2 novimbre 2022

Autosabotaje

La vez pasada hablábamos sobre de que manera nos podemos estar auto saboteado a la
hora de cuidar nuestros cuerpos. ¿Cómo les fue con esa pregunta???
Me gustaría que revisaras la creencia de que eres tu la que elige sufrir o que te boicoteas
porque no te amas lo suficiente.

Necesitamos ampliar el conocimiento sobre los mecanismos inconsientes que operan para
poder utilizarlos a nuestra semana.

Esta semana lanzamos la pregunta ¿Por qué comes de mas??

Y la respuesta de ustedes fue en su mayoría por ansiedad

La definición de la rae para la palabra sabotaje que viene del francés sabotaje que se
refiere a los empleados que dañaban intencionalmente las instalaciones de su trabajo,
como forma de protesta.

Si esto lo trasladamos al terreno de nuestros hábitos alimentatarios, cuando nos decimos

que nos autosabotemos estamosreforzando la creencia de que nos estamos haciendo
daño en forma intencional y esta creencia puede hacer que nos sintamos mas
incopetentes, ineficaces o incluso enfadadas y por supuesto la autocritica va a estar en su
máximo explendor ya que creer que nos estamos dañando o fastidiando nuestros planes
de cuidarnos puede generar mucha frustación y estrés.

Por eso te invito a que trates de comprender que hay detrás de nuestros hábitos
Si fuera cierto …. ¿Cómo es que te pones trabas a ti misma??? ¿te has puesto a pensar en
ello??¿como es que te pones trabas para poder alcanzar aquellos objetivos que crees que
serian beneficiosos para ti???
Necesitamos acercarnos a nuestros habitos disfuncionales para comprender que es lo que
necesitamos, en vez de condenarnos y señalarnos con el dedo repitiendo los mismos
pensamientos y las mismas conductas y llegar a las mismas conclusiones una y otra vez.

En el libro susurrar a la mente Tara Goleman dice “en lo mas hondo de cada uno de
nuestros modos angustiosos hay conflicto y necesidades muy profundas, y es el no haber
conseguido dar una solución satisfactoria a esas necesidades lo que hace que un modo sea
disfuncional.”

Entonces cuando el conflicto apareca pregunntate ¿Qué es lo que realmente necesitas??

Que necesidad insatsifecha tienes y la estas supliendo con comida.
Muchas veces tras los impulsos de comer descontroladamente, tu mente siempre
encuentra jsutificaciones que te animan a comer en exceso….. estoy cansada, he tenido un
mal día, y después de comer pues viene la Culpa, como si no fuera suficiente la
justificación que nos da nuestra mente que nos impulso a comer en un principio …
entonces porque aparece la culpa???

En muchas ocaciones utilizamos la comida como un acto de rebeldía, cansadas quizás de

tanto control, rigidez o perfeccionismo o tambien puede haber otras causas como la poca
tolerancia a la frustación, falta de motivación, creencias limitantes, poca tolerancia al
fracaso, miedo al cambio, falta de estrategias de regulación emocional etc..

Hay que dejer de ver nuestras conductas dañinas como piedras en nuestro camino para
pasar a verlas como oportunidades para aprender de nosotras mismas, de esa forma
vamos a poder ayudarnos de una forma mas efectiva, entonces nuestros síntomas,
nuestros patrones y modos desadaptativos , (nuestro sufrimeinto), nos debe animar a
investigar en lo más profundo de nuestro ser, y gracias a ello podemos avanzar y aprender
nuevas formas de afrontar nuestro día a día

Hay una forma de nosotroas que actua en forma repetitiva y automática y nos hace sentir
muy estancadas y hay razones para ello, ya que estamos biscando satisfacer nuestras
necesidades en forma automática como sentir, calma, placer y la comida nos ayuda a
logarlo, entonces hay que reconocer que si hay motivos para comer pero debemos
recoerdar que esta en nuestras manos elegir algunas justifiaciones puedes ser
Estoy muy estresada,
Hoy mi dia fue pésimo
Estoy agotada
No quiero privarme
El lunes empiezo
Total ya he comido algo que no debía que da mas un poco mas

La pregunta que nos debemos hacer no es que si estas razones son validad o no porque si
lo son pero debemos preguntarnos ¿Acaso no exiten otras maneras de satisfacer esas
necesidades? ¿Por qué nos quedamos con la primera opcipn o la más inmedidata?
¿Debemos satisfacer siempre nuestras necesidades??

El reto que te propongo es nos resistamos a nuestros impulsos mas inmediatos que trata
de satisfacer nuestras necesidades como pueden y tratemos de investigar con que
recursos contamos además de la comida y de esta manera tendremos nuevas estrategias
de afrontamiento y nuestras condiucatas de autocuidado aumentaran nuestra
autoconfianza

Quizá debemos aprender a vivir con ciertas carencias y vacios que quizá no podremos
llenar de forma inmediata, debemos aceptar el deseo insatisfecho como parte de nuestras
vidas en vez d eintentar taparlo con control.
Tras la creencia de “Lo que me pasa es que boicioteo” exite un rol reactivo en vez de
proactivo” debemos identifcar lo que realemnte nos pasa en vez de condenarnos
tratarnos con amor y comprensión tratarnos con autocompasión es muy importate para
nuestra salud mental y emocional

Debemos hacernos responsables de lo que nos pasa y desde allí empezar a cambiar

Algo que podemos hacer es empezar a explrar que te dices a ti miwmq cuando actuas de
una forma que consideras incorrecta o dañina

¿Cuánta hambre tengo hoy?

¿realmente voy a necesitar tanta comida como para poder disfrutar del momento?
¿Si como todo esto lograre descansar como merezco?
¿Para que voy a comer esto?
¿Qué emocinoes o sensasiones quiero nutrir?
¿Cómo creo que mi cuerpo se va sentir mas satisfecho, comiendo una gran cantidad de
comida o comiendo lo que intuyo que necesita?
Si todos se comen toda la comida y yo dejo algo ¿Cómo me voy a sentir?
Estas preguntas harán que se despierte en nosotras la curiosidad

Sentir vergüenza por nuestras conductas alimentarias es señal de que creemos que algo
esta mal con nosotras y con tal de ocultar nuestras inperfecciones y evitar esa vergüenza,
probamos otra dieta, para asi tener control y este surge para ocultar nuestra
vunerabilidad de esconder que no somos perfectas

Lo primero que se nos ocurre pensar cuando no logramos tener éxito en

bajar de peso, o en seguir una dieta, es que no tenemos la suficiente
fuerza de voluntad, que fallamos, que nos faltó disciplina, ganas o que de
plano hay algo muuuuy malo dentro de nosotros que no nos permite
alcanzar nuestros sueños.

¿Y si hubiera otras razones?

La rebeldía a estar siguiendo una instrucción externa.
Martha Baldwin, en su libro “Auto Sabotaje” dice que la fuente de
energía del Auto Saboteador son “Sentimientos de asilamiento, miedo,
dolor y cólera que surgen como respuesta a los mensajes “No seas……”
y “No seas quién eres”.
Cuando un niño ha sido “aplastado” en su voluntad y determinación,
suele desarrollar un deseo oculto por obtenerlas de nuevo. Sin embargo,
al creer que no puede hacerlo de una manera directa haciendo respetar
sus límites y tomando sus propio poder y sus propias decisiones,
encuentra en la desobediencia y la rebeldía la única forma de salirse con
la suya, aun cuando con esas decisiones lo vuelvan a dejar “aplastado”,
ya que con eso se confirma la historia de que no puede hacerlo diferente,
así que vuelve a dejarle al otro las decisiones.

El miedo a lograrlo:
Es tanta la expectativa que nos hemos puesto o mas bien que nos hemos
comprado acerca de lo maravilloso, sano, feliz y paradisiaco que es bajar
de peso, que nos hemos hecho muchísimas fantasías al respecto.
Entre ellas, que lograrlo nos dará el poder mágico de no sentirnos mal
nunca más, de que seremos una especie de súper Héroes y nos da pavor
no poder mantener todo esto. Tememos no poder mantener la expectativa
externa que tanto hemos querido alcanzar.
También da terror irte dando cuenta de que adelgazar no te genera las
emociones que creías, que quizá te sientes vulnerable, desconfiada,
decepcionada, incómoda, cansada, triste…… en pocas palabras:
HUMANA
Miedo a perder tu esencia, a que si ya eres delgada dejaras de ser tú. Que
de pronto tendrás que ser divertida, extrovertido, vestir a la moda, activo,
interesante.
OJO Eres siempre tú, con más o menos peso.

Perder los “privilegios” que te da estar como estás:

La atención del otro
No hacer cosas que crees que tendrás que hacer o cosas que creer que
tendrás que dejar de hacer.
Castigar al otro; Si no me quieres gorda, no me tendrás delgada
Se acaban los pretextos. Ya no habrá gordura a la cual culpar.

Estar desafiando una creencia.

Nuestro sistema de creencias es complejísimo y le ha dado estructura a la
formación de lo que hoy somos. Hay muchas creencias que ni siquiera
tenemos idea que existen y que cuando las desafiamos, se disparan todos
nuestros sistemas de alerta.
Por ejemplo: No se puede confiar en una persona atractiva
La felicidad no existe
Si soy más segura que mi madre, no podré admirarla

No saber hacerte cargo de las emociones sin recurrir a la comida:

“Los adictos a la comida no estaríamos obsesionadas con la comida si
creyéramos que la vida es tolerable sin ella” Geneen Roth

Que estas queriendo llevar a tu cuerpo a un lugar que no le corresponde.

Ponerte expectativas que nada tienen que ver contigo.

La defensa natural de tu cuerpo a la restricción

Hacer dietas está asociado con el aumento de preocupación hacia la
comida, atracones y a comer sin hambre física. Además está asociado a
la ganancia de peso y a trastornos de alimentación. (Haines & Neumark-
Sztainer 2006).
Biologicamente, tu cuerpo experimenta el hacer dietas como una forma
de inanición o hambruna. Tus celulas no saben que estás restringiendo
comida voluntariamente. Tu cuerpo hace el cambio hacia un modo
primitivo de supervivencia, el metabolismo se alenta y los deseos por
comida aumentan. Y con cada dieta, el cuerpo aprende y se adapta,
resultando en un aumento de peso. En consecuencia, la mayoria de las
personas sienten que han fracas ado, pero es hacer dieta lo que en
realidad les ha fallado a ellos. Hacer dieta te desconecta de tu hambre
innata y de tus señales de satisfacción lo que resulta más fácil comer sin
hambre física y desarrollar deconfianza en tus señales biológicas de
hambre. Evelyn TRibole y Elyse Resch autoras de Intuitive Eating

Seguir actuando de la misma manera y con las mismas herramientas de

tu niño herido en lugar de tomar tu poder como adulto.

Porque en el fondo sabes que no quieres cambiar Y TIENES TODO

EL DERECHO DE NO HACERLO
Cuando ya no creas que comer te salvará la vida.
Cuando confías en ti misma más que en la comida, dejas de usarla como
si fuera tu única oportunidad para no desintegrarte.
Dejarás de recurrir a la comida cuando sea tu cuerpo el que entienda, no
tú mente, qué hay algo mejor que comer.
La verdad,  no la fuerza, es lo que acaba con la compulsión.
Ser consciente, no la privación, es lo que dicta lo que comes.
La presencia,  no la vergüenza, cambia como te ves a ti misma y en que
confías.
Cuando dejas de luchar , de sufrir, de esforzarte y de engañarte con
respecto a la comida y a tu cuerpo, cuando dejas de manipular y
controlar, cuando te relajas y escuchas la verdad de fondo, te invade algo
más grande que tu miedo.
Aprendes a confiar en algo mucho más poderoso que un conjunto de
reglas que ha diseñado otro: aprendes a confiar en tu propio ser.