PREGUNTA LARGA EXAMEN 1 PRIMER TRIMESTRE - CAUSAS DEL IMPERIALISMO

A lo largo del siglo XIX, Europa, EEUU y Japón inician un proceso de expansión territorial con el que
ocupan gran parte de Asia y África. Tras el triunfo de la 2 revolución industrial en esas potencias, se
necesitan materias primas baratas, mano de obra casi esclava y lugares donde colocar los excedentes.
La consecuencia más evidente es la rivalidad entre países europeos, estas tensiones llevan a la I Guerra
Mundial. También, el dominio europeo hace que la cultura occidental se asiente en gran parte del mundo
colaborando con la globalización al aniquilar gran cantidad de culturas y formas tradicionales.

En el último cuarto del siglo XIX se inició un proceso de dominio político, militar y económico de grandes
territorios de Asia y África por parte de países industrializados de Europa, EE.UU. y Japón. Este
fenómeno se conoce como imperialismo, frente al colonialismo de los siglos anteriores, en el que, con la
excepción del Imperio español de América, predomina el intercambio de mercancías sin ambiciones
territoriales. Durante 60 años, a partir de 1815, no hubo importantes rivalidades coloniales, en cambio,
desde 1880, las cuestiones coloniales se situaron de nuevo en primer plano y las potencias industriales
emprendieron una carrera de ocupaciones territoriales. Este proceso culminó, a principios del siglo XX,
con la colonización de África y Asia. A lo largo de este proceso hubo momentos de fuerte tensión entre
las potencias, siendo una de las causas del estallido de la I Guerra Mundial.

Son muchas las causas que influyen en el surgimiento de esta expansión territorial, estas son las
principales y más importantes:
En primer lugar están las económicas; Marx señaló que el colonialismo era una fase de maduración del
sistema capitalista, pues la creciente competencia capitalista derivó en la caída de la tasa de beneficio.
De este modo hubo que buscar fuera mercados y materias primas baratas necesarias. Y esto sólo se
podía realizar fuera de Europa. Lo esencial sería obtener mercados, que permitieran recomponer la tasa
de beneficio, que como dijo Chamberlain el imperio es el mercado.
Sabemos que por 1873 se cambia de tendencia económica, entrando en una etapa de depresión
económica, con descenso de precios y de márgenes de beneficio. Inglaterra, Francia, Bélgica, Alemania,
Holanda... buscan nuevas zonas de inversión de capitales, además de suministrar de materias primas
muy baratas, se arrebatan a la población, a la que se obliga a trabajar en semiesclavitud.

Otro factor son las causas demográficas, en la que la población europea entró en una fase de rápido
crecimiento demográfico, por la caída de la mortalidad y el mantenimiento de tasas de natalidad
elevadas. Además, la mecanización del campo hizo que millones de agricultores se arruinaran, lo que
originó un éxodo rural y grandes migraciones intercontinentales.

También estaban los factores políticos, lo primordial era evitar quedarse atrás en el reparto, como
medida preventiva para evitar el excesivo crecimiento de países rivales. En otros casos, se trata de
trazar una ruta que facilite el transporte de mercancías y de armas de una zona importante a otra.

Finalmente se encuentran las causas ideológicas, en las que existía una base ideológica que justificaba,
la expansión, conocida como la misión providencial con la obligación del hombre blanco de educar y
civilizar a los pueblos que consideraba atrasados e incultos. Esta creencia se basaba en la absoluta
confianza, en el desarrollo cultural y tecnológico europeo. Las doctrinas racistas, la espectacular ventaja
en ciencia y tecnología invitaba a las potencias occidentales a identificar civilización con el color de su
piel, apoyado por teorías pseudocientíficas como el darwinismo social.
La expansión de Iglesias reformistas, daban gran importancia a la actividad misionera.
Interés científico por conocer las áreas inexploradas con personajes como Stanley o Livingstone. La
colonización contó con el apoyo de las burguesías y el pueblo, fácilmente manipulado por la prensa. En
contra básicamente, los anarquistas y socialistas como pueden ser Jaurès o Lenin y algunos
pensadores.