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LECCIÓN XV
Son objetivos principales del Ministerio, en el ámbito de su competencia entre otros, los
siguientes:
2. Cumplir y hacer cumplir la legislación nacional, los contratos colectivos, los tratados,
convenios y acuerdos internacionales aprobados y ratificados por nuestro país en materia de
trabajo, empleo y seguridad social y vigilar su aplicación y cumplimiento.
2. Determinar los objetivos y las políticas del área de su competencia y ejecutar los planes,
programas y proyectos respectivos.
11. Ejercer el poder de policía en el orden laboral y de seguridad social y coordinar las
políticas y los planes de fiscalización, en especial lo relativo al control de empleos no
registrados.
15. Intervenir en la elaboración y ejecución de las normas que orientan la política salarial
del sector privado.
16. Intervenir en la coordinación y armonización de los planes de empleo con los planes
económicos y sociales.
Funciones
Su función es proponer, diseñar, elaborar, administrar y fiscalizar las políticas para todas las
áreas del trabajo, el empleo y las relaciones laborales, la capacitación laboral y la Seguridad
Social. El organismo está a cargo de un ministro, designado y removido discrecionalmente
por el presidente de la Nación
En primer lugar, el Código de Trabajo de Paraguay (Ley nº 213, del 28 de julio de 1992)
incorpora en su Título V una serie de derechos y obligaciones aplicables a empresarios y
trabajadores. A lo largo de sus disposiciones se regula que la política de prevención de
riesgos laborales se deberá desarrollar a través de la seguridad, higiene y medicina del
trabajo, entendida como conjunto de técnicas, estudios y acciones encaminadas al
perfeccionamiento de las condiciones ambientales, materiales, organizativas y personales
destinadas a evitar daños o alteración de la integridad física, funcional o psicológica de los
trabajadores. El empresario deberá garantizar la higiene seguridad y salud de los
trabajadores en la ejecución de su actividad laboral. A tales efectos, adoptará cuantas
medidas sean necesarias, incluidas las actividades de información, formación prevención de
riesgos y la constitución de la organización o medios que sean precisos. Las medidas de
seguridad e higiene del trabajo no implicarán ninguna carga económica para los
trabajadores.
En segundo lugar, encontramos el Decreto nº 14390, del 28 de julio de 1992, por el cual se
aprueba el Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina del Trabajo.
Esta Reglamento constituye la norma más importante de Paraguay en materia de seguridad
y salud en el trabajo. Este Reglamento General se confeccionó para dotar al país de una
reglamentación adecuada en materia de seguridad, higiene y medicina del trabajo, además
de reducir la siniestralidad laboral en el país. Regula de forma amplia aspectos relativos a
las condiciones y requisitos técnicos mínimos obligatorios que, en materia de prevención de
riesgos profesionales y de mejora del medio ambiente de trabajo, se requiere cumplir en
todo establecimiento o centro de trabajo del país.
• Ley nº 836, del 24 de diciembre de 1974, por la que se aprueba el Código Sanitario.
• Ley nº 3940, derechos, obligaciones y medidas preventivas con relación a los efectos
producidos por el virus de la inmunodeficiencia adquirida (VIH) y el Síndrome de
Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA).
• Decreto nº 4954, del 22 de marzo de 2005, por el cual se reglamenta la Ley 1657/2001 y
se aprueba el listado de trabajo infantil peligroso.
Solo el 15% de los trabajadores que poseen algún tipo de trabajo peligroso se encuentra
registrado en el Instituto de Previsión Social.
Ámbito aplicación
En Paraguay, las dos principales normas jurídicas por las que se rgen los derechos y
obligaciones en materia de seguridad y salud en el trabajo son, por un lado, la Ley nº 213,
Código de Trabajo, del 29 de octubre de 1993; y el Decreto nº 14390/1992, del 28 de julio
de 1992, por el cual se aprueba el Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y
Medicina del Trabajo.
En cuanto al Código de Trabajo de 1993, esta norma tiene por objeto establecer normas
para regular las relaciones de trabajo entre los trabajadores y empresarios, concernientes a
la prestación subordinada y retribuida de la actividad laboral. Su ámbito de aplicación viene
dispuesto en el artículo 2 de la norma, en el que se establece que la Ley aplica a los
siguientes colectivos:
Por otra parte, el Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina del
Trabajo de 1992 dispone en sus artículos 2 y 3 su ámbito de aplicación territorial y
funcional, respectivamente. En cuanto al ámbito territorial, se establece que el Reglamento
es de aplicación en todo el territorio de la República de Paraguay. En cuanto al ámbito
funcional, se dispone lo siguiente:
• Las normas y medidas mínimas son de general aplicación en el ámbito personal, sin
perjuicio de la adopción de normas específicas para colectivos singulares de trabajadores
tales como menores, mujeres gestantes o lactantes, disminuidos físicos o psíquicos, trabajo
en familia, etc.
La República de Paraguay cuenta con una serie de organismos públicos cuyas funciones y
competencias guardan relación con la seguridad y salud en el trabajo, de los cuales cabe
destacar los siguientes:
• Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social: Órgano del poder ejecutivo, de orden
público, al que corresponde la tutela de los derechos de los trabajadores y las trabajadoras
en materia de trabajo, empleo y seguridad social. Entre las funciones del Ministerio de
Trabajo, Empleo y seguridad Social están las de elaborar, ejecutar y fiscalizar las normas
generales y particulares referidas a higiene, salud, seguridad y medicina del trabajo en los
lugares o ambientes donde se desarrollan las tareas, en las empresas ubicadas en el territorio
nacional, organismos y empresas del Estado y en las empresas binacionales.
• Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social: Órgano del poder ejecutivo de Paraguay y
que representan la máxima autoridad del país en materia de salud pública. Tiene por misión
regir, conducir y garantizar el buen funcionamiento del sistema de previsión de salud,
orientado éste a la consecución de la cobertura universal.
• Instituto de Previsión Social: Organismo gubernamental que recoge entre sus funciones la
cobertura correspondiente al seguro de accidentes y enfermedades profesionales.
• Disponer los exámenes médicos, tanto los de admisión como periódicos, de cada
trabajador a su cargo y asumiendo su coste.
• Planificar la prevención y determinar las medidas que deberán utilizarse, tanto colectivas
como individuales, así como el material de protección que debe utilizarse contra los riesgos
inherentes a la actividad desarrollada; y que garanticen que los lugares de trabajo, la
maquinaria, el equipo, las operaciones y procesos, los agentes y sustancias agresivas
presentes en el lugar de trabajo no entrañan riesgos para la salud y seguridad para los
trabajadores.
• Cumplir las normas legales o convencionales, así como las medidas de aplicación
inmediata ordenadas por la Autoridad Administrativa del Trabajo, como consecuencia de
una intervención o fiscalización.
Estos requisitos han sido incorporados en cada uno de los apartados específicos contenidos
en esta guía.
En este sentido, el empleado está obligado a observar en su trabajo las medidas legales y
reglamentarias en cuanto a la higiene, seguridad y medicina laboral, y más concretamente,
las siguientes:
• Advertir al empresario o a sus representantes, así como a los mandos con funciones
específicas en materia de seguridad y salud, sobre cualquier situación que detecte y que
entrañe un peligro grave, así como de todo defecto observado en los sistemas de protección.
Además de estas obligaciones, el artículo 272 del mismo código de Trabajo, reconoce el
derecho irrenunciable de los trabajadores a la protección e su seguridad y salud durante el
desempeño de sus servicios profesionales.
Evaluación de riesgos
Además de este deber general, existen otras referencias legales en relación a la evaluación
de riesgos y contenidas en el Decreto nº 14390, del 28 de julio de 1992, Reglamento
General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina del Trabajo, concretamente en su
Capítulo XIII. Dentro de las competencias de los servicios de prevención de la empresa,
están la de evaluar los riesgos en las áreas específicas.
Tal y como dispone el artículo 282 del Reglamento, entre las competencias asignadas a los
Servicios de Higiene en el Trabajo consta la función de evaluar y corregir todo medio
ambiente en donde se desarrollan labores. De forma más específica, el artículo 283 del
Código de Trabajo establece las funciones concretas que deberán llevar a cabo estos
servicios, entre las que se encuentran:
• Sugerir medidas correctoras a tomar para el mejoramiento de las condiciones y del medio
ambiente de trabajo.
Además del deber de identificar y evaluar los riesgos laborales en los lugares y puestos de
trabajo, una de las obligaciones atribuidas al empresario en el artículo 275 del Código de
Trabajo (Ley nº 213, del 29 de octubre de 1993) consiste en planificar la prevención y
determinar las medidas que deberán utilizarse, tanto colectivas como individuales, así como
el material de protección que debe emplearse contra los riesgos inherentes a la actividad
desarrollada.
Este conjunto de medidas y acciones tendrá como fin garantizar que los lugares de trabajo,
la maquinaria, el equipo, las operaciones y procesos, los agentes y sustancias agresivas…
que estén bajo su control, no entrañen riesgos para la salud y seguridad de los trabajadores.
Por otra parte, el artículo 271 del Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y
Medicina del Trabajo (Decreto nº 14390, del 28 de julio de 1992) dispone que en todo lugar
de trabajo se establecerá un programa de Salud Ocupacional, dentro del cual se efectuarán
actividades destinadas a prevenir los accidentes y las enfermedades relacionadas con el
trabajo.
Estos programas de Salud Ocupacional son desarrollados por los Servicios de Seguridad,
Higiene y Medicina de Trabajo. Los artículos posteriores de la norma especifican las
funciones atribuidas a cada uno de estos tres servicios, dentro de los cuales se encuentra la
necesidad de establecer programas de acción, aplicados a cada una de estas tres
especialidades respectivamente. Auditorías
Formación
Tal y como dispone el artículo 276 de la Ley nº 213, Código de Trabajo, del 29 de octubre
de 1993, el empresario facilitará formación e información práctica y adecuada en materia de
salud, seguridad e higiene a los trabajadores que contrate, cuando cambien de puesto de
trabajo o bien cuando tengan que aplicar una nueva técnica que pueda generar nuevos
riesgos.
No se permitirá a ninguna persona realizar una actividad laboral a menos que haya recibido
la información, instrucción y formación necesarias para llevar a cabo el trabajo de forma
eficiente y en condiciones de seguridad. La información, instrucción y formación deberá
facilitarse en el idioma que comprenda el trabajador y, para que el trabajador las asimile,
deberán aplicarse métodos escritos, orales, visuales e interactivos.
Información
Dichos requisitos atribuidos a la figura del empresario vienen definidos en el artículo 276
de la Ley nº 213, Código de Trabajo, del 29 de octubre de 1993, en el que se establece
como obligación del empresario facilitar la formación e información práctica y adecuada en
materia de salud, seguridad e higiene a los trabajadores que contrate, cuando cambien de
puesto de trabajo o bien cuando tengan que aplicar una nueva técnica que pueda generar
nuevos riesgos.
Los representantes de los trabajadores serán electos por los mismos, en un número no
inferior a 4, dando preferencia a los representantes de los lugares de trabajo que ofrezcan
mayores riesgos de accidentes, considerando también sus condiciones de liderazgo, su
asistencia regular al trabajo, su disciplina, espíritu de observación y noción clara de la
actividad pertinente de la Comisión.
• Proponer medidas de acción disciplinaria para los que infringieren normas y reglamentos
de seguridad.
• Analizar los accidentes ocurridos y las estadísticas que deben figurar en las actas de
reunión. Remitir mensualmente al Servicio de Seguridad, Servicio de Higiene y Medicina
del Trabajo, para la elaboración de resúmenes, la documentación referente a sus
actividades, con copia a la Dirección de Higiene y Seguridad Ocupacional, dependiente del
Ministerio de Justicia y Trabajo.
• Cumplir y hacer cumplir las normas, reglamentaciones, órdenes que se les dieren en
materia de prevención de accidentes, seguridad, e higiene del trabajo.
Vigilancia de la salud
Tal y como figura en el artículo 275 de la Ley nº 213, Código de Trabajo, del 29 de octubre
de 1993, una de las obligaciones generales del empresario en materia de seguridad y salud
en el trabajo consiste en organizar los reconocimientos médicos de admisión y periódicos al
conjunto de su plantilla.
Tal y como dispone el artículo 260 de la norma, todos los trabajadores deben someterse a
exámenes médicos:
• A intervalos periódicos, dada su periodicidad, cada doce (12) meses en los casos de
actividades y operaciones no peligrosas o en ambientes no insalubres, y cada seis meses (6)
en los casos de actividades y operaciones peligrosas o ambientes insalubres.
Tal como viene reseñado en el artículo 266, el resultado de los exámenes médicos de las
diversas índoles se debe inscribir en registros apropiados, los que deben conservarse para
fines de referencia.
Los trabajadores menores de 18 años deben ser objeto de vigilancia médica especial, con
exámenes periódicos a intervalos convenientes y manteniendo siempre el secreto
profesional, pudiendo exhibir los registros solo a las autoridades competentes.
Los trabajadores que hayan sufrido un accidente con lesión grave o una enfermedad
prolongada, no podrán reanudar sus tareas sin una autorización médica correspondiente.
• Radiografía de tórax.
• Hemograma completo.
• Colesterol.
• Glicemia.
• Examen clínico.
• Radiografía de tórax.
• Hemograma completo.
• Electroencefalograma.
• Test psicológico.
Dentro del ordenamiento jurídico de Paraguay en materia de seguridad y salud en el trabajo, las
obligaciones concernientes a la gestión de los primeros auxilios en la empresa vienen
establecidas en el Título I, Capítulo I, Sección IV del Decreto nº 14390/1992, del 28 de julio de
1992, por el cual se aprueba el Reglamento General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina
del Trabajo.
Todos los centros de trabajo dispondrán de un botiquín de emergencia para la prestación de los
primeros auxilios, bien señalizado y convenientemente situado, que estará a cargo del personal
médico, si lo hubiera, de un socorrista diplomado o, en su defecto, de la persona más capacitada
designada por el empresario.
Por otra parte, aquellos centros de trabajo que cuenten con un volumen de trabajadores mayor a
25 trabajadores deberán disponer de un local destinado a enfermería con elementos y medios
suficientes para prestar estos servicios.
Dentro de estos medios, figura el botiquín de rimeros auxilios, le cual deberá disponer del
siguiente material: agua oxigenada, alcohol de 96º, tintura de iodo, termómetro y estetoscopio,
mercurio cromo, amoniaco, gasa estéril, algodón hidrófilo, vendas, esparadrapo,
antiespasmódicos, analgésicos y tónicos cardiacos de urgencias, torniquete, bolsas de goma para
agua o hielo, guantes esterilizados, jeringas desechables, agujas para inyectables y termómetro
clónico. El material de los botiquines deberá ser revisado mensualmente y deberá reponerse el
material ya utilizado.
En aquellos centros de trabajo que dispongan de un Servicio de Medicina del Trabajo, serán
éstos los encargados de proporcionar a los trabajadores los primeros auxilios en casos de
accidente o enfermedad.
Dichos Servicios dispondrán del personal auxiliar médico necesario y medios imprescindibles
para desarrollar eficazmente las funciones que se le atribuye.
En las oficinas o en los locales destinados a los servicios de primeros auxilios se colocarán, en
lugares visibles, una relación detallada de las direcciones y teléfonos de las unidades de
urgencia a los que puedan ser trasladados los accidentados o enfermos.
Tal y como establece el artículo 68 del Reglamento, en los establecimientos y centros de trabajo
con riesgo grave de incendio, se instruirá y entrenará especialmente al personal integrado en el
equipo o brigada contra incendios sobre el manejo y conservación de las instalaciones y medios
de extinción, señales de alarma, evacuación de los trabajadores y socorro inmediato de los
accidentados.
El personal de los equipos contra incendios dispondrá de cascos, trajes aislantes, botas y guantes
y cinturones de seguridad; asimismo dispondrá, si fuera necesario evitar específicas
intoxicaciones o sofocación, de máscaras y equipos de respiración automática.
El material asignado a los equipos de extinción de incendios: escala, cubiertas de lona o tejidos
ignífugos, hachas, picos, palas, etc., no podrá ser usado para otros fines y su emplazamiento será
conocido por las personas que deben emplearlo. El empresario o su representante designarán al
Jefe de Equipo o Brigada contra incendios, que cumplirá estrictamente las instrucciones técnicas
en prevención de los riesgos laborales, si los hubiere, o a la persona de mayor competencia
técnica del establecimiento en estas materias.
Infracciones y sanciones
En Paraguay, las dos normas principales por las cuales se regula la seguridad y salud en el
trabajo son el Código de Trabajo (Ley nº 213 del 29 de octubre de 1993) y el Reglamento
General Técnico de Seguridad, Higiene y Medicina del Trabajo (Decreto nº 14390, del 28 de
julio de 1992). Sin embrago, es el Código de Trabajo (artículo 374 y siguientes) la norma
jurídica que establece la cuantía de las sanciones atribuidas al incumplimiento de las
obligaciones contenidas en ambas normas.
Tal y como dispone el artículo 374 del Código, el incumplimiento de cada obligación legal del
empresario con la administración del trabajo (entre ellas las obligaciones en materia de
seguridad y salud) será sancionada con una multa equivalente de entre 10 a 30 jornales
mínimos. En caso de que el empresario reincida en uno de sus incumplimientos, la cuantía de
las sanciones será duplicada.
• Los empresarios que infrinjan los descansos legales de maternidad o nieguen permisos para la
lactancia, afrontarán una multa de 50 salarios diarios mínimos, que se duplicará en caso de
reincidencia, por cada trabajadora afectada.
• Los empresarios que obligan a los varones menores de 18 años de edad a realizar labores en
lugares insalubres o peligrosos, o trabajos nocturnos industriales, serán sancionados con una
multa de 50 salarios diarios mínimos, que se duplicará en caso de reincidencia, por cada
trabajador menor afectado. También se aplicará esta sanción económica en aquellos casos en los
que el empresario ocupe a niños menores de 12 años para la realización de cualquier trabajo.
Notificación/investigación de AT y EEPP
Tal y como especifica dicho artículo, el empresario deberá comunicar aquellos accidentes o
enfermedades profesionales acaecidos en el seno de su organización.
En el primer caso, el empresario deberá realizar la notificación de forma inmediata desde que
tiene conocimiento de lo sucedido. En los casos de accidentes laborales que no sean graves ni
mortales pero que generen una ausencia superior a 3 días, el plazo que se otorga al empresario a
efectos de comunicación es de 8 días.
En Paraguay, la protección del menor de edad en el trabajo viene regulada en el Libro I, Título
III, Capítulo II de la Ley nº 213, del 29 de octubre de 1993, por la que se aprueba el Código de
trabajo de Paraguay.
Tal y como dispone el artículo 119 de la norma, los menores que no hayan cumplido 15 años no
podrán trabajar en ninguna empresa industrial, pública o privada o en sus dependencias, con
excepción de aquellas en las que estén ocupados únicamente miembros de la familia del
empresario, siempre que por la naturaleza del trabajo o por las condiciones en las que se efectúe,
no sea peligroso para la vida, salud o moralidad del trabajador menor.
Por otra parte, el artículo 120 del Código de Trabajo establece que podrán trabajar en
establecimientos no industriales los menores de entre 14 y 18 años, cuando se reúnan la
siguientes condiciones:
• Que posean certificado de capacidad física y mental para el trabajo, expedido por la autoridad
sanitaria competente.
• Que medie autorización del representante legal del menor, visada por la autoridad competente.
• Que no trabajen más de cuatro horas diarias, ni más de veinticuatro semanales. Para los
menores que todavía asistan a la escuela, las horas diarias de trabajo quedarán reducidas a dos y
siempre que el número total de horas dedicadas a la escuela y el trabajo no excedan en ningún
caso de siete diarias.
Además de estas obligaciones, el empresario que se haga con los servicios de un trabajador
menor de entre 15 y 18 años, deberá cumplir con los siguientes requisitos:
• Certificado de nacimiento.
• Certificado anual de capacidad física y mental para el trabajo, expedido por la autoridad
sanitaria competente.
• No ser ocupados en empleos peligrosos para la vida, salud o moralidad, especificados en leyes
o reglamentos.
Los exámenes médicos estarán a cargo del empresario y no ocasionarán gasto alguno a los
menores o a sus padres.
Documentación: todo empresario que ocupe a menores o aprendices menores, está obligado a
llevar un libro en el que hará constar los siguientes datos sobre ellos: nombre y apellido, edad,
fecha de nacimiento, domicilio, labor que desempeña, horario de trabajo, fecha de entrada,
situación escolar, número de inscripción en el seguro médico, fecha de salida, número y fecha
de expedición del certificado de trabajo. El libro de registros, para su validez, deberá tener sus
fojas numeradas, selladas y rubricadas por la Dirección General de Protección de Menores,
debiendo ser llevado sin enmiendas, raspaduras ni anotaciones entre renglones. El libro será
exhibido a los inspectores u otros funcionarios autorizados, cuando fuere requerido.
• Trabajos superiores a la jornada establecida, a sus fuerzas físicas, o que puedan impedir o
retardar el desarrollo físico normal.
• Trabajos nocturnos, en los períodos previstos en el artículo 122 y otros que determinen las
leyes.
Trabajadores temporales
Fiscalizadores.
Ley N° 5115/13 en su Art. 16, fija la competencia de la Dirección General de Inspección y
Fiscalización en los siguientes términos: "A este órgano le compete la inspección, vigilancia y
fiscalización de los establecimientos industriales, comerciales, mineros, obrajeros, agrícolas y
ganaderos, así como las oficinas prestadoras de servicios a fin de velar por el cumplimiento de
la legislación laboral y de seguridad social en todo el territorio nacional, relativas a las
condiciones de trabajo, la salud y seguridad ocupacional, a la protección de los trabajadores en
el ejercicio de su profesión y a la prevención de accidentes de trabajo y enfermedades
profesionales, incluidas las normas laborales que protegen especialmente a mujeres, niños, niñas
y adolescentes, en coordinación con los otros órganos del Ministerio".
Servicios
Acciones implementadas
En el 1er. Semestre del año 2021, la Dirección General de Inspección y Fiscalización dentro del
marco del Plan de Gestión Anual ha realizado 94 fiscalizaciones a Empresas, 450 notificaciones
a empresas para el control preventivo del cumplimiento de las normas legales vigentes y 969
verificaciones del cumplimiento del protocolo sanitario y las disposiciones sanitarias vigentes en
el marco de la Pandemia declarada en todo el territorio paraguayo como consecuencia del
COVID-19.
5- Legislación Vigente.
Ley 5115/13