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a a a a a a a a a a
La cual, independientemente del estilo con que se le represente,
conservará sus rasgos particulares; por lo que siempre sabremos
que se trata de la letra “a”.
De manera similar podemos hablar del carácter que constituye
a los discípulos de Cristo; el cual, sin importar las circunstancias,
es perfectamente distinguible e inconfundible, siendo único e
imperecedero, pues procede del auténtico modelo eterno: Cristo.
Pero. ¿cuáles son los rasgos que distinguen el carácter cristia-
no? Jesús, en el Sermón de la montaña expresa 8 rasgos típicos
que identifican a sus discípulos; tales, son: (1) pobres de espíritu;
(2) que lloran; (3) son mansos; (4) que tienen hambre y sed de
justicia; (5) son misericordiosos; (6) son de limpio corazón; (7) son
pacificadores; y, (8) padecen persecución por causa de la justicia.
Estas características describen las cualidades naturales que
distinguen a la «nueva humanidad». Pues se refieren a esos dis-
cípulos que son primicias de la nueva creación. Para poner un
ejemplo sobre los distintos rasgos que identifican al discípulo,
evocaremos el fruto del naranjo … ¿cómo podríamos describir
su fruto? Diríamos que es redondo, tiene cáscara amarilla e im-
ÉISODOS
VINIERON A ÉL Mateo 5:1
SUS DISCÍPULOS
OBJETIVO
Conocer el contexto y sentido de las bienaventuranzas,
propio del texto bíblico y su pertinencia para el discipulado
en nuestros días.
NARRACIÓN
Los evangelios son textos que hablan de la buena noticia de Jesús
y del Reino que se ha hecho presente a través de su vida, obras
y palabras. También son textos cuyo propósito es el discipulado;
pues entendemos que fueron producidos varias décadas después
de que el Maestro transitó esta tierra. Fueron obras cuyos destina-
tarios eran seguidores de Jesucristo, pero estaban distanciados
por el tiempo, la cultura, la geografía y la experiencia directa con
el maestro de Galilea. Por lo tanto, los evangelistas consideraron
necesario dejar atrás las enseñanzas orales para dar paso al le-
gado escrito, con el fin de:
1. Preservar el mensaje para transmitir el Evangelio con pureza.
Con esto respondían a la pregunta: ¿qué significa el Evangelio
para nosotros hoy?
2. “Actualizar” el discipulado para que este fuera vigente en el
lugar y las circunstancias que vivían. Con esto respondían a
la pregunta: ¿cómo se es un discípulo de Cristo hoy, en medio
de nuestras circunstancias?
Es, con base en estas dos preguntas, que podemos descubrir
la relevancia y el sentido que tiene lo que conocemos como El
ANÁLISIS
I. Jesús es el nuevo Moisés. Viendo la multitud, subió al
monte.
Aquí se establece otra similitud, así como Moisés en el Sinaí
(Éxodo cap. 19), Jesús sube a una montaña. Y en ambos
eventos podemos encontrar elementos parecidos. En el caso
de Moisés: montaña, pueblo, ancianos, revelación de la ley;
en comparación con Jesús: montaña, multitud, discípulos, re-
velación de la voluntad de Dios. No obstante, estas similitudes
no sirven para mostrar una equivalencia, sino para resaltara
través de ellas las diferencias.
1. Moisés es un mediador de la revelación de Dios; Jesús, en
cambio, es la revelación y el revelador. Opine.
APLICACIÓN
Vinieron a él sus discípulos. ¿Qué significa ser un discípulo de
Jesús hoy?
La Iglesia de Dios en México congrega a alrededor de 60000
personas como parte de su vida como comunidad; esto repre-
senta que somos como máximo el 0.046% de una población de
130 millones; o sea que hay 46 congregantes de la Iglesia de Dios
por cada 100 mil habitantes. De esa cantidad, solo 35000 son
bautizados. Y, lamentablemente, de esos, solo alrededor del 8%
son creyentes comprometidos; es decir, 2800 personas ejercen
un liderazgo. Solo el 40% asiste fielmente a las reuniones. Solo
el 30% participa frecuentemente en las actividades de la iglesia.
Solo el 10% evangeliza. Solo el 1% participa en un ministerio de
amor (hacia afuera de la iglesia). Solo entre el 20 y 25% aporta
económicamente con fidelidad y generosidad para sostener la
obra. Esto redunda en un crecimiento anual en membrecía de
CONCLUSIÓN
Para dar respuesta a lo que significa ser un discípulo de Cristo hoy,
es importante tener claridad respecto a su ministerio. Equiparar a
Jesús a un gran maestro, profeta o líder no ayuda en nada a me-
nos que esto nos lleve a un movimiento de éisodo. Si es un gran
maestro, permitamos que sus palabras moldeen nuestro carácter;
si es un gran profeta, permitamos que su predicación nos confronte
y transforme; si es un gran líder, permitamos que nos introduzca
en la vida abundante que se manifiesta en su reino. Si Jesús está
por encima de cualquier modelo humano, no podemos quedarnos
impasibles; debemos dar el paso al frente, salir de la multitud,
dejar de escondernos entre la maza. No podemos hacer menos
que venir a Él como discípulos. Eso nos hace bienaventurados.
1
Cf. Éxodo 1:15–16 con Mateo 2:16–18; Éxodo 2:15 con Mateo 2:13–14
2
Cf. Mateo 4:1-11 con Deuteronomio 8:3, 6:13, 6:16.
3
Cf. Deuteronomio 8:2 con Mateo 4:1-2
4
1:22; 2:15, 17, 23; 3:15; 4:14; 5:17, 18; 8:17; 12:17; 13:14, 35; 21:4; 26:54, 56; 27:9 y 35.
5
15:2, 3, 6; 7:3, 5, 8, 9, 13; 13.
OBJETIVO
Describir el concepto de bienaventurado en el marco del sermón
del monte y comprender su diferencia con nuestro concepto
hedonista de felicidad; con el propósito de que cada creyente
coloque la bienaventuranza como el valor que dirija su vida,
sus creencias, valores, convicciones y conducta.
NARRACIÓN
La porción conocida como Las bienaventuranzas es un conjunto de
9 declaraciones que Jesús realiza y que comienzan con la expre-
sión “bienaventurados”. Antes de concentrarnos en comprender
el valor y sentido que encierra esta expresión, es importante que
abundemos en el contexto.
Antes de que Mateo sitúa a Jesús en la montaña se narran tres
episodios: 1. El bautismo de Jesús (3:13-17). 2. Las tentaciones
en el desierto (4:1-11). 3. El inicio de su ministerio en la región de
Galilea de los gentiles (vv. 12-25). Estos tres episodios tienen su
paralelo con el programa que siguió el pueblo de Israel bajo el
liderazgo de Moisés: cruce del mar rojo→ bautismo; la travesía
por el desierto→ tentaciones; y la entrada a la tierra prometida→
ministerio en las regiones gentiles. Así, Mateo compara a Jesús
con Israel, con el propósito de clarificar su misión. Si, en el caso
de la comparación con Moisés, Mateo deja claras notables dife-
ANÁLISIS
I. Bienaventurados
1. La expresión “bienaventurado” es la traducción de la palabra
griega makarios, que es un adjetivo. En el mundo griego,
makarios era la condición en la que vivían los dioses del
Olimpo, un estado dichoso que era privativo de ellos.
2. Más tarde, makarios pasó a ser la forma de felicitar a una
persona por un feliz término. En el Antiguo Testamento
se utiliza principalmente en los libros de sabiduría. Un
competidor que ha obtenido un premio en una carrera; un
campesino que se sienta con los suyos a disfrutar de los
frutos de su cosecha, después de las arduas faenas que
Mateo Lucas
Jesús está en una montaña En un llano (6:17)
9 bienaventuranzas 3 bienaventuranzas
0 ayes 3 ayes
Los discípulos vienen a Él Él alza los ojos hacia sus discípulos
Abre su boca para enseñarles Decía
Expresa: bienaventurados
(aquellos) los que -en las pri- Expresa 3 formas: Bienaventu-
meras 8-. Bienaventurados rados vosotros / los que ahora
sois (ustedes) en la novena / seréis.
bienaventuranza.
II. Aquellos.
Una de las particularidades de Mateo es que, en 8 de las 9
bienaventuranzas, expresa el adjetivo es la tercera persona del
plural; es decir, ellos o aquellos.
1. Esto debe llamar nuestra atención porque si Jesús estuvie-
ra llamando bienaventurados a sus discípulos presentes,
hubiera utilizado el “ustedes”, como lo hace en Lucas. En
cambio, el “aquellos”, «ubica a los bienaventurados en el
horizonte», como un ideal. Comente.
2. Para entender mejor lo que Mateo está comunicando, de-
bemos recordar que Jesús está dando forma a un nuevo
pueblo, una humanidad diferente. Esta no se desarrollará
con violencia, con una revolución o mediante la imposición;
la transformación se situará en el corazón mismo de quienes
decidan seguirlo para ser parte del reino que ha llegado.
3. ¿Quiénes son los dichosos que pueden participar del pro-
yecto del reino? «Aquellos», que describan un carácter. No
serán aquellos que tengan conocimientos, propiedades,
habilidades o poder; sino quienes evidencian unos rasgos
únicos y adecuados al reino que ya está entre nosotros,
que está creciendo y espera su manifestación plena al final
de los tiempos. Opine.
APLICACIÓN
La parábola del rico y Lázaro (Lucas 16:19-25), es una ilustración
que nos ayuda a comprender la diferencia entre ser feliz y ser
bienaventurado. En la historia, aparentemente el rico vivió feliz
toda su vida, pero terminó en un final desventurado; en cambio,
Lázaro, quien vivió como mendigo y a quien podría considerarse
un “infeliz”, terminó en una condición de dicha. Podríamos decir
que Jesús describe a Lázaro como un hombre bienaventurado, y
con ello nos enseña cómo la llegada del reino de los cielos invierte
los valores del mundo.
CONCLUSIÓN
Ser bienaventurados no es estar peleados con la felicidad. Com-
prendemos que lo segundo es un efecto de lo primero. Esto significa
que es más valioso ser (desarrollar carácter), que tener, poseer o
sentir. Este trimestre lo dedicaremos a desarrollar nuestro carácter.
Como el de aquellos, a quienes Jesús mencionó repetidamente
en su discurso, los bienaventurados de su reino.