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Este período de la Historia de Chile comienza con la expedición de Hernando de Magallanes (1520) o de Diego de
Almagro (1536) hasta la fundación de Santiago, el 12 de febrero de 1541, por don Pedro de Valdivia.
Hernando de Magallanes, era un hidalgo portugués que había caído en desgracia con su rey (por sus acciones de
Marruecos - Africa ), don Manuel el Afortunado. Se puso al servicio de Carlos V de España. Su proyecto era buscar
por el oeste una nueva ruta marítima a las islas de las especias o Molucas, que según sus cálculos se encontraba en la
sección atribuida por los tratados a España (Tratado de Tordesillas, 1494).
El rey Carlos V le entregó 5 naves con las cuales el 20 de septiembre de 1519 sale del puerto de San Lucar de la
Barrameda. En diciembre del mismo año hace escala en Río de Janeiro y poco después llega al estuario del Río de la
Plata. Continuó al sur, pero el frío lo obligó a invernar en la bahía de San Julián. En ese lugar hubo un intento de motín
que Magallanes sofocó ordenando decapitar a los cabecillas y abandonar a otros en la playa. El 21 de octubre de 1520
llega a la entrada del Estrecho. Dos naves lo exploraron durante seis días, pero sin encontrar la salida. El 1 de noviembre
de 1520, Magallanes inicia el recorrido que duraría 27 días hasta desembocar en el Mar del Sur, al que por encontrarlo
tan tranquilo, rebautizó como "Océano Pacífico". Al estrecho recién descubierto lo llamó "Estrecho de Todos los
Santos", y a la región situada más al sur "Tierra del Fuego" ( por las noches las fogatas de los Onas, cubrían la costa).
Continuó su viaje hasta llegar a un archipiélago, que bautizó con el nombre de San Lázaro, más tarde rebautizado como
Filipinas, en honor al Rey Felipe II. En la isla de Mactan (Filipinas) muere Hernando de Magallanes, al ser alcanzado
por la lanza de un indígena), el 27 de abril de 1521. El mando de la expedición pasó a Sebastián Elcano, quién tras
eludir a árabes y portugueses, consiguió llegar a Sevilla, en la única nave que quedaba, La Victoria (septiembre de
1522), con sólo 17 tripulantes.
Diego de Almagro llegó a América el año 1514 formando parte de la expedición de Pedro Arias Dávila y gracias a sus
méritos se transformo en un vecino respetado de Panamá (fundada el 15/08/1519). Más tarde, su labor en el Perú le
hizo merecedor del título de adelantado ( ir adelantando la conquista), la categoría de hidalgo (antepone a su nombre
el "don"), y la Gobernación de la Nueva Toledo (14º 05' 43" hasta los 25º 34' 26").
En resumen, era rico y respetado. Decidió invertir toda su riqueza, en financiar una empresa descubridora, cuyo
campo de acción fue el Perú y posteriormente Chile.
Entre las posibles motivaciones que tuvo Diego de Almagro, para venir a Chile, podemos mencionar las siguientes:
1. Los relatos de los indígenas, que le hicieron pensar que todo el oro encontrado
en el Perú provenía de Chile. En realidad, esto formaba parte de un plan, para
dividir las fuerzas de los españoles y posteriormente atacarlos.
A un año de su salida y con 154 españoles llega al Valle de Copiapó donde tomó posesión de esos territorios a nombre
del rey Carlos V. Continuó su viaje hacia el sur y en el Valle del Río Mapocho, el 12 de febrero de 1541, funda la
ciudad de Santiago de Nueva Extremadura a los pies del cerro Huelén (Santa Lucía). En este momento termina el
período del Descubrimiento y se inicia otra etapa en la historia de Chile, La Conquista.
El encargado de trazar el plano de la nueva ciudad fue el Alarife Pedro de Gamboa, el cual, diseña un plano conocido
como "damero" o "tablero de ajedrez" ya que las calles se distribuyen en manzanas. Una vez trazada la ciudad de
Santiago, Pedro de Valdivia designo un cabildo compuesto por 2 alcaldes y 6 regidores. El recién designado cabildo
eligió a Pedro de Valdivia, Gobernador y Capitán General de Chile, en nombre de Su Magestad y por voluntad del
pueblo. Posteriormente, el recién electo gobernador, procede a repartir las tierras y las encomiendas de indios (grupo
de indígenas entregados a un español).
Hasta ese momento, Pedro de Valdivia era lugarteniente de Pizarro, por lo tanto estaba bajo sus ordenes y los poderes
que tenía se los había dado éste. Al ser nombrado Gobernador de Chile, por el cabildo de Santiago, se desliga
completamente de la autoridad de Pizarro, ya que ambos, tienen el mismo cargo. Por lo tanto:
Francisco Pizarro = Gobernador y Capitán General del Perú. Nombrado por el Rey ( propietario del
cargo ).
Pedro de Valdivia = Gobernador y Capitán General de Chile. Nombrado por el Cabildo de Santiago (
interino en el cargo )
ASENTAMIENTOS ESPAÑOLES.
A pesar de la destrucción de Santiago el 11 de septiembre de 1541 a manos de los indígenas al mando de Michimalongo,
los españoles procedieron a fundar otras ciudades y fuertes.
Con esto debilitó las fuerzas de Gonzalo Pizarro, ya que los almagristas se pasaron al bando del virrey. Pizarro es
derrotado en la batalla de Jaquijahuanca (1548) y condenado a muerte. Pedro de Valdivia, que había peleado a favor
del virrey, fue confirmado, en el Cuzco, como gobernador de Chile (propietario). Su gobernación pasó a llamarse
"Nueva Extremadura" y se extendía desde los 21 grados (Caldera) hasta los 41 grados (San Pedro). Además de las
regiones del Cuyo y Tucumán (actualmente de Argentina).
MUERTE DE PEDRO DE VALDIVIA
En la primavera de 1553 estalló la rebelión indígena encabezada por el toqui Lautaro. Sitian el fuerte de Tucapel. Pedro
de Valdivia, junto a 40 hombres salen de Concepción rumbo a la zona de guerra. El 25 de diciembre son emboscados
y derrotados. El Gobernador y Capitán General don Pedro de Valdivia es capturado en la batalla de Tucapel, siendo
ejecutado posteriormente. El Resultado fue que ningún español sobrevivió. Cuando en Concepción se conocieron las
noticias de lo ocurrido en la batalla de Tucapel y la muerte del gobernador, el cabildo de la ciudad procedió a abril el
pliego de mortaja (testamento) de Pedro de Valdivia, en donde designaba a su sucesor. En el testamento, habían dos
nombres:
Jerónimo de Alderete, que en ese momento estaba en España.
Francisco de Aguirre, que por orden de Pedro de Valdivia se encontraba en la región del Tucumán fundando
Santiago del Estero (1553).
El gobierno de Chile queda acéfalo; surgen 3 gobernadores proclamados por los distintos cabildos. Ellos son: Francisco
de Villagra, nombrado por el cabildo de Concepción; Rodrigo de Quiroga, designado por el cabildo de Santiago y
Francisco de Aguirre, proclamado por el cabildo de La Serena. Por otro lado, Jerónimo de Alderete, es nombrado
nuevo gobernador de Chile por el Rey, pero a su regreso muere en Panamá (1556).
Documento: El Conquistador.
El Conquistador, término que, en la historiografía hispanoamericana, alude principalmente a los españoles
que llevaron a cabo las labores de descubrimiento, conquista y colonización de América, entendiendo la voz
‘descubrimiento’ como la expresión de lo que se ha venido a llamar recientemente, con mayor exactitud, el
encuentro de dos mundos.
El concepto ‘conquistador’ no puede explicarse remitiéndose a un modelo arquetípico de hombre, porque el
carácter y las acciones del conquistador no son únicas, sino que ofrecen muchas variantes. Los hechos, las
crónicas y los documentos de la época muestran la diversa personalidad de unos hombres que debieron,
además, adaptarse a diferentes circunstancias. Procedían, en su mayoría, de las tierras de Andalucía,
Extremadura y Castilla y pertenecían a todos los estratos sociales, predominando los hidalgos y escuderos,
sin que faltaran los artesanos, mercaderes y algunos labradores.
Fueron, como señaló Hernán Cortés, "hombres de diversos oficios y pecados". Su formación cultural, de
acuerdo con la tónica general de la época, fue más bien escasa, lo mismo que su formación guerrera. A
pesar del carácter esencialmente militar de la conquista, muy pocos de sus protagonistas eran soldados de
profesión o contaban con una experiencia previa en Flandes, Granada o Italia.
Las acciones de los conquistadores españoles en América han sido enjuiciadas desde enfoques muy distintos.
A la imagen del conquistador, que algunos historiadores españoles quisieron propagar, de fiel soldado,
patriota y defensor de la doctrina cristiana en las nuevas tierras, se opone la visión del conquistador como
hombre ambicioso, sin escrúpulos, ávido de oro, mujeres y tierras, cruel y sanguinario con los indios, que
las denuncias de Bartolomé de Las Casas y la denominada ‘leyenda negra’ contribuyeron a difundir. El
conquistador español fue un hombre de su tiempo, moldeado por unas circunstancias históricas concretas,
al que hay que valorar dentro de los cánones morales de su época y no desde los principios éticos actuales.
El estudio de la Europa de aquel momento demuestra que la crueldad y la intolerancia religiosa, así como
el desprecio por los derechos humanos, eran características presentes en todo el continente.
Algunos historiadores han insistido en un lema que recoge las tres preocupaciones fundamentales o impulsos
básicos del conquistador del Nuevo Mundo: "oro, gloria y Evangelio". El aprecio por el oro, símbolo máximo
de la riqueza, es innegable. Para Bernal Díaz del Castillo los conquistadores iban a América "por servir a
Dios, a su Majestad y dar luz a los que estaban en tinieblas, y también por haber riquezas, que todos los
hombres comúnmente buscamos". La codicia por el oro y otras riquezas fue, a la vez aliciente para superar
peligros y adversidades y causa de gran parte de la violencia y de las crueldades de los conquistadores. Pero
el oro se ambicionaba no tanto como un fin en sí mismo, sino como un medio para conseguir poder y
prestigio. Las tierras de América permitían a un hombre de baja condición social obtener riquezas, poder y
reconocimiento de los demás. El conquistador anhelaba obtener un buen botín o una buena encomienda que
le diera tranquilidad y bienestar para el resto de sus días, pero las aspiraciones de oro y riquezas no siempre
se lograban, ni compensaban los grandísimos esfuerzos que las campañas requerían. No faltaron los
conquistadores que perdieron su fortuna recién adquirida en la financiación de una desgraciada campaña,
que podía acabar también con su vida. Por otra parte, la Corona española estuvo siempre en guardia y no
permitió que se consolidaran los sueños feudales de los conquistadores, cuya máxima aspiración era la
obtención de extensas tierras en señorío. El mayor beneficio que les concedió fue la encomienda, pero por
tiempo y con poderes limitados.
Las hazañas emprendidas y la obtención de riquezas permitían el ascenso social y, lo que era más importante,
ganar prestigio, gloria y fama. Para muchos conquistadores, el ‘hombre de honra’ era el hombre noble por
excelencia, aquél que adquiría esta categoría no tanto por los títulos heredados de sus progenitores como
por sus valiosas acciones. Las empresas americanas concedían esta nueva nobleza, más importante que la
de sangre. Anhelaron un título de la nobleza de Castilla como reconocimiento por sus acciones, pero no les
fue concedido. La antigua nobleza castellana no estaba dispuesta a aceptar en su seno a estos hombres de
baja y oscura condición, nuevos ricos, arrogantes y altivos, que solicitaban honores y títulos. Muchos de
estos conquistadores compensaron su carencia de títulos adoptando la dignidad externa de la nobleza, pero
llevándola a extremos ostentosos y exagerados. El lujo de sus moradas y de sus atavíos era la expresión
externa y simbólica del poder, del prestigio y de la honra que creían merecer y que querían mostrar a los
demás.
ESTUDIOS SOCIALES
Guía Nº 6 – Descubrimiento y Conquista de Chile
1º Nivel C
Nombre Nota
Curso Fecha Ptje Ideal 15 Ptje Real
3. ¿Cuál es el resultado de la expedición de Almagro y qué fin tuvo Diego de Almagro? (2 Puntos)
4. ¿Dónde obtiene Pedro de Valdivia el Título de Gobernador y Capitán General de Chile? (2 puntos)
6. Basándose en el documento, “El conquistado”. Señale las características de los conquistadores que vinieron al
continente Americano. (3 puntos)