INFORME DE VISIONADO Y CONVERSATORIO DE LA TRILOGIA
MUDA CON EL DIRECTOR Y ESCRITOR DANIEL RODRIGUEZ
RISCO Escrito por Fabiana Cortez León El día de ayer 18 de octubre del 2022, se tuvo la oportunidad de ver y analizar el mediometraje y obra cinematográfica “Trilogía Muda” producida por Colchón Films y Cepa Cine, la cual abarca hasta más de dos décadas, también se caracteriza por la marca del cine mudo. Se desenvuelven 3 cortos donde aparecen historias “diferentes”, El colchón, El diente de oro y Cuellos almidonados en donde se desarrollan personajes fantasiosos como lo dijo el escritor en el conversatorio, también el amor, el deseo y el llevarse por la codicia, la desesperación y el miedo a la libertad, fue actuado por muchos conocidos peruanos. En mi opinión sobre la composición audiovisual, está clara la armonía que practicó Daniel Rodríguez entre los colores blanco y negro para dar contraste luego con colores vivos (en el segundo corto protagonizado por Giovanni Ciccia), en los cuales el predominante es el rojo por los gráficos o ilustraciones, los cuales fueron de la autoría del diseñador trujillano José Valarezo. Por otro lado, con respecto a la composición y retornando al cine mudo, se obviaron los diálogos para darle fuerza a la música y la banda sonora. Es una producción donde se evidencia la incomodidad emocional de los actores, cada uno en diferentes situaciones, pero con casi mismos sentimientos. Capturando el análisis desde la perspectiva y vivencia del autor nos dice que los artistas del medio metraje es que tanto ellos como el escritor, entraron en un proceso introspectivo. Sentían que no necesitaban solo hacer películas comerciales para ser exitosas, si no que podían hacer cinematografía para poder expresarse. Cuenta que durante la pandemia pude conocerse y darse cuenta de que podía basar películas sobre historias más personales, con un vínculo. Por otro lado, comenta que el final de los tres cortos en unidad se ven pesimistas y ambiguo con cada uno representado por un momento impactante. Dice que el estilo decidió que sea minimalista en su generalidad, tanto por lo iconos, los colores y demás, pero lo que más resalta es el hecho de que sean mudas. Nos cuenta que siempre se sintió cómodo en el silencio, tanto en su niñez como su inspiración y admiración por las películas de Polanski, Chaplin, Buster y consideraba que él debía demostrar que podía contar una historia sin recurrir a los diálogos. Además, nos contaba un poco de su infancia, donde resalta el 3er corto, donde decía que mucho de lo contado fue inspirado en la vida con su madre, pues había como una constante preocupación las formas en todo el sentido de la palabra, siempre se mostraba la imposición y que empoderó el caso a la mamá porque se basaba en su propia familia, pues la “guardiana del orden” era ella, ya que su papá estaba ocupado en otras cosas, él solo le llevaba la corriente a su madre. Es un corto que tiene que ver con el subconsciente. También decía que decidió hacer el ultimo corto en formato casi cuadrado, para dar la sensación de que los personajes estaban atrapados, como si estuvieran en un universo endógeno y que el espectador tenga la sensación de que siempre están ahí y que el blanco y negro le da un carácter de fábula. El segundo corto fue conceptualizado en que la vida te da regalos, pero que si uno violenta esos regalos, tu castigo es un dolor de muelas permanente. Sobre la codicia, el no ser agradecido. Y el primer corto basado en lo que uno ama, no solo al apego amoroso. En resumen, toca la trilogía como un contacto indirecto con sus experiencias de vida y gustos personales.