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La Ira

1. Piensa antes de hablar


En un momento de enojo, es fácil decir algo de
lo que luego te arrepentirás. Tómate unos
momentos para ordenar tus pensamientos
antes de decir algo, y permite que las otras
personas involucradas en la situación hagan lo
mismo.
2. Una vez que te tranquilices, expresa tu ira
Tan pronto como puedas pensar con claridad, expresa
tu frustración de una manera asertiva pero no
confortativa. Comunica tus preocupaciones y
necesidades de manera clara y directa, sin herir a los
demás ni tratar de controlarlos.
3. Tómate un tiempo para reflexionar
Los tiempos para reflexionar no son solo para
niños. Date pequeños descansos en los
momentos del día que tienden a ser
estresantes. Algunos momentos de tranquilidad
pueden ayudar a que te sientas mejor
preparado para manejar lo que sucederá
después sin irritarte o enojarte.
4. No guardes rencor
El perdón es una herramienta poderosa. Si
permites que la ira y otros sentimientos
negativos sustituyan a los positivos, quizás
notes que tu propia amargura o sentido de
injusticia te abruman. Pero si puedes perdonar
a alguien que te enfureció, ambos podrían
aprender de la situación y fortalecer tu
relación.
5. Entérate de cuándo buscar ayuda
A veces, aprender a controlar la ira es un reto
para todos. Si tu ira parece estar fuera de
control, te fuerza a hacer cosas que lamentas o
lastima a quienes están a tu alrededor, busca
ayuda.
La Biblia enseña que la ira incontrolable
perjudica tanto a la persona que la siente como El hombre iracundo
levanta contiendas, y el
a quienes la rodean (Proverbios 29:22). furioso muchas veces
peca
Aunque la ira puede estar justificada en algunas
ocasiones, la Biblia dice que quienes tienen con
frecuencia “arrebatos de cólera” no obtendrán
la salvación (Gálatas 5:19-21).
Los principios que encontramos en la Biblia
pueden ayudarnos a controlar la ira.
¿En qué casos es malo sentir ira?
Es malo sentir ira cuando no la controlamos o
no hay una razón justificada para enojarnos, lo
que sucede la mayoría de las veces con
nosotros, humanos imperfectos.
Veamos dos ejemplos:

Caín se enfureció cuando Dios rechazó


su sacrificio, y permitió que la ira se
adueñara de él hasta tal punto que
asesinó a su hermano (Génesis 4:3-8).
El profeta Jonás
se puso muy furioso cuando Dios perdonó a los
habitantes de Nínive. Dios corrigió a Jonás
diciéndole que no tenía razón para haberse
“enardecido de cólera” y que debería haber
sentido compasión por aquellos pecadores
arrepentidos (Jonás 3:10-4:1, 4, 11). *

Estos dos ejemplos muestran que “la ira del


hombre no obra la justicia de Dios” cuando no
está controlada ni justificada (Santiago 1:20).
Textos bíblicos que hablan de la ira

Proverbios 16:32: “El que es tardo para la


cólera es mejor que un hombre poderoso”.

Lo que significa: Controlar la ira es una muestra


de fortaleza.

Proverbios 17:14: “El principio de la contienda


es como alguien que da curso libre a las aguas;
por eso, antes que haya estallado la riña,
retírate”.

Lo que significa: Si alguien empieza a enojarse,


es mejor irnos de ahí.
Proverbios 19:11:
“La perspicacia del hombre ciertamente
retarda su cólera”.
Lo que significa:
Podemos evitar enojarnos sin razón si tenemos
en cuenta todos los aspectos de una situación
en vez de sacar conclusiones precipitadas.

Santiago 1.19 “Todo hombre tiene que ser


presto en cuanto a oír, lento en cuanto a hablar,
lento en cuanto a ira”.

Lo que significa:
Podemos calmar nuestra ira si aprendemos a
escuchar a los demás.
Veamos el siguiente video
acorde con el tema

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