Analisis y reflexión: Está

claro como ganar o perder con la renta variable

pero ¿cómo se puede perder dinero en renta fija cuando es fija?
La renta fija no es más que deuda. Cuando hablamos de ello, nos referimos a los problemas de
endeudamiento de empresas o países que se endeudan con ciudadanos e instituciones para
financiar su crecimiento u operaciones. En nuestra mente, la renta fija a menudo se asocia con
inversiones "estables" o "seguras", ya que implica prestar dinero a empresas o gobiernos a cambio
de intereses, o lo que llamamos "cupones", y se espera que nos den el dinero prestado después de
un cierto período de tiempo. Es decir, se llama "renta fija" porque si no hacemos nada, si no
vendemos ese bono a nadie y lo mantenemos hasta que vence el préstamo, el rendimiento es fijo,
es decir, lo sabemos desde el momento en que invertimos. Siempre que sacamos dinero de
nuestros bolsillos para hacer algo, existe cierto riesgo: la recompensa que obtengo no vale el
precio que pago, ya que se deteriora rápidamente con el tiempo.

Lo mismo ocurre con la renta fija, que está sujeta a diferentes factores de riesgo. El más evidente
es el riesgo de contraparte: la empresa o el gobierno al que le prestamos dinero no nos devolvió o
nos devolvió menos de lo acordado. En este punto, los riesgos fundamentales para la renta fija
son: la inflación, las subidas de tipos de interés y el miedo a la incertidumbre, todas señales de que
la renta fija ha tenido un rendimiento inferior durante el año.

Uno de los conceptos erróneos más comunes es que invertir en renta fija es una inversión sin
riesgo. Cualquier producto de inversión contiene más o menos riesgo. En concreto, los principales
riesgos asumidos son:

El riesgo de mercado, siendo la probabilidad de que los valores se negocien a un precio inferior al
que pagamos por ellos. La volatilidad de los precios de la renta fija cotizada depende en primer
lugar de la evolución de los tipos de interés, las condiciones del mercado y las condiciones
económicas generales.

También tenemos el riesgo de Liquidez, siendo el riesgo de que no se encuentre una contraparte
en el mercado y por lo tanto no se pueda vender el producto.

Para finalizar, tenemos el riesgo de crédito, el cual es el riesgo de que el emisor no pueda
recuperar los intereses y/o el principal de la inversión.