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Desgaste en Polímeros

Características de los materiales cerámicos


Las características de los materiales cerámicos definen el comportamiento del
material en diversas situaciones tales como su resistencia a la temperatura, su
capacidad de aislamiento eléctrico y la resistencia a la corrosión.
Es importante conocer bien las características de estos materiales ya que estas
nos facilitarán la elección para cada una de sus funcionalidades.
Propiedades eléctricas de los materiales cerámicos
Aislamiento eléctrico: Los materiales cerámicos en general son materiales no
conductores de la electricidad.
Conductividad: Aunque la cerámica avanzada generalmente bloquea la
electricidad, hay cerámicas semiconductoras que dependiendo de su
temperatura y nivel de voltaje aplicado pueden conducir la electricidad.
Propiedades físicas de la cerámica
Dureza: La característica más distintiva de la cerámica avanzada es su
extrema dureza, donde por ejemplo la Alúmina tiene una dureza casi 3 veces
mayor que la del acero inoxidable.
Rigidez: La alta rigidez de la cerámica se mide comprobando la elasticidad
después de aplicar una carga de fuerza. Su inflexibilidad hace que sea una
pieza que evita deformaciones.
Resistencia al impacto: Actualmente la cerámica técnica tiene una baja
resistencia a la rotura, pero la Zirconia estabilizada, ofrece mejoras
significativas en la resistencia a llegar al punto de rotura.
Gravedad específica (Densidad): Generalmente las cerámicas tienen una
densidad más baja que los metales de alta resistencia, dentro del mismo
volumen muchas cerámicas pueden reducir el peso a la mitad del que ofrece el
metal.
Propiedades químicas de los materiales cerámicos
La cerámica avanzada tiene un alto nivel de estabilidad química. Son altamente
resistentes a muchos agentes corrosivos tales como el ácido clorhídrico, ácido
sulfúrico, ácido nítrico, hidróxido de sodio.
Propiedades térmicas de la cerámica técnica
1. Resistencia al calor Las cerámicas de todo tipo son conocidas por su
capacidad de soportar altas temperaturas. Por ejemplo, la Alúmina se funde a
temperaturas cercanas a los 1800ºC, muy por encima del punto de fusión de
los materiales metálicos.
2. Expansión térmica Cuando los materiales se calientan, su tamaño y volumen
aumentan, en un fenómeno conocido como expansión térmica. La relación del
coeficiente de expansión térmica indica cuánto se expande un material en 1 °C
de aumento de temperatura, la cerámica tiene un bajo coeficiente de expansión
térmica, menos de la mitad que la mayoría de aceros.
3. Conductividad térmica La propiedad que define el calor transmitido a través
de un material se llama conductividad térmica. La cerámica avanzada ofrece
una amplia gama de conductividad térmica; Algunos materiales tienen altos
niveles de conductividad y transfieren bien el calor, mientras que otros, tienen
bajos niveles de conductividad y transfieren menos calor. La conductividad
térmica del carburo de silicio es particularmente buena, mientras que la
Zirconia tiene un coeficiente de conductividad térmica bajo, aproximadamente
1/10 que el coeficiente del acero inoxidable.
El desgaste puede definirse como la perdida progresiva de material en la
superficie de trabajo de dos piezas, cuando se les ajusta a un movimiento
relativo bajo la acción de una fuerza. Esta pérdida conlleva a daños en las
dimensiones de las piezas con la consecuente disminución de la vida útil de
cualquier máquina.

En casi todas las industrias hay desgaste de piezas y maquinaria, por lo cual se
necesita recubrir este desgaste y recuperar estas piezas obteniendo una mayor
relación costo- beneficio, además de aumentar las horas de servicio y la
eficiencia de los equipos.

Para hacer una buena selección del tipo de revestimiento protector y la


aplicación que se necesita para recuperar la superficie desgastada, Adhesivos
Industriales de Guanajuato te recomienda conocer los tipos de desgaste a los
que puede estar sometido la pieza que se quiere proteger para poder aplicar el
recubrimiento adecuado. Los tipos de desgaste más conocidos son:

Desgaste por adherencia: Se produce cuando dos superficies se deslizan una


sobre otra, estableciendo fuerzas adhesivas muy fuertes que arrancan los
fragmentos de una superficie que se adhieren a otra.
Desgaste por abrasión: Este fenómeno se presenta en la mayoría de los
procesos productivos. El material es removido de una superficie por el
movimiento de partículas duras o en libertad de movimiento que se deslizan
contra la superficie.
Desgaste por deslizamiento: Este tipo de desgaste es causado debido a un
constante contacto entre dos superficies metálicas en presencia de material
abrasivo y con o sin lubricación.
Desgaste por erosión: Es originado debido al flujo de una mezcla de partículas
químicos que son transportadas por un líquido a altas temperaturas y que
impactan la superficie de la pieza.
Desgaste por corrosión: Este desgaste es causado por la formación de una
película de oxido en la superficie la cual debilita el metal. Al ser una capa de
óxido frágil, se expone a los fenómenos de deslizamiento y es removida.
Desgaste por cavitación: Ocurre cuando un líquido en circulación está sujeto a
cambios rápidos de presión o temperatura que causan formación de burbujas
las cuales colapsan y perforan el metal.
Los recubrimientos de mejor comportamiento en condiciones de desgaste por
abrasión – corrosión son los que poseen una capa superior cerámica, ya que
estos poseen una mayor resistencia al ataque químico comparado con los
poseen una capa superior metálica.

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