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Problemas en Ecología número 11 Primavera 2003

El papel de los ecosistemas costeros como viveros de peces y mariscos

RESUMEN

Los ecosistemas costeros brindan muchos servicios ecológicos y económicos vitales, incluida la protección de la costa, la pesca
comercial y deportiva productiva y el ciclo de nutrientes. Los ecosistemas cercanos a la costa clave, como las praderas de pastos marinos, las
marismas y los bosques de manglares, son particularmente valiosos por su productividad extremadamente alta, que sustenta una gran
abundancia y diversidad de peces, así como camarones, ostras, cangrejos y otros invertebrados. Debido a la abundancia de peces y mariscos
juveniles que contienen, los ecosistemas cercanos a la costa se consideran “viveros”. El papel de vivero de los estuarios costeros y los
ecosistemas marinos es bien aceptado por los científicos, las organizaciones conservacionistas, los administradores de pesquerías y el público, y
a menudo se cita para apoyar la protección y conservación de estas áreas.
No obstante, comparativamente poco dinero y esfuerzo se está dirigiendo a la protección y gestión de estos ecosistemas. Hasta hace poco,
incluso los administradores de pesquerías han ignorado en gran medida el tema de la identificación y conservación del hábitat de los juveniles. Este
abandono, combinado con las intensas presiones de las actividades humanas, está provocando una disminución continua de los hábitats vitales cercanos
a la costa. Creemos que se necesita una mejor comprensión de los hábitats que sirven como criaderos de especies marinas para ayudar a priorizar los
fondos y esfuerzos limitados disponibles para su protección y gestión.
Con base en la evidencia científica, concluimos que:
• El concepto de hábitat de vivero ha sido pobremente definido.
• La falta de una definición clara ha dificultado la identificación de valiosos hábitats de vivero.
• Existe una variación entre y dentro de los ecosistemas en su valor como viveros, y el valor de vivero de las praderas de
pastos marinos, humedales y otros ecosistemas varía geográficamente.
• Muchos ecosistemas, como los arrecifes de ostras y los bosques de algas marinas, han sido relativamente poco examinados como viveros.

• Una mejor comprensión de los factores que crean la variabilidad específica del sitio en la calidad de los viveros ayudará a priorizar los
esfuerzos para detener su declive.
Sugerimos como hipótesis comprobable que un hábitat cercano a la costa sirve como vivero para juveniles de una especie de pez o
invertebrado en particular si contribuye de manera desproporcionada al tamaño y número de adultos en relación con otros hábitats juveniles.
La contribución desproporcionada a la producción de adultos puede provenir de cualquier combinación de cuatro factores: densidad,
crecimiento y supervivencia de animales juveniles y su traslado a hábitats de adultos. Sugerimos además que en futuras investigaciones sobre
viveros putativos:
• No es suficiente medir un solo factor como la densidad de juveniles.
• Los investigadores deben comparar múltiples hábitats, y un área debe considerarse un hábitat de cría importante solo si produce
relativamente más adultos por unidad de área que otros hábitats juveniles que utiliza la especie.
• A pesar de las dificultades, los investigadores deben rastrear la cantidad de individuos que se mueven de hábitats juveniles a
adultos; este número es la mejor medida del valor del vivero.
• Los investigadores deben examinar los factores que contribuyen a las variaciones locales en el valor del hábitat del vivero. Por ejemplo, no
todas las marismas funcionan igual como viveros. La comprensión de las variaciones locales también podría ayudar a explicar los cambios
regionales en el valor de vivero de algunos hábitats.
Actualmente, las organizaciones de conservación y gestión suelen considerar todas las praderas de pastos marinos y
humedales como viveros, una suposición que puede dificultar la protección de otros ecosistemas vitales para la protección de la
biodiversidad marina, así como las poblaciones de peces comerciales. En el pasado, el esfuerzo de gestión a menudo se ha
centrado en la restauración de estos ecosistemas. La investigación futura debe dedicarse a medir si la restauración restablece el
valor funcional de los ecosistemas como viveros. Actualmente, los resultados de los esfuerzos de restauración son equívocos en
el mejor de los casos. Cuando no se pueda demostrar que la restauración y la mitigación devuelvan el valor del vivero, se deben
concentrar más esfuerzos en la conservación. Una mejor investigación y una comprensión más clara de los hábitats de los
viveros permitirán un uso más eficiente del dinero, el tiempo y los recursos limitados.

Fotos de portada(en el sentido de las agujas del reloj desde arriba a la izquierda) - Cangrejo azul hembra en una pradera de pastos marinos (cortesía de Bob Orth);
pérdida de marismas por dragado de canales y hundimiento al sur de Nueva Orleans (cortesía de Terry McTigue, NOAA, Servicio Nacional del Océano); las raíces de
los manglares proporcionan un hábitat para peces y mariscos (cortesía de NOAA); un pescador feliz con un tambor rojo de 6,3 libras (cortesía de Charles Gardner,
NOAA); pez roca en un bosque de algas gigantes de California (cortesía de Morgan Bond).

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El papel de los ecosistemas costeros como viveros de peces y mariscos

por Michael W. Beck, Kenneth L. Heck, Jr., Kenneth W. Able, Daniel L. Childers, David B. Eggleston,
Bronwyn M. Gillanders, Benjamin S. Halpern, Cynthia G. Hays, Kaho Hoshino,
Thomas J. Minello, Robert J. Orth, Peter F. Sheridan y Michael P. Weinstein

INTRODUCCIÓN Sin embargo, un problema al establecer prioridades es que

el concepto de hábitat de vivero rara vez se ha definido claramente,
Los ecosistemas cercanos a la costa, como las praderas de pastos incluso en estudios de investigación que pretenden probarlo. También
marinos, las marismas y los bosques de manglares, brindan muchos se reconoce cada vez más que existen excepciones al concepto de
servicios ecológicos vitales en las aguas costeras, incluida la protección de la función de vivero y que no todas las praderas de pastos marinos y
costa, la pesca comercial y deportiva y el ciclo de nutrientes. En particular, humedales sirven como viveros. Además, diferentes ecosistemas, e
estos ecosistemas proporcionan alimento y refugio que sustenta una gran incluso diferentes sitios dentro de ellos, varían en su valor como
abundancia y diversidad de peces, así como viveros. Por otro lado, el valor de vivero de muchos
camarones, ostras, cangrejos y otros los ecosistemas, como los arrecifes de
invertebrados. Debido a esta mayor ostras y los bosques de algas marinas, muy
productividad y supervivencia, los probablemente se ha subestimado. Esta
ecosistemas estuarinos y marinos ambigüedad sobre los ecosistemas que
cercanos a la costa a menudo se contienen importantes hábitats de crianza
consideran “criaderos” de peces y dificulta la efectividad del concepto como
mariscos juveniles. De hecho, el papel de herramienta para priorizar el manejo.
estos ecosistemas costeros como viveros Este artículo no aborda la pregunta
es un concepto ecológico establecido, "¿Son importantes los humedales y los
aceptado por científicos, grupos pastos marinos?" La respuesta es
conservacionistas, administradores de clara: existe evidencia innegable de su
pesquerías y el público, y a menudo se importancia ecológica y económica,
cita como justificación para la protección además de su potencial como viveros.
Figura 1–Las marismas brindan servicios ecológicos
y conservación de estas áreas. Sin embargo, creemos que una mejor
vitales, incluida la función de hábitat de cría de peces
A pesar de la amplia aceptación de definición, identificación y
y mariscos. A pesar de su importancia, estos
el papel de vivero de estos ecosistemas, comprensión de los hábitats de vivero
ecosistemas están amenazados por el drenaje, el
sin embargo, comparativamente se aplica nos ayudará a establecer objetivos
desarrollo y la contaminación.
poca financiación a su conservación, más efectivos para
gestión o restauración. La gestión de la mayoría de las pesquerías enfatiza conservación y manejo de ecosistemas costeros críticos. Además,
los modelos de reclutamiento de poblaciones que se enfocan en las creemos que es necesario un enfoque en el hábitat de cría de
poblaciones de larvas y adultos en lugar de la protección de los hábitats juveniles para el desarrollo de una gestión real a nivel de
juveniles. Mientras tanto, los ecosistemas cercanos a la costa que contienen ecosistema de las pesquerías y otros recursos costeros. Este
estos hábitats juveniles continúan disminuyendo, en algunos casos, informe busca corregir las ambigüedades relacionadas con el
precipitadamente. Tanto históricamente como actualmente, de hecho, los hábitat de los viveros rastreando la historia del concepto del rol del
ecosistemas cercanos a la costa son probablemente los entornos marinos vivero, desarrollando una guía clara sobre cómo evaluar qué áreas
más afectados por las actividades humanas (Figura 1). Los impactos sirven realmente como viveros y discutiendo cómo se pueden usar
provienen del desarrollo costero; dragado, relleno y drenaje de humedales; dichas evaluaciones para enfocar los esfuerzos en investigación,
endurecimiento de las costas con escollera u hormigón; represas aguas conservación , restauración y gestión.
arriba y desvíos que alteran el flujo de entrada de agua dulce; contaminación
terrestre; arrastre de los fondos marinos; y sobrepesca. HISTORIA DEL CONCEPTO DEL PAPEL DE LA GUARDERÍA
Desafortunadamente, los esfuerzos limitados de
conservación y manejo que se están realizando en la zona costera El concepto de que ciertos ecosistemas costeros sirven como criaderos

se aplican poco a poco, con pocas prioridades claras sobre a dónde se planteó por primera vez hace casi un siglo en el caso de invertebrados, como

se deben dirigir los fondos. Detener la disminución de la integridad cangrejos y camarones, y en peces con ciclos de vida complejos, lo que significa

de los ecosistemas costeros requerirá un mejor sistema para que sus larvas se trasladan a las aguas costeras, se metamorfosean y crecen hasta

priorizar dónde gastar el tiempo, el dinero y el esfuerzo limitados. convertirse en subadultos. etapas, y luego mover

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a los hábitats de adultos moverse para aprovecharse de

(a) (b)
(ver Cuadro 1). El los organismos que habitan

concepto se ha vuelto allí, o cuando las

tan omnipresente alguno
que
investigadores tener
lo denominó “ley”.
Al principio, re-
buscadores considerados
toda la ría para ser el
vivero. Más tarde, sin
embargo, el foco
cambiado a específico
áreas dentro de los estuarios
como criaderos, especialmente
pantanos de marea, bosques
de manglares y
praderas de pastos marinos -
porque la evidencia
sugirió que estos
apoyó mucho
mayores densidades de
organismos que ad-
jacent sin vegetación
áreas (aquellas sin
grandes plantas acuaticas
como hierbas o
aguas estuarinas ricas
en agua disuelta y
materia organica culata
ter outwell ll en
mares costeros. Este
transferencia de produc-
(C) (d)
tividad de los ecosistemas
cercanos a la costa
redes tróficas oceánicas
es sin duda importante
tant. Sin embargo,
nos centramos aquí en
los efectos directos de
estos ecosistemas sobre
Figura 2–Experimentos de campo y observaciones utilizados para evaluar si algunos hábitats
la productividad de
sirven como viveros: (a) una trampa de caída utilizada para comparar la densidad de animales
especies individuales de
juveniles entre pantanos y hábitats cercanos sin vegetación; (b) un camarón atado utilizado para
peces e invertebrados,
evaluar las diferencias en la supervivencia entre los hábitats de arena, pastos marinos y pantanos;
a diferencia de
(c) jaulas utilizadas para examinar el crecimiento de camarones entre pantanos y hábitats cercanos
a su contribución
sin vegetación; (d) una platija de verano juvenil a la que se le inyecta debajo de la piel un marcador
ciones a la productividad
de pintura no tóxico para permitir a los investigadores rastrear sus patrones de movimiento (de
Beck et al 2001biociencia).
de los océanos costeros
en general.
La mayoría de los estudios de

cañas). La mayor parte de la investigación hasta la fecha ha abordado el
potencial de los humedales (definidos aquí como marismas y manglares) y
praderas de pastos marinos para servir como viveros. Por lo tanto,
concentramos nuestra discusión en esos ecosistemas, extrayendo ejemplos
de otros ecosistemas cuando sea posible y señalando que el valor potencial
de vivero de algunos de ellos, por ejemplo, los arrecifes de ostras, no ha
recibido el debido reconocimiento. También enfocamos nuestra discusión en
una etapa particular de la historia de vida, la etapa juvenil, porque esta etapa
se ve directamente afectada por la calidad de los hábitats de crianza. Sin
embargo, reconocemos que los esfuerzos efectivos de conservación y
manejo también deben considerar otras etapas de la historia de vida (por
ejemplo, etapas de larva, adulto y desove).
Las praderas de pastos marinos y los humedales se han
El concepto de función de vivero ha examinado los efectos de las praderas
de pastos marinos o los humedales en uno de cuatro factores: la densidad, la
supervivencia o el crecimiento de los juveniles, o el movimiento de los
individuos a los hábitats de adultos (Figura 2). En general, un hábitat se
denomina vivero si los juveniles de una especie de pez o invertebrado se
encuentran en una densidad más alta, evitan la depredación con más éxito o
crecen más rápido allí que en un hábitat diferente.
densidades de animales:La mayoría de los estudios se han
centrado en los efectos de las praderas de pastos marinos o los humedales
en la densidad de una especie en particular. La evidencia generalmente
indica que la densidad de peces e invertebrados es mayor en los hábitats con
vegetación que ocupan que en sus hábitats sin vegetación.
Supervivencia juvenil:Los pocos estudios que se han centrado en las

identificado como viveros en parte porque exportan nutrientes diferencias en la supervivencia juvenil entre humedales, praderas de pastos

esenciales (carbono, nitrógeno y fósforo) a las redes alimentarias marinos y otras áreas también indican que la supervivencia de una especie es

costeras. Esta exportación puede ocurrir cuando los animales generalmente mayor en hábitats con vegetación que en hábitats sin vegetación.

individuales salen de estos ecosistemas, cuando los depredadores

RECUADRO 1 – Ecosistemas y Hábitats

A lo largo del documento, el término ecosistema se utiliza para identificar conjuntos característicos de plantas y animales y el entorno
físico que habitan (p. ej., pantanos o arrecifes de ostras). El término hábitat se refiere al área utilizada por una especie, con modificadores
agregados para identificar los hábitats particulares utilizados por un animal. Por ejemplo, el cangrejo azul,Callinectes sapidus, tiene un hábitat
de pastos marinos y un hábitat de pantano, que se refieren a porciones particulares de ecosistemas de pastos marinos y pantanos,
respectivamente, utilizados por el cangrejo.

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Crecimiento:Aún menos estudios se han centrado en los efectos de
los humedales y las praderas de pastos marinos en el crecimiento de peces e
invertebrados. La evidencia que existe con respecto al crecimiento en las praderas
de pastos marinos es sorprendentemente equívoca. Solo alrededor de la mitad de
los estudios informan que la tasa de crecimiento de los individuos es mayor en los
hábitats de pastos marinos que en los hábitats adyacentes.
Migración a hábitats de adultos:Finalmente, solo un
puñado de estudios han intentado determinar si los juveniles de una
especie se mueven con éxito de hábitats de crianza putativos a hábitats
de adultos. La evidencia que respalda el movimiento exitoso de
juveniles asociados con pastos marinos o humedales a hábitats de
adultos es en gran parte indirecta, tanto porque tales datos de
movimiento son difíciles de obtener como porque ha habido una
escasez de comunicación entre los ecologistas bentónicos (que
estudian los ecosistemas cercanos a la costa) y las pesquerías. biólogos
(que monitorean las poblaciones de adultos).
Recientemente, varios autores de este informe compararon
cuantitativamente la evidencia del papel de vivero de las marismas, los
manglares y las praderas de pastos marinos. Si bien no encontraron
estudios que probaran definitivamente el concepto de función de
vivero, pudieron integrar los resultados de estos estudios previos y
evaluar si respaldan la propuesta de que estos ecosistemas
proporcionan viveros.
Una revisión de los principales resultados de más de 200 artículos
relevantes sobre praderas de pastos marinos apoyó la idea de que la
abundancia, el crecimiento y la supervivencia de los juveniles eran mayores
número 11 Primavera 2003
en pastos marinos que en ecosistemas como fondos de arena o lodo sin
plantas. Los datos de abundancia también sugirieron que los lechos de
pastos marinos en el hemisferio norte podrían ser más importantes como
áreas de crianza que los del hemisferio sur. Se encontraron pocas diferencias
significativas en la abundancia, el crecimiento o la supervivencia de los
juveniles cuando se compararon las praderas de pastos marinos con otros
ecosistemas estructuralmente complejos, como los arrecifes de ostras o
guijarros o los lechos de algas marinas.
Una revisión de los estudios que compararon las marismas con otros
ecosistemas encontró que, según la densidad de peces, los ecosistemas podrían
clasificarse de mayor a menor valor de vivero como: pastos marinos, borde de
marismas, aguas abiertas, macroalgas (algas marinas), arrecifes de ostras y
marismas internas. Había menos estudios disponibles que compararan el
crecimiento o la supervivencia de los juveniles en marismas frente a otros
ecosistemas. Cuando se consideran la densidad, el crecimiento y la supervivencia,
el valor relativo de vivero de las marismas saladas para los organismos que nadan
libremente, como los peces, parece más alto que en aguas abiertas pero más bajo
que el pasto marino.
Una tercera revisión de estudios que involucran manglares mostró que
las densidades de animales encontradas en los manglares eran generalmente más
bajas que las de las praderas de pastos marinos, los arrecifes de coral y las
marismas. Sin embargo, las raíces y los desechos de los manglares proporcionaron
un refugio sustancial contra los depredadores y mejoraron la supervivencia
general de los animales jóvenes. Hubo muy pocos datos útiles para evaluar si los
manglares sirven como viveros, y la evidencia disponible no fue suficiente para
respaldar la suposición de que los manglares
figura 3–Una representación de los factores que
operan en los hábitats juveniles y de crianza. El
grosor de las flechas indica la contribución
relativa de cada factor a la reposición de las
poblaciones adultas. Un hábitat de cría (óvalo
discontinuo) admite una combinación mayor que
el promedio de mayor densidad, supervivencia y
crecimiento de juveniles y movimiento a hábitats
de adultos. (a) Los cuatro factores son mayores en
el criadero frente a otros hábitats juveniles. (b)
Solo uno de los cuatro factores, en este caso el
movimiento, es mayor en el criadero frente a
otros hábitats juveniles (de Beck et al 2001
biociencia).
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Figura 4—Relación entre los hábitats de juveniles, cría y adultos. El cuadrado representa todos los hábitats. Los óvalos representan las
partes de los hábitats utilizados durante las etapas juvenil y adulta. Los hábitats de cría son un subconjunto de los hábitats juveniles. (a)
Concepto clásico de especies que tienen hábitats de crianza. (b) Concepto general de especies que tienen hábitats de crianza. Puede haber
una superposición en los hábitats que usan los juveniles y los adultos, pero debe haber alguna diferencia entre los hábitats de juveniles y
adultos para que se considere que una especie tiene un hábitat de crianza (de Beck et al 2001biociencia).

proporcionar mejores viveros que otros ecosistemas estructuralmente
complejos; se necesitan más datos.
En resumen, los resultados de estas tres revisiones
indicaron que, en general, las praderas de pastos marinos generalmente
mostraban el valor más alto como viveros, seguidas de las marismas. Sin
embargo, en muchas comparaciones, las marismas y las praderas de pastos
marinos no eran muy diferentes de otros ecosistemas estructuralmente
complejos, como los arrecifes de ostras.
Cada vez se reconoce más que algunos ecosistemas cercanos a la
costa en regiones específicas no proporcionan un hábitat de crianza vital.
Por ejemplo, pocas especies de peces e invertebrados comercialmente
importantes parecen depender exclusivamente de las praderas de pastos
marinos en las aguas costeras de Massachusetts o Nueva Jersey. Aunque la
mayoría de estas especies usan praderas de pastos marinos de manera
oportunista, también pueden sobrevivir bien en otras áreas. Del mismo
modo, los lechos de pastos marinos en el sur de Australia no siempre son
mejores viveros que los hábitats cercanos sin vegetación. Por ejemplo, un
estudio sobre el merodeador azul australiano (Achoerodus viridis) indicó
que las adiciones a la población adulta en alta mar provinieron
principalmente de jóvenes que se asentaron en arrecifes rocosos en alta
mar, no de los abundantes jóvenes en lechos de pastos marinos costeros.
exacerbado por el hecho de que el concepto de rol de guardería no se
basa en una hipótesis claramente definida y, por lo tanto, ha sido difícil
de probar directamente.
La premisa subyacente de la mayoría de los estudios que
examinan los conceptos del papel de la guardería es que algunos hábitats
juveniles cercanos a la costa contribuyen más que otros a la producción de
nuevos adultos. A partir de esta premisa, hemos desarrollado una hipótesis a
partir de la cual se pueden hacer predicciones claras y comprobables: un
hábitat es un criadero de juveniles de una especie de pez o invertebrado en
particular si contribuye de manera desproporcionada al tamaño y número de
adultos en relación con otros hábitats juveniles. La contribución
desproporcionada a la producción de adultos puede provenir de cualquier
combinación de cuatro factores: (1) densidad, (2) crecimiento, (3)
supervivencia de juveniles y (4) movimiento a hábitats de adultos (Figura 3).
Los estudios que examinan solo uno de estos cuatro factores en los hábitats
putativos de los viveros no pueden considerarse suficientes.
A continuación, describimos una serie de consideraciones
clave que deben tenerse en cuenta al probar la hipótesis del papel
de la guardería, consideraciones que con frecuencia se han pasado
por alto en el pasado.
El concepto de papel de vivero es relevante solo para especies con

De hecho, un documento de planificación reciente producido para la un conjunto particular de estrategias de historia de vida.que implican cierta

Corporación Australiana de Desarrollo de la Investigación Pesquera separación entre los hábitats de juveniles y adultos (Figura 4). La investigación

concluyó que había muy poca evidencia sólida de que los pastos marinos original sobre los criaderos se centró en una estrategia de historia de vida

australianos proporcionaran un hábitat de crianza crítico para la mayoría de idealizada o clásica: los juveniles crecían en hábitats marinos o estuarinos cercanos

las especies de peces australianos. a la costa y luego se movían rápidamente a hábitats de adultos en alta mar

completamente diferentes. Sin embargo, históricamente se ha pensado que

DEFINICIÓN E IDENTIFICACIÓN DE muchas especies con una superposición sustancial en los hábitats de juveniles y

HÁBITATS DE VIVERO VALIOSOS adultos utilizan viveros. En los cangrejos azules, por ejemplo, los juveniles y los

adultos a menudo ocupan los mismos hábitats, pero las hembras se trasladan a

No sorprende que la evidencia del papel de ciertos hábitats no juveniles (generalmente las bocas de los estuarios) para liberar larvas.

ecosistemas como viveros sea a veces escasa o contradictoria. Algunas especies, como las langostas espinosas, no se mueven directamente de los

Hay excepciones a cualquier concepto ecológico amplio. Sin hábitats juveniles a los adultos, sino que se mueven gradualmente entre ellos, y

embargo, el problema de la evidencia ambigua es también se ha considerado que tienen hábitats de cría. Te sugerimos

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esa especie debe tener al menos alguna disyunción entre los hábitats de importantes como viveros en regiones donde los animales usan hábitats

juveniles y adultos para que se considere que tienen hábitats de cría y, en la alternativos con éxito. Por ejemplo, en las bahías del sur de Australia y el noreste

mayoría de los casos, el movimiento hacia hábitats no juveniles está de los Estados Unidos, una especie se puede encontrar en muchos hábitats —

asociado con la reproducción. guijarros, arrecifes rocosos, arrecifes de ostras, lecho de algas marinas, fondos

Por supuesto, las especies marinas muestran muchas arenosos o fangosos— además de hábitats de pantanos y pastos marinos. Para

otras estrategias de historia de vida, y la hipótesis del papel de determinar qué hábitats sirven como viveros, si es que hay alguno, los

vivero no implica que los hábitats como las praderas de pastos investigadores deben estudiar todos los hábitats juveniles de una especie. De

marinos no tengan efectos importantes en las especies que hecho, es probable que estos análisis revelen que muchos otros tipos de hábitats,

pasan allí toda su vida. El concepto de vivero generalmente no incluidos los arrecifes de ostras, las copas de los bosques de algas marinas y

se ha aplicado a estas especies. Para especies en las que no hay algunos hábitats en alta mar, también sirven como criaderos.

distinción entre hábitats juveniles y adultos, no hay necesidad Los hábitats de vivero son un subconjunto de los hábitats
(de hecho, no es posible) de centrarse específicamente en los juveniles.. Cualquier hábitat que haga una contribución mayor que el
hábitats de cría. Según nuestra definición, los ejemplos de promedio al reclutamiento de adultos debe considerarse un hábitat de
taxones que no tienen viveros per se incluyen vieiras de bahía ( crianza. Por lo tanto, algunas porciones de hábitats juveniles, pero no
Argopecten irradians), killis (fondo), anchoa de bahía (Anchoa todos, pueden considerarse viveros (Figura 4). Los hábitats de juveniles
mitchilli) y anfípodos (pequeños crustáceos como saltamontes). que no son criaderos pueden contribuir, ya menudo lo hacen, con
Ejemplos de taxones que utilizan viveros son la langosta de individuos a las poblaciones de adultos, pero hacen menos de
pinzas (homarus americanus), anguilas (anguila americana), contribución promedio en
tambor rojo (Sciaenops ocellatus), mero de mordaza ( comparación con otros hábitats
Mycteroperca microlepis), manojo azul, pargo rosado (Pagrus juveniles. Si se examinan
aurato), luderick (Girella tricuspidata), alquitrán (Rhabdosargus muchos hábitats, debería ser
sarba), cangrejos azules (Callinectes sapidus), camarones posible identificar y centrar los
marrones (Farfantepenaeus aztecus), platija (Paralichthys spp.), esfuerzos de conservación y
pinfish (Lagodón romboides), salmonete rayado (cefalo mugil), gestión en aquellos que hacen
y pargo gris (Lutjanus griseus). la mayor contribución al
reclutamiento de adultos.
El examen de un solo
factor, como la densidad de
juveniles en varios hábitats, no
Figura 5—Un pez individual puede obtener contribuciones de proporciona una prueba
una variedad de hábitats diferentes durante su etapa juvenil, concluyente del valor de vivero
Múltiples hábitats pueden como se ilustra estilísticamente arriba en el gráfico circular de un hábitat..En la gran mayoría
sirven como viveros, y las (peces) que muestra la contribución proporcional de diferentes de los estudios, se sugiere que un
personas no tienen que vivir hábitats al crecimiento de un pez dado. Estas contribuciones hábitat sea un criadero en gran
dentro de un hábitat para de múltiples hábitats pueden revelarse a través de firmas parte porque admite altas
recibir beneficios de él.Durante isotópicas. densidades de juveniles en relación
su etapa juvenil, los individuos con otro hábitat. el no declarado
a menudo se mueven entre múltiples hábitats y reciben beneficios de cada pero la premisa rara vez probada en la mayoría de estos estudios ha sido
uno. En algunos casos, es posible que los individuos ni siquiera tengan que que, en igualdad de condiciones, es probable que los hábitats con
residir en un hábitat para recibir sus beneficios (Figura 5). Por ejemplo, los densidades más altas de juveniles hagan una mayor contribución a la
peces débiles del centro de la bahía de Delaware no se encuentran producción de adultos que los hábitats con densidades más bajas. Esta
directamente dentro de los pantanos, pero se alimentan de presas que correlación puede ser cierta en muchos casos, pero es probable que haya
obtienen su alimento de los pantanos, como lo demuestran las firmas excepciones importantes. Por ejemplo, algunos sitios pueden estar bien
químicas de los nutrientes de los pantanos que se encuentran en los tejidos ubicados para recibir una afluencia de larvas y, por lo tanto, albergar altas
de los peces débiles. densidades de juveniles, pero las condiciones en estos sitios también pueden
Una prueba definitiva de la hipótesis del papel de vivero requiere ser tales que los juveniles crezcan lentamente o enfrenten un momento
una comparación entre todos los hábitats que utilizan los juveniles. (Figura 6). arriesgado o difícil para trasladarse a hábitats de adultos.
Las comparaciones del valor de vivero entre hábitats de vivero putativos El papel de vivero de los hábitats debe compararse por
generalmente han involucrado solo hábitats con vegetación y sin vegetación, unidad de área.Incluso si un hábitat cubre solo un área pequeña,
aunque las especies individuales pueden usar muchos hábitats diferentes. Por lo debe considerarse un hábitat de cría importante si produce
tanto, las praderas de pastos marinos o los humedales pueden ser menos relativamente más reclutas adultos por unidad de área que