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Trabajo con gráficos avanzados

Más allá de los gráficos básicos

Una de las razones por las que la visualización de datos es tan efectiva, es que
nos permite extraer conocimiento de grandes volúmenes de datos que sería
inmanejable desde una hoja de cálculo tradicional. Podemos ver tendencias,
valores atípicos, y podemos comparar medidas en un rango de
dimensiones. Para ello, podemos utilizar visualizaciones que van mucho más
allá de los gráficos básicos. 
La visualización es la única forma de hacer accesible a una gran audiencia los
grandes volúmenes de datos que se manejan con tecnologías Big Data. Los
datos ganan verdadero valor cuando se utilizan para influir y obligar a una
gran audiencia a tomar acción. La elección del tipo de gráfico correcto es vital
para conseguir ese propósito. 
Para mostrar valores muy resumidos o agregados, resulta eficiente utilizar
tarjetas, termómetros y medidores que indican los valores para los indicadores
clave de rendimiento, o KPI, por sus siglas en inglés, que significan Key
Performance Indicator. 
Un caso particular puede ser mostrar estos valores, pero en movimiento, 

ya sea con una barra de desplazamiento o scroll, o

mediante contadores de tiempo, como los cronómetros
o temporizadores. 
Cuando necesitamos consumir información sobre la
duración de procesos, la visualización indicada es el
diagrama de Gantt. 

Este diagrama se compone de al menos tres elementos diferentes, la

dimensión por la que queremos dividir los datos, una fecha de inicio y
algún tipo de duración. Al colocarse en el contexto del tiempo en sí
mismo, nos permite ver los eventos de los días individuales, y ver qué
sucedió. En la gestión de proyectos, es el gráfico de uso estándar para mostrar
las tareas de gestión de proyectos y los plazos. pero los objetos apilados se
separan para comunicar un efecto acumulativo. No es un gráfico de barras
apiladas típico, porque tenemos valores negativos representados, lo que no
puede hacerse en una barra apilada. 
El gráfico de cascada es esencialmente un gráfico de barras apiladas,  pero los
objetos apilados se separan para comunicar un efecto acumulativo. El tamaño
es relativo en todos ellos y el efecto acumulativo resultante. No es un gráfico de
barras apiladas típico, porque tenemos valores negativos representados, lo que
no puede hacerse en una barra apilada. 
Es ideal para comparar cómo se han comportado las cifras entre dos momentos
en el tiempo, y resaltar los valores por categorías específicas. Un tipo de
elemento visual muy efectivo para comunicar los flujos y el tamaño
proporcional de estos flujos de un lado hacia el otro, es el gráfico Sankey. 

El uso de visualizaciones de calendarios es muy efectivo cuando se combina con

colores de relleno que permiten ver con absoluta claridad los patrones de
comportamiento de las cifras a lo largo de varios periodos. 
Los gráficos de radares o arañas son buenos para mostrar múltiples variables a
la vez, y mostrar sus fortalezas relativas entre los elementos. 
Deseas mantener a tu público interesado, Experimenta, inspírate, y simplemente
encuentra formas geniales y simplemente encuentra formas geniales para
mostrar los datos, para mostrar los datos, y contar las historias que estás
tratando de contar. y contar las historias que estás tratando de contar.

Los mapas como elemento esencial en la visualización

Un aspecto importante de Big Data para la organización empresarial de datos es

la variabilidad que trata de las muy diferentes fuentes de datos que existen
actualmente. 
El trabajo del analista de datos es encontrar los datos que complementen sus
otros datos, como pueden ser datos de geolocalización, clima o
demográficos. Las fuentes son muy diversas y la estructura de los datos
también. En este contexto, la utilización de mapas juega un papel fundamental. 

Los mapas son una de las formas más antiguas de diseño de información. Existe
una conexión cultural muy fuerte con los mapas y son muy efectivos cuando los
datos geográficos son una ubicación, cuando es el lugar lo que importa y no
solo una categoría en los datos. 
En caso de ser una categoría más, puedes seguir utilizando los gráficos de
barras y columnas para realizar comparaciones. 
Una vez que hayas decidido que vas a mostrar un mapa, el siguiente paso es
definir qué tipo de mapa vas a utilizar, lo que depende en gran medida de los
datos y del tipo de pregunta que necesites contestar. 

El mapa de marcadores o de puntos es el más utilizado. Si tienes ubicaciones

físicas de sitio y solo necesitas señalarlas, en correspondencia con los valores de
latitud y longitud, Los mapas de calor o de densidad son impresionantes debido
a que podemos ver una gran cantidad de datos subdivididos por categoría y
luego podemos buscar patrones en esos datos. Más adecuado para conjuntos
de datos muy grandes en los que queremos seleccionar valores de cientos o
quizás miles de registros. 
Puedes variar en color usando opacidad y/o múltiples colores con rangos
numéricos en la leyenda y no en la visualización. como estados o
provincias, entonces el mapa de símbolos podría ser una mejor opción. 

El mapa de símbolos funciona colocando una marca en el centro de cada uno

de los puntos geográficos que estemos analizando, ya sean estados, países o
provincias. Podemos colorear o dar forma a las marcas para que identifiquen
categorías diversas. También podríamos usar el tamaño de la marca para
codificar una medida. 
El mapa relleno aplica intensidad de color al área correspondiente según los
valores. Este tipo de mapa se conoce también como coropleta donde la forma
de la región es un límite y el color o la translucidez se utilizan para reflejar los
datos que contiene. El mapa relleno o coropleta solo puede mostrar una
medida a la vez. Por lo tanto, si deseas mostrar más de una, entonces el mapa
de símbolos es lo que se debe usar. 
Los mapas de flujos se utilizan para ver los desplazamientos entre regiones o
puntos en el mapa. Pueden tener asociada una línea de tiempo para mostrar el
punto en el que se encontraba el flujo en un momento determinado. Se suele
indicar con flechas. El grosor de la línea indica el volumen del flujo. Pueden
parecerse a los llamados mapas de araña, con la diferencia de que estos no se
suelen asociar con tiempo. Son mapas de origen a destino. 
Un tipo muy específico es el llamado isopleta, que son mapas del tiempo para
representar cantidades de lluvia o concentraciones de calor. 
Son muy efectivos para mostrar concentraciones de eventos que pueden no
adherirse directamente a áreas geográficas delimitadas como ciudades,
condados, estados o países. 

En todos los casos, cuando trabajes con mapas, ten muy en cuenta la elección
del color. Ciertos colores tienen fuertes asociaciones con temas
particulares como pueden ser los colores de partidos políticos. Entonces, se
deben evitar para no crear confusión. 

Al visualizar datos con mapas, asumes que todos los que lo están viendo están
familiarizados con la geografía. Muchos mapas tienen límites irregulares y las
áreas pueden variar en tamaño, lo que dificulta aún más la navegación. 

Puedes mitigarlo un poco agregando etiquetas, pero eso pronto puede hacer

que la visualización sea muy desordenada. pero eso pronto puede hacer que la
visualización sea muy desordenada. Los mapas son herramientas de
comunicación hermosas, Los mapas son herramientas de comunicación
hermosas, maravillosas y poderosas que casi todos pueden leer. maravillosas y
poderosas que casi todos pueden leer.

Combinar vistas en gráficos múltiples o en minigráficos

Cuando intentamos comparar datos que cambian a lo largo de las

dimensiones es tentador utilizar elementos como el color, la forma y el
tamaño para codificar información adicional. 
A veces, el resultado puede ser una visión muy poco atractiva y también muy
difícil de entender. Al utilizar el enfoque de gráficos múltiples, mediante una
estructura de cuadrícula, podemos ver las diferencias entre las
dimensiones, cómo las dimensiones interactúan entre sí y cómo esa interacción
afecta a las métricas. El resultado no solo es más compacto y claro, sino que es
más fácil de entender. 
La visualización desempeña un papel crucial en la ciencia de datos ya que
permite a los científicos de datos y analistas a dar sentido a la estructura y
patrones subyacentes que puedan existir en los datos. 
Para ello, no nos vale un resultado difícil de entender, hay que conseguir
mostrar la mayor cantidad de información, de tal forma que descubra esos
patrones que necesitamos. Estos gráficos son especialmente efectivos para
extraer conclusiones a partir de grandes conjuntos de datos. 
Un subconjunto muy particular de estos gráficos son los minigráficos o
sparklines, que pueden ser de tipo línea, columna o de balance que muestra
pérdidas y ganancias. En estos gráficos no hay título ni escalas, son
extremadamente sencillos, son gráficos de alto nivel y poco detalle, es una vista
condensada de nuestros datos. Reduce la cantidad de detalle que se
muestra, por lo que solo se mostrarán los valores atípicos y los eventos
significativos. 

Los minigráficos son muy útiles ya que nos permiten distinguir fácilmente entre
las tendencias que representan las líneas o columnas que lo componen.

Mostrar visualización basada en texto

Mientras estamos preparando un informe, además de pensar en los datos como

tal y los gráficos que vamos a utilizar, tenemos que centrarnos en el uso del
texto. Hay muchos componentes visuales que contienen texto, los títulos,
leyendas, anotaciones, párrafos explicativos, narrativa de todo tipo. 
El texto es imprescindible en un informe, apenas hay que velar por aspectos
muy específicos. Destacar, y aunque resulte evidente, cuidar la ortografía y
terminología utilizada. Eliminar todos los textos que acompañen elementos
autoexplicados, y por el contrario, no olvidar ningún título o anotación que sea
imprescindible para conseguir la comprensión de la historia que estamos
narrando. 
El contenido y el formato del título es de gran importancia. El título puede venir
acompañado de un subtítulo, algo como el punto más global que se acompaña
con algún detalle o descripción adicional, que está presente, pero cuya lectura
es opcional. Preocúpate por el uso de la tipografía y los tamaños
adecuados para destacar las cosas importantes y viñetas con frase. 

Y ya que hablamos de textos, pensemos en tablas, tablas cruzadas o matrices. 

Una tabla es una visualización de datos muy efectiva, ya que nos da acceso
inmediato a los datos, su audiencia es importante. 
Si queremos buscar un valor en particular, hay que leer las filas y las
columnas; nada está oculto detrás de la información sobre la herramienta. No
tienes que mirar la longitud de la barra, el número está justo delante de
ti. Puedes leer todo el contenido y encontrar el punto en el que estás
interesado. 

Lo que no funciona tan bien es cuando tienes un gran conjunto de datos, con

más filas y más columnas. Entonces, es difícil ver lo que está pasando. En esos
casos, podemos combinar texto con color para crear una tabla de resaltado. Se
trata de sombrear cada uno de los cuadrados en la tabla, de acuerdo a su
valor, lo que nos va a permitir distinguir, fácilmente, los elementos más altos y
más bajos de la tabla. 
La ventaja de tener una tabla de resaltado, es que nos permite distinguir de
todos los valores aquellos en los que estamos interesados, gracias a la
comparación de colores. 
A partir de este punto, ya podemos obtener valor individual, que es lo que
realmente nos interesa. A veces, escoges tablas porque sabes que el lenguaje
visual resonará y se entenderá de inmediato. 

Hoy en día, es crucial saber qué es realmente lo importante en medio de tanta

información irrelevante que nos rodea. En este contexto, con el desarrollo que
han alcanzado las tecnologías de la información, la inteligencia de negocio y la
analítica avanzada, el objetivo principal es comunicar información de forma
precisa y eficiente, lo que podremos conseguir únicamente al utilizar textos y
narrativas adecuadas.

Trabajar con visualizaciones de movimiento

Las animaciones pueden llevar tu historia adonde una imagen estática no

puede. 
Quizás necesites escribir muchos comentarios para explicar lo que realmente
está sucediendo en una imagen. 
La infografía estática puede ser realmente convincente, interesante e
informativa. No hay duda al respecto. Pero a veces la animación puede dar vida
a los datos, ya sea mediante el uso de un vídeo o una experiencia interactiva. 
El movimiento puede como mínimo agregar mucho interés visual y también
puede agregar una comprensión real. 
Cuando las personas están felices jugando con algo es más probable que lo
comparta, tendrá un mayor impacto en general. Si no estás diseñando un
informe que se va a leer desde un folio impreso, ten siempre en cuenta
opciones de movimiento en tu diseño. 
Puedes utilizar movimiento para provocar transiciones en los datos como
resultado de acciones de filtrado o para mostrar la interacción entre
componentes gráficos si has diseñado tu informe con experiencias
interactivas. El resultado puede ser que la barra se desvanece un poco o el color
cambie. Esta realimentación indica que tu diseño no es estático. 
Puedes utilizar movimiento para llamar la atención con un botón que invita a
una acción y me ayuda a entender que si me muevo sobre el botón algo puede
pasar. 

Una de las grandes razones para usar el movimiento es mostrar el cambio a lo

largo del tiempo, se puede utilizar en gráficos de dispersión con eje de tiempo. 

Vivimos en la era del Big Data, podrían ser números de ventas, resultados de

elecciones, estadísticas deportivas, las respuestas de una encuesta o censo de
población. 

Estamos saturados de datos, necesitamos que nuestros informes tengan un

significado y respondan de forma cada vez más eficiente a todas nuestras
preguntas. 

Así que, en el espíritu de crear una buena historia animada no olvides que es
posible utilizar gráficos animados y efectos de sonido.