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Resumen
La razón principal de una mayor aceptación de la tecnología del carbón activado es que
está demostrando convincentemente mejores recuperaciones de oro y plata que el proceso
de filtración y precipitación tradicional Merrill Crowe aunque es el favorito cuando las
relaciones de Ag/Au son mayores a 5, con menores costos operativos y de capital. Durante
la operación las plantas CIL y CIP adquieren bastante experiencia en cuestiones de proceso
y mecánicas y se adapta a los a los cambios en las características mineralógicas de los
yacimientos y en la eliminación de los metales pesados contaminantes de las soluciones de
lixiviación ya que el proceso Merrill Crowe no tiene esa flexibilidad.
Las propiedades particulares de las operaciones actuales que tienen instalados en sus
procesos de extracción de Au y Ag las tecnologías CIP y CIL a base de carbono activado,
son muy complacientes y caen en la pereza durante el diseño y la operación, ya que no se
implementa un plan de optimización continua y solo son observadas en tiempos de cosecha.
Las primeras reglas de oro básicas que se emplearon y se desarrollaron como criterios de
diseño en los años de 1980 para las plantas con procesos de carbón activado CIP y CIL,
todavía se siguen utilizando hoy en día, sin tomar en cuenta que hay otros factores que
pueden hacer que una planta tenga un rendimiento muy diferente de otra. Parece que hay
pocas ideas y estrategias para mejorar el rendimiento de estas operaciones, cuando se sabe
que la mayoría de las plantas de CIP y CIL funcionan bastante bien con una optimización
mínima y en muchos casos, una comprensión mínima de los factores que influyen en el
rendimiento.
Casi todas las plantas CIP y CIL instaladas en el mundo están sobre-diseñadas y por
consecuencia son operadas de manera sub-óptima. Esta situación provoca mayores pérdidas
de oro y/o mayores costos operativos y de capital de lo que realmente es necesario.
Las operaciones actuales y los nuevos proyectos, requieren de definir los factores y
criterios para el diseño de los procesos CIP y CIL, para optimizar continuamente el
rendimiento de sus procesos, es necesario establecer una metodología muy simple que se
puede utilizar para llegar a algo cercano a un diseño óptimo de planta. A los metalurgistas y
operadores de esas áreas del procesos, les hace falta herramienta de análisis y de
optimización, que puedan utilizar de manera continua para transformar sus operaciones y
procesos de un proceso bastante bien administrado en un proceso excepcionalmente bien
dirigido.
Introducción
Por lo general las operaciones con procesos CIP y CIL no exigen mucha supervisión, solo
cuando se va a realizar la cosecha es cuando los operadores ponen atención a los detalles y
corrigen alguna anomalía operativa. Está ampliamente demostrado que la velocidad de
adsorción del cianuro de oro y plata sobre el carbón activado es muy lenta y puede llevar
semanas o incluso meses alcanzar el verdadero equilibrio. Debido a esto, las plantas CIP y
CIL operan en condiciones en las que la cantidad de oro cargado en el carbono en cada
etapa siempre está lejos del equilibrio. Por lo tanto, la eficiencia de extracción de oro se
basa siempre en la cinética de la adsorción y no está limitada por las restricciones de
equilibrio.
Mejorar la cinética de adsorción del carbón, significa que se cargará más oro en el carbón
en un período de tiempo dado y esto a su vez se traduce en menores costos de capital y
operativos, ya sea en virtud de una disminución en el tamaño o el número de etapas de
adsorción, o por un aumento en la carga de oro en el carbono y una consecuente
disminución en la cantidad de carbono transferido a la elución y regeneración.
Con las plantas CIP y CIL operando lejos del equilibrio, siempre hay mucha capacidad en
el carbón para absorber cambios repentinos en la cantidad del oro que debe extraerse, sin
cambios significativo en la eficiencia de extracción general. Esto puede ocurrir y con
frecuencia sucede como resultado de un aumento repentino en la velocidad de flujo de la
pulpa de alimentación, o cambios rápidos en la concentración de oro en la solución. Los
procesos CIP y CIL han demostrado ser metalúrgicamente y mecánicamente robustos y las
altas recuperaciones de oro generalmente se logran con un tiempo mínimo de inactividad de
la planta.
Por consiguiente, se presta poca atención a la optimización de los circuitos CIL y CIP en
las etapas de factibilidad y diseño y muchas plantas están operando sin tener establecido un
programa de pruebas para comparar la eficiencia.
2) Elución y reactivación. El Oro y la plata son extraídos del carbón en una solución
concentrada y el carbón es regenerado y devuelto al circuito
Tres métodos de cargado son comúnmente usados y son los siguientes: carbón en columna
(CIC); carbón en pulpa (CIP); y carbón en Lixiviación (CIL).
En el proceso CIC la solución entra en contacto con el carbón cargado en una columna. La
solución se hace pasar por el carbón en una dirección ascendente, dilatando la columna de
carbón verticalmente. Como resultado de esta expansión vertical, el término” cama de
carbón expandida” es también usado para describir el proceso.
En el proceso CIP la pulpa está en agitación en tanque de agitación y hay un movimiento
en contracorriente (El carbón fluye en una dirección, mientras que la pulpa fluye en otro).
El proceso CIL es de hecho una variante del circuito de lixiviación ya que se realiza la
adsorción y disolución simultáneamente.
4. El aumento de la relación oro/carbón activado, reduce la cantidad del carbono para el
lavado acido, la elución y la regeneración, que a su vez reduce los costos de capital y de
operación en estas operaciones unitarias intensivas en costos.
8. La optimización del diseño de la planta CIP o CIL con parámetros operativos
optimizados puede tener un impacto significativo tanto en costo de capital como en los
operativos.
9. Examinar todas las alternativas en las plantas piloto representa un proceso complejo
y muy costoso. La estrategia de usar la experiencia generada en las plantas en operación y
de las históricas "reglas generales de operación individual" ha evolucionado como la
filosofía de diseño predominante en muchos casos.
13. El fluido plástico se debe a un sólido en condiciones estáticas, y debe aplicarse una
cantidad mínima de fuerza para hacer que fluya. Esa fuerza se denomina tensión de
rendimiento y se crea por el efecto de cizallamiento que está presente en prácticamente
todas las operaciones unitarias enumeradas anteriormente. El esfuerzo de rendimiento de
Bingham es bastante específico para una pulpa dada, pero varía con parámetros como la
densidad de la pulpa, la distribución del tamaño de las partículas y la temperatura.
14. Muestras representativas de pulpa se puede usar para generar criterios de diseño y
definir la densidad crítica de sólidos (CSD) de la forma de la curva. Por definición, el CSD
se ajusta a un pequeño rango de densidad de sólidos.
15. Un aumento de la densidad del sólido reduce el flujo de sólidos y la densidad que se
podrá obtener en una compresión comercial más grande y también indica la densidad
máxima de sólidos para bombear la pulpa, dado una pérdida de presión por fricción
razonable. Hay consecuencias negativas de operar fuera del rango CSD, tanto en el lado
bajo como en el de alta densidad de pulpa. Las operaciones de baja densidad reducen el
rendimiento de la planta, dado el tiempo de residencia requerido y pueden resultar en el
lijado de partículas de carbón y arenas gruesas en el fondo de los tanques. Operar a altas
densidades de pulpa puede causar sedimentación de sólidos, lo que reducirá el rendimiento
en ciertas operaciones críticas de la unidad y retardará la cinética de la lixiviación y la
adsorción de oro.
16. Muchos operadores de plantas CIP y CIL eligen operar sus plantas en densidades de
pulpa por encima de la CSD, donde el estrés de rendimiento generalmente es superior a 20
Pa, caso de minerales que muestran una buena capacidad de flujo y tan alto como 60 Pa en
el caso de minerales más difíciles. Como se muestra en la Fig. 1, la práctica común en las
plantas que procesan minerales de oro, es moler el mineral a la densidad de sólidos más alta
posible, para maximizar la eficiencia de la molienda. La descarga superior del ciclón
molino se diluye en la sección de bombeo y clasificación, por lo que el producto del molino
generalmente se bombea a un tanque espesador para volver a espesar la pulpa, antes de
bombear a las plantas de lixiviación y adsorción de oro.
17. La densidad de la pulpa en las dos secciones de la planta donde las tasas de
transferencia de masa son críticas son importantes y deben de mantenerse en control.
barreras físicas como la criba en interetapas que no tienen relación con la cinética de
reacción, y el impacto de la densidad de sólidos en la lixiviación de cianuro de oro y las
tasas de adsorción se ignora.
18. La razón por la cual los operadores de la plantas CIP y CIL se esfuerzan
constantemente por maximizar la densidad de sólidos, tienen la creencia de que al hacerlo
se están maximizando o modificando el rendimiento de la planta. Pero este enfoque más
bien fácil puede llevar a un diseño y a una operación sub-optimizada, ya que los beneficios
que podrían lograrse al reducir la densidad de la pulpa, mejorar la cinética de transferencia
de masa y acortar el tiempo óptimo de residencia de la pulpa, en muchos casos, excederán
de lo que se puede lograr al maximizar la densidad de pulpa.
2) El modelo también supone que existe una relación de equilibrio entre el oro en
solución y el oro en el carbono, en el límite del carbono y el de la solución, y que el
equilibrio se puede describir mediante la ecuación lineal simple; [AuC]i = K [AuS]i. Este
supuesto también es válido para las primeras etapas del proceso de carga, particularmente
cuando las concentraciones de oro en la solución son bajas. En la práctica, las plantas CIP
operan en condiciones en las que la concentración de oro en solución es muy baja en la
mayoría de las etapas (< a 1 mg/L) y la carga de oro en el carbono en cada etapa es
significativamente menor que la carga de equilibrio para esa etapa, por lo que la capacidad
predictiva del modelo es razonablemente buena.
3) EL modelo asume que cada una de las etapas de adsorción es un reactor perfectamente
mezclado que proporciona tiempos de residencia constantes para las dos corrientes en
contracorriente (pulpa y carbono), y que los flujos de pulpa y carbono son continuos y
constantes. Esto es generalmente cierto para la fase de pulpa, pero no para la fase de
carbono, que normalmente se transfiere periódicamente en forma de lote o semi lote. El
flujo continuo de ambas fases crea una condición de estado estable en la que las
concentraciones de oro en solución y en el carbono en cada etapa son constantes.
4) La ecuación desarrollada por Nicol, que explica la velocidad de carga de cianuro de
oro sobre carbono cuando la concentración de oro en solución es constante (como sería el
caso en cada etapa de una planta CIP Ec. 1, para describir la tasa de carga de oro en
carbono en un reactor discontinuo, donde las concentraciones de oro en solución y en el
carbono cambian constantemente (Ec. (2)).
k es la constante cinética.
K es la constante de equilibrio.
MC es la masa de carbono y
MS es la masa de la solución.
Todos los modelos reconocen el hecho de que la carga de oro en carbono en todas las
etapas de las plantas CIP y CIL está lejos del equilibrio o la carga máxima que podría
lograrse si las partículas de carbón permanecieron en la etapa por un tiempo infinitamente
largo. En consecuencia, el rendimiento de estas plantas se debe principalmente a la cinética
de transferencia de masa y no está limitado por las restricciones de carga de equilibrio.
Además, durante la mayor parte del tiempo que el carbón pasa en una etapa, la limitación
de la velocidad es la transferencia de masa en la fase de solución o pulpa. Los factores más
importantes que influyen en la cinética de la transferencia de masa en la fase de la pulpa
(difusión por película) son la eficiencia de la mezcla y la reología de la pulpa. Estos dos
parámetros son a su vez una función de varias otras características físicas del sistema, como
el tipo de mezclador y la entrada de energía en el mezclador, las dimensiones del tanque de
adsorción, la distribución del tamaño de partícula de carbono, la densidad de la pulpa de la
suspensión. , la presencia o ausencia de limos minerales o precipitados en la suspensión y la
temperatura.
Las propiedades reológicas de una pulpa pueden medirse con precisión en pruebas a muy
pequeña escala, como se explicó anteriormente, y escalar perfectamente, pero la eficacia de
la mezcla es mucho más difícil de cuantificar y escalar. En consecuencia, es la fuente más
grande de incertidumbre y error cuando se usan modelos para predecir el comportamiento
en plantas a gran escala.
· Genere una curva (s) de tensión de rendimiento como se muestra en la Fig. 1a, y a
partir de la forma de la (s) curva (s), así como la densidad óptima de densidades de flujo del
espesador, establezca la densidad de sólidos críticos para la muestra particular. Luego
seleccione tres densidades de pulpa de la curva de esfuerzo de rendimiento, una en el CSD,
una en el CSD: 5% y otra en el CSD: 10% (57 %, 52 % y 47 % en el ejemplo de la Fig. 1a.
La dispersión puede ser más estrecha o más ancha dependiendo de la curvatura de la
correlación entre la tensión de rendimiento / densidad de la pulpa.
· Realice pruebas a escala piloto, para determinar la tasa de lixiviación de oro (en las
condiciones óptimas establecidas anteriormente) y la tasa de adsorción de cianuro de oro
sobre carbón activado en las tres densidades de pulpa seleccionadas. Ajuste los datos
cinéticos a las expresiones de velocidad que se muestran en las ecuaciones. (2) y (3).
Los datos cinéticos de lixiviación y adsorción de carbono se ajustan a las ecuaciones. (2) y
(3), para describir las tasas de lixiviación y adsorción de oro. Se utilizan en los modelos
CIP y CIL para predecir perfiles de oro en solución, en el carbono y en el residuo de
lixiviación a través de una serie de tanques de lixiviación y adsorción, en los que el carbono
avanza en contracorriente al flujo de la suspensión. Los modelos CIP y CIL permiten la
variación sistemática de una serie de parámetros operativos, a la vez que predicen el
rendimiento de extracción de oro de la planta CIP o CIL en función del cambio gradual que
se ha realizado. Esto permite establecer los criterios óptimos de diseño para la planta. La
mayor incertidumbre a la hora de predecir el rendimiento de una planta de CIP o CIL a gran
escala a partir de los resultados que se generan en pruebas de lotes a pequeña escala
(generalmente 1–10 L de pulpa) es el impacto de la ampliación en la eficiencia de mezcla y
por lo tanto, la tasa de adsorción del cianuro de oro en carbón.
En la experiencia de Au, las pruebas de botella a pequeña escala son similares a lo que se
puede lograr en una planta, pero pueden ser hasta dos veces más lentas. Por otro lado, la
transferencia de masa en un pequeño tanque agitado puede ser al menos dos veces más
rápida que la planta. Se necesita experiencia tanto en el diseño de pruebas a pequeña escala,
como con el rendimiento operativo de las plantas CIP y CIL a gran escala, para hacer una
predicción razonable del factor de escalado apropiado. Los siguientes parámetros
operativos suelen variar (aunque algunos se pueden arreglar, si la optimización se basa en
una adaptación de una planta existente, por ejemplo):
· El porcentaje de lixiviación de oro que se produce antes del primer tanque de
adsorción de carbón (100 % supuesto para los diseños CIP).
· La tasa de avance de carbón en la planta CIP o CIL (La carga de oro objetivo en el
carbón que va a la elución).
· La concentración objetivo de oro en la solución que sale del último tanque de
adsorción de carbón.
· La cantidad de oro restante en el carbón eluido que se recicla al último tanque de
adsorción.
Análisis de Resultados y Discusión Caso Práctico
En cada prueba, se agregó carbón a la pulpa, Luego se mezcló durante 72 horas en un
pequeño tanque agitado. El volumen de pulpa estuvo entre 1 y 2 litros en cada caso. Las
muestras de pulpa se extrajeron periódicamente durante la prueba de 72 h, y se filtraron
para producir una solución de lixiviación, que se analizó por oro. Los resultados se resumen
en la Tabla 1. Los datos cinéticos de los lotes se modela siguiendo la metodología Nicol-
Fleming (Nicol et al., 1984a, b) al asumir un rendimiento hipotético de mineral de 250,000
toneladas secas/mes en una planta CIP de seis etapas, con un tiempo de residencia de la
pulpa de 2 h por etapa y una concentración de carbón de 25 g/L en la pulpa. Siguiendo con
los parámetros operativos iniciales de las "regla de oro", la relación de mejora ascendente
se estableció en 1000, para generar carbón cargado con 5000 g de Au/t de carbón, con una
calidad de solución de lixiviación alimentada de 5 g Au/t de solución. La Grafica 1 (b)
muestra el comportamiento a diferentes condiciones.
Los valores de 100 o más para kK conducen a condiciones de operación favorables del
CIP, mientras que los valores de 75 o menos indican medidas estrictas (más etapas de
adsorción, más carbón por etapa o menor carga de oro en el carbón, se tienen que hacer los
ajustes necesarios para lograr una eficiencia satisfactoria de extracción de oro.
Luego se siguió una de las dos estrategias para lograr perfiles de oro en solución y en el
carbono en todas las etapas del CIP: se estableció la concentración de carbono y se
modificó el grado de oro en la solución estéril. Se fijó y se varió la concentración de
carbono. Los resultados del modelo incluyen los parámetros del modelo cinético, algunos
de los cuales se calcularon, mientras que otros se basan en un simple balance de masa en
todo el circuito:
· Concentración de carbón.
· Flujo de carbón.
Se obtuvieron los resultados del modelo y los perfiles de oro mostrados en las Figuras 2 y
3.
· El tamaño de los tanques CIP se redujo proporcionalmente, de modo que el tiempo de
residencia de la pulpa por etapa se mantuvo constante a las 2 h.
· La cantidad de carbono en cada etapa se mantuvo igual, pero la velocidad a la que
avanzó el carbono se varió en proporción a la concentración de oro en la solución, de modo
que la relación de mejoramiento se mantuvo constante en 1000.
· Lo que resultó en un aumento de las pérdidas solubles pronosticadas desde la última
etapa, de 0.003 a 0.019 mg/L. Intuitivamente, se podría predecir que la densidad de pulpa
óptima es del 50 %, según estos resultados, pero como se muestra en la siguiente sección,
se necesita un análisis más detallado de costo/beneficio para llegar al verdadero óptimo.
Ø El efecto de la velocidad de rotación de la botella en la transferencia de masa se
consideró en las Pruebas 2 y 4, al duplicar la velocidad en la Prueba 4 en relación con la
Prueba 2 (que era el modo de funcionamiento normal para la prueba). Las constantes y los
perfiles cinéticos eran casi idénticos en los dos escenarios, lo que indicaba que la velocidad
de carga de cianuro de oro sobre carbono en una prueba de botella rodante es bastante
insensible a la velocidad a la que se rueda la botella. El interior de la botella era liso en
ambos casos, y los resultados habrían sido diferentes si se hubieran colocado bafles.
Ø La mezcla fue más eficiente en el tanque agitado (Prueba 5, kK = 159) que en las pruebas
de rodillos en botella (Pruebas 2 y 4, kK = 90), y esto se tradujo en un rendimiento
mejorado del CIP. La cantidad prevista de oro extraído en cada etapa del CIP, aumentó del
70 % con los datos cinéticos de la botella al 75 % con los datos del tanque agitado y resultó
en pérdidas de oro de solución estéril más bajas en este último caso. En nuestra experiencia,
el rendimiento cinético que se logra en grandes tanques CIP convencionales es ligeramente
mejor que el de una botella rodante, mientras que el rendimiento de tanques más pequeños
y bien mezclados, como Pumpcell, se simula mejor mediante pequeños tanques agitados de
laboratorio.
Ø Se logra una mayor carga pronosticada de oro en el carbón en la Prueba 3 debido a la
mayor concentración de oro en la solución, que a su vez resultó de operar a una alta
densidad de pulpa. Las plantas de elución y regeneración de carbón, serían menos de la
mitad del tamaño de una planta CIP en función de la carga lograda en la prueba 3, en
comparación con la obtenida en la prueba 1. Sin embargo, una de las consecuencias
negativas de operar una planta con una alta carga de oro es el aumento de la cantidad de oro
que se mantiene permanentemente en la planta CIP, que también está bien ilustrada por los
datos en la Figura 2.
Figura 2.- Condiciones de operación de la planta CIP para las cinco pruebas que
examinan los efectos de la eficiencia de mezcla y la densidad de la pulpa en los
resultados metalúrgicos.
Figura 3.- Variaciones predichas por el modelo en el rendimiento de la planta CIP en
función de los cambios en la eficiencia de la mezcla y la reología de la pulpa.
3. Qué tan sensible es el rendimiento de la planta con respecto a la carga objetivo de oro
en el carbón en la Etapa CIP 1
Figura 4.- Condiciones de operación de la planta CIP para Pruebas que examinan los
efectos de variar el diseño de la planta y los parámetros operativos.
Figura 5.- Variaciones predichas por el modelo en los perfiles CIP de oro en solución
en función del cambio en el diseño de la planta y los parámetros operativos
Figura 6.- Variaciones pronosticadas por el modelo en los perfiles CIP de oro en el
carbono en función de los cambios en el diseño de la planta y los parámetros
operativos.
4. Pero la operación de la planta a mayores cargas de oro reduce la tasa de adsorción del
cianuro de oro sobre el carbón y aumenta las pérdidas de oro en la solución barren. Esto se
puede ver comparando los perfiles en las series 2, 8 y 9, donde la relación de mejoramiento
se varió de 610 a 1000 a 1420, lo que resultó en un aumento de las pérdidas de oro soluble
de 0.001 a 0.003 a 0.007mg / L. Sin embargo, como se puede ver en la Corrida No. 10, es
posible lograr una alta carga de oro en el carbón (7000 g/t) y bajos contenidos de oro en la
solución barren (0.002mg / L) mediante la instalación de un tanque CIP adicional. Para
llegar a un diseño económico óptimo, se puede hacer un análisis de compensación simple
de la penalización de costo de capital de un tanque de CIP adicional frente al beneficio de
costo de operación de por vida de un menor flujo de carbón para la elución y regeneración.
5. La carga de carbón activado con cianuro de oro es una reacción reversible y, por lo
tanto, la cantidad de oro en el carbón en cualquier tanque CIP afecta la tasa de adsorción de
oro en ese carbón. Este efecto es más crítico en la última etapa de adsorción de CIP, porque
el oro que no se extrae se pierde en las colas o relaves. Por lo tanto, para lograr
consistentemente bajas pérdidas estériles, es importante mantener una baja concentración
de oro en el carbono en la última etapa, lo que significa que el carbón siempre debe ser
eluido de manera eficiente. Esto se ilustra en la Corrida 11, donde se puede ver que el
aumento de la cantidad de oro en el carbón eluido que se recicla al CIP 6 de 0 a 50 g/t
resultó en un aumento de las pérdidas solubles de 0.003mg/L (Corrida No. 2) a 0.011 mg/L.
Algunas plantas CIP operativas incluso luchan por eluir su carbono a menos de 100 g/t, y
esto obviamente afecta negativamente la recuperación de oro en esas operaciones.
6. El "costo" metalúrgico de operar la sección de adsorción de CIP a una alta densidad
de pulpa se ilustra en las dos perfiles de la prueba 3 en la figura 3, donde las pérdidas
predecibles de oro soluble aumentaron de 0,003 mg/L a 0,019 mg/L cuando la densidad de
la pulpa se incrementó del 50 % al 60 % de sólidos. Para una planta que trate 250,000 t/mes
de mineral, esto equivale a una pérdida neta de oro de 2.7 kg / mes, que vale casi $ USD
100,000/mes a un precio de oro de $ 1,300 / oz. Contra esta pérdida, el beneficio de costo
de operar a una mayor densidad de pulpa se realiza en tanques CIP más pequeños (700 m3
a 60 % de sólidos versus 930 m3 a 50 % de sólidos) y una disminución en la cantidad de
carbono que avanza a la elución y regeneración (5.6 ton/día frente a 8,3 ton día), lo que
reduce tanto los costos de capital como los costos operativos. Las series 12 y 13 en las
Figuras 4-6 muestran que la planta CIP de hecho puede operarse a una mayor densidad de
pulpa (60 %) sin sufrir mayores pérdidas de oro en los campos. En Corrida 12 bajos
contenidos de Au en las soluciones barren, se lograron en las mismas condiciones
operativas que la Prueba 3, al aumentar el número de tanques CIP de 6 a 8 etapas. En la
Corrida 13 se lograron bajos contenidos de Au en la solución barren, aumentando la tasa de
avance de carbono y reduciendo el oro en el carbón cargado de 7000 g/t a 4,000 g/t. En el
último caso, la ventaja de una planta de elución / regeneración más pequeña se pierde, pero
todavía hay una ventaja de costo de capital. Ganado de los tanques más pequeños CIP.
CIP o CIL?
La cuestión de si una nueva planta de adsorción de carbono debe ser CIP o CIL se plantea
frecuentemente para los proyectos actuales e inclusive los que están en operación. En una
planta CIP, la lixiviación se completa antes del primer tanque de adsorción, y el oro se
recupera de la pulpa lixiviada en una serie de (típicamente) 4–10 tanques dedicados a la
adsorción de carbón. En una planta de CIL, el carbono se agrega directamente a los tanques
de lixiviación, con la ventaja reclamada de reducir los costos de capital al eliminar los
tanques de adsorción CIP. Pero hay desventajas en el funcionamiento en modo CIL que
deben tenerse en cuenta al seleccionar el mejor proceso (CIP o CIL) para una aplicación en
particular. Como se señaló anteriormente, la tasa de adsorción del cianuro de oro sobre el
carbón activado es lenta en todas las condiciones y es proporcional a la concentración de
oro en la solución. En una planta CIL, una proporción del oro lixiviable aún no se ha
lixiviado cuando la mezcla se encuentra por primera vez con el carbón activado, y la fuerza
cinética de la adsorción disminuye respecto a una planta CIP donde todo el oro lixiviable
está en solución antes de la primera absorción de carbono. Esto provoca un mayor retraso
de la ya lenta tasa de adsorción de oro en el carbono en una planta CIL en comparación con
el CIP.
Una segunda desventaja del proceso CIL es el hecho de que los tanques de adsorción de
carbón son típicamente al menos cinco veces más grandes que los tanques de adsorción CIP
(porque están diseñados para tiempo de residencia en lixiviación, en lugar de tiempo de
residencia de adsorción). En consecuencia, la concentración de carbón en la pulpa puede
ser cinco veces menor en CIL que en el CIP para un inventario de carbón equivalente en la
planta y esto se traduce en mayores costos de bombeo cuando el carbón avanza a través del
circuito, y una mayor mezcla de la pulpa con una baja concentración de oro se bombea el
circuito en un tanque con un mayor contenido de oro.
La cinética de adsorción de cianuro de oro más lenta en CIL se puede compensar
incrementando la cantidad de carbón activado que se encuentra en la planta. El modelo
SGS predice que se necesita significativamente más carbón para una planta CIL que para
una planta CIP, para el mismo rendimiento metalúrgico. Por lo que respecta a la
experiencia, el CIL es muy competitivo con el CIP cuando el mineral presenta pregrobbing
o se está lavando por la borda o cuando la tasa de lixiviación es muy rápida. En este
sentido, una "regla de oro" útil es que al menos el 80 – 90 % del oro lixiviable debe estar en
solución antes del primer tanque de adsorción de CIL, y esta cantidad de capacidad de
lixiviación siempre debe diseñarse en el circuito. Si la tasa de lixiviación es demasiado
lenta para cumplir con este requisito, es casi seguro que el CIP producirá costos operativos
y de capital más bajos que el CIL, para un rendimiento de extracción de oro equivalente.
Esto se debe a menores inventarios de carbón, menos bloqueo de oro en el circuito de
adsorción, más el potencial de una mayor carga de oro en el carbón y menores instalaciones
de elución y regeneración en una planta CIP.
El ejemplo presentado en la Figura 7 se tomó de un estudio realizado por SGS Minerales,
para una nueva planta de oro, en la que se molerían al año aproximadamente 2 millones de
toneladas de mineral con una ley de 2 g/t de oro por año y se procesaría a través de un CIL
o un Planta CIP. La densidad de pulpa óptima (45 % de sólidos) se estableció mediante
pruebas de reología, y luego se determinaron los perfiles cinéticos de lixiviación y
adsorción a la densidad de pulpa óptima. Los mismos criterios operativos se establecieron
inicialmente para las plantas CIL y CIP (tiempo total de lixiviación, número de etapas de
adsorción, inventario de carbón, relación de mejoramiento de oro, etc.), y se aplicaron tanto
al modelo CIL como al modelo CIP. Estos criterios y los perfiles de predicción se
identifican como "CIL 1" y "CIP" en la Tabla 8.
Los perfiles de oro en solución para '' CIL 1 '' y '' CIP '' muestran que la planta CIL tuvo un
desempeño pobre en comparación con la planta CIP, bajo el mismo régimen operativo, con
pérdidas de solución estéril de oro previstas de 0.09 mg/L CIL versus 0.01 mg / L para la
planta de CIP. Esta diferencia fue equivalente a casi 200 kg de pérdidas de oro por año, lo
que equivale a 7 millones de dólares al precio actual del oro. Estos incluyen casi duplicar el
inventario de carbón de 7.5 a 14.5 t/etapa, duplicar la cantidad de oro encerrado en la planta
y aumentar el número de etapas de adsorción de 6 a 7.
Conclusiones