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En general, un proyecto de túneles viales de carretera comprende cuatro etapas principales, que
son: i) Planeación, ii) Estudios y diseños (que son estudios de prefactibilidad, de factibilidad y los
definitivos), iii) Construcción y iv) Operación y mantenimiento.
En todos los proyectos, durante todas estas etapas, se debe contar con un proceso de gestión de
riesgos, con el objetivo de identificar con antelación situaciones que puedan afectar el alcance y
los costos del proyecto. Esto se hace a partir de metodologías basadas en probabilidad de
ocurrencia de los eventos, sin embargo, como hay cierto nivel de dificultad en saber esa
probabilidad de ocurrencia, entonces se generan incertidumbres y riesgos. Estos riesgos se
evalúan para determinar los impactos potenciales y las estrategias para prevenirlos. Algunos de los
riesgos básicos son por ejemplo la gestión social, predial y ambiental.
Los proyectos también deben incorporar ciertos criterios de sostenibilidad ambiental, social,
técnica, económica y financiera distribuidas en las fases de planeación, construcción y operación.
Los criterios incluyen hacer la verificación de los posibles impactos, manejo adecuado de recursos,
obtención de licencias y el aprovechamiento de material extraído.
Exploración e investigación
Otro estudio importante es el hidrológico, que tiene como objetivo identificar y caracterizar las
unidades hidrogeológicas que tienen influencia en el túnel. Entonces primero se identifican los
flujos, y las condiciones litológicas, rumbos, buzamientos, fallas y todos estos aspectos que
permitan caracterizar el área de influencia del proyecto. Y luego se hace un balance hídrico y un
inventario de los puntos de agua. Con esto se determinan los patrones de flujo subterráneo y se
plasma la información en un mapa hidrogeológico.
Diseño
En la etapa de diseño, se consideran todos los aspectos geométricos, la ubicación, el diseño del
revestimiento y los aspectos de operación durante la construcción (que son, por ejemplo, el
suministro de energía, agua, iluminación, etc.). Durante el proceso de diseño se tienen en cuenta
todos los factores que influyen en la estabilidad del túnel. Algunos son intrínsecos del terreno por
las condiciones y la composición de los materiales y otros están relacionados con el estado de
esfuerzos y los factores socioambientales.
Los túneles también deben seguir las recomendaciones de diseño geométrico del INVIAS, con
ciertos criterios para la localización del túnel, el diseño geométrico, las secciones de servicio, etc.
En cuanto al diseño geomecánico, el manual propone un procedimiento que asegura el
cumplimiento de los requerimientos específicos del proyecto. Y por último, se menciona el diseño
sísmico. Por efecto del confinamiento durante un sismo las vibraciones entre la estructura y el
suelo no difieren entre sí, sin embargo, sí se podrían presentar desplazamientos grandes por fallas,
deslizamientos o licuación.