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Felipe Rincón Vásquez 1

El Ministerio diaconal

DIACONADO
Servidor de Cristo en la Iglesia local

PROPÓSITO: Capacitar a la Iglesia para conocer los dones que Cristo da a su


Iglesia como Diáconos, y que los que han sido llamados a este oficio procuren la
preparación necesaria para la colocación y desarrollo en el ministerio diaconal.

La doctrina bíblica del diaconado y su importancia


1. La enseñanza sobre el ministerio del diaconado nos capacita para poder
representar el carácter de Dios. La existencia del diaconado nos habla del
carácter misericordioso y compasivo de Dios por sus criaturas, por lo que
cuando ejercemos el diaconado correctamente mostramos ese carácter de
Dios al mundo. Por el contrario, cuando este misterio no es ejercido
correctamente, mostramos al mundo una imagen distorsionada de Dios, como
si ese Dios no se hiciese cargo del pobre y del necesitado. La Biblia nos
presenta a Dios como el Dios del pobre, del afligido y del necesitado
(Deuteronomio 10.17-18; Proverbios 22.22-23).
2. La enseñanza sobre el ministerio del diaconado nos capacita para
reconocer a aquellas personas que Dios esta apartando para este oficio.
Hechos 6.3, el verbo aquí buscad, significa literalmente mirar, observar,
inspeccionar. Como iglesia debían mirar entre ellos mismos para ver quienes
tenían los requisitos que los Apóstoles les habían señalado como
indispensables para el ejercicio del diaconado. La iglesia debe conocer estos
requisitos para que puedan involucrarse en la elección de los diáconos con
entendimiento (1 Tim.3.14-16). Si nos descuidamos en la escogencia de los
que ejercerán el ministerio pastoral y diaconal en la iglesia entonces la verdad
que proclamamos, la verdad del evangelio de Cristo sufrirá, porque estaremos
representando una imagen distorsionada de Dios y su Palabra.
3. La enseñanza sobre el ministerio del diaconado capacitará a la iglesia para
corregir algunos defectos o conceptos erróneos acerca del diaconado. Cuando
una iglesia descuida la enseñanza diaconal corre el peligro de que los

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diáconos se conviertan en una pesadilla para la iglesia. ¿cuáles son algunos


de estos conceptos erróneos?
a) Los que ven la función diaconal únicamente con relación a las
necesidades temporales de los hermanos o de la administración financiera
de la iglesia. Como si este oficio no tuviera nada que ver con los asuntos
espirituales de la congregación. Estas personas ven el ministerio pastoral y
el diaconal de esta manera: el pastoral es un ministerio espiritual, el
diaconal es un ministerio práctico, terrenal, que no es espiritual. Ellos se
ocupan de buscar ropa, comida y asuntos para los que no se necesitan
calificaciones espirituales, y basándose en ese concepto erróneo son
elegidos como diáconos, aquellos que poseen habilidades administrativas
sin tomar en cuenta sus calificaciones espirituales. Este es un ministerio
espiritual, que debe ser llevado a cabo por motivos espirituales, y que
requiere calificaciones espirituales; tan espiritual es el oficio del diacono
como el oficio del pastor, y si no vemos esto así, caeremos en el error de
poner en el diaconado a personas que no poseen discernimiento espiritual
(Hechos 6.3; 1Tim.3). A pesar de lo anterior hay cosas que limitan al
diacono, este no debe inmiscuirse en asuntos que corresponden al pastor;
cuando se encuentre con asuntos que no son de su competencia debe
remitirlo al pastor, así como un medico general remite su paciente a un
especialista cuando encuentra un asunto que no es de su área. Un diacono
no debe dar conserjería en asunto que solo un pastor debe aconsejar
b) Otros ven el diaconado como un grupo de personas que gobiernan la
iglesia. En estas iglesia aun el pastor o los pastores se encuentran
amarrados por la inmensa autoridad que estos han alcanzados, ahí no se
mueve nada sin que los diáconos los aprueben, y el mismo pastor esta
sujeto a lo que los diáconos digan. Este concepto es totalmente antibiblico.
En el N. T., se habla de los diáconos como personas que sirven, no como
personas que gobiernan, y aun en el ejercicio de sus funciones deben estar
bajo gobierno y autoridad de los pastores. Mas adelante veremos este
asunto.
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4. La enseñanza sobre el ministerio del diaconado capacitará a la iglesia para


evaluar la labor de sus diáconos. El oficio diaconal, así como el oficio pastoral
no son perpetuo, un hombre debe continuar en el ministerio pastoral o diaconal
siempre y cuando continué llenando la medida de lo que se espera de El como
pastor o como diacono (1 Timoteo 3.13). Por esto es saludable que estos sean
evaluados y reconfirmados ¿ Por qué es saludable?
a) Porque nos lleva a una auto evaluación. Constantemente los
pastores y los diáconos deben estar evaluando sus ministerios. ¿Qué dirá
la iglesia de mi? ¿Estará mirando en mi aquellas calificaciones que vio
cuando me eligió?
b) Permite a la iglesia reconocer la labor de aquellos hombres fieles
que han estado desarrollando las labores que requiere su oficio.

1. Elabore un diagrama organizacional de la dirección de la iglesia local,


con apoyo bíblico.

2. Ancianos, Obispos y Pastores.


Estos tres títulos en el Nuevo Testamento se refieren a la misma persona. Es
decir, el anciano es un obispo y a la vez un pastor. Veamos en Hechos 20 el
discurso de Pablo a los ancianos de la iglesia de Efeso. Observe
especialmente los versículos 17 y 28.

¿Cómo comprueba en este discurso que estos tres títulos se aplican a la


misma persona?
¿Cómo comprueba Tito 1.5 y 7 esa afirmación?
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¿Cómo lo comprueba 1 de Pedro 5.1-4?

3. El gobierno de la iglesia.
En la actualidad existen iglesias con modelos de gobierno muy diferente unas a
otras. Aunque algunas organizaciones han hecho una mezcla.

a) Congregacionalismo.
b) Episcopal.
c) Presbiteral.

4. Ministerios de la Iglesia cristiana.


En la Iglesia existen dos clases o tipos de ministerios: El ministerio pastoral y el
ministerio diaconal. Los Ancianos que están llamados al ministerio de la
Palabra y la Oración; y los Diáconos que están llamados al servicio de ayuda
en la iglesia, bajo la dirección pastoral (Filipenses 1.1). En la iglesia debe haber
orden, como en todas las organizaciones, pero ese orden lo da Cristo, quien es
la cabeza de la iglesia (1 Timoteo 3.14-15). Solo deben funcionar en la iglesia
los ministerios que Cristo ha instituido, porque él es el dueño y amo de la
iglesia, él no nos da el derecho de inventar. También es él quien dice quienes
deben estar al frente de estos ministerios. Efesios 4.7-11 nos habla de esos
ministerios, aquí la palabra dones no es carismas como en Corintios al hablar
de los dones espirituales, sino mas bien regalos, obsequios. Los pastores y los
diáconos son regalos de Cristo a la iglesia, que funcionan como apóstoles,
profetas, evangelistas, pastores y maestros.

5. Origen del Diaconado

a) Origen teológico.
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b) Origen histórico (Hechos 6.1-6).

La presencia de este oficio en la iglesia es una muestra del interés de Dios por
el hombre. Dios se interesa en el alma y en el cuerpo. Santiago al señalar la
religión verdadera nos dice que se caracteriza por tener misericordia y
santidad. Por otra parte esta doctrina nos muestra la centralidad del ministerio
de la predicación de la Palabra de Dios. No debemos dejar que ninguna otra
tarea nos desvíe de esto.

6. El llamado al oficio diaconal.

a) El llamado interno.
b) El llamado externo.

7. Las Diaconizas (1 Timoteo 3.11).

8. Requisitos para ejercer el ministerio diaconal.


La Biblia habla con claridad sobre lo que debe ser un diácono. En Hechos 6:1-
7 leemos acerca de las cualidades de los primeros diáconos, y en 1 Timoteo
3:8-13 encontramos la lista de los requisitos que los que desempeñan tal oficio
deben llenar. Pablo y los otros apóstoles creyeron profundamente que los
diáconos tenían que ser cristianos firmes. Para nuestro estudio, hemos dividido
los requisitos para el diaconado en varias categorías.

ESPIRITUALES (Hechos 6:3. 5)


1. "... de buen testimonio".
2. "... llenos del Espíritu Santo".
3. "... y de sabiduría.”
4. "... lleno de fe."

PERSONALES (1 Timoteo 3:8-13)


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1 honesto
2 "... sin doblez."
3 ".., no dados a mucho vino."
4 ".., no codiciosos de ganancias deshonestas"

DOCTRINALES: (1 Timoteo 3:9)


1. "... que guarden el misterio de la le con limpia conciencia".

EN CUANTO A LA EXPERIENCIA: (1 Timoteo 3:10)


1. ". sean sometidos a prueba primero"

EN CUANTO AL HOGAR: (1 Timoteo 3:12)


1. "... sean maridos de una sola mujer".
2. "... que gobiernen bien sus hijos y sus casas."

9. Funciones del Diaconado.

El pastor y los diáconos constituyen un "equipo espiritual', cuya función es la


de proteger todos los asuntos de la iglesia. Deben llevar al hombre a una relación
viva y salvadora con Cristo como Redentor, alistarlo en su obra y ayudarlo a
crecer en la fe cristiana. Si este equipo espiritual trabaja en armonía y amor
cristianos, el ministerio de Cristo será más creciente y desafiante para el mundo, y
el pastor y los diáconos mantendrán una relación espiritual que puede ser la más
dulce de la tierra.

1. En sentido general podemos señalar la tarea de los diáconos con la palabra


“servir”. Los diáconos han sido llamados para servir en la iglesia (1
Tim.3.10).

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2. Principios que regulan el ejercicio de esta tarea diaconal.


a) El diacono esta llamado a hacer todo lo que se necesita para atender
a las necesidades temporales y practicas de la iglesia.
b) El diacono a de asumir su función no por usurpación, sino por
delegación de autoridad.
c) El diacono no solo esta llamado a responder a las necesidades
temporales y practicas de la iglesia, este tiene como función
distintiva hacer más fácil la obra de los pastores.

A la luz de estos principios podemos dar una lista de las labores diaconal,
aunque no exhaustiva.
 Según Hechos 6.1-6, esta llamado a socorrer al pobre y necesitado
con el ministerio de benevolencia.
 También tendrá que proveer de consuelo al afligido. Debe ir con
esos pasajes bíblicos que pueden traer esperanza al corazón
adolorido.
 Debe ocuparse de los problemas que surgen en el contexto del
edificio en que nos reunimos para adorar a Dios: asunto de sonido,
de la ventilación, de la iluminación y otras cosas que permitan a la
iglesia adorar al Señor con los menos impedimentos posibles.
 Visitara a los hermanos que por cualquier causa no vayan a la
congregación y les llevara libros, sermones, orara pro los enfermos,
etc.
 Deben ocuparse de las finanzas de la iglesia, de cuidar por sus
pastores.
 Ayudar al pastor en la visitación a los enfermos y a quienes por otras
razones no pueden salir de su hogar.
 Orar con el pastor antes de los cultos y apoyado en oración mientras
está predicando.

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 Dar la Bienvenida a las nuevas personas que visitan y recibir a los


que responden a la invitación del pastor, y participar en el programa
de crecimiento espiritual de nuevos hermanos.
 Motivar a aquellos miembros apáticos que se han alejado de la
iglesia, para que vuelvan; e instar a los que han cambiado su
residencia para que se unan a otra iglesia cristiana o que soliciten
ayuda para empezar una reunión en su hogar.
 Ser ganadores de almas. Nada enciende más la llama del
evangelismo en una iglesia que un grupo activo de ganadores de
almas.
 Participar en la administración de las ordenanzas: el bautismo y la
cena del Señor.
 Participar activamente en las finanzas de la iglesia. Para ello deben
ser diezmeros y deben preocuparse porque los demás miembros
también lo sean.
 Procurar ayudar a la iglesia a comprender mejor las ideas y los
planes del pastor.
 Velar porque se le pague al pastor un sueldo justo y en forma
puntual.
 Ser puntuales en la asistencia a todos los cultos.
 Ayudar al pastor, cuando éste se sienta agobiado por los problemas.
 Estar atentos a los problemas que surjan en la iglesia para tomar la
iniciativa en el asunto, discutiéndolo con el pastor, y guiando a la
iglesia en el procedimiento que debe tomarse (disciplina, falsos
rumores, etcétera).
 Ser progresistas, en el sentido de favorecer cambios benéficos en la
iglesia, siempre y cuando se vele por mantener la pureza del
evangelio.
 Cuidar las propiedades de la iglesia en el amplio sentido de la
palabra (reparaciones, compra de materiales, etcétera).

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 Tener un espíritu de unificación, preocupándose porque los diversos


departamentos o actividades de la iglesia se desarrollen en armonía.

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