Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Jorge Cardeña
17 de Junio de 2015
Los dos mejores números reales e irracionales conocidos y más importantes son π y e.
En esta sección, mostraremos que ambos números son trascendentales sobre Q.
El conocimiento de que existen números irracionales
√ puede ser remontado atrás a la prue-
ba de Pitágoras hace más de 2000 años de que 2 es irracional. Sin embargo, no sabı́an
si π era racional hasta 1761, cuando Lambert demostró que π es irracional. Euler, des-
pués del encuentro de una expresión de fracción continuada para la e, creyó que la e
era irracional, pero no fue capaz de demostrarlo. En 1767, Lam-Bert dio una prueba que
la e era irracional. Hasta ahora, la gente sospechó que no todos los números eran alge-
braicos. La existencia de números trascendentes dejó un asunto por resolver hasta que
Liouville en 1844 viniera a levantar un criterio para un número complejo para ser alge-
braico y mostró que los números trascendentes realmente existen. El método de Liouville
mostró que números cuya extensión decimal
P∞ contenı́a una larga fila de 00 s es trascendental.
Por ejemplo, su método demostró que n=1 10−n! es trascendental. La confirmación de
que un número particular, como π y e, es trascendental es otra materia. La trascendencia
de e no fue demostrada hasta 1873, cuando Hermite dio una prueba. Nueve años más
tarde, Lindemann usó el método de Hermite para demostrar que π es trascendental. En
esta sección, damos un resultado más general de Lindemann que implica la trascendencia
tanto de e como de π. Weierstrass dio a una prueba más detallada de este resultado en
1895 y a menudo está bajo el nombre del teorema Lindemann-Weierstrass. En realidad,
damos una versión alternativa de este teorema que es un poco más fácil para demostrar
que la versión original. La prueba del teorema Lindemann-Weierstras requiere algún análi-
sis, incluyendo integración compleja, con la teorı́a de Galois.
1
r
X
0= cj eσi (βj )
j=0
o
Z a
a
F (a) − e F (0) = e a
e−x f (x)dx.
0
Definimos
" r #p
(b1 · · · br )prn p−1 Y
f (x) = x gj (x) .
(p − 1)! j=1
2
0 = f (0) = f 0 (0) = · · · = f (p−2) (0)
" r #p
Y
mientras f (p−1) (0) = (b1 · · · br )prn gj (0) 6= 0. Sea p el primo mayor que máx{bj , gi (0)}rj=1
j=1
(p−1)
tal que p no divide a f (0). Sin embargo, para t ≥ p, el polinomio
donde ht (x) ∈ Z[x], es de grado a lo P más prn − 1. Entonces, f (t) (0) es divisible por p
para t ≥ p; de ahı́, F (0) = f (p−1) (0) + j6=p−1 f (j) (0) no es divisible por p.
Si restringimos p aún más, de modo que p > n y p > c0 , entonces p no divide a nc0 F (0).
Completaremos la prueba mostrando que la primera suma en (3) es un número entero
divisible por p y que el lado derecho de la misma en 0 como en p se hace grande. Esto
mostrará que el lado izquierdo es al menos 1 en el valor absoluto, que entonces dará una
contradicción.
Ahora mostramos que rj=1 cj ni=1 F (σi (γP
P P
j )) es un número entero divisible por p. Ha-
cemos esto demostrando que cada término ni=1 F (σi (γj )) es un número entero divisible
por p. Ahora:
n
X n
XX
F (σi (γj )) = f (k) (σi (γj )).
i=1 k i=1
p
De ahı́ (gj (x)) divide a f (x) y cada σi (γj ) es una raı́z de gj (x), vemos que
Sin embargo, esta suma Pnes invariante bajo la acción Gal(K/Q), entonces es un núme-
prn
ro racional. Además, i=1 (b1 · · · br ) ht (xi ) es un polinomio simétrico en x1 , . . . , xn de
grado a lo más prn−1. Las σi (γj ) son raı́ces del polinomio gj (x), cuyo coeficiente principal
es bj , tal que la segunda suma en (4) es en realidad un número entero por una aplica-
ción del teorema de función simétrica. Éste demuestra que rj=1 cj ni=1 F (σi (γj )) es un
P P
número entero divisible por p; de ahı́, el lado izquierdo de (3) es un número entero no
nulo, es decir que
Xn X r Z σi (γj )
cj eσi (γj ) e−z f (z)dz ≥ 1 .
i=1 j=1 0
Sea
m1 = máx{|cj |},
j
m2 = máx{eσi (γj ) },
i,j
3
m4 = máxs∈[0,1] {|e−z | : z = sσi (γj )},
( r )
Y
m5 = máxs∈[0,1] |gj (z)| : z = sσi (γj ) .
j=1
Sobre el camino constante de 0 a σi (γj ) tenemos la cota |z p−1 | ≤ |σi (γj )|p−1 ≤ m3p−1 .
Esto nos da la desigualdad
Z
σi (γj ) (b1 · · · br )prn p−1 p
−z
e f (z)dz ≤ m3 m4 m3 m5
(p − 1)!
0
(b1 · · · br )prn
= m4 (m3 m5 )p .
(p − 1)!
Combinando esto con la desigualdad anterior da
Xn Xr Z σi (γj )
1≤ cj eσi (γj ) e−z f (z)dz
i=1 j=1 0
(b1 · · · br )prn
≤ rnm1 m2 m4 (m3 m5 )p
(p − 1)!
((b1 · · · br )rn m3 m5 )p
≤ rnm1 m2 m4 .
(p − 1)!