Mi primer taller de cocina, fue un dia especial ya que después de tantos meses volver a

pisar el piso de la universidad es muy reconfortante, a pesar de que el profesor no tenía el

taller como se estipula se logró llevar a cabo grandes platos de comida.

Empezamos a diferenciar un poco los cortes de las carnes que nos dieron, saber que para
cortar bien la carne debemos tener bien afilado el cuchillo o sino de lo contrario podemos
dañar el corte, luego se afirma que para condimentar la carne solo debemos aplicar sal,
pimienta y salsa negra, empezamos a repartir trabajos en la cocina por brigadas como lo fue
con el puré de papa, las carnes, salsa pomodoro, ensalada y un biffe de atún con tostadas,
aprendimos demasiado en el paso de las horas como lo fue el tener en orden la cocina,
todos íbamos terminando las actividades y al final el profesor se dirigió a enseñarnos a
emplatar de una forma correcta como por ejemplo la proteína debe ir en la parte inferior del
plato y ningún elemento debe salir de la marca que trae el mismo, al emplatar podemos
jugar con cada una de las cosas, como por ejemplo el puré de papa se pudo hacer
cuadrados para dar una nueva forma y para decorar, una hojas de perejil. Es emocionante
recordar y solo desear volver de nuevo a la cocina.