Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
págs. 315-318.), 26 mayo 1936 (M. P. Antonio Rocha, “G. J.”, t. xliv, núms. 1914-1915,
págs. 50-57), 23 septiembre 1938 (M. P. Juan Francisco Mújica, “G. J.”, t. xlvii, núm.
1941, pág. 240 y ss, 27 octubre 1938 (M. P. Liborio Escallón, “G. J.”, t. xlvii, núm. 1942,
págs. 307 y ss.), 25 agosto 1953 (M. P. Alfonso Márquez Páez, “G. J.”, t. lxxvi, núm.
2133, págs. 83 y ss.), 28 agosto 1958 (M. P. Arturo Valencia Zea, “G. J.”, t. lxxxviii,
núm. 2199, págs. 672 y ss.), 19 diciembre 1959 (M. P. Gustavo Fajardo Pinzón, “G. J.”,
t. xci, núms. 2217-2219, págs. 898 y ss.), 3 mayo 1961 (M. P. José Hernández Arbeláez,
“G. J.”, t. xcv, núm. 2240, págs. 812 y ss.), 6 mayo 1969 (M. P. Enrique López de la
Pava, “G. J.”, t. cxxx, núms. 2310-2312, págs. 78 y ss.), 8 agosto 1972 (M. P. Germán
Giraldo Zuluaga, “G. J.”, t. cxliii, núms. 2358-2363, págs. 38 y ss.), 26 agosto 1986
(M. P. José Alejandro Bonivento Fernández, “G. J.”, t. clxxxiv, núm. 2423, págs. 199
y ss.), 21 julio 1993 (M. P. Carlos Esteban Jaramillo Schloss, exp. 3737, “G. J.”, t.
ccxxv, Primera parte, núm. 2464, págs. 138 y ss.), 17 mayo 1995 (M. P. Carlos Esteban
Jaramillo S., exp. 4137, “G. J.”, t. ccxxxiv, núm. 2473, págs. 660 y ss.), 15 junio 1995
(M. P. Rafael Romero Sierra, exp. 4398, “G. J.”, t. ccxxxiv, núm. 2473, págs. 848 y ss.),
31 marzo 1998 (M. P. Jorge Antonio Castillo Rugeles, exp. 4674, “G. J.”, t. cclii, núm.
2491, págs. 695 y ss.) y 18 agosto 2000 (M. P. Carlos Ignacio Jaramillo Jaramillo, exp.
5519, en http://www.lexbasecolombia.net)
526 Derecho de las obligaciones
42
De acuerdo con el art. 1497 del C. C., el contrato se califica como oneroso cuando
tiene por objeto la utilidad de ambos contratantes, gravándose cada uno a beneficio del
otro. En el num. 1 del art. 2491 del C. C. se incluyen negocios jurídicos como ventas y
permutas; además la constitución de gravámenes sobre bienes del deudor como hipo-
tecas, prendas y anticresis.
43
“El contrato es gratuito o de beneficencia cuando [...]”. El num. 2 del art. 2491 del
C. C. enumera a título ilustrativo, las donaciones, remisiones y pactos de liberación a
título gratuito.
El patrimonio como prenda general y los derechos de los acreedores 527
44
Cfr. Guillermo Ospina Fernández, op. cit., pág. 173 y Álvaro Pérez Vives, op. cit.,
págs. 255 y ss. Sobre los requisitos y efectos de la acción pauliana, véanse, entre otras,
las siguientes sentencias de la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia: 26 agosto
1938, M. P. Liborio Escallón, “G. J.”, t. xlvii, núm. 1940, págs. 61-67; 27 junio 1941,
“G. J.”, t. li, núms. 1973-1974, págs. 600-605; 31 enero 1949, M. P. Hernán Salaman-
ca, “G. J.”, t. lxv, núms. 2068-2069, págs. 324-329; 17 abril 1951, “G. J.”, t. lxix, M.
P. Manuel José Vargas, “G. J.” t. lxix, núm. 2099, págs. 528-539; 13 agosto 1964,
M. P. Enrique Coral Velasco, “G. J.”, t. cviii, Primera Parte, núm 2273, págs. 182-194;
22 agosto 1967, M. P. Gustavo Fajardo Pinzón, “G. J.”, t. cxix, núms. 2285-2286, pág.
191-200; 13 noviembre 1968, M. P. Flavio Cabrera Dussan, “G. J.”, t. cxxiv, núms.
528 Derecho de las obligaciones
2297-2299, págs. 369-376; 18 julio 1977, M. P. Ricardo Uribe Holguín, “G. J.”, t. clv,
Primera Parte, núm. 2398, págs. 192-204; 14 marzo 1984, M. P. Alberto Ospina Botero,
“G. J.”, t. clxxvi, núm. 2415, págs. 85-102; 26 octubre 2004, M. P. Jaime Arrubla Paucar,
exp: C-5283831030001999-0065-0; 14 junio 2007, M. P. Pedro Octavio Munar Cade-
na, exp. 11001 02 03 000 2003 00129 01; 14 marzo 2008, M. P. Jaime Arrubla Paucar,
exp. C-1100131030272001-00601-01; 25 enero 2010, M. P. Pedro Octavio Munar
Cadena, exp. 11001 3103 031 1999 01041 01; 14 octubre 2010, M. P. William Namen
Vargas, exp. 1100131010032001-00855-01; 1º febrero 2011, M. P. Ruth Marina Diaz
Rueda, exp. 05887-3103-001-2006-00083-01; 20 agosto 2014, M. P. Margarita Cabello
Blanco, ref. SC-11003-2014 [2004-00307-01].
45
Piénsese, por ejemplo, en 1) el cónyuge del deudor cuando sobreviene la liqui-
dación de la sociedad conyugal y este ha realizado actos ficticios de disposición en
contra de los intereses de aquel y 2) los herederos del deudor. Incluso la jurisprudencia
ha reconocido recientemente que las mismas partes simulantes y sus herederos pueden
instaurar la acción de simulación para restarle efectos jurídicos al acto ficticio y dejar
en firme la que era la voluntad real pero que se hallaba oculta.
El patrimonio como prenda general y los derechos de los acreedores 529
46
Para comprender el desarrollo de la jurisprudencia nacional en torno a la simula-
ción, véase Jorge Suescún Melo y Felipe Suescún de Roa, “La simulación”, en Derecho
de las obligaciones, 2ª ed., t. i, cap. xi, Bogotá, Ediciones Uniandes-Edit. Temis, 2015.
47
La teoría dualista propugna que en la simulación hay dos declaraciones de volun-
tad: una real pero oculta y una ficticia pero ostensible o pública. Entre tanto, la teoría
monista sostiene que no hay sino una sola declaración de voluntad pero que se divide
o bifurca en dos: una con los efectos realmente queridos (acto oculto) y otra con los
efectos expresados o públicos, pero no realmente deseados por las partes simulantes (acto
ostensible o aparente). En las elaboraciones doctrinales y de la jurisprudencia en torno
a la simulación, se ha clasificado esta en absoluta y relativa. La primera ocurre cuando
la declaración privada pero real de las partes (contraescritura) borra por completo los
efectos de la declaración pública pero simulada. Por su parte, la simulación relativa se
presenta cuando el efecto de la contraescritura no es anular totalmente la declaración
pública de las partes, sino solo modificar alguno de sus elementos, ya sea en cuanto al
objeto o en cuanto a los sujetos del negocio.
530 Derecho de las obligaciones
49
Sobre la acción de simulación véanse también los siguientes fallos de la Sala de
Casación Civil de la Corte Suprema de Justicia: 24 octubre 1936, M. P. Miguel Moreno
Jaramillo, “G. J.”, t. xliv, núms. 1914-1915, págs. 163-174; 22 agosto 1940, M. P. Da-
niel Anzola, “G. J.”, t. xlix, núm. 1959, págs. 842-849; 30 octubre 1941, “G. J.”, t. lii,
núm. 1980, págs. 612-616; 7 mayo 1942, M. P. Hernán Salamanca, “G. J.”, t. liv, núms.
1989-1990, págs. 30-33; 10 febrero 1943, M. P. Liborio Escallón, “G. J.”, t. lv, núms.
1993-1995, págs. 19-22; 6 noviembre 1943, M. P. Ricardo Hinestrosa, “G. J.”, t. lvi,
núms. 2001-2005, págs. 243-253; 9 febrero 1944, M. P. Hernán Salamanca, “G. J.”, t.
lvii, núms. 2007-2009, págs. 44-47; 10 junio 1948, M. P. Álvaro Leal Morales, “G. J.”,
t. lxiv, núms. 2062-2063, págs. 439-442; 24 enero 1951, M. P. Miguel Arteaga, “G. J.”,
t. lxix, núm. 2098, págs. 335-342; 2 septiembre 1954, M. P. José Hernández Arbeláez,
“G. J.”, t. lxxviii, núm. 2146, págs. 553-557; 5 noviembre 1960, M. P. José Hernández
532 Derecho de las obligaciones
Arbeláez, “G. J.”, t. xciv, núms. 2233-2234; 13 agosto 1964, M. P. Enrique Coral Velasco,
“G. J.”, t. cviii, Primera Parte, núm. 2273, págs. 182- 194; 22 agosto 1967, M. P. Gustavo
Fajardo Pinzón, “G. J.”, t. cxix, núms. 2285-2286, págs. 191-200; 10 junio 1992, M. P.
Héctor Marín Naranjo, “G. J.”, t. ccxvi, núm. 2455, págs. 529 y ss.; 23 abril 1998, M.
P. Jorge Castillo Rugeles, “G. J.”, t. ccliv, núm. 2491, págs. 817-838; 30 octubre 1998,
Jorge Castillo Rugeles, “G. J.”, t. cclv, núm. 2494, págs. 857-878; 19 junio 2000, M. P.
Jorge Santos Ballesteros, exp. 6266; 27 julio 2000, M. P. Jorge Santos Ballesteros, exp.
6238; 28 agosto 2001, M. P. Jorge Santos Ballesteros, exp. 6673; 5 septiembre 2001,
M. P. José Fernando Ramírez Gómez, exp. 5868; 27 agosto 2002, M. P. Jorge Santos
Ballesteros, exp. 6926; 19 mayo 2004, M. P. César Julio Valencia Copete, exp. 7145;
25 julio 2005, M. P. Manuel Isidro Ardila Velásquez, exp. 1999-0246-01; 15 diciembre
2005, M. P. Edgardo Villamil Portilla, exp. 680013103003-1996-19728-02, 14 junio
2007, M. P. Pedro Octavio Munar, exp. 11001 02 03 000 2003 00129 01; 14 octubre 2010,
M. P. William Namen Vargas, exp. 1100131010032001-00855-01; 30 noviembre 2011, M. P.
Arturo Solarte Rodríguez, exp. 05001-3103-005-2000-00229-01; 3 noviembre 2010,
M. P. William Namen Vargas, exp. 20001-3103-003-2007-00100-01.
50
Véase al respecto C. S. de J. Sala de Casación Civil sent. de 4 septiembre 2006,
M.P. Edgardo Villamil Portilla, exp. 050013103007-1997-5826-01
51
De conformidad con la ley 791 de 2001, el plazo de prescripción de las acciones
ordinarias es de 10 años.
52
La ley 1116 de 2006, en el art. 74, permite incoar la acción de simulación durante
el proceso de insolvencia, bajo el supuesto de insuficiencia de bienes, y prevé el ejercicio
de dicha acción para el beneficio de todos los acreedores.