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Julio CALVO PÉREZ

Enclíticos pragmáticos en quechua y su influencia en el español andino

Departament de Teoria dels Llenguatges


Facultat de Filologia
Universitat de València
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ENCLÍTICOS PRAGMÁTICOS EN QUECHUA Y SU INFLUENCIA EN EL
ESPAÑOL ANDINO

Julio Calvo Pérez


Universidad de Valencia

1. INTRODUCCIÓN

En la tradición gramatical quechua (Cerrón-Palomino 1976: § 7, Cusihuamán 1976


§ 8; Calvo Pérez 1993: § 2.5), se conocen como enclíticos las partículas que, adheridas
a la palabra, coronan esta, de modo que no existe la posibilidad de que una partícula
más externa que ellas envuelva al conjunto finalmente. Los enclíticos son indiferentes a
la categorización de la palabra quechua, por lo que no se puede determinar, por el mero
hecho de encontrarlos, su función en el esquema sintáctico, lo que casa bien con la
ubicación manifiestamente periférica de los mismos:

1) a- atuq-mi (un zorro-en verdad) ‘es un zorro’ / b- q'umir-si (verde-dicen) ‘dicen


que es verde’ / c- rakiykuway-yá (regálame-pues) ‘va, regálamelo’ / d- pitaq-rí (quien
todavía-y) ‘pero, ¿quién es?’.

En quechua, la palabra carece de prefijos y los sufijos tienden a agruparse


siguiendo una pauta global de acomodación: junto a la raíz, los semánticos; a
continuación del bloque formado por la raíz más los sufijos semánticos, los sintácticos;
y, finalmente, cerrando el conjunto morfológico, los enclíticos pragmáticos, que son de
marcado carácter contextual e interpersonal (Muysken 1981 y 1986, Calvo 1993; Calvo
2000a, Calvo, en pr.). Salvedades aparte, la categorización de la palabra quechua es
mucho más débil que la de las palabras de las lenguas flexivas, de modo que una raíz
como atuq ‘zorro’ es también adjetivo, ‘taimado’ y así en cualquier circunstancia
léxica; no obstante, en el molde sintáctico hay sufijos fijadores que obligan a la
formación de verbos, adverbios o sustantivos, sin que haya solvencia de tal poder
categorizador en los enclíticos antedichos1.Por otra parte, al carecer de enclíticos como
tales el español y por ende el español andino con el que el quechua lleva ya cinco siglos
de contacto, se han desarrollado en este importante –y a la vez divergente– dialecto una
serie de formas abiertamente adverbiales que por su significado vinculado a las
relaciones interpersonales y por la sutilidad de sus significados equivalen a los
enclíticos anteriores, los que por su ubicación fija podemos considerar, además, como
partículas pragmáticas: es el caso de y, en cuanto a, en verdad que, también, diciendo,
¡oh!, etc. que vienen a ser como la acomodación perfecta de los enclíticos quechuas al

1
Salvando las distancias, sería lo que sucede con el diminutivo –ito en español, que se adhiere
tanto a sustantivos como a adjetivos, a verbos como a adverbios (casita, pequeñito, andandito,
cerquita…), sin inducir a categorización como los morfemas de género o las desinencias de persona.
Esto lo convierte también en sufijo pragmático (Calvo, 1999a).

1
contexto en que los usan sus hablantes, por lo que no cabe duda de que se trata de
aportaciones estructurales fehacientes que deben añadirse al amplio bagaje de otros
calcos y a los más de cuatro mil préstamos conocidos del quechua al español andino
(Calvo en prep.). Estas partículas, a diferencia de otras categorías morfológicas o
sintácticas, distan de haberse estudiado convenientemente.
El presente trabajo pretende, en la medida de lo posible, acercarse a este fenómeno
de contacto, ampliando así aportaciones previas sobre las partículas andinas (Calvo
1999b, Calvo 2000b).

2. DESCRIPCIÓN DE LOS ENCLÍTICOS QUECHUAS

Los enclíticos quechuas no se han estudiado desde la perspectiva pragmática por


ningún autor hasta Calvo 1993, lo que no quiere decir que no haya habido
aproximaciones más que notables a sus colocación y a su significado. Ya autores tan
tempranos como Santo Tomás 1560 y González Holguín 1607 estudian, sobre todo este
último, algunos de ellos con precisión, siendo otros autores ciertamente renuentes a una
descripción más ajustada. No ha sido hasta hace poco (Cusihuamán 1976) cuando se ha
conseguido agruparlos con un poco más de rigor, debiéndose a Wölck 1987 una
redefinición de sus funciones. Por lo demás, las aportaciones hechas por los tipólogos a
los evidenciales en las lenguas del mundo (Givón 1982 o Chafe y Nichols 1986) 2
ofrecen un variado panorama en que poder inscribir el quechua y otras lenguas andinas.
Respecto a la lengua quechua merece especial atención el trabajo monográfico de Floyd
1997, directamente basado en su tesis doctoral de 1993.

Apoyándose en los reajustes y solapamientos morfológicos del quechua, en el


entrecruzamiento entre los sufijos semántico-sintácticos (tales como los diatéticos -chi,
-ya, -ysi o -ku) y sintáctico-semánticos (tales como los personales -su, -wa y temporales
-ra y -nqa) y en los antecedentes citados, Calvo (1993 § 2.5 y 7), presenta la
clasificación y ordenación de los enclíticos quechuas que sigue a continuación y que en
su proceder interno reproduce, fractalmente, el reajuste y entrecruzamiento que ya se
habían observado en otros ámbitos de la morfología y la sintaxis quechuas. Según su
posible tipología los enclíticos son los siguientes:

a) El operador limitativo -lla ‘no más’, que adopta una posición variable en la
palabra, pero que puede asociarse como sus compañeros enclíticos a cualquier
categoría. Podemos decir que se trata de un elemento de frontera, equivalente al
operador del español sólo de ubicación también variable. A él se pueden adjuntar otros
enclíticos más periféricos:

2) a-. kuna-lla-n-mi (ahora-no más-ello-en verdad) ‘ahora mismo’ / b- upa-na-lla-


n-paq (mudo-FUT-no más-3ª-DAT) ‘para que se calle de una vez’ / c- llika-cha-lla
(gasa-DIM-no más) ‘sutilísimo’.
2
El origen de la palabra evidencial está en Swadesh (1939), pero solo se desarrolló
convenientemente con Jakobson (1957, § 2.51), donde el término ruso utilizado fue traducido al inglés
como evidential y al español como testificante.

1
Lee (1997, II 5) resume las distintas interpretaciones que puede recibir este
enclítico, siendo a nuestro juicio más interesantes las más estrictamente pragmáticas.
Son estas la delicadeza del Emisor en su trato con el Receptor, la cortesía positiva y
negativa y otras muchas, que figuran a continuación (sacadas de Calvo en prep.,
traducidas generalmente a español peninsular y distribuidas por categorías):

3).-LLA (suf. lim.) [-cant.+] «afect.», -ito; (suf. dim.), -ito …sunqullay, corazoncito mío;
($) «desp.», -ajo, -uco …mikhunalla, comistrajo; [+cant.] ($), -oso …aqullaña, arenoso3.
–«Q.» «pragm.», todo; «fr. Q.» ($) (ichaqa), a excepción de.
–(comp.) [+énf.], tan …pay allinlla kaqtinqa, upallan, de tan buena como es, es tan tonta.
–(adv. lim.), sólo, únicamente …runakunallan, sólo hombres; [--cant.], apenas; [++cant.]
($), muy…musuqlla, muy nuevo; {[t.] [∞]} «fig.», siempre …kayniqllanta ruwanki, lo harás
siempre por este [= su] cauce; [±t.] (-raq), todavía …Huwanqa aswan huch'uylla paymanta,
Juan es todavía más bajo que ella; [1] (-lla {+ -puni}), precisamente; meramente, solamente;
puramente; simplemente …kayllata apasaq, llevaré simplemente esto; [abstr.], buenamente,
voluntariamente …ñuqallamanta ruwani, lo hice buenamente [= de mi propia voluntad];
«excl.» <amenaza>, ¡cómo! (fr. adv.), no más, nomás …phiñasqalla hamun, molesto no más
viene; de poca monta …imachatapis ruwashallan, está haciendo chapuzas de poca monta; a
secas …unullata, agua a secas [quiero]; sin problema; [hum.], de vista …rikullanin, mana
parlanichu, lo conozco de vista y no he hablado con él; ($), a todo {+ inf.}…ripun
phawashaspalla, se fue a todo correr.
–(conj. lim.) (-llapas), al menos, por lo menos, siquiera; (conj. ilat.), empero, pues…
qanllapas hamuy, tú ven, pues [= siquiera ven tú]; (fr. conj.), [no…] …más que …taytayllata
nuqa nisaq, no se lo diré más que a mi padre.
–(adj.) <antep.>, mero, simple; real …munallay, dar la real gana; santo …munasqallanta
ruwaq, el que hace siempre su santa voluntad; puro; vivo; <±antep.>, pleno; [+t.], constante.
–(sust.), eje …sayayllamanta rimaynin, el eje del discurso fue el paro; [+abstr.], condición
…ichaqa rispa, usqhaylla kutimunki, [eso] si vas, ha de ser con la condición de volver rápido;
(-llawan), el todo …payllawanmi chay ruwanapiqa, él es el todo en esa fábrica.
(v.) [≥], bastar, kilullata, un kilo basta [que me des]; [+t.], continuar …mayuqa
purishallanmi, el río continúa [= no más está haciendo] su camino; [+f.], proseguir …
mikhullay, prosigue con la comida; (aux.) «fam.», seguir …takillay, sigue cantando; [+fr.],
soler …hamullanmi, suele venir en verdad.
–«interj.», ¡ojalá! …amalla paramunmanchu, ¡ojalá no lloviera; ay, Dios!

b) El textualizador tópico -qa, equivalente para muchos al artículo quechua y cuya


función es la de fijar el nuevo tópico de conversación, estrategia que viene a suponer el
paso inminencial de presentador (papel del Emisor) a reconocedor (papel del Receptor).
Este siempre aparece en final absoluto y se evalúa a través de la entrada siguiente:

3
Las abreviaturas son las corrientes en un diccionari:o: [cant.] indica el grado de cuantificación
léxica, mientras que «Q..» es cuantificador pragmático. ($) indica comportamiento espínico, es decir
transformación interna a una oposición antonímica o significado encontrado en el conjunto de
acepciones de la entrada.

1
4).-QA «pragm.» (tóp.), en cuanto a, por lo que respecta a, respecto a …qanqa ichaqa,
alli[n]lla kay, y en cuanto a ti, cuídate, pues [= sigue bien]; que; [neg.] ($) (rantinta), lejos de
… munakuwanantaqa, chiqnikuwanmi, lejos de quererme, en verdad que me odia.
–(conj. caus.), que …ruwasaqmi, nisqaytaqa, lo haré, que lo he prometido; en cuanto a
que; (cond.) (Ø), si …qayna p'unchay rimashaspaqa, imaraykun kunan qunqapunki, si ayer lo
aseguraste, ¿por qué lo olvidas [= niegas] hoy?; siempre que …hamuqtiykiqa, qusqaykin,
siempre que vengas, te lo daré; (-raykuqa), con tal que …hamunaykiraykuqa qurusayki, con tal
de que vengas, te lo daré; (ilat.), pero.
–(fr. prep.), respecto a, referente a, tocante a.

Mientras que para -lla la fórmula general de la oralidad andina presenta ‘no más’ y
el diminutivo ‘-ito’ como fórmulas estereotipadas que suplen todas las variantes
aportadas por el diccionario, para -qa presenta el tópico general ‘en cuanto a’.
Cognitivamente, de la variabilidad posicional y subjetividad interna de -lla a la fijeza
semántica y la posición externa de -qa, se despliega un abanico ingente en el que caben
todos los demás enclíticos.
c) De entre los enclíticos previstos, constituyen frontera pro-semántica el
continuativo -raq ‘todavía’ y el discontinuativo -ña ‘ya’. Les siguen los enclíticos pro-
sintácticos: el aditivo -pas ‘también’ y el contrastivo -taq ‘en cambio’. El continuativo -
raq, con usos al estilo peninsular, pero otros específicos del castellano andino, presenta
la siguiente entrada léxica:

5) a-.-RAQ {[+t.] [int.]} «pragm.» (suf. cont.), todavía …parashanraq, todavía llueve;
aún …paqarinraq hamusaq, aún vendré mañana; [-t.], antes, primero; [+cant.], encima
(conj.) «énf.», si …sunsumantapas aswayraq kanki, eres tonto si los hay.
(adj.), residual …nanaykachawashanraq, tengo dolores residuales.
b- -RAQ {+ V.}, prorrogar …huq killatawanraq quy, prorrógale un mes más; quedar {por +
v.} …lluqsinankuraqmi sipaskuna, quedan por salir [= todavía saldrán] las jóvenes.

De los usos encontrados se desprende que los andinos prefieren usar ‘todavía’ y no
‘antes, primero’ como en la Península. El discontinuativo –ña, muchas veces repetido
en quechua y no pocas en español andino (‘ya... ya’) y con usos también divergentes en
el Altiplano, se despliega como:

6).ÑA (-ña) <gram.> (adv.), ya …ña pasaykiña, ya te he pasado [ya]; (fr. adv.), en punto
…urasña lluqsina, a la hora en punto tiene que salir; [--t.] «expr.» (kasqanrayku), dicho y
hecho.
(v.), hacer {un tiempo de algo} …ña kinsa p'unchayña, ya hace tres días; [-t.], arrancar …
wawa ña rimanqaña, ya va arrancar a hablar el bebé; (aux. ± pdo.), llevar …ñan iskay chunka
raphita ñawiriniña, ya llevo leídas veinte páginas; (±pte.) (ña …-ña), haber …ña chunka
misk'itaña chunqarun, me he comido [ya], diez caramelos.
(adj.) (-ñan) [++cant.] «fam.», perdido …waq'añan kashan, está loco perdido.
(prep.), para …allinña, para tiempo; [+res.], en; (pref.), pre-.

Por su parte, el aditivo –pas, traducido muy frecuentemente por ‘también’ aporta,
en proporción, significados convergentes y también divergentes en los dos dialectos:

1
7).-PAS ÷(-pis) (suf. adit.), también …paypas karanmi, él también ha sido; asimismo …
nuqapas tusiymanmi, yo, asimismo, podría bailar; así mismo; además, más; [neg.], tampoco …
nuqapas mana yachanichu, yo tampoco lo sé.
Q. indef.), -quiera …mayqinpas, cualquiera.
(conj. conc.), aun, aunque; si …ni wañuchiwaqtinkupas, ruwaymanchu, [ni] si me
mataran, no lo haría; siquiera …unuta quyuway, ichapaschá manaña tupasunchu, dame agua,
siquiera sea la última vez que nos veamos; (Ø + ger. ), con + inf. …kunpayki kasaspa, ni
qhawarillasunkipaschu, con ser [tan] amigo tuyo, ni [siquiera] te saluda
(adj.), indistinto
(oper.), hasta …chay wawapas yachanmá, ¡si es que hasta ese niño lo sabe!
(adv.), definitivamente; todavía …millaymi, chay michiqa, hinatapas munakuni, es malo,
ese gato, pero todavía lo quiero; (fr. adv.), en definitiva; como último recurso, en última
instancia …mana puñunata tarinki chayqa, hanpuypasyá, si no encuentras donde dormir, en
última instancia, vente, pues; por ejemplo …turaykipas, qhawarikullaypis, ñan kasarakunña,
mira, si no, tu hermano, por ejemplo; ya está casado; (astawan), a más
(-llapas) (fr.), sin ir más lejos.

En cuanto al contrastivo –taq, se observa, en correspondencia inversa con –qa, un


cambio de topicalización. Puede tener tanto valor ilativo, como concesivo , confundirse
con –pas ‘también’ y con –raq ‘todavía’ y suponer en la enumeración la disjunción en
vez de la conjunción (español ‘si... si’):

8).-TAQ (suf. contr ), pues; como; aunque; (fr. contr.), por su parte.
(adv.), también; …ñuqataqmi niykichis, en verdad que yo también [= por mi parte]
os digo; todavía; «enf.», sí#•• …yuraqtaq, sí, es blanco.
(v.), reincidir; (aux.) ([(-rqu)-lla]…-taq), volver, tornar {a + v.} …unqurullantaq, volvió a
enfermarse - miqhurullantaq, volvió a comer [de repente, después de haber dejado un tiempo
más bien corto].
(conj. advers.) (chaypas), empero, sin embargo …chay yachachiq allinta yachan;
manataq allintachu willakun, ese profesor sabe mucho; sin embargo, no sabe explicar;
(distrib.), si …t'antapas, lichipas kaqtinqa, kanqachá, si hay pan, si hay leche, aquí estarán;
(fr., conj.), al paso que …lluqsinkitaq chayqa, unuta apamuwanki, al paso que sales, me traes
agua.

d) En el núcleo pragmático de la serie, allí donde el Emisor manifiesta de modo


evidente su actitud como hablante ante lo enunciado está todo el conjunto de lo que
Hardmann 1972 consideró que era un postulado lingüístico de las lenguas andinas (si
bien aplicado al aimara); es decir, la presencia de los evidenciales de seguridad -mi / -n,
de reportación -si / -s, de no-aserción -chu y de pronóstico -chá4. Transcribo
sucesivamente, adaptadas como las anteriores a las exigencias de este trabajo, las
entradas lexicográficas correspondientes:

4
Es muchísimo menos frecuente el probabilístico -sina / -suna, también epistémico como -chá.
Por ej.: Mamacha-suna haqayqa hamushan ‘creo que es la mamaíta aquella que viene’.

1
9).-MI <tras cons.> (-n) «pragm.» (suf. val.), de veras, de verdad; en verdad que; <-chu>
(conj. adv.) (ichaqa), sino …mana warminchu hamun, qharin, no vino la mujer, sino el
hombre; con todo …qhawayapuykimanmi, con todo, te lo miraré•••; (ilat.), y; (Ø), o sea …
machulan, mana kallpayuqmi, es viejo, o sea que no tiene fuerza.
«Q.», todo …kay nisqanchismi chiqaq, todo lo que estamos contando aquí es verdad.
(adv.), indudablemente; siempre …paqarin hamusaqmi, mañana siempre vendré; «enf..»,
sí …usisiyqa hanpunmi, mi hija sí que vino. (fr. adv.) (ñawinkunawan), con sus propios ojos.
(adj.), mismo, propio.
(v.), constar; conocer {de primera mano}; <tr.>, demostrar; (fr.), ni qué decir tiene.

10) a-.-SI ÷(-sis) <tras cons.> (-s <tras voc.>) «rep.», al parecer, por lo visto.
(v.), parecer …unqusqas kashan, watukamuy, parece que está enfermo, visítale; ($)
«±vulg.» (-mi / -n), demostrar …Kanas kani, Wawris kani, lisu maqt'a, nuqas kani, Soy de
Canas y Huauri, cholo liso: te demostraré que lo soy; dicen, se dice; diciendo; ( aux.) [±rl] {+
v.} (-na + v.), deber + {inf.} …kunansi rinki, debes ir [= se dice que irás] hoy mismo; (fr.) [-
E.], dizque ¶; [-E/-R.], mira por donde.
b- -SI {+ -CHÁ} (adj.) (hayk'amanchá), largo …tawa chunka watayuqsi mayñachá kakun!,
tiene cuarenta años largos, ¡cuantos más tendrá!; «expr.», increíble.
(sust.), hablilla.

11) a-.-CHU (suf. -asert.) [neg.], no; (desp.), -anco, -atis …waq'achu, locatis; -uco; (-
ku), -ucho; -uelo …warmichu kanki, imachu kani, eres una mujerzuela, ¿qué quieres?; (aum.), -
ón …waqachu, llorón.
(suf. -asert.) [interr.], ¿? ...hamunkichu, ¿vendrás?
(fr. conj.) «pragm.» <amenaza>, a que {+ fr.} …manachu tardiman hamunki siniman
rinanchispaq, ¿a que no vienes [= no te llevo] al cine esta tarde conmigo?; <invitación> …
tardiman hamunkichu siniman rinanchispaq, ¿a que no vienes [= animas a venir] al cine esta
tarde conmigo?; «asert.» [enf.] (-puni), que … ñachu yacharunkiña!, ¡que ya lo sabes!
(adv.), ¡no?
b- -CHU… -CHU, o… o … hamunkichu manachu, o te vienes o te quedas.

12) a-.-CHÁ (suf. pronost.) {«pragm.» «+pos.»}, seguramente …risaqpaschá,


seguramente también iré; seguro.
(adj.) [±cant.], posible …paqtapaschá mana kay wata tukuyumanchu, es posible que no se
termine este año [con igualdad de posibilidades]; «+pos.», probable …paramunqapaschá, es
probable que llueva más [con más posibilidades de la media]; estimativo.
(adv.) «pos.», quizá, quizás, tal vez; realmente {+ neg.}.
(v.), poder, ser {probable} …paramunqachá, es probable que llueva; ◊(ichá) «pos.»,
suponer <con buenas posibilidades> …ichá hamunqachu, supongo que vendrá [= es
prácticamente seguro]; «±«pos.», antojarse …paqarinchá paramunqa [= paqarin ichaqa
paramunqachá], se me antoja que mañana lloverá; «fam.» poner; «‡pos.», depender …–
hamunkichu icha manachu –Ichapaschá, –¿vendrás o no? –Depende [de las circunstancias];
(aux.), ver {de + inf.} …tarisaqchachá mayuta, veré de encontrar el río; (subj.) …ninqa
yachasqanta, dirá lo que sabe -- ninqa yachasqantachá, dirá lo que sepa.
b- -CHÁ {+ FUT.}.(v.) (suyay), confiar …qanchá ruwarunki, se confía en que lo harás / c-
FUT. {+ -CHÁ} (v.) «nec.», tener {que + v.} …lluqsisaqchá, tendré que salir [sin más remedio].

1
e) La seguridad absoluta, la rotundidad en la expresión para hacerla más creíble, la
presenta el explicitativo -puni, cuya resolución léxica es la siguiente:

13).-PUNI <gram.> (suf. def.), sí#••; (suf. sup.), -ísimo …hatunpuni, grandísimo;
«cult.», érrimo; [enf.], que …ña yachankipuniña, que ya lo sabes.
(-npuni; -minpuni) (pref.), rete-, requete- …millaypuni, re[[que]te]malo - allinminpuni,
requetebarato; [±cant.], re-.
«pragm.» (suf. val.) [+cant.], en verdad …manapunin chayaymanchu, en verdad que no
podría llegar.
«Q.», ni más ni menos …chaytapuni yuyaymanarani, ni más ni menos eso había pensado
[en mis elucubraciones]; nada menos, nada menos que …pisqa chunka watayuqpuni kani, tengo
nada menos que cincuenta años
(adv.), exactamente, precisamente …paypuni, precisamente ella; seguro …
qupunipuni, seguro que se lo he dado; «+nec.», necesariamente …ruwanaypuni, hay
que hacer [algo] necesariamente; (-punichá), forzosamente, terminantemente …
rinkipunichá, forzosamente irás tú; ciertamente; totalmente …sayk'usqapuni kashani,
estoy totalmente agotado; [cant.], inconfundiblemente, incuestionablemente …
warmiykipuni, inconfundiblemente es tu mujer; indispensablemente, ineludiblemente;
[t.], siempre …chuqlluta mikhunipuni, siempre como choclo;, continuadamente de
continuo …kayllapipunichu llank'ashanki, trabajas aquí de continuo; definitivamente
…paqarinpuni, definitivamente mañana; [neg.], lamentablemente …arí ripusaqpuni,
lamentablemente, sí que me iré; [ord.], siempre ¶; (fr. adv.), a buen seguro, al seguro,
de seguro …allinpuni kanqa, a buen seguro que saldrá bien; con toda seguridad;
(hunapuni), de todas maneras; «fam.», de todas todas, sin remedio …riytapuni munani,
quiero ir de todas todas; pero que muy {+ adj.}.
(adj.) (kaq), característico, representativo …chiri uchu Qusqumantapuni, el chiriucho es
representativo de Cuzco; principal; (munana), indefectible, necesario …llank'aypuni, trabajo
necesario; indispensable …–munawashakichu kunan? –Riki, munasaykipuniyá, {¿Me necesitas
hoy?, –Sí, eres indispensable [= sí que te necesito, en verdad]; [pat.], endémico …chukchu
unquypuni, paludismo endémico; [+cant.], intenso, superlativo …riytapuni munashani, quiero,
de modo intenso, ir; perseverante …llank'ashallanpuni, es perseverante en el trabajo [de
verdad]; definitivo …hinapunin chaninnin, su precio es definitivo; «fam.», estricto, seco …
sut'intapuni niyki, te diré la verdad seca; <antep.> (-punin), verdadero; menudo; alto.
(sust.), tesón …ruwashanpuni, lo está haciendo con tesón.
(v.), constar …paypuni ruwan, me consta que él lo hizo; no dejar de …
turiyaykachashallanpuni, no deja de estar [= está] burlándose a todas horas; (fr.) (kaypuni), si
lo hay; ni qué decir tiene …nuqapuni mana risaqchu, ni qué decir tiene que yo no iré.

f) Hay un par de enclíticos quechuas siempre acentuados, que se alinean con el


pronosticativo -chá anterior y que convierten excepcionalmente en aguda a la palabra
quechua, siempre llana excepto en los apelativos. Son el sorpresivo –má ‘¡oh!’, de
seguridad absoluta, y el emotivo o consensuativo -yá ‘va’, cuya pretensión es mover al
Receptor a una acción favorable, a cambio de transmitirle lástimas para que se apiade
del Emisor.

1
14) a-.-MÁ (ma) «pragm.» «interj.», ¡a ver!, ¡veamos!; ¡qué tal! ¶ …imamá kasqa!,
¡qué tal había sido [= ¡quién iba a suponer que era así!]!; ¡cáspita!; ¡uf!; ea.
«encl.» (suf.) (-má), claro, pues.
b- MAPAS! «interj.» <amenaza>, ¡vas a ver!; <decepción>, ¡vaya por Dios! …manamá
chayta suyaranichu!, ¡vaya por Dios!, eso no lo esperaba; (adj.), pleno; (sust.), reto
(adv.), cuanto …wiñasqanmá hina mana allinta chaninchakun, cuanto mayor es, peor se
porta; «énf.», si …Taytacha pusakapunmá chayqa… si Dios lo tuviera en su gloria.

15).-YÁ {«pragm.» «interj.»}, ¡ah!; (suf. emot.), ¡pues! …niykiyá!, ¡dígote, pues!;
¡por favor!; ¡a saber! …maypiyá kunan tarimusaq, ¡a saber donde la encontraré ahora!
(v.), ¡va!
(adv.), finalmente.

g) Más alejado, junto a las exigencias de -qa se encuentra otro textualizador, el


responsivo -rí ‘y’ (también acentuado), que encierra siempre una invitación para que el
Receptor responda a las pretensiones inquisitivas del Emisor. Una pregunta siempre
reclama respuesta, pero todavía más contundentemente con -rí5. Se puede ver su
funcionamiento en la siguiente entrada:

16).-RÍ (-ri) <gram.> (resp.), ¿di?; y …ña ripunayña, qanri imatataq ruwakunki [=
yuyakunki], yo ya me tengo que ir ¿y tú qué resolución tomas?; ¿no?; ÷(kunanrí), ahora bien …
kaymi munakuyniyki, kunanrí imapaqtaq munanki?, este es tu regalo; ahora bien, ¿para qué lo
quieres?

La tabla siguiente sintetiza las relaciones establecidas entre los enclíticos y el orden
teórico, abstracto, de su manifestación pragmática

tabla

Vistas las cosas del modo tradicional, los enclíticos centrales tienen un
comportamiento similar al de los adverbios de afirmación, negación y duda, como se
verá enseguida. No obstante, la profundización pragmática en ellos nos debe dar la
clave de cómo se manifiestan los roles del Emisor y del Receptor y, en último término,
qué influencia ejercen en el significado de los enunciados y en el orden de las palabras
del castellano andino. Los enclíticos periféricos se hallan más cerca de los adverbios de
lugar o tiempo.
Son adverbios de afirmación por su significado: -mi y su alomorfo -n ‘en verdad’ y
-puni ‘ciertamente’, que potencia al anterior.
Es adverbio de negación por su significado: -chu, que es la segunda partícula de la
negación quechua –como pas francés–.

5
Es lo que sucede con el español y en frases como ¿Quieres que te lo devuelva ya, di?

1
Son adverbios de duda por su significado: -chu, que además de negar, interroga y
enfatiza la interrogación (como -rí); el pronosticativo -chá ‘seguramente’ que está
mucho más cerca de lo probable que de lo posible y el inusual -sina, que mantiene al
hablante en la posibilidad desnuda, sin decantamiento a una opción.
De la lectura de las definiciones anteriores se deduce que faltan aspectos muy
importantes por elucidar en estos enclíticos. Así, mientras -mi / -n afirma y enfatiza lo
afirmado, como visto u oído por el propio Emisor, -si y su alomorfo -s, afirma y
desenfatiza lo afirmado al mismo tiempo, al considerar este que la verdad que enuncia
la acepta, pero no la puede asumir, como noticia de primera mano.
Por su parte, -chu pregunta (en preguntas totales) y lo hace de modo neutro, para
satisfacer una duda razonable con la respuesta del Receptor. En los enclíticos anteriores
el Emisor no espera ni ser rebatido ni ser alentado por el Receptor para mejorar la
asunción de su enunciado: por muchos testigos que tenga un hecho, -si seguirá siendo
siempre reportativo y -mi supondrá siempre el haber sido un testigo más, difícilmente
llevable a una realidad diferente de la que enuncia. -chu, en cambio, recaba alguna
información, la cual se anclará, con el conocimiento debido, en -si y, si ha lugar, previa
comprobación directa, en -mi. Por su parte, -rí enfatiza la petición de respuesta, la cual
ha de ser rigurosamente dada en la toma de turno. Es decir, que con -chu caben las
preguntas retóricas, pero con -rí, no.
Los expresivos -má y -yá potencian al Emisor como fuente de la enunciación, pero
el primero indica la sorpresa que se produce en este, sin que quepa participación del
Receptor; en cambio, en el segundo, la emoción tiene la finalidad de encontrar el
camino directo del Receptor, de modo que pide el consenso de este, para satisfacer sus
impulsos; de ahí que reciba el nombre de consensuativo. De este modo, su proximidad a
‘por favor’ y a otros elementos apelativos corteses es notoria.
-chu, del que hemos comentado antes su carácter negativo e interrogativo, presenta
ribetes claros de no-aserción que se manifiestan en proyecciones futuras de la
enunciación: las que suministran los actos perlocutivos de la amenaza (la cual se
cumplirá o no, al margen de si se cumplen los hechos) o de la invitación (que puede ser
aceptada o no por el Receptor)6.
La función referencial del lenguaje, la de la mera presentación de los hechos, se
manifiesta con el topicalizador -qa. Por tanto este enclítico se centra en los factores
presuposicionales de la existencia de lo nombrado y, en último término, en su
afirmación como entidad. Quiero decir con esto que su asertividad es de fondo y no de
figura. Descubre, por más señas, que cualquier palabra de una lengua, sea de categoría
autoreferencial o no, puede manifestar subyacentemente su propia presuposición:
kunanqa ‘en cuanto a hoy’, ruwayqa ‘en cuanto al hacer’.
Por su parte, el conjunto formado por -ña y -raq, discontinuativo y continuativo;
por -raq y -taq, prosecutivo y contrastivo; por -pas y -ña, aditivo y restrictivo y,
finalmente por -taq y -pas, exclusivo e inclusivo –siempre respectivamente–, constituye
una maraña cuyas fronteras son el espacio y el tiempo en tanto en cuanto permiten
presuposiciones por parte de los hablantes, por lo que suelen llamarse triggers (gatillos
presuposicionales o activadores) (Levinson, 1983). También lo es la afirmación, ya que
6
Tiene, además, -chu un rasgo de asertividad, como se ve en el último ejemplo de su entrada.
Equivale al refuerzo interrogativo ¿no? Esperable también es su posición disyuntiva, ya que la elección
entre dos o más opciones implica la duda del resultado final.

1
-pas ‘también’ implica aserción previa, tácita o explícita en enunciados anteriores7. Los
emparejamientos que quedan para completar el álgebra booleana: -ña y -taq como
discontinuativos sobre el suceso o la cosa enunciada por el sujeto y -raq y -pas como
continuativos de la misma línea que los anteriores, promueven una interpretación
holística, por oposiciones mínimas, en que además de la afirmación no marcada, la del
espacio y el tiempo, cuentan los objetos y las presuposiciones sobre ellos de los sujetos
hablantes, entidades que necesitan concretar constantemente la circunstancialidad que
les rodea.
Todo un grupo compacto de enclíticos en que el más alejado cognitivamente es -lla
por las razones expuestas con anterioridad.

3. LA PROYECCIÓN DE LOS ENCLÍTICOS QUECHUAS EN LAS PARTÍCULAS DEL


ESPAÑOL ANDINO

Todas las lenguas del mundo manifiestan muy probablemente las estrategias de
enfoque de enunciado encontradas en los enclíticos quechuas, aunque difieran del modo
de expresarlas. El castellano realiza esas mismas funciones con el auxilio de adverbios
puros separados tales como también, todavía, aún, ya, de conjunciones como y, de
interjecciones como ¡ea!, del artículo (y paraartículo o frase determinante en cuanto a)
y de un conjunto de adverbios enunciativos y de enfatizadores como seguramente,
ciertamente, verdaderamente, en verdad que, etc. como podemos ver en la traducción
de las entradas del diccionario bilingüe que se acompañan en este trabajo. La cuestión
que se aborda a continuación es la determinar si hay una convergencia entre las dos
lenguas en los lugares en que estas conviven, lo que parece esperable. Las coincidencias
son varias, entre las que destacan 1) la tendencia a un mismo orden de palabras, 2) la
tendencia a la univocidad de equivalencias traductológicas y 3) la tendencia a la
convergencia de significados o sustancias del contenido en las dos lenguas, lo que
supone un enriquecimiento mutuo. Veámoslas con algunos ejemplos:

1) El responsivo –rí ‘y’ no presenta una coincidencia de contenido ni de ubicación


en las dos lenguas.8 –ri no tiene por qué hallarse al principio de frase quechua, aunque
siempre invite a la respuesta del destinatario. Además, en el ¿y… español, que invita a
contestar como en ¿Y tú cómo te llamas?, no hay una coordinación copulativa y9 ni
7
Otra acepción muy usual de -pas (y su alomorfo -pis) es la de formar indefinidos: pi ‘quien’,
pipas ‘alguien, quienquiera’. Los indefinidos tienen un comportamiento de frontera, en tanto que su
postulación supone una adición a-referencial y genérica, que indica, en quechua, que la ampliación del
conjunto implicado se hace por mera –no determinada- adición de elementos al conjunto unitario al que
refiere la raíz de la palabra a que se adjunta. En español, la terminación –quiera incide en la libertad de
ampliar el conjunto de manera aleatoria.
8
Sí la puede presentar fónicamente, ya que en quechua es posible que –rí sea sustituido por la
partícula independiente i ‘sí’ (para algunos un calco fónico-semántico del español ¿eh?), que se ubica al
final de frase y que equivale por posición y uso al español ¿no?: Ch’ankiwan winawasqanki, i? ‘Con
abrojos me metiste, no?’. Entonces la pregunta no sólo introduce un responsivo, sino que es, además,
verificativa.
9
Tampoco la hay en frases como …Y que viene mañana, en donde no puede haber un responsivo
puesto que no se trata de una pregunta, sino de una afirmación. Esta afirmación con Y… es reportativa
en español y se relaciona con el quechua –s(i) de fuente indirecta: Y que viene mañana es un resto
fónico de Dicen que viene mañana < Diz que viene mañana en que tenemos i (=y) por doble aféresis y

1
tampoco un relator que se aplique como en quechua a cualquier palabra al margen de su
ubicación en el enunciado: qan-rí iman sutiyki? presentaría la forma neutral, pero hay
otras ubicaciones posibles del responsivo: pitaq qan-ri kashanki? ‘¿Y tú quién eres?’
que no puede traducirse por *¿Quién y tú eres? La estrategia del castellano andino es
entonces la del recurso al orden de las palabras, ya que es necesario topicalizar el
sintagma o palabra en que –rí se instala. Así tendríamos:

17) a-.Pitaq qan-rí kashanki? ‘¿Y tú quién eres’


b- Pitaq-rí qan kashanki? ‘¿Y quién eres tú?’
c- Pitaq qan kashanki-rí? ‘¿Y eres quién, pues, tú?’ / ‘¿Y eres quién tú, pues?’

Ñachu wakata-rí wataranpurankiña? Suele traducirse por ‘¿Y las vacas, [las]
amarraste ya?’, mejor que por ‘¿Pues, ya has amarrado las vacas?’, orden que ofrece
Cusihuamán (1976: 239), en donde la partícula inicial invita, se supone, a la respuesta
por el destinatario, como si se tratara de ¿y...
Esta misma estrategia de orden se observa cuando aparecen varios enclíticos,
seguidos o discontinuos, como se desprende de los ejemplos siguientes, en que la
descripción complementaria entre <…> ayuda a conocer la intención:

18) a-.Qan-pis hina-lla-taq! ‘¡Tú también, así nomás pues!’ <Tú, el primero, haces
las cosas de un modo que simplemente no me esperaba>
b- Paqarin-pas tupa-lla-sun-taq-yá ‘Mañana también nos encontraremos no más,
por tanto, ah’.<antes de nada, se busca consenso para que al día siguiente haya un
encuentro sin más precisiones para tratar el tema que por recado no se puede tratar>.
c- Ima-paq-ña-taq-yá ‘¡Para qué ya, pues, ah!’ <después un favor pedido, que
cuando se hace ya no se precisa, por haberlo recibido previamente de otra persona>.
d- Iskayman-ri hayk’awan-taq yapanki? ‘¿Y a dos, cuánto más, pues, añadirás?’
<en la oferta de dos unidades a cambio de algo, en que el cambiario exige más
cantidad>

Pese a todo, el test del orden de las palabras varía mucho como para aceptarlo sin
excepciones, sobre todo en los textos traducidos (si se toman como corpus) en que el
traductor suele jugar con contrastes diversos. Además, conforme se desequilibra la
balanza en las zonas bilingües, suele suceder que el quechua se acomoda cada vez más
al orden de las palabras del español consolidado en la zona: de hecho, en esta lengua se
empieza a posponer el adjetivo al sustantivo (karnabal unusapa ‘carnaval lluvioso’,
t’uru hark’aq ‘guardabarros’, en donde se esperaría unusapa karnabal y hark’aq t’uru)
o se codifican como analíticas secuencias naturalmente sintéticas en lengua andina
(runtuta churay ‘poner huevos’, en vez de runtuy o runtuchay).

2) La segunda consecuencia que puede sacarse de esta influencia, también con


excepciones y matices diversos, es la de la estabilidad de las traducciones: a cada sufijo
quechua se tiende a darle un equivalente fónico del español andino, pese a que las
apócope. He podido constatar decenas de veces este uso en la localidad manchega de Mota del Cuervo
(Cuenca).

1
traducción de cada uno, como hemos visto en los artículos léxicos, pueda ser tan
variada: sucede que el diccionario debe ser también una herramienta propedéuticaj. Por
el motivo aducido, se produce un segundo ahormamiento entre las dos lenguas. Como
la situación de principio es tan diversa, la aproximación formular un enclítico (q.) = una
partícula (esp.) no es sino una realidad en el límite. Veamos algún ejemplo tomado de
la descripción gramatical de Cusihuamán (1976: 249-252):

19)a- .Nuqa-pas hawallataqmantan kani ‘Yo también soy del campo’


b- Uqa-pis añu-pis wiñanmi Chinchirupiqa ‘La oca también, el año también crecen
en Chinchero’
c- Papapaq-pis lisaspaq-pis qusqayki-yá kapulitaqa ‘Puedo darte, pues, capulí
también para papas, también para lisas’ (no para las dos cosas)
d- Papataqa qasarapun-pas.chá ‘¡Seguramente lo habría helado también a las
papas!’
e- Pi-pas ‘Quien también [= alguien]’.

Tenemos cinco usos diferentes de –pas (o su alternante fónico –pis), a saber: el de


igualdad o identidad, el de coordinación aditiva, el de alternancia, el de operador
intensivo y el indefinido. Sólo este último (19e) pedirá a veces la traducción directa
(‘alguien’, etc, en vez de ‘quien también’, que muchos utilizan, etc.). Los cuatro
primeros ejemplos (19a-d) se parafrasean con también, pero el tercero (19-c) podría
traducirse mejor al español mediante el operador hasta: ‘Puede que hasta se hayan
helado las papas’.
La cuestión más grave que se plantea es la de saber, en caso de polisemia el valor
que quepa asignar a una partícula. Así, ‘pues’ es traducción de diversos enclíticos,
como puede verse en los ejemplos antepuestos (-lla, -má, -qa, -taq, -yá...), de modo que
es difícil, sin el contexto, y sobre todo para un hablante de español de otros dialectos,
conocer el verdadero alcance pragmático de la partícula, incluso en un contexto poco
ambiguo. De este modo, la partícula y la interjección tienen muchas cosas en común,
confundiéndose en la síncopa o en la apócope habitual del español andino: ps!, pss!,
pe!, etc.

3) La tercera consecuencia, mucho más apreciable y estable que las anteriores,


tiene que ver con la interpretación del significado: el castellano andino difiere en gran
medida del costeño o del peninsular en que las palabras-comodín cobran nuevas
acepciones por influencia del quechua, de modo que un visitante peninsular puede sufrir
alucinaciones pragmáticas como consecuencia de una interpretación sesgada de lo que

1
oye, por lo que se refiere, sobre todo, a las partículas en función de enclíticos 10.
Propondré un ejemplo.
El análisis de Cerrón-Palomino 1996, aplicado a también y a partículas similares
del castellano andino, refleja igualmente la situación descrita, en que la ganancia de
acepciones no tiene explicación fuera del ámbito de la mutua influencia por contacto.
Mientras (Calvo 2000b: 91) existen usos ortodoxos o generalizados como el de aditivo
(Yo también fui), ratificador (Yo también y ella también, todos) o enfatizador inclusivo
(¡También mi madre, qué cosas tiene!), hay otros heterodoxos –desde la perspectiva
peninsular- como el de indefinido ¿Qué también se llamará?), el de enfatizador de
probabilidad o duda (Ya también come = ‘Come, si quieres’, por herencia de mikhuy-
ña-pas) y el alternante o exclusivo, vistos más arriba (También vente, también quédate,
tú verás). Obsérvese que el orden de las palabras o su posible repetición es
determinante, junto con el contexto, a la hora de interpretar la partícula: Tú también (y
sobre todo: Tú, también) se interpreta preferentemente como aditivo o inclusivo, pero
de forma exclamativa y preferentemente antepuesto es enfatizador ¡Tú tambíen!,
¡También tú!. Luego, la incapacidad de distribución peninsular tras qué interrogativo,
implica una nueva interpretación, diferente de la que existiría en posición diferente
(¿Qué también estará diciendo? no es igual a ¿Qué estará diciendo también?, pues en
el primer caso hay un interés preferente por conocer el mensaje y en el segundo por
completar lo ya entendido). Por regla general diremos que a un hueco o nicho
distribucional imprevisto en la Península corresponde también una interpretación
inusitada, asimilable a la de la codificación quechua: por eso Ya también come no
presupone que se haya comido antes, por ejemplo, sino que se da prioridad a esa acción
sobre el conjunto de las posibles.

4. RESUMEN

El español andino y el quechua, como lenguas ancestrales en contacto, ha pasado


por un proceso de cambio, generalmente convergente entre ellas mismas, pero
divergente en cuanto a sus dialectos internos, que aquí no hemos sino esbozar. Sobre
todo en el tratamiento e interpretación de los enclíticos quechuas y partículas
concomitantes en español andino. Los muchos ejemplos aportados por la bibliografía
existente, a los que se suman los de Calvo (en prep.), son un buen ejemplo de lo dicho.
De ellos, estudiándolos más a fondo y cotejando las traducciones dadas con las que
aportaría cada hablante materno en una situación particular, podrían seguir
deduciéndose múltiples usos e interpretaciones que redundarían en un mejor y más
ajustado entendimiento entre los hablantes de distintos dialectos del español.

10
Lo dicho vale, en general, para el léxico: playa (‘aparcamiento’), fusil (‘fusible’), grifo
(‘gasolinera’) son falsos amigos del español peruano. No obstante, se precisa afinar más, puesto que las
tres palabras anteriores no han desarrollado usos nuevos por influencia del quechua u otra lengua
andina. Para este caso, tendríamos que recurrir a los consabidos cruces léxicos: del mismo modo que
sisi ‘hormiga’, provoca sisiy ‘hormiguear [el cuerpo]’ por cruce con el español o wikch’uy se interpreta
tanto como ‘votar’ (‘emitir el voto’) que como ‘botar’ ¶ (‘arrojar, tirar’), así también sano sano es el
nombre de una planta desinfectante, que se aprovecha doblemente del correspondiente quechua sanu
sanu. Es también la causa de que el esp. and. soga ‘látigo’ haya extendido su uso del q. suq’ay ‘azotar’
o taquear ‘embutir’ de. takay ‘machacar, martillar’.

1
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