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PROBLEMÁTICA ECONÓMICA, POLÍTICA Y SOCIAL CONFRONTADA POR LA CUARTA REPÚBLICA EN SUS INICIOS:

Ley de haberes militares

Surgen con el decreto de Simón Bolívar, de fecha 10 de octubre de 1817, mediante el cual se establece la confiscación de
los bienes de los enemigos, españoles y americanos realistas, con la finalidad de ser repartidos y adjudicados entre los
miembros del ejército de la Republica como recompensa por los servicios prestados a la patria dicha repartición se debía
hacer con arreglo a los grados obtenidos en la campaña libertadora. El Congreso de Valencia 05 agosto 1830 derogó la ley
de Confiscación de Bienes, con la finalidad de que cesaran las adjudicaciones que se hacían a los principales acreedores y
tenedores de haberes militares. Sin embargo, se observa que después de este año se encuentran adjudicaciones emitidas
por la Secretaria de Hacienda. Esta figura jurídica al igual que la Enajenación de tierras Baldías, representan una forma de
traslación de propiedades considerada una fuente de primera mano de invalorable importancia para el estudio histórico de
la tenencia de la tierra en Venezuela.

Las intenciones de Bolívar de profundizar la Reforma Agraria son reflejadas por primera vez en el mensaje al Consejo de
Estado de Angostura: Los soldados del Ejército Libertador eran demasiado acreedores a las recompensas del gobierno para
que hubiese podido olvidarlos. Hombres que han arrastrado todos los peligros, que han abandonado todos los bienes, que
han sufrido todos los males, no debían quedar sin el justo galardón que merece su desprendimiento, su valor, su virtud.

Los haberes militares

Sueldo y demás emolumentos que percibe el personal militar, Remuneraciones al personal que desempeña sus servicios
en el ejército, fuerza aérea y armada nacionales, de conformidad al porcentaje que autoriza la Secretaría de Hacienda y
Crédito Público.

En 1817, el Libertador Simón Bolívar emitió el Decreto de Haberes Militares, en el que ordenó asignar a los oficiales
y soldados patriotas todos los bienes raíces e inmuebles secuestrados y confiscados a realistas. El decreto pretendía
“recompensar los servicios de los virtuosos defensores de la República”.

La Revolución de las Reformas

Movimiento insurreccional. Inició el 7 de junio de 1835. Finalizó el 1 de marzo de 1836. Victoria del gobierno constitucional.

Insurrección armada que estalló en junio de 1836, pero que comenzó a prepararse desde el mismo momento de la
proclamación el 9 de febrero de 1835 de José María Vargas como Presidente de la República, luego de derrotar en los
comicios de 1834 a Carlos Soublette, candidato apoyado por José Antonio Páez. En términos generales, en este movimiento
se vieron enfrentadas por el poder dos tendencias diametralmente opuestas, una civilista representada en la figura de
Vargas y la otra militarista encarnada en Santiago Mariño. En relación al ideario de los reformistas, los mismos proclamaban
la bandera del federalismo y el retorno de los fueros militares y religiosos suprimidos durante la primera presidencia de
Páez (1830-1835), a la vez que denunciaban la existencia de una "oligarquía" y de un poder autocrático, que se resumía en
la persona de Páez. En la conspiración participaron además de Mariño, Diego Ibarra, Pedro Briceño Méndez, José Laurencio
Silva, Luis Perú de la Croix y Pedro Carujo, todos insignes próceres de la Independencia.

Si bien la Revolución de las Reformas implicó el enfrentamiento entre civiles y militares, la misma también fue la expresión
de las pugnas entre facciones de las clases dominantes de la Venezuela de entonces. En tal sentido, muchos de los militares
que participaron como reformistas eran a su vez grandes propietarios que habían sido marginados del aparato político y
que habían sido afectados tanto por la eliminación de ciertos privilegios propios de los militares, como la dependencia cada
vez mayor en la que se encontraban con respecto a la burguesía comercial. En definitiva, la Revolución de las Reformas
además de constituir un enfrentamiento entre dos sectores de la clase dominante de la sociedad venezolana, hacendados
contra comerciantes, fue un importante episodio de la lucha del militarismo y el caudillismo.
José Antonio Páez (1831-1835)

Nace en Curpa (Edo. Portuguesa) el 13 de junio de 1790.

Muere en Nueva York (Estados Unidos) el 6 de mayo de 1873.

General en Jefe de la Independencia de Venezuela. Presidente de la República en tres ocasiones. Se le conoció con algunos
de los siguientes calificativos:"El Centauro de los llanos", "El León de Payara" y "El Taita". La historiografía tradicional lo ha
acusado (¿injustamente?) de traicionar a Simón Bolívar, por encabezar en 1826 el movimiento denominado como "La
Cosiata", el cual buscó separar a Venezuela de la Gran Colombia. La figura de Páez dominó la escena política venezolana a
partir de la Batalla de Carabobo en 1821, hasta el Tratado de Coche en 1863, cuando concluyó la Guerra Federal.

Presidencias

El 24 de marzo de 1831 Páez fue electo presidente constitucional de Venezuela por 136 votos de los 158 sufragantes
surgidos de las asambleas electorales. En este primer gobierno, llevó a cabo una labor organizadora del Estado, con medidas
administrativas en materia de impuestos, inmigración, liberalización del crédito, educación, orden público, y asuntos
internacionales. Durante este período, Páez enfrentó dos crisis: la resistencia a jurar la constitución por parte del Arzobispo
de Caracas, Ramón Ignacio Méndez, que terminó con la expulsión de éste, y el alzamiento de los generales José Tadeo
Monagas y José Gregorio Monagas (primero con el pretexto de restituir la Gran Colombia y luego en favor de la autonomía
de un Estado Oriental) que fue contenido militarmente y concluyó con un convenio entre Páez y los jefes orientales.

En 1835 entregó el poder a su oponente José María Vargas. Ese mismo año aplacó la insurreción militar conocida como la
Revolución de las Reformas, colocándose del lado del gobierno constitucional y del derrocado presidente.

DR. JOSÉ MARÍA VARGAS (1835-1836)

Nace en La Guaira (Edo. Vargas) el 10.3.1786, Muere en Nueva York (Estados Unidos) el 13.7.1854

Fue médico cirujano, científico, catedrático y rector de la Universidad de Caracas, además de político, escritor y presidente
de Venezuela. Su presidencia es recordada como la primera ejercida por un civil y opositor al gobierno anterior. En ese
sentido se aspiró a reforzar la institucionalidad del país a través de un hombre no proveniente del mundo militar.

Primer presidente civil de Venezuela

En 1834, cuando se comienza a hablar de los candidatos para el período presidencial (1835-1839), su nombre se mencionó
con gran insistencia sobre todo en los círculos intelectuales, lo que de alguna manera expresaba cierta actitud
antimilitarista. En otras palabras, para 1835 en Venezuela el papel protagónico de la vida política era ejercido por los jefes
militares que habían tomado parte en la Independencia venezolana y de otros países en la región. Por tal motivo, ciertos
sectores de la sociedad venezolana que veían con desconfianza a esta multitud de hombres que tenían lógicas ambiciones
políticas y de poder, trataron de reforzar el poder civil mediante la prestigiosa figura de José María Vargas. En este sentido,
la opinión pública caraqueña y nacional, comenzaron a presionar sistemáticamente a un reticente Vargas para que aceptara
la primera magistratura, a lo que accedió finalmente. Fue electo presidente en las elecciones de 1834, voto ratificado por
el Congreso el 6 de febrero de 1835 y se encargó de la presidencia el día 9. Posteriormente el 8 de julio de 1835 estalló la
llamada "Revolución de las Reformas" que lo depuso del cargo y lo envió exiliado a Saint Thomas.

La política de haberes militares en el Departamento de Venezuela (1819-1830)

los haberes militares sirvieron para catalizar las crecientes tensiones sociales en la posindependencia.

Los haberes militares es un tema que ha sido referido en diversos contextos de la historiografía venezolana. La función del
haber militar fue saldar la deuda del Estado nacional con los soldados y la oficialidad por servicios de guerra.

Las grandes casas, haciendas o hatos quedaban en manos de la alta oficialidad como los generales en jefe, de división y de
brigada, así como en las de los coroneles, tenientes coroneles, y mayores y capitanes. Para los rangos bajos, fueron más
difíciles los procesos de reconocimiento de los haberes, porque su relación en el poder era menor. Para otorgar estos
haberes se hacían inventarios exhaustivos, contabilizando todo lo entregado para saldar lo adeudado por parte del Estado.
De igual manera, sirvieron para concentrar propiedades en pocas personas, que eran quienes podían comprar sus haberes
por precios ínfimos y procesarlos luego con inmensas ganancias. En las descripciones de los rituales tanto de asignación
por méritos y servicios como de posesión de la tierra de estos haberes, se mantiene la herencia hispana. Con la tierra
simbólicamente se arrancaba monte y preguntaba a los cuatro vientos, y alguien hacía oposición o no al proceso. Se puede
afirmar que la modernidad estableció un cambio profundo en la subjetividad, que pervivió en la independencia. El tema de
la incidencia de los haberes militares es de actualidad. Muchas de estas propiedades aún son susceptibles de disputa legal
porque conforman parte de las sucesiones de propiedades productivas en diversas partes de Venezuela, muchas veces
partidas en diversas posesiones.

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