Viajamos a Londres una ciudad grandísima ya que me trasladaron para trabajar allí.

Sonia mi
esposa y Camila mi hija, vivían encantadas con el traslado. Llegando a Londres decidimos buscarle
colegio a Camila y recorrer toda la ciudad. Mi horario de trabajo empezaba de siete de la mañana
a tres de la tarde. Almorzaba entre la una y dos de la tarde; donde comía unos deliciosos
espaguetis. Regresaba a casa sobre las cuatro de la tarde y salíamos a recorrer la ciudad con mi
familia. Es uno de los mejores recuerdos que tengo de esa ciudad. Mientras me encontraba en el
trabajo Camila iba al colegio y Sonia nos ayudaba con el aseo de la casa y prepararnos una gran
comida para compartir en la noche juntos. Londres un lugar con un clima estupendo ya que
llegamos en época de invierno.

Yo puedo decir que mi esposo juan fue premiado por su excelente trabajo y nos trasladaron a vivir
a Londres, yo me sentí morir con esa noticia ya que era mi mayor sueño. Cuando llegue allí
alquilamos una casa cerca a el teatro de Shakespeare donde todas las mañanas solía ir a ver las
obras. Después realizaba el oficio de la casa y me colocaba a cocinar una deliciosa lasaña que es la
comida preferida de mi hija. Entre las tres o cuatro de la tarde nos encontrábamos con la
celebración del tropping color tour que realizaban cada domingo en honor a la antigua monarquía,
era un placer verlos. Paseábamos cada domingo y compartíamos en familia era nuestro mayor
tesoro. Son los recuerdos que tengo cada vez que veo las fotografías de Camila es amante a la
comida. Los domingos que eran los días de descanso de mi esposo, desayunábamos a las ocho de
la mañana, nos arreglábamos para salir a recorrer la ciudad. nuestro paso por Londres.

Papá y mamá estaban emocionados porque viajamos a Londres, pero puedo decir que la que más
se moría por conocer Londres era yo. Cuando nos bajamos del avión ame el arco, el reloj todo era
increíble. Con el pasar de los días papa y mama me consiguieron cupo en un colegio y allí
entrabamos a estudiar a las siete de la mañana, salía a las cuatro de la tarde; era larga la jornada,
pero yo estaba encantada. Conocí muchos lugares en el transcurso de casi ocho meses que
estuvimos viviendo allí. Puedo decir que mi rutina era del colegio a la casa, pero mis días favoritos
eran los fines de semana ya que recorríamos todo el lugar, el clima; aunque era un poco frio nos
gustaba con mama ya que pudimos comprar mucha ropa. Es un hermoso lugar para compartir en
familia, rodeado de diversidad de personas de todo el mundo donde se pudimos aprender al
interactuar con ellos.