Entrenamiento Pastoral

ENTRENAMIENTO PASTORAL 1
Entrenamiento
Pastoral
Planeación y Organización
Para una Iglesia Creciente
Por
Ariel Romero
Derechos Reservados
© 2003 Producciones Gloria Postrera
HECHO EN MÉXICO
© 2003 PRODUCCIONES GLORIA POSTRERA. EL TEXTO Y ARTE DE ESTA OBRA LITERARIA SON PROPIEDAD
EXCLUSIVA DEL AUTOR.
PROHIBIDA LA REPRODUCCIÓN PARCIAL O TOTAL.
CONTENIDO
Pág.
INTRODUCCIÓN 3
Capítulo 1 EL PROPÓSITO Y PROGRAMA DE LA IGLESIA 4

Cómo se Estructura y Funciona la Congregación Local
Capítulo 2 EL EVANGELISMO PASTORAL 10

Como Producir Ovejas y Reproducir Obreros
Capítulo 3 EL CRECIMIENTO DE LA IGLESIA 15

Cómo Ganar Almas e Incrementar la Membresía
Capítulo 4 LA ASIMILACIÓN DE NUEVOS MIEMBROS 19

Cómo Retener a los Recién Convertidos
Capítulo 5 LA ENSEÑANZA DE LA PALABRA 26

Cómo Edificar y Solidificar a los Creyentes en la Verdad
Capítulo 6 EL MINISTERIO A LA HUMANIDAD DEL CREYENTE 32

Cómo Atender y Mejorar a los Cristianos Como
Individuos en sus Áreas Personales Individuales
Capítulo 7 EL MINISTERIO A LOS HOMBRES Y A LAS MUJERES 35
Capítulo 8 EL MINISTERIO DE JÓVENES Y DE NIÑOS 40
Capítulo 9 EL ALCANCE FAMILIAR 44

Cómo Ministrar y Aconsejar a la Familia
Capítulo 10 LA SANIDAD Y EDIFICACIÓN DE LOS DOLIDOS 48

Cómo Ministrar a Gente Herida
Capítulo 11 LOS LÍDERES DE LA IGLESIA 53

Cómo Escoger a Nuestros Ayudantes en la Obra
Capítulo 12 LA GUERRA ESPIRITUAL EN LA IGLESIA 58

Cómo Luchar en lo Invisible Para ver una Iglesia Poderosa
INTRODUCCIÓN
LA RAZÓN DEL LIBRO

En este libro trataremos de la planeación y organización del trabajo de la iglesia local, y
veremos la importancia que esto tiene para que la obra de Dios sea realizada de una manera
eficaz y digna del evangelio de Jesucristo.
Para esto, hay cuatro cosas que la iglesia necesita inevitablemente conocer para poder cumplir
con su propósito y fungir correctamente como tal. Estas son:
1. Su naturaleza e identidad: Esto responde a la pregunta: ¿Qué es la Iglesia?
2. Su propósito: Esto responde a la pregunta: ¿Para qué existe la Iglesia?
3. Su trabajo: Esto responde a la pregunta: ¿Qué hace la Iglesia?
4. Su plan de trabajo: Esto responde al pregunta: ¿Cómo hace su trabajo la Iglesia?
Partiremos de la definición de la Iglesia de Cristo en general, y lo iremos aplicando a la iglesia
local, lo cual es lo que específicamente nos ocupa en este libro.
Este libro le servirá a todo pastor cuya congregación no exceda de 200 miembros. Si es más de
esto, es aconsejable que la estrategia cambie, aunque no los principios básicos, bien que deben
ser delegados entre mayor número de personas.
LAS DIVISIONES DEL LIBRO

Los conceptos presentados a continuación se refieren a las 3 cosas básicas por las cuales
existe toda iglesia, a saber, salvar y edificar. Los temas que tratamos aquí tratan de enseñar
algunos preceptos que ayuden a cumplir con dada una de estas áreas; de manera que este libro se
puede dividir en 3 secciones:
SECCIÓN I: SALVAR
SECCION II: EDIFICAR
a) Programas de edificación espiritual.
b) Programas de edificación del área humana del creyente
SECCION III: EQUIPAR
LA HISTORIA DEL LIBRO

Nuestro ministerio posee una visión grande, de expansión y de alcance, una que se puede
definir en metas de miles de miembros y cientos de congregaciones. Los principios plasmados en
esta carpeta son aquellos que nos sirvieron para establecer y crecer nuestras primeras 10 iglesias
locales. Es un curso básico que nuestros primeros 10 pastores llevaron en lecciones mensuales
durante el transcurso de un año, y que les sirvió como base de acción.
Ahora son plasmados en forma de libro para que sirvan al mayor número posible de personas,
especialmente a los obreros del evangelio que dirigen o laboran en las iglesias locales.
LA INTENCIÓN
Hacemos oración para que este libro se convierta en compañero y consejero de muchas
pastores, en especial de aquellos que empiezan en las labores de la mies. Si este libro logra
iluminar y orientar a pastores, obreros y líderes locales acerca de su misión y de cómo llevarla
adelante, habremos logrado nuestro propósito al prepararlo.
¡Que Dios bendiga a quienes estudien estas lecciones¡ Amén.
En el amor del Señor y con la fe que tú serás grandemente usado por Dios,
Rev. Ariel Romero López

Presidente – Fundador
Red Ministerial “Ministerio Vino y Aceite”
Capítulo 1:
EL PROPÓSITO Y PROGRAMA DE LA
IGLESIA
Cómo se Estructura y Funciona la Congregación Local
¿Qué tan importante es el concepto que tenemos de las cosas, para poder saber qué hacer con
ellas o cómo hemos de tratarlas? La Biblia dice: “Como un hombre piensa en su corazón, tal es él”.
Si me defino de un modo o de otro, voy a actuar inevitablemente en concordancia a mi definición.
La organización de una iglesia local se basa en principios y convicciones, es decir, la iglesia no
solo “se mueve y se mueve” sin un propósito definido. Pero antes de saber qué va a hacer la
iglesia y cómo va a hacerlo, la iglesia debe saber qué es y cuál es su propósito. No se puede
planear nada sin saber por qué existimos y para qué estamos aquí; de otro modo, nuestros
mayores esfuerzos no nos llevarían a ningún lado en particular. Saber para qué existe la Iglesia es
importante, no solo conocerlo sino mantenerlo siempre en mente, ya que si no sabemos a dónde
queremos llegar, no sabremos hacia dónde dirigirnos en nuestros planes, programas y esfuerzos.
I. NATURALEZA E IDENTIDAD DE LA IGLESIA

¿Qué es la Iglesia? La Iglesia necesita una descripción clara y detallada de su naturaleza, o
sea, de su proveniencia y de su pertenencia, saber lo que ella es, para no desvirtuar o desviarse
de la imagen y diseño divino. Necesita conocer y manejar con destreza su identidad, es decir, el
conjunto de características que la diferencian de otros grupos de personas en el mundo. Partiendo
desde el punto de vista de que la iglesia local debe ser una extensión del concepto global y del
espectro general de la Iglesia de Jesucristo, nos es necesario revisar lo que es la Iglesia de
Jesucristo.
DEFINICIÓN DE LA IGLESIA DE CRISTO

La verdadera Iglesia es el conjunto de personas que han experimentado el nuevo nacimiento a
través del genuino arrepentimiento de sus pecados y de la invocación del nombre de Jesús (Jn.3:3;
Hch.2:38).
Estas personas han entrado a ser parte del Cuerpo de Cristo por medio de los siguientes
pasos:
- Han puesto su fe en los méritos de la persona del Hijo de Dios para la salvación eterna de su ser,
es decir, han aceptado que la obra de Cristo es el único sacrificio acepto ante Dios para salvar al
hombre (Heb.7:25). Han sido salvos por gracia (Ef.2:8,9).
- Han aceptado el sacrificio de Cristo en la cruz del Calvario es suficiente para limpiarlos de todo
pecado, es decir, han puesto su plena confianza en la obra de Cristo para liberar, sin necesidad de
añadir alguna cosa más (I Jn.1:7).
- Han hecho a Jesús el Señor de sus vidas, es decir, le han entregado el control absoluto de su ser
(Rom.10:8-10).
Estas cosas mencionadas son las que hacen salva y verdaderamente cristiana a una persona,
y dicho sea de paso, cuando una persona lo es, tiene una confirmación interna (Rom.8:16), y da
una muestra externa (II Tim.2:19).
El Cuerpo de Cristo tiene las siguientes características únicas y especiales:
1. La Iglesia proviene de Dios. Es una institución ordenada, protegida y gobernada
divinamente.
2. La Iglesia es espiritual en su asimilación. No está adherido uno a ella por ningún motivo
humano, sea línea genealógica, herencia, obras exteriores, afiliaciones denominacionales,
sacrificios materiales, etc.
3. La Iglesia es única. Es todos-invitativa, pero no todos-inclusiva. Su mensaje excluye o

incluye, según sea recibido por los hombres.
4. La Iglesia es espiritual en su misión . No es un grupo dedicado a ningún otro fin que el de
propagar el reino de Dios. Por esta razón, no debe ser desviada, por ejemplo, hacia hacer
primordialmente obras humanistas, en detrimento de su visión espiritual y de su solemne
responsabilidad eterna. No quiere decir que sus miembros no deban hacerlas por sí, pero
nunca es la visión primordial del grupo, ya que esto opacaría su identidad espiritual, la de
un pueblo llamado a ser santo y edificado con el fin de ser para alabanza de Dios a través
de Jesucristo, listo para promover las enseñanzas del evangelio y mostrar la forma de vida
que agrada a Dios.
5. La Iglesia es cristiana y bíblica . Exalta a Jesucristo solamente como el medio de acercase
a Dios, a través del ministerio del Espíritu Santo.
6. La Iglesia es bíblica. Sostiene el mensaje y las doctrinas puras contenidas en la Palabra de
Dios, la Biblia.
El mensaje puro de Jesucristo y del poder justificador y santificador de su sangre en central y
básico en la vida de la Iglesia, en los siguientes aspectos:
 Es lo único que nos separa de las demás personas como diferentes de ellos, no
costumbres raras ni modismos importados que adoptemos y que nos alejen de nuestra
generación o de nuestra cultura autóctona.
 Es lo único que debe unirnos entre nosotros. Si esto nos une no hay nada más que
pueda separarnos. Es suficiente para considerarnos hermanos unos a otros.
 Debe ser suficiente común denominador para poder tener comunión unos con otros, no
debiendo ya existir entre nosotros diferencias por clases sociales, niveles de educación
secular, por raza, por color, por idioma o por ningún otro aspecto.
DEFINICIÓN DE LA IGLESIA LOCAL

Desprendiéndose de esta definición, proviene la descripción de la “iglesia local”. Esta es un
grupo de personas que se han convertido al Señor en una ciudad o área geográfica mas o menos
definida, y que tienen como propósito cumplir las expectativas divinas anteriores que se refieren a
la Iglesia de Cristo en general. Es un grupo dirigido por un pastor en el que las almas son
atendidas más personalmente según sus necesidades, y así mismo nutridas en la Palabra con
miras de llevarlas a la madurez espiritual cristiana. Son expresiones locales de la Iglesia de Cristo,
los grupos de cristianos que se reúnen en un lugar determinado.
Toda iglesia local debe conformarse al plan global de Dios y sentirse parte del pueblo redimido
de Dios alrededor del mundo y de todas las edades.
II. PROPÓSITO DE LA IGLESIA LOCAL

Luego de definir nuestra identidad, podemos preguntarnos cuál es el propósito de que exista la
Iglesia en esta tierra, es decir, para qué existe, y así poder entender cuál es la intención de que
haya iglesias locales en los pueblos y ciudades. Necesitamos una descripción clara y detallada del
objeto y finalidad para el cuál existimos. Esta meta puede resumirse en tres objetivos principales:
1. SALVAR. La iglesia del Señor en general debe ser una expresión viva de Jesucristo ante este
mundo, una luz a la que puedan acudir los hombres reconociendo estar eternamente perdidos
sin el mensaje y el poder libertador de Jesucristo. Así, el fin primario de la iglesia local es
ganar almas a través de la predicación del evangelio de salvación. Ha de ser una influencia
espiritual en la comunidad en la que está puesta, un recurso disponible y seguro para el que
busca a Dios. Nótense las palabras del Señor en Marcos 16:15,16: “Id por todo el mundo y
predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo”.
2. EDIFICAR. La iglesia local debe ser un centro de nutrición espiritual de los creyentes,
proveyendo un ambiente de comunión fraternal y orden espiritual en el que todo converso
vaya siendo instruido en la fe cristiana y formado en el carácter propio de los hijos de Dios.
Nótense las palabras de Jesús en Mateo 28:19,20: “Por tanto, id, y haced discípulos...
enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado”.
3. EQUIPAR. Reconociendo que todo creyente tiene un trabajo qué hacer en la obra del
ministerio a este mundo, la iglesia local debe ser un centro de equipamiento para los cristianos
en el servicio a Dios, proveyéndoles no solo conocimiento sino el entrenamiento práctico y la
oportunidad de servicio en el campo de ministerio, según cada uno va mostrando capacidad y
fidelidad. Nótense las palabra de Pablo en Efesios 4:12: “A fin de perfeccionar a los santos
para la obra del ministerio”.
Resumiendo, pues, tenemos que la iglesia local debe ser una influencia espiritual salvadora en
la comunidad en la que está puesta, así como un centro de nutrición espiritual para los creyentes,
pero además debe llegar al punto de convertirse en un centro de equipamiento para los creyentes
en su servicio a Dios. La iglesia, pues, existe para salvar, edificar y equipar, como lo vemos en
este diagrama:
LA IGLESIA EXISTE PARA:

1. Salvar. 2. Edificar. 3. Equipar.
CARACTERÍSTICAS QUE DEBE TENER LA CONGREGACIÓN LOCAL

¿Cómo deben ser nuestras congregaciones locales? ¿Qué ambiente debe respirarse en ellas?
Debemos de hacer de nuestras iglesias locales lugares en los que el no creyente sienta suplida su
necesidad de Dios, quede con ganas de pertenecer, y que acepte el evangelio. Así mismo deben
ser lugares en los que los creyentes disfrutemos trabajar para el Señor. Entonces, repitiendo, son
dos las particularidades que deben caracterizar nuestras congregaciones locales. La iglesias deben
ser un lugar:
 Positivo y Efectivo para el Inconverso . Debe ser un lugar en que el no creyente se sienta con
ganas de volver y acepte el evangelio, en el que encuentre la respuesta a su necesidad
espiritual, primordialmente.
 Positivo y Eficiente para el Convertido . Debe ser un lugar en que los creyentes crezcamos y
disfrutemos trabajar para el Señor, y en el que la comunión de los hermanos nos ministre en
el Espíritu Santo.
Lograr este ambiente resultará en una comunidad cristiana saludable, magnética y que glorifica a
Dios a través de un servicio excelente.
III. EL TRABAJO DE LA IGLESIA

Ya que hemos descrito a la Iglesia y precisado su propósito, o sea, sabiendo a dónde debemos
y queremos llegar como Iglesia, estamos entonces listos para preguntarnos: ¿Qué debe hacer la
Iglesia para llegar a la realización de su fin? Necesitamos una descripción clara y detallada acerca
de las cosas o actividades que debe llevar a cabo la Iglesia para llegar al cumplimiento de su
propósito divinamente ordenado.
¿Qué programas debe perseguir la Iglesia para poder cumplir con su misión? Sus actividades
se pueden clasificar en tres tipos, que tienen mucho qué ver con su triple propósito de salvar,
edificar y equipar. Estos son, a saber, programas evangelísticos, programas de edificación y
programas de equipamiento. Veámoslos:
A) PROGRAMAS DE EVANGELISMO
Estos son programas para ganar almas, entre los que pueden estar campañas de evangelismo,
seminarios, conferencias, evangelismo puerta por puerta, escuelas bíblicas de verano, discipulado,
etc. Aquí entran también los programas de seguimiento y asimilación de los nuevos convertidos.
B) PROGRAMAS DE EDIFICACIÓN
Estos programas se dividen en dos:
1. Que Edifican Humanamente. Estos son programas que nutren el núcleo familiar y al
creyente como ser humano. Los hacemos porque creemos que entre más fortalecemos a la
familia, más fortalecemos el reino de Dios. Entre ellos están por ejemplo los departamentos de
niños, de parejas, de jóvenes, de damas, de varones, etc. También entran aquí la consejería,
las conferencias que tratan el área humana de la persona, es decir, con su alma. Aunque
nuestra misión es espiritual y la Iglesia existe primordialmente para llevar almas al cielo, para
ayudar a las personas en su relación vital con Dios y para tratar con el destino eterno de la
gente, de todas maneras atendemos el área humana del hombre, pues es un complemento de
la visión de Dios para su Iglesia. Pablo trató muchos problemas del área humana de los
creyentes.
2. Que Edifican Espiritualmente . Mucho más importante que lo anterior está la responsabilidad
de la Iglesia de edificar al creyente en su área espiritual, para llevarlo a la semejanza de Cristo
y para prepararlo para la venida del Señor. Esta área nunca debe descuidarse por atender la
anterior, porque se desviaría el propósito de la Iglesia. La anterior incluso puede sacrificarse
por esta, en un momento dado. Aquí entran los programas de oración, ayuno, retiros
espirituales, reuniones de avivamiento, estudio bíblico, cursos, conferencias, seminarios,
planes de lectura de la Biblia, etc.
Es muy importante aclarar aquí que en este punto es donde muchas iglesias se desvían de la
visión divina, acudiendo y recurriendo a un tratamiento puramente psicológico de las necesidad de
los congregados. Los tratan solo como personas humanas y se olvidan de luchar por la victoria de
cada uno de ellos con las armas sobrenaturales, de la predicación del evangelio y de la
ministración en el Espíritu Santo. Nunca se debe olvidar que es el espíritu, es decir, el corazón de
la persona, donde está la raíz de sus problemas más profundos. Atender el área humana es solo
un complemento de la visión de Dios para su Iglesia. No debemos olvidarnos de que estamos en
una guerra espiritual y que no vamos a ganarla con armas humanas.
Repetimos: Nuestra misión es espiritual, y la Iglesia existe primordialmente para llevar almas al
cielo, para el bienestar espiritual de las personas en una relación vital con Dios, y trata
principalmente con el destino eterno de la gente.
C) PROGRAMAS DE EQUIPAMIENTO
Estos son programas que entrenan al creyente para hacer la obra del ministerio y le ministran
para hacer un trabajo efectivo para el reino de Dios. En este tipo de programas es importante
mantener la visión de servicio-aprendizaje, es decir, la práctica de envolver a las personas en el
trabajo de la iglesia, al mismo tiempo que les estamos enseñando cómo hacerlo.
Es importante mantener en nuestra mente en todo momento el propósito de la Iglesia, es decir,
la intención de Dios al constituirnos su pueblo, respetando Su anhelo y Su visión, ese objetivo
santo, específico y supremo para el cuál Él nos tiene aquí. Todos nuestros programas deben
apuntar hacia la realización de esa finalidad que tenemos como congregación de Dios. No estamos
obligados ni llamados a realizar cosas que no nos lleven hacia ese fin, y lo que es aún más
importante, tenemos la responsabilidad de defender nuestra misión ante las desviaciones
diabólicas de este mundo o las modas ideológicas de estos tiempos.
IV. EL PLAN DE TRABAJO DE LA IGLESIA

¿Cómo va a realizar la iglesia su trabajo? Necesitamos una descripción clara y detallada del plan
de trabajo que nos llevará a realizar nuestra labor. Con esto dejamos claro que NO es suficiente
saber qué cosas son las que vamos a hacer, sino que también hay qué saber cómo las vamos a
hacer.
PRECISANDO UN BUEN PLAN DE TRABAJO

Planear un trabajo es tener un diseño de las labores de los creyentes que pueda separarse en
tareas específicas, las cuales en conjunto realicen la obra del Señor. El buen plan de trabajo
consiste en hacerse básicamente tres preguntas:
1. Definir y Enfocar. Describir y escribir muy específicamente y con detalle el objeto del
proyecto que se va realizar. Este se puede encontrar respondiendo a las siguientes preguntas:
¿Cuál es el objetivo que tenemos para este proyecto? ¿Qué es lo que queremos lograr?
¿Cuál es el resultado que queremos ver? Así podemos enfocar el esfuerzo de todos hacia un
solo punto.
2. Quebrar y Delegar. Desbaratar “en gajos” el trabajo que se necesita hacer y encargar cada
cosa a las personas que vayamos a ocupar para ello, describiendo muy específicamente a
cada uno su área de responsabilidad.
3. Supervisar y Unir . Revisar constantemente si cada parte está haciendo su trabajo e ir

coordinándolo hacia la meta cabal que se propuso desde el principio.
ELEMENTOS NECESARIOS PARA HACER UN BUEN TRABAJO

¿Qué se necesita hacer para realizar un trabajo bien hecho en cualquiera de los departamentos
o actividades de la iglesia local? Para todo lo que se intenta hacer con excelencia y eficacia dentro
de la congregación, son necesarios dos elementos sin los cuáles todo esfuerzo resultará siempre
dejando mucho qué desear. Estos son:
1. Planeación . Planear es planificar, organizar, preparar, programar, diseñar y estructurar. Es
hacer el plan de algo, el conjunto de cosas que se piensan hacer y la forma de realizarlas.
Para todo lo que se hace es necesario planear con tiempo. Pregúntese antes de querer
realizar una actividad o de anunciarla a la iglesia: “¿Tengo un plan para realizar esta actividad
o proyecto? ¿Cómo lo vamos a hacer? ¿Cuáles son los pasos que hay qué tomar para llegar
al objetivo?” Esto es planear.
2. Organización . Organizar es ordenar, arreglar, montar y armar. Es disponer una serie de
elementos de modo que cada uno de ellos tenga un lugar o una función dentro del conjunto.
Para todo lo que se hace es necesario organizar correctamente el trabajo. Pregúntese antes
de realizar una actividad o de anunciarla a la iglesia: “¿Cuáles diferentes cosas voy a tener
qué hacer y lograr? ¿A quién voy a encargarle cada una de ellas? ¿Nos llevarán todas estas
hacia la realización del proyecto?” Esto es organizar.
CONCLUSIONES:
Los puntos anteriores no solo están arreglados en orden lógico sino de importancia también.
Muchos ministerios generalmente comienzan los pasos anteriores al revés, empezando con
trabajar y trabajar, “sin ton ni son”, y sin tener un propósito claro. Por esta razón se sienten
constantemente frustrados, al parecer que no llegan a ningún lado, por más esfuerzos que hacen y
a pesar de tantos proyectos que emprenden. Es muy necesario revisar constantemente estos
principios para que, si no los estamos logrando, corrijamos nuestros objetivos y métodos; y si ya
los hemos logrado, que nos sintamos satisfechos, aunque les parezca a algunos que no sea
mucho lo que estamos haciendo. Después de todo, es importante sentirnos satisfechos y celebrar
cuando notamos que avanzamos hacia nuestra función asignada por Dios, o cuando estamos
practicándola con eficacia.
La descripción de nuestra naturaleza y de nuestro propósito sirve como un termómetro
espiritual a la iglesia. Hagámonos en todo tiempo preguntas como estas:
- ¿Tenemos siempre presentes nuestros objetivos perfectos como iglesia?
- ¿Estamos avanzando hacia ese fin?
- ¿Estamos ahora más cerca de llegar a ellos que hace un tiempo?
- ¿Nos están llevando hacia el propósito divino las actividades que estamos realizando?
- ¿Cuáles actividades nuevas podríamos adoptar que nos llevarán más clara o más
rápidamente hacia ese fin?
- ¿Qué cosas necesitamos cambiar o desechar para cumplir nuestra misión?
- Etc.
Es vital revisar los medios y métodos bíblicos ya probados en el Nuevo Testamento para
dirigirnos hacia el diseño divino de la iglesia local, tales como implementar el orden de Dios en la
iglesia, la oración y el ayuno, la predicación y la enseñanza de la Palabra de Dios, etc.
PLAN DE TRABAJO:
Como una ayuda adicional, use la hoja que se presenta a continuación para planear eventos
con gran efectividad dentro o fuera de su iglesia. Llena una por cada evento, y presente copias a
su junta de ayudantes.
PLAN DE TRABAJO
PROYECTO: ____________________________________________________________________.
IGLESIA: ___________________________________. Para Fecha: ________________________.
1. DEFINIR Y ENFOCAR.
¿Cuál es el objetivo que tenemos para este proyecto? ¿Qué es lo que queremos lograr? ¿Cuál es el
resultado que deseamos ver? Articularlo claramente, explicarlo bien, escribirlo y enfocar todos los esfuerzos
hacia ello?
Explicación del proyecto:

___________________________________________________________.
Propósito / Finalidad:
______________________________________________________________.
Meta: __________________________________________________________________________.
2. QUEBRAR Y DELEGAR.
¿Qué cosas se van a ocupar hacer para realizar el proyecto? Describirlas específicamente. ¿A quién se le
va a encargar este trabajo? Deslindar y explicar bien su tarea a cada uno. Comprometerlos y
responsabilizarlos de ella.
No. Tarea Persona encargada

1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
3. SUPERVISAR Y UNIR.
¿Han estado desarrollando su papel cada uno de los encargados? ¿Lo están haciendo a tiempo?
Preguntarles, sugerirles y exigirles durante ese tiempo. Tratar de que todo quede completamente listo 15
antes de cada proyecto. Hacer una reunión final en la que se coordine todo. Orar pidiendo la bendición de
Dios.
Tarea Evaluación de Tareas por Semanas Antes del Proyecto Check

No. 1ª. 2ª. 3ª. 4ª. 5ª. 6ª. 7ª. 8ª. 9ª. 10ª. Final
1
2
3
4
5
6
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8
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10
Capítulo 2
EL EVANGELISMO PASTORAL
Como Producir Ovejas y Reproducir Obreros
A veces nos sentamos solo soñando con ser los líderes de una gran iglesia, pero la verdad es
que cando lo seamos será cuando tengamos esa iglesia. No podemos ser organizadores sin gente
a quién organizar, ni realizar grandes planes sin tener la gente que necesitamos para realizarlos.
Primero gane la gente, y luego usted será el líder sobre ellos, como lo ha soñado.
¿Qué puede hacer un pastor, cuando empieza una iglesia, o bien, cuando esta es pequeña,
para ganar a otros para Cristo y aumentar su rebaño?
EL PASTOR COMO PRODUCTOR DE ALMAS

Todo aquel que es llamado a pastorear debe “ganar almas”, de una u otra manera, sea
personalmente o a través de otros. Esta es una de sus responsabilidades bíblicas y espirituales,
como dijo Pablo a Timoteo: “Te encarezco delante del Señor Jesucristo... que prediques la palabra;
que instes a tiempo y fuera de tiempo” (II Tim.4:1,2).
De acuerdo a la métrica bíblica, predicar el evangelio para la salvación de las almas es una
responsabilidad de todo siervo, no solo de los evangelistas o apóstoles, sino también de todo
pastor encargado de una congregación local (I Co.9:16). La tarea de un siervo de Dios es, en su
más sencilla definición, “predicar el evangelio” (Mr.16:15). Esto básicamente quiere decir
“evangelizar” o anunciar las buenas nuevas de salvación (I Co.1:23).
Desde el Antiguo Testamento, el profeta Ezequiel dijo a los pastores que buscaran a las “ovejas
descarriadas”, es decir, las personas que se han apartado del Señor (Ez.34:4-11) [de hecho esta
palabra es un reproche a los pastores]. Luego, el profeta Zacarías nos dice que una cosa que se
supone que un pastor debe hacer es “visitar las ovejas perdidas”, esto es, a los inconversos
(Zac.11:15-17) [esta palabra también es dada como un reproche a los pastores].
En la segunda carta a Timoteo, el apóstol Palo manda a este joven pastor: “Haz obra de
evangelista, cumple tu ministerio” (II Tim.4:5). Aunque hoy el concepto de pastor ha sido a veces
“adaptado” a un papel más de un simple “director”, los predicadores de la iglesia primitiva
entendían su misión primordial el anunciar el evangelio de Jesucristo a las personas para la
salvación eterna de sus almas (Mr.16:20; Hch.8:5). Nosotros, como ministros debemos
acomodarnos a este concepto de ministerio, que es una continuación de la obra empezada por
Jesús (Lc.19:10).
EL PASTOR PRODUCIENDO OVEJAS

Una de las cosas que como pastores a veces no hemos logrado es llegar a la medida de
producir. Hay 2 niveles importantes de efectividad en el liderazgo: Posición y Producción. Veamos
de qué se trata cada uno de ellos:
1. Posición. En este nivel solo tengo la categoría de pastor, y mando sobre los demás
simplemente por la investidura que tengo;
2. Producción. En este segundo nivel ya estoy dando fruto y estoy haciendo que la gente
trabaje también por la salvación de otras almas.
Es necesario preguntarnos ahora mismo: -¿En cuál nivel estoy ahora? ¿Estoy definiendo mi
ministerio solo como una posición, o como una producción? -
CARACTERÍSTICAS DE UN PASTOR PRODUCTOR

El pastor PRODUCTOR DE ALMAS tiene ciertas características, cada una de ellas vitales para
convertirse en un obrero fructífero. Cabe mencionar que si no se poseen en este momento,
pueden ser desarrolladas con esfuerzo y disciplina personal. ¿Cómo es el pastor que produce
almas?
1. Es valiente (Ef.6:19,20). El pastor productor se esfuerza para evangelizar, para movilizar al
pueblo al evangelismo, para organizar campañas, etc. Es arrojado a realizar cosas grandes y
públicas, se abre puertas, se consigue lo que necesita, y no descarta ideas nuevas, aunque
otros no las hayan usado antes.
2. Es desenvuelto (Hch.1:8; 6:8-10). El pastor productor ha perdido las vergüenza mediante un
bautismo de poder en el Espíritu Santo. Se ha desecho de traumas ante las dificultades, de
complejos ante las personas y de temores ante la persecución (Rom.1:16; Hch.4:29-31).
3. Es apasionado (I Co.9:18-23). Tiene pasión por las almas, le duele que se pierdan sus
vecinos, su colonia, su ciudad, así como las familias que la componen. Ama el mensaje que
se le ha confiado, y cree tanto en él que le preocupa que muchos todavía no lo tengan.
4. Sabe relacionarse. Un pastor que triunfa es uno que ha vencido la dificultad de relacionarse
con otras personas. Su carácter ha sido moldeado a la amabilidad, no se siente menos que
los demás ni se amedrenta; gusta de hacer nuevas amigos y no tiene miedo de tratar con
quien sea, con tal de expandir el reino. Se abre a las personas, y su apertura contagia de
confianza a la gente (I Co.9:19-23).
Todos anhelamos crecimiento en nuestra iglesia, pero Dios nunca va a crecer una iglesia sin
una ESTRATEGIA y sin un LIDERAZGO EFECTIVO. Y ambas cosas solo vienen en oración. La
estrategia, el método especial para cada uno de nosotros, lo revela Dios si se lo pedimos y
rogamos, y el liderazgo espiritual efectivo solo se logra buscando un bautismo sobrenatural de
unción que nos haga testificar de Cristo con valentía, y nos haga libres de los obstáculos
emocionales y terrenales.
Recuerde: Una iglesia se desarrollará solo conforme se desarrolla el líder (tanto como pastor,
como predicador, como persona y como obrero).
EL PASTOR HACIENDO QUE LAS OVEJAS PRODUZCAN

A veces como pastores pensamos que el trabajo de ganar almas recae sobre las ovejas. He
oído decir a muchos el dicho: “El pastor no produce ovejas, sino que las ovejas producen ovejas”.
Aunque esto es en cierta forma verdadero, también es cierto que el papel del pastor es
determinante para que la reproducción se dé. Para que las ovejas puedan producir el pastor debe
propiciar el evangelismo, proveer el método, el programa, el ejemplo y el liderazgo necesario para
ganar almas. Las ovejas no van a producir nada más porque se les dice, sino cuando tengan la
motivación para hacerlo.
EVANGELIZANDO COMO PASTOR

Nadie llena una iglesia pensado “quiero llenarla”, sino pensando “quiero ganar almas”. Pero si el
pastor debe ganar almas, ¿cómo ha de hacerlo? ¿Debe salir a la calle inmediatamente a buscar un
alma? Bien puede hacer eso, pero también puede usar su posición de líder y evangelizar como
pastor. La figura de un pastor puede ganar almas de una manera muy especial y peculiar. Hay
muchas cosas que el pastor puede hacer para ganar almas para Cristo.
He aquí algunas ideas que nos servirán mucho, no importando el tamaño de la iglesia que
tengamos, por muy pequeña que sea. Las estrategias se pueden sumar en tres:
a) Evangelismo Personal. Predicar y ganar almas personalmente.
b) Movilización Corporal. Enviar y movilizar a las ovejas a predicar a gente desconocida.
c) Contactos Estratégicos. Hacer contactos usando a la misma gente que tenemos ahora
para alcanzar a otros (lo que hace todo más fácil).
IDEAS DE CONTACTO PASTORAL

He aquí algunas formas efectivas para que el pastor haga contacto con nuevas personas:
1. Cultos Hogar por Hogar. Esto consiste en hacer servicios en las casas de cada una de las
familias de la iglesia, para que estas inviten a los familiares y amigos de esa familia, con el fin
de invitarles a la iglesia y presentarles a Cristo. Aquí la clave es “la mira evangelística”, y hay
qué explicárselo así a los hermanos de las casas donde sea la reunión, que no se trata de
llevarles un culto a su casa, sino hacer una reunión especialmente para alcanzar a otros.
2. Visitas Evangelísticas. Este método se lleva a cabo cuando el pastor visita en momentos
difíciles o de problemas a diferentes casas o familias. Puede pedir a los hermanos que le
hagan saber quiénes de sus parientes están enfermos o necesitados y hacerles una visita
para hablarles de la palabra del Señor. Es fácil hacer contactos de este modo, porque los
mismos hermanos son la puerta de entrada, y no tenemos qué llegar como extraños a los
hogares, sin saber qué hacer ó cómo empezar. En casos como este, los hermanos de la
iglesia debe ir avisando con tiempo al necesitado y a los familiares que el pastor de la iglesia
les va a visitar, para que así se hallen preparados.
3. Visita Sistemática. Esto consiste en visitar metódicamente (bajo un plan o una lista) a todos
los parientes de los hermanos de la iglesia, aunque no haya de momento una necesidad
apremiante en sus vidas. Esta es una visita para presentarles allí el plan de salvación,
invitarlos a la iglesia, introducirlos a los medios que tenemos de ayudarlos (consejería, clases
especiales para los niños, conferencias de jóvenes, reuniones de varones, pláticas de
mujeres, etc.). Si solamente se logra conseguir “el favor” y la simpatía de las personas
inconversas ya se habrá logrado bastante (Hch.2:47), aunque la meta es que esto los lleve a
Cristo.
4. Atendiendo Deberes Pastorales. Esto consiste en ofrecer y usar las ceremonias de la iglesia
para compartir el evangelio. Es una manera muy efectiva de evangelizar. Los hermanos de la
iglesia tienen amigos que no han sido casados por la iglesia, o cuyos niños no han sido
dedicados al Señor. Si los hermanos le investigan y le dan los nombres de esas personas
puede ser la manera de hacer un contacto nuevo y una puerta para aconsejar y presentar el
mensaje del evangelio. También cuando un familiar muere, el servicio fúnebre que consuele
sus corazones puede ser una forma fuerte de empezar una relación con un familiar nueva qué
visitar.
5. Orando por los Enfermos . Esto es evangelizar por medio de ministrar al cuerpo de las
personas enfermas. Esta era una manera en que crecía mucho la iglesia primitiva
(Hch.2:43,47; 5:12-16; 6:7,8). Un pastor tiene una unción especial de sanidad y no debe dejar
pasar una oportunidad de orar por un enfermo, sea en un hospital, en una casa o en la calle
(St.5:14,15). Allí se manifestará Dios y las almas podrán ver que Cristo vive y que es real, que
les ama y es el único Salvador de sus almas (Hch.3:8-10).
A diferencia de otros tipos de ministerio, la ventaja del ministerio del pastor es que puede
ministrar según sea la necesidad de las personas, según lo que la gente está experimentando en
su vida. Estos constituye una preciosa oportunidad de dar el consejo acertado. El pastor no
presenta a Dios en lo general, solamente, sino según lo que la gente necesite en ese momento,
por ejemplo: Liberación, sanidad, consejo, salvación, etc.
POSIBILIDADES SOBRE ENVIAR A LOS HERMANOS

Después de que el pastor de una iglesia ha modelado a los hermanos los que es ganar almas, y
luego que ha ganado un número considerable de ellas, entonces puede comenzar a enviarlas para
que ellos ganen a otros.
¿De qué maneras se puede enviar a los hermanos a predicar? Enviar a la gente es bíblico
(Mt.10:5-8; Lc.10:1,2). He aquí algunas maneras en que el pastor puede hacer esto:
1. Puede enviar a predicar a los hermanos casa por casa. Esto es una manera tremenda de
impactar un territorio dado, o una colonia.
2. Enviar a predicar a los hermanos a las calles. Esto es, colocarlos en lugares estratégicos
donde la gente pasa, o donde se estaciona.
3. Enviar a los hermanos a evangelizar gente de su medio ambiente (estudiantil, profesional,
laboral, social, etc.). Esto se conoce como “evangelismo relacional”, y es muy poderoso.
4. Enviar a los hermanos a os necesitados. Pueden ser lugares como zonas marginadas,
hospitales, cárceles, orfanatos, asilos, etc.
5. Enviar a los hermanos a hacer cultos de hogar, abriendo su casa como hogar de refugio para
los necesitados o interesados de su colonia.
Cabe mencionar que esto de enviar a los hermanos funciona solo si el pastor les provee a los
hermanos la manera de hacerlo, es decir, los medios, por ejemplo algún material y algún plan. El
secreto es este: No nada más se les dice “prediquen”, sino que les provee las herramientas
necesarias para hacerlo, un plan qué desarrollar.
Todo plan de evangelismo para enviar a los hermanos debe incluir LAS 3 “E” DEL ÉXITO:
(a) Entrenamiento. Darles instrucción sobre cómo hacer el trabajo.
(b) Estrategia. Esto es enviarlos en sí, diciéndoles cuándo, hacia dónde y qué.
(c) Evaluación. Pedir cuentas del trabajo encargado y ver como se puede mejorar cada vez
más.
IDEAS INNOVADORAS DE EVANGELISMO

Las formas de ganar un alma son ilimitadas. La dirección del Espíritu (y también el uso de
nuestra iniciativa e inventiva) nos pueden llevar muy lejos. Si reconocemos que aún no podemos
ganar tantas almas como un evangelista, tal vez podamos invitar uno a ministrar en nuestra iglesia.
Organizar campañas es una de las mejores maneras de hacer evangelismo. Sea el coordinador, y
cuando menos “déle su talento a los banqueros” para que ellos lo trabajen, y para que de este
modo su Señor no se enoje con usted (Mt.25:24-30).
EXAMEN PARA ANALIZAR NUESTRO ALCANCE

Para saber si nuestra iglesia tiene lo más básico para alcanzar a otros, hagámonos las
siguientes preguntas.
1. ¿Se le toma el nombre y dirección a cada persona nueva que visita la iglesia?
2. ¿Visita usted (o envía a alguien) a toda persona nueva que llega a la iglesia?
3. ¿Se le da un material o folleto a cada persona que visita la iglesia?
4. ¿Tiene su iglesia folletos evangelísticos y Nuevos Testamentos todo el tiempo?
5. ¿Tiene un folleto de su iglesia con el nombre de la iglesia, nombre del pastor, domicilio y
horario de las reuniones?
6. ¿Tiene sello su iglesia, para los tratados y folletos?
7. ¿Tiene letrero su iglesia (con horario de las reuniones)?
8. ¿Tiene usted tarjetas de presentación?
9. ¿Ha entrenado a sus ujieres o edecanes sobre cómo tratar a los visitantes?
10.¿Tiene usted un programa de evangelismo en su iglesia?
11.¿Saben todos sus vecinos y amigos qué cree su iglesia y qué servicios les ofrece?
Un secreto de alcance es el siguiente: “Sea Visible. Esté Disponible. Hágase Notar. Dése a
Conocer”.
UNA IGLESIA AMISTOSA

Para ganar personas nuevas para Cristo y luego retenerlas, es importante analizar si nuestra
iglesia es amistosa, es decir, si conecta con la gente. Una iglesia que los inconversos puedan
entender y con la que se puedan relacionar tiene por lo general los siguientes elementos:
1. La gente puede sentirse bienvenida, y puede sentirse parte de la acción.
2. Las instalaciones están cómodas, limpias y presentables, y sobre todo funcionales.
3. Las personas no tienen qué aprender nada nuevo para sentirse parte de la adoración.
4. El trato es súper amable con las personas, y se les recibe con una sonrisa.
5. No se le ponen reglas a las personas para congregarse.
6. No se censura a la gente si comete alguna irregularidad un tanto irreverente en la reunión, o
cuando se expresan con naturalidad como ellas son.
7. No se obliga a ninguna persona a dar dinero, no se le presiona para diezmar, no se le obliga a
comprar nada.
8. No se le da un trato necesariamente diferente a los nuevos que a los que congregantes
regulares. Todos se sienten iguales y bienvenidos.
9. Los sermones llevan títulos y contenido totalmente entendible a las personas.
10.El lenguaje de los hermanos es el normal que usan las personas comunes y corrientes, no el
idioma religioso de muchos cristianos, el cuál ellos entienden pero que a otros es un misterio.
PENSAMIENTOS:
“La vida eterna nos es dada gratuitamente, pero la vida terrenal nos pagará conforme a nuestros
esfuerzos”.
“El peor enemigo de tu progreso está en ti mismo: Son tus propios obstáculos para crecer”.
“Hay iglesias que explotan... y hay otras que florecen”.
“Nunca digas: Dios no puede usarme. Si usó a un pescador rudo como Pedro también te puede
usar a ti”.
“Conforme se da el crecimiento personal y espiritual del líder, se da el crecimiento de una iglesia”.
“Pruébalo con lágrimas”.
“No contactos nuevos, potencial limitado; contactos nuevos, potencial ilimitado”.
¿Para qué Existe mi Iglesia?
Para:
1.SALVAR.
2.EDIFICAR.
3.EQUIPAR.
Capítulo 3
EL CRECIMIENTO DE LA IGLESIA
Cómo Ganar Almas e Incrementar la Membresía
Hemos oído todo el tiempo que a Dios lo que le importa es la calidad y no la cantidad. Pero
aunque es cierto que la calidad es más importante que la cantidad, a Dios también le interesa la
cantidad de personas que alcanzamos para él. En muchas partes de la Biblia el Señor nos muestra
que a él le place el incremento y le honra la multiplicación. Por ejemplo:
 A toda la creación Dios mandó que produjera (Gen.1).
 A Adán mandó reproducirse y llenar la tierra (Gen.1:28).
 A Jacob le dijo: “Crece y multiplícate” (Gen.25:11).
 A quien dio talentos pidió cuentas de su ganancia (Mt.25:14ss).
Si el crecimiento de las iglesias cristianas es voluntad de Dios, entonces nosotros debemos
buscar hacer la voluntad de Señor, y procurar aumentar nuestra membresía.
UNA IGLESIA DE MULTITUDES EN AUMENTO

La Iglesia de la cuál somos parte es una que piensa en grande en cuanto a lo que quiere
alcanzar. Nótese la visión de Jesús: Esta consistía en “todas las naciones” (Mt.28:19). Jesús tenía
una congregación inmensa, de miles de personas (Mt.15:32-39; Mr.3:7-9); en el sermón
pentecostés de Pedro se convirtieron 3,000 y “perseveraban” (Hch.2:41,42); y después, con la
curación del cojo se convirtieron 5,000 familias (Hch.4:4). Eran tantos que los gobernantes temían
hacerles algo (4:21; 5:13). Esta clase de personas fueron nuestros predecesores; ahora es nuestro
turno de continuar esta obra en la historia (Jn.4:35-38; Heb.12:22-24).
La iglesia cristiana ha sido desde el comienzo un organismo creciente, y destinado a crecer. La
congregación de los creyentes crecía diariamente, porque dice la Biblia que “el Señor añadía cada
día a la iglesia los que habían de ser salvos” (Hch.2:47), y “los que creían en el Señor aumentaban
más, gran número” (5:14-16). Esta es la clase de iglesia de la que somos parte y debemos
llenarnos de este pensamiento para lograr ganar el mundo.
¡Si Dios nos llamó es porque creyó en nosotros, creyó que podíamos hacer cosas grandes para
él! Dice la Biblia: “Pídeme, y te daré por herencia las naciones, y como posesión tuya los confines
de la tierra” (Sal.2:8). TODA IGLESIA FIEL ESTA DESTINADA A CRECER.
FACTORES DE CRECIMIENTO
Es muy importante en este momento aclarar cuáles son los factores del crecimiento de la
Iglesia, a saber:
1. La Oración. Nada crece sin oración. Jesús dijo: “Separados de mí nada podéis hacer”
(Jn.15:5). La iglesia deber ser, primero (1) enseñada a orar; y segundo, (2) organizada y
movilizada a orar. Las iglesias deben practicar el ayuno, las vigilias de oración, las cadenas de
intercesión, los eventos de oración guerrera, etc.
2. La Enseñanza de la Palabra de Dios . Una iglesia que tiene enseñanza crece, porque la
enseñanza da, primeramente, fundamento a los creyentes, y refuerzo y sostenimiento a los
que se van ganando. Además, el estudio da calidad y buena imagen a la congregación. La
enseñanza consistente de la Palabra de Dios hace entender el evangelio al inconverso,
fortalece y hacer victorioso al recién convertido y libera al oprimido (II Tim.3:14-17). Las
congregaciones deben, primero: (1) Promover constantemente la lectura de la Biblia; (2)
Promover y proveer cursos bíblicos; (3) Entrenar y movilizar maestros para todas las edades;
y finalmente, (4) dar estudios bíblicos en las reuniones de la congregación.
3. El Poder del Espíritu Santo . (Hch.1:8). Ya que Dios es el único que añade a la Iglesia, no
nos queda otra que depender de su poder. El es quien produce la iglesia, y el que da poder a
los hermanos de la congregación para testificar de Cristo. Debemos: (1) Revisar
constantemente cuántos en la congregación ya han experimentado el bautismo en el Espíritu,
y orar para que los otros lo reciban, (2) ministrar con ese poder a los enfermos y oprimidos,
(3) estar clamando para que Dios reparta los dones espirituales, y, (4) dar libertad al Espíritu
de ministrar como él quiera en los cultos.
PENSAMIENTO:
“No te preguntes: ¿Cómo voy a llenar mi iglesia? Pregúntate: ¿Cómo voy a ganar mi colonia o
ciudad? Si te la ganas va a reventar tu iglesia”.
CARACTERÍSTICAS DEL LÍDER QUE CRECE

Un aspecto vital del crecimiento de una iglesia es el líder. En estro es donde en verdad se
decide el futuro y rumbo de una iglesia, Los planes, metas, aspiraciones y fe que tenga quien está
al frente de ella, son decisivos y trascendentales.
“Serás lo que quieras ser, y llegarás hasta donde tú quieras llegar. El cielo es el límite.”
El líder que crece tiene las siguientes características:
1. Tiene una Voluntad de Aprender . Muchos quieren llegar a una meta, pero no quieren
aprender antes. Para crecer hay muchas cosas que nosotros vamos a tener qué cambiar en
nuestra forma de pensar (Rom.12:1,2). El líder de una iglesia de 1000 no piensa igual que el
líder de una iglesia de 10. El desarrollo personal del líder es crucial en aspectos del trato con
los demás, del uso del tiempo, de aprender y de enseñar, de trabajar en equipo, de comunicar
eficazmente sus planes, de organizar los talentos y esfuerzo de la gente, de desarrollar gente,
de resolver conflictos,
2. Tiene una Visión Definida . Nadie llega más allá del plan que tenía antes de comenzar.
¡Jamás! Usted debe tener claramente definido hacia dónde quiere llegar y hacer un plan para
lograrlo. ¿Qué voy trasmitir si ni yo se qué es lo que quiero lograr? El pastor debe definir para
la iglesia las preguntas: ¿Hacia dónde queremos llegar como iglesia? ¿En cuánto tiempo
esperamos lograrlo? ¿Por qué o para qué queremos llegar allí? ¿Qué pasos o estrategias
vamos a tomar para lograr nuestro propósito?
3. Posee Disciplina Personal y Mental . Es disciplinado, santo, templado, sereno (Pr.16:32). Es
sacrificial en el asunto del dinero, del esfuerzo y del tiempo. Se concentra en su meta y se
niega a sí mismo por ella. Está decidido a crecer. No se rompe ante la oposición del diablo,
sino que tiene fe (Mr.9:23). No se enfoca en cuánto tiene ahora, sino en cuánto va a tener (I
Sam.17:26; Heb.11:26).
4. Pasa Tiempo con la Gente que Tiene Potencial . Como Jesús y los 12, y como Pablo con
Timoteo. Si usted quiere una iglesia grande, usted no la va a poder atender solo. Sus
discípulos le van a tener qué dar a la multitud. Entonces hemos de identificar los futuros
líderes, aptos, fieles y sinceros, y dedicar tiempo a ellos discipulándolos y compartiendo
nuestro corazón.
Ninguna iglesia llega más allá de su líder. Los primeros bloques en la construcción de una
iglesia creciente son las disciplinas internas del pastor. Si alguien algún día va a ser pastor de cien
o de mil ovejas, lo será primero en su interior.
PENSAMIENTOS:
“El verdadero liderazgo no es hacer que la gente haga las cosas, sino hacer que las haga
queriendo hacerlas”.
“Los problemas que ahora experimentamos no podrán ser resueltos en el mismo nivel de
pensamiento en que estábamos cuando los creamos.” EINSTEIN.
FACTORES QUE DETIENEN EL CRECIMIENTO EN LA IGLESIA

He aquí algunas de las cosas que detiene el crecimiento de una congregación cristiana, contra
las cuales habrá qué luchar con todas nuestras fuerzas:
1. El espíritu de Jezabel. La lengua mala, la predicación o profecías contradictorias, gente
herida, indolente e hiriente en la iglesia o en el púlpito, el desorden espiritual en la casa de
Dios.
2. Miedo, dudas y traumas.
3. Excusas. Edad, limitaciones personales, nunca haber visto que alguien lo haga. Argumentos
como: “Es para otros”, “aquí nadie lo ha logrado”, “no tengo instituto”, “la gente es muy dura”,
“no tengo apoyo”, “no tengo dinero”, etc.
4. Flojera.
5. Falta de visión y pasión por el evangelio. Esto es cuando falta un agradecimiento, un
avivamiento, una consagración genuina, etc.
El más interesado en que no haya crecimiento el es diablo. El trata de evitar conversiones, y
trata de apartar de la fe a los que ya son convertidos (Lc.8:12; I Tim.5:15). Pero se nos ha sido
dada autoridad para vencerle y atarle. ¡Hagámoslo! (Lc.19:10), y hay qué usarla para poder crecer.
PENSAMIENTOS:
“Si miras las cosas como son a tu alrededor aprenderás a preguntar ¿por qué? Pero si sueñas con
las cosas que aún no han sido aprenderás a preguntar ¿por qué no?
“Si quieres que tu iglesia crezca, no te pongas como meta llenar tu templo; ponte como meta
ganarte la ciudad” (Anónimo).
TEXTO:
“En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto” (Jn.15:8).
ESTRATEGIAS DE CRECIMIENTO
He aquí algunas tácticas bíblicas que deben maniobrarse con habilidad, para que el crecimiento
de la iglesia se de en forma natural y explosiva:
1. EVANGELISMO CONTINUO . Para hacer una campaña no es necesario hacer algo muy
grande, sino solo ir a predicar. De cada campaña cuando menos una familia se queda en la
iglesia. No se debe descartar alguna forma nueva de evangelismo, con tal que sea sana y que
se vea el fruto, es decir, que ganemos a más almas (I Co.9:17-23).
2. DESARROLLO DE LÍDERES. No se trata de poner líderes, eso es fácil, sino de desarrollar
personas. Si usted se dedica a desarrollar las cualidades necesarias en las personas siempre
tendrá líderes de donde escoger para los cargos (Ex.18:17-23).
3. AMBIENTE ESPIRITUAL. Cuando logramos crear una atmósfera de amor, sinceridad y
compasión en la iglesia, las personas son atraídas por el Espíritu de Cristo y permanecen
dentro (Hch.2:42-47; 4:32).
CARACTERÍSTICAS DE LAS IGLESIAS QUE CRECEN

¿Qué hacen las iglesias que crecen? Las iglesias que están teniendo un tremendo crecimiento
ahora mismo alrededor del mundo tienen algunas cosas en común, a saber:
1. Un fuerte énfasis en la alabanza y la adoración en la libertad del Espíritu Santo.
2. Un fuerte énfasis en el ministerio de todos los creyentes (todos pueden orar, todos deben
predicar, etc.).
3. Un fuerte énfasis en la enseñanza bíblica y en el estudio para la vida cristiana.
4. Un fuerte énfasis en programas que promueven el desarrollo integral del ser humano y de la
familia (como de varones, de jóvenes, de mujeres, etc.).
5. Un fuerte énfasis en el evangelismo como una actividad constante y normal en la vida de
todos los creyentes.
Hay ciertos puntos han sido llamados por los especialistas y estudiosos de la expansión de la
iglesia como los 6 PILARES DE LA EFECTIVIDAD DE LA IGLESIA. Estos son ejemplificados en la
siguiente ecuación:
Adoración
Evangelismo
Educación
Comunión
Mayordomía
+ Servicio de Misericordia
Iglesia Efectivas
Estos son puntos vitales establecidos en la Escritura y comprobados por la experiencia. Hay
qué estarlos definiendo, buscando, promoviendo y enfatizando constantemente en nuestras
congregaciones para que el crecimiento se dé en una forma natural.
Hay un cosa muy clara: Si el pastor no anhela crecer o no está dispuesto a pagar al precio del
crecimiento, este nunca se dará. Pero si el pastor deja que la pasión de alcanzar gente se apodere
de él, lo dominará de tal modo que sus ovejas pronto se contagiarán de su ardor y de entusiasmo.
ENFOQUE CORRECTO DEL CRECIMIENTO

Es muy importante enfatizar que la suprema visión del crecimiento es el beneficio espiritual de
la gente. Muy a menudo el líder cristiano se siente tentado a crecer solo por el poder económico
que adquiere una iglesia cuando es numerosa, o por la reputación social de ser un líder de
multitudes. Cualquier otro motivo que no sea la salvación y maduración espiritual de las personas
es espurio e ilegítimo. Con una actitud así, fácilmente se podría acudir a medios fáciles de “juntar
gente por juntarla”, y atropellar en el proceso muchos valores espirituales y morales.
Hacer crecer una iglesia en número no necesariamente significa hacerla crecer en lo espiritual.
Si ganamos personas “para la iglesia” pero no hacemos cambiar su forma de vida, no logramos
que experimenten el nuevo nacimiento, ni hemos resuelto sus problemas familiares, ni los hemos
moldeado en sus actitudes y en su carácter, ni hemos llegado a asegurarnos de que son íntegros
en su vida secular, entonces no hemos logrado crecimiento en sí.
Muchas iglesias grandes han caído en el error de crecer sin lograr ser saludables en doctrina,
madurez espiritual de sus miembros. Hay un hecho que no podremos evadir jamás: Formar el
carácter de Cristo en las personas toma tiempo y requiere atención personal especial a la
necesidad. Hay qué prepararnos para crecer, para que el crecimiento no nos haga dejar de cumplir
las expectativas divinas hacia nosotros. Una iglesia grande necesita muchos líderes trabajando a la
vez, en unidad de propósito y en amor.
QUÉ ES EL VERDADERO CRECIMIENTO

Verdadero crecimiento NO se está dando:
 Cuando atraemos a gente de otras iglesias ya existentes para entrar en la nuestra.
 Cuando vamos adquiriendo cosas materiales que hagan más fácil nuestro trabajo (bienes,
equipo, instrumentos de trabajo, materiales de estudio, etc.).
 Cuando aumentan las entradas económicas a la congregación y las ayudas en especie.
 Cuando personas nuevas asisten a nuestros programas elaborados en apelación a ellos
pero luego dejan de asistir o se vuelven adictos a los “programas especiales”.
 Cuando tenemos a la gente en base a ayudas materiales que les damos.
Verdadero crecimiento NO se está dando necesariamente, aunque tal vez sí:
 Cuando realizamos congresos, conciertos, eventos y programas que atraigan gente
temporalmente a la iglesia.
 Cuando tenemos un aumento en la asistencia, pero no en la membresía activa de la
iglesia.
 Cuando emprendemos nuevos programas de alcance y estamos abiertos a nuevas ideas.
 Cuando preparamos mejor a nuestros líderes o educamos mejor a nuestras ovejas.
 Cuando tenemos mejores oradores
Verdadero crecimiento SÍ se está dando:
 Cuando personas inconversas se convierten al evangelio
 Cuando personas retiradas se reconcilian con Dios.
 Cuando hacemos que personas incrédulas, desconfiadas o decepcionadas de los
cristianos vuelvan a creer en la fe evangélica.
 Cuando matrimonios en conflicto son reconciliados.
 Cuando familias son sanadas, y las relaciones entre padres e hijos son elevadas a un nivel
de comunión y de paz dentro del hogar.
 Cuando los creyentes llevan una forma de vida digna y santa dentro de su lugar de trabajo.
 Cuando desarrollamos a más personas en el carácter de Cristo, con pasión por las almas y
con fidelidad hacia su líder, su iglesia y su Dios.
 Cuando en la iglesia se respira un ambiente de comunidad, de amor, de compasión, de
paciencia, de misericordia en el que los hermanos se aman lo unos a los otros a pesar de
sus grandes diferencias.
“ENVUELVA A TODA LA IGLESIA EN EL EVANGELISMO, SEA DE UNA U DE OTRA FORMA”.
Capítulo 4:
LA ASIMILACIÓN DE NUEVOS
MIEMBROS
Cómo Retener a los Recién Convertidos
No es nada nuevo el hecho de que la obra de Dios no consiste solo en ganar almas, sino en
hacer un buen trabajo para retenerlas dentro de la iglesia. En esta lección vamos a estudiar qué
podemos y debemos hacer para que los visitantes se queden en la iglesia y que los que acepten al
Señor permanezcan dentro de sus caminos.
2 Partes de la Obra de Dios:

1. Ganar almas. 2. Retener almas.
Un gran número de personas se convierte a Cristo en cultos, retiros, campañas y reuniones

especiales. Sin embargo hay varias preguntas que tenemos qué hacernos:
¿Cuántos de esos permanecen en el Señor?
¿Por qué unos permanecen y otros se retiran?
¿Qué nos enseña la Biblia al respecto?
¿Cuántos miembros tuviéramos si solo retuviéramos a los que se han convertido?
A veces es muy fácil dejar toda la responsabilidad sobre el recién convertido y escondernos tras
argumentos cómodos e irresponsables tales como los siguientes, los cuáles debemos evitar:
1. “Es que cada quién escoge”
2. “Si no quiere, pues ni modo”
3. “Es que la gente es muy dura”.
En vez de estos pensamientos, vamos a estudiar cuál es el papel de la iglesia en cuanto al
creyente nuevo para que permanezca. Tenemos qué saber que es lo nos toca hacer al respecto y
hacer fielmente.
NOCIÓN DE ASIMILACIÓN
Para retener a un nuevo hermano, tenemos qué asimilarlo. ¿Qué es asimilar? Asimilación
quiere decir “absorber dentro del cuerpo para venir a ser parte de él”, “incorporar”, “recibir”,
“aceptar”, “absorber”, “digerir”.
Escriba aquí que quiere decir “ASIMILACION”:
A veces creemos que el nuevo convertido debe caminar solo y sin ayuda desde un principio.
Pero esto es tan absurdo e ilógico como decir que por el simple hecho de nacer, un bebé debe
sobrevivir por sí mismo. Jesús encargó a Pedro el cuidado de sus corderos antes de irse. No
quería que el trabajo que hizo predicando se viniera abajo, ni que las almas que había ganado se
perdieran nuevamente, por lo que le dijo: “Simón, hijo de Jonás, ¿me amas más que éstos? Le
respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Él le dijo: Apacienta mis corderos” (Jn.21:15). El
Maestro, quien se había esforzado por salvarlos, ahora se preocupaba por que permanecieran.
Entonces, el trabajo de la iglesia no consiste solo en ganar almas, sino que también le
corresponde hacer que permanezcan. Así tenemos que son dos cosas las que se tienen qué lograr
con la gente: La Salvación y la Asimilación.
Por favor escriba aquí las dos cosas hacia las que debemos llevar a las almas:
1) 2)
Una iglesia no solo crece por las almas que gana, sino también por las que logra que
permanezcan. Esto se alcanza a través de algunos pasos bíblicos.
ESTRATEGIA DE ASIMILACIÓN
¿Cómo haremos que las personas que evangelizamos se mantengan, perseveren en la fe, y
sean fieles a Dios y a la iglesia? Ya que no podemos dejar solas a las ovejas recién paridas,
tenemos qué hacer un trabajo de seguimiento con ellos. Hay 3 tácticas bíblicas que son el secreto
de asimilación de los nuevos al cuerpo de Cristo:
A) PROTECCIÓN.
B) ATENCIÓN.
C) INSTRUCCIÓN.
Por favor escriba aquí

LAS TRES TÁCTICAS BÍBLICAS DE LA ASIMILACIÓN DE NUEVOS CREYENTES
A) B) C)
La PROTECCIÓN es una defensa espiritual de clamor e intercesión a favor del alma nueva, e
incluye enseñarlo a orar. La ATENCIÓN tiene qué ver con un trato personal para cuidarlo. Y la
INSTRUCCIÓN consiste en enseñarle verdades básicas de la Palabra de Dios que le alimentarán y
harán fuerte ante sus luchas como cristiano.
La iglesia primitiva tenía este secreto y cubría estas mismas áreas. Esta era una de las razones
por las que era una iglesia vibrante, como se detalla en el Libro de los Hechos. Podemos ver esto
en el capítulo 2, versos 41 y 42, que dicen: “Así, pues, los que recibieron su palabra fueron
bautizados; y se añadieron aquel día como 3000 personas. Y perseveraban en la doctrina de los
apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones”
(Hch.2:41,42).
¿Cómo perseveraban los primeros miembros de la iglesia de Hechos? La doctrina de los
apóstoles era su instrucción, mediante la comunión recibían atención, y además eran envueltos en
la oración, que representaba su protección. He aquí la fórmula que nunca falla: INSTRUCCIÓN-
COMUNION-ORACION. Una iglesia que practica esto, asimila a sus miembros perfectamente
dentro de sí y crece. No hay verdadero crecimiento sin asimilación.
IMPORTANCIA DE LAS TRES ESTRATEGIAS

Notemos que cada una de estas maniobras bíblicas que se realizan para incorporar las ovejas
al Cuerpo del Señor es muy importante: Protección, atención e instrucción. Algunas iglesias solo
enfatizan una o dos de estas, pero, a la larga, la parte que descuidan puede ser la causa por la
que no permanecen los creyentes. Las 3 son necesarias en igual medida, y debe vigilarse que
sean suplidas a cada creyente.
Estas 3 áreas que debemos suplir para el novato tienen una muy buena razón de ser, porque
todo neófito se enfrenta a diversos tipos de problemas.
1. ¿Por qué ocupa protección? Necesitará la protección espiritual porque hará frente a ataques
por parte del diablo, del mundo, y de la carne (que querrá dominarlo de nuevo). Además,
experimentará crítica y persecución mientras que se fortalece y aprende a caminar como un
cristiano victorioso.
2. ¿Por qué ocupa atención? Necesitará la atención de sus hermanos porque dejará a sus
amigos antiguos, o bien, estos le dejarán a él, trayéndole momentos de soledad a su vida.
Además necesitará hermanos a quienes imitar y de quienes aprender.
3. ¿Por qué ocupa instrucción? Necesitará instrucción porque debe aprender de una manera
nueva. Esta, además, es vital para poder resolver las dudas que le vendrán, para saber el
por qué de muchas cosas que le pasan. Como cristiano debe conocer las armas que le han
sido dadas, y las profundidades del evangelio en el que ha creído.
Por otra parte, estas tres tácticas se encargan de atender diferentes partes de la persona. La
PROTECCIÓN trata con el área del espíritu, ahora regenerado, es decir, el corazón; y trata también
con la carne, guardándole ante la naturaleza pecaminosa. La ATENCIÓN cuida de el área humana, la
de los sentimientos, y la de la necesidad de compañía fraternal. Por su parte, la INSTRUCCIÓN,
atiende la mente con la claridad, el aprendizaje y el entendimiento razonable del mensaje del
evangelio, bien que llega hasta el espíritu pues Palabra de Dios que alimenta el alma, (Ef.1:18).
Veamos ahora cada una de las tácticas bíblicas que se realizan para incorporar las ovejas al
Cuerpo del Señor: Protección, atención e instrucción.
1a. Táctica: LA PROTECCIÓN

El primer secreto para retener a una persona en Cristo es que se le cubra espiritualmente,
protegiéndola del enemigo. Esto tiene qué ver principalmente con la oración y debe hacerse de 2
modos:
1) Que otros estén orando por él.
2) Que él aprenda a orar constantemente.
Es lógico que una persona que comienza no sabrá de momento defenderse por sí mismo
contra el enemigo. Por tanto es necesario que en la congregación haya una oración intercesora
vigorosa por los recién convertidos. Esto se puede lograr por medio de varias formas:
1. Mantener la petición por ellos viva todo el tiempo mediante el énfasis constante, o sea,
estarle repitiendo a la congregación siempre que oren por los nuevos convertidos.
2. Practicar la intercesión por ellos todo el tiempo, en las reuniones regulares o reuniones de
oración, para no dejar que ninguno se pierda.
3. Tener un equipo de oración que se dedique a esta petición en especial, y que se reúna
regularmente con ese propósito.
Así mismo, la oración que el nuevo converso debe hacer puede tomar varias formas, por
ejemplo:
 Que se le asigne una cantidad diaria de tiempo de oración, y luego se le pida cuentas de
ello con regularidad.
 Que ore colectivamente con sus hermanos o en algún grupo de oración, y que se le
enfatice y revise si está haciéndolo. Esta revisión es para irlo llevando hacia esa meta.
Las otras formas de protección se contemplan en los otros dos puntos de asimilación.
2ª. Táctica: LA ATENCIÓN

Aunque sería más cómodo que todo consistiera en “reunirse e irse”, la realidad es que el
creyente crece en medio del compañerismo y la comunión con sus hermanos. Jesús no fue un
separado de sus 12 apóstoles, sino que les dedicó muchísimo de su valioso tiempo, pues sabía la
gran importancia de las relaciones personales para hacer a un verdadero discípulo. La iglesia
necesita proveer atención personal y un ambiente de amistad sincera, pues a nadie le agrada
entrar a un sistema frío, que no ofrezca la oportunidad de apoyarse en alguien. El mito de la iglesia
tipo “McDonald”, instantánea y automática, donde “pagas y te vas” sin tener qué ver con nadie, no
existe.
Nadie permanecerá en una iglesia donde, aunque se predique la verdad, no tenga nada qué ver
con nadie, donde nadie se preocupe por él, o donde se sienta apartado e ignorado. Vivimos de
relaciones con otros y lo menos que queremos es ir a un lugar para aburrirnos o sentirnos
extraños, solos, incómodos o pasar desapercibidos.
El nuevo convertido ocupará nuevos amigos si ha de dejar los viejos amigos. Para la gente que
viene a Cristo la iglesia será una parte muy importante de su vida, y para algunos será todo su
mundo, por lo que no puede ser un lugar frío. Queramos o no, la gente va a conocer a Cristo y a la
congregación, así que necesitamos dar el mensaje, pero también tiempo y parte de nuestro ser en
convivencia.
La gente se sostiene en un mensaje cuando puede vivirlo y convivirlo en medio de un grupo.
Esta era la manera de Pablo al levantar una iglesia compuesta de gente que tenía mucho qué
ver con él. Él dijo: “Tan grande es nuestro afecto por vosotros, que hubiéramos querido entregaros
no sólo el evangelio, sino también nuestras propias vidas; porque habéis llegado a sernos muy
queridos” (I Tes.2:8). Así que entregamos el evangelio, pero también parte de nuestra propia vida.
Podemos lograr atender a las personas en comunión a través de los siguientes pasos:
 Enseñándole a la gente a “practicar la hospitalidad” en la iglesia (Rom.12:13; Heb.13:2), es
decir, ser corteses, perder sus temores hacia la gente nueva y hacerlos sentir en casa.
 Dando lugar a la comunión en reuniones en hogares, retiros, comidas, paseos y otros lugares
informales en que se preste la confianza para platicar con el fin de que estas personas se
integren al grupo creciente de creyentes. Por supuesto esto enfocado con un claro sentido
espiritual, sin desviarse de nuestro propósito.
 De cuando en cuando tomar un bocadillo después de los servicios para proveer un ambiente
de franqueza que promueva la amistad, el compañerismo, la fraternización y la familiaridad.
 Visitación en sus hogares para conocerse mejor.
Tenemos qué llegar a una meta, y no descansar hasta lograrla en la iglesia:
A Que ningún recién convertido se pierda por causa del descuido, por falta de apoyo o de alguien
con quién platicar y con quién aclarar sus dudas.
B Que ningún visitante se vaya de nuestras reuniones sintiéndose solo, indeseado o inadvertido.
Si alguien habla unos momentos con cada visitante, este volverá de seguro la segunda vez, y
con más confianza. De este modo, las posibilidades están a nuestro favor de que logremos retener
al recién convertido, mantener amistad con el visitante y ministrar a muchas personas.
3ª. Táctica: LA INSTRUCCIÓN

Otra de las áreas de observación muy importante es la de la INSTRUCCIÓN del nuevo creyente en
la Palabra de Dios. Esta a veces se descuida. La intercesión sin instrucción se convierte en un
círculo vicioso, pues sería como cargar a un niño y nunca enseñarle a caminar. Tendríamos qué
cargarlo todo el tiempo.
Pala lograr la instrucción, las predicaciones de la iglesia no son suficientes, pues se necesita un
estudio ordenado y sistemático de ciertas doctrinas de la Biblia que el creyente debe manejar para
su crecimiento espiritual. Vemos algo de esto en el libro a los Hebreos, una lista de enseñanzas
básicas que aparentemente se impartían a los creyentes de reciente ingreso en la iglesia
(Heb.6:1,2), entre ellas:
a) El arrepentimiento de obras muertas, que incluye entender bien la conversión.
b) La fe en Dios, que incluye la salvación y justificación por gracia y una vida de poder.
c) La doctrina de bautismos, es decir el bautismo en agua y el bautismo en el Espíritu Santo.
d) La doctrina de la imposición de manos, tanto para sanidad como para el ministerio.
e) La doctrina de la resurrección de los muertos, tanto de los justos como de los impíos.
f) La doctrina del juicio eterno, que incluye explicación sobre los últimos tiempos y la esperanza
de la Segunda Venida de Cristo.
Pero, además de esto, es necesario enfatizar en otros aspectos:
 Los derechos y privilegios que el creyente tiene en Cristo mediante la redención.
 Las responsabilidades cristianas del creyente.
La victoria de un creyente depende en gran parte del entendimiento y profundización de su fe,
pues cuando el diablo ve que no puede hacer caer en pecado o ante la prueba a uno que ama a
Dios, cuando menos trata de desviarlo en su doctrina para mantenerlo equivocado, confundido y
débil por error.
Una ventaja de la instrucción bíblica del recién convertido es que puede servir como plataforma
y adoctrinamiento rumbo a su bautismo en agua, y luego rumbo al ministerio.
Recuerde: La instrucción de un nuevo converso se puede realizar:
 Mediante integrarlo a un grupo especial para nuevos convertidos.

 Mediante asignarle un creyente experimentado que le discipule personalmente en su casa.
ORGANIZANDO LA ASIMILACIÓN
Es importante entender que hay qué buscar personas que pueda llevar a cabo el trabajo de la
asimilación. Conforme una iglesia crece el pastor no podrá hacerlo todo, y tampoco logrará mucho
dando instrucciones muy generales y vagas exhortando a la congregación a que discipule. Aunque
todos los miembros de una iglesia deben ser serviciales y amorosos con los recién llegados, todo
trabajo se logra organizándolo bien, y para esto es necesario hacer a alguien responsable de cada
cosa.
En otras palabras no sirve de mucho decir a la iglesia en general “oren por los nuevos
convertidos”, “preocúpense por los nuevos” o “enséñenles la Palabra”. No se logra mucho con esto
porque todos esperarán que el otro lo haga, o nadie se sentirá capaz. Tenemos qué hacer a
alguien responsable de cada cosa en la iglesia, por ejemplo esta, pues esto es realmente organizar
la iglesia.
Esto logra varias cosas:
a) Que cada cual sepa qué es lo que le toca hacer.
b) Que los hermanos se puedan desarrollar en su área.
c) Que se reconozca e identifique a tales personas, y se acuda a ellos para ese trabajo.
d) Que se les pueda pedir cuenta.
MANERA DE REALIZAR LA ASIMILACIÓN

Las formas en que la asimilación puede hacerse se pueden resumir en tres. No existen reglas
formales en cuanto a este tema. Escoja la manera que más sienta que Dios le guía a hacer. No
existe un molde de cómo realizar estos métodos porque cada congregación de creyentes es
distinta a las otras. He aquí las tres ideas prácticas que puede servirnos como guía:
1. UNO A UNO. Asignarle un Creyente Discipulador a cada nuevo convertido para que este le
dé un seguimiento personal. Cuando ya hay gente desarrollada en la iglesia que pueda
ayudar a discipular, se le puede asignar a cada tres o cuatro convertidos un Discipulador. Si
se va a hacer esto, nos puede servir usar la Lista de Discipulado que aparece en la siguiente
página.
2. LÍDER DISCIPULADOR . Consiste en poner a una persona encargada de visitar y discipular
a todos los nuevos convertidos. Si en un momento dado se pusiera algún Encargado de
Asimilación o Director de Cuidado de Nuevos Miembros tendría que ser una persona que
guste de la gente, nunca un regañón u orgulloso que se crea “super-espiritual”, o un
amargado que no tenga paciencia. Siempre ha de ser, por razones obvias, alguien con quien
la gente se sienta a gusto, aceptado y no reprobado, auxiliado y no presionado, una persona
que sepa sonreír y escuchar más que hablar.
3. GRUPO ESPECIAL. Tal vez la mejor manera en muchos casos sea el que exista un grupo
de recién convertidos que se reúna en un hogar, ya que esta forma puede reunir muy bien
las 3 áreas de INSTRUCCIÓN, COMUNIÓN y ORACIÓN combinadas en cada reunión. Ellos
estarán por algún tiempo en este grupo, mientras se le lleva a otro grupo de la iglesia donde
haya hermanos más avanzados. En este Grupo de Nuevos Miembros se les ayudará a
desarrollar los pasos dinámicos más básicos de un discípulo, que son:
1. Disciplina espiritual (oración, lectura bíblica, etc.).
2. Amistades íntimas.
3. Adoración corporal.
4. Vida en familia.
5. Pasión por Jesús.
6. Ministerio laico.
7. Interés evangelístico.
8. Dádiva sacrificial.
ANTE LOS NUEVOS CONVERTIDOS
ADVERTENCIA: Si no aprenden pronto a defenderse contra el diablo, y no desarrollan amistades

significativas en la iglesia, ni entienden básicamente su fe, podemos esperar que caigan en las
antiguas tentaciones, busquen a sus antiguos amigos y se confundan en sus antiguos errores e
ignorancia.
META: Que ningún recién convertido se pierda por falta de protección espiritual, ni se desanime
por falta de apoyo o de alguien con quien amistar, ni se desvíe de la verdad por falta de
conocimiento de la Palabra de Dios (Jn.17:12).
LISTA DE DISCIPULADO
Instrucciones: La primera columna la llenan los Ujieres o Secretario, con los nombres de todas las
personas que visitan a la iglesia o que se entregan a Cristo. La segunda columna la llena el Pastor
de la iglesia, con los nombres de los hermanos que han sido entrenados para discipular a otros.
Discípulo Discipulador
LA DINÁMICA DE LA ASIMILACIÓN
¿Qué Hacer Para Retener a

los Nuevos Convertidos?
Capítulo 5
LA ENSEÑANZA DE LA PALABRA
Cómo Edificar y Solidificar a los Creyentes en la Verdad

NUESTRA RESPONSABILIDAD DE ENSEÑAR
Según Dios diseñó la Iglesia de Cristo, los ministros tenemos una parte muy importante en
instruir al pueblo de Dios. Esta es una de las razones por las que Dios nos levantó como sus
ministros, para que los cristianos “ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo
viento de doctrina” (Ef.4:11-16). Cada ministro del evangelio ha sido puesto por Dios como
predicador de Su Palabra, y por ende funge también en enseñanza e instrucción (Mt.28:20).
Jesús dio mucha enseñanza durante su ministerio, y fue algo decisivo para el éxito que logró en
su misión (Mt.5:1,2; 9:35). El apóstol Pablo enseñó a Timoteo: “Entre tanto que voy, ocúpate en la
lectura, la exhortación y la enseñanza” (I Tim.4:13).
NECESIDAD DE DOCTRINA EN EL PASTOR

Según se nos dice en I Timoteo 3:1, una de las cosas más importantes en un pastor es que sea
“apto para enseñar” (v.2), y “no un neófito” (v.6). “Apto” significa capaz y hábil para enseñar, es
decir, un maestro en la Biblia. Esto de “ser apto” incluye 2 cosas:
 Haber sido adoctrinado, porque es vital conocer lo que se enseña.
 Vivir lo que predica, porque nadie puede predicar si no está a la altura de lo que habla.
En la Biblia se le dice al pastor: “Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como
obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la Palabra de verdad” (II Tim.2:15).
“Ocúpate (ó medita) en estas cosas; permanece en ellas”... (I Tim.4:15).
El pastor estudia y aprende para su propio fortalecimiento espiritual. Sin embargo debe estudiar
con la mentalidad de enseñar a otros después (Mal.3:16; II Tim.2:2). Un pastor sin suficiente
palabra de Dios está débil en su trabajo y limitado en su éxito, porque “la fe viene por el oír, y el oír
por la palabra de Dios” (Rom.10:17). Así, podemos decir que el pastor no puede impartir nada si no
trae nada. Medite en la siguientes preguntas:
- ¿Cómo vamos a enseñar victoria si no conocemos ampliamente las promesa de Dios?
- ¿Cómo vamos a enseñar la verdad si no la conocemos?
- ¿Cómo vamos a responder preguntas si no tenemos la respuesta?
Pero cuando el pastor está lleno de Palabra puede enseñar a los demás, pues las palabras de
la Biblia le salen espontánea y naturalmente, y siempre tiene un versículo para explicar cada
cuestión y resolver cada duda. “De la abundancia del corazón habla la boca” (Mt.12:34; Lc.6:45).
Cuando conocemos lo que enseñamos y lo hemos llevado a la práctica hablamos “con autoridad,
no como los escribas” (Mt.8:28,29).
ALIMENTANDO EL REBAÑO
Una de las responsabilidades más importantes del pastor de la iglesia es alimentar el rebaño
(Jer.3:15; Ez.34:5,6). En lo natural, todo pastor apacienta ó da alimento a las ovejas, y por su
misma naturaleza las ovejas siguen a su pastor, porque saben que este les va a guiar a donde hay
hierba verde para ellas. En lo natural, un pastor de ovejas sabe que de él depende que el rebaño
esté sustentado, y por esto lo lleva a pacer. En lo espiritual sucede lo mismo. La palabra “pastor”
viene de “pasto”, el alimento de las ovejas, y define a aquel que lleva las ovejas a “pastar” ó comer
de esos pastos. En la Iglesia de Cristo, el trabajo de los ancianos (o pastores) es pastorear ó
“apacentar”, dar pasto a los ganados (I Pe.5:1,2). Atender y alimentar al rebaño es enseñarles la
Palabra. En el Nuevo Testamento, los ancianos enseñaban y predicaban, y debían ser aptos para
ello (I Tim.3:2; 5:17).
EL PODER DE LA PALABRA
La Biblia es el arma que el pastor posee para llevar a los pecadores a Dios y a los creyentes
hacia la semejanza de Cristo, es su herramienta de trabajo para moldear personas hacia la
voluntad de Dios (II Tim.3:16,17). Solo la Palabra de Dios cuenta con el formidable poder para:
1. Cambiar a los individuos y a las naciones (Heb.4:12).
2. Convencer de pecado (Jer.23:29).

3. Llevar al pecador a Cristo (Jn.6:63,68).
4. Convertir el alma (Sal.19:7; II Tim.3:14,15).
5. Producir fe (Rom.10:17).
6. Producir una nueva naturaleza (II Pe.1:4).
7. Fortalecer a los recién convertidos (I Pe.2:2).
8. Consolidar el crecimiento del creyente y de la iglesia (Heb.5:12,13).
9. Equipar a los creyentes para la batalla espiritual (Ef.6:12).
10. Brindar liberación (Jn.8:32).
EDIFICACIÓN POR LA ENSEÑANZA

La enseñanza es una necesidad en la iglesia porque modifica la forma de pensar y de razonar
que impera en el ser humano, viciada por el pecado y por la derrota (Gal.4:3; Ef.4:17,18,22;
Col.1:21; Tit.1:15; Rom.8:7). Esta ministración ungida ataca el pensamiento negativo y natural del
hombre con la forma de pensar sobrenatural y victoriosa de Dios, y hace que el cuerpo de Cristo
viva más y más en la victoria de Jesucristo (Rom.12:2; I Co.2:12,13).
La enseñanza es un vehículo importante a través del cual las mentes de los cristianos son
renovadas por las cosas que son importantes para Dios (Jn.8:32: Rom.12:2). Ayuda a liberar de
ataduras de temor y de ansiedad, y las reemplaza con la mentalidad divina y el conocimiento de la
gracia de Dios. Penetra hasta la profundidad de nuestros corazones y de nuestras mentes
(Heb.4:12,13).
Otra bendición muy importante del estudio de la Biblia es que la enseñanza es la mejor manera
de cuidar a la Iglesia contra errores doctrinales.
MEDIOS DE ENSEÑANZA BÍBLICA

Nuestras iglesias locales deben ser un instrumento en las manos de Dios para instruir a su
pueblo en las enseñanzas de la Biblia. Esto se puede hacer por medio de:
 Cursos bíblicos en hogares.
 La Escuela Dominical.
 Cursos por correspondencia.
 Servicio de Estudio Bíblico.
 Instituto Bíblico.
 Grupos de hogar (grupos familiares o células).
Además se debe recomendar, y promover constantemente a los miembros la lectura y estudio
personal de la Palabra de Dios (Jn.5:39).
LAS FORMAS DE ENSEÑANZA

Dar estudio de la Palabra de Dios no es cosa difícil. Uno solo tiene qué estudiar bien lo que va a
decir y sobre lo que va a hablar, y entonces, ya que se ha preparado, lo enseña así a la iglesia. Se
puede decir que hay cuatro formas elementales de preparar un estudio o enseñanza:
1. Si va enseñar sobre un pasaje bíblico, lo leerá varias veces, meditará tranquilamente en él,
buscará las palabras que no entienda, mirará el contexto, sacará algunas notas, y tal vez
consultará un comentario bíblico. Finalmente, reforzará cada punto importante con otras citas
de la Escritura. Así, luego lo compartirá a la iglesia.
2. Si va enseñar sobre algún tema bíblico, como la gracia, la conversión, la encarnación, la
resurrección, la fe, el amor, etc., puede consultar todos los versos bíblicos que hablan de ese
tema en una concordancia bíblica y así llegar a una definición de ese concepto. También
puede ver un diccionario bíblico. Como algunos temas son un poco difíciles de entender para
las personas, entonces se pueden poner ilustraciones (ejemplos, historias) a los hermanos
para que los entiendan más fácilmente.
3. Si va enseñar sobre un tema práctico, como la familia cristiana, la adolescencia o la juventud,
relación entre padres e hijos, el matrimonio cristiano, la victoria sobre el pecado, el testimonio
del creyente, etc., puede basarse en dar unos cuantos consejos, uno por uno apoyándolos
con un pasaje bíblico, y enriquecer cada punto con ejemplos que uno ha visto en otros o
experiencias de la vida diaria.
4. Si va enseñar sobre una doctrina bíblica básica e importante, debe apoyarse en muchas citas
bíblicas que respaldan esa doctrina, y enseñar los conceptos no como una sugerencia, sino
como una firme convicción, porque son enseñanzas que no se pueden negar.
PREPARACIÓN PARA ENSEÑAR

El pastor debe prepararse para el estudio bíblico lo mejor que pueda, dedicando el tiempo
suficiente antes de cada predicación o estudio, para entregar a los hermanos una exposición de
calidad, como lo merecen la ovejas de Dios que han confiado en él como su pastor. La preparación
del pastor consiste en:
1. Habituarse a leer cada día la Biblia, para lograr tener un conocimiento profuso y abundante de
sus relatos y de todo su contenido.
2. Habituarse a leer libros cristianos que le ayuden a ampliar su gama de conocimiento espiritual.
3. Asistir a programas de adiestramiento de predicadores o maestros.
4. Practicar la oración para buscar la unción del Espíritu Santo en la predicación de la Palabra.
EL PASTOR COMO MAESTRO

¿Qué cosas puede hacer el pastor para hacer su clase interesante? Hay muchos libros que le
pueden dar muy buenas ideas sobre cómo ser un buen maestro, pero los elementos más sencillos
con los que puede comenzar son los siguientes:
1. Tener variedad.
2. Repetición de frases claves.
3. Emplear cosas que se pueden ver y tocar para ilustrar su mensaje.
4. Utilizar tecnología multimedia (videos, casetes, CD’s, computadoras, etc.).
5. Participación. Todos pueden hablar.
6. Oración en clase.
7. “Estudiar a los estudiantes”, es decir, ver sus rostros, sus gestos, su postura, para saber
cómo están recibiendo lo que usted está diciendo.
8. Incluir risa y humor en su exposición.
ENSEÑANZA BÁSICA PARA UNA DIETA BALANCEADA

Como ya dijimos, la enseñanza es un eslabón imprescindible en la perfección del cuerpo de
Cristo, la Iglesia (Ef.4:12-14). Para dar una dieta bien balanceada a la congregación de los
creyentes, es necesario incluirles todos los ingredientes que siguen:
1. EVANGELIO DE CRISTO. El pastor debe asegurarse de que su iglesia provea enseñanza sobre
las primeros rudimentos del evangelio de Cristo. Debe tratar temas como:
 La encarnación.
 La persona del Hijo de Dios.
 El arrepentimiento.
 La fe en Dios.
 La confesión.
 El reino de Dios.
 El pecado.
 El poder de la cruz.
 El sacrificio de Cristo.
 El nuevo nacimiento.
2. GRACIA DIVINA. El pastor debe asegurarse de que su iglesia provea enseñanza sobre los
derechos espirituales que posee por gracia, por la muerte de Cristo, a saber:
 Su acceso directo al Padre.
 El perdón de pecados.
 La justificación.
 La promesa de la vida eterna.
 La santificación.
 La esperanza cristiana.
 El poder sobre el pecado.
 La ley y la gracia.
 La justicia divina.
3. DOCTRINA BÁSICA. El pastor debe asegurarse de que su iglesia provea enseñanza sobre las
principales doctrinas de la fe cristiana que debemos conocer, entender y sostener para
completar el cuadro de la enseñanza bíblica. Debe tratar temas como:
 La trinidad.
 La doctrina de Dios el Padre
 Dios el Espíritu Santo.
 La persona del Hijo de Dios.
 Las Escrituras.
 Los ángeles.
 Satanás y los demonios.
 El hombre, su caída y su salvación.
 El cielo y el infierno.
 Acontecimientos finales.
 Estructura y ministerios de la iglesia.
4. BENEFICIOS DE LA REDENCI ÓN. El pastor debe asegurarse de que su iglesia provea
enseñanza sobre los beneficios colaterales que se le han concedido en la redención, por la
muerte de Cristo, a saber:
 La sanidad divina.
 La protección divina.
 La prosperidad divina.
 El éxito en sus empresas.
 El ministerio de los ángeles.
5. RESPONSABILIDADES CRISTIANAS. El pastor debe asegurarse de que su iglesia provea
enseñanza sobre las responsabilidades primarias de los cristianos, a saber:
 La oración.
 La lectura de la Biblia.
 Congregarse.
 Compartir el mensaje del evangelio.
 Dar buen testimonio.
 Dar para la obra de Dios.
 La sumisión a los líderes espirituales.
6. GUERRA ESPIRITUAL. El pastor debe asegurarse de que su iglesia provea enseñanza sobre
las armas de victoria que el cristiano tiene a su favor, a saber:
 El poder de la oración.
 La identidad del cristiano.
 Victoria sobre el mundo y sobre el diablo.
 La autoridad sobre el diablo y los demonios.
 Su posición espiritual en Cristo.
 El poder de la sangre de Jesús.
 El poder del nombre de Jesús.
 La armadura del cristiano.
7. ÉTICA CRISTIANA . El pastor debe asegurarse de que su iglesia provea enseñanza sobre la
forma de vida correcta de los cristianos, es decir, la ética cristiana, ya que el evangelio viene a
sanar las relaciones interpersonales rotas por causa del pecado, y corregir las relaciones
desorientadas. Debe tratar temas como:
 La familia cristiana.
 El papel del esposo cristiano y de la esposa cristiana.
 Relaciones laborales del cristiano.
 Conducta del cristiano ante el mundo.
 Relación del cristiano con los inconversos.
 Relación del cristiano con los otros cristianos.
 Comunicaciones correctas. Las palabras del cristiano.
8. MADUREZ ESPIRITUAL. El pastor debe asegurarse de que su iglesia provea enseñanza sobre
la vida en el Espíritu, sobre lo que es ser un cristiano espiritual y maduro, entregando temas
como:
 La victoria sobre el yo personal.
 Resistiendo las pruebas con valor.
 La voluntad rendida a la voluntad de Dios.
 El cristiano que sabe oír la voz de Dios.
 El orden en las prioridades de la vida.
 El cristiano dispuesto al servicio de Dios.
 El cristiano al servicio de los demás.
9. INTEGRIDAD CRISTIANA. El pastor debe asegurarse de que su iglesia provea enseñanza
sobre la moralidad cristiana. Debe tratar temas como:
 La santidad.
 El temor de Dios.
 La honradez.
 El honor.
 La rectitud.
 La decencia.
 Los valores humanos.
10. VIDA DEVOCIONAL. El pastor debe asegurarse de que su iglesia provea enseñanza sobre las
disciplinas espirituales que el cristiano practica y experimenta al ponerse en contacto con Dios.
Debe tratar temas como:
 Oración.
 Alabanza y adoración.
 Bautismo en agua.
 Bautismo en el Espíritu.
 La Cena del Señor.
 Manifestaciones sobrenaturales del Espíritu en la iglesia.
 Los dones del Espíritu.
 Intercesión.
Se nos dice en Hechos 2:42 que los primeros discípulos de la iglesia primitiva “perseveraban en
la doctrina (o enseñanza) de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del
pan y en las oraciones”. Pero, ¿qué es “la doctrina de los apóstoles”? A su tiempo la doctrina de
los apóstoles (o el conjunto de lo que ellos creían, predicaban y enseñaban) vino a ser lo que
ahora tenemos como el Nuevo Testamento.
¡Qué hermosa combinación de prácticas cristianas para la iglesia de todos los

tiempos!
DIETA BALANCEADA PARA UN CRISTIANO

EL E VANGELIO DE C RISTO
LA GRACIA DIVINA
DOCTRINA BÁSICA
BENEFICIOS DE LA REDENCIÓN
R ESPONSABILIDADES C RISTIANAS
G UERRA E SPIRITUAL
ÉTICA CRISTIANA
MADUREZ ESPIRITUAL
INTEGRIDAD C RISTIANA
VIDA DEVOCIONAL
Capítulo 6
EL MINISTERIO A LA HUMANIDAD
DEL CREYENTE
CÓMO ATENDER Y MEJORAR A LOS CRISTIANOS COMO INDIVIDUOS EN SUS ÁREAS
PERSONALES INDIVIDUALES
Es muy importante que el creyente se desarrolle como persona. Pablo trató muchos problemas
qué tenían qué ver con esta área, tales como la relación entre esposos, la relación entre patrones y
empleados, el cristiano como ciudadano, el cristiano en sus actitudes hacia el dinero, relación entre
padres e hijos, etc. Sin duda entonces que el ÁREA HUMANA del creyente puede ayudar al reino
de Dios si está desarrollada, o puede estorbar si está bloqueada. Entonces, es importante por
varias razones:
a) Para dar mejor testimonio y expresar mejor a Cristo Jesús en este mundo conforme el cristiano
es cada vez una mejor persona.
b) Porque muchos (no todos) de los problemas que se presentan entre los creyentes NO son en
sí espirituales sino problemas en su ser personal, dada la forma en que ha sido criado o como
lo formó la vida.
Al atender esta área humana de la persona se cubre un aspecto doble del creyente:
 El interno (pues tiene qué entenderse a sí mismo como ser humano, ya sea como varón, como
mujer, como joven, como esposo, como hijo, como amigo, como colega, como trabajador,
como ciudadano, etc., es decir, necesita saber qué significa ser lo que él es, y cómo se supone
que debe comportarse como tal).
 El exterior (pues esto tiene qué ver con sus relaciones con los demás).
A la iglesia le incumbe esto porque solo ella tiene la capacidad y el poder de entender y tratar
con el pecado, la causa precisa que ha afectado el área humana de las personas, infestando sus
actitudes hacia otros, su forma de ver la vida, su manera de reaccionar ante las dificultades, o el
modo del afrontar las diferencias de opinión, etc. Por tanto, el poder del evangelio que predicamos
debe afectar positivamente no solo el área espiritual de quienes ministramos, sino llegar hasta
modificar su forma de vivir, de conducirse en esta vida y en su familia. ¡Amén! En otras palabras, la
gente viene dañada del mundo en su definición propia y sus relaciones con los demás, y la Iglesia
debe preocuparse por ayudarlos en estas áreas.
ATENDIENDO A LA IGLESIA POR DEPARTAMENTOS

¿Qué pueden hacer los líderes de la iglesia para atender a los creyentes en este aspecto? Una
de las maneras más sencillas y efectivas es atenderlos por grupos compuestos de iguales, es
decir, las damas, los varones, los jóvenes y los niños.
 ¿Saben nuestros varones qué significa ser varón y cuál es su papel en la vida?
 ¿Saben las mujeres lo que les corresponde hacer y cómo hacerlo en la casa y en la vida?
 ¿Saben nuestros hijos las actitudes correctas que debe tener y cómo descubrir el rumbo de su
vida?
Revelar y enseñar estas cosas a las personas se logra por medio de trabajar con ellos por
departamentos de atención especial, sistema que logra dos cosas:
a) Identificación entre los creyentes de un mismo grupo.
b) Atenderlos según las necesidades específicas. De cada grupo.
Otra manera muy efectiva de hacerlo es ministrarlos por familias, pero lo mejor es usar una
combinación de las dos cosas, es decir, por grupos iguales y por familias. Pero como la
ministración por familias no tiene qué ser tan estructurada, la puede hacer el pastor por medio de
visitación o citando hogar por hogar a su oficina. Vamos a concentrarnos por ahora en cómo debe
ser el programa de los departamentos de trabajo que edifiquen a los miembros de nuestras
congregaciones.
Ministrando por separado a los grupos de varones, mujeres, niños y jóvenes nos permite
avanzar rápido en enfocarnos en sus necesidades particulares, sea esto por medio de retiros,
campamentos, conferencias, campañas, reuniones semanales, etc.
ÁREAS EN QUE MINISTRA LA IGLESIA AL CREYENTE:

1. Su Relación con Dios. 2. Su Entendimiento de él Mismo. 3. Su Relación con los Demás.
PSICOLOGÍA PASTORAL
Aunque bien es cierto que la actividad del pastor NO es en sí dar un tratamiento psicológico a
las personas, sino netamente espiritual, como corresponde a su rol de ministro del evangelio,
también es cierto que se le van a presentar muchos casos en que será necesario atender a las
personas en su área mental y emocional, porque en ocasiones allí está su necesidad.
TIPOS DE PROBLEMAS
Jesús se interesó en esta área. El dijo en Lucas 4:16 que vino a “sanar a los quebrantados de
corazón”, cosa que se refiere específicamente a:
 Gente dolida por el pasado.
 Dañada por experiencias traumáticas.
 Víctimas de decepciones.
 Víctimas de pérdidas irreparables.
 Víctimas de adversidades.
 Víctimas de situaciones violentas, agresivas o abusivas.
Situaciones difíciles han causado traumas en la personas y han modificado su forma de ver la
vida y cómo reaccionar a ella.
ENSEÑANZA DE LIBERTAD
El pastor puede ser de mucha ayuda en enseñar a la gente a:
 Vivir libres de cuidados.
 Vivir libres del temor.
 Vivir libres de vergüenza.
 Vivir libres de culpa.
 Vivir libres de inseguridad.
FRUTO DEL MINISTERIO PASTORAL
Sus consejos pastorales llegan a brindar, según la necesidad:
 Paz.
 Paciencia.
 Seguridad.
 Perdón.
 Restauración.
 Amor.
INTENCIÓN DEL CONSEJO
La enseñanza bíblica práctica debe tener la intención de corregir el problema en las personas,
no solo estar con ellos en medio de su necesidad, por ejemplo:
 Llevar hacia la madurez a las personas que tienen una necesidad adictiva de aprobación
 Llevarlos a experimentar al amor incondicional de Dios a quienes se encuentran paralizado por
un pasado de abandono o abuso
 Llevar a encontrar aceptación en Dios a quienes poseen un espíritu de culpa, por una parte, o
de víctima o de mártir, por otra parte.
UNA PSICOLOGÍA CRISTIANA
El pastor enseñará su consejo no basado en la psicología del mundo, que no reconoce a Dios,
sino basado en la Palabra de Dios, enseñando:
 El valor que Dios nos da como personas.
 La paz que viene de depender de Dios.
 La auto-motivación que resulta de una madurez espiritual y de una vida agradecida.
 La identidad correcta, renovando su mente hacia lo que el creyente es en Cristo.
BENDICIÓN ÚNICA
El pastor puede hacer más que un psicólogo en muchos casos porque posee el mensaje que da
solución verdadera a los problemas del hombre: El evangelio de Cristo. Solo Dios puede brindar:
 Una vida con significado.
 Una vida de libertad.
 Una vida de descanso en el cuidado de Dios.
MINISTRACIÓN UNGIDA
Es muy importante aclarar que Jesús ministraba a las personas dolidas con el poder del
Espíritu Santo, no a través sesiones clínicas de consejería psicológica; y aunque su enseñanza y
predicación contenía mucha SANIDAD INTERNA, él nunca olvidó llegar hasta la raíz del problema: La
situación de las personas ante Dios. El dijo: “El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha
ungido para sanar a los quebrantados de corazón” (Lc.4). Como pastores necesitamos la unción de
Jesús para romper los yugos, o si no solo vamos a tener a personas adictas a las sesiones donde
se siente bien, pero que nunca van a progresar espiritualmente.
¿Cómo se hace para ministrar a estas personas? Se sigue el siguiente Proceso de 6 Pasos,
tres de los cuales son personales, y los otros tres, que se dan ya en contacto con la persona:
1. Preparación Informativa. El pastor siempre está informándose sobre cómo aconsejar en
casos difíciles.
2. Preparación Bíblica. El pastor se llena de Palabra de Dios para dar el consejo adecuado,
según la Biblia, a las diversas situaciones.
3. Preparación Espiritual. El pastor va a orar a Dios antes de ir a ministrar a alguien,
intercediendo a Dios por la victoria de la persona, hasta recibir confirmación interior de que
la solución del problema está hecha en lo espiritual.
4. Ministración de Consejería. El pastor debe brindar entendimiento del problema a las
personas, sus causas, sus consecuencias y sus soluciones.
5. Ministración de Palabra. El pastor debe enseñar y explicar la palabra bíblica adecuada al
caso, señalando el curso de acción que ha de tomar la persona.
6. Ministración Espiritual. El pastor debe ministrar con imposición de manos a la persona
(ungiéndole con aceite, si es necesario) y reprender con palabras audibles inspiradas por
Dios todo problema, declarando libertad a la persona en esa área.
La ministración al área humana de las personas es un ministerio de compasión y de amor, y
debe realizarse con mucha paciencia y comprensión. Pero hay que buscar al unción de Dios en
este sentido porque es solo la unción la que rompe el yugo del diablo sobre la gente (Lc.4:14ss).
LAS TRES NECESIDADES BÁSICAS DEL HOMBRE.

Hay tres necesidades emocionales básicas del hombre en su área humana personal que todos
ocupamos para ser felices y vivir de una manera normal. Estas son:
1. Amor. La necesidad y habilidad de dar y recibir amor.
2. Satisfacción. No de suplir un deseo sino de llenar nuestra ansiedad y no dejar ningún vacío.
3. Seguridad y Confianza. Por el hoy y por el mañana, y ante los demás.
La iglesia cristiana local debe crear un ambiente de convivencia que provea estas cosas a las
personas que no los recibieron en su hogar, o bien, que sí lo hayan recibido pero que aún lo
necesitan. El papel del pastor es importante para crear este ambiente, y hacer que las personas
ministradas no se aparten de Dios o de la congregación, ya que si la iglesia no las provee, será
fácil que el diablo le ofrezca un sustituto, una solución barata para ellas. Debemos cuidar estas
áreas con las que Dios nos hizo y mantenerlas atendidas según le agrada a Dios. Es fácil que un
cristiano nuevo se aparte cuando no ha hallado el gozo en la vida cristiana.
Repetimos: Atendemos estas áreas por tres razones:
1. El cristiano es un ser espiritual, pero también es un humano, con necesidades y conflictos
muy personales.
2. Muchas de los problemas que se dan en los cristianos son un su área humana, no siempre
en la espiritual.
3. La convivencia entre los creyentes se da mejor cuando estamos atendidos en éstos
aspectos, y esto hace que reflejemos mejor a Cristo.
Capítulo 7
EL MINISTERIO A LOS HOMBRES
Y A LAS MUJERES
MINISTERIO DE VARONES
IMPORTANCIA DE TRABAJAR A LOS VARONES

Toda iglesia que se halla crecida, fortalecida y saludable actualmente reúne, entre otras, la
característica de tener un programa de desarrollo de los varones, pues cuando los hombres están
fuertes en el camino de Dios la expansión del reino no solo avanza, sino que se acelera. Cuando
vemos una iglesia débil casi siempre notaremos que no tienen un ministerio fuerte de varones.
Si las mujeres pueden hacer que una iglesia sea espiritual, los hombres la harán fuerte. La
importancia de este ministerio estriba en que si ganamos mujeres, ganamos mujeres, y si ganamos
niños, ganamos niños; pero si ganamos varones, ganamos a toda la familia (Hch.16:31, fue dicho a
un padre de familia).
El pastor no debe mirar a el Ministerio de los Varones como una carga más a su apretado
horario de cada mes, sino como una valiosa ayuda para afirmar a los varones de su iglesia.
Ministrar a los varones es importante, ya que, por lo general nuestras iglesias se componen más
de mujeres, y esto no debe ser así. Según el plan de Dios, los varones deben ser las principales
columnas de la Iglesia del Señor, como sacerdotes de ella y y como patriarcas de sus casas
(Ez.22:30).
Dado su protencial corporal, físico, mental y emocional, los hombres son quienes deben estar al
frente del trabajo y la batalla espiritual por el reino de los cielos (I Sam.17:8,9). Cuando ellos se
levantan y ganan, gana la Iglesia, gana la familia y gana la sociedad.
ÉNFASIS DEL GRUPO

En el ministerio de varones se debe hacer énfasis en la definición de lo que es ser hombre, ya
que si logramos llevar a los varones a definir y practicar la verdadera hombría, los habremos
capacitado para cumplir su misión en la tierra.
Pero, ¿qué es ser hombre? Vamos a llevar a los hombres a entenderse a sí mismos como
hombres, según el concepto de Dios. Para Dios un hombre es:
[1] Un líder.
[2] Un ministro.
[3] Un representante del Padre celestial.
En las reuniones de varones se enseña los hombres a procurar y a cumplir con el propósito
triple del hombre en la humanidad, que es:
(a) Liderar a través del servicio a Dios y a otros.
(b) Brindar protección a la integridad de una familia.
(c) Representar a Dios ante sus semejantes (Dios es varón).
Pero, ¿cuál es la razón detrás de estos énfasis? Esto se hace porque entender el papel del
hombre es importantísimo para lograr los siguientes aspectos:
 El pensamiento correcto del hombre soltero.
 Un matrimonio saludable.
 La paternidad saludable.
 Las relaciones saludables de negocios y profesionales o de oficio.
 Iglesias saludables.
Como usted ve, es mucho lo que se puede perder si no ministramos a los hombres, y es mucho
lo que se puede ganar si los ministramos con poder y enseñaza.
IMPORTANCIA DEL VARON

Veamos la importancia del varón para Dios en la secuencia que él siguió en la creación (I
Tim.2:13). Ya que Dios lo hizo primero en la creación inicial, quiere tratar primero con él en su
búsqueda por recobrar lo que se perdió en la caída. Dios siempre comienza sus planes, sus
propósitos, su obra, y casi todo, con un varón. Ejemplos bíblicos de esto son:
1. La raza humana: Comenzó con Adán.
2. El camino a Dios por la fe: Comenzó con Abraham.
3. El pueblo judío: Comenzó con Jacob.
4. La liberación de Israel: Comenzó con Moisés.
5. La conquista de Canaán: Comenzó con Josué.
Pero el ejemplo más vivo de esta importancia del varón es que el Hijo de Dios, el Salvador del
mundo, quien es varón y vino al mundo como un varón. “He aquí el hombre” (Jn.19:5, cp.
Lc.23:47). El varón es el comienzo de los planes de Dios. Cuando este está en orden la familia
está en orden, la sociedad está en orden, y la Iglesia está en orden.
NECESIDAD DE CONVIVENCIA ENTRE VARONES

Una cosa muy positiva que proporciona el trabajo en los hombres como tales es que nos
permite formarlos o transformarlos, según se necesite, en un ambiente a amistad en el nivel “solo
para hombres”, es decir, donde pueden ser ellos como son, tratar temas propios a su género y
aprender de otros hombres más avanzados.
El hombre necesita ser entrenado bajo otros hombres, pues aprende de influencia. ¿Cómo
vinimos a ser el hombre que somos, bien o mal? Pues imitando. Hay un pensamiento que encierra
una gran verdad, y que dice: “Los varones no nacen, se hacen. Los niños nacen”.
Algunos sentimientos comunes en varones que NO han sido correctamente entrenados por otro
varón son:
(a) Sentirse inadecuado.
(b) Temor a otros hombres.
(c) Sentirse inferior a algunos y superior a otros.
(d) Insatisfacción e infelicidad.
Usted como pastor se va encontrar con estos problemas en sus hombres, y se le hará fácil
corregirlos en un grupo varonil. Tenemos qué descubrir el poder y bendición que hay en el
compañerismo entre un varón y otro para llegar a ser la persona máxima que Dios quiere que
seamos. Los varones ayudan a formarse el uno al otro viviendo en una relación de amistad,
confianza y responsabilidad muta (Pr.13:20; Pr.27:17; I Jn.1:7).
OBJETIVO DEL MINISTERIO DE VARONES

El propósito de que exista un Ministerio especial para hombes en la iglesia es: Que sirva como
un medio de ayuda a la iglesia local proveyéndo ministración especial para hombres, con el fin
determinado de:
(1) Salvar: Que allí acepten nuestros invitados a Cristo.
(2) Ministrar: Enfocar las necesidades específicas del varón y atenderlas, para que así sea
más victorioso en Cristo.
Con los temas que se tratan en la conferencias, los cuales mencionaremos unos párrafos más
adelante, se pretenden concretamente dos cosas:
(a) Atacar específicamente a demonios que atacan particularmente a los varones.
(b) Atender áreas de la vida de los hombres que deben ser atendidas por la iglesia.
FUNCIONAMIENTO DE UN GRUPO DE VARONES

He aquí algunas sugerencias que nos sirven para organizar un grupo de hombres en nuestra
iglesia:
1. Se comienza con un líder. Debe ser una personas con un matrimonio estable, una familia
ejemplar y que irradie energía y acción.
2. Se invita personalmente a cada varón.

3. Se continúa haciendo las reuniones con persistencia.
4. Compartir con ellos el liderazgo de la iglesia y del grupo, es decir, ponerlos a hacer cosas.
5. Se debe hacer sentir cómodo al hombre nuevo.
6. No deje tareas de semana a semana. A los hombres adultos generalmente no les gusta la
escuela.
7. Tenga objetivos específicos en tiempo y obra. Los varones responden a planes concretos.
8. Deje que ellos mismos descubran verdades bíblicas y las compartan cuando participen en el
grupo. No se ponga como un experto, sino abra la discusión.
9. No pida a un varón que haga algo para lo que no está preparado, como orar, predicar o leer.
En ese caso, mejor pedir las cosas con tiempo o pedir voluntarios.
10. El pastor y el líder de varones deben orar mucho para que Dios levante el grupo y que se de el
fruto del mismo en el hogar y en la iglesia.
Una cosa muy importante para que el grupo funcione es reunirse en un lugar cómodo y no
amenazante, por ejemplo, una casa, un restaurante, un garaje, o bien la iglesia, pero con un
acomodo tipo relajante del mobiliario. El secreto es hacer una reunión informal, no religiosa, que
los haga sentir aceptos como son.
Cabe mencionar que la reunión de varones no es lo que se conoce como “servicio de
caballeros” en muchas iglesias, sino un círculo o club amistoso de interés espiritual.
TEMAS ESPECIALES PARA VARONES

Para ser aún de mayor bendición y superior ayuda a los varones, las CONFERENCIAS PARA
VARONES deben tratar TEMAS ESPECIFICOS que nos incumben a nosotros los hombres, temas
especiales ya determinados para atender a las áreas en las que nosotros ocupamos tener victoria.
Por el amor que tiene hacia sus varones debe traerles estas conferencias que los harán mejores
hombres y mejores cristianos:
1. El hombre como esposo, sus reponsabilidades y cómo manener feliz a su esposa.
2. El hombre como padre (responsabilidad, sensibilidad, amor).
3. El hombre cristiano en su trabajo.
4. El hombre ante la tentación.
5. El hombre y su papel en la congregación (líder y ejemplo).
6. El hombre y el manejo de su dinero (administracióm, deudas, ahorro, préstamos, etc.).
7. Cualidades de conducta del hombre cristiano (honestidad, honradez, responsabilidad, trabajo,
caracter, voluntad, desiciones).
8. Las etapas de la vida del varón (cambios con respecto a la edad).
9. Las 4 áreas de debilidad del hombre y cómo dominarlas (fama, dinero, sexo y poder).
10. Cómo formar una familia cristiana.
11. El hombre y el manejo de su tiempo.
12. El varón y la exelencia en su oficio.
13. El varón y la presión exterior (cómo resistir la influencia del mundo, cómo vivir en santidad en
medio del grupo, y de los que nos rodean).
14. El hombre como mayordomo de Dios (administrador de sus bienes, de su dinero, de su
tiempo, de sus talentos, de sus capacidades, de su salud, etc.).
15. El hombre y la amistad verdadera (siendo amigo y teniendo amigos, el significado y propósito
de la verdadera amistad, encontrando buenos amigos, etc.).
16. El hombre rompiendo patrones erróneos de su formación (el concepto correcto de Dios acerca
de la hombría, la liberación personal, el perdón, nuestro padre terrenal y nuestro Padre
celestial, etc.).
17. Varones ejemplares de la Biblia (y otros no muy ejemplares), por ejemplo Josué, Jacob, Jetro,
José, Sansón, Pablo, Nehemías, Naamán, etc.
En fin, los temas para hombres son interminales, sin embargo de vez en cuando se deben tratar
temas generales de la vida cristiana, con de que sen temas prácticos o de actualidad, ya que los
varones aprenden según lo que necesitan. Y cuando la reunión tome la forma de una conferencia,
es bueno dar un material escrito gratuito del tema que se trató para que cada varón lo lleve y lo
tenga para referencia posterior.
MOTIVACIÓN
Debemos evaluar constantemente el trabajo en nuestro Departamente de Varones, viendo la
necesidad de mejorar siempre para llegar a nuestra meta. Si ministrar a los hombres de nuestras
iglesias NO ES CONSIDERADO IMPORTANTE a nivel de la iglesia local, tampoco va a serlo en
toda la Iglesia de Cristo en general. Como ve, hermano, es muy importante que llevemos a los
hombres a TOMAR LA INICIATIVA ESPIRITUAL en la Iglesia, y a que entren a ocupar su posición
correcta (que han abandonado) de ser los LÍDERES ESPIRITUALES DE SU ESPOSA E HIJOS. Si
esto no se logra, nunca se cumplirá el propósito perfecto de Dios para nosotros.
CONFRATERNIDAD
Es bueno participar también en actividades de varones junto con otros ministerios que lo hagan.
De este modo se logran varias cosas:
(1) Sus varones se motivan al salir a participar en actividades fuera de la Iglesia.
(2) Su iglesia se ahorra el gasto y tiempo de organizar conferencias de varones a nivel local,
en los que habrá qué traer un predicador invitado, hacer volantes y preparar un programa.
En una confraternidad o congreso de varones cristianos a nivel ciudad, estado, o concilio, la
ventaja es que ya todo está hecho para usted, y solo tiene qué movilizar a sus hombres a
participar.
MINISTERIO A LAS MUJERES
El Ministerio de la Mujer en la iglesia es una preciosa aportación al bienestar del cuerpo de

Cristo, porque es una continuación del ministerio de Jesús, quien dio un alto sentido de honor a la
mujer. El entendimiento, enseñanza y énfasis de las bases expuestas a continuación nos sirve
para ir desarrollando un buen grupo de mujeres que sirvan a sus maridos, a sus hijos y al Señor.
METAS DEL MINISTERIO A LAS MUJERES

El ministerio de la mujer se desdobla a través de ciertos elementos mediante los cuales las
mujeres podrá crecer y mejorar como esposas, como madres, como hijas, como amas de casa y
como siervas de Dios. Estos principios básicos que conviene manejar durante las ministraciones a
las mujeres son:
1. La mujer debe entender el significado de la verdadera belleza.
2. La mujer debe adecuarse a las circunstancias adversas, y la vida como la ha recibido.
3. La mujer debe aprender a ser una dama de excelencia, una mujer virtuosa.
4. La mujer debe ofrecer sus talentos como ofrenda a Dios.
5. La mujer debe apreciar la hermosura y el valor de cada etapa en su vida.
6. La mujer debe ser fuerte espiritualmente ante los cambios y circunstancias difíciles para
fortalecer al resto de su familia.
7. La mujer debe mostrar sumisión a su esposo en cada aspecto de la pareja.
8. La mujer debe encontrar su rol de servicio dentro de la iglesia de Cristo.
9. La mujer debe valorar por encima de todo sus responsabilidades dentro del hogar.
10. La mujer debe evitar ser dominada por un espíritu de Jezabel (dominación y control), que
obstruya su preciosa aportación a la familia y a los santos en general.
ATENCIONES ESPECIALES
La iglesia cristiana debe saber aportar atención especial a las mujeres que han sufrido agravios,
abusos, decepciones y fracasos, ministrándoles consejería de la Palabra de Dios en amor, así
como sanidad interior por el poder del Espíritu Santo. Esta ministración siempre irá enfocada a
recuperar, reintegrar y rehabilitar a la vida normal y satisfactoria a estas necesitadas hijas de Dios.
La ministración a las mujeres es muy variada, según los sucesos que esté viviendo y el rol que
le ha tocado. A veces habrá qué ministrarlas:
- Como madre.
- Como esposa.
- Como madre soltera.
- Como madre viuda.

- Como hija.
- Como amiga.
También varía según su estado civil. Se necesita el consejo adecuado según sea:
- Soltera.
- Novia.
- Casada.
- Viuda.
- Divorciada.
- Re-casada.
Luego, también lo determina la ocupación o estilo de vida, si es:
- Profesionista.
- Ama de Casa.
- Empleada.
- Empresaria.
- Ministro de evangelio.
- Etc.
El pastor debe tener la respuesta sabia y adecuada a las preguntas de la mujer según el caso
preciso.
ENSEÑANZA DE LA VIDA
Según la Palabra de Dios, las mujeres van a aprender acerca de Dios y de la vida a través de
tres medios principales:
a) Mediante la enseñanza de sus líderes espirituales (I Tim.2:9,10; Tit.2:1).
b) Mediante el consejo de su esposo (I Cor.14:34,35; I Tim.2:11-15).
c) Mediante la instrucción de mujeres mayores (Tit.2:3-5).
La iglesia cristiana debe promover la activación de estos tres medios para que se hallen
operando dentro de la congregación y bendigan a la mujer cristiana.
ÁREAS DE SERVICIO DE LA MUJER

El ministerio de la mujer debe preparar en madurez y estabilidad a las mujeres con el fin de que
encuentren su área de servicio dentro de la congregación. La iglesia debe proveerles la
oportunidad de ministrar. He aquí algunas plazas dentro de cuales las damas de Dios pueden
ofrecer una ofrenda de esfuerzo sacrificial para el Señor:
a) Ministrando la Palabra y los dones espirituales bajo el poder del Espíritu Santo (Hch.21:9).
b) En el ministerio de oración, intercesión y guerra espiritual (Hch.16:14).
c) Como diaconisas o siervas de confianza en encargos de la obra de Dios (Rom.16:1,2).
d) Generando y aportando recursos para el sostenimiento de la obra de Dios (Lc.8:1-3).
e) Como ayudantes de los siervos de Dios (Rom.16:12).
Otras muchas opciones incluyen la alabanza y la adoración, el servicio en el templo, la ayuda a
los siervos de Dios, etc., en fin, todas aquellas cosas en las que el Señor les unja para realizarlas.
MEDIOS DE MINISTRACIÓN
Es necesario ser muy creativo para saber ministrar a las mujeres, y para motivarlas a trabajar
juntas por un propósito definido. El papel de la esposa del pastor será muy decisivo en la
estimulación de las hermanas al trabajo del Señor.
En cuanto a las estrategias y modos de alcanzar a más mujeres y de edificar a las que ya
tienen a Cristo, pues esta pueden ser de muy variada índole, entre ellos:
 Conferencias especiales.
 Congresos.
 Retiros.
 Oradoras invitadas a la iglesia.
 Reuniones mensuales.
 Oración semanal.
 Grupos de trabajos especiales en la iglesia.
 Proyectos de trabajo (sea para recabar fondos o para un fin espiritual).

 Etc.
En fin, la lista es ilimitada. Dejémonos dirigir por Dios, y él nos iluminará para alcanzar a sus
hijas con amor, y lanzarlas a activar en el Reino.
Capítulo 8
EL MINISTERIO DE JÓVENES
Y DE NIÑOS
EL MINISTERIO DE LOS JÓVENES
Hch.2:17; 1ª. Tim.4:12; Ef.6:2,3; Tit.2:4-8; I Pe.5:5
LOS ELEMENTOS
Para un correcto desarrollo de una iglesia se necesita un buen ministerio de jóvenes. Los
ingredientes que componen un buen ministerio de jóvenes son muy sencillos, pero vitales y
poderosos. Helos aquí
1. LA REUNIÓN. La reunión de jóvenes debe ser distinta de todas las reuniones de la
congregación. Debe incluir cosas que sean importantes para ellos, tratar temas relevantes a
ellos e incluir actividades que sean interesantes para ellos. Ningún joven participará en algo
que no le sea interesante. Las pláticas deben ser amenas y coloridas, hasta curiosas, que
incluyan risa y llanto, movimiento de sus emociones, claras y bien explicadas, que vayan al
grano, etc.
2. EL LÍDER. En el ministerio de jóvenes es muy importante el líder, porque los jóvenes
siempre buscan un líder, alguien a quién admirar, a quién recurrir, a quién seguir y a quién
imitar. Los jóvenes del día de hoy generalmente recurren a un amigo para resolver sus
dudas. El líder debe representar ese amigo comprensivo que los va a escuchar. Esta es la
pieza más difícil de encontrar para un buen ministerio de jóvenes, y la más preciada, pero la
más clave: Un líder que reúna las cualidades de ser dinámico, simpático, interesante, con
personalidad no amenazante a los nuevos, normal y corriente, comprensivo y lleno de Dios.
3. LAS ACTIVIDADES. Trabajar a los jóvenes es el secreto de un grupo dinámico, y las
actividades fuera del templo son imperiosas para brindarles una experiencia de aventura
constante, que los distraiga del mundo y los atraiga a la congregación. Esta es una nueva
generación, y las formas de alcanzar a los jóvenes también deben ser nuevas. Cualquier
cosa que sea paseo, clases de música, comida, excursión, salida, concierto, etc., es decir,
que les provee una oportunidad de estar “entre amigos” será algo irresistible para ellos. Esto
no es malo en sí mismo, ya que es parte integral e inseparable de la vida del joven, muy
propia de su edad. Todo esto se puede realizar sin perder de vista el objetivo, la visión de
proveerles la oportunidad de ser ministrados por Dios en las reuniones de adoración.
4. EL NOMBRE. El grupo de jóvenes debe tener un nombre que lo identifique, un nombre que
apele a ellos, que los haga sentir suplidos en su necesidad de pertenencia.
DIVISIONES DEL GRUPO

Conforme crece la iglesia, las diferencia de las edades de los jóvenes se van viendo más
pronunciadas. Allí es cuando se hará necesario dividirlos en grupos conforme a la etapa de su vida
en la que están viviendo, que les atienda en sus necesidades e intereses particulares según la
edad que en que se encuentran. La siguiente división parece muy lógica.
Divisiones de edad de los jóvenes

1er. Grupo 2do. Grupo 3er. Grupo
11 a 14 años 15 a 18 años 19 a 25 años
TEMAS PARA JÓVENES

Los temas que se tratan entre jóvenes son muy especiales. Deben ser temas que capten su
atención y nos garanticen su interés y atención, para poderles enseñar principios bíblicos
relacionados con cada uno de tales temas y que les enseñen a vivir la vida cristiana dentro de su
mundo. Entre estos contenidos que se pueden tratar con ellos están:
1. EMOCIONALES / PSICOLÓGICOS: La identidad. La aceptación. La felicidad. La amistad.
La autoestima. La seguridad personal. La auto-motivación. La personalidad.
2. DE RELACIÓN. 1. El verdadero significado de la amistad. ¿Qué son los amigos? ¿Cómo
puedo ser uno de ellos? ¿Cómo conseguirlos? 2. Encontrando el verdadero amor. ¿Qué es
al amor? ¿Cómo se comprueba el amor? ¿Qué es y para qué es el noviazgo? ¿Cuándo
debo casarme? 3. El noviazgo. ¿Cómo me mantengo en santidad en mi noviazgo? 4.
Resolviendo confictos. Con los amigos, con los padres, con los maestros, con la autoridad,
con los hermanos de casa, etc. 5. La convivencia familiar.
3. DE LA VIDA. Las decisiones importantes de la vida. ¿Cómo conocer la voluntad de Dios.
¿Qué voy a estudiar? ¿Con quién me voy a casar? ¿Qué me toca hacer en la obra de
Dios?
4. SITIUACIONES DIFÍCILES. Temas relacionados con problemas graves que afrontan los
jóvenes de hoy: 1. La muerte de un ser querido (amigo, hermano, padre, madre, abuelo,
tío, etc.). 2. Pérdida de la virginidad. 3. Embarazos no deseados. 4. Divorcio de los padres.
5. Abuso sexual, físico o verbal durante la niñez. 6. Pensamientos de suicidio.
5. TENTACIONES. De especial importancia están los consejos sobre las tentaciones difíciles
de vencer: 1. Relaciones sexuales premaritales. 2. Complacer a amistades no buenas. 3.
Escuchar música negativa, satánica o impía.
6. ÉTICOS. Otros temas acerca de los que los jóvenes deben saber son: El aborto, la
eutanasia, el sexo pre-marital, los tatuajes, el alcohol, las drogas, la guerra, las pandillas,
el uso de las armas, el respeto a la justicia, etc.
7. MORALIDAD PERSONAL. El dinero, el materialismo, la imagen personal, el orgullo, la
moda, (¿Es mala o buena? ¿Es pecado seguirla?), etc.
8. DE DUDAS. ¿Cómo probar que Dios existe? ¿Quién hizo el mundo? ¿Cuál es el propósito
de la vida? ¿Por qué existe el sufrimiento? ¿Hay vida después de la muerte?
9. DE ACTUALIDAD. Los platillos voladores, la música, el horóscopo, el SIDA, las sectas, la
Nueva Era, etc.
10. ESPIRITUALES. Los temas espirituales que se puede tratar con ellos son: La ayuda del
Espíritu Santo. La alabanza y la adoración. La fe. La obediencia. La perseverancia. La
oración. La tentación. El evangelismo. La redención. La persecución. Efectos y grados del
pecado. La hipocresía. La gracia. La guerra espiritual. Etc.
11. VALORES. Los valores que se van a tratar de impregnar en ellos son: La integridad. La
honestidad. La perseverancia. La obediencia. La preparación. La paciencia. Las
prioridades. La buena conducta. La ética cristiana. Las convicciones.
12. DE CRISIS. Los temas críticos que se pueden tratar con ellos son: Las heridas. La traición.
El rencor. El perdón. El sufrimiento. La violencia. La rivalidad en la familia (o entre
hermanos). Los enemigos. La culpa.
PROGRAMAS QUE MOTIVAN A LOS JÓVENES

¿Cuáles son algunos proyectos que podemos emprender para mantener a los jóvenes
interesados, y así darle la oportunidad a Dios de trabajar en sus vidas?
1. Dentro de la Iglesia: Dramas, coros, grupos de alabanza, amigo secreto, tarjetas
(invitación, “feliz cumpleaños”, “te extrañamos”, “gracias”, etc.).
2. Fuera de la Iglesia: Campamentos, retiros, viajes, fiestas, juegos, convivios (cumpleaños,
día del padre, de la madre, etc.), actividades que recaban fondos etc.
3. En su caminar cristiano: Tener un libro de devociones personales, etc.
Todas las actividades de jóvenes deben ser realizadas y planeadas con mucho entusiasmo.
Recuerde que para ministrar a jóvenes necesitamos saber:

(1) Sus necesidades.
(2) Sus gustos.
(3) Sus heridas y dolores.
(4) Sus temores y dudas.
METAS DEL GRUPO

La meta del grupo de jóvenes tiene 3 niveles:
1 De primero, la meta es que el joven se sienta aceptado, y que desarrollen amistades profundas
dentro del grupo.
2 Luego, la meta más precisa es llevarlos a tener un encuentro con Cristo, y darles las bases
para que tomen buenas decisiones en la vida.
3 Finalmente, nuestra meta es llevar a los jóvenes a una madurez de servicio cristiano, en la que
se envuelvan en el ministerio a otros.
MATERIAL DE ESTUDIO
Al escoger o preparar algún material de estudio o de discusión par nuestros jóvenes, es justo
buscar entre los que tengan ciertos elementos imprescindibles. Un libro o manual para jóvenes
debe tener:
 Títulos contemporáneos.
 Imágenes atrevidas que capten la atención.
 Actividades qué realizar.
 Ideas de cómo aplicar la verdad aprendida, tareas, etc.
 Ideas concisas y concretas para recordar (tal vez en marcos, dibujos, etc., que les hagan
recordar lo aprendido).
 Preguntas picantes de discusión.
EL MINISTERIO INFANTIL
(Pr.22:6; Mt.19:13,14; Mt.21:15; Ef.6:1-3).
La vida es una serie de cambios para las personas mientras se desarrollan física, mental y
espiritualmente. La iglesia debe reconocer estos cambios y prepararse para ellos en la vida de sus
miembros. El entendimiento del desarrollo humano proporciona una base sobre la cuál ministrar a
cada etapa de nuestros hijos.
GRUPOS DE NIÑOS
Se puede agrupar los niños por edades para una ministración más adecuada básicamente del
siguiente modo:
1. Grupo de 3 a 5 Años . Un niño está preparado para entrar en esta clase cuando un niño ha
aprendido ya a caminar, hablar, alimentarse por sí mismo, comenzar a vestirse solo, y por lo
tanto ya no demanda la atención constante de sus padres, o sea, cuando ha cruzado ya la
primer etapa de desarrollo.
2. Grupo de 6 a 8 Años . Deben pasarse a la clase de principiantes los niños que ya están
estudiando en la escuela pública. Este niño ya ve el mundo en una manera muy diferente que
el niño que aún está todo el tiempo en su hogar, encerrado en cuatro paredes. Estos deben ser
enseñados ya en una forma diferente y en una manera en que la enseñanza bíblica pueda
aplicarse a sus problemas particulares propios de su edad y de la manera que él ve la vida.
3. Grupo de 9 a 11 Años . Los niños de esta edad comienzan a interpretar e imitar valores de las
personas. Por tanto, son admiradores de héroes y necesitan un maestro que sea un buen
ejemplo para ellos ya que aprenden más por el ejemplo que por las palabras. Antes de los 9
años los niños no son muy conscientes de todas las diferencias de los dos sexo, pero estos
“jóvenes” de 9 en delante ya han alcanzado un estado en el que definitivamente se dan cuenta
de la gran diferencia que existe entre ser niño o niña. Esta edad no es fácil porque existe
mucha antipatía de parte de ellos a escuchar una clase elaborada, por lo que habrá qué ser
ameno, inventivo y variado para enseñarles la Biblia.
El pastor y la iglesia deben procurar alcanzar a cada uno de estos grupos con el impacto del
evangelio, y alcanzarlos según su edad.
OPORTUNIDADES DE MINISTERIO
Entre las actividades que se pueden hacer para los niños están las siguientes, que nos pueden
servir para lograr lo que queremos en ellos: Un encuentro con Cristo y envolverlos en forma
dinámica dentro de la vida de la iglesia:
1. Escuela Dominical (es decir, clases por edades cada semana en Domingo).
2. Coros de Niños.
3. Escuelas Bíblicas de Verano o Semana Santa.
4. Células de niños en hogares.
5. Excursiones.
6. Evangelismo en parques.
7. Otros programas (dramas, danza con panderos, periódicos, murales, música, etc.).
Una oportunidad muy especial para ministrar a nuestros niños es durante la predicación o el
estudio bíblico en cada reunión, donde se trata NO solo de “entretener” o “cuidar” a los niños, sino
de ministrarles de verdad, según sus necesidades. Debemos aprovechar ese tiempo especial y
valioso para enseñarles la Palabra de Dios y principios para la vida.
LA IGLESIA INFANTIL
Una de las mejores formas de ministrar a los niños es proveerles el programa de la Iglesia
Infantil, que se trata de hacerle a los niños una reunión aparte de los adultos y de los jóvenes, en la
cual ellos tengan su “propia iglesia” literalmente, con todo lo que lleva, en toda la extensión de la
palabra. Esta se puede llevar a cabo durante el servicio del Domingo o en cualquier día de la
semana que se considere conveniente.
En esa reunión semanal se les ministra salvación, liberación y sanidad. Ellos dirigen la
alabanza, oran, predican, ministran a las necesidades, aprenden Biblia, y recibe una ministración
especial según sus necesidades. Lo importante es que se cumpla el objetivo, que es: Proveerles la
oportunidad de experimentar a Dios en una forma personal.
MAESTROS, CLASES Y MATERIAL

Los maestros, pastores o líderes de niños han de ser personas de las siguientes
características:
1. Creativas.
2. Sabias.
3. Entusiastas
4. Responsables.
5. Amables.
6. Que se preocupen por cada uno de los niños en su lista de grupo, casi con un sentido
pastoral.
Las clases o reuniones que se realizan para los pequeños han de ser muy amenas e
interesantes, que logren el objetivo de enseñar verdades bíblicas y principios morales, así como de
llevarlos a una experiencia dinámica con Dios. El material que se usa para darles su clase bíblica
debe estar lleno de actividad, variedad y color, y puede incluir cualquier ayuda visual o de sonido
que ayude al líder a fijar la lección en la mente y corazón de los niños.
Capítulo 9:
EL ALCANCE FAMILIAR
Cómo Ministrar y Aconsejar a la Familia
ÉNFASIS FAMILIAR
Es muy importante que como pastores ministremos a las ovejas “por familia”, es decir, que
miremos a los hombres, mujeres, jóvenes y niños como partes de una casa que necesita de Dios,
porque no se puede madurar como iglesia si no estrechamos los lazos familiares. De otro modo, a
veces solo predicamos y llenamos un programa, pero sin llegar a las necesidades espirituales y
emocionales de la gente.
La familia tiene mucho qué ver con el crecimiento de una iglesia. La familia tiene mucho qué
ver con el crecimiento de la iglesia. Para muchas familias es determinante si se quedan en nuestra
iglesia o no el hecho de cómo podemos ayudar a su matrimonio, a sus hijos jóvenes, a sus niños
pequeños, etc. Por tanto, como pastores, debemos hacer énfasis en que las personas crezcan en
sus lazos familiares y reflejen a Cristo en su vida dentro de la casa. Dios quiere que le sirvan
familias completas (Dt.31:12; Hch.16:31).
DEFINICIÓN DE FAMILIA
¿Qué es una familia? El diccionario nos dice que es sinónimo de parentela, clan, casta, estirpe,
progenie, prole, raza. Es el conjunto de personas se hayan unidos por lazos sanguíneos, un grupo
formado por las personas que tienen parentesco con uno, o por una pareja y sus hijos. Para
nosotros, sin embargo, el concepto de familia va más allá. Es una idea divina, una unidad bendita
de personas donde los más jóvenes aprenden de los más viejos los valores éticos, morales y
espirituales que necesitan para defenderse en la vida, y para conocer a Dios.
Muchos universitarios saben cómo construir una casa, pero no saben nada de cómo construir
un hogar. Familia y hogar no son la misma cosa: Familia tiene qué ver con los elementos humanos
que la componen; hogar es el resultado de la conducta amorosa de esos seres humanos
LA UNIDAD FAMILIAR
Es más fácil y más productivo para nosotros trabajar a la iglesia por familias que como ovejas
separadas. Nehemías lo supo y ante las amenazas contra la obra de Dios “puso al pueblo por
familias” (Neh.4:13,14). De esta manera cada uno mantuvo latente la motivación de victoria y el
espíritu de defensa y sacrificio. Nos trae varias ventajas:
1. No hay cosa que de más confianza a los parientes inconversos de nuestras ovejas que el
notar que no representamos una amenaza a la integridad e identidad de su familia.
2. Cuando los hacemos entender que sus decisiones afectan a su familia, logramos mejores
resultados en motivar a las personas a acercarse a Dios y a los creyentes a ser más fieles
al Señor. Por ejemplo, ¿qué no haríamos por nuestros hijos?
La familia fue establecida antes que la Iglesia. Esta última debe, entonces, perfeccionarla.
Como pastores, siempre debemos enfatizar y procurar la unidad conyugal y familiar.
POEMA ANÓNIMO:
¡Hogar fue antes que iglesia!
¿Quién así no lo puede entender?
¿Iglesia sin hogar? ¡No puede ser!
¿Hogar sin Iglesia? ¡Puede llegar a perecer!
¿QUÉ COSAS DEBEMOS ENSEÑAR SOBRE LA FAMILA?

Como pastores, hay varias cosas que debemos saber y que es nuestra responsabilidad estar
acentuando y robusteciendo todo el tiempo, cuando predicamos, cuando aconsejamos, cuando
visitamos, cuando evangelizamos. Vamos a resumirlas en 10 puntos breves:
A LOS PADRES:
1. Debemos enseñarles a ser agradecidos con Dios por sus hijos (Mt.2:21-24).
2. Debemos enseñar que los padres le den el suficiente tiempo y atención a los hijos pequeños,
adolescentes y jóvenes (Dt.5:16; 6:6-8; Mt.19:14).
3. Que deben ser templados, razonables y no abusivos en disciplinar a sus hijos, disciplinando
con el fin de instruir y formar, no de destruir y deformar (Ef.6:4).
A LOS HIJOS:
4. Debemos enseñarles obediencia (Lv.20:9).
5. Debemos enseñarles a honrar a sus padres (Ex.20:12).
6. Deben aprender fidelidad y respeto hacia sus padres (Pr.30:17; Mt.7:11,12).
A LAS MUJERES:
7. Que se dediquen al hogar, a su marido y a sus hijos, es decir, que no descuiden su labor más
noble y loable: La atención de su casa (I Tim.2:9-15; 5:9-15).
8. Que deben reconocer la autoridad del varón, pues él es su causa y su fuente primaria,
habiendo sido ella creada para él (I Co.11:3).
A LOS VARONES:
9. Reconocer y suplir las necesidades de la esposa, brindándole un ambiente de comunicación,
cooperación, protección y afecto (I Co.7:3-6).
10.Tomar el liderazgo espiritual de la familia.
ACONSEJANDO SOBRE EL NOVIAZGO

El noviazgo es el tiempo en que dos personas intentan acoplar sus caracteres y conocerse en
costumbres, aspiraciones y prioridades. En esta etapa es muy importante ayudar a los novios
porque allí se determina si se efectúa un matrimonio o no. Hay una diferencia entre “amistar” y
“noviar en serio”. ¿Qué cosas debe aconsejar el pastor a
1. Se debe enseñar a los jóvenes a notificar a sus padres y al pastor cuando estén interesados
en noviar con alguien (I Pe.5:5-7). Deben tomar en cuenta toda autoridad sus vidas: Dios, sus
padres y su pastor.
2. A los jóvenes se debe enseñar a orar para saber la voluntad de Dios (Rom.12:1,2).
3. Que sepan la diferencia entre atracción y amor. Lo uno es emocional y pasajero, lo otro es
comprometido y duradero; uno envuelve los sentidos y el corazón, y el otro la voluntad y la
mente.
4. Que no escojan novios inconversos (II Co.6:14).
5. Que no duren muy poco de novios antes de casarse, pero que tampoco duren demasiado.
6. Que los novios deben preguntarse muchas cosas, como si fueran a firmar un negocio con un
socio por 50 años. ¿Qué preguntarían a un socio en un caso así?
7. Que deben llegar puros al matrimonio, que no deben acariciarse indebidamente, que no deben
esconderse para platicar, sino mantener al tanto a sus padres (Fil.4:8).
CONSEJERÍA PRE-MATRIMONIAL
Una vez comprometidos, antes de que una pareja se case el pastor cristiano debe darles unas
Pláticas Pre-Matrimoniales para aumentar las posibilidades de victoria de tales personas cuando
ya estén casados. Estas pláticas deben incluir los siguientes temas:
Los 10 Grande Temas de la Consejería Prematrimonial:
1. El rol del varón y el la mujer en el hogar.
2. Trato y distancia con sus familias de origen.
3. Paternidad y planificación familiar.
4. Intimidad.
5. La buena comunicación.
6. El respeto y la admiración mutuos.
7. Consejos sobre la administración del dinero.
8. Las diferentes necesidades del hombre y de la mujer.
9. Solución de problemas y conflictos.
10. Cristo como el centro de la familia, y la vida espiritual en el hogar.
También, según la necesidad, el pastor puede sugerir que la pareja consulte a un médico de
confianza acerca de los temas obvios que deben conocer los casados. El pastor debe procurar
hacerse amigo de estas parejas jóvenes, porque la ayuda que les brindemos en esta etapa nunca
será olvidada, y creará una confianza que nos permitirá seguirles ministrando por largo tiempo.
EL MINISTERIO A LOS MATRIMONIOS

Toda iglesia debe tener un programa para ministrar a los matrimonios de la iglesia, que debe
estar trazado conforme a los siguientes lineamientos:
REUNIONES:
Este ministerio puede consistir en reuniones:
- Semanales.
- Mensuales.
No se recomienda que estas reuniones sean menos que mensuales, porque la unidad y el
bienestar del matrimonio es algo que debe mantenerse siempre al día.
LUGAR:
Tales reuniones se pueden llevar a cabo donde sea:
 En la iglesia.
 En un restaurante.
 En casas.
PROPÓSITO:
¿Qué se hace en estas reuniones de parejas?
 Se resuelven dudas y preguntas.
 Se ministra en oración a las parejas.
 Se convive con otras parejas.
 Se tocan temas de interés a la pareja.
 Se glorifica y se busca a Cristo.
 Se fundamenta en la Palabra
TEMAS:
Entre los temas que incumben a la vida en pareja, y que se deben tratar en estas reuniones, se
hayan los siguientes, entre muchos otros:
1. Guardando los votos matrimoniales.
2. La sexualidad sana.
3. El rol del hombre y el de la mujer.
4. Resolución de conflictos matrimoniales.
5. El perdón y la paciencia mutua.
6. La vida espiritual del matrimonio.
7. El ministerio de pareja.
8. La crianza de los hijos.
OTRAS ACTIVIDADES:
También, el ministerio de los matrimonios puede realizar otras actividades, tales:
o Organizar Congresos o Conferencias matrimoniales.
o Asistir a eventos matrimoniales que ya existen.

o Hacer retiros espirituales para buscar la presencia de Dios.
o Realizar cenas de parejas juntos.
IMPORTANCIA:
La importancia de que haya un ministerio de esta naturaleza en la iglesia es que cuando
ministramos a los varones o a las mujeres por su propio lado, se corre el riesgo de que salgan
ministrados pero que al legar a su hogar se encuentren de nuevo con los mismos problemas de
pareja. No debemos conformarnos con solo animar o activar a los hombres y a las mujeres, sino
procurar lograr llevarlos a la victoria de sus vidas como matrimonio.
LÍDERES:
Los líderes de este departamento tan importante en la iglesia han de ser una pareja dinámica y
exitosa, quienes irradien victoria, confianza, que tengan un buen testimonio como pareja delante de
la toda la congregación. Han de entender la dinámica y la problemática del matrimonio y saber
aconsejar con la Palabra de Dios. Han de sentir carga por los matrimonios darles tiempo. Ellos
estarán al frente de las actividades de los matrimonios.
LAS ETAPAS DE UNA FAMILIA

Una de las cosas que nos ayudan a entender y dar el mejor consejo a las personas es
reconocer en qué etapa está cada familia que auxiliamos espiritualmente. Una familia cambia
muchísimo, según la fase de su vida en la que se encuentra. Analicemos estas etapas:
1. Los Años de Luna de Miel. En estos primeros años salen a relucir muchas similitudes y
diferencias. Solo la comprensión, el compromiso, el amor, la paciencia y el consejo los
salvará.
2. Los Años Tener Hijos. En esta etapa es mucho dar sin recibir. Los hijos invaden nuestra vida
personal y emocional, y nos absorben en tiempo, fuerzas y atención.
3. Los Años de Criar Hijos. La etapa en que nuestros hijos entran en contacto con otras figuras
de autoridad y ven hacia afuera de casa. Se toma mucho consejo, disciplina y amistad con
ellos.
4. Los Años de Soltar Hijos. Cuando toman pasos hacia la independencia, y comienzan a irse del
hogar uno por uno. Son años de preocupación y de cambios. Se necesita oración.
5. Los Años del Nido Vacío . Etapa difícil cuando los hijos se van y los esposos vuelven a
centrarse en la pareja. Tienen más tiempo, más dinero y más familia (nietos, nueras, yernos,
consuegros).
6. Los Años de Soledad. Cuando uno de los dos muere, existe el peligro de no adaptarse a la
individualidad. Habrá qué tener una pasión por las cosas de Dios para dedicarse más a él, y
afrontar el resto de la vida con propósito.
El pastor debe comprender cada uno de estos cambios, ser sensible a ellos, y ministrar el
consejo adecuado.
APOYO PASTORAL
Repetimos: La iglesia debe saber proveer un buen ambiente para el desarrollo de las familias.
Los pastores deben promover la unidad y el amor en la familia. Como en todo equipo, solo si todos
los elementos jalan juntos hacia la misma dirección se puede llegar a la meta. ¿Qué pueden hacer
los pastores para promover la conciencia familiar y la unidad en los hogares de la iglesia? He aquí
varias ideas:
1. Acostumbrarse a mencionar por apellido a las familias de la congregación. Hacer de nuestra
iglesia una iglesia de familias. Entender que está compuesta por familias.
2. Orar por ellos de cuando en cuando en el altar haciéndoles pasar “por familias”.
3. Visitar los hogares preguntando por toda la familia y orando por cada uno de los miembros.
Ungir la casa con aceite bendiciendo y reclamando la familia completa para Cristo Jesús.
4. Dar pláticas especiales de cuando en cuando en la iglesia para cada uno de los miembros de
la familia: Casados, solteros, hijos, padres, jóvenes, adolescentes, novios, estudiantes, etc.
Cabe mencionar que un buen pastor siempre ha de estarse documentando sobre el tema de la
familia, para estarlo manejando con eficacia cada vez que se presente una necesidad. Su
biblioteca tiene qué incluir libros que le instruyan en ese sentido, porque siempre se le presentarán
casos y preguntas en este sentido.
En gran parte, la medida de un pastor es su capacidad de ministrar a la familia, si sabe
reconciliar matrimonios en conflicto, si sabe promover el amor entre padres e hijos, si sabe lograr
que haya perdón por heridas pasadas, etc.
RELACIÓN DE LA VIDA EN FAMILIA CON EL MINISTERIO

La importancia de estar atentos a la vida en familia que llevan cada uno de los miembros radica
en que el ministerio cristiano está muy ligado a la conducta familiar. Nadie puede anhelar un
ministerio (ni se lo debemos dar) si no está destacando en su vida y trato dentro de la casa. Nadie
que no entiende la dinámica familiar puede ser obrero o ministro. Por ejemplo, de matrimonios
firmes salen muchos ministerios. Si solo nos dedicamos a ministrar a la gente en su vida en familia
y les en enseñamos a aplicar el evangelio allí, nos será difícil sacar ministros para poner en la
diversas posiciones y campos de trabajo en la obra de Dios.
Capítulo 10:
LA SANIDAD Y EDIFICACIÓN
DE LOS DOLIDOS
Cómo Ministrar a Gente Herida
Llegan de cuando en cuando a nuestras congregaciones gentes heridas y lastimadas por
diversas circunstancias de la vida, a quienes otros han hecho sufrir. Estas puede ser de dos tipos:
a) Personas que apenas se están acercando al Señor y que han recibido “golpes de la vida”.
b) Personas ya cristianas que han recibido “golpes” en la iglesia, es decir, que han sido
lastimados por otros hermanos, sinceros o malos (Ez.34:10,17).
Ezequiel nos dice que los pastores debemos fortalecer a los débiles, curar los enfermos, y
vendar los quebrados de las piernas (Ez.34:4); y Zacarías, por su parte, expresa que un pastor (se
supone) debe llevar los cansados a cuestas (Zac.11:16). ¿Cómo hemos de cumplir esta
responsabilidad tan hermosa pero tan difícil? Hay un forma correcta de actuar con ellos, que los
llevará tanto a una SANIDAD, como a una MADUREZ, es decir, que se libren del mal efecto del
dolor, pero que le saquen provecho.
RECONOCIENDO A UNA PERSONA HERIDA

¿Cuáles son las características de las personas heridas? ¿Cómo podemos identificarlos?
1. Rencorosa. Siempre está hablando de las personas que las lastimaron. Ese es su
pensamiento todo el tiempo, y es una seña de que aún está abierta su herida.
2. Heridora. Siempre hiere a otros. Está a la defensiva y a veces ofende a los demás. Le es difícil
confiar en otros nuevamente. Trata de desquitarse con otros que no tiene la culpa de lo que
ocurre en su vida.
3. Hipersensible. Por cualquier cosa piensa que no se le ama o que de nuevo le lastimarán. Es
egoísta, y cree que es el centro del mundo; cuando las personas hablan, piensa que están
hablando de ella. Siente que todos están empeñados y concentrados en hacerle daño. Ve la
vida con recelo y es fácilmente herida de nuevo.
4. Potencialmente Peligrosa. Necesita sanar para ser una verdadera bendición al resto del
Cuerpo de Cristo. Si no sana, sus quejas se regarán como si fueran un veneno.
Como ve, la atención de las personas heridas es urgente porque representan una amenaza real
a la salud de una congregación. En ocasiones la persona puede volverse no solo irreconciliable o
resentida, son hasta vengativa hostil, biliosa, cruel, dura y violenta.
EL PAPEL DEL PASTOR

¿Qué debe hacer el pastor? ¿Cómo ha de ministrarles? Recordemos que nuestro ministerio
pastoral es una extensión y continuación del ministerio del Hijo de Dios, quien se ocupó de “sanar
a los quebrantados de corazón” (Luc.4:18). Según Ezequiel 34:4, los pastores tenemos una
responsabilidad bíblica de:
 “Fortalecer a los débiles”. Esto es animar al que no tiene fuerzas.
 “Curar las enfermas”. Estas son las lastimadas por decepciones, malos tratos,
aprovechamientos, abusos, hipocresía, etc.
 “Vendar la perniquebrada”. Esta es la que no puede seguir por el desánimo, desaliento,
que no cree en el futuro.
El pastor va a mirar a estas personas con amor, pero con firme decisión. No les puede permitir
que dañen la iglesia, pero no las desechará como inservibles. Muchas veces el diablo las ha
lastimado porque percibe que Dios tiene propósitos grandes con ellas. El pastor procurará la
sanidad de la persona, en un balance de sabia vigilancia y compasión amorosa (Mt.10:16).
MINISTRACIÓN ADECUADA PARA LOS HERIDOS

¿Cuál es la finalidad de nuestra ministración? Antes de empezar a ministrar a los heridos,
tenemos qué saber hacia donde debemos y queremos llegar en nuestra ministración para con
ellos. He aquí hasta donde los hemos de llevar:
 Que no hagan un escándalo tan grande de la persecución, y que vean su problema con
realismo (I Pe.4:12).
 Que saquen provecho del dolor (Rom.8:28).
 Que deben cambiar de una actitud de lástima, condena, recelo y queja, o nadie los
soportará por mucho tiempo (Pr.18:14).
 Que mantengan y practiquen el gozo y la alegría mientras sanan (Pr.15:13; 17:22).
Nuestra meta es librarles de 3 terribles actitudes:
TRES ACTITUDES TERRIBLES

1. EL RENCOR. Este un ataque contra otros. Este sentimiento está presente cuando desea el mal
y expresa maldad contra sus heridores, cuando se le oye decir:
“Ojalá que le vaya mal”.
“Qué bueno que les vaya mal”.
“¡Ándele! Le pasó para que aprenda”
“Dios los juzgará”.
“La mano de Dios está sobre ellos”.
Etc.
2. LA AUTOCOMPASIÓN. Este un ataque contra sí mismos. Este problema está presente cuando
la persona se siente mal cuando otros son felices, y quiere que todos se concentren en sus
sufrimientos. Cuando dicen, por ejemplo:
“Todos me hacen mal”.
“Pobrecito de mí”.
“Cuánto he sufrido por el Señor”.
“Nadie me comprende”.
“Todos son felices, menos yo”.
“Es muy fácil juzgarme, pero no saben cuánto he sufrido”.
Etc.
3. LA DESCONFIANZA CRÓNICA. Este un ataque contra su fe y su tranquilidad, y su capacidad
de recibir y dar amor. Este mal se manifiesta cuando la persona ha perdido la fe, desconfía de
todos, y ya no cree que hay gente verdaderamente sincera con Dios. Está presente, por ejemplo
cuando la persona piensa o dice:
“Todos son iguales de todos modos”.

“Lo mismo me va a pasar aquí, como allá”.
“En cualquier momento me puede suceder otra tragedia”.
“Nadie es completamente sincero”
“Todos son hipócritas”
“Yo ya no creo en nada, ni en nadie”.
Etc.
EL REMEDIO A LAS TRES ACTITUDES TERRIBLES

Dios no quiere que sus hijos sintamos lástima de nosotros mismos, como Jesús mismo nunca
la sintió, aún cargando la cruz (Lc.23:28). Hay una cosa efectiva que podemos hacer en cada uno
de estos casos anteriores, para ayudar a las gentes heridas:
1. Contra el rencor tenemos qué enseñarles perdón y amor (I Cor.13).
2. Contra la autocompasión tenemos qué enseñarles valentía y sencillez (Col.3:12-15;
Fil.13,14).
3. Contra la desconfianza tenemos qué demostrarles amor hasta crean, y que así como hay
cizaña, también existe el trigo verdadero.
Cabe mencionar que para que la sanidad de la persona herida se de a perfección se va a
necesitar llevarlos a una disciplina mental, y también una disciplina de la lengua (Fil.4:8; St.3:7-11).
Disciplinas Necesarias Para la Perfecta Sanidad

Disciplina de la Mente (Fil.4:8). Disciplina de la Lengua (St.3:7:11).
LA EXHORTACIÓN COMO MÉTODO DE BÍBLICO DE LOGRAR LA MADUREZ

Ya que sabemos hacia donde queremos llegar, ¿cómo vamos a llevar a madurez y sanidad a
estas personas? El que se halla herido y que aún da muestras de que “trae la espada encajada en
el corazón”, necesita ser ministrado con EXHORTACIÓN. Ese el medio de llevarlos a la madurez y
la sanidad que necesitan.
EL CONCEPTO DE EXHORTACIÓN
¿Qué es exhortar? Aunque algunos creen que exhortar es emitir juicio y maldición a las
personas, esto no es así. El término ha sido mal explicado muchas veces, y esto nos ha robado de
una tremenda revelación de libertad en Cristo que viene cuando descubrimos y aplicamos su
verdadero concepto, tanto secular como bíblicamente. ¿Qué significa exhortar?
1. LA DEFINICIÓN NORMAL. Según un diccionario normal de la lengua española, exhortar
significa lo siguiente: “Animar a una persona con ruegos o razones para que actúe de
determinada manera. Es sinónimo de aconsejar, suplicar, pedir, rogar, estimular, alentar o
animar. Así que, como vemos, esto es muy diferente y hasta contrario de cómo alguno lo
usan, pero es perfectamente consistente con la idea bíblica, por ejemplo de Hechos 27:22. Es
fortalecer y levantar los ánimos (Hch.16:40). No es lo mismo que reprender (I Tim.5:1). La
Biblia nos dice que quien exhorta se debe concentrar en “animar” a sus hermanos, y dirigirlos
a “levantar la bandera” de batalla nuevamente con amor (Rom.12:8).
2. DEFINICIÓN BÍBLICA. En el idioma griego, exhortar es parakaleo, y es lo que hace un
parakletos, o “consolador”. Exhortar es, por ejemplo, el ministerio del Espíritu Santo, quien es
el Consolador (“el Paracleto”) por excelencia, y realiza un ministerio de aconsejar, acompañar,
fortalecer y ayudar a los discípulos de Jesús (Jn.14:16,26). El verbo parakaleo (“exhortar”) se
traduce en el Nuevo Testamento de las siguientes maneras: “Consolar” (Mt.5:4); “rogar”
(Mt.8:5); “orar”, pidiendo (Mt.26:33); “exhortar”, como predicación (Lc.3:18); “exhortar”, en
forma de llamamiento (Hch.2:40); “llamar”, en forma de invitación (Hch.28:20); “alentar” (I
Tes.4:18); “animar” I Tes.5:11); “confortar” (II Tes.2:17) y “consuelo”, en el sentido de
“reconfortante confianza” (Heb.6:18).
3. DEFINICIÓN PRÁCTICA. Exhortar es un perfecto balance entre dos fuerzas: DEMANDAR Y
ANIMAR. A aquel que ha sido herido no podemos mimarlo o consentirlo en todo, por lástima,
pero tampoco debemos tratarlo con dureza, pues de por sí viene herido. Al mismo tiempo que
les damos compasión y paciencia, los tenemos qué hacer volver a sus sentidos. No podemos
seguir la corriente de su angustia, amargura y resentimiento, pero debemos escucharlos con

amor y aconsejarles, sabiendo que su recuperación puede ser poco a poco. De este modo ni
le aplastaremos ni los ensalzaremos. Tampoco los hundiremos ni a ellos ni a sus heridores.
Así que para ayudarlos realmente, no podemos caer en un extremo ni en el otro.
LA EXHORTACIÓN PASTORAL
El pastor puede exhortar en base a los dos instrumentos que tiene para trabajar: Su “vara y su
cayado” que infunden aliento (Sal.23:4). La vara es para llamar la atención y corregir, mientras que
el cayado es para atraer a la oveja hacia sí. Esto significa que se exhorta y aconseja a la oveja,
pero no con el fin de que se vaya, ni reprenderla en una medida que haga que se aleje, sino
mostrándole que el consejo que se le da es por su bien.
DEBE HABER UN BALANCE ENTRE:

DEMANDAR CON AUTORIDAD ANIMAR CON COMPRENSIÓN
La oveja que permanece es la que es bien ministrada en este equilibrio. La oveja que puede
decir: “El pastor me llama la atención, pero puedo ver y sentir que me ama, y cuando me exhorta
puedo percibir que es porque le interesa mi vida espiritual. ¡Bienaventurado el pastor que logra que
sus ovejas entiendan esto! El exhortar bíblico se hace mediante consejos y palabras (Hch.15:32;
20:2).
Según el apóstol Pablo y los consejos que da a Timoteo, un pastor usa estos dos instrumentos,
DEMANDAR Y ANIMAR. Él ordena a Timoteo y a Tito a exhortar de precisamente de estas dos
maneras. Les dice primero: “Exhorta con toda paciencia y enseñanza” (II Tim.4:2), y luego les dice:
“Exhorta con toda autoridad” (Tit.2:15). El pastor que logra esto es apto, y toda oveja que actúa y
piensa de este modo, equilibradamente y mediando las situaciones, es un candidato a pastorear.
CUIDAR A QUIENES PUEDEN SER HERIDOS.

¿A quienes debemos de cuidar para detener el que otros vuelvan a ser lastimados en nuestra
iglesia? ¿Podemos evitar un dolor a tiempo? He aquí quiénes son especialmente susceptibles a
ser heridos, tanto por malos testimonios o por comentarios de otros hermanos heridos:
 Los que vienen de una vida de rechazo, marginación o soledad.
 Los jóvenes de edad.
 Los recién convertidos.
A estos son los que más debemos cuidar para que no sean heridos, guardándolos de la lengua
de los insensibles y de las redes de los rencorosos.
PROVECHO DE LOS TRAGOS AMARGOS

¿Para qué sirven las cosas desagradables por las que Dios permite que la gente pase? ¿Cuál
es el propósito de que experimenten heridas? He aquí varias razones:
1. En primer lugar, nos ayudan a ver a la gente con realidad. No damos cuenta de que los
hermanos y los líderes no son infalibles, que los hermanos no son ángeles, y que la iglesia aún
no es el cielo.
2. También, al ver cómo reaccionamos, nos examinamos en el área de qué tan firmes somos, y
cuánto nos falta todavía del carácter de Cristo para perdonar con rapidez.
3. Nos hacen sentir el celo del Señor y poner medidas altas, sobre las cuáles nos vamos a tener
qué medir después nosotros mismos también. Y si no lo hacemos nosotros, otros con
seguridad lo harán.
4. Nos sirven para ver el resultado de los malos, y nunca ser como ellos.
5. Nos ayudan a prometerle a Dios que no haremos lo mismo.
6. Nos hacen sensibles a otros que también han sufrido. Uno que se halle ya completamente
sanado de sus heridas pasadas es candidato a poner sanar a otros.
Recuerde que sus ovejas son aquellos que le aceptan como pastor. Si como pastores
formamos bien a quienes han sido heridos, haremos de ellos instrumentos a quienes Dios puede
ungir y usar grandemente con su poder. Llevemos a nuestras ovejas a una vida de gozo y de
disfrute de todos los parabienes que el reino de Dios les ofrece.
LOS DOS
INSTRUMENTOS
DEL PASTOR
LA EL
VARA CAYADO
¡Tome
Sus
Herramientas!
“Exhorta con autoridad” (Tit.2:15).
“Exhorta con paciencia” (II Tim.4:2).
Capítulo 11:
LOS LÍDERES DE LA IGLESIA
Cómo Escoger a Nuestros Ayudantes en la Obra
LA NECESIDAD DE ESCOGER
Debemos reconocer nuestra limitación e incapacidad de hacerlo todo nosotros solos (Ex.18:12-
27). Es una realidad que necesitamos que otras personas nos ayuden. Pero es imperioso que
tomemos las mejores decisiones, las que redunden en bien de la obra, en su expansión numérica y
en salud espiritual.
Poner a otros a que nos ayuden nos permite a los pastores lograr tres cosas:
1. Mantener un balance en nuestra vida personal, dando tiempo a nuestra vida personal,
nuestra comunión con Dios, nuestra familia y nuestro pastorado.
2. Dedicar nuestro mayor esfuerzo en lo más importante dentro de la obra, esto es, la oración,
la Palabra y el liderazgo espiritual de la iglesia (Hch.6:1-7).
3. Desarrollar a otros en el ministerio mientras los supervisamos, los aconsejamos y los
entrenamos (Lc.10:17-20).
Los pastores de la iglesia no estamos supuestos a hacer todo el trabajo, sino solo lo más vital
para la obra de Dios, es decir:
 Ser el modelo de Cristo para las ovejas.
 Alimentar el rebaño por medio de la predicación y la enseñanza de la Palabra de Dios.
 Ser el apoyo y medio de bendición espiritual para la iglesia.
 Dirigir la obra a través de la guía del Espíritu Santo.
LA FACULTAD DE ESCOGER
¿Quién debe escoger a nuestros ayudantes? ¿Dios? ¿Nosotros? ¿El pueblo? Según la Biblia,
entendemos que nosotros como pastores somos los que tenemos el derecho de escoger a
nuestros ayudantes, según la investidura que se nos ha dado, como quienes dirigen una iglesia. La
Biblia establece claramente que Dios escoge a sus ministros (Jer.1:4,5; Hch.13:1-3; Ef.4:8-11), y
nosotros, como tales podemos dirigir su obra en el temor de Dios.
Nosotros escogeremos a nuestros ayudantes bajo la dirección de Dios.
- A veces Dios nos dice directamente en oración a quién debemos poner en un cargo.
- Algunas Dios querrá usemos nuestro espíritu humano regenerado para discernir la vida las
personas y poner al más apto.
- Algunas veces Dios querrá que usemos nuestra mente para razonar y tomar las decisiones
más adecuadas.
- Otras veces simplemente comenzaremos a ver como Dios ha preparado a algunos, que
siempre están prestos a ayudarnos, y de este modo nos daremos cuenta de que Dios nos
los dio para ponerlos en algún servicio.
LA CAPACIDAD DE ELECCIÓN NO ES DEL PUEBLO

Cuando el pueblo del Señor escoge a los líderes se puede equivocar fácilmente (Hch.1:15-26).
Esto es obvio porque:
 Algunos de ellos son carnales.
 Otros apenas son nuevos o están creciendo.
 Muchos no tienen todavía la madurez para tomar una decisión espiritual.
Aunque en Hechos 6 (ocasión única) se permitió al pueblo elegir a sus servidores, esto tuvo
qué hacerse por las disensiones carnales que se estaban presentando. Pero aún allí vemos que
los ministros fueron quienes pusieron las reglas y los requisitos de tales ayudantes, y luego
también fueron ellos los que dieron la autorización final.
Vemos en la Biblia que cuando Moisés subió al monte, la gente se “eligió” a Aarón, quien
convenía a sus gustos, y esto no resultó bien (Ex.32:1-4). Las elecciones se prestan a política y a
caer en “agradar al pueblo” por conseguir su simpatía, no necesariamente a Dios. La “democracia”
está bien para un sistema social (aunque no es perfecta), pero es inconsistente e ineficaz dentro
de la Iglesia de Jesucristo para elegir liderazgo. Aquí debe permanecer esta regla: DIOS ES
QUIEN ESCOGE A SUS MINISTROS Y ESTO LOS AUTORIZA PARA ELEGIR A SUS
AYUDANTES.
A veces nos preguntamos, ¿qué pasaría si un pastor no fuera recto y eligiera a ciertas
personas solo porque le convienen a él, aunque no sirvieran a la obra de Dios y a las almas? En
estos casos, Dios tratará directamente con el pastor, y su testimonio terminará manchándose ante
el pueblo. Como consecuencia de esto, su labor se lastimará y se limitará.
CUALIDADES DE QUIENES PUEDEN LIDERAR

¿Qué cualidades debe reunir quien ha de ayudarnos en algún sitio en la obra? ¿Qué
características deben buscarse en quien se espera darle un privilegio o colocarlo en una posición
de liderazgo? La persona que está calificada para servir en autoridad posee estas cualidades
básicas:
1. ESPÍRITU DE SERVICIO (Mt.20:10-28; Mr.10:35-45). Entiende la obra como una entrega
de sí mismo a favor de otros. Muestra carga, tacto y amor para con las personas. No está
buscando el liderazgo por el liderazgo mismo, sino por servir a los necesitados.
2. ACTITUD HUMILDE (Jn.13:12-17). Es una persona sujeta que mira por el bien de la obra,
que no es altiva. Se interesa en el bienestar de las personas más que en sus propias
ideas, planes o propósitos egoístas.
3. BUEN TESTIMONIO (I Tim.3:8-13). Pablo dijo que una de las pautas para personas en la
iglesia a quienes se les confía un lugar de privilegio y servicio era precisamente el buen
testimonio.
La Biblia nos señala asociarnos con las personas correctas, y tomar como ayudantes a
personas idóneas (Sal.101).). Una sugerencia sobre la duración del servicio de las personas es
ponerlos a trabajar bajo un tiempo definido desde un principio para que no se crean eternos. De
este modo los mantendremos humildes y sencillos.
PENSAMIENTO:
“Puede más un ejército de conejos guiados por un león, que un ejército de leones guiados por un
conejo” (Napoleón Bonaparte).
“Aquellos que se hallen más cerca de ti determinarán el nivel de tu éxito” (John Maxwell).
NECESIDAD DE PASTORES QUE NOS AYUDEN A PASTOREAR

Conforme crece la iglesia, el pastor deberá tener líderes preparados para que le ayuden a llevar
la atención espiritual del creciente número de ovejas del rebaño de Dios. Se verá en la necesidad
de desarrollar un conjunto de líderes-pastores, como el “presbiterio” mencionado en Nuevo
Testamento que había en cada iglesia local (Fil.1:1; St.5:14). Aunque el pastor seguirá llevando el
primer mando de la iglesia, otros bajo su autoridad compartirán oportunidad de servicio, teniendo
repartición de responsabilidad sobre el trabajo, siempre sujetos al pastor principal.
Cuando necesite otro pastor, pídaselo al Señor e identifíquelo conforme a las características
bíblicas.
RASGOS DISTINTIVOS DE UN PASTOR

¿Cuáles son las señas que tiene qué mostrar quien está apto para ser colocado en el ministerio del
pastorado? Veamos las cuatro pruebas que nos da la Biblia como evidencia de que alguien puede ser
reconocido en tal oficio, las cuales se pueden adquirir o desarrollar en las personas que no las tienen ahora.
Estudiemos cada una de ellas:
RASGOS DISTINTIVOS DE UN PASTOR
1. Amor por los Perdidos 2. Cuidado por los Santos
3. Solicitud para el Servicio 4. Solución de Problemas
1. Amor por las Almas (II Tim.4:5). Podemos poner los ojos sobre las personas que sienten una
preocupación espiritual por cómo andan las ovejas, las personas que se esfuerzan por compartir
su fe, por llevar a otros a la iglesia, quienes se preocupan por saludar a los visitantes, por llevar y
traer gente, por darles de su tiempo, por orar con ellos, quienes están dispuestos a atenderlos, que
sienten una simpatía por los nuevos convertidos, etc. Una persona que gana almas está
capacitada para estar en un liderazgo, pues tendrá sensibilidad y amor por la gente. Si alguno no
sabe lo que es ganar un alma y llevarla de la mano hasta la madurez, entonces no tendrán la
sensibilidad, la pasión, la compasión y la comprensión de hablarle o ministrarle correctamente.
2. Corazón Pastoral (Mt.18:12; Jn.10:11-13). El corazón pastoral es el impulso que alguno tiene
siempre de ir a rescatar a la oveja. Uno que está apto para tener liderazgo es uno que da indicios
de que se interesa por el estado espiritual de la gente, que se preocupa si están creciendo o no, si
se están alimentando, si están siguiendo fieles al Señor, etc. Nunca será una persona fría,
indolente y desobligada, que solo se lamente o se queje porque el nivel espiritual de la gente.
Antes, se le ha visto buscando a los hermanos, yendo por ellos, invirtiendo tiempo en las personas.
Gusta de visitar y de tratar con la gente.
3. La Disposición (Rom.12:8). El servicio a otros, desinteresadamente, es una seña de madurez

para el liderazgo (Lc.22:24-27). La persona apta muestra una solicitud para llevar la delantera en la
atención y ayuda de las almas. Si alguno realmente es líder, será el primero en hacer las cosas, en
participar, en ayudar, en estar presente en las reuniones, en lavar los pies de los siervos, etc. La
solicitud o presteza es una disposición y disponibilidad para prestarse al servicio (Rom.12:11). Una
persona floja, apática o frívola no está apta para el cargo. Fijémonos en quien ponga su “cien por
ciento” en cada cosa que hace por la obra, cada vez, que hace las cosas con celo, que sabe poner
toda su atención y capacidad para realizar una tarea. La disposición es la cualidad de tener el
compromiso y la preocupación de ser perfecto. La solicitud mencionada en Romanos 12:8 como
requisito de un líder significa “cuidado” y hasta preocupación por los santos (II Co.7:12). El que es
pastor hace las cosas con seriedad y con formalidad, y también con ansias, con ganas y con
ahínco, con ardor y con celo, se le ve alegre haciéndolas las cosas, fervoroso, vehemente (II
Co.8:16-23). Un buen prospecto a pastor es uno que ha mostrado ser sujeto y sacrificado por la
obra, que cumple diligentemente con lo que se le va pidiendo.
4. Capacidad de Reconciliar y Solucionar Problemas. (I Tim.6:11; II Tim.2:24,25). Aquel que

está capacitado para ayudarnos a liderar en la iglesia es uno que no crea ni propicia problemas en
la iglesia, sino que más bien soluciona las dificultades entre los hermanos. Está dispuesto a perder
en una discusión por no crear un conflicto mayor. Debemos cuidar el ministerio de personas que
siempre quieren salirse con la suya, que no les gusta reconocer, que no les gusta perder, que no
escuchan consejos (I Tim.3:3; Tit.1:7). Como un verdadero siervo, el líder debe ser amoroso,
paciente y manso. Un siervo listo, por ejemplo, es uno que logra salvar a un matrimonio al punto
del fracaso, que vuelve el corazón de los padres hacia los hijos, o que puede reconciliar a los
creyentes en sus diferencias (Mal.4:5,6).
CONSEJOS
Debemos tener cuidado de no poner en autoridad a personas solo porque tienen las siguientes
cosas:
 Capacidad intelectual.
 Capacidad profesional.
 Capacidad natural o puramente humana.
Debemos confiar las ovejas únicamente a personas con quienes tengamos las siguientes
garantías:
 Que cuiden las ovejas como uno mismo las cuidaría.
 Que representen bien al pastor.
 Que tengan la misma visión.
 Que ayuden a realizar la visión del pastor.
Fijémonos solamente en personas solícitas para entregarles el cargo del obispado (cuidado de
las almas), no precisamente a quienes sean así:
 Los favoritos.
 Los impresionantes.
 Los talentosos.
ENFOQUE
Así, pues, concluimos que una persona NO es capaz de pastorear si se notan en ella las
siguientes cosas:
 Si no tiene amor por las almas.
 Si no muestra el impulso de ir hacia la oveja perdida.
 Si no se presta al servicio.
 Si no tiene la capacidad de solucionar problemas (que es problemático).
A cualquier persona que le falte una de estas cualidades NO debe confiársele el cargo jamás,
aunque tenga las siguientes cosas:
 Deseo de ser líder.
 Conocimiento y preparación.
 Capacidad de organización.
 Facilidad de palabra.
Estas cosas nunca fueron tomadas en cuenta por Jesús al escoger sus 12, y aunque pueden
ser de ayuda a quien muestre primero las características espirituales que hemos mencionado, no
debemos olvidar que las mismas no tienen en sí importancia vital en el reino de los cielos.
LISTAS DE REQUISITOS BÍBLICOS

Vemos en la Biblia que los siervos de Dios siempre se basaron en un código particular de
reglas que les servían para discriminar y discernir personas para saber si estaban listos para el
ministerio. Estas listas nos pueden servir mucho para saber si estamos frente a un pastor o no. He
aquí algunas de ellas.
La Lista de Jetro (Éxodo 18:21,22).
 Hombres capaces.
 Temerosos de Dios.
 Hombres veraces, que aborrezcan las ganancias deshonestas.
La Lista de Moisés (Deuteronomio 1:13-15).

 Hombres sabios.
 Entendidos.
 Expertos.
La Lista de los 12 Apóstoles Para los Diáconos (Hechos 6:3).
 Buen testimonio ó reputación.
 Llenos del Espíritu Santo.
 Llenos de sabiduría.
La Lista de Pablo Para los Diáconos (I Timoteo 3:8-13.).
 Honestidad.
 Sin Doblez.
 No Ser un Bebedor.
 No Ser Codicioso de Ganancias Deshonestas.
 Que guarden el misterio de la fe con limpia conciencia.
 Marido de una sola mujer.
 Que gobierne bien sus hijos y su casa.
La Lista de Pablo Para las Diaconisas (I Timoteo 3:11).
 Honestas.
 No calumniadoras.
 Sobrias.
 Fieles en todo.
La Lista Pablo Para los Obispos y Ancianos (I Timoteo 3:1-7; Tito 1:5-9).
 Irreprensible.
 Buen Testimonio.
 No Dado al Vino.
 Marido de una Sola Esposa.
 Buen Gobierno de su Casa.
 Hijos en Sujeción.
 Hijos Creyentes, no Disolutos ó Rebeldes.
 Sobriedad.
 Prudencia.
 Amor por lo Bueno.
 Justicia.
 Santidad.
 Dominio Propio.
 Decoroso.
 Hospedador.
 No Pendenciero.
 Amable.
 Apacible.
 No Soberbio.
 No Iracundo.
 Apto Para Enseñar.
 Retenedor de la Enseñanza.
 No Codicioso de Ganancias Deshonestas.
 No Avaro.
 No un Neófito.
CONCLUSIÓN
Sobre todo es necesaria mucha oración, para que Dios nos dé el discernimiento necesario para
conocer a las personas, y que gocemos de la bendición de contar con gente que nos ayude en la
obra, como Pablo contó con colaboradores que fueron claves en el ministerio. Amén.
Capítulo 12:
LA GUERRA ESPIRITUAL
EN LA IGLESIA
Cómo Luchar en lo Invisible Para ver una Iglesia Poderosa
LA NECESIDAD DE GUERRA ESPIRITUAL

Después de haber considerado todo lo expuesto en este libro, que corresponde a nuestra parte
en la obra, tenemos qué reconocer que no todo en una iglesia se va a lograr con el trabajo exterior
y visible. Necesitamos hacer guerra espiritual en el ámbito invisible con armas sobrenaturales para
avanzar el reino de Dios. Pablo dijo: “Pues aunque andamos según la carne, no militamos según la
carne; porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la
destrucción de fortalezas” (I Co.10:3,4).
Antes de que usted y yo llegáramos aquí, el diablo había comenzado una guerra contra la obra
de Dios, y pues, ya que él ha comenzado la guerra, pues guerra es lo que le debemos dar.
“¿Quién es este filisteo incircunciso para que provoque a los escuadrones del Dios viviente? Tu
vienes a mi con espada y lanza y jabalina; mas yo vengo a ti en el nombre de Jehová”. (I
Sam.17:26,45).
Gran parte de nuestro trabajo que hacemos por Dios se puede desbaratar ante nuestro ojos si
no existe un fuerte fundamento sobrenatural que lo esté sosteniendo, una capa protectora de
poder que impida que el diablo robe lo que Dios ya nos ha dado, y que se conserve el fruto ganado
(I Tes.3:5). Recordemos que hay un enemigo que va a querernos arrebatar la cosecha que hemos
ganado (Lc.8:12; I Tim.5:15), tal como pasaba en el tiempo de Gedeón (Jue.6:3-6).
TRABAJO DEL DIABLO CONTRA LA IGLESIA

El diablo no está jugando, sino que está firme en su deseo: Hurtar, matar y destruir (Jn.10:10).
Es necesario estar consciente y alerta de que él está propuesto a destruir la iglesia que usted
pastorea. Nuestra lucha debe se constante ya que, aún cuando lo reprendemos y huye, luego
regresa siempre (Lc.4:13).
Hay una serie de embates que la Biblia nos devela que el diablo lanza en su guerra contra la
Iglesia del Señor Jesucristo. Se pueden resumir en los siguientes puntos:
1. Evita Conversiones. El diablo está propuesto a que no crezca la obra del Señor. Dice que
cuando alguien escucha la semilla, que es la palabra de Dios, “viene el diablo y quita de su
corazón la palabra, para que no crean y se salven” (Lc.8:12). Aún desde antes que alguien
entre al reino, ya lo está atacando para arrancarle la palabra de Dios que ha oído.
2. Siembra Cizaña. Jesús nos dijo que el diablo es el enemigo que siembra cizaña entre el trigo.
Esta cizaña son los hijos del malo, quienes dijo Jesús que son “todos los que sirven de
tropiezo, y los que hacen iniquidad” (Mt.13:24-30, 36-43). Esto quiere decir que Satán mete
gente dentro de la congregación de los santos que harán cosas malas y pecados, y que los
usará para que hacer caer a otros. Sin embargo, se hace la aclaración que el diablo pudo
hacer esto “mientras dormían los hombres”, lo que indica que debemos estar despiertos y
velando para ver cuando llega el ladrón y no dejarlo entrar a robar. Sin embargo, gracias a
Dios, podemos distinguir entre el trigo y la cizaña. “En esto se manifiestan los hijos de Dios y
los hijos del diablo: Todo aquel que no hace justicia (u obra rectamente) y no ama a su
hermano, no es de Dios” (I Jn.3:10).
3. Levanta Persecución. Cuando no le queda otra alternativa, el diablo puede levantar
persecución contra la iglesia (I Cr.21:1; Ap.2:10).
4. Estorba la Obra. Hace esfuerzos para detener la predicación del evangelio y el extendimiento
de la obra de Dios (I Tes.2:18).
5. Intenta Apartar a los Santos . Cuando algún miembro de la iglesia se ha apartado, en realidad
se ha apartado “en pos de Satanás” y debemos hacerle volver de su mal camino (I Tim.5:15;
St.5:19,20).
ALGUNAS COSAS QUE EL DIABLO NO PUEDE HACER

Sabemos que el diablo no es omnipotente, y debemos mantener esto en mente durante nuestra
guerra espiritual. ¿Qué cosas no puede hacer?
1. El diablo no puede traspasar la sangre de Cristo (Ap.12:11).
2. El diablo no puede evitar que Dios nos ame y que nosotros amemos a Dios, o sea, él no
puede meterse en nuestra relación con Dios (Rom.8:35-39).
3. El diablo no puede quitar las promesas de Dios (Mt.24:35; II Pe.2:3,4).
4. El diablo no puede cambiar su propio futuro, que es condenación (Ap.20:10).
5. El diablo no puede jamás aspirar a una posición mayor que la nuestra (Jn.1:12; Lc.19:10).
Como ve, el diablo es más fuerte que nosotros, pero no es más fuerte que Dios, así que si
estamos unidos a Cristo, él no puede contra nosotros. Es muy importante el trabajo positivo,
peleando con fe de que Dios cuidará a su rebaño, porque la Iglesia es de él, pidiendo sabiduría
para tomar los pasos mas recomendables ante todo problema que surja.
INTERRUMPIENDO LA MINISTRACIÓN SATÁNICA

Las Escrituras nos revelan la estrategia que el diablo usa para destruir lo que Dios ha
establecido: Envía 3 espíritus a trabajar, uno después del otro. Si dejamos que uno trabajo, el otro
seguirá, y así hasta completar el proceso y destruir la iglesia. Estos son:
1. El Espíritu de Jezabel (Ap.2:20). Es un espíritu de desorden espiritual, que hace que la
gente no se sujete, no reporte sus acciones, sea irresponsable, viva como sea, no respete
al líder, no le guste cooperar, etc. Altera el orden divino y desestabiliza el bienestar
espiritual. Trata de controlar al líder.
2. El Espíritu del Anticristo. El diablo ya ha logrado aquí la tolerancia del pecado y de la

maldad. En este punto la gente que vive y actúa mal se mueve a sus anchas dentro de la
iglesia, inclusive ocupando liderazgo.
3. El Espíritu de la Muerte (Ap.6:8). Este es el demonio que termina la destrucción, y el que
hará (si se lo permitimos) que se acabe la iglesia y se desvíen los miembros, luego que ha
usado a los pecados tolerados.
Este es un proceso que Satanás sigue para destruir completamente todo lo establecido por
Dios, sea la familia, la iglesia, el creyente, etc. El desea llegar hasta el último paso del proceso,
pero nosotros no debemos permitirle ni siquiera empezar con el primero. El líder, sus convicciones,
su firmeza y su valentía, es lo único que puede detener e interrumpir este proceso.
Como líderes nos toca estar muy al pendientes del estado de las ovejas, cual atalayas del
pueblo (Ez.33:1-9). Si un solo ángel atará al diablo por mil años, pidamos legiones a defender
nuestras ovejas (Ap.20:1,2).
ESPÍRITUS QUE TENEMOS QUÉ VENCER COMPLETAMENTE.

Hay ciertos espíritus de demonio que atacan siempre a la Iglesia, y contra los que tenemos qué
luchar todo el tiempo.
1. Espíritu de Flojera Espiritual. Hace que la gente no participe, no lea la Biblia, no venga a los
cultos, no ore, no auxilie, no asista a ayudar.
2. Espíritu de Escasez Espiritual. Hace que la gente no tenga fe, no diezme, no ofrende, no
coopere, no tenga grandes sueños para su vida.
3. Espíritu de Ignorancia Espiritual. Hace que la gente no lea la Biblia, no ponga atención, no le
guste el estudio de la Palabra, se salga de las reuniones.
4. Espíritu Fariseo. Hace que la gente se crea espiritual, siempre estén hablando de ellos mismos,
aleguen antigüedad, quieran reprender al pueblo todo el tiempo, apliquen la ley sin misericordia,
etc.
5. Espíritu de Temor. Hace que la gente no reciba sanidad, no tenga fe, que no sea positiva, que
no evangelice, que no se atreva a apoyar al líder, tenga miedos, etc.
Hay muchos demonios más que nos están atacando siempre.
LA GUERRA Y LA GENTE
Es importante pelear estas batallas en lo espiritual, y por medio de enseñanza, pero no quererle
“sacar a la fuerza estos demonios” a la gente. Muchos de ellos no saben que están oprimidos.
Trata los problemas con sabiduría, amor y compasión por las ovejas, pero firme e indeleble en lo
que quieres lograr bajo la dirección del Espíritu.
Una característica del pastor es que debe ser manso. No caiga en provocaciones si le atacan.
Exponga su causa ante Dios y espera que el le defienda (Nm.12). Sea paciente. No tome
decisiones a la ligera, ni corrija todo el tiempo a las personas en el momento. No las exponga si no
hay necesidad (St.1:19,20). No se puede ser un buen pastor siendo iracundo o desesperado
(Tit.1:7-9). “De Jehová es la batalla” (I Sam.17:47). “Vestíos de toda la armadura de Dios, para que
podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. Porque no tenemos lucha contra sangre y
carne, sino contra principados y potestades...” (Ef.11,12).
ESTRATEGIAS DE VICTORIA EN LA IGLESIA LOCAL

¿Qué vamos a hacer para detener y mantener en derrota al diablo en nuestra iglesia? Existen 4
disciplinas espirituales que deben ser practicadas como armas eficaces para que podamos tener
éxito en esta guerra y garantizar el triunfo.
1. ORACIÓN GUERRERA. Este es le medio de mantenerse en comunicación y comunión con
Dios, expresando nuestras peticiones y escuchando sus instrucciones (Ef.6:18).Si damos golpe y
golpe contra esos muros, esos muros se van a derrumbar. Las iglesias crecen con oración. Lo que
pasa a veces es que no permanecemos golpeando lo suficiente (II Rey.14:18-17). En oración
personal Dios nos dará secretos de victoria que son seguros para ganar. Y es más eficaz usar
esos que estar solo trabajado y trabajando (Ecl.10:10). Debemos ser gente de oración, conseguir
las cosas primero en lo espiritual. aprender a no levantarnos sin haber recibido la respuesta, la
sustancia de que está hecho (Heb.11:1). También debemos movilizar a la gente a orar, enseñando
sobre la oración y exigiendo de ellos disciplina en esto.
Hay tres métodos bíblicos de reforzar la oración: El ayuno, los retiros y las vigilias o veladas de
oración. Estos tres procedimientos funcionan a nivel personal o a nivel congregacional. El ayuno es
una disciplina que desata las ligaduras de impiedad, suelta las cargas de opresión, liberta a los
quebrantados y rompe todo yugo (Is.58:6; Mt.17:19-21).
2. ALABANZA DE GOZO. Este es el recurso en el que usamos de cánticos espirituales para
declarar la grandeza de los actos de Dios y sus atributos, para que al ser Dios levantado
atraigamos una mayor manifestación de su presencia (Sal.22:3; 149; Hch.16:25,26).
No importa el estilo de música, debemos poner al pueblo a cantar a Dios (Sal.95:2), que si los
ángeles, que no fueron redimidos, le alaban, ¿quiénes somos nosotros para no alabarlo? Hay
murallas espirituales que literalmente se derrumban a nuestro favor mientras se alaba a Dios
(Sal.149). La alabanza atrae la presencia de Dios (Sal.22:3), y esta hace temblar al enemigo y se
van las opresiones (Sal.16:11; 114:7). David echaba fuera demonios con la alabanza (I
Sam.16:23), y con júbilo se cayeron los muros de Jericó. Empecemos nuestras reuniones con
alabanza y terminémoslas con alabanza.
3. ENSEÑANZA DE MADUREZ. Todo el tiempo debemos estar exponiendo las tramas del
diablo ante nuestra congregación, porque él puede operar solo en las tinieblas, mientras no le
prendemos la luz. Debemos denunciar el pecado, la rebeldía, la ignorancia, la flojera, el miedo, el
fariseísmo, etc. ante los hermanos, y establecer las “reglas” basadas en la Palabra de Dios.
Enseñemos al pueblo a rechazar al diablo por ellos mismos, y escoger la vida.
4. LA CONFESIÓN DE FE. La palabra de nuestro testimonio es hablar la victoria que sabemos
que tenemos y declararla con confianza. Esto nos hace pelear en la ofensiva y no solo en la
defensiva. El pastor debe siempre hablar positivo ante su congregación, nunca asustarse ante los
ataques del diablo, ante los problemas, porque las palabras negativas de un líder cunden como río
entre los hermanos, causando un gran desánimo y frustración (Ap.12:11).
Siempre leamos y confesemos la Palabra, pues ella nos informa sobre lo que tenemos y cómo
vamos a derrotar al enemigo. Nos enfoca en nuestra posición de mando y triunfo (Jos.1:7-9).
CARÁCTER DEL PASTOR GUERRERO

¿Cómo debe ser un pastor en su visión y carácter para vivir en un estado de guerra, pero en
confianza y gozo al mismo tiempo? Un pastor que va a lograr el laurel del éxito en su conquista
posee las siguientes cualidades:
1. ES PURO. Las pequeñas cosas que nosotros admitimos, la usará el diablo como excusa
para oprimir a nuestra ovejas. Como líderes espirituales, que tenemos autoridad espiritual
sobre el pueblo, las puertas que abrimos nosotros las abrimos también muchas veces a
nuestra iglesia (Jn.17:19).
2. ES HUMILDE. Sabemos que la forma más fácil de “caer” es “levantarse” (Sal.75:7).
Debemos reconocer que las victorias que vamos ganando son solo por la misericordia de
Dios (Is.42:8; Lc.17:10)
3. ES VALIENTE. No podemos volvernos hacia a atrás en esta batalla. La cobardía no viene
de parte de Dios, pero la valentía indica fe en Dios (Jl.3:9-11).
4. ES SABIO. Consulte a Dios por los secretos que necesita para la victoria. (¿Qué hago
para obtener esto o aquello, Señor?). NO dé tantas vueltas “calando” sistemas o ideas.
Busque la “manera de Dios”, y esa visión comparta (Neh.2:11-18). “Porque con ingenio
harás la guerra” (Pr.24:6).
5. ES FIRME. Mantenga su visión en la visión, y lo que quiere obtener, no tanto en los
problemas o en cuánto le está costando (I Sam.17:26; Heb.11:26).
La Biblia dice: “El adiestra mis manos para la batalla” (Sal. ). Como líder, tenga a algún
hermano siempre orando por usted (Ex.17:8-16). Este es uno de los mejores consejos para que
gane la batalla por su iglesia.
UNA IGLESIA DE PODER A TRAVÉS DEL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU
Como pastores debemos tener la visión de una iglesia espiritual, es decir, llena del Espíritu y
andando en el Espíritu. Es muy importante hacer énfasis el bautismo del Espíritu Santo. Debemos
presentar a Jesús como el Salvador que suple nuestra necesidad de salvación, pero también como
el bautizador con el Espíritu Santo, para suplir nuestra necesidad de poder (Jn.1:29-34).
Enfoque su iglesia. ¿Qué quiere de ella? ¿Anhela que sus miembros sean responsables y
vengan a los servicios, y hasta allí? ¿O anhela que cada miembro predicara, trajera invitados,
ganara almas y las trajera a su pastor, y siguiera produciendo? No es lo mismo tener miembros
que tener ovejas espirituales, ni es lo mismo tener ovejas evangelizadas que ovejas
evangelizadoras.
Algunas personas han dicho que el Bautismo con el Espíritu Santo causa que las almas se
vallan, cuando en realidad hace que las almas vengan y se queden. La Iglesia primitiva: Era una
iglesia llena del Espíritu y ganaba más almas que nosotros (Hch.4:31). El ministerio de David
Yonchi-Cho en Seúl, Corea. Iglesia con más de 900,000 miembros. Cuando le preguntaron el
secreto de su crecimiento dijo: “Es el bautismo con el Espíritu Santo, que da el poder a nuestros
miembros para testificar”.
Fin
Libros Recomendados:
“PASION POR LAS ALMAS”, por Oswald Smith.
“EL MINISTERIO DEL PASTOR”, por Ariel Romero;
“POR QUÉ NO LLEGA EL AVIVAMIENTO”, por Leonard Ravenhill;
“EVANGELISMO PERSONAL”, Escuela Bíblica Emmaus; Puebla. Méx.
“TALLER DE EVANGELISMO” (2 tapes), por Ariel Romero.
ABREVIATURAS
LIBROS DEL ANTIGUO TESTAMENTO LIBROS DEL NUEVO TESTAMENTO
Gen. Génesis Mt. Mateo, evangelio según

Ex. Éxodo Mr. Marcos, evangelio según
Lv. Levítico Lc. Lucas, evangelio según
Nm. Números Jn. Juan, evangelio según
Dt. Deuteronomio Hch. Hechos de los Apóstoles
Jos. Josué Rom. Romanos, carta a los
Jue. Jueces I Co. 1a. Carta a los Corintios
Rt. Ruth II Co. 2a. Carta a los Corintios
I Sam. 1er. Libro de Samuel Gal. Gálatas, carta a los
II Sam. 2do. Libro de Samuel Ef. Efesios, carta a los
I Rey. 1er. Libro de Reyes Fil. Filipenses, carta a los
II Rey. 2do. Libro de Reyes Col. Colosenses, carta a los
I Cr. 1er. Libro de Crónicas I Tes. 1a. Carta a los Tesalonicenses
II Cr. 2do. Libro de Crónicas II Tes. 2a. Carta a los Tesalonicenses
Esd. Esdras I Tim. 1a. Carta a Timoteo
Neh. Nehemías II Tim. 2a. Carta a Timoteo
Est. Ester Tit. Tito, carta a
Jb. Job Flm. Filemón, carta a
Sal. Salmos Heb. Hebreos, carta a los
Pr. Proverbios St. Santiago, carta universal de
Ecl. Eclesiastés I Pe. 1a. Carta de Pedro
Cnt. Cantares II Pe. 2a. Carta de Pedro
Is. Isaías I Jn. 1a. Carta de Juan
Jer. Jeremías II Jn. 2a. Carta de Juan
Lm. Lamentaciones III Jn. 3a. Carta de Juan
Ez. Ezequiel Jud. Judas, carta universal de
Dn. Daniel Ap. Apocalipsis
Os. Oseas
Jl. Joel
Am. Amós OTRAS ABREVIATURAS
Abd. Abdías
Jon. Jonás AC antes de Cristo
Miq. Miqueas cf. compárese con
Nah. Nahum DC después de Cristo
Hab Habacuc esp.v. especialmente el versículo...
Sof. Sofonías etc. etcétera
Hag. Hageo KJV Versión King James
Zac. Zacarías p.ejem. por ejemplo
Mal. Malaquías ss. y siguientes versículos
RV-1602 Versión Reina-Valera 1602
RV60 Versión Reina-Valera 1960
ACERCA DEL AUTOR

El Hno. Ariel Romero López es el pastor del Centro Cristiano Vino y Aceite en la ciudad de Tecate, Baja California,
México, congregación que tiene la visión de conquistar el territorio con un evangelismo de poder, así como de abrir y
dar cobertura espiritual a otras congregaciones locales en diversos puntos geográficos.
Es fundador del Instituto de Ministerio, escuela que prepara obreros para el ministerio cristiano. Ha escrito diversos
manuales para dicha Escuela, y ha pastoreado varias congregaciones cristianas en la república mexicana. Está
debidamente ordenado como Pastor por:
Ministerio de Acción (Ministries of Action, Inc.), de Lorain, Ohio, E.U.
Sociedad Misionera Cristiana Latinoamericana (Latin-American Christian Missionary Society, Inc.), de Los Ángeles,
California, E.U.
Institución Evangélica Ministerio Vino y Aceite, A.R., de Tecate B.C., México.
El pastor vive en la ciudad de Tecate, Baja California, México, juntamente con su esposa, Isela Montaño de Romero, y
sus tres hijos, Shalom, Yahshua y Jazak.
OTROS LIBROS ESCRITOS POR EL AUTOR

QUEMA
LA SALVACIÓN
DEBERES CRISTIANOS
LOS ÚLTIMOS TIEMPOS
EL MINISTERIO BÍBLICO
LA VIDA EN EL ESPÍRITU
APTITUDES PASTORALES
FUNDAMENTOS DE LA FE
EL MINISTERIO DEL PASTOR
EL MINISTERIO DEL DIÁCONO
EL SIERVO GENUINO Y DIGNO
LA VIDA QUE AGRADA A DIOS
LA VIDA CRISTIANA PRÁCTICA
LA VIDA CRISTIANA VICTORIOSA
LOS ALCANCES DE LA REDENCIÓN
ORDEN ESPIRITUAL EN LA IGLESIA
OPERACIÓN ESPIRITUAL EN LA IGLESIA
BOSQUEJO DEL ANTIGUO TESTAMENTO
LA VICTORIA PERSONAL DEL CREYENTE
INTRODUCCIÓN AL NUEVO TESTAMENTO
ESCUELA DE LIDERAZGO: LA IGLESIA EN CÉLULAS
LOS 10 MANDAMIENTOS PARA EL CREYENTE DE HOY
MENSAJES DEL SEÑOR.: 7 PROFECÍAS DEL SEÑOR PARA SU IGLESIA
SOBRE ESTA OBRA

Obra: “ENTRENAMIENTO PASTORAL”.
Autor: Ariel Romero.
1ª. Edición: 2003.
© 2003 Producciones Gloria Postrera. Derechos Reservados.
Todas las citas bíblicas usadas en este libro son tomadas de la versión Reina-Valera, revisión de 1960.
El texto y arte de esta obra literaria son propiedad exclusiva del autor. Queda por tanto prohibida la reproducción,
duplicación ó copia por cualquier medio, fuere mecánico, informático ó electrónico, incluyendo el fotocopiado.
Ejemplares adicionales de este libro pueden y deben ser obtenidos escribiendo a la dirección de “Producciones Gloria
Postrera”.
Este libro es un proyecto más de:

PRODUCCIONES "GLORIA POSTRERA"
Apdo. Postal 217, Tecate B.C., México 21400
P.O. Box 333, Tecate CA 91980 U.S.A.

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ENTRENAMIENTO PASTORAL 1

Capítulo 1 EL PROPÓSITO Y PROGRAMA DE LA IGLESIA 4

Capítulo 2 EL EVANGELISMO PASTORAL 10

Capítulo 3 EL CRECIMIENTO DE LA IGLESIA 15

Capítulo 4 LA ASIMILACIÓN DE NUEVOS MIEMBROS 19

Capítulo 5 LA ENSEÑANZA DE LA PALABRA 26

Capítulo 6 EL MINISTERIO A LA HUMANIDAD DEL CREYENTE 32

Capítulo 7 EL MINISTERIO A LOS HOMBRES Y A LAS MUJERES 35

Capítulo 8 EL MINISTERIO DE JÓVENES Y DE NIÑOS 40

Capítulo 9 EL ALCANCE FAMILIAR 44

Capítulo 10 LA SANIDAD Y EDIFICACIÓN DE LOS DOLIDOS 48

Capítulo 11 LOS LÍDERES DE LA IGLESIA 53

Capítulo 12 LA GUERRA ESPIRITUAL EN LA IGLESIA 58

LA RAZÓN DEL LIBRO

LAS DIVISIONES DEL LIBRO

LA HISTORIA DEL LIBRO

Rev. Ariel Romero López

I. NATURALEZA E IDENTIDAD DE LA IGLESIA

DEFINICIÓN DE LA IGLESIA DE CRISTO

3. La Iglesia es única. Es todos-invitativa, pero no todos-inclusiva. Su mensaje excluye o

DEFINICIÓN DE LA IGLESIA LOCAL

II. PROPÓSITO DE LA IGLESIA LOCAL

LA IGLESIA EXISTE PARA:

CARACTERÍSTICAS QUE DEBE TENER LA CONGREGACIÓN LOCAL

III. EL TRABAJO DE LA IGLESIA

IV. EL PLAN DE TRABAJO DE LA IGLESIA

PRECISANDO UN BUEN PLAN DE TRABAJO

3. Supervisar y Unir . Revisar constantemente si cada parte está haciendo su trabajo e ir

ELEMENTOS NECESARIOS PARA HACER UN BUEN TRABAJO

IGLESIA: ___________________________________. Para Fecha: ________________________.

Explicación del proyecto:

No. Tarea Persona encargada

Tarea Evaluación de Tareas por Semanas Antes del Proyecto Check

EL PASTOR COMO PRODUCTOR DE ALMAS

EL PASTOR PRODUCIENDO OVEJAS

CARACTERÍSTICAS DE UN PASTOR PRODUCTOR

EL PASTOR HACIENDO QUE LAS OVEJAS PRODUZCAN

EVANGELIZANDO COMO PASTOR

IDEAS DE CONTACTO PASTORAL

POSIBILIDADES SOBRE ENVIAR A LOS HERMANOS

IDEAS INNOVADORAS DE EVANGELISMO

EXAMEN PARA ANALIZAR NUESTRO ALCANCE

UNA IGLESIA AMISTOSA

¿Para qué Existe mi Iglesia?

UNA IGLESIA DE MULTITUDES EN AUMENTO

CARACTERÍSTICAS DEL LÍDER QUE CRECE

FACTORES QUE DETIENEN EL CRECIMIENTO EN LA IGLESIA

CARACTERÍSTICAS DE LAS IGLESIAS QUE CRECEN

ENFOQUE CORRECTO DEL CRECIMIENTO

QUÉ ES EL VERDADERO CRECIMIENTO

“ENVUELVA A TODA LA IGLESIA EN EL EVANGELISMO, SEA DE UNA U DE OTRA FORMA”.

2 Partes de la Obra de Dios:

Un gran número de personas se convierte a Cristo en cultos, retiros, campañas y reuniones

Escriba aquí que quiere decir “ASIMILACION”:

Por favor escriba aquí

IMPORTANCIA DE LAS TRES ESTRATEGIAS

1a. Táctica: LA PROTECCIÓN

2ª. Táctica: LA ATENCIÓN

3ª. Táctica: LA INSTRUCCIÓN

 Mediante integrarlo a un grupo especial para nuevos convertidos.

MANERA DE REALIZAR LA ASIMILACIÓN

ANTE LOS NUEVOS CONVERTIDOS

ADVERTENCIA: Si no aprenden pronto a defenderse contra el diablo, y no desarrollan amistades

IGLESIA: ___________. Para Fecha: .