Está en la página 1de 3

Título

Las redes sociales juegan un rol de gran importancia para la sociedad actual, pues
en ella podemos consumir y producir contenidos, todo ello siempre a nuestro
alcance gracias a la hiperconectividad. Según el portal Hootsuite, el consumo de
redes sociales (Facebook, Twitter, Instagram, Whatsapp y Tiktok) en personas de
entre 13 y 65 años ha aumentado de forma considerable en México, pues en
2014, 50 millones de personas las consumían; mientras que para el año 2021 se
contabilizó a 100 millones de usarios. Lo cual se traduce a un aumento del 100%
respecto a su consumo en tan solo 7 años.

De los grupos de edad que mayormente consumen las redes sociales son de 25 a
43 años de edad, mientras que el segundo grupo que más las consumen son de
18 a 24 años. Este último grupo concentra un total del 25.9% de la mustra de
estudio.

El drástico aumento no solo resulta alarmante por la cantidad de nuevos usarios


que las redes sociales consiguieron, sino también la cantidad de horas que se
invierte en ellas. De acuerdo con el mismo estudio, los mexicanos en promedio
pasan 3 horas 20 minutos al día en las redes sociales, lo que se traduce en un
total de 1, 216.6 horas por año. Es decir, un usuario mexicano en redes sociales
gasta el 13.8% del año en unicamente consumir redes sociales.

Según el mismo estudio, las redes sociales más consumidas por los mexicanos
son: Whatsapp (94.3%), Facebook (93.4%), Facebook Messenger (80.5%),
Instagram (79.1%) y TikTok (70.4%).

La razones por la que se convirtieron usuarios de las redes sociales son variadas,
pero el 62.8% dicen haberlo hecho para mantenerse en contacto con amigos y
familiares, el 47.1% para leer nuevas historias, 45% para encontrar contenido,
44.7% para usar en su tiempo libre y el 34.5% para efectuar compras.
De acuerdo con varios psicólogos, el principal problema que las redes sociales
pueden ocasionar a los universitarios es una coodependencia hacia ellas, ya que
el algoritmo que utilizan puede ser nocivo gracias a que es capaz de adaptarse a
cualquier clase de contenido que consumas con mayor frecuencia.
Sumado a ello, los usuarios pueden desarrollar una clase similar de transtorno
postraumático gracias a que “que las redes sociales son una vitrina para mostrar
la vida que no tenemos”, en ese sentido es posible que quienes consuman redes
sociales se puedan sentir aislados al creer que la vida de la mayoría de las
personas va bien mientras que la propia no.

La hiperconectividad funge un papel sumamente importante, pues nos es posible


entrar a las redes sociales desde cualquier sitio, esto provoca que el uso de las
redes sociales incremente, ya que básicamente tienes la opción de consumir
contenido afín a tus gustos en cualquier lugar. Esto es lógico, pues el algoritmo
que utilizan las redes sociales está hecho para captar la mayor atención del
público en el menor tiempo posible, por eso es que se puede adaptar dependiendo
qué contenidos consumas.

Si bien en las redes sociales existe contenido que sea de diversa índole para los
usuarios, también puede encontrar contenido de vidas a las que los usuarios
promedio aspiran, por lo que sitios como Facebook e Instagram se vuelven armas
de doble filo. Ya que en ocasiones pueden hacer sentir a los universitarios
distantes a su realidad y ajenos a la misma, provocando que estos puedan en
depresión o desesperanza.

Esta depresión o deseperanza puede derivar en que los usuarios generen un


trauma que a la vez provoqué algún transtorno postraumático, ya que estos
últimos no son propios de traumas fuertes, sino cualquier clase de trauma puede
generar este efecto. Así pues, los usuarios condicionan su conducta, gracias a que
pueden generar fobias.

También podría gustarte