarias para llevar a cabo el trabajo de forma
eficiente y en condiciones de seguridad. La información, instrucción y formación deberá
facilitarse en el idioma que comprenda el trabajador y, para que el trabajador las asimile,
deberán aplicarse métodos escritos, orales, visuales e interactivos.

En todo caso, las sesiones formativas irán a cargo del empresario.

Información

La normativa de Paraguay en materia de seguridad y salud laboral regula de forma conjunta


las obligaciones del empresario de formar e informar a sus trabajadores en materia de
seguridad y salud en el trabajo.

Dichos requisitos atribuidos a la figura del empresario vienen definidos en el artículo 276
de la Ley nº 213, Código de Trabajo, del 29 de octubre de 1993, en el que se establece
como obligación del empresario facilitar la formación e información práctica y adecuada en
materia de salud, seguridad e higiene a los trabajadores que contrate, cuando cambien de
puesto de trabajo o bien cuando tengan que aplicar una nueva técnica que pueda generar
nuevos riesgos.

Estas obligaciones son desarrolladas en el artículo 15 del Reglamento General Técnico de


Seguridad, Higiene y Medicina del Trabajo (Decreto nº 14390 /1992). Además de los
requisitos concernientes a la formación (ver apartado 12, Formación), el punto 6 del artículo
15 de la norma dispone que el empresario deberá facilitar a cada trabajador, al comenzar un
nuevo empleo y al cambiar de ocupación, un ejemplar de las normas y reglamentos de
Seguridad e Higiene Ocupacional en vigencia.

El resto de disposiciones hacen referencia a la formación en materia de seguridad y salud en


el trabajo. Consulta y participación

En Paraguay, el derecho de los trabajadores de ser consultados y participar en las decisiones


relativas a su seguridad y salud en el trabajo, y en especial en cuanto a la evaluación de
riesgos y la planificación de acciones preventivas, se articula a través de las denominadas
Comisiones Internas de Prevención de Accidentes (CIPA). Su regulación viene definida en
el Capítulo XIV del Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina del
Trabajo (Decreto nº 14390 /1992).

Las Comisiones Internas de Prevención de Accidentes (CIPA) deberán ser obligatoriamente


constituidas en aquellas empresas que cuenten con 100 o más trabajadores. Estos entes internos
deberán ser constituidos de forma paritaria, en número igual de representantes de empresarios y
trabajadores.

Los representantes de los empresarios serán designados por la Dirección o Administración


de la Empresa en un número no inferior a 4, incluyéndose en ese número un representante
de la Dirección y, si los hubiera, un Médico del Trabajo, un Ingeniero de Seguridad o
Técnico en Seguridad (si no hubiere en la Empresa, puede ser reemplazado por un Asistente
Social, para ejercer actividades de Auxiliar de Enfermería). En caso de no haber Médico,
Ingeniero, Técnico ni Asistente Social, se designarán otros representantes que posean
calificación e interés en las materias dentro del ámbito de actuación de las Comisión Interna
de Prevención de Accidentes.

Los representantes de los trabajadores serán electos por los mismos, en un número no
inferior a 4, dando preferencia a los representantes de los lugares de trabajo que ofrezcan
mayores riesgos de accidentes, considerando también sus condiciones de liderazgo, su
asistencia regular al trabajo, su disciplina, espíritu de observación y noción clara de la
actividad pertinente de la Comisión.

La empresa designará 2 representantes, uno como presidente y otro como secretario de la


Comisión, que no pertenezcan al grupo asignado como sus representantes dentro de la
Comisión. Tanto para los empresarios como para los trabajadores se designará un suplente,
para casos necesarios.

El mandato de los miembros de la Comisión será de un 1 año, excepto los responsables de


los servicios de Seguridad e Higiene y Medicina del Trabajo, que serán miembros
permanentes.

Competencia de los órganos de consulta y participación:

• Investigar el origen y las causas de los accidentes.

• Proponer y recomendar al empresario medidas de prevención de accidentes, de seguridad


e higiene del trabajo que considere necesarias.

• Colaborar estrechamente, si los hubiere, con los Servicios de Seguridad, Medicina e


Higiene del Trabajo de la Empresa.

• Inspeccionar periódicamente las instalaciones de la empresa, verificando el cumplimiento


de las reglamentaciones legales y el estado de conservación de los equipos de protección y
dispositivos de seguridad.

• Organizar e instruir equipos encargados del servicio de prevención de accidentes, combate


al fuego y primeros auxilios.

• Proponer medidas de acción disciplinaria para los que infringieren normas y reglamentos
de seguridad.

• Cooperar para el cumplimiento de las reglamentaciones e instrucciones de carácter oficial


o internas, relativas a la prevención de accidentes, seguridad e higiene del trabajo.

• Realizar reuniones, charlas, proyecciones de películas sobre prevención de accidentes,


seguridad e higiene en el trabajo.

• Analizar los accidentes ocurridos y las estadísticas que deben figurar en las actas de
reunión. Remitir mensualmente al Servicio de Seguridad, Servicio de Higiene y Medicina
del Trabajo, para la elaboración de resúmenes, la documentación referente a sus
actividades, con copia a la Dirección de Higiene y Seguridad Ocupacional, dependiente del
Ministerio de Justicia y Trabajo.

Obligaciones del empresario en relación a la CIPA:

• Dar apoyo integral a la Comisión, concediendo a su representante todo lo necesario para el


desempeño de sus respectivas atribuciones.

• Dar inmediato cumplimiento a las recomendaciones sugeridas y aprobadas por la


Comisión.

Obligaciones de los trabajadores en relación a la CIPA:

• Cumplir y hacer cumplir las normas, reglamentaciones, órdenes que se les dieren en
materia de prevención de accidentes, seguridad, e higiene del trabajo.

• Usar obligatoriamente el equipo de protección individual que su actividad requiera.


• Presentar sugerencias para mejorar las condiciones de seguridad e higiene en los lugares
de trabajo, buscando la prevención de accidentes de trabajo y de enfermedades
profesionales.

Vigilancia de la salud

Tal y como figura en el artículo 275 de la Ley nº 213, Código de Trabajo, del 29 de octubre
de 1993, una de las obligaciones generales del empresario en materia de seguridad y salud
en el trabajo consiste en organizar los reconocimientos médicos de admisión y periódicos al
conjunto de su plantilla.

Este deber es desarrollado en el Título I, Capítulo XII, Sección IV del Decreto nº


14390/1992, del 28 de julio de 1992, por el cual se aprueba el Reglamento General Técnico
de Seguridad, Higiene y Medicina del Trabajo.

Tal y como dispone el artículo 260 de la norma, todos los trabajadores deben someterse a
exámenes médicos:

• Antes de su ingreso a una empresa, por primera vez.

• A intervalos periódicos, dada su periodicidad, cada doce (12) meses en los casos de
actividades y operaciones no peligrosas o en ambientes no insalubres, y cada seis meses (6)
en los casos de actividades y operaciones peligrosas o ambientes insalubres.

Además de estos tipos de reconocimiento, la Autoridad Laboral está capacitada para


ordenar la realización de otros exámenes médicos además de los anteriormente
mencionados.

Tal como viene reseñado en el artículo 266, el resultado de los exámenes médicos de las
diversas índoles se debe inscribir en registros apropiados, los que deben conservarse para
fines de referencia.

Los trabajadores menores de 18 años deben ser objeto de vigilancia médica especial, con
exámenes periódicos a intervalos convenientes y manteniendo siempre el secreto
profesional, pudiendo exhibir los registros solo a las autoridades competentes.

En ningún caso, el empresario podrá ordenar a un trabajador la realización de una tarea o


trabajo cuando el certificado médico del trabajador establezca que el trabajador no cuenta
con la aptitud física necesaria para el desempeño del trabajo en cuestión. En este sentido, el
empresario deberá hacerlo posible para readaptar el puesto de trabajo o bien reubicar al
empleado en un puesto de trabajo acorde a su condición física o mental.

Los trabajadores que hayan sufrido un accidente con lesión grave o una enfermedad
prolongada, no podrán reanudar sus tareas sin una autorización médica correspondiente.

Pruebas médicas obligatorias

Examen médico de admisión:

• Examen clínico (vista, oído, piel, extremidades etc.).

• Radiografía de tórax.

• Hemograma completo.

• Investigación de (VDEL- Sífilis).

• Colesterol.

• Glicemia.

• Inmunofluorescencia (Mal de Chagas).

• Tipificación sanguínea (Grupo sanguíneo y factor RH). Examen de rutina (orina).


• Examen parasicológico de heces.

• Test psicológico elemental y de coordinación muscular.

• Investigación V.I.H. (SIDA).

Exámenes médicos periódicos:

• Examen clínico.

• Radiografía de tórax.

• Hemograma completo.

• Examen de rutina, orina.

• Electroencefalograma.

• Test psicológico.

• Examen ginecológico PAP.

Medidas de emergencia (primeros auxilios, lucha contra incendios, evacuación, riesgo


grave o inminente)

Dentro del ordenamiento jurídico de Paraguay en materia de seguridad y salud en el trabajo, las
obligaciones concernientes a la gestión de los primeros auxilios en la empresa vienen
establecidas en el Título I, Capítulo I, Sección IV del Decreto nº 14390/1992, del 28 de julio de
1992, por el cual se aprueba el Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina
del Trabajo.

Tal y como dispone el artículo 39 de la norma, en todos los establecimientos y centros de


trabajo deberá existir un servicio de primeros auxilios, con medios suficientes para atender a los
trabajadores. El personal médico sanitario, las instalaciones y dotaciones de estos servicios
deberán ir en proporción al número de trabajadores existentes en la empresa, ubicación dela
empresa y características del centro de trabajo y riesgos derivados de la actividad de la empresas
y de los puestos de trabajo.

Todos los centros de trabajo dispondrán de un botiquín de emergencia para la prestación de los
primeros auxilios, bien señalizado y convenientemente situado, que estará a cargo del personal
médico, si lo hubiera, de un socorrista diplomado o, en su defecto, de la persona más capacitada
designada por el empresario.

Por otra parte, aquellos centros de trabajo que cuenten con un volumen de trabajadores mayor a
25 trabajadores deberán disponer de un local destinado a enfermería con elementos y medios
suficientes para prestar estos servicios.
Dentro de estos medios, figura el botiquín de rimeros auxilios, le cual deberá disponer del
siguiente material: agua oxigenada, alcohol de 96º, tintura de iodo, termómetro y estetoscopio,
mercurio cromo, amoniaco, gasa estéril, algodón hidrófilo, vendas, esparadrapo,
antiespasmódicos, analgésicos y tónicos cardiacos de urgencias, torniquete, bolsas de goma para
agua o hielo, guantes esterilizados, jeringas desechables, agujas para inyectables y termómetro
clónico. El material de los botiquines deberá ser revisado mensualmente y deberá reponerse el
material ya utilizado.

Establecimientos con Servicios Médico

En aquellos centros de trabajo que dispongan de un Servicio de Medicina del Trabajo, serán
éstos los encargados de proporcionar a los trabajadores los primeros auxilios en casos de
accidente o enfermedad.

Dichos Servicios dispondrán del personal auxiliar médico necesario y medios imprescindibles
para desarrollar eficazmente las funciones que se le atribuye.

Traslado de accidentados y enfermos

Además de administrar y proporcionar los primeros auxilios, el empresario es también


responsable de trasladar a aquellos trabajadores que hayan sido víctimas de un accidente de
trabajo o bien hayan sufrido una enfermedad profesional a un centro asistencial médico o a una
clínica del Instituto de Previsión Social (IPS) de Paraguay.

En las oficinas o en los locales destinados a los servicios de primeros auxilios se colocarán, en
lugares visibles, una relación detallada de las direcciones y teléfonos de las unidades de
urgencia a los que puedan ser trasladados los accidentados o enfermos.

Establecimientos con riesgo grave de incendio

Tal y como establece el artículo 68 del Reglamento, en los establecimientos y centros de trabajo
con riesgo grave de incendio, se instruirá y entrenará especialmente al personal integrado en el
equipo o brigada contra incendios sobre el manejo y conservación de las instalaciones y medios
de extinción, señales de alarma, evacuación de los trabajadores y socorro inmediato de los
accidentados.

El personal de los equipos contra incendios dispondrá de cascos, trajes aislantes, botas y guantes
y cinturones de seguridad; asimismo dispondrá, si fuera necesario evitar específicas
intoxicaciones o sofocación, de máscaras y equipos de respiración automática.

El material asignado a los equipos de extinción de incendios: escala, cubiertas de lona o tejidos
ignífugos, hachas, picos, palas, etc., no podrá ser usado para otros fines y su emplazamiento será
conocido por las personas que deben emplearlo. El empresario o su representante designarán al
Jefe de Equipo o Brigada contra incendios, que cumplirá estrictamente las instrucciones técnicas
en prevención de los riesgos laborales, si los hubiere, o a la persona de mayor competencia
técnica del establecimiento en estas materias.

Por último, para comprobar el buen funcionamiento de los sistemas de prevención y el


entrenamiento de los equipos contra incendios, y para que los trabajadores, en general, conozcan
y participen en aquellos, se efectuarán periódicamente simulacros de incendios por orden o bajo
la dirección del Jefe de Equipo o Brigada contra incendios, que solo advertirá de los mismos a
las personas que deban ser informadas para evitar daños o riesgos innecesarios.

Coordinación de actividades empresariales

La normativa de Paraguay en materia de seguridad y salud en el trabajo no recoge disposiciones


normativas en referencia al deber de los empresarios que concurran en un mismo centro de
trabajo de coordinarse entre sí a efectos de garantizar la protección efectiva de la seguridad y
salud de sus trabajadores.

Infracciones y sanciones

En Paraguay, las dos normas principales por las cuales se regula la seguridad y salud en el
trabajo son el Código de Trabajo (Ley nº 213 del 29 de octubre de 1993) y el Reglamento
General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina del Trabajo (Decreto nº 14390, del 28 de
julio de 1992). Sin embrago, es el Código de Trabajo (artículo 374 y siguientes) la norma
jurídica que establece la cuantía de las sanciones atribuidas al incumplimiento de las
obligaciones contenidas en ambas normas.

Tal y como dispone el artículo 374 del Código, el incumplimiento de cada obligación legal del
empresario con la administración del trabajo (entre ellas las obligaciones en materia de
seguridad y salud) será sancionada con una multa equivalente de entre 10 a 30 jornales
mínimos. En caso de que el empresario reincida en uno de sus incumplimientos, la cuantía de
las sanciones será duplicada.

A su vez, el Código de trabajo de Paraguay establece algunas sanciones atribuidas a infracciones


concretas, entre las que destacan las siguientes:

• Los incumplimientos derivados de la instalación, equipamiento y dirección del establecimiento


en cuanto a la prevención de los riesgos derivados del uso de máquinas, instrumentos,
herramientas y materiales de trabajo, así como la ausencia de medidas de prevención adecuadas,
conllevarán una sanción económica de 20 a 30 salarios diarios mínimos por cada infracción, sin
perjuicio de la obligación de cumplir las normas legales de higiene, seguridad, comodidad y
medicina del trabajo. En caso de reincidencia se duplicará la multa.

• Los empresarios que infrinjan los descansos legales de maternidad o nieguen permisos para la
lactancia, afrontarán una multa de 50 salarios diarios mínimos, que se duplicará en caso de
reincidencia, por cada trabajadora afectada.
• Los empresarios que obligan a los varones menores de 18 años de edad a realizar labores en
lugares insalubres o peligrosos, o trabajos nocturnos industriales, serán sancionados con una
multa de 50 salarios diarios mínimos, que se duplicará en caso de reincidencia, por cada
trabajador menor afectado. También se aplicará esta sanción económica en aquellos casos en los
que el empresario ocupe a niños menores de 12 años para la realización de cualquier trabajo.

Notificación/investigación de AT y EEPP

En Paraguay, el empresario debe notificar a la Dirección General de Higiene y seguridad


Ocupacional aquellos accidentes de trabajo, enfermedades profesionales o incidentes acaecidos
en su organización. Dicho deber viene principalmente regulado por el artículo 16 del Decreto nº
14390/1992, del 28 de julio de 1992, por el cual se aprueba el Reglamento General Técnico de
Seguridad, Higiene y Medicina del Trabajo.

Tal y como especifica dicho artículo, el empresario deberá comunicar aquellos accidentes o
enfermedades profesionales acaecidos en el seno de su organización.

Deberán ser comunicados a la Dirección de Higiene y Seguridad Ocupacional aquellos


accidentes que conlleven consecuencias graves o mortales para uno o más trabajadores y, en
general, todos aquellos que comporten una ausencia en el trabajo por parte del empleado
superior a 3 días

En el primer caso, el empresario deberá realizar la notificación de forma inmediata desde que
tiene conocimiento de lo sucedido. En los casos de accidentes laborales que no sean graves ni
mortales pero que generen una ausencia superior a 3 días, el plazo que se otorga al empresario a
efectos de comunicación es de 8 días.

En cuanto a las enfermedades profesionales, deberán ser comunicadas al mismo organismo y en


el mismo plazo previsto que para los accidentes de trabajo.

Por último, la normativa de Paraguay en materia de seguridad y salud confiere la obligación de


comunicar la materialización de incidentes en el puesto de trabajo, si bien limita este deber de
comunicación a tres tipos de incidentes específicos:

• Explosiones e incendios graves.

• Desplome de grúas u otros aparatos de elevación.

• Desplome parcial o total de edificios, armazones o andamios.

En estos casos, la notificación deberá realizarse de forma inmediata, independientemente de que


se hayan producido heridos o no.
Trabajo de menores

En Paraguay, la protección del menor de edad en el trabajo viene regulada en el Libro I, Título
III, Capítulo II de la Ley nº 213, del 29 de octubre de 1993, por la que se aprueba el Código de
trabajo de Paraguay.

Tal y como dispone el artículo 119 de la norma, los menores que no hayan cumplido 15 años no
podrán trabajar en ninguna empresa industrial, pública o privada o en sus dependencias, con
excepción de aquellas en las que estén ocupados únicamente miembros de la familia del
empresario, siempre que por la naturaleza del trabajo o por las condiciones en las que se efectúe,
no sea peligroso para la vida, salud o moralidad del trabajador menor.

Por otra parte, el artículo 120 del Código de Trabajo establece que podrán trabajar en
establecimientos no industriales los menores de entre 14 y 18 años, cuando se reúnan la
siguientes condiciones:

• Que hayan completado la educación primaria obligatoria o que el trabajo no impida su


asistencia a la escuela.

• Que posean certificado de capacidad física y mental para el trabajo, expedido por la autoridad
sanitaria competente.

• Que se trate de tareas diurnas, livianas, no peligrosas ni insalubres.

• Que medie autorización del representante legal del menor, visada por la autoridad competente.

• Que no trabajen más de cuatro horas diarias, ni más de veinticuatro semanales. Para los
menores que todavía asistan a la escuela, las horas diarias de trabajo quedarán reducidas a dos y
siempre que el número total de horas dedicadas a la escuela y el trabajo no excedan en ningún
caso de siete diarias.

• Que no trabajen en domingo ni en los días de fiestas que la Ley señala.

Además de estas obligaciones, el empresario que se haga con los servicios de un trabajador
menor de entre 15 y 18 años, deberá cumplir con los siguientes requisitos:

• Certificado de nacimiento.

• Certificado anual de capacidad física y mental para el trabajo, expedido por la autoridad
sanitaria competente.

• Autorización del representante legal.

• Limitación de la jornada diaria a seis horas y treinta y seis horas en la semana.

• No ser ocupados en empleos peligrosos para la vida, salud o moralidad, especificados en leyes
o reglamentos.
Los exámenes médicos estarán a cargo del empresario y no ocasionarán gasto alguno a los
menores o a sus padres.

Los menores de 15 a 18 años no serán empleados durante la noche en un intervalo de 12 horas


consecutivas que comprendan desde las 22:00 a 06:00 horas. Se excluye de esta disposición el
trabajo doméstico, ejecutado en el hogar del empresario.

Los menores de 13 a 15 años no podrán ser empleados durante la noche en un período de 14


horas consecutivas, por lo menos, que comprendan el intervalo transcurrido entre las 20:00 y las
08:00 horas.

Documentación: todo empresario que ocupe a menores o aprendices menores, está obligado a
llevar un libro en el que hará constar los siguientes datos sobre ellos: nombre y apellido, edad,
fecha de nacimiento, domicilio, labor que desempeña, horario de trabajo, fecha de entrada,
situación escolar, número de inscripción en el seguro médico, fecha de salida, número y fecha
de expedición del certificado de trabajo. El libro de registros, para su validez, deberá tener sus
fojas numeradas, selladas y rubricadas por la Dirección General de Protección de Menores,
debiendo ser llevado sin enmiendas, raspaduras ni anotaciones entre renglones. El libro será
exhibido a los inspectores u otros funcionarios autorizados, cuando fuere requerido.

Por último, se prohíbe la ocupación de menores de 18 años en trabajos tales como:

• Expendio de bebidas alcohólicas de consumo.

• Tareas o servicios susceptibles de afectar su moralidad o sus buenas costumbres.

• Trabajos ambulantes, salvo autorización especial.

• Trabajos peligrosos o insalubres.

• Trabajos superiores a la jornada establecida, a sus fuerzas físicas, o que puedan impedir o
retardar el desarrollo físico normal.

• Trabajos nocturnos, en los períodos previstos en el artículo 122 y otros que determinen las
leyes.

Trabajadores temporales

La normativa de seguridad y salud ocupacional de Paraguay no dispone obligaciones concretas


al empresario en relación a la protección de los trabajadores temporales. Son considerados
trabajadores temporales los que tengan un contrato de trabajo por duración determinada, la cual
puede prolongarse como norma general hasta 1 año.

4- Dirección General de Fiscalización: atribuciones y deberes de los

Fiscalizadores.
Ley N° 5115/13 en su Art. 16, fija la competencia de la Dirección General de Inspección y
Fiscalización en los siguientes términos: "A este órgano le compete la inspección, vigilancia y
fiscalización de los establecimientos industriales, comerciales, mineros, obrajeros, agrícolas y
ganaderos, así como las oficinas prestadoras de servicios a fin de velar por el cumplimiento de
la legislación laboral y de seguridad social en todo el territorio nacional, relativas a las
condiciones de trabajo, la salud y seguridad ocupacional, a la protección de los trabajadores en
el ejercicio de su profesión y a la prevención de accidentes de trabajo y enfermedades
profesionales, incluidas las normas laborales que protegen especialmente a mujeres, niños, niñas
y adolescentes, en coordinación con los otros órganos del Ministerio".

Servicios

Asesoramientos Laborales a empresas y trabajadores que requieran una orientación legal

Recepción de denuncias anónimas y formales

Acciones implementadas

En el 1er. Semestre del año 2021, la Dirección General de Inspección y Fiscalización dentro del
marco del Plan de Gestión Anual ha realizado 94 fiscalizaciones a Empresas, 450 notificaciones
a empresas para el control preventivo del cumplimiento de las normas legales vigentes y 969
verificaciones del cumplimiento del protocolo sanitario y las disposiciones sanitarias vigentes en
el marco de la Pandemia declarada en todo el territorio paraguayo como consecuencia del
COVID-19.

5- Legislación Vigente.

Ley 5115/13

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