UNIVERSIDAD DE LAS FUERZAS ARMADAS – ESPE

LIDERAZGO

Nombre: Josselyn Sánchez

Carrera: Turismo

¿Qué tan ética es mi conducta?

La ética es considerada como una rama filosófica muy importante, tiene relación con los

valores y la cultura de cada individuo, también se destaca al momento de tomar decisiones

porque “tiene que ver con el proceder de los hombres en relación a su conciencia y

responsabilidad” (Gurria, 1996, p.37).

Considero que soy una persona ética pero solo en ciertas situaciones, por ejemplo cuando

estoy tratando con personas, más que todo, mayores o desconocidos, en todo momento me

dirijo con respeto, humildad y bondad. Pero también admito que en otras situaciones no soy

para nada una persona ética, por ejemplo cuando me toca dar un examen y no se la

respuesta de una pregunta, procedo a copiar, eso es un acto de deshonestidad y no es nada

ético. Siempre trato de poner en práctica todos los valores no solo algunos, pero considero

que también influye mucho mi conducta, según la definición psicológica, la conducta

humana refleja todo lo que hacemos, decimos y pensamos e indica esencialmente una

acción.

La ética y la conducta van de la mano siendo el comportamiento o las acciones que son

realizadas por motivos como valores, creencias, incluso por el lugar de procedencia. Si

nosotros consideramos que no somos éticos, deberíamos intentar dejar de hacer las acciones

que lo hacen ver así, hacer un análisis de nuestra actitud y forma de ser, y preguntarse si
soy realmente una persona ética, y de no serlo, cambiar ese comportamiento para llegar al

éxito siendo alguien con valores.

¿Por qué las personas buenas hacen cosas malas?

Casi todas las personas queremos hacer lo correcto, no mentir, no robar, no matar. Pero en

este mundo hay un sinfín de tentaciones y a veces somos débiles ante ellas, o tenemos

curiosidad saber que se siente hacer tal acción.

Las personas buenas hacen cosas malas también porque tienen algún motivo o están

pasando por alguna situación muy fuerte que les lleva a hacer cosas malas, por ejemplo, si

un padre tiene a su hija con una enfermedad y requiere de dinero, el procederá a robar

tomando esta acción como su última salida. También debemos hablar de las personas

buenas que se vuelven malas, por ejemplo, cuando una persona mata a un animal, al

principio se asusta, se arrepiente y jura no volverlo hacer, pero después siente una

sensación de querer volver hacerlo, y lo vuelve hacer una y otra vez, hasta que lo intenta

con humanos, y se repite este ciclo, se asusta, se arrepiente….pero lo quiere volver a hacer,

convirtiéndose en un psicópata, es como una tentación, cada vez que lo hace se siente bien,

y por supuesto que esta acción no tiene excusa, simplemente se volvió en alguien malo

porque quiso.

Muchos estudios dicen que para ayudarnos a resistir el deseo de actuar de manera poco

ética, debemos estar conscientes de lo que vamos hacer y pensar en las posibles

consecuencias que podrían traer. Poner en práctica esta famosa frase “Pienso, luego existo”

(Descartes, s.f.). Descartes con esta frase procuraba establecer una verdad absolutamente
evidente mediante un sistema deductivo sosteniendo el pensamiento, que son todos los

actos conscientes del espíritu, donde implica siempre duda.

Bibliografía
La ética. (s.f.). Obtenido de La ética:
http://catarina.udlap.mx/u_dl_a/tales/documentos/lhr/gonzalez_a_m/capitulo2.pdf

Storrs, C. (25 de MAyo de 2015). Por qué las personas buenas hacen cosas malas. Obtenido de Por
qué las personas buenas hacen cosas malas:
https://cnnespanol.cnn.com/2015/05/25/por-que-las-personas-buenas-hacen-cosas-
malas/

Comentario libro

Libro: El Arte de la Guerra

Autor: Sun Tzu

Capítulo 3

En este capítulo se mencionó un dicho que me llamo mucho la atención que dice: “conoce

al enemigo y conócete a ti mismo y, en cien batallas, no estarás jamás en peligro”, nos trata

de decir que primero debemos saber quiénes somos y estar seguros de lo que somos, y así,

podremos vencer todo. Este capítulo también dice que la estrategia es vencer sin luchar, sin

asediar ciudades y no invertir demasiado tiempo en ello. Para conseguir el éxito se requiere

atender a cinco aspectos fundamentales: el ataque, la estrategia, las alianzas, el ejército y

las ciudades.