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JUAN DAVID LOZANO OSPINA DERECHO DIURNO

La historia de las cosas

Este es un video creado y subido a la plataforma YouTube por la organización sin


ánimo de lucro The Story of Stuff Project, en el cual aparece la economista Annie
Leonard explicando detalladamente el proceso de la economía de materiales. Este
sistema parece funcionar, sin embargo, deja bastante que desear.
En cada fase el sistema que se presentará a continuación están involucradas personas,
el problema surge cuando algunas son escuchadas y otras no, e incluso son
silenciadas. Adentrémonos entonces en este sistema aparentemente lineal. Lo primero
que ocurre es la extracción (forma elegante de destruir el medio ambiente); se extraen
las materias primas en forma de madera, metales, agua, las cuales han venido en
aumento generando que se gasten un tercio de recursos naturales del planeta. Como
segunda instancia, aparece la producción, aquí se usan varios químicos tóxicos que
contaminan el ambiente e incluso las personas.
A lo largo del sistema no solo de desechan recursos también personas que se ven
obligados a trabajar en estas fábricas en condiciones precarias. Luego, llega la
distribución, en la cual el objetivo es mantener un alto flujo de inventario y precios
bajos, todo esto mientras las personas siguen comprando. La inmensa mayoría de
países capitalistas ponen como un valor esencial el consumismo, hacen de un ritual la
compra. Esto es el corazón del sistema. Una de las herramientas para mantener este
alto flujo de compras es la obsolencia programada, es decir, se diseñan cosas para
desecharlas, para que sean inútiles lo más pronto posible. Esto trae un apoyo por parte
de los medios de comunicación los cuales incentivan la compra excesiva.
Lo último es la disposición, toda la basura se arroja en un relleno (gran agujero en el
suelo), o incluso se incineran antes de esto generando aún más contaminación con
tóxicos más fuertes de los producidos en la producción, estos son llamados dioxinas.
El reciclaje por supuesto que ayuda a disminuir la basura incinerada, sin embargo, no
es suficiente. Lo que realmente tenemos que desechar es la vieja escuela del derroche,
ahora existen energías renovables, química verde, basura cero, producción de ciclo
cerrado, todos estos sistemas nuevos favorecen a la sustentabilidad, pero nada de eso
funcionaría si no ponemos de nuestra parte.

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