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El H om bre
A ctual
en Busca de
la Realidad
fibre
A ctual en
Busca de
la Realidad
Prólogo de
Carlos Llano
l§j§ P A N O R A M A E D I T O R IA L
EL HOMBRE ACTUAL EN BUSCA DE
LA REALIDAD
Portada:
Dibujo: Heraclio Ramírez
Printed in Mexico
Impreso en México
ISBN 968-38-0619-8
Prólogo . ............. 9
1
¿CRISIS DE VALORES? ............. 23
Conocimiento de los va lo re s........................... 24
Realización de los valores .......... ............................... . . 28
2
EL RELATIVISMO Y SUS CONSECUENCIAS................. 35
Que es el relativism o ................... 36
Consecuencias para la persona.................... 40
Consecuencias para las relaciones con los dem ás........45
3
EL DOGMATISMO Y SUS CONSECUENCIAS................... 51
Que es el dogm atism o..................................................... 52
Sobrevaloración de la in te lig e n c ia .................................. 54
Reducción o sim plificación de la realidad .....................59
La actitud ra c io n a lis ta ............... •.....................................64
4
EL R EALISM O ........................................................................ 73
Condiciones para conocer la re a lid a d .............................74
Actitudes que favorecen el re a lis m o .............................. 80
Dos consecuencias del realismo .......................................87
Síntesis comparativa: realismo ante relativism o
y d ogm atism o.................. 87
8 Indice
5
L A AU TEN TIC ID AD COMO FORMA DE ESTAR
EN L A REALID AD ...................................... 93
La noción de autenticidad ....................... 93
La identificación del hombre consigo m ism o........... 95
La m anifestación de sí m ism o.........................................106
Formas de in c u rrir en la in a u te n tic id a d ........... . 107
Medios para ser auténtico .............................. 116
Prólogo
Carlos Llano
Introducción
La s itu a c ió n actual
En la actualidad hay crisis de valores. Esta expresión es un
tópico que se escucha con frecuencia y en el que todo m undo
suele estar de acuerdo. La unanim idad en el acuerdo parece
provenir más de la generalidad y ambigüedad de la expresión,
que de la identificación con su contenido. ¿Qué significa esta
crisis? ¿De qué valores se trata? Esto requiere profundizar en
el tema, para adentrarse en su contenido.
Lo prim ero que hay que advertir es que la crisis, antes que
ser de los valores, es del sujeto de esos valores. Es el hombre
actual el que está en crisis, porque no puede responder, con su
inteligencia o con su voluntad, a los interrogantes fundamen
tales que le plantea la existencia: ¿a dónde voy?, ¿qué quiero?,
¿cuál es el sentido de m i vida? Y al haber perdido el rumbo, al
no tener a la vista el fin de su existencia, es lógico que los valo
res —que son medios para llegar al fin — se desdibujen. En
consecuencia, se puede decir que hay crisis de valores porque
el hombre está en crisis.
La vida humana se desenvuelve dinámicamente y se orien
ta hacia la plenitud. El térm ino plenitud hace referencia al con
tenido, a la riqueza humana, a la calidad de una persona. Y a
esta meta se llega mediante la recta realización de valores, que
es un proceso dinám ico y dependiente de cada persona. Reali
zar un valor es dotar a la existencia de contenido. Si práctico
24 El H om bre Actual en Busca de la Realidad
O b je tiv id a d d e l v a lo r
Es preciso, por tanto, aceptar la objetividad del valor, para no
in c u rrir en las contradicciones anteriores. Sólo reconociendo
que el valor vale en y por sí mismo —valga la redundancia—,
con independencia de la valoración de un sujeto, se podrá con
tar con un camino seguro que conduzca a la ple n itu d de vida.
Sólo considerando los valores como bienes objetivos de la na
turaleza humana, se podrá superar el relativism o en la percep
ción de los mismos y se podrá com prender su función de
medios que conducen al hombre a su fin . Pero esto de la obje
tivid a d requiere una aclaración.
Ciertam ente, hay cosas que valen en sí mismas, inde
pendientem ente de su relación con un sujeto determ inado,
como la vid a , la salud, el amor a Dios, la so lid a rid a d con el
p ró jim o , una verdad científica, la belleza de una obra de
arte. Son valores objetivos cuya validez es anterior e incluso
independiente del acto valorativo del sujeto. Tal objetividad
de los valores no requiere ser demostrada. Es un dato prim a
rio , de evidencia inm ediata, como lo son tam bién las primeras
verdades del conocimiento. En cuanto captamos un valor, nos
damos cuenta de que vale no porque lo apreciemos nosotros,
sino por él m ism o. Lo apreciamos porque vale. Pero, ¿resul
ta suficiente para el hombre aceptar la ob je tivida d del valor
e incluso conocer con precisión y jerárquicam ente los valo
res comunes para todos?
E l v a lo r para m í
Para contestar a lo anterior, hay que tener en cuenta que no
todo lo que vale o es bueno en sí, es bueno para mí. Esto puede
o cu rrir por dos razones: porque aquello que es bueno en sí,
para m í suponga un desorden — ad qu irir un coche, además
del que ya se posee, resulta superfluo; el uso del sexo fuera del
m atrim onio es un pecado—; o porque determinados valores
que podrían ser buenos para m í no están, en mis circunstan
cias actuales, a m i alcance —realizar unos estudios en el ex-
¿Crisis de valores? 27
E l p a p e l de la v o lu n ta d
La voluntad es la facultad mediante la cual se quiere, se toman
las decisiones, se ejecutan los actos que conducen a las metas
que la inteligencia señala. Su relación con la libertad es íntim a,
pues ¿qué otra cosa es la libertad sino esa misma capacidad de
querer, de elegir entre diversas posibilidades, de llevar a la
práctica lo que resulta conveniente? H ay que tener en cuenta
que la libertad real de cada persona depende de lo fuerte que
sea su voluntad: si por debilidad de la voluntad, no soy capaz
¿Crisis de valores? 29
Los co n d ic io n a m ie n to s in te rn o s
Así como al analizar el conocimiento de los valores señalamos
dos obstáculos —dos formas de subjetivism o— que aparecen
frecuentemente en la actualidad, podemos ahora preguntar
nos por los obstáculos que afectan a la voluntad, en su función
de hacer efectiva la realización de esos valores.
Actualm ente, más que en otras épocas, la función de la
voluntad, en la dinámica de la conducta, está m uy des-presti-
giada. Como contrapartida, se exalta la im portancia de las
emociones, de las vivencias, del sentim iento, en la vida hum a
na. En el medio universitario, por ejemplo, se descubre una
marcada tónica en esta dirección: el afán por lo novedoso, el
deseo de m u ltip lica r el número de experiencias, el interés por
los cambios. Son síntomas, ordinariam ente, de inestabilidad y
consecuencia de un deterioro de la voluntad, por el predom i-
30 El Hom bre Actual en Busca de la Realidad
Los c o n d ic io n a m ie n to s externos
Ahora bien, no son sólo los condicionamientos internos los
que pueden afectar negativamente la adquisición de valores.
También las circunstancias externas suelen lim ita r la libertad,
cuando no se es capaz de sobreponerse a ellas. H ay quienes
piensan, coincidiendo con la tesis de una cierta corriente psi
cológica contemporánea, que todas las acciones humanas no
son sino reacciones a estímulos externos, con lo que el papel
de la voluntad queda obscurecido y la libertad negada. Si esto
fuera cierto, poca diferencia habría entre la conducta del hom
bre y la del anim al, y habría que concluir que la realización de
valores es una utopía.
¿Crisis de valores? 31
R e q u is ito s p o r parte de la v o lu n ta d
C on esto podem os co n clu ir que la segunda co n d ic ió n señala
da en nuestro esquema in ic ia l, com o re a liza ció n efectiva de
valores para d o ta r de contenido a la existencia y co n d u cirla a
la p le n itu d , se id e n tific a con la fu n c ió n de la v o lu n ta d , com o
fuerza capaz de co n d u cir la a ctivid a d h um an a hacia esa meta.
Esta v o lu n ta d fue rte deberá enfrentar, superar y, en ocasiones,
aprovechar los siguientes obstáculos:
Que es el relativism o
Hace algunos años estuvo de m oda una obra de teatro en nues
tro país, cuyo títu lo expresaba la a ctitu d p ro p ia del re la tivism o .
Se llam aba Cada q u ie n su vida. H o y en día se escucha con
frecuencia que cada q u ie n tiene derecho a pensar lo que q u ie
ra sobre c u a lq u ie r tem a, que cada u no debe actuar según su
personal m o d o de v e r las cosas, que es p ro p io de personas
m aduras no a d m itir nada sin co m p renderlo, que h a y que re
chazar tod a idea que la a u to rid a d pretenda im p o n e m o s. Q ué
d u d a cabe que estas expresiones poseen u n a tra c tiv o especial
y que, en una p rim e ra instancia, nos sentim os m o vid o s a acep
tarlas. S in em bargo, si p ro fu n d iza m o s en lo que se encierra
detrás de ellas, descubrim os que responden a la idea de que
"to d o es re la tiv o ", pues si no hay verdades absolutas, el senti
do de aquellas afirm aciones se hace más claro. A s í nos hem os
a p ro xim a d o a lo que sig n ifica el té rm in o "re la tiv is m o ", com o
a c titu d ante la verdad.
Para co m p re nd e r con m a yo r p ro fu n d id a d el m o d o preciso
com o el re la tiv is m o entiende la ve rdad, es necesario p re gu n -
El re la tivism o y sus consecuencias 37
E l s u b je tiv is m o en el o rig e n
Si y o a firm o que algo es verdadero "p o rq u e m e lo parece", en
lu g a r de reconocer que si me lo parece es p orqu e "a n te s" es
verdadero en sí m ism o, entonces estaré situando el fundam ento
de la v e rd a d en el sujeto: com o si de éste dependiera el que las
cosas fu e ra n verdaderas. A esta p ostu ra d e l co no cim ien to se le
conoce com o subjetivismo, p o r la p rio rid a d que se confiere al
sujeto frente a la re a lid a d objetiva. La apreciación subjetiva se
co nvierte en la causa de la verdad. U n ejem plo puede ilu s tra r
esta idea: la mesa sobre la que estoy escribiendo es de m adera
porque así me lo parece; y no es que m e lo parezca porque sea
realmente de madera. El su bjetivism o da o rig e n al re la tivism o ,
com o verem os a continuación.
Si algo es verdadero "p o rq u e me lo parece", entonces p o
dem os a firm a r tam bién que será ve rd ad e ro "m ie n tra s me lo
parezca". Es decir, en el m om e n to en que aqu e llo deje de pare-
cerme claro o convincente, p o r esa razón, "dejará de ser" v e rd a
dero. Si la mesa deja de parecerme de m adera, en ese m om e n to
y p o r ese m o tiv o dejará de ser de madera. De aquí se d e riva
u na p rim e ra consecuencia d el su b je tivism o para la verdad: la
v e rd a d es mutable, esto es, cam biante e inestable, puesto que
estará dep e nd ie n do en cada m o m e n to de m i apreciación p e r
sonal y subjetiva. Esta característica de la ve rd a d hace que n e
cesariam ente sea relativa, que no pueda ser absoluta y objetiva,
p o r carecer de v a lid e z en sí m ism a, es decir, fuera d el sujeto
que la considera.
A h o ra bien, si la ve rd ad depende de m i apreciación perso
n a l, que n o tiene p o r qué ser la m ism a que la de los demás —
"n a d a es ve rd ad , nada es m e n tira , to d o depende del co lo r d el
c ris ta l con que se m ira ", suelen a firm a r los re la tivistas— , en
tonces no p od ré h ab la r con p ro p ie d a d de "la v e rd a d ", aunque
se refiera a una m ism a re a lid ad , sino de " m i v e rd a d ", de " tu
38 El H om bre A ctua l en Busca de la Realidad
A c tu a lid a d d e l re la tiv is m o
Esta d o c trin a , p o r a ntig u a que sea, tiene una enorm e v ig e n cia
en la actu a lid a d. ¿Cuál es, p o r ejem plo, el a rg um en to que se
u tiliz a para p ro p o n e r que en u n d ete rm ina d o país se apruebe
una le y c o n tra ria a la le y n a tu ra l, com o sería la le y a fa v o r del
d iv o rc io , d e l aborto o de la eutanasia? La respuesta es sencilla
y a p rim e ra v is ta convincente, tal vez p orqu e estamos dem a
siado in flu id o s p o r el re la tivism o , sin d am os cuenta: "e n la
sociedad h a y u na gran va rie d a d de in d iv id u o s , que piensan
de m aneras m u y diversas; es preciso respetar la lib e rta d de las
conciencias, de m anera que cada q u ie n pueda d e c id ir com o
crea conveniente en cada caso; la le y a fa v o r d el d iv o rc io , del
El re la tivism o y sus consecuencias 39
P é rd id a d e l s e n íid o de la vida,,
h e d o n is m o y evasiones
La ausencia de m etas y o b je tivo s in c lu y e , ló g icam en te, la ca
rencia de ideales, que son esos p u n to s ú ltim o s de referen cia , es
p e c ia lm e n te a p e te c ib le s , cu ya fu e rz a o rie n ta , p o r v ía de
a tracción , to d a la existencia de una persona. P or eso, q u ie n no
tie ne ideales acaba p o r perder el sentido de su vida: ¿para qué
estoy aquí?, ¿qué v a lo r tie ne m i existencia?, ¿a dónde q u ie ro
lle g ar?, ¿tiene a lg ú n caso esforzarse, tra ta r de m ejorar? La p e r
sona s in ideales es com o la cuerda de u n in s tru m e n to m u sica l
que ha p e rd id o la ten sió n , p o r haberse d esp re n d id o de u n o de
sus extrem os, y ya n o puede e m itir sonidos a rm ónicos, más
aún, n i siq u ie ra es capaz de p ro d u c ir n in g ú n so nido , lo cual
pone en c ris is su fu n c ió n . E l ser hum an o está lla m a d o a la p le
n itu d , a la p erfección, a la fe lic id a d com pleta, que v e n d rá com o
consecuencia de la lu ch a personal, in d isp e n sa b le p ara e l p ro
p io p e rfe ccio n a m ie n to . Pero eso no será p o sib le si se carece de
ideales en la v id a , m enos aún, si se p ie rd e la capacidad de te
n e r esos ideales. E l re la tivism o produce esta incapacidad.
U na vez p e rd id o el sentido de la vid a , p o r ausencia de idea
les, la persona se in c lin a hacia lo in m e d ia to . L o que procede
ahora es tra ta r de v iv ir el m om ento, procurarse to d o tip o de
experiencias placenteras, m u ltip lic a r lo más posible las v iv e n
cias que o frezcan satisfacciones sensibles. En u n a palab ra ,
a do p ta r el hedonismo, la búsqueda del placer a tod a costa, como
estilo de v id a , p re te n d ie n d o así resolver la p ro p ia existencia.
Pero p ro n to se experim enta que ese e stilo de v iv ir y esos
recursos n o satisfacen las p ro fu n d a s exigencias de fe lic id a d
que lle va m o s todos en lo más h o n d o de n uestro ser. Y enton
ces, al n o e ncontrar la salida auténtica, p o r haber re n un cia do a
los ideales, aparece el in te n to de h u ir de nosotros m ism os. Y
aquellos supuestos satisfactores — entre los que cabe destacar
en nuestros días el alcohol, la droga, la p o rn o g ra fía — , que o ri
g in a lm e n te se buscaban para resolver la p ro p ia existencia, se '
co n v ie rte n ahora — con el consiguiente aum ento de in te n s i
dad en la dosis— en evasiones para no enfrentarse u n o co n sig o ,
El re la tivism o y sus consecuencias 43
La a u to d e stru cció n
F recuentem ente, la causa más p ró x im a de que a lg u ie n sea
re la tiv is ta es la educación que ha re cib id o. Y en la a ctu a lid a d
son m uchas las in s titu c io n e s e d u ca tiva s que p ro m u e ve n e l
re la tiv is m o , q u izá en algunos casos sin p re te n d e rlo . E l arm a
p rin c ip a l con que esta o rie n ta c ió n cuenta p ara p ro d u c ir ese
re su ltad o es la actitud crítica radical: jam ás h a y que a d m itir v e r
dades absolutas, antes de aceptar cu a lq u ie r idea es preciso
p o n e rla en tela de ju ic io , h a y que rebelarse contra lo estableci
do, c u a lq u ie r a firm a ció n que se presente com o d e fin itiv a debe
ser rechazada. N o se trata pro pia m e n te de una vu e lta a la d ud a
m e tód ica cartesiana, que in d ep e nd ie nte m e n te de sus resulta
dos pre te n día p o sitivam e n te lle g a r a la ve rd ad . A q u í lo que
im p o rta es la a c titu d negativa de rechazo, el e sp íritu crítico p e r
m a n en te, pues se ha re n u n c ia d o a la v e rd a d , al a s u m ir el
re la tiv is m o com o postura.
Tal a c titu d crítica n e g a tiva se convierte en algo destructivo
para la p ro p ia persona: quien asume la n e g a tivid a d como o rie n
tación p ara sus ju icio s, se acaba va cia n d o in te rio rm e n te , al ce
rrarse a sí m ism o la p ue rta para n u trirs e con la verdad. Es
semejante a lo que ocurre a quien, p o r no haber sido educado
44 El H om bre A ctu a l en Busca de ¡a R ealidad
La c o n tra d ic c ió n d e l re la tiv is ta
En su m o m e n to v im o s cóm o la tesis d e l re la tiv is m o , "toda v e r
d ad es re la tiv a ", encierra en sí m ism a una c o n tra d icció n : se
a firm a que la ve rd ad es siem pre re la tiva, a la vez que se p o stu
la u n a v e rd a d a b so lu ta y u n iv e rs a l. D e l m is m o m o d o , el
re la tiv is ta se contradice con su actitud. P rim e ro adopta una
a c titu d de "a p e rtu ra " p o r ausencia de verdades d e fin itiv a s :
com o tod a ve rd ad es re la tiva, n in g u n a de las que posee a d m i
te ser propuesta o d efe nd id a con firm eza . Pero después se en
cuentra ante una d is y u n tiv a : o adopta una a c titu d "ce rra d a "
para m antenerse en su postu ra , o cede y a d m ite que n o toda
ve rd a d es re la tiva. En ambos casos in cu rre en la co ntradicción:
p orqu e re nuncia a su a c titu d "a b ie rta " o a la m ism a tesis d el
re la tiv is m o .
Sobrevaloración de la inteligencia
La p rim e ra causa para in c u rrir en el d og m a tism o consiste, se
g ú n hem os visto , en sobrevalorar la capacidad de la in te lig e n
cia, lo cual da o rig e n a una exagerada se guridad su b je tiva de
poseer siem pre la ve rdad, sin a d m itir que se pueda in c u rrir en
el error. ¿Qué efectos tiene esta actitud? ¿Qué ejem plos con
cretos p ue d en ilu s tra r esas consecuencias?
1. S e h a c e a u to s u fic ie n te . 1. Im p o n e s u s ¡deas.
2. Es in fle x ib le y ríg id o . 2. N o d a c a b id a al d iá lo g o .
3. H a c e a firm a c io n e s ta ja n te s . 3. N o tra b a ja en e q u ip o .
4. O p in a d e to d o . 4. E s re c h a z a d o p o r los d e m á s .
El d ogm atism o y sus consecuencias 59
1. H a c e ju ic io s p a rc ia le s . 1. N o d a s o lu c io n e s e fic a c e s .
2 S im p lific a p ro b le m a s , 2 . H a c e c la s ific a c io n e s
e s id e a lis ta . s im p lis ta s .
3 . N o fu n d a m e n ta s u s id e a s . 3 . C a r e c e d e c o n d ic io n e s
p a ra d irig ir.
La actitud racionalista
La a c titu d ra c io n a lis ta , vim o s en su m om ento, se caracteriza
p o r p re s c in d ir de la re a lid a d , en el proceso d e l co n o cim ie n to ,
p ara apoyarse p rio rita ria o e xclusivam ente en la razón. Esto
ta m b ié n da o rig e n al dogm atism o p orqu e se acaba e xclu yen
do la p o s ib ilid a d d e l e rror, a l n o co n tra sta r n i m e d ir las p ro
p ia s ideas con los hechos. Verem os a c o n tin u a c ió n algunos
efectos que esta a c titu d produce.
1. S e h a c e “cerrado”. 1 . E s in d e p e n d ie n te y a u tó n o m o .
2. P ie rd e c a p a c id a d 2 . D is c rim in a a q u ie n n o p ie n s a
d e a d m ir a c ió n . c o m o é l.
4 . E v a d e la re a lid a d 4. S e c o n v ie r te e n le g a lis ta .
m e d ia n te e s q u e m a s .
ña, reconoce las cosas com o son y las acepta. Luego expresa la
v e rd a d que ha d escubierto, con palabras y con obras, de m a
nera fie l, s in a lte ra rla .
La persona sincera d is tin g u e entre la re a lid a d de las cosas
y sus apariencias, entre e l co no cim ien to ve rd ad e ro y las im
presiones que la re a lid a d produce en su s e n s ib ilid a d , entre lo
que realm ente ocurre y lo que le gustaría que o cu rrie ra .
La sin ce rid a d conduce necesariam ente a la coherencia y a
la a u te n tic id a d , a la u n id a d de v id a : n o basta con conocer teó
ric a o in te le c tu a lm e n te la ve rd a d , sino que es pre ciso v iv irla .
Q u ie n no v iv e com o piensa, no es sincero y n o puede estar en
la re a lid a d .
C uando se tra ta de actuar, la sin ce rid a d ta m b ié n juega u n
p a p e l fu n d a m e n ta l. P or e jem plo, en las tareas que e xigen o r
g a n iz a c ió n , s i h a y s in c e rid a d se p a rte de la re a lid a d , se
v is u a liz a n lo s problem as con o b je tiv id a d , se v a lo ra n los m e
d io s con que se puede contar, y p oste rio rm e n te se fo rm a liz a el
p la n de acción. En cam bio, cuando fa lta la s in ce rid a d , es m u y
fá c il engañarse y ela bo ra r soluciones id e a liza d a s, esquemas
o rg a n iz a tiv o s irre a le s, sin co nta r con las circu n stan cia s o b je ti
vas. La s in ce rid a d , ta m b ié n en el ord en p rá c tic o , nos m antiene
en la re a lid a d .
A veces el p ro ble m a para estar en la re a lid a d procede d e l
te m o r a a fro n ta r las situaciones que a u n o le corresponden. Se
buscan a lte rn a tiv a s que no son sino evasiones, escapes ante
una re a lid a d costosa. La so lu ció n está en la v a le n tía , que lle v a
a a fro n ta r la re a lid a d com o es y a tra ta r de superar lo s obstácu
los p ara id e n tific a rs e con la ve rd a d o bjetiva .
E n ocasiones la v a le n tía se concretará en aceptar las propias
limitaciones, lo s p ro p io s errores o defectos, p ara estar en la rea
lid a d que a u n o personalm ente le corresponde. C uando esto
n o se da, la persona se propone m etas que están fu e ra de su
alcance y se fru s tra cada vez que constata su in ca p a cid a d para
conseguirlas. La persona v a lie n te reconoce sus lím ite s , aun
que le cueste, y no los p ie rd e de v is ta a la h ora de p ro ye cta r su
v id a , a la h o ra de plantearse su su peración en todos lo s órde
nes. P or eso es realista.
El realism o 85
1. R e c o n o c e r que las c o s a s 1. A m a r la v e rd a d .
p o s e e n s u p ro p ia v e rd a d .
2 . C a p a c id a d p a r a c o n o c e r 2. A p e rtu ra .
la v e r d a d c o n objetividad.
3 . A d m it ir q u e la re a lid a d e s 3. F le x ib ilid a d .
c o m p le ja y la in te lig e n c ia
lim ita d a .
4. P ro fu n d id a d . 4. C a p a c id a d d e a d m ir a c ió n .
5. “ O ír to d a s la s c a m p a n a s ” 5 . H u m ild a d in te le c tu a l
a n te s d e ju z g a r.
6. P e d ir c o n s e jo a n te s d e 6. S in c e rid a d ,
d e c id ir.
8. D iá lo g o c o n lo s d e m á s . 8. A fá n p e r m a n e n te p o r v iv ir
d e a c u e rd o a la v e rd a d .
El realism o 87
R e la tiv is m o y re a lism o
Fundamentación de la verdad:
Características de la verdad:
R e la tiv is m o : la ve rd a d es m u ta b le y p a rtic u la r; p o r ta n to ,
to d a v e rd a d es re la tiv a .
R e a lism o : la v e rd a d es perm anente, u n iv e rs a l y o b je tiva .
A c titu d crítica:
Diálogo:
D o g m a tis m o y re a lism o
Conocim iento de la verdad:
La noción de autenticidad
E l té rm in o a u te n tic id a d hace referencia a l carácter o rig in a l y
g e n u in o de una cosa. A sí, p o r eje m plo, se dice que una p in tu ra
de V elázquez es a uté ntica , cuando realmente tie ne a l p in to r es
p a ñ o l com o a u to r; en cam bio, si la p in tu ra es una co pia d e l
cu ad ro o rig in a l, entonces ya n o es a u té ntica , p orqu e su elabo
ra c ió n n o corresponde a l a rtis ta que la co n cib ió o rig in a lm e n
te. E n este caso, la p in tu ra se puede parecer to d o lo que se
q u ie ra a l o rig in a l, pero no es e l o rig in a l, es decir, n o es a u té n ti
ca. D e l m ism o m odo, u n m e ta l puede ten e r la a pa rie n cia de
o ro , p ero si en realidad — es d ecir, en sí m ism o — n o es oro , re
s u lta in a u té n tic o con re la ció n a ese m e tal, p orqu e aparenta lo
que n o es, o porqu e no es lo que aparenta.
E n estos ejem plos se ve claram ente que lo a u té n tico es lo
que co in cid e consigo m ism o — tie n e en sí mismo su p rin c ip io ,
es sí mismo— y, en consecuencia, se m a n ifie sta com o es — re
fle ja en sus apariencias lo que es en re a lid a d — . E n otras p a la -
94 El H om bre A ctua l en Busca de la R ealidad
La a u te n tic id a d en el h o m b re
¿Cómo se a p lic a n estas nociones a l caso d e l hom bre? ¿Cuándo
puede decirse que u n hom bre es auténtico? C ie rta m e nte aquí
el p ro b le m a es más co m p lejo que en las realidades puram en te
m a te ria le s/p o rq u e la existencia hum ana es d in ám ica, cam bian
te; p o rq u e e l h om bre n o es algo acabado, sin o que está siem
p re en cam ino hacia una m eta; p orqu e e l ser h um an o es lib re y
d e l uso que haga de su lib e rta d depende su ser y, en conse
cuencia, su a u te n tic id a d .
D e s c rip tiv a m e n te , y a c u d ie n d o a lo que e l s e n tid o co
m ú n nos d ic ta , p odem os d e c ir que a u té n tic o es e l h o m b re
en e l que n o h a y fa lse d a d , n i a rtific io , n i a fe cta ció n ; a qu é l
que se d ese n vue lve con la se n cille z y la n a tu ra lid a d de q u ie n
se e n cu e n tra a gusto consigo m ism o; que es siem pre e l m is
m o, aunque las circunstancias va ríe n ; que conoce y acepta sus
obliga cio n es y responsabilidades; que se h a lla adaptado a su
p ro p ia situ ación , porque está id e n tific a d o con ella; que n o añora
vanam ente unas circunstancias que no le corresponden o le
re s u lta n inalcanzables; que no v iv e preocupado p o r m antener
una im a g en ante los dem ás, p o r a parentar algo d is tin to de lo
que es. En Hamlet, la obra de Shakespeare, h a y u n m om ento
en que la re in a dice a su h ijo : "H a m le t, parece que estás tris te ",
y H a m le t responde: "¿Parece? Yo no sé parece r". E l hom bre
a u té n tico n o sabe parecer. En d e fin itiv a , es u n hom bre e q u ili
b ra d o , en el que h ay arm onía y coherencia entre lo que piensa,
lo que dice y lo que hace.
Todos estos rasgos característicos d e l hom bre a u té n tico se
d e riv a n de lo que vie n e a ser el fundamento de la a u te n tic id a d ,
es d ecir, ese ser sí mismo, a l que nos hem os re fe rid o antes. Si
aplicam os las ideas expresadas in ic ia lm e n te , sobre la n o ció n
La a u te n ticid a d com o form a de estar en la realidad 95
E l y o o b je tiv o
E n té rm in o s generales, e l y o o b je tiv o es to d a m i re a lid a d p e r
sonal, todo lo que soy en la a c tu a lid a d , lo que m e co n s titu y e
com o persona hum ana — m i e s p íritu y m i cuerpo— , m is ca
ra cterística s p ro p ia s, m is cualida d es y defectos, m is capacida
d es y lim ita c io n e s , m i s itu a c ió n en e l m u n d o , m is
circunstancias.
T am bién fo rm a p a rte de lo que soy en e l presente, to d o
a q u e llo que de u na u o tra m anera in flu y e a ctualm ente en m í
— com o m i pasado y com o m i p ro ye cto de v id a — , lo m ism o
que a q u e llo que es inse pa ra ble de m i ser, p o rq u e se d e riv a ne
cesariam ente de él, com o es e l caso d e l deber-ser. Veam os se
parad a m e nte cada una de estas nociones.
P rim e ro , a l yo o b je tiv o pertenece m i pasado, en cu an to pesa
sobre m i ser presente: lo que he hecho y lo que he dejado de
hacer, m is lo g ro s y m is fracasos, las buenas y las m alas accio
nes que he re a liza d o , m is aciertos y m is errores. P or e je m plo,
s i he cursado la carrera de A rq u ite c tu ra o de C o n ta d u ría en la
U n iv e rs id a d , esto ha dejado u na h u e lla en m i in te lig e n c ia , que
m e in c lin a a v e r la re a lid a d de u na d ete rm in a d a m anefa — en
fu n c ió n de los va lo res estéticos en u n caso, o bajo esquem as
n u m é rico s en e l o tro — .
S e g u n d o , ta m b ié n fo rm a p a rte d e l y o o b je tiv o lo que
q u ie ro ser en e l fu tu ro , m i proyecto de vida, en c u a n to in flu y e
en m i p re sen te, n o en cu a n to a su c o n te n id o n i en c u a n to a l
a cto de q u e re rlo co n scie n te m e n te , s in o en c u a n to a la s co n
secuencias que ese c o n te n id o y ese a cto tie n e n sobre m i ser
a c tu a l. Es d e c ir, lo s efectos que sobre m i pre sen te tie n e n la s
m etas que m e he m a rca d o , lo s v a lo re s que deseo re a liz a r, e l
fin ú ltim o que m e he p ro p u e s to a lc a n z a r y a l que he d e c id i
d o o rie n ta r m i v id a . Q u ie n , p o r e je m p lo , d e cid e ser sa nto ,
co m o m eta ú ltim a de su e x is te n c ia , n o ta rá e l peso de esa
d e c is ió n en e l desem peño de su a c tiv id a d p ro fe s io n a l o rd i
n a ria , la c u a l será re a liz a d a de fo rm a d is tin ta — en c u a n to a
la in te n c ió n y en cu a n to a la p e rfe c c ió n — , que s i fu e ra co n
c e b id a s im p le m e n te co m o u n m e d io de s u p e rv iv e n c ia o
98 El H om bre A ctua l en Busca de ia Realidad
E l proceso de la id e n tific a c ió n
Veamos ahora, con m a yo r d e ta lle , en qué consiste ese proceso
de id e n tific a rs e consigo m ism o, fu n d a m e n to y c o n d ic ió n p ara
alcanzar la a u te n tic id a d . H a b rá que tener en cuenta que, si en
té rm in o s generales, id e n tific a rm e con a lg o consiste en estar en
la realidad de a q u e llo con lo que me id e n tific o , la id e n tific a c ió n
co n m ig o m ism o será más inten sa en la m e d id a en que el yo
s u b je tiv o esté más en la re a lid a d d e l yo o b je tivo .
C om encem os p o r a n a liz a r las dos operaciones hum an a s
que in te rv ie n e n en e l proceso de la id e n tific a c ió n , y que son:
conocerse y aceptarse. P o s te rio rm e n te , co nside re m o s la s dos
actitudes que se re q u ie re n p a ra que estas operaciones a lc a n
cen su c o m e tid o , y que co n siste n en: afrontar la realidad y ser
profundamente sincero. D os ope ra cio ne s y dos a c titu d e s cons
titu y e n , de este m o d o , e l c o n te n id o d e l proceso que e l h o m
b re ha de se g u ir, si q u ie re id e n tific a rs e co n sig o m is m o y ser
a u té n tic o .
Conocerse
La tarea de conocerse corresponde, p rim o rd ia lm e n te , a la in te
lig e n c ia . E l té rm in o de este co n o cim ie n to es la ve rd a d , es de
cir, la ve rd a d sobre u n o m ism o, sobre el y o o bjetivo : saber q u ié n
soy y saber qué debo ser.
100 El H om bre A ctua l en Busca de la R ealidad
A ceptarse
La o tra ope ra ció n que se requiere, para que el h om bre pueda
id e n tific a rs e consigo m ism o, consiste en aceptarse. Esta tarea
corresponde a la v o lu n ta d , porqu e la aceptación fo rm a p a rte
d e l acto p ro p io de esta fa c u lta d , que es e l querer. A ceptarse
s ig n ific a a d m itir to d o lo que u n o es, sin rechazar n in g ú n as
pecto c o n s titu tiv o de la p ro p ia existencia; d a r n ue stra c o n fo r
m id a d a la v is ió n o b je tiv a de n o s o tro s m is m o s , q u e la
in te lig e n c ia nos p ro p o rcio n a ; en una p alab ra , q ue re r lo que
som os y lo que debem os ser: nuestro yo o b je tivo .
A h o ra b ie n , m e d ian te esta o peración d e l aceptarse, ¿qué
ta n to se consigue la id e n tific a c ió n consigo m ism o? ¿Se lo g ra ,
e fe ctivam ente, estar en la re a lid a d de lo que u n o es?
La v o lu n ta d , al querer, sigue una d ire c c ió n in ve rsa a la de
la in te lig e n c ia cuando conoce. En el q ue re r v o litiv o , e l sujeto
va hacia la cosa q u e rid a y te rm in a en ella . La u n ió n que se
p ro du ce es más perfecta, p orqu e e l sujeto se hace a l m o d o de la
cosa, s in im p o n e rle sus condiciones. Se abre a la re a lid a d para
conform arse con e lla , para estar y quedar en esa re a lid a d que
rid a , ta l com o e lla es, s in re d u c irla a sus p ro p ia s lim ita c io n e s .
P or estos m o tiv o s , la id e n tific a c ió n entre el sujeto que quiere y
el objeto q u e rid o es más plena e intensa, que a q u e lla que se
consigue m e d ian te el conocim iento.
C u a nd o la re a lid a d q u e rid a es el p ro p io y o o b je tiv o , en
tonces el acto de quererse a u no m ism o consiste en aceptarse
com o se es, con todos lo s defectos y cualida d es que se posean,
con el peso d e l p ro p io pasado, con las consecuencias d e l p ro
yecto de v id a que se haya asum ido, y con el deber— ser o con
ju n to de co m p ro m iso s y o b lig a cio n e s que se d e riv a n de la
n a tu ra le za hum ana y de la p ro p ia s itu a c ió n en el m u n d o .
Cabe destacar este ú ltim o aspecto, es d ecir, que la acepta
c ió n de sí m ism o in c lu y e la id e n tific a c ió n con el p ro p io fu tu ro ,
con lo que se debe ser en adelante. P or eso, de n in g u n a m anera
se tra ta rá de u n aceptarse pasivo, co n fo rm ista o resignado, sino
e m in e n te m e n te p o s itiv o , en cu a n to que exige la c o n tin u a
su p e ra ció n de u n o m ism o, la o b lig a c ió n de re a liza r, lib re m e n -
La a u te n ticid a d com o fo rm a de estar en la realidad 103
A fro n ta r la re a lid a d
La id e n tific a c ió n con la re a lid a d , con esa re a lid a d que m e cons
titu y e y m e corresponde, es, según hem os d ich o , e l fu n d a m e n
to de la a u te n tic id a d . Pues b ie n , su re a liz a c ió n exige u n a
p rim e ra a c titu d fu n d a m e n ta l: afrontar la realidad, es decir, en
fre n ta rs e con e lla , a ce p ta n d o la s consecuencias que este
e n fre n ta m ie n to lle v a consigo. ¿Cuáles son esas consecuencias?
104 El H om bre A ctua l en Busca de la Realidad
Ser p ro fu n d a m e n te sincero
La o tra a c titu d , ig u a lm e n te im p o rta n te y co m p le m e n ta ria de
la a n te rio r, p ara alcanzar la id e n tific a c ió n consigo m ism o y,
p o r ta n to , la a u te n tic id a d , consiste en ser profundamente since
ro. D ecim os p ro fu n d a m e n te , p orqu e n o se tra ta sólo de esa s in
c e rid a d que, en e l len gu a je o rd in a rio , suele re d u cirse a l sim p le
hecho de n o m e n tir, a la hora de expresarse ve rb a lm e n te . A q u í
La a u te n ticid a d com o fo rm a de estar en la realidad 105
La m anifestación de sí m ism o
In ic ia lm e n te decíam os que a u té n tico es a q u e llo que es lo que
es, que co in cid e consigo m ism o, y, en consecuencia, se m a n ifie s
ta com o es, aparenta lo que es y es lo que aparenta. D e l m ism o
m o d o, afirm ábam os que u n hom bre es a u té n tico si es lo que es
y, derivadamente, si no h a y c o n tra d ic c ió n entre su ser y sus apa
rie n cia s. C on estas palabras se dejaba e ntre ve r lo que ahora
podem os hacer más e x p líc ito , y es que, en efecto, la m a n ife sta
c ió n de sí m ism o, com o señal de a u te n tic id a d — m anifestarse
com o se es— es una consecuencia que se deriva d e l fu n d a m e n to
de la a u te n tic id a d , de la id e n tific a c ió n consigo m ism o.
P or esta ra zó n, la tarea de m anifestarse u n o com o es, no
debería suponer u n problem a, si realm ente e stu vie ra u n o id e n
tific a d o consigo m ism o. E l pro ble m a está, precisam ente, en lo
que c o n s titu y e e l fo n d o de la a u te n tic id a d , en ese proceso de
id e n tific a m o s con nosotros m ism os, que ya hem os a na lizado.
S in em bargo, ta m b ié n es c ie rto que ese m anifestarse u no
com o es, en todos los m om entos y circunstancias, exige u n cie r
to esfuerzo específico, aun cuando se dé, de hecho, la id e n tifi
cación. En otras palabras, la id e n tific a c ió n consigo m ism o no
p ro d u ce , de fo rm a a utom ática, una m a n ife sta ció n id é n tic a a
lo que se es, p o r lo s diversos cond icio n an te s que aparecen en
e l proceso, com o pueden ser la tim id e z de carácter, el afán de
que d ar b ie n ante los dem ás, la in c lin a c ió n in s tin tiv a a o c u lta r
cie rto s aspectos neg a tivos de la p ro p ia p e rso n a lid a d , etc. Para
su p e ra r esos co nd icio n am ie nto s, se hace necesario a p lic a r ese
c ie rto esfuerzo a d ic io n a l, y así conseguir la p lena co in cid e n cia
entre lo que se es y lo que aparece de u n o m ism o. Se tra ta de
u n a tarea fu n d a m e n ta lm e n te e lim in a to ria de lo que estorba,
para d ejar que a flo re , con n a tu ra lid a d y n itid e z , el ser que se
m a n ifie sta .
Este m anifestarse al exterior, en palabras y hechos, ta l com o
se es in te rio rm e n te , co in cide con la v irtu d de la veracidad, la
cu a l se id e n tific a con la sin ce rid a d en s e n tid o a m p lio . Es una
v irtu d que tie ne , com o d im e n sió n co m p le m e n ta ria , la verdad.
Ser ve ra z o sincero consiste en m anifestarse de acuerdo a la
La a u te n ticid a d com o fo rm a de estar en la realidad 107
S ituaciones de in a u te n tic id a d
p o r n o a fro n ta r la re a lid a d
1. No querer enterarse de las propias obligaciones, p ara no ten e r
que v iv irla s . Es el caso de q u ie n p re fie re n o a v e rig u a r — y,
p o r ta n to , e v ita p re g u n ta r— cuáles son lo s com prom isos
que le corresponden, según sus circunstancias. M enos aún
tie n e in terés en p ro fu n d iz a r en el c o n te n id o de esas o b li
gaciones, p orqu e in tu y e que la v id a se le co m p lica ría . U n
p ro fe s io n is ta , p o r ejem plo, que es co n tra ta d o para u n de
te rm in a d o puesto en una em presa, y que n o p u sie ra los
m edios para conocer con p re c is ió n e l á m b ito de sus res
p o n sa b ilid a d e s, lo que se espera de él, p ro n to v e n d ría a
p ro d u c ir u n daño a la em presa, p o r n o a fro n ta r con p ro fu n
d id a d el co m p ro m iso que ha a d q u irid o . Pero esta m anera
s u p e rfic ia l de proceder, no sólo re p e rc u tiría en la em presa,
sin o en él m ism o, p orqu e su p erfe ccio n am ien to , n o sólo en
cuanto p ro fe sio n ista , sino en cuanto hom bre, exige a su m ir
las p ro p ia s obligaciones y v iv irla s con in te n sid a d . De lo
c o n tra rio , se in c u rre en la existencia in a u té n tica .
2. Adoptar una actitud pasiva ante los compromisos adquiridos,
com o si de e llos n o se d e riv a ra n unas consecuencias p re c i
sas. A d ife re n c ia d e l caso a n te rio r, aquí sí se reconocen las
obliga cio n es pero, m ediante u n m ecanism o in te rio r de su
p e rfic ia lid a d o de evasión, no se a fro n ta n sus consecuen
cias. A s í p o r e jem plo, q u ie n pertenece a una in s titu c ió n ,
' que exige unos com prom isos determ inados, pero en la prác-
La a u te n ticid a d com o fo rm a de estar en la realidad 109
M e d io s para conocerse
E l p ro ceso de conocerse exige, en p rim e r lu g a r, reflexionar
sobre sí mismo, esto es, p e n sa r con p ro fu n d id a d sobre n ue s
tro m o d o de ser, sobre nue stra s reacciones ante lo s d iv e rs o s
e s tím u lo s que se nos p re se n ta n , sobre n u e s tra e x p e rie n c ia
en el desem peño de la a c tiv id a d o rd in a ria , sobre nuestros e rro
res y om isiones, sobre nuestro tra to con lo s dem ás, sobre nues
tro c o m p o rta m ie n to en d iv e rs a s c irc u n s ta n c ia s , sobre la
re la c ió n que h a y e n tre las m etas que nos p ro p o n e m o s y lo s
re s u lta d o s que alcanzam os, sobre e l c o n te n id o de esas m e
tas, de esos o b je tiv o s que o rie n ta n n u e s tra c o n d u cta . L a re
fle x ió n im p lic a b usca r e x p lic a c ió n a lo s hechos p erson a les,
lo c u a l q u ie re d e c ir p re g u n ta rse p o r sus causas y pen sa r p ro -
La a u te n ticid a d com o fo rm a de estar en la rea lid ad 117
p r in c ip a l es de o rd e n s o b re n a tu ra l: D io s p ro p o rc io n a , a
q u ie n se acerca a E l, unas luces, p ara que se conozca a sí
m is m o , m u ch o m ás in te n sa s que las que la sola in te lig e n c ia
h u m a n a p ue d e alcanzar.
M e d io s para aceptarse
A cep ta rno s a nosotros m ism os sig n ifica, según d ijim o s en su
m om e n to , q u e re r to d o el co n te n id o d e l y o o b je tiv o , es decir, lo
que som os y lo que debem os ser. A h o ra b ie n , com o ese conte
n id o in c lu y e tam bién los aspectos objetivam ente negativos que
h a y en nosotros — defectos y lim ita c io n e s personales— , así
com o algunas circunstancias o situaciones que fo rm a n p a rte
de nuestra existencia y que no nos gustan o no nos apetecen,
supone una ayuda im p o rta n te el adoptar una visión positiva ante
to d o eso, de m anera que sepamos d e scu b rir la p a rte favo ra b le
— que siem pre la h ay— en cada aspecto o circu n sta n cia de
n u e stra v id a . Esta v is ió n p o s itiv a se id e n tific a con el optimis
mo, que n o sólo n o lle v a a l rechazo de lo que nos corresponde
aceptar, n i a la m era re sig na ció n ante lo irre m e d ia b le , sin o que
p e rm ite d e scu b rir p o s ib ilid a d e s de p e rfe ccio n a m ie n to perso
n a l, de re a liz a c ió n de valores, en todas las situaciones. A s í p o r
e je m p lo , q u ie n se encuentra lim ita d o en sus co no cim ien tos
p ro fe sio n ale s, sabrá p o n e r p o r obra el p la n que le p e rm ita su
p e ra r esa d e ficie n cia , in v irtie n d o tie m p o y esfuerzo en el estu
d io de la s cu estio n es que n o d o m in a . Q u ie n padece una
enferm edad, que le im p id e desenvolverse físicam ente con n o r
m a lid a d , aprovechará su estado o b lig a d o de reposo para p o
te n cia r su d esa rrollo in te le ctu a l, con la le ctu ra de buenos lib ro s.
O q u ie n debe c o n v iv ir con una persona — que puede ser la
m ism a esposa o el esposo— , con la que choca con fa c ilid a d ,
p o r razones caractereológicas, aprenderá a acoplarse a pesar
de esas diferen cia s, lo cual le p e rm itirá , adem ás, a d q u irir la
capacidad de com prender y relacionarse con u n n ú m e ro m u
cho m ás a lto de personas.
C uando la v is ió n p o s itiv a se fom en ta y se ejercita en u n
cam po, o rd in a ria m e n te se proyecta ta m b ié n en otros, y la acep-
La a ute nticid ad com o form a de estar en la realidad 119
D e l p ró lo g o de C arlos L la n o
PANORAMA
■E D I T O R IA L
9 789683 806192