Comentario de texto: La expulsión de los judíos de

territorio español en 1492

Inicios de la edad moderna, Europa ya completamente cristianizada gracias a la

expulsión de los musulmanes de territorio el 2 de enero de 1492. Aquí entra el
conflicto religioso y las ganas de unificación religiosa en territorio español, más aún
después de la conquista de Granada.

Los judíos siempre fue un dolor de cabeza para la Europa romana y cristiana. Desde el
emperador romano Claudio que ordenó la expulsión judía de suelo romano hasta en
1670 con la expulsión judía de Austria, la segunda expulsión de la historia de este país.
Está claro que no es una coincidencia y aún menos en territorio peninsular, dado que
se han dado 5 expulsiones tanto de cristianos, musulmanes y visigodos.

En 1492, los reyes católicos decidieron tras la finalización de la reconquista, expulsar a

los judíos explicando en el decreto de expulsión que se daba por el miedo a que estas
religiones provocaran en personas cristianas el deseo de convertirse y practicar en
secreto la religión judía. Estas decisiones tanto de los reyes católicos como de otros
reinos y monarcas fueron tomadas gracias a varios factores como a la mayoría religiosa
cristiana, su dominio financiero mediante bancos y al arraigamiento de dicho pueblo
con su historia, costumbres y lengua lo cual hacían que este pueblo no se incluyera
bien en otras culturas predominantes y los conflictos internos acabaran provocando su
expulsión.

Actualmente, la expulsión de los judíos en España ha significado muchos cambios

culturales ya que como no fue un dominio militar ni dominante y era una religión y
cultura tan “cerrada” en sí misma no dieron pie a mucha mezcla de culturas. Aun así
podemos destacar el idioma Ladino, que se mantiene hablado por los judíos Sefardíes
(Judíos descendientes de judíos españoles medievales) que es un idioma de origen
español muy similar a este y al portugués. Por otro lado, esta vez de rectificación
histórica por parte de España, a los judíos sefardíes se les da la nacionalidad
automáticamente demostrando su origen. Esto fue la ley que encontró el héroe
diplomático Angel Sanz en Budapest durante la segunda guerra mundial y el
holocausto nazi para reconocer y salvar a judíos del exterminio reconociéndolos
españoles.