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¿QUE ES UN HERBARIO?

Un herbario es una colección científica de plantas secas o herborizadas. Generalmente referida a


plantas superiores o con flores (angioespermas y gimnoespermas), también suele comprender al
grupo de los helechos y afines (pteridofitas), así como musgos (musci) y hongos o setas e incluso
algas (excepto los organismos microscópicos, que como colecciones suelen depositarse con otro
sistema). Asociado a los herbarios se acostumbra contar con colecciones de semillas, frutos,
madera, fotografías de plantas y otras relativas a los vegetales, incluso jardines botánicos. De vital
importancia es contar también con una biblioteca especializada para la identificación del material
vegetal.

La finalidad del herbario es tener la representación sistematizada de la biodiversidad vegetal con


el fin de estudiar con precisión su presencia en determinada región geográfica en tiempo y
espacio. Tomando esto como base, los estudios de la flora permiten conocer mejor la composición
de comunidades vegetales, y son también información de primera mano para estudios en el medio
terrestre sobre aspectos ecológicos, evolutivos, de ordenación territorial e impacto ambiental.
También, es parte primordial de información para establecer medidas de protección a
determinados taxa mediante su ingreso a la NOM-059 ECOL y agencias internacionales como el
IUCN-CITES "red book".

Los herbarios como el nuestro surgieron de la necesidad de conocer la composición vegetal de una
determinada región o de un grupo vegetal en una zona geográfica. Al existir logros, constancia y
apoyo, los herbarios crecen y expanden su cobertura: locales, estatales, regionales, nacionales y
continentales e incluso mundiales. Pretendemos que el nuestro, al alcanzar su grado de madurez,
cubra el noroeste Mexicano, sector aun fragmentariamente conocido.

Los ejemplares herborizados (deshidratados, prensados, e identificados) son montados con


pegamento en una hoja de cartulina de 42 x 48 cm. Cada uno lleva una etiqueta con datos
taxonómicos, ecológicos y geográficos. Nuestro herbario se encuentra al día en cuanto a la captura
de esta información en una base de datos en Excel para la rápida consulta sobre estos aspectos y
otros que se añaden. Cabe señalar que el ejemplar montado debe representar adecuadamente al
vegetal colectado. Si es más pequeño que la hoja de cartulina, se incorpora completo; si es un
ejemplar como un árbol, la muestra debe ser una ramilla con hojas y las estructuras reproductivas
(flores, frutos, semillas), a veces esta última se acompaña con una fotografía del ejemplar
completo mostrando su forma de crecimiento o algún otro detalle.

Muchos herbarios, como el nuestro, poseen también acuerdos de intercambio de ejemplares con
otras instituciones, este hecho enriquece notablemente a cada colección. En particular, en los
últimos años se han hecho importantes intercambios con el Museo de Historia Natural de San
Diego (SD) y con la Universidad de Arizona (UA). Uno de los puntos importantes de los herbarios es
publicar o exponer sus resultados en diferentes foros y a diferentes niveles, así como atender
solicitudes de préstamo e información.
Los herbarios, como otras colecciones de organismos, juegan un papel importante como puntos
de consulta y referencia en un mundo que rápidamente está perdiendo espacios silvestres y su
contenido en biodiversidad, por lo que cada día toman importancia como puntos de referencia.

Hoy en día, la base de datos asociada juega un papel primordial en la difusión del conocimiento
de los vegetales, pues estas se han transformado en portales de internet conformados por
consorcios de herbarios que permiten tener un conocimiento amplio de la diversidad florística
regional, así como de su difusión a través de imágenes de las plantas y mapas de distribución.

Escrito por Dr. José Luis León de la Luz

Última actualización el Lunes 27 de Octubre de 2014 09:51

¿Qué tipos de herbarios pueden existir?

Se identifican varios tipos de herbarios de acuerdo a los especímenes que albelgan. Asi se
denominan:

*HERBARIOS INTERNACIONALES: Que presentan ejemplares de todo el mundo.

*HERBARIOS NACIONALES: Los que mantienen varios especímenes de hojas

de un país especifico.

*HERBARIOS REGIONALES Y LOCALES: Los que almacenan ejemplares de una región, provincia o
una pequeña área..

*HERBARIOS DE ENSEÑANZA: Son aquellos adscriptos a una institución educativa y en donde los
estudiantes depositan sus colección.

*HERBARIOS DE UNA INVESTIGACIÓN: Albergan especímenes que representan un campo


específico del conocimiento.

El Herbario Nacional de México (MEXU) custodia la colección más importante de plantas


mexicanas. Con más de 1 300 000 ejemplares es el herbario más grande del país y América Latina;
se encuentra entre uno de los diez herbarios más activos del mundo.

Esta colección es un logro de numerosas generaciones de botánicos y exploradores nacionales y


extranjeros. Su historia se remonta a finales del siglo XIX cuando surge el Instituto Médico
Nacional en 1888, como la institución oficial encargada de integrar los conocimientos sobre los
recursos naturales. Hacia 1915 el herbario se consolidó e impulsó al reunirse las colecciones
nacionales de plantas como parte de la Dirección de Estudios Biológicos. En 1929 la Universidad
Nacional Autónoma de México, a través del Instituto de Biología, adquiere la custodia del herbario
en donde el trabajo y la visión de sus administradores, científicos de talla mundial, han logrado
mantener activa la colección dotándola de la infraestructura necesaria para su crecimiento,
preservación y uso por la comunidad científica.

LOS RECURSOS HUMANOS


Curanderos, parteras, hierberos y hechiceros (según la traducción de los propios informantes
choles), constituyen los cuatro tipos de terapeutas tradicionales que para este estudio se
entrevistaron en las localidades de Nueva Esperanza y Conquita, en el municipio de Tila, y en Santo
Domingo y Frontera Corozal, correspondientes a su vez a los municipios de Ococingo y Sabanilla,
respectivamente, todos del estado de Chiapas. El grupo de curadores fue, en realidad, reducido —
siete hombres y seis mujeres—, aunque todos gozaban de un gran prestigio y fueron reconocidos
como verdaderas autoridades entre los habitantes de las comunidades mencionadas. Casi la mitad
de ellos declaró ser curandero, profesión que entre los choles se designa con los vocablos wotiejel
sag, y poseer alguna de las siguientes especialidades: partera, pulsero o pulsador o adivino y
espiritista. En el caso de los curanderos espiritistas, el aprendizaje se realiza a través de métodos
que le permiten al sujeto utilizar su cuerpo como intermediario entre el paciente y el espíritu de
otra persona, ya fallecida, poseedora de los conocimientos médicos de su tradición cultural. Los
curanderos pulsadores o adivinos (ñiatiantishulel) tienen como característica distintiva la
capacidad de diagnosticar cualquier enfermedad a través del pulso del enfermo. Cuando éste
presenta signos de haber sido picado por una víbora, el curandero actúa como chupador para
succionar el veneno del organismo y procurar así su restablecimiento. El riguroso proceso de
aprendizaje, la complejidad de los numerosos y variados procedimientos y métodos de diagnóstico
y cura, y, sobre todo, la capacidad de hacerse cargo de la atención de los males mayores le
confieren al wotiejel sag el máximo prestigio entre los terapeutas de la medicina tradicional chol.
Este tipo de curandero es heredero de los conocimientos médicos más importantes del grupo,
acumulados durante generaciones, y que él hace suyos al lado de otros terapeutas y en el seno de
la comunidad. En algunos casos, los wotiejel sag se inician en la profesión a partir de convicciones
personales y de un gran fervor religioso —manifestado casi siempre en la devoción al Señor de
Tila, a quien visitan para ofrecer plegarias y velas en la iglesia dedicada a su culto—, elemento este
último que los predispone para recibir los conocimientos sobre las enfermedades, los tratamientos
y los recursos curativos que su cultura preserva. No es extraño que el curandero vea revelada su
vocación y los conocimientos a través de sueños, aunque esto sólo le acontece a quien está
predestinado. En los sueños, el futuro wotiejel sag reconoce a los santos, quienes se le revelan
para concederle el "don". La entrega de los conocimientos se hace a condición de que el aprendiz
procure el buen uso de su saber y lo ejerza en nombre de Dios, teniéndolo presente en todas sus
oraciones; de lo contrario, corre el riesgo de ser despojado de su poder de sanar. El aprendizaje a
través de los sueños no se constriñe a un solo episodio onírico: el aprendiz reconoce,
progresivamente, cuevas, de las que extrae el conocimiento para aprovechar los atributos de las
medicinas. Una de las interpretaciones que se hacen del contenido de estos sueños es la de que el
wotiejel sag deberá visitar distintos templos y ofrecer en cada uno de ellos una "promesa" a Dios,
como acto de reciprocidad por la sabiduría conferida. Los terapeutas visitan los santuarios de la
región con influencia chol, como Bachajón, Chilón, Yajalón, Tumbalá, Sabanilla, etcétera, cometido
que puede cubrirse en el periodo de un año. Al finalizar este proceso, el curandero tiene otro
sueño, en el que se le comunica que alguien lo necesita y que debe cumplir con su misión; es el
momento de hacerse cargo de la primera curación.

Entre las causas de demanda de atención más frecuentes para las que se solicitan los servicios de
este tipo de terapeutas, destacan los síndromes de filiación cultural, lo que da una idea de la
naturaleza de los vínculos entre el terapeuta y la ideología subyacente a las interpretaciones de las
enfermedades entre los choles. Es usual, entonces, que atienda casos de espanto (buk'en),
hinchazón de cuerpo (potelon), enfermedad de arañas (chiwoo), vergüenzas (ki zin), enfermedad
de tortuga (cog), brujería, pochitoque (co'k), luku ik, vergüenza de casa, envidias, mal espíritu. En
segundo lugar, el wotiejel sag atiende un grupo de enfermedades gastrointestinales: diarrea
(ja'tia), hinchazón de estómago (titis ñuc) y aire (aire en el estómago). Un grupo de importancia
equivalente al anterior es el conformado por las afecciones inherentes al sistema musculo
esquelético: dolor de espalda y de cintura, cush pat y reumas. Asimismo, es de su competencia la
atención de la desbrinzadura (una afección de los genitales característica en el hombre), así como
de los accidentes que sobrevienen por mordedura de culebra.

El segundo grupo de terapeutas, en orden de importancia, es el formado por las parteras, a


quienes se designa cariñosamente con la expresión "abuelita de los niños", independientemente
de la edad de la terapeuta. Icouc cole'l" es el equivalente chol para cualquiera de las dos
expresiones españolas mencionadas. Algunas parteras son reconocidas, además, como sobadoras
y levanta molleras, especialidades que ejercen en forma complementaria y muchas veces a
propósito de episodios vinculados a la esfera de la ginecoobstetricia. Es común que gran parte del
aprendizaje de la partera sea de carácter doméstico, especialmente en aquellos hogares en donde
la madre, el padre o la abuela (o todos) dominan alguna de las profesiones médicas reconocidas
por los choles. Sin embargo, para que este aprendizaje en el seno familiar se lleve a cabo, es
preciso contar con elementos de predestinación, conforme a normas de la cultura local. Es común
también que el inicio de la actividad esté determinado por las propias necesidades de atención, o
por la asistencia a algún familiar.

La actividad médica de las icouc cole'l cubre un amplio espectro de causas, ya que su práctica no
se limita al campo de la ginecoobstetricia, si bien predominan los procesos vinculados a la
reproducción: embarazo (match ibu j' ó che'mel), parto, aborto, retención de la placenta, caída de
la matriz, hemorragia después del parto (cni-chel) y falta de leche materna. En segundo lugar, la
partera atiende padecimientos gastrointestinales; entre los más frecuentes, se mencionan:
diarrea, dolor de estómago (cush ben ya'al), disentería (chich tia), vómito (ch'e) y bilis (cuch pat).
Los síndromes de filiación cultural ocupan el tercer sitio: espanto, caída de mollera (malest
subeñon yaaf) y mal de ojo (ush-but), mientras que el cuarto es ocupado por los padecimientos de
carácter respiratorio, como la tos (oj bal). Finalmente, se registraron otras causas de demanda de
atención inespecíficas, como calentura (ca'c") y torzón (cush nic tia), además de procedimientos
terapéuticos, entre los que destacó la operación de "paladear" (le stu bel bie).

Aparte de los curanderos y parteras, el estudio recabó información sobre los hierberos, el tercer
grupo de terapeutas choles en orden de importancia numérica. La profesión de hierbero —o
hierbatero, como indicaron algunos informes— es designada en chol con el término tzakegel,
aunque a veces se emplea el mismo vocablo usado para aludir al curandero o curandor, wotiejel,
especialmente en la región de Tila.

En lo relativo a la formación del hierbero, se distinguieron dos variantes que, más allá de sus
diferencias, se establecen sobre una base cultural común de índole social y cosmológica, a la que
hicimos referencia al hablar de los curanderos. La primera forma de aprendizaje de los tzakegel
tiene lugar en el seno del hogar, en donde el magisterio es ejercido por uno de los padres o el
abuelo, quienes también han sido hierberos. La segunda variante es la del autoaprendizaje, y en
ella el ejercicio de la medicina surge como resultado de una necesidad de brindar atención a algún
familiar —generalmente un hijo— o a un tercero; en este proceso se experimenta con diversos
recursos terapéuticos. Pese a lo anterior, los informantes subrayaron que ambas formas de
aprendizaje requieren de un mecanismo de revelación de la profesión. Por ejemplo, Ana, una
hierbera, empezó a practicar la profesión bajo una planta de naranjo. Al poco tiempo el árbol se
secó; Ana rezó y "ramió" al árbol, logrando que éste retoñara, fenómeno que ella interpretó como
una confirmación de que estaba predestinada para curar. Los servicios de estos terapeutas son
solicitados, principalmente, para atender síndromes de filiación cultural: espanto, "matar la
enfermedad contra el mal espíritu", "proteger contra el espíritu" y alteración o latido. Los
hierberos curan, además, padecimientos gastrointestinales, como el cólico y "cagar con sangre"
(chich tia), afecciones respiratorias (tos, usualmente), la mordedura de serpiente venenosa, la
diabetes, la disipela y el reuma o enfermedad de culebra (shojob). En cuarto lugar, y en número
claramente inferior al registrado para las otras prácticas, están los hechiceros, llamados wotiejel
sag. Algunos de ellos destacan como rezadores (kaio), suelen especializarse en tratar la mordedura
de serpiente y heredan sus conocimientos de otro familiar, también hechicero (V. brujo).

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HIERBERO
También yerbero. Sinónimo(s): botánico, herbolario, hierbatero o yerbatero.
Especialista de la medicina tradicional que usa plantas medicinales como recurso principal en sus
terapias.

Al igual que la mayoría de los especialistas en este campo, los hierberos se inician y adquieren sus
conocimientos por transmisión oral, por herencia familiar o como aprendices de un hierbatero
experimentado. Hay quienes (como muchos de los que comercian plantas en las ciudades)
mencionan haber adquirido su saber con los libros. Se han reportado casos, por ejemplo, en
Oaxaca, en que la iniciación se efectúa por "revelación divina", por medio de los sueños o por
inducción de éstos mediante la ingestión de psicotrópicos (1).

BRUJO
Sinónimo(s): Hechicero.
Denominación peyorativa que reciben algunos curanderos (V. curandero). // Personaje temido y a
la vez respetado, pues se le reconocen poderes para dañar a sus semejantes, así como habilidades
para solucionar ciertos problemas, y curar determinadas enfermedades. Se le identifica como
terapeuta, al ser solicitado para atender padecimientos generalmente derivados de la brujería,
bajo el supuesto de que quien sabe provocar enfermedades y males, sabrá también curarlos.
Si consideramos el significado literal de persona que practica la brujería, la acepción haría
referencia a un personaje de connotación antisocial que, a través de las técnicas rituales y
conocimientos de lo oculto, domina las fuerzas sobrenaturales en perjuicio de sus semejantes,
provocando enfermedades, plagas, sequías y otros males, y cuyos móviles obedecen a la envidia,
el coraje, la venganza, el odio y los temores.
CHAMAN
Hombre que en algunas culturas hace predicciones, invoca a los espíritus y ejerce prácticas
curativas utilizando poderes ocultos y productos naturales; también suele aconsejar y orientar a
las personas que acuden a consultarle.
"los chamanes indígenas poseen un canto que utilizan en los casos de dificultad en el parto"

El Chamán es otro término para describir al "guerrero que practica para ser libre". Un chamán no
es un mago o un brujo, aunque él puede jugar esos papeles si así lo desea. Él no es médico, a pesar
de que puede desempeñar ese papel también. Un chamán es mucho más, es un psicopompo, un
sacerdote, un místico, y un poeta.

El chamanismo no es una religión, es una función, un papel, un fenómeno mágico-religioso


específico a ciertas personas que tienen la capacidad de éxtasis que permite "vuelo mágico" a los
reinos superiores, descenso a los infiernos para luchar contra las fuerzas oscuras, el dominio sobre
el fuego, la materia, tiempo y espacio.

La palabra chamán viene a nosotros a través de Rusia del Tungusic samán. La palabra se deriva del
pali samana (En sánscrito, sramana), A través de los chinos sha-men (Una transcripción de la
palabra pali). La palabra chamán puede estar relacionado con Sarman. Por desgracia, como "Don
Juan (Castaneda)" señaló, en la actualidad, los actos chamánicos son actos de gran laxitud
distorsión y la aberración.

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