Nombre de la asignatura: Técnicas de investigación

Nombre del docente: Marco Antonio Ramírez Martínez

Nombre del estudiante: Ximena Gonzalez Alarcon

Grupo: 140

Modalidad: A distancia

Unidad 4: “Métodos de investigación criminológica”

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 INDICE

INTRODUCCIÓN………………………………………………………………..……….. 2

DESARROLLO………………………………………………………………….……….. 2

Incremento de la criminalidad durante la pandemia de COVID-19. La UNAM

responde 266……………………………………………………………………………… 2

Otros temas tratados…………………………………………………………..…………. 3

Métodos cuantitativos………………………………………………………….………… 3

Métodos cualitativos……………………………………………………………………… 4

Otras fuentes de información………………………………………………..………….. 4

¿Cuál es la relación entre COVID-19 y crimen?...................................................... 4

Crimen y COVID-19 en México………………………………………………….……… 5

Desempleo, trata de personas por COVID-19………………………………..……….. 6

Evolución del efecto del confinamiento por COVID-19 sobre el homicidio…..…….. 6

En conclusión…………………………………………………………………….……… 6

REFERENCIAS……………………………………………………………...…………… 8

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 INTRODUCCIÓN

En esta presente investigación se aborda la problemática para determinar cuales

son los factores que intervinieron a partir de dos métodos cuantitativos y dos
métodos cualitativos para dar a conocer el aumento de la criminalidad, así como
también plantear diferentes problemáticas criminalísticas durante este proceso por
la pandemia por COVID-19.

DESARROLLO

Incremento de la criminalidad durante la pandemia de COVID-19. La UNAM

responde 266.

La pandemia en nuestro país y en todo el mundo ha impactado diferentes rubros

como el político, social, económico, laboral, etc. Sin embargo, también es importante
considerar qué ha sucedido durante el confinamiento en relación con la violencia y
los delitos. Existen distintos indicadores que los especialistas están utilizando para
hacer recomendaciones y promover esfuerzos a todos los niveles de impartición de
justicia.

“Las conductas antisociales se ven y se desarrollan durante la pandemia como una

atestiguación de conductas delictivas que implica identificar ciertos escenarios de
riesgo en delitos y situación de desorden social que va a influir en la percepción de
la inseguridad y también se puede estar expuesto a la violencia.

En algún momento los tenemos a través de las denuncias que se expresan en

policías, en las fiscalías con carpetas de investigación y en una parte judicial con la
estadística que tenemos de los delitos que nos dan el sistema de reinserción social,
lo que tiene que ser la población privada de la libertad.”

En La UNAM Responde la Dra. María Teresa Ambrosio, investigadora del Instituto

de Investigaciones Jurídicas, charla con Rosa Brizuela en esta emisión.

“Necesitamos hacer una cohesión social, una prevención social de violencia y

delincuencia que dicho sea de paso tenemos una ley, que es Ley General para la
Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia y que esta ley abona no

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solamente al sistema penal y cómo podemos como sociedad, a través de la
educación, a través de la cultura, los derechos humanos y la perspectiva de género
prevenir muchas de las situaciones que estamos en estos momentos de pandemia
todavía viviendo.”

“Estamos en un proceso de consolidación del sistema acusatorio y tenemos

recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, de la
Corte Interamericana de Derechos Humanos, la UNICEF y ONU Mujeres con
relación a temas de acceso a la justicia, pero específicos con relación a COVID-19,
con personas en situación de vulnerabilidad.”

Otros temas tratados.

Jacobo Dayán/Cátedra Nelson Mandela de Derechos Humanos: La Comisión

Europea la que alerta sobre el incremento de la trata de personas durante la
pandemia.

Eduardo Limón/El ritual de los días: Platica con una escritora que es habitante de
un universo literario plástico y visual, se trata de la mexicana Ana Clavel: “Se me
ocurrió hablar de la risa en cuarentena porque al principio me lo tomé con sentido
del humor y medio que bromeaba y reía y me burlaba de esta circunstancia, pero
conforme ha ido avanzando el tiempo ha sido cada vez más desgastante.”

Métodos cuantitativos.

Experimental: Aquí se establece un experimento y se prueba una hipótesis creando

una situación en la que se manipula una de las variables. También se utiliza para
comprobar la causa y el efecto donde se averigua qué pasa con la variable
independiente y si la otra es eliminada o alterada. Por ejemplo, como sucedió con
denuncias realizadas por las personas hacia las autoridades correspondientes que
afectaron la reinserción social.

Correlacional: Esta se utiliza para encontrar la relación entre dos conjuntos de

variables. La regresión se utiliza generalmente para predecir los resultados de tal
método. Puede ser una correlación positiva, negativa o neutra. Por ejemplo, las
conductas antisociales que se presentaron durante la pandemia a lo que llevo a
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diferentes escenarios de delitos y situaciones de desorden social que genero una
mayor inseguridad y se exponen a mas violencia.

Métodos cualitativos.

Biografías: Radica en centrar sus esfuerzos en la vida entera, o bien, en

determinados acontecimientos en la vida de la persona estudiada a efecto de
conocer la percepción que posee de la realidad social, en esta técnica se incluye
toda la información y documentación relativa a la vida de la persona. Por ejemplo,
un feminicidio que sucedió el 2 de abril, Ana Paola, de 13 años de edad, fue violada
y asesinada dentro de su casa en Nogales, Sonora. Sujetos desconocidos entraron
a robar a la casa donde vivía, después violaron y mataron a la niña de 13 años.

Estudios paralelos o con grupo control: se inicia la investigación en la que la

muestra inicial se divide de forma aleatoria en dos o más grupos, según la necesidad
de la investigación, a efecto de realizar comparaciones entre los resultados
obtenidos en cada grupo ante diversos estímulos. Por ejemplo, que la pandemia
radico en diferentes sectores políticos, sociales, económicos, laborales, etc, a lo que
llevo al confinamiento que genero violencia y delitos, diversos especialistas hacen
recomendaciones hacia los niveles de impartición de justicia para una mejora.

Otras fuentes de información.

¿Cuál es la relación entre COVID-19 y crimen?

Las medidas que tomaron muchos gobiernos para limitar el contagio del COVID-19
interrumpieron diferentes eslabones de la cadena criminal. Por ejemplo, las
cuarentenas y restricciones a la movilidad redujeron las oportunidades de
interacción entre víctimas y victimarios con la excepción de la violencia doméstica,
que registró un aumento de casos cuando víctimas y agresores permanecieron
confinados en el hogar. También se vieron afectadas las cadenas de suministro de
piezas de auto robadas o la venta de drogas ilícitas.

Además, la crisis del COVID-19 tuvo un impacto muy particular en los cuerpos
policiales. Las policías de muchos países pasaron a ser consideradas primera línea
de respuesta y, como tal, tuvieron que ajustar diversos aspectos de la operatividad
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policial para incorporar responsabilidades adicionales a su labor habitual de
mantener el orden público. Las policías respondieron a la emergencia sanitaria
ejerciendo, por ejemplo, el control del cumplimiento a las restricciones de movilidad
o a la clausura de sectores económicos. Las policías también necesitaron ajustarse
para frenar los contagios en sus filas, en ocasiones reduciendo el personal
disponible por determinados períodos de tiempo.

Esta combinación de factores ha generado serios retos de coordinación entre los

ciudadanos y entre las diversas agencias de los Estados. La complejidad del
fenómeno hace que la evolución pueda diferir entre un país y otro, o incluso en
diferentes regiones de un mismo país.

Crimen y COVID-19 en México.

Lejos de reducir la violencia, las operaciones militares han fragmentado a los grupos
criminales, exponiendo a las comunidades a una mayor intimidación y
desplazamiento forzado. En lugar de lanzar misiones para “matar o capturar” a los
líderes criminales, durante la pandemia las fuerzas de seguridad deberían intentar
proteger a los más vulnerables y prevenir la extorsión que los azota. Los gobiernos
deberían destinar los fondos de emergencia para satisfacer las necesidades de las
personas más expuestas a la pandemia y sus consecuencias, incluidos los picos de
violencia. Al dirigir los fondos de ayuda del COVID-19 y el financiamiento externo a
las regiones más afectadas, los gobiernos deberían mirar más allá de los enfoques
tradicionales de aplicación de la ley. Deberían desarrollar enfoques regionales
específicos que identifiquen las características locales del conflicto con el fin de
diseñar programas que prometan reducir la impunidad, prevenir el reclutamiento por
parte de grupos ilícitos, desmovilizar a los grupos violentos y crear alternativas a las
economías ilícitas.

Los grupos criminales tanto locales como transnacionales también han diversificado
sus actividades económicas a lo largo del tiempo. En México, el crimen organizado
se ha vuelto más local. Al buscar un control total sobre el territorio, incluyendo a la
población y las instituciones estatales locales, estos grupos buscan obtener un flujo
constante de pagos de extorsiones por parte de los sectores lícitos de la economía.

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La agricultura y la minería se han visto envueltas en estos esquemas, al igual que
otras empresas, grandes y pequeñas.

Desempleo, trata de personas por COVID-19.

Los tratantes se aprovechan de las vulnerabilidades y a menudo atraen a sus

víctimas con falsas promesas de empleo. La pandemia ha provocado importantes
pérdidas de puestos de trabajo en muchos sectores y esto crea oportunidades para
que las redes delictivas se aprovechen de las personas desesperadas. El estudio
revela que las niñas y niños son cada vez más el objetivo de los tratantes quienes
utilizan redes sociales y otras plataformas en línea para reclutar nuevas víctimas y
se benefician del aumento de la demanda de material de explotación sexual infantil.

Debido a los cierres y las limitaciones en los servicios del combate a la trata de
personas, las víctimas tienen aún menos posibilidades de escapar de sus
explotadores. Con las fronteras cerradas, muchas víctimas de trata de personas
rescatadas se han visto obligadas a permanecer durante meses en albergues en
países donde habían sido explotadas en lugar de volver a sus casas. Los servicios
esenciales que brindan el apoyo y la protección de los que dependen las víctimas
se redujeron o incluso se interrumpieron.

Evolución del efecto del confinamiento por COVID-19 sobre el homicidio.

Si bien los homicidios bajaron drásticamente durante las primeras semanas de la

crisis, la caída se atenuó y eliminó con el paso del tiempo. En el período del 20 de
marzo al 17 de agosto de 2020 los homicidios diarios por municipio cayeron un 16%
en promedio. Esta caída fue especialmente aguda durante el primer mes y medio,
cuando el número de homicidios diarios por municipio cayó alrededor del 40%. La
evolución de los homicidios no fue homogénea en todo el país. Algunas regiones
mostraron caídas mayores (de hasta el 31% relativo a las tendencias previas a la
cuarentena), y otras no registraron caídas significativas. A partir de junio, las caídas
iniciales se atenuaron y el número de homicidios retornó a las tendencias previas.

En conclusión, como bien fue planteado, la criminalidad habla de diferentes ramas

que se presentaron durante este tiempo difícil para todas las comunidades, por lo

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que incrementó en cometer delitos y que afecto diferentes sectores tanto políticos,
sociales, económicos, laborales, etc; los gobiernos de la región, que ya presentaban
dificultades para combatir el crimen antes de la pandemia, se enfrentan a una
perspectiva preocupante. El impacto económico del COVID-19 podría durar mucho
más que el contagio mismo, a medida que tanto el sector formal como el informal
se debilitan, la pobreza y la desigualdad aumentan, y los gobiernos luchan por
obtener préstamos para financiar la inversión y los paquetes de ayuda
socioeconómica. Las autoridades deberían combinar para que no exista o se
redujan los delitos que se presentaron durante la pandemia por COVID-19, y que
las medidas de vigilancia policial focalizada con la inversión de fondos de
emergencia que los prestamistas multilaterales han puesto a disposición para
responder a la crisis de salud, dando prioridad a las regiones más expuestas a la
pandemia y sus consecuencias, incluidas las áreas afectadas por el aumento de la
violencia.

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 REFERENCIAS
TV UNAM. (2021). Incremento de la criminalidad durante la pandemia de COVID-
19. La UNAM responde 266. México. Consultado en https://tv.unam.mx/portfolio-
item/incremento-de-la-criminalidad-durante-la-pandemia-de-covid-19-la-unam-
responde-266/
Nathalie Alvarado y Santiago Pérez Vincent. (2020). COVID-19 y crimen: Los
grandes retos en la pandemia. Colombia. Consultado en
https://blogs.iadb.org/seguridad-ciudadana/es/covid-19-y-crimen-los-grandes-
retos-en-la-pandemia/
QuestionPro. (2021). ¿Cuáles son los métodos de investigación cualitativa y
cuantitativa?. México. Consultado en
https://www.questionpro.com/blog/es/metodos-de-investigacion-cualitativa-y-
cuantitativa/
LATIN AMERICA & CARIBBEAN. (2020). Violencia a prueba de virus: crimen y
COVID-19 en México y el Triángulo Norte. México. Consultado en
https://www.crisisgroup.org/es/latin-america-caribbean/83-virus-proof-violence-
crime-and-covid-19-mexico-and-northern-triangle
UNODC. (2021). COVID-19 y el delito: el impacto de la pandemia en la trata de
personas. México. Consultado en
https://www.unodc.org/mexicoandcentralamerica/es/webstories/2020/2021_07_12
_covid-19-y-el-delito_-el-impacto-de-la-pandemia-en-la-trata-de-personas.html
Capital Media. (2020). Ni la pandemia detiene los feminicidios en México. México.
Consultado en https://www.reporteindigo.com/reporte/ni-la-pandemia-detiene-los-
feminicidios-en-mexico/