Introducción

La Iglesia ofrece en el tiempo de Adviento cuatro semanas antes de la Navidad, que

acontece en el mes de diciembre, último mes del año. La Navidad es la gran fiesta del

nacimiento del Hijo de Dios. La Iglesia universal proclama en estas fechas que el Hijo

Unigénito se dignó tomar carne de la siempre Virgen María para salvar a todos los

hombres y Él mismo es quien nos concede ahora prepararnos con alegría al misterio de

su nacimiento, para encontrarnos así cuando llegue, velando en oración y cantando

gozosos su alanzaba. (cfr. Prefacio II de Adviento)

Para disponernos a vivir plenamente este gozoso misterio, es necesario mencionar que

el tiempo de Navidad, no es simplemente una preparación a la celebración del

aniversario del Nacimiento de Jesús, sino la espera del cumplimiento de la promesa de

nuestra Redención realizada en la Encarnación de nuestro Salvador.

Para profundizar más el sentido de nuestra fe, el acontecimiento histórico-bíblico del

surgimiento de la Posada, está fijada en los “Evangelios” que señalan los hechos del

Nacimiento de Jesús, como se describe en el Evangelio de Lucas que María y José

viajaron de Nazaret a Belén para empadronarse por mandato del emperador César

Augusto, y que estando en la ciudad de Belén buscaron refugio donde hospedarse, y

estando ahí se le llego a María el momento de dar a luz, pero al no encontrar lugar dio

a luz a su hijo en un pesebre (Lc 2, 7).

Por ello, la “Parroquia de Comoapan” ofrece este subsidio para una mejor comprensión

del Misterio de nuestra Redención a través de la lectura y meditación de la Palabra de

Dios, la oración, el rezo del santo Rosario, cantos y villancicos… vivamos estas fechas

con esperanza y alegría de saber que Jesús está cerca de nosotros y que la salvación

es un gran regalo del amor que nos tiene. Por lo tanto, que estas catequesis nos ayuden

a prepararnos interiormente y espiritualmente para celebrar la Navidad y reconocer

que Dios se hizo Hombre por amor a la humanidad.